La organización de la sociedad en que vivimos
requiere que haya producción, salarios y que las personas,
materiales y maquinarias se muevan. Con esto como base, es
necesario que las cosas sigan en movimiento y evitar los
accidentes. ¿Cómo se soluciona esto? La respuesta
es que cada uno tome las precauciones necesarias para evitar los
accidentes que suceden como consecuencia de los movimientos que
son necesarios para realizar el trabajo.
Todos sabemos que, en general, el diseño de los
departamentos le corresponde a ingeniería. En algunas
ocasiones, se consulta al supervisor cuando hay que
diseñar un nuevo departamento o cuando se va a verificar
cambios en otros. En estos casos, el supervisor tiene la
oportunidad de dar a conocer su opinión sobre la
distribución de la maquinaria y de los
materiales.
Cuando se moderniza un departamento y se instalan nuevos
equipos, se suele cambiar casi siempre el diseño del
mismo. Si ustedes tienen alguna idea buena sobre cómo
corregir alguna condición insegura en el trabajo, no
vacilen en comunicármela, a fin de que yo pueda
transmitirla al ingeniero o al departamento de
mantenimiento.
Ahora hablaremos específicamente sobre los
movimientos y la seguridad en la fábrica. Siempre que se
cruzan en el camino de un montacargas o de una carretilla
elevadora o de una carretilla de mano, en los cuales se
transportan materiales, están corriendo el riesgo de
sufrir un accidente. Se tiene un problema de tráfico. Si
van caminando tienen que mirar por dónde van, ya que no
pueden competir con los vehículos motorizados.
Muchas de las máquinas con las que se trabaja
tienen partes en movimiento. Ustedes alimentan a estas
máquinas con los materiales y las hacen funcionar para
procesar la materia prima. La mayoría de las
máquinas tienen resguardos, pero siempre hay peligros que
están al acecho. A menos que todas las partes en
movimiento estén completamente cerradas, siempre
existirá algún peligro.
Cuando trabajen con maquinarias que tienen resguardos,
ustedes tienen que complementar la protección que
éstos brindan, teniendo cuidado cuando se mueven a fin de
evitar lesiones producidas por los puntos de pellizco, de
enganche, de corte, de aplastamiento y de rodamiento.
Los puntos de pellizco se presentan cuando dos objetos
separados se mueven y convergen en un punto determinado, por
ejemplo, los dispositivos de detención de la maquinaria,
Ios sujetadores y retenedores.
Los puntos de enganche se presentan cuando los objetos
que tienen esquinas puntiagudas, dientes y superficies
ásperas están en movimiento, como por ejemplo los
taladros y barrenas, ejes estriados, fresadoras y
mandriles.
Los puntos de corte están presentes cuando dos
objetos, uno de los cuales o ambos pueden estar en movimiento, se
cruzan. Los objetos están lo suficientemente cerca uno del
otro como para tener una acción de tijera, por ejemplo:
cortadoras de papel, dados, cizallas.
Los puntos de aplastamiento están presentes
cuando dos objetos, uno de los cuales o ambos están en
movimiento, se mueven muy cerca uno del otro o están en
contacto. Es posible que no estén tocándose
completamente, pero el espacio que queda entre ellos puede
producir lesiones por aplastamiento. Como ejemplo de estos puntos
tenemos las columnas de los edificios, las paredes y todo objeto
fijo o en movimiento.
Los puntos de rodamiento están presentes cuando
dos objetos están en contacto y rotan uno hacia el otro,
como por ejemplo los cinturones, poleas, las cadenas y Ias ruedas
dentadas, las cadenas y los tambores y los piñones y
cremalleras.
Es muy corriente que las partes de las máquinas
se muevan cuando se está procesando material.
CHARLA N° 112
USO DE LA MAQUINARIA
Todos sabemos que en nuestra fábrica, a fin de
cumplir con las metas de producción, algunos trabajadores
tienen que trabajar con ciertas máquinas, supuesto, claro
está, que están autorizados a manejarlas y, en
consecuencia, debidamente entrenados.
Muy raramente ocurre un accidente con una máquina
o una herramienta cuando son mantenidas en buenas condiciones y
operadas correctamente. Los accidentes ocurren, en general, como
resultado de prácticas de trabajo inseguras y de la falta
de conocimiento para hacer funcionar la máquina en la
forma correcta y con seguridad. En resumen podemos decir que
solamente las máquinas pueden ser operadas por quien haya
sido entrenado y esté autorizado pare hacerlo.
