La Fractura Tecno científica.

La experiencia histórica nos ha demostrado que le conocimiento y la información son el principal impulsor del crecimiento y el desarrollo.

Cierto que una computadora no se come, pero resulta un instrumento fundamental al momento de perfeccionar un sistema que puede repercutir una mejora de la calidad de vida de muchas personas.

En primer lugar dentro de los países desarrollados las diferencias sociales continúan presentándose a pesar de las añejas promesas. Si bien es verdad que se ha producido un nivel de bienestar generalizado y un recomposición de las clases sociales.
En la actualidad hay una importante cifra de población, con bajos niveles de renta y limitadas expectativas sociales.
De lo …ver más…

Ya no bastan expresiones como “aún no se sabe cómo lo vamos a solucionar, pero tengan ustedes por seguro que antes o después daremos con la solución” muy comunes en torno a la energía nuclear durante tanto tiempo.
Antes no había que considerar las acciones globales de la naturaleza, pero ahora sí. Se trata de hacer las cosas teniendo en cuenta la existencia de la naturaleza, considerando tanto el presente como el futuro.
Muchos científicos se justifican afirmando que “alguien lo hará de todos modos”, otros, convencidos aún del bien que la ciencia puede aportar, pero desilusiones con el proyecto emprendido, optan por cambiar en forma radical de disciplina o proyecto. Un buen ejemplo de ambas actitudes lo hallamos en el referido proyecto Manhattan. El mismo Oppenheimer al observar las consecuencias de su trabajo, prefiriera abandonar la física y emigrar a otras disciplinas donde su trabajo pudiera producir un mayor beneficio social.
Pocas personas con sentido común durarían que la solución de grandes problemas que afectan a la humanidad o la esclavitud debería ocupar el centro nuestra atención y preocupación. Por ello, se critica que se dediquen tantos esfuerzos, tantas inversiones (económicas, intelectuales, tecnológicas) a los proyectos espaciales en lugar de hacerlo en disminuir el hambre.
Cierto es que se hacen pertinentes y necesarios cuestionamientos éticos en torno a