Contaminacion del rio chira
El autor trata de explicar a su hijo de 15 años, Amador, de qué se trata esta cuestión llamada “ética”. Pero eso si no es un manual de instrucciones para la vida. Sólo tiene el modesto propósito de plantear inquietudes. En eso consiste la buena educación.
En este libro el autor nos trata de dar desde su particular punto de vista una idea más clara de lo que se tiene que hacer en la vida para aprovecharla lo mejor posible, tratando de ahorrarnos posibles errores que podamos cometer en un futuro de saber cómo responder ante los diferentes obstáculos o problemas que se presentan en las vidas de los seres humanos.
Otro punto que también nos plantea es la diferencia entre el hombre y el resto de seres vivos. La principal …ver más…
Habría que aclarar que Libertad es decidir pero también darse cuenta de lo que se está decidiendo. Antes de tomar una decisión, tenemos que pensar, primero el motivo de la acción, y después pensarlo una segunda vez y replantearnos la pregunta porque puede que cambiemos de opinión. Esto ocurre con las costumbres, porque si nos preguntamos, decimos que actuamos así porque es costumbre; pero puede que al pensarlo una segunda vez nos cuestionemos por qué tenemos que hacer siempre lo que suele hacerse. Al igual pasa con los caprichos, pues reflexionamos más las cosas.
La palabra moral tiene que ver con las costumbres y con las órdenes, pero hay costumbres y órdenes que pueden ser malas o inmorales. Si queremos profundizar en la moral verdadera y aprender a manejar la libertad que tenemos, hay que olvidar las órdenes, caprichos y costumbres.
Al hablar de moral, hay que definir el término “bueno”, pues varía según las personas o las situaciones en las que se emplee.
Después de saber todo esto sí que estamos en nuestro derecho de hacer lo que queramos.
Capítulo 4: Date la buena vida
Debemos dejarnos de órdenes, caprichos y costumbres y plantearnos las cosas desde dentro de nosotros mismos: decidir qué hacer con nuestra vida; por esto, queramos o no, somos libres. Aunque podamos “hacer lo que queramos”, no