- Base
conceptual - Aspectos cognitivos del alumno como sujeto de
instrucción - Desarrollo psicosocial
- Bibliografía
Pregunta: Al definir la psicología de la
educación, psicología pedagógica,
psicología de la didáctica, psicología de la
instrucción y psicología del desarrollo humano.
Para alcanzar así, establecer los aspectos cognitivos del
alumno como sujeto de instrucción y su desarrollo
psicosocial. A través de los autores: Coll, C., (2006),
Cuadrado, I., (2008), Mialaret, G., (2006), Pérez, N. y
Navarro, I., (2011), Ruiz, O., (2005), Henson, K., y Eller, B.
(2000), Díaz, F., (2002), Ferreyra, H., y Pedrazzi, G.,
(2007), Urbano, C., y Yuni, J., (2005), Pérez, C., (2001),
Cloninger, S., (2003).
Tesis En relación a la definición
de los conceptos de psicología de la educación,
psicología pedagógica, psicología de la
didáctica, psicología de la instrucción y
psicología del desarrollo humano. Para establecer, los
aspectos cognitivos del alumno como sujeto de instrucción
y su desarrollo psicosocial.
Base
conceptual
PSICOLOGÍA DE LA
EDUCACIÓN
La psicología de la educación involucra
dos disciplinas la educación y la psicología que es
debatida por su relación y definición, la cual, se
complica por diversos factores. Los autores Henson, K., y Eller,
B. (2000) del libro Psicología educativa para la
enseñanza eficaz, postulan la concepción de
Clifford (1984) quien considera oportuno entrelazar a la
educación y la psicología para concretar a la
psicología educativa para el uso de métodos
psicológicos que estudie el proceso educativo. Mientras
que, Grinder (1981) propone a la psicología educativa como
el conocimiento obtenido de la psicología que se aplica al
salón de clases.
Díaz, F., (2002) en su libro Didáctica
y currículo: un enfoque constructivista, presenta a
De Garmo quien utiliza por vez primera el término
Psicología de la Educación, pero será
definida por Thorndike como disciplina del conocimiento aplicado
a la educación, así como disciplina
pedagógica en el terreno científico de la
educación. Como consecuencia, Díaz, F., la define
como Ciencia ineludible en la formación profesional del
maestro, estando ligada a la Didáctica y
produciéndose una identificación absoluta.
Entonces, los tratados titulados como "Psicología de la
Educación", "Psicología de la materias de
enseñanza", "Psicología del aprendizaje" son
considerados por Díaz, F., como verdaderos estudios
teóricos y prácticos del trabajo escolar y de la
orientación docente del aprendizaje.
PSICOLOGÍA DEL
APRENDIZAJE
Ferreyra, H., y Pedrazzi, G., (2007) en si libro
Teorías y enfoques psicoeducativos del aprendizaje:
Aportes conceptuales básicos. El modelo de enlace para la
interpretación de las prácticas escolares en
contexto, harán referencia que, el aprendizaje es
externo al individuo, por recibir de forma pasiva los
estímulos que capta del medio y así aprende. Como
consecuencia, aprender es sólo repetir, aquello que es,
medible, observable y cuantificable, lo transmitido por un
experto, es decir, un docente.
Mientras que, los principios de la psicología
cognitiva en Ferreyra, H., y Pedrazzi, G., tendrán una
referencia con las estrategias de aprendizaje y habilidades
cognitivas y metacognitivas, las cuales, son significativas para
el cambio del sistema educativo. Por eso, para la corriente
cognitiva, aprender será construir el conocimiento desde
un proceso individual e interno. El aprendizaje no estará
restringido a la dimensión cognitiva de las disciplinas
científicas o académicas integradas en las
propuestas curriculares, por cuanto, se orienta a potenciar el
desarrollo humano. Como consecuencia, en lo cognitivo se incluyen
los desarrollos emocional, social, moral entre otros, como parte
del proceso de formación integral de los individuos. Los
autores postulan la concepción de Vygotsky y otros (1973)
en relación al aprendizaje:
"El aprendizaje engendra un área de desarrollo
potencial, estimula y activa procesos internos, en el marco de
las interrelaciones, que se convierten en adquisiciones internas"
(pg. 47)
En esta concepción Vygotsky asume fases
esenciales de la instrucción, la transmisión
educativa y la actividad guiada, donde, el desarrollo del
lenguaje su recobra su relevancia, por ser transmisora del bagaje
cultural. Ferreyra, H., y Pedrazzi, G., presentan las dos
posturas del desarrollo. La primera donde "el desarrollo
posibilita el aprendizaje", propuesta por Piaget quien la
considera "un proceso necesario", donde el individuo
seguirá una secuencia relativamente estable y programada.
