C 5.-ANGUSTIAS DE CALEJA:
Antes Las carretas. En pleno fragor del combate, las columnas de Callejas que irrumpían por las antiguas calles de Víctimas, Salas, Bollas, Yedras y Niño Artillero, fueron rechazadas uno y otra vez con pérdidas muy considerables, el Brigadier ordenaba el ataque desde la calle de las Carretas a un lado del Arco Chino de la Atarjea, y hasta ahí llegaba los fuegos, pero de su misma tropa en una confusión completa; la ira se ______ dé: Brigadier cuando vio a sus soldado heridos o muertos, quizás por sus propias balas, cuando observaba este cuadro, llegaron correos avisándole del fracaso del Conde de Casa Raúl en su intento por tomar San Diego por su flanco N. E., incluso se enteró que el Conde había sido herido …ver más…

Durante el sitio de hubo allí trinchera, pero sin cañón ni obús.
A15.-BOLLAS SIN CABEZA:
Antes El Garzón. En la contra esquina al convento de San Diego se encontraba una trinchera quedando dentro dentro del zaguán en tal Muñoz, en cuyo lugar hubo una maestranza de herrería a cargo de Luis Cruz y del capitán Bollas. Parapetado estuvo un cañón de a 4 dando frente al poniente. El 19 de febrero en el asalto sangriento de ese día, frente a ese emplazamiento los realistas lograron colocar un cañón, entablando fuego graneado contra la fortaleza que defensa, el caliente Bollas. Una bala del enemigo taladro una gruesa y ancha viga que serviría de pie derecho a la trinchera, como allí se encontraba parapetando el insurgente Bollas, le llevo la cabeza despidiéndosela del cuerpo, muriendo así el aguerrido soldado del pueblo.
C16.- BRAVO, LOS:
Antes Calle Real. Allí estuvieron acuarteladas las tropas de esos jefes en los días anteriores al sitio de Cuautla, los hermanos Víctor y Leonardo Bravo, ubicaron su residencia en lo que hoy es la calle de la tesorería y portal Matamoros, entonces casa de Don Prudencio Cajigal, quien tenía una tienda. Siempre la tentación de que los realistas podían atacar la ciudad por el rumbo del norte por lo que constantemente vigilaba esa región pasando siempre por la calle que hoy lleva su nombre. En una ocasión el párroco de apellido Arrieta, muy adicto a lo realistas, hizo salir con engaños a las fuerzas de los