Historia y anti historia

Síntesis

Uno de los mayores logros en la evolución fue
cuando una criatura, -gracias a sus atributos filo
genéticos que se desarrollan y perfeccionan en lucha por
la vida-, sobresale por encima del conjunto animal del que forma
parte, emergiendo un nuevo ser, –el hombre-, el más activo
de la naturaleza, en un proceso permanente de
"humanización", entendido como lucha por dignificar su
existencia mejorando las relaciones sociales entre semejantes,
con la naturaleza y el cosmos. Este proceso no es
automático, no es mecánico, tampoco inexorable,
porque, además de las fuerzas de la naturaleza, pugnan
fuerzas sociales regresivas y libertarias. A las fuerzas sociales
conservadoras y reaccionarias nosotros las denominamos clases sin
historia o al margen de la historia, y a las fuerzas libertarias
las denominamos clases con historia, en tanto luchan por
dignificar la condición humana.

Palabras clave: historia, final de la historia,
prehistoria, escritura, devenir, evolución, clases con
historia, clases sin historia, decadencia capitalista,
revolución, contrarrevolución.

Historia y
devenir

Uno de los mayores logros en la evolución fue
cuando una criatura, -gracias a sus atributos filo
genéticos que se desarrollan y perfeccionan en lucha por
la vida-, sobresale por encima del conjunto animal del que forma
parte, emergiendo un nuevo ser, -el hombre-, el más activo
de la naturaleza, en un proceso permanente de
"humanización", entendido como lucha por dignificar su
existencia mejorando las relaciones sociales entre semejantes,
con la naturaleza y el cosmos.

Contrariamente a la mayoría de seres cuya
constitución fisiológica se adapta a su medio
ambiente, el ser humano, el más activo de la naturaleza,
para sobrevivir, tiene necesidad de transformar su medio
ambiente, transformándose así mismo, extendiendo
sus facultades innatas con instrumentos cada vez más
complejos. Federico Engels escribía al respecto: "Los
hombres, (…), a medida que se alejen más de los animales
en el sentido estrecho de la palabra, en mayor grado hacen su
historia ellos mismos, conscientemente, y tanto menor es la
influencia que ejercen sobre esta historia las circunstancias
imprevistas y las fuerzas incontroladas, y tanto más
exactamente se corresponde el resultado histórico con los
fines establecidos de antemano". El capitalismo
–prosigue Engels-, desarrolla la ciencia y la
tecnología como nunca antes, acrecentando la
productividad, pero esclaviza al ser humano al mundo de las
mercancías. "Unicamente una organización
consciente de la producción social, en la que la
producción y la distribución obedezcan a un plan,
puede elevar socialmente a los hombres sobre el resto del mundo
animal, del mismo modo que la producción en general los
elevó como especie1".

Devenir es todo el acontecer desde los orígenes
de la humanidad a nuestros días, con sus avances y
retrocesos, entendiendo como avances, los logros que dignifican
la condición humana, y como retrocesos, todo lo que tienda
a estropear la condición humana. La cualidad inherente en
el ser humano de luchar por mejorar su vida como condición
de de su supervivencia constituye la historia, por lo que Hegel
pudo decir que la historia es el devenir en lucha por la
libertad.

Este proceso no es automático, no es
mecánico, tampoco inexorable, porque, además de las
fuerzas de la naturaleza, pugnan clases sociales conservadoras y
revolucionarias y clases sociales libertarias. A las primeras las
denominamos clases sin historia o al margen de la historia, y a
las segundas clases con historia, en tanto luchan por dignificar
la condición humana.

El devenir humano no arbitrario, sino de acuerdo a las
múltiples determinaciones a que se hallan expuestos
conforme explicaba Carlos Marx en las primeras líneas de
su obra "El dieciocho brumario de Luis Bonaparte" (escrito entre
diciembre de 1851 y marzo de 1852): "Los hombres hacen su
propia historia, pero no lo hacen a su libre arbitrio, bajo
circunstancias elegidos por ellos mismos, sino bajo aquellas
circunstancias con que se encuentran directamente, que existen y
les han sido legadas por el pasado".

La humanidad no siempre ha sido ni es consciente de este
proceso. La mayor parte de su devenir lo ha recorrido a tientas,
sin saber de los pasos que da en el camino. Las primeras
explicaciones a su existencia y lugar en el universo fue por
mediación del mundo mágico religioso, proceso que
abarca milenios, pero en el devenir, luego de cumplir su
función progresiva, la religión es puesta en tela
de juicio por el "racionalismo", que en sus diversos matices
progresivas y reaccionarias- alcanzan máxima coherencia y
plenitud en los tiempos modernos por mediación de las
ciencias físico naturales y sociales, surgiendo una nueva
concepción de la vida que en su acepción libertaria
coloca al hombre en comunión con la naturaleza como el
centro del universo.