Mientras que, "el aprendizaje posibilita el desarrollo" propuesto
por Vygotsky entendido como un "proceso mediatizado", atribuido
los estímulos del entorno socio-cultural, los cuales
mediatizan el desarrollo estimulándolo o
retrasándolo.
En definitiva, el aprendizaje es en sí mismo
desarrollo, donde una correcta organización del
aprendizaje del individuo conduce al desarrollo mental, activa
todo un grupo de procesos de desarrollo, y esta activación
no podría producirse sin el aprendizaje.
PSICOLOGÍA DE LA
DIDÁCTICA
Al hablar sobre el objetivo de estudio de la
didáctica, Díaz, F., propone la
concepción de García Hoz sobre la educación,
la cual es, el "perfeccionamiento intencional de las facultades
específicamente humanas: entendimiento y voluntad". La
acción educativa bipolar es: docente-discente. Por eso,
Díaz, F., definirá a la Didáctica como
ciencia que estudia el proceso instructivo o de enseñanza
en cuanto produce la formación o educacional intelectual,
teniendo dos objetos de estudio. El objeto material que estudia
el proceso instructivo y el objeto formal que tiene por finalidad
producir formación intelectual e integral del individuo.
Como resultado, la Didáctica se ocupara de la
enseñanza, del aprendizaje, del proceso instructivo y de
la formación integral del discente.
PSICOLOGÍA DE LA
INSTRUCCIÓN
En la década de los setenta la psicología
de la instrucción será una disciplina puesta en
evidencia según sus diversas aportaciones y
delimitación de su objeto de estudio. Según
Cuadrado, I., (2008) en su Psicología de la
Instrucción: Fundamento para la reflexión y
práctica docente, la observará como respuesta
a necesidades sociales concretas en un momento específico
de la historia. Cuadrado, I., planeta que, las reformas
educativas apuntan a la adaptación del currículo,
mientras que, el proceso instruccional a las nuevas necesidades y
demandas. Por cuanto, Cuadrado, I., postula a Banathy (1990)
quien desglosa diversos aspectos:
"centrarse en el aprendizaje de conocimientos complejos;
desarrollar fórmulas que permitan adquirir competencias en
diversas tecnológicas; fomentar competencias en los
estudiantes que les permitan controlar el cambio social y
adaptarse al mismo; y propiciar una serie de habilidades
cooperación, colaboración y comunicación,
así como de actitudes positivas hacia la educación
y el cuidado de los otros." (pg. 17)
Estos aspectos buscan realmente hacer de la reforma
curricular una adaptación orientada y centrada en un
aprendizaje de conocimiento, donde se adquieran, fomenten y
propicien competencias y habilidades en los alumnos para la
transformación y adaptación del entorno social
donde se desenvuelven. Cuadrado, I., al hacer mención de
las metas generales del currículo, postula a Jones (1991)
sobre el proceso instruccional, el cual, requiere de condiciones
para que el aprendizaje sea más funcional y significativo
de aquí:
"que el alumno no sólo aprenda mediante la
instrucción formal, sino también experimentando en
situaciones reales cotidianas; que las escuelas y otras
instituciones de apoyo suplan a la familias que no puedan
transmitir a sus hijos los valores sociales adecuados; que los
individuos no se sientan marginados o segregados de sus grupos de
iguales, a pesar de la posible existencia de necesidades
educativas específicas." (pg. 17)
La instrucción será vislumbrada como una
sucesión determinada de acciones anticipadas y concretadas
para originarse como un complejo proceso de intercambio entre los
sujetos y los contenidos de la misma. De igual manera,
prevalecerá la imagen las disposiciones emanadas de las
indagaciones realizadas, considerando y respetando las
diferencias individuales. Finalmente, Cuadrado, I.,
definirá, la Psicología de la Instrucción
como aquella necesidad de encontrar un enlace entre la
Psicología de la Educación y la práctica
educativa escolar. Caracterizándose así, por ser
una disciplina científica y aplicada; desarrollada desde
la Psicología de la Educación, que estudiara las
variables psicológicas y la integración de los
procesos de enseñanza-aprendizaje que imparten los
maestros, los cuales, pretenden enseñar unos contenidos o
destrezas concretas en los alumnos y en un ámbito
concluyente.
