¿Asesinos o ecologistas?
El arte de la caza se ha convertido en un hobby a menudo perseguido por las malas lenguas.

Es de noche, sobre las 6 de la madrugada. Un hombre armado de paciencia, ilusión y su escopeta sale tranquilamente, según él, a pasear por la montaña como ha hecho des de que era pequeño. Su hobby, el de salir a cazar es etiquetado por muchos cómo un asesinato a sangre fría, pero para el que lo practica no es sino una forma de vivir. Su lema preferido es que un cazador no se hace, se nace y por ello hay aspectos que se deben aclarar.

La figura del cazador se distorsiona en tanto que la imagen que tienen las personas que nunca han practicado este hobby es de asesinos. Personas que van por la montaña a buscar animales en …ver más…

Algunas de las conclusiones a las cuales se llegó en el congreso fueron mejorar la imagen de la actividad cinegética, dañada sobretodo por las malas lenguas, superar la falsa dicotomía entre conservación de la biodiversidad y caza y reconocer el papel clave que tiene esta actividad para el medio rural y también para la economía del país, ya que la caza es una promotora de puestos de trabajo directos y es el origen de una cadena productiva que se revaloriza en medida muy superior al rendimiento que genera. Además en España la caza es, con diferencia, la mayor potencia cinegética europea y así se debe consolidar según el primer Congreso de Caza y Desarrollo Rural.

Asesino es el que comete un homicidio con alevosía y ecologista el que defiende activamente el medio ambiente. El cazador lucha entre estas dos aguas y no es fácil evitar etiquetas puestas sin conocimiento de causa. Lo que si se hace fácilmente es juzgar una actividad sin vivirla, que des del principio de los tiempos permitió a la humanidad