César hildebrandt “su majestad la estupidez”
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César Hildebrandt: “Su majestad la estupidez”Semanario “Hildebrandt en sus trece”, 23-07-2010 Yo sabía que el mundo era estúpido. Lo presentí desde niño, cuando escuchaba a los adultos decir zonceras y al profesor de educación cívica gritar que la patria se hacía creyendo en ella y a Radio Reloj farfullar noticias sin pena ni gloria. Por eso huí hacia los libros, que me hacían pensar que el mundo no era tan estúpido y que, más bien, podía ser estimulante, viajero y maravilloso. Pero más que las historias a mí siempre me fascinó el hallazgo verbal, el milagro de una frase bien dicha, la música de las aliteraciones, el rigor del concepto, el poder hipnótico de la belleza, la fascinación sombría del horror, la fiesta de la fantasía, el …ver más…
González, chequera de aprista en el poder, odios de Agois, enaguas de la Mecánica del Folclore, audífonos amarillentos, carné fujimorista, cupones del Trome y colección de discos piratas, terminaría por imponerse. Hoy el Perú es una no declarada no monarquía donde reina la estupidez y las cortesanas bailan los sábados en el 4. Y si alguien duda de que la estupidez reina entre nosotros que mire lo que ha pasado con la señorita Larissa Riquelme, una potranca de cascos más ligeros que Pegaso, una ópera de dos centavos sin Brecht, una señorita que hace juegos con la lengua mientras que le explica a Bayly, esa otra celebridad, cómo es que los paraguayos son expertos en el cunnilingüis. Y de esta despachadísima buscona, que lucía en el mundial de fútbol un teléfono celular atrincherado entre las mamas y por eso se hizo famosa, la prensa peruana hace primeras planas y la radio comentarios interminables y la televisión entrevista archipublicitadas. Es la estupidez reinando. Y es el absolutismo monárquico de la estupidez cuando, al costado de la señorita Riquelme, empieza a ser la comidilla de los medios el asunto de unos fantasmas denunciados por la esquizofrenia y el erostratismo. Y todos hablan de los presuntos fantasmas. Y salen