PSICOLOGÍA DEL DESARROLLO
HUMANO
Urbano, C., y Yuni, J., (2005) en su libro
Psicología del desarrollo: enfoques y perspectivas del
curso vital, definen la psicología del desarrollo
como un campo de conocimiento en el que convergen los aportes de
diferentes enfoques y subdisciplinas de la psicología
tales como: Psicoanálisis, psicología cognitiva,
neuropsicología, psicología cultural entre otros.
Llegando articularse con los saberes de otras disciplinas, es
decir, la sociología, la antropología, la
lingüística, la bilogía y la
neurobiología, entre otras. De aquí que, el
carácter integrador e interdisciplinario de la
psicología del desarrollo se fundamenta en la naturaleza
compleja del psiquismo humano.
Pérez, N., y Navarro, I., (2011) en su libro
Psicología del desarrollo humano: del nacimiento a la
vejez, define el "desarrollo" como el cambio de
comportamiento que es inducido por el entorno y determinado por
una sociedad o cultura. Estos cambios pueden ser
Cuantitativo, como la cantidad de respuestas que emite
un sujeto; o Cualitativo, al generarse un cambio en la
forma de respuesta que el sujeto muestra. Los autores postulan
tres ámbitos del desarrollo: 1) El Ámbito
biofísico estudia, el desarrollo físico,
motor, sensorial y contextual que llega a afectar al crecimiento,
desarrollo y maduración del sujeto. 2) El
Ámbito cognitivo estudia, el desarrollo del
pensamiento, las capacidades intelectuales y los contextos que
inciden en el proceso de aprender a hablar, escribir, leer,
desarrollar la memoria y otros. 3) El Ámbito
Socioafectivo estudia, la capacidad de sentir y expresar
emociones, relacionarse con los demás y el ambiente que
estimulan el desarrollo socioemocional del individuo. Siendo
fundamentos del entendimiento del ser humano en las diferentes
etapas evolutivas del ser humano.
Pérez, N., y Navarro, I., presentan los
antecedentes de la psicología evolutiva, y
afirmaran que:
"El proceso educativo debe partir del entendimiento de
la naturaleza del sujeto, del conocimiento de sus intereses y
características particulares. Asumiendo que el niño
conoce el mundo que le rodea por medio de sensaciones, se define
la observación y experimentación como el camino por
el cual este inicia la aprehensión del mundo que le
rodea." (pg. 18)
Desde esta perspectiva se plantea que el niño
podrá ser capaz de desarrollar el sentido de
discernimiento, permitiéndole desde esta cualidad
diferenciar entre el yo y el mundo subyacente. Los autores
postulan la concepción de Rousseau, quien asegura que el
desarrollar esta etapa del discernimiento llega a predominar
sobre la acumulación de conocimientos. En definitiva, la
educación podrá adecuarse a cada una de las etapas
de desarrollo desde tres aspectos que orientan la acción
educativa: 1) Considerar los intereses y capacidades del
niño. 2) Estimular en el niño el deseo de aprender.
3) Analizar qué y cuándo debe enseñarse al
niño en función de su etapa de
desarrollo.