Las máquinas y las herramientas cuestan mucho
dinero y se necesita gente muy experimentada y con conocimiento
para repararlas. Un buen operador se enorgullece de su
máquina y la trata con respeto. Sabe que si la trata bien
logrará un producto de calidad, pero que si le quite los
resguardos y tiene una actitud de despreocupación, la
máquina puede vengarse quitándole un dedo o la
mano.
Como todo trabajador sabe que el usar un equipo cuando
no se está autorizado puede causar problemas, no voy a
insistir sobre ese, pero sí quiero repetirles que
nunca trabajen con una máquina que no
conozcan.
Veamos ahora como se debe trabajar en una máquina
con seguridad:
1. Siempre hay que vestirse de forma tal que la
ropa no pueda ser atrapada por las partes en movimiento. La
ropa, mangas, puños, corbatas y alhajas sueltas no
deben ser nunca usados cerca de la maquinaria. En ciertos
tipos de máquinas los guantes también pueden
ser muy peligrosos;
2. Hay que mantener siempre la mente en el trabajo, el
soñar despierto puede transformarse en una pesadilla. Hay
que evitar las conversaciones que no están relacionadas
con el trabajo, ya que las distracciones suelen ser muy
peligrosas;
3. A menos que la máquina esté
completamente parada y se haya colocado el candado y la tarjeta,
no hay que quitar el resguardo; antes de arrancar la
máquina hay que asegurarse de que el resguardo se ha
colocado nuevamente;
4. No es seguro trabajar en una máquina cuando
uno no se siente bien. Hay que informar inmediatamente cualquier
problema físico que se esté padeciendo e incluso si
se está preocupado emocionalmente;
5. Antes de poner la máquina en funcionamiento
hay que asegurarse de que ésta está en buenas
condiciones y que todos los resguardos están en su
lugar;
6. No hay que tratar de hacer ningún arreglo en
la máquina, y hay que informar lo que está
sucediendo, a fin de que la persona competente la
repare;
7. Las herramientas de corte deben ser mantenidas en
buenas condiciones. Si la herramienta está roma, se pueden
producir roturas, lo mismo que si se use una presión o
velocidad excesivas. Estas roturas pueden dar por resultado
cortaduras y pinchaduras dolorosas;
8. Hay que estar seguros de que las paradas,
alimentación y velocidad están graduadas
adecuadamente. Hay que saber lo que va a suceder antes de
poner la máquina en funcionamiento;
9. Cuando se termina de trabajar, hay que quitar las
virutas con un cepillo. Si es necesario usar aire comprimido, hay
que prestar especial atención a las partículas que
pueden salir disparadas. Se debe proteger a los que están
cerca;
10. Al aceitar, engrasar, regular, hacer algún
ajuste en la máquina, hay que pararla siempre;
y,
11. Cuando haya que alejarse de la máquina,
aunque sea por un instante, apáguenla.
Hemos mencionado aquí once reglas de seguridad
para operar máquinas. Podríamos mencionar muchas
otras, pero en este caso tendríamos que referimos a
máquinas en particular.
CHARLA N° 113
MOVIMIENTOS GIRATORIOS
En la charla de hoy quiero aprovechar la
oportunidad para hablar del peligro de las máquinas u
objetos giratorios. Muchas de las máquinas en nuestro
taller tienen partes con movimientos rotativos. Hay toda clase de
ejes que giran desde velocidades muy altas a muy bajas. Todo lo
que gira presenta cierto grado de peligro y por lo tanto
posibilidades de lesiones.
La ropa o cabello largo, los cordones de los zapatos,
corbatas, pulseras, anillos, pueden ser atrapados en las partes
que giran. Las únicas personas que se nos ocurre que no
tienen necesidad de protegerse de este peligro son los nudistas y
siempre que usen su cabello muy corto. Todos los demás
pueden ser atrapados si dejan que la ropa suelta o el cabello
toque una parte que gira.
En el pasado, antes de que se hablara de seguridad, los
ejes maestros eran un asesino notorio en la industria. Todo era
operado por ejes de transmisión y correas. El sistema de
ejes estaba lleno de tornillos que sobresalían de 3 a 10
cm. Eran verdaderas trampas para las personas ya que por la
rapidez con que giraba el eje, no se distinguían los
tornillos. Cualquier parte de la ropa que rozara los ejes quedaba
atrapada y la víctima era lanzada contra los alrededores
causando muchas veces la muerte.
