Amor verdadero de Isaac Asimov
Él es un programador y yo soy un programa de ordenador.
Soy parte del complejo “Multivac” y estoy conectado con otros sectores en todo el mundo.
Lo sé todo. Casi todo.
Soy el programa privado de Milton.
Él,sabe más de programación que nadie en el mundo, y yo soy su modelo experimental.
Me ha hecho hablar mejor de lo que pueda hacerlo cualquier otro ordenador.
Es cuestión de acoplar los sonidos a los símbolos, Joe me dijo Así funciona el cerebro humano, aunque todavía NO sabemos qué símbolos hay en el cerebro.
Conozco los símbolos del tuyo y puedo acoplarlos uno por uno a palabras.
De modo que hablo.
No creo que hable tan bien como pienso, pero Milton dice que lo …ver más…
Son IDEALES.
¿Por qué NO me gustan?
Le gustas tú a ellas?pregunté.
Alzó las cejas y apretó una mano contra la otra.
Eso es, Joe. Es una calle de dos direcciones.
Si yo NO soy su IDEAL, NO pueden actuar como si YO LO FUERA.
Debo ser su VERDADERO AMOR, pero,¿CÓMO PUEDO CONSEGUIRLO?
Todo aquel día pareció estar pensando.
A la mañana siguiente, se me acercó y dijo:
Voy a dejarlo en tus manos, Joe.
Tú decidirás.Tienes mi banco de datos y voy a decirte además todo lo que sé de mí.
Pon hasta el último detalle en mi banco, pero guarda para ti lo adicional.
Qué quieres que haga con el banco de datos, Milton?
Lo comparas con los de las trescientas treinta y cinco mujeres. No,con doscientas veintisiete;deja afuera a las que ya hemos visto.Arréglate para que cada una se someta a un exámen psiquiátrico. Completa sus bancos de datos con el mío. Busca correlaciones.(Arreglar exámenes psiquiátricos es otra de las cosas contrarias a mis instrucciones originales.)
Durante semanas, Milton habló conmigo.
Me habló de sus padres y de sus allegados. Me contó su infancia, sus días de escuela y su adolescencia. Me habló de las jóvenes que había admirado a distancia.
Su banco de datos fue creciendo y me modificó para que pudiera ampliar y profundizar en la comprensión y captación de símbolos. Me dijo:
Verás, Joe,cuanto más vayas metiendo de mí en ti, más debo ajustarte para que puedas