En definitiva para Pérez, N., y Navarro, I.,
el desarrollo cognitivo humano es postulado por Piaget
desde dos aspectos: 1) Inteligencia, como forma de
adaptación biológica y busca el equilibrio de la
persona con el exterior. 2) Conocimiento, resultado del proceso
de construcción que se elabora en el intercambio
individuo-objeto, considerando sus características y la
producción de la realidad. Como resultado para, Piaget el
individuo requerirá adaptarse a un medio en constante
cambio.
Aspectos
cognitivos del alumno como sujeto de
instrucción
Se presenta la interactividad como, las diversas maneras
de ordenar la actividad conjunta del profesor y alumnos,
así como, su progreso en el tiempo. De aquí, que su
análisis nos conduce a entender cómo y por
qué suceden situaciones concretas de enseñanza y
aprendizaje dentro de aula. Cuadrado, I., hace referencia a la
intervención educativa orientada a las competencias
cognitivas del discente, y a todas sus capacidades afectivas,
sociales, de relación, motrices, entre otras. Por eso,
para el autor, la intervención pedagógica
tendrá que incentivar al discente a desarrollar su
capacidad de realizar aprendizajes significativos por sí
mismo en situaciones y escenarios diferentes, es decir, que
aprenda a aprender.
Se puede observar la concepción constructivista
del aprendizaje y de la enseñanza desde las tres
vertientes esenciales propuestas por Coll, Escaño y Gil de
la Sema (1994) y ratificadas por Cuadrado, I., quien las presenta
diciendo que:
"-El alumno es el responsable último de su propio
proceso de aprendizaje. Es él quien construye el
conocimiento y nadie puede sustituirle es esa tarea.
[…].
-La actividad mental constructiva del alumno se aplica a
contenidos que son el resultado de un cierto proceso de
construcción a nivel social. Es decir, la casi totalidad
de los contenidos que constituyen el núcleo de los
aprendizajes escolares son saberes culturales que tanto los
profesores como los alumnos encuentran en buena parte elaborados
y definidos.
-El profesor está llamado a crear las condiciones
óptimas para que el alumno despliegue una actividad mental
constructiva rica; el profesor ha de intentar orientar y guiar
esta actividad con el fin de que la construcción del
alumno se acerque progresivamente a los significados de los
contenidos como saberes culturales." (pg. 54)
Desde esta perspectiva constructivista, la
interpretación del aprendizaje asumida por los discentes,
aunque adquiere por sí solo los conocimientos, para ello,
requerirá de un mediador o experto, según sea la
diversidad de los discentes y las diferentes circunstancias. Los
alumnos deben topase con nuevos aprendizajes de aspectos
cognitivos y emocionales. De aquí que Cuadrado, I.,
presenta estos aspectos cognitivos y emocionales, afirmando
que:
"-Disponen de conocimientos previos que se encuentran
organizados y estructurados en esquemas de
conocimiento.
-Poseen determinadas capacidades, estrategias y
habilidades.
-Una disposición hacia el aprendizaje de nuevos
contenidos. Esta disposición viene marcada por las
experiencias previas de aprendizaje, por factores personales como
el autoconcepto, la autoestima, la autoeficacia y grado de
interés por la tarea, así como la imagen que tenga
de su profesor y las expectativas que espere." (pg.
55)
La importancia de los aspectos cognitivos y emocionales
están referidos a las experiencias previas del
aprendizaje, que desde la concepción constructivista, se
define como "conocimientos previos" los cuales poseen los
discentes y se relacionan con los contenidos que deberá
aprender. Cuadrado, I., postula la concepción de
Pérez, C. (2001) quien afirma que:
"Los conocimientos previos respecto al contenido a
aprender, es decir, lo que el alumno ya sabe de un tema y la
cantidad y riqueza de relaciones que sea capaz de establecer, le
permitirán interpretar y transformar el nuevo contenido y
darle significado -enfoque profundo -, o por el contrario, la
falta de conocimientos previos o la distancia excesiva entre
estos conocimientos y la nueva información sólo
permitirá memorizar algunos fragmentos del contenido de
manera aislada -enfoque superficial." (pg. 55)
En definitiva, los conocimientos previos son anterior a
cualquier contenido que pueda ofrecérsele al alumno, pero
que ellos podrán adquirir, explicar y cambiar su
valoración. Como consecuencia, los alumnos podrán
aprender nuevos conocimientos o contenidos sin darle significado
relevante al mismo. La concepción constructivista
comprenderá que los discentes al recibir nuevos
conocimientos ya poseen conocimientos previos, los cuales,
estarán organizados y estructurados en esquemas de
conocimientos. Cuadrado, I., asume la concepción de Norman
(1985) sobre los esquemas de conocimiento, quien la define
como:
"un conjunto organizado de conocimiento […]
pueden contener tanto conocimiento como reglas para utilizarlo,
pueden estar compuesto de referencias a otros esquemas […]
pueden ser específicos […] o generales." (pg.
