Falacias
En las primeras líneas, el autor nos habla acerca de cómo es que en el intento de defender un argumento, a veces solemos cometer falacias. Copi define a la falacia como un error de razonamiento en un argumento, que aun siendo incorrecto, tiende cierto poder de persuasión a nivel psicológico. En el intento de defender un argumento, se pueden cometer dos tipos de errores: Que la proposición sea falsa, o que no haya relación lógica válida entre las premisas y la conclusión. De este error segundo es del que se encarga de analizar el lógico.
Las falacias son peligrosas puesto que, en la vida cotidiana, muchas veces somos engañados por ellas; sin embargo, si logramos analizarlas podremos demostrar su falsedad y podremos así evitar …ver más…

Ad hominen circunstancial: Cuando se apela a las creencias o convicciones al momento de defender la conclusión de una situación circunstancial.
Accidente y accidente inverso: Una falacia por accidente es cuando atribuimos características de una generalización a un caso en particular; y por otro lado, la falacia por accidente inverso es cuando, por el contrario, se atribuyen características particulares a un caso general.
Causa falsa: Cuando sostenemos que una conclusión es verdadera por una causa y un efecto inmediato a esta. Esta falacia mucho tiene que ver con la superstición.
Petición de principio (petittio principii): Esta falacia la comentemos cuando sostenemos la validez de una conclusión simplemente porque suponemos su veracidad.
Las apelaciones a la emoción, la piedad y la fuerza (argumentos ad pupulum, ad misericordiam y ad baculum): Estas tres falacias son bastante populares como también lo suficientemente falaces. Se utilizan como herramientas con las cuales se manipula la opinión de las personas. En primer lugar, la falacia ad populum apela al chauvinismo. En segundo lugar, el argumento ad misericordiam, en el e apela a la emotividad de la gente con la cual se genera un sentimiento de piedad por parte del oyente o lector y posteriomente, gracias a esto, la persuasión favorable para con nuestra preposición. Finalmente, el argumento ad baculum se da