¿Es aterrador, verdad? Por cierto que lo es y lo
era. La única razón por la cual hablamos de esto es
para que todos se den cuenta claramente de lo que les puede
suceder si son atrapados por un eje. Todavía sucede de vez
en cuando. Generalmente hoy en día sucede con ejes
pequeños. Alguien tiene una manga suelta que es atrapada
en un torno y el brazo que está adentro es posible que no
le sea de mucho valor a su dueño en el futuro.
Las partes giratorias se hicieron famosas durante la
segunda guerra mundial debido al número de mujeres que
perdieron la cabellera. Pocos jefes de planta y aun ingenieros de
seguridad, se dieron cuenta de lo fácil que era que el
cabello fuera atrapado por partes rotativas. Todo sucedía
en cuestión de segundos, el cabello era atrapado y la
muchacha se quedaba sin un pedazo del cuero cabelludo, y aun
algunas veces el resultado era el cuello quebrado.
Algunas veces la electricidad estática presta su
ayuda a esta clase de incidentes. Tal vez la persona usa un
pullover de lana o en el caso de las mujeres, una falda sobre una
prenda interior sintética lo cual representa un peligro
cerca de los ejes. Esta combinación puede generar
electricidad estática, el cabello se carga
eléctricamente y es atraído por cualquier parte
metálica. Debido a esto, tanto las mujeres como los
hombres con cabello largo deberán usar gorras o redecillas
en lugares donde haya ejes.
También deberán evitarse combinaciones de
ropa que produzcan electricidad estática.
Es difícil de convencer a la gente que los ejes
relucientes pueden atrapar la ropa. Pero los récords
muestran que así es (los ejes sucios y herrumbrosos son
aún más peligrosos). Yo personalmente conozco de un
caso. Se trata de un mecánico que notó que su
ayudante estaba secando el eje bien pulido de una pequeña
bomba que estaba en funcionamiento. El mecánico le
llamó la atención al hombre, el cual
respondió: "¿atraparme este eje? Va demasiado
lento, casi ni puede atrapar sus desperdicios". Sin embargo
ocurrió. Atrapó no sólo desperdicios sino
dos dedos del ayudante, los que se quebraron antes de que el
mecánico pudiera detener la bomba.
Los récords de accidentes demuestran que
cualquier eje o parte que gira puede atrapar la
ropa o el cabello que lo toca. Muchas veces los trabajadores se
han apoyado en los ejes o cualquier otra parte que gira sin que
les haya pasado nada y le perdieron el respeto. Pero cualquier
día puede suceder que la ropa quede atrapada y la
víctima no tenga escape. El resultado puede ser huesos
rotos, piel y ligamentos destrozados y aun un cráneo
fracturado.
Espero que de ahora en adelante todos tengan presente,
al acercarse o trabajar con máquinas u objetos que giran,
lo que hoy se ha dicho y sean lo suficientemente precavidos como
para no cometer fallos que pueden costar partes del cuerpo y
hasta la vida.
CHARLA N° 114
DESATASCANDO UNA MÁQUINA
Algunas veces una máquina puede
atascarse ya que un pedazo de material está en la
posición incorrecta.
Todos ustedes han recibido instrucciones
sobre lo que deben hacer cuando esto les pasa con su
máquina —qué equipo usar y a quién
acudir para pedir ayuda si la necesitan.
También se les ha dicho lo que no deben tratar de
hacer—qué deben dejarle al mecánico,
qué resguardos dejar en su lugar, etc., etc.
Las cosas que se les ha dicho que deben hacer han sido
pensadas por gente que tiene conocimiento.
Los que se ocupan de estos problemas se han dado cuenta
de que si ustedes tratan de hacer las cosas que se les ha dicho
que no hagan lo único que se están
buscando son problemas.
Por ejemplo, para algunas clases de prensas
troqueladoras los operadores tienen unas varas de metal blando
para desatascarlas. Estas están hechas generalmente de
aluminio o bronce y lo único que sucederá
será que se aplastarán si son agarradas
entre las matrices. Si el operador usa la vara de acuerdo a las
instrucciones, no se lesionará. Aquélla puede ser
empujada por debajo o a través del resguardo, pero las
manos del operador estarán protegidas.
Pero imaginémonos que no puede desatascar la
máquina. Supongamos que cree que podría hacerlo con
unas pinzas o un destornillador. Para llegar al punto del
atascamiento tiene que levantar el resguardo, que se le ha dicho
que debe mantener en su lugar. Es posible que desatasque la
máquina, pero ¿qué sucederá
si la prensa se pone en movimiento en ese
momento?
El troquel bajará sobre el destornillador, el que
está hecho de acero duro; una o las dos matrices se
quebrarán y los fragmentos de acero volarán en
todas las direcciones. Las posibilidades de que el operador no
sufra lesiones son muy pocas.