56)
Entonces, Cuadrado, I., observara a los esquemas como
datos estructurados que simbolizan conceptos generales, los
cuales, se localizan acuñados en la memoria, aunque no se
tiene, el objeto real almacenado, sino sólo la idea
construida, y que se, fundamentan en otras ideas previas. Ya que,
las ideas o conceptos no se encuentran aislados, sino integrados
a una estructura relacionada donde el significado será
casi personal. Como consecuencia, las facultades intelectuales
actuarían independientemente de la materia sobre la que
operan y el desarrollo de algunas facultades conduciría
inevitablemente al desarrollo de las otras.
Desarrollo
psicosocial
El desarrollo psicosocial es la integración del
desarrollo emocional y social. Para Rice, Ph., (1997) en su libro
Desarrollo Humano: estudio del ciclo vital, establece
cuatro etapas del desarrollo psicosocial: 1)
Autosocialidad como la etapa lactante y prenatal del
desarrollo donde los intereses, placeres y satisfacciones es el
mismo niño. 2) Heterosocialidad infantil donde el
niño buscara compañía de otros, sin
distinguir el sexo. 3) Homosocialidad donde los
niños en la escuela preferirán jugar con otros
niños del mismo sexo, sin tener propósitos
sexuales. 4) Heterosocialidad adolescente y adulta donde
los placeres, amistades y compañía del individuo se
encuentran en otros de ambos sesos. En esta etapa los
adolescentes inician el noviazgo.
Para Cloninger, S., (2003) en las Teorías de
la Personalidad, presenta las ocho etapas psicosociales que
Erikson, H., (1959) llega a reinterpretar de las etapas
psicosociales de Freud. En las etapas de Erikson, H.,
serán observadas desde un enfoque del desarrollo a lo
largo de la vida y un énfasis a los aspectos sociales. Por
eso, Erikson, H., pensó que cada etapa involucra una
crisis como elemento crucial del desarrollo (1964); así
mismo, Erikson, H., (1961) pensó que en cada crisis se
origina un yo más fortalecido o una "virtud" que
corresponde a la etapa en la que se encuentre. Cloninger, S.,
afirmó cada una de estas etapas se deben considerar desde
el individuo y desde lo social. En definitiva, el desarrollo
infantil implica una dualidad de necesidades, del niño por
alimentarse y la madre por alimentarlo. En la identidad del
adolescente se llega a desarrollar en relación con los
ideales y valores de los adultos.
Para Ferreyra, H., y Pedrazzi, G., la persona requiere
desarrollar competencias intelectuales, prácticas,
sociales y otras, y así llegar a interactuar desde los
diferentes ambientes que construyen la vida humana y su
progresiva inserción como ciudadano en la sociedad. Todos
esperamos que las competencias se adquieran, desarrollen y
perfeccionen durante su recorrido por el sistema educativo. Los
autores definirán a la institución educativa
diciendo que:
"[…] Pero no es la familia el único agente
socializador que interviene en la formación del
hábitus: la escuela, otras instituciones y todos los
contactos sociales que la persona mantiene a lo largo de su
historia aportan contenidos, […] que pasan a formar este
esquema de percepción y acción. La escuela es el
lugar fundamental para la adquisición de los conocimientos
y valores imprescindibles para que toda persona pueda insertarse
y participar de los complejos procesos de cambio que atraviesan
las sociedades actuales." (pgs. 18-19)
Mientras que, Mialaret, G., (2006) en su
libro Psicología de la educación, llega a
exponer otra forma de observar a la escuela.
"La institución educativa sirve como lazo de
unión entre la vida individual y la vida social. La
familia constituye el primer medio educativo; luego es la escuela
en todos sus niveles, de la escuela de párvulos a la
universidad, la que continúa asegurando esta
función; después toma el relevo todo aquello a lo
que se denomina la formación continua o la
formación permanente, los organismos de animación
cultural, el medio profesional." (pg. 18)
En Ferreyra, H., y Pedrazzi, G., se establecen los
diversos agentes socializadores que llegan a actuar en la
formación del hábitus; la familia, la escuela,
organizaciones y otros generan en el individuo un esquema de
percepción y acción. La escuela es el lugar
fundamental donde se adquieren las competencias. También,
ofrecerá los valores requeridos para incorporarse en el
entorno social. Mientras que, en Mialaret, G., la
institución educativa es, el enlazan entre dos aspectos de
la vida: la individual y la social. Expone los diversos medios
educativos donde un individuo podrá desarrollarse: la
familia, la escuela y la universidad, también, aquellos
que permite una educación continua o permanente y desde
las instituciones de difusión cultural y
profesional.
Con respecto a la enseñanza Herson, K., y Eller,
B., expuso que:
"La enseñanza en nuestras escuelas no ha de
limitarse sólo a transmitir al discípulo ciertos
conocimientos, a formar un mínimo de habilidades y de
hábitos. Su tarea es desarrollar el pensamiento de los
alumnos, su capacidad de analizar y generalizar los
fenómenos de la realidad, de razonar correctamente; en una
palabra, desarrollar en todo sus facultades mentales." (pg.
47)
Los autores pretenden darle una mayor amplitud a la
tarea de la enseñanza que las escuelas planifican y
ofrecen al discente no sólo para que adquiera diversos
conocimientos, habilidades y hábitos; sino también,
las facultades mentales, las cuales, desarrollan el pensamiento,
las capacidades de análisis y generalización de la
acción real. Aunque los autores definen, el hábitus
no como una categoría psicológica, por formarse
como resultado de condiciones objetivas, exteriores del
individuo, las cuales, son propias del medio social. Como
consecuencia, el individuo incorporara los gustos, valores,
costumbres hábitos y creencias, como contenido social,
luego de ser internalizados se llega a transformar en un esquema
que permite valorar y generar prácticas
sociales.
En definitiva, el esquema será el resultado de la
historia personal y colectiva. Siendo el hábitus el
resultado de la incorporación de contenidos
interrelacionados a entornos sociales establecidos, no llega a
ser igual en todos los individuos, porque cada entorno social
genera sus propias "conductas razonables" y condena aquellas que
no la posean.
En conclusión, se logró definir la
psicología de la educación como el enlace de la
psicología y la educación originando la
psicología educativa que busca obtener resultados del
proceso educativo. Que el aprendizaje amplía la
dimensión cognitiva al orientarse a potenciar el
desarrollo humano. Igualmente que, la psicología de la
didáctica al ser una ciencia se ocupa de la
enseñanza, el aprendizaje, del proceso instructivo y de la
formación integral del alumno. También que, la
psicología de la instrucción buscara su
conexión con la Psicología de la Educación y
la práctica educativa escolar para estudiar sus
variaciones proponer soluciones. Que la psicología del
desarrollo converge y se articula con otras disciplinas y
saberes, y que su fundamento en el psiquismo humano. Se
estableció que, los aspectos cognitivos del alumno como
sujeto de la instrucción están en la
intervención educativa y pedagógica para
desarrollar competencias y capacidades a través de
aprendizajes significativos por sí mismo. En definitiva,
el desarrollo psicosocial se estableció como la
integración del desarrollo emocional y social, que los
diversos agentes socializadores donde el discente se desarrolla
son la familia, la escuela, la universidad y otros,
permitiéndole adquirir, practicar y perfeccionar cada uno
de los hábitus.
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