Crisis de 1866, ciclo lanar y proteccionismo
Desde junio de 1866 el comercio y los ganaderos se alarmaban profundamente por la cercanía de la cosecha de lanas y la falta de medio circulante; la producción ganadera había crecido muchísimo y el circulante necesario disminuía sin cesar. Se estimaba que la próxima cosecha de lanas, habría de absorber en intereses y especulaciones sobre el papel, tal vez mas del 40% de los valores brutos de toda cosecha. El año 1866 terminaba, pues, con esa sombría perspectiva, agravada por la posibilidad del cierre del mercado de Estados Unidos para las lanas argentinas. Merced a la falta de circulante, buena parte de esas utilidades, en lugar de ir a los ganaderos, ingresaban en las arcas de usureros y especuladores.
Otros factores, anteriores a la crisis misma, agravan en el Plata la situación de los ganaderos. Por ley de noviembre de 1864, se disponía la venta de tierras públicas existentes dentro de la línea de fronteras. Para el caso de estar ocupadas por arrendamientos- casi todas lo estaban- se establecía un plazo de seis meses para que se presentasen a solicitar la compra de sus campos, vencido el cual, estos saldrían a subasta. El precio fijado por ley se estimó ruinoso para los arrendatarios y, por lo tanto, imposible de ser pagado. Para terminar de complicar la situación, las aprensiones respecto de una posible ley proteccionista de los EE.UU., que habría de impedir el consumo de lana argentina en dicho país, se vieron confirmadas: en 1867 la Ley