Guion De Pastorela Para Niños
PRIMER CUADRO.
Narrador: En tiempos de Herodes, envió Dios al angel Gabriel a Nazareth, a visitar a una virgen desposada con un varón de la Casa de David, llamado José. El nombre de la Virgen era María, y el Arcángel la saludo diciendo:
Arcángel: Dios te salve María. Llena eres de gracia. (María observa asombrada). El Señor es contigo. Bendita tú eres entre todas las mujeres. Oh, María, no temas, porque has hallado gracia a los ojos de Dios. Has de concebir en tu seno, y darás a luz a un hijo, a quien pondrás por nombre Jesús. Este será grande, y será llamado hijo de Dios.
María: ¿Y cómo ha de ser eso? Pues yo no conozco varón alguno (acercándose)
Arcángel: El Espíritu Santo descenderá sobre ti y la virtud del …ver más…
(Se oyen mugidos, mm...mmm...mmm...Se levantan Luisa, Bernarda y Antonio).
Bernarda: El ganado se está dispersando.
Antonio: Vamos a recogerlo (se van todos, Néstor no quiere).
Antonio: Vamos Néstor, no te quedes ahí.
Néstor: Yo estoy muy bien aquí. Vayan ustedes. Qué cómodo es descansar, no preocuparse por nada. Tener tranquilidad...calma...(El diablo se le aparece por atrás. Suspenso...se asusta Néstor).
Satanás: No te asustes, no te asustes, ¿Qué daño te puedo causar?... y menos a ti. Los demás se fueron, tú si que sabes tomarle sabor a la vida.
Néstor: Sí, sí, pero no te acerques tanto.
Satanás: Los demás trabajan, tú no tienes que hacerlo, puesto que descansas. Los otros sufren, tú sabes gozar. Oye, tus compañeros creen una serie de patrañas que no son más que mentiras de viejas. Sí de viejas, Tú mi buen amigo, sí que tienes sentido práctico.
Néstor: Eso me han dicho, que soy vivillo desde chiquillo.
Satanás: ¿Vivillo? (aparte) Muy pronto vas a ser muertillo. (pausa) ¿Qué es eso de noche estrellada y prodigiosa? El Mesías que viene...(se retuerce). Ja, ja, ja...No crees en eso, ¿verdad?
Néstor: Claro que no. Ciertamente ellos son un poco tontos, pero buenos compañeros.
Satanás: Y a propósito, ¿cómo te llamas, camarada?
Néstor: Me llamo Néstor, y tú ¿quién eres?
Satanás: No has de creer que soy el diablo?
Néstor: Ja, ja, ja, y aunque lo fueras.