(Supervisor: dé un ejemplo de su
departamento que ilustre la protección de desatascar en la
forma correcta y el peligro de hacerlo en la forma
incorrecta).
Algunos de ustedes estarán preguntándose
¿qué haremos si queremos desatascar una
máquina en la forma en que nos lo han indicado y no
podemos hacerlo?" La respuesta es muy simple y
clara—si siguiendo las instrucciones que se le han
dado no se puede desatascar la máquina pidan ayuda. Acudan
al supervisor, al mecánico o a mantenimiento, quienes
están entrenados y autorizados para resolver este
problema.
Lo importante es recordar esto —desde el momento
que ignore las instrucciones está en peligro. Sabemos que
el método que se le ha indicado para desatascar una
máquina no siempre es efectivo. Pero preferimos que una
persona capacitada se haga cargo del problema en lugar que usted
empiece a hacer experimentos y corra el riesgo de sufrir un
accidente serio.
Es importante recordar los tres puntos simples de todo
atascamiento:
Primero, usar el método y el
equipo que se le ha indicado;
Segundo, no haga nada
más de lo que dicen las instrucciones, en particular no
quite los resguardos o diapositivos de protección que se
le ha indicado que no debe sacar; y,
Tercero, si el procedimiento
que se le ha enseñado no es efectivo pida
ayuda.
CHARLA N° 115
PUNTOS DE PELLIZCO
Hoy hablaremos de un equipo que tiene un
récord de accidentes, o mejor dicho de lesiones, muy malo.
Todos los años tritura manos y brazos no sólo en
las fábricas sino también en los hogares y en la
agricultura, y de vez en cuando, llega a matar. Estamos hablando
de los equipos que tienen rodillos. Cuando dos rodillos en
movimiento convergen, el peligro está presente.
Estos puntos de pellizco no parecen peligrosos, sobre
todo si los rodillos se mueven suavemente, pero si la mano, un
dedo, la manga de la camisa se acercan demasiado, el rodillo
puede atraparlos y llevárselos. Estos equipos son
especialistas en aplastar lo que se les pone en el
camino.
Mucho es lo que se ha hecho para diseñar
resguardos que protejan estos puntos de pellizcos; en algunos
casos puede lograrse la protección ideal, pero en otros no
es tan fácil. (Aquí el supervisor puede dar
ejemplos de equipos de este tipo que se utilicen en las
operaciones de la empresa).
Sin embargo, no existe ningún motivo para que los
trabajadores se lesionen con estos equipos, pero sí deben
aprender a evitar las lesiones, deben aprender a trabajar con
seguridad. Posiblemente no haya otro equipo en el cual sea tan
importante observar siempre las reglas de
seguridad.
En lo que queremos poner énfasis es en que
siempre que haya puntos de pellizcos, existe un
peligro.
La importancia de tener en cuenta la seguridad, tanto en
el hogar como en el trabajo, se hace más evidente cuando
se trabaja con equipos de este tipo. Muchas son las amas de casa
que han sufrido la trituración de los dedos con las
máquinas de lavar ropa que funcionan con rodillos. Los
niños también figuran en estas estadísticas.
Aun los esposos que han decidido ayudar a su esposa han sufrido
esta clase de accidentes.
Cuando estas lavadoras de ropa funcionaban manualmente,
el peligro no era tanto, porque en cuanto se sentía que
los dedos eran atrapados se podía detener la
máquina inmediatamente, ya fuese que la estuviese operando
la misma persona u otra. Pero el peligro aumentó cuando
los fabricantes empezaron a ponerle motores, y muchos no les
pusieron unos dispositivos de seguridad. Con el correr de los
años, se inventó un mecanismo mediante el cual
cuando una mano era atrapada, el rodillo de arriba quedaba suelto
antes de que pusiera sobre ella presión suficiente como
para triturar los huesos. Quien disponga de máquinas de
este tipo, deberá tomar muchas precauciones cuando las
está utilizando.
Las máquinas para doblar metal y arrollarlo, de
vez en cuando también se apoderan de una mano. Muy pocas
veces están resguardadas, ya que el resguardo
interferiría con el punto de pellizco y en consecuencia
con el trabajo. La mejor protección es mantenerse a
bastante distancia de los puntos de pellizco. Siempre que sea
posible, deberá idearse algo a fin de que nadie pueda
acercarse demasiado. El entrenamiento en seguridad, así
como el desarrollo de sentido de precaución y
protección son también muy importantes.
A pesar de los problemas que presentan estos equipos, no
existe ninguna razón para que los que tienen que operarlos
se lesionen. Como a dijimos anteriormente, a los que pueden
protegerse deben colocárseles un resguardo. Los que
trabajen con ellos deben tomar precauciones adicionales. Los
dispositivos de seguridad deben ser mantenidos en condiciones
óptimas.
Los puntos de pellizco dejarán ser peligrosos si
se los trata con respeto y se toman todas las precauciones
necesarias.
El problema con los padres, decía una niña
pequeña, es que cuando nos lo dan ya son demasiado viejos
para cambiar sus hábitos. Lo mismo decía un
supervisor de los trabajadores.
CHARLA N° 116
¡RESPETEN LOS RESGUARDOS!
Desde principios de este siglo, Ios avances
tecnológicos han venido desarrollándose de una
forma cada vez más precipitada. Alguien dijo en alguna
ocasión que todos los que hemos nacido en este siglo
"somos los hijos del progreso''. Nadie dude a estas alturas que
estemos viviendo en tiempos de gran progreso. Especialmente en
los últimos 30 años hemos visto un gran avance en
la actitud de la gerencia en el campo de la prevención de
accidentes.
Hay dos cosas sobresalientes que son evidencia de este
avance. Una esta relacionada con el equipo y la otra con el
programa. Con respecto al equipo, vemos diariamente los cambios
que se han realizado en dispositivos de protección, Ios
cuales han sido aplicados a todas clases de maquinaria para
protegernos, especialmente a ustedes, que tienen que trabajar
directamente en contacto con ella. Hoy día, cuando
recibimos un nuevo equipo, lo recibimos ya con toda clase de
protección. Y en relación con los programas, es
grande la evidencia de que nuestra gerencia cada año
emplea más tiempo y dinero para educarnos en el tema de la
prevención de accidentes y evitar así que nos
podamos lesionar. Incluso nuestra alta gerencia esta
verdaderamente interesada en el tema de la prevención de
accidentes, y esto sale a relucir continuamente en las
discusiones que tienen a nivel departamental, donde se discuten y
tratan todos los informes de accidentes y la forma en que se
puede prevenir que ocurran otros similares. Como se suele decir,
Ia seguridad tiene que venir desde arriba; y les aseguro que en
esta planta viene desde allá arriba.
Hay accidentes que eran muy comunes hace muchas
décadas, pero que ya apenas se producen debido a que la
maquinaria viene protegida con resguardos y otros dispositivos de
protección. Tales equipos se diseñan con mucho
cuidado y cuestan más naturalmente, pero esos dispositivos
se pagan por si solos al reducirse significativamente los
accidentes y los costos que estos acarrean. Todos los
dispositivos de protección, especialmente los resguardos,
se han construido para proteger nuestra salud, sin disminuir el
nivel de producción. No hay duda, por lo tanto, que se han
dado pasos agigantados para hacer nuestro trabajo más
seguro.
A pesar de esto, cuando a veces ando por entre las
máquinas, observando la situación en que operan,
observo que no siempre ofrecen el grado de protección que
deberían. Por qué? Por que hay algunos que, por
razones mal entendidas, quitan los resguardos intencionalmente,
para aumentar el nivel de protección o para trabajar con
más comodidad. Por muy buenas intenciones que se tengan
para hacer esto, esta solución no tiene la menor
justificación. Los resguardos se han instalado en los
equipos y maquinaria para que funcionen siempre con
ellos.
Y si un resguardo se rompe o daña, es
responsabilidad del operador de la máquina
comunicármelo inmediatamente para que sea reparado lo
antes posible, pero no antes de haber parado la máquina y
haber puesto un letrero en el que se diga 'máquina
averiada'.
Recuerdo que hace unos años un individuo se
introdujo en la línea de tráfico en una planta y
fue golpeado brutalmente por un tractor. Debido al golpe el
individuo se lesionó gravemente un pie. En la
investigación del accidente informó que él
ni había visto ni había oído que se acercaba
el tractor. Efectivamente, tras hacer un examen más
detallado de las condiciones del tractor, se comprobó que
la bocina del tractor no había funcionado durante el
último mes. Tras esto, se le responsabilizó al
operador del tractor de la lesión que sufrió su
compañero de trabajo. El operador debiera haber comunicado
que la bocina no funcionaba tan pronto como observó este
defecto. Sin embargo, continuó operando el tractor durante
un mes, sin siquiera comunicar a su supervisor del defecto que
tenía. Pero lo curioso de este accidente es que
también se responsabilizó del mismo, a otros
compañeros de trabajo del operador que conocían el
defecto que tenia el tractor pero que no se lo comunicaron a su
supervisor inmediato. Aunque en muchas situaciones la bocina no
es esencial, en este caso narrado el sonido de la bocina pudo
haber evitado que el trabajador perdiera un pie. En consecuencia,
el tractor estuvo operando durante un mes de una forma
insegura.
Quizá este otro caso nos ayude a comprender un
poquito mejor la importancia de trabajar siempre con el equipo en
perfectas condiciones. En una ocasión un trabajador de un
departamento de construcción tuvo un ataque
epiléptico. Perdió su equilibrio, y al caer
extendió su brazo derecho. La mano se introdujo en una
rotura que se había producido en el resguardo de una
mezcladora de concreto. Se pueden imaginar cómo
terminó su mano! Esa mezcladora se debía haber
retirado de servicio en cuanto se observó que se
había dañado el resguardo, porque ya no estaba en
condiciones de ofrecer la seguridad que los ingenieros
habían diseñado para él.
En cuanto observen que un resguardo está
dañado, que una máquina no tiene el resguardo
debido o incluso que alguna parte de una máquina que vino
sin resguardo debería estar protegida, quiero que me lo
comuniquen cuanto antes. Nuestra gerencia tiene un interés
especial en proteger su salud y su vida.
CHARLA N° 117
NO PODEMOS GANARLE A UNA MAQUINA
Los accidentes en las máquinas producen, casi
siempre, lesiones graves y dolorosas. Por eso, hay un hecho que
todo aquel que trabaje en máquinas que corten, moldeen o
modelen, deben tener constante mente en su mente. Este hecho es
que la máquina no necesita sino un mordisco. Un solo
mordisco y queda perdida una mano o un dedo, en un instante, una
fracción de segundo. Ese puede ser el caso de una
punzadora por ejemplo.
Probablemente se esté pensando que una punzadora
no puede lesionar si no coloca la mano debajo del pitón.
Esto es correcto, naturalmente. Y también es probable que
pueda agregar a este pensamiento, otro: "ni en el golpe hacia
abajo" Este ya no es muy correcto. Si la energía
está cerrada y la disposición es tal que la
máquina se pueda caer porque el piso no puede descender,
estarían terriblemente equivocados al poder su mano abajo,
no importa cual sea la posición para el golpe.
El gran peligro en pensar que el golpe hacia arriba es
seguro está en que ustedes pueden tentarse en alcanzar a
tiempo, particularmente alguna pieza se sale un poco de
posición. El pisón trabaja rápido. Si su
regulación del tiempo es un poquito retardada, si es un
poquito lento en sacar la mano, pum! Otra mano destrozada.
Tendremos otro lisiado. Otro trabajador que ha perdido parte de
su futuro, lo mismo que su familia y sus hijos. Si los tiene.
¡ Mal negocio, muy malo!.
La punzonadora es solamente uno de los muchos tipos de
equipo a los que los trabajadores trataran de ganarle. Y esto
radica en el hecho de que a nadie le gusta cometer errores. Si se
dan cuenta que han alimentado mal una pieza en una
máquina, es casi natural que traten de agarrarla y
enderezarla antes que se arruine. Tal vez pueden hacerlo a veces,
muchas veces. Lo que hay que destacar aquí es que no hay
nadie que pueda hacer esto siempre, todas las veces sin fallar
alguna. Nadie tiene músculos y nervios y control como para
no fallar nunca. Cualquiera que trate de ganarle en rapidez a una
máquina en acción está haciendo al peor de
las apuestas. Es la mano del trabajador, contra que?,
díganmelo .
Esto es verdadero para toda clase de mecanismos en
acción: giratorios, cortantes o deslizantes, de
sujeción interna, de rosca moldeadores o curvadores. Esto
lo vemos en y fuera del trabajo. Si yo armara una trampa de
ratones con un billete de a dolar y le dijera a alguno de ustedes
que agarrara el billete antes de que la trampa cayera, es seguro
que cuando la trampa se cerrara muchos me harían pure,
porque saben que recibirían un fuerte golpe en los dedos.
No valdría la pena sufrir ese dolor y sus consecuencias
por un dólar. Solo un tonto, que piensa que puede ser
más rápido que la trampa y salirse del área
de peligro antes de que se cierre lo haría.
Sin embargo, la misma persona que no le aceptaría
a uno la apuesta de la trampa, puede tomarse el riesgo de ajustar
o aceptar una máquina en movimiento o quitar una pieza
antes de que la prensa se cierre, o colocar sus manos muy cerca
del punto de operación.
Hay un número de cosas muy importantes que
recordar cuando se trabaja alrededor de maquinarias de fuerza
mecánica. Nunca traten de aceptar o ajustar un equipo
mientras esté en movimiento. Si ustedes van a hacer
ajustes que requieren colocar sus manos u otras partes del cuerpo
en un área de peligro, asegúrense que esté
cortada la corriente o cerrada de manera que nadie pueda hacer
arrancar la máquina.
No quite una guarda a menos que la máquina
esté completamente quieta, con su tarjeta cerrada y
asegúrese que la guarda se reemplaza antes de volverla a
poner en movimiento. En muchas operaciones que requieren
alimentación manual cerca de un área de peligro, se
usan aparatos especiales, para mantener las manos lejos. Por
ejemplo, el que maneja una cierra, utiliza una estaca para
empujar y a los operadores de prensa a menudo se les suministran
pinzas o alicates de metal suave. Si el trabajo requiere tales
utensilios para el manejo del equipo, úsenlos. No esperen
que haya que recordarles que deben usarlos o se excusen alegando
que es incómodo o difícil de manejar. Como ustedes
son los que están en las máquinas mayor tiempo, son
ustedes los que deben conocer mas sus peculiaridades y como
tratarlas mejor que ninguno.
A veces se necesita una pareja de hombres para operar
una sola máquina. En la mayoría de los casos este
equipo esta controlado de tal manera que ambos hombres puedan
despejar antes de que la máquina arranque. Sin embargo,
hay veces que este no es el caso. En este caso asegúrense
que han entendido bien las señales. Este es un juego en
que la pérdida puede ser tan grande que es mejor entender
bien las señales desde la primera vez.
Por supuesto, cuando ustedes trabajan en una
máquina, sería carecer de todo buen sentido usar
ropa suelta, corbatas, anillos, u otros objetos que puedan ser
cogidos en una parte movible. Tenemos que admitir que no podemos
ganarle a una máquina. No le demos ninguna ventaja. Es un
juego en que se lleva todas las de perder y que la pérdida
constituirá una tragedia para nosotros y para quienes
dependen de nosotros
CHARLA N° 118
GUARDAS
Las guardas que se han instalado en nuestras
máquinas son para protegerlos a ustedes, siempre y cuando
se las mantenga en su sitio y ustedes operen las maquinas de
acuerdo con las instrucciones. Si lo hacen así
estarán protegidos contra accidentas en las
máquinas.
Hay dos maneras de burlarse de las guardas. Cada una de
ellas podrá derrotar al propósito para el cual
fueron diseñados. Pero si ustedes tratan de burlar las
guardas, recuerden que es su propio pellejo que están
engañando.
La primera, es no volver a colocar las guardas que se
han quitado para permitir reparaciones, aceitar o ajustar la
máquina.
La mejor guarda tanto ahora diseñada por un
ingeniero no tiene ningún valor fuera de la
máquina. Y la máquina cuyas guardas han sido
quitadas es para ustedes una amenaza tan mortal como si nunca
hubiera tenido guardas.
Si tienen que quitar una guarda, vuélvanla
siempre a colocar en su puesto tan pronto como el trabajo que
exigió quitarla se haya terminado. No opere una
máquina ni permita que otro la opere sin la
guarda.
No crean que hablo por el gusto de oírme a
mí mismo. En época de nuestros abuelos rara vez,
tenían guardas. Y en esa época el índice de
accidentes era terrible. Los inválidos, cojos, mancos,
tuertos eran una visión común en cada
fábrica. El sitio favorito para un empresario de pompas
fúnebres estaba justamente al pie de la puerta de las
fabricas.
Las guardas de las máquinas jugaron un gran papel
en detener esta carnicera, ¡la vida que ha de salvar la
guarda de su máquina es la suya!
Hay otra manera de burlarse de las guardas y poner su
vida en peligro mortal es la de tratar de imaginarse una manera
de ganarle a las guardas. Hay algunas guardas diseñadas de
manera que la máquina no puede ser operada a menos que sus
manos estén retiradas. Para alguno de estos aparatos
pueden hacerse inoperantes a fuerza de tretas.
Cada vez que veo un trabajador tratando de
engañar una guarda, pienso sobre los artificios que alguna
gente se inventa para cometer suicidio. Cualquier artificio para
burlar una guarda es igual.
Recuerden esto: Los interruptores de límite y
otros aparatos de seguridad se construyeron para evitar que
ustedes puedan matarse o lesionarse. Cuando traten de
engañarlos, cuando traten de burlarlos, no se están
ayudando a si mismos, si no que están ayudando a
destruirse a si mismos.
Y recuerden esto también. La
compañía no ha puesto las guardas y otros aparatos
de seguridad en sus máquinas porque quiera retardar su
trabajo. La compañía está tan interesada en
la eficiencia del trabajo como ustedes mismos, probablemente
más interesada.
Así que una guarda parece que retarda la
producción un poco (lo que probablemente no es cierto) La
guarda está allí para su beneficio, es un aparato
diseñado para evitar que ustedes pierdan sus dedos, sus
manos o su vida.
Use las guardas que se les suministran, siempre, y den
gracias a su buena suerte que trabajen en una época en que
se construyen guardas para su protección.
CHARLA N° 119
USO NO AUTORIZADO DE MAQUINAS
Deseo hablar hoy de algo que me preocupa bastante. Se
trata de la operación de máquinas sin
autorización. Quiero decir que alguien opere una
máquina o una pieza de equipo sin tener el debido permiso
y sin tener nada que ver con ello.
Claro que este no ha sido un problema en nuestro
departamento, pero quiero que todos conozcan mis sentimientos a
este respecto y quiero que entiendan cuan serio y peligroso puede
ser.
Les contaré una historia.
En cierta empresa importante el ayudante de un
tractorista era un joven vivaz y seguramente deseoso de aprender,
pero irresponsable y caprichoso. Cuando el tractor estaba parado,
gustaba de tomar los mandos y ponerse a moverlos en la forma en
que le veía hacer a su conductor. El jefe de seguridad le
llamó la atención y le prohibió
terminantemente hacer esto. Sin embargo, la advertencia
cayó en saco roto y el muchacho muy pronto olvidó
la prohibición que se le había impuesto. Era tan
fácil manejar el tractor según lo había
visto.
Pasaron algunos días y en alguna ocasión,
estando en pleno trabajo, el tractorista hizo un alto en su faena
y se arrimó a un sitio fresco para tomar agua, dejando el
motor en marcha para continuar su oficio. Pues nuestro inexperto
y travieso ayudante aprovecho para subirse a la máquina y
ponerla en movimiento y, naturalmente, se encontró con un
monstruo al cual fue incapaz de dominar, lanzándose por un
precipicio que lejos le produjo la muerte y el daño
completo del tractor. Una vida perdida y miles de dólares
deshechos en un momento de irreflexión.
Hay cientos de historias de este mismo estilo que
podríamos citar aquí en apoyo de mi
tesis.
En nuestro caso concreto el adiestramiento de un hombre
para operar una máquina toma semanas de instrucción
y práctica. Y se me hace muy duro creer que haya una
persona que pueda imaginarse que puede operar una máquina
sin tener las debidas instrucciones y el necesario entrenamiento.
Además de la posibilidad de lesionarse y aún de
perder la vida, está la probabilidad de dañar la
máquina y perjudicar a un compañero
trabajador.
La maquinaria y el equipo pertenecen a la
compañía, y ninguno tiene el privilegio de usar u
operar una máquina a menos que se le haya asignado
específicamente para hacerlo. No podemos tener ninguna
duda en cuanto a esto. Es peligroso para ustedes, y una
violación de los reglamentos de la empresa. En esto
necesito la ayuda de ustedes. Una violación a cualquiera
de los reglamentos afecta a todo nuestro departamento no tengamos
un accidente porque alguien se lesione, operando equipo sin el
permiso necesario.
CHARLA N° 120
EL ALMACENAMIENTO ADECUADO EVITA
ACCIDENTES
La charla de hoy quiero dedicarla al almacenamiento
adecuado de productos y materiales, pero desde el punto de vista
del bienestar personal. Quiero decir, el almacenamiento que
facilite nuestro desenvolvimiento y movimiento a través de
la planta sin causarnos lesiones o provocarnos accidentes. Cuando
almacenamos y colocamos materia les inadecuadamente estamos crean
do un peligro y aumentado grandemente la posibilidad de
lesionarnos porque más tarde o más temprano lo que
se ha hecho de forma incorrecta causará trastornos y
traerá malos resultados.
Debemos almacenar los materiales y productos pensando en
dos criterios: nuestro propio bienestar y la disposición
adecuada de los productos. Vale decir que debemos hacer las pilas
de materiales de acuerdo con el peso, el tamaño y el uso
que se le da al material, poniendo por ejemplo, los más
pesados abajo y los más livianos arriba. Los bultos o
paquetes más grandes abajo y los más
pequeños arriba. También tenemos que tener en
cuenta los materiales que usamos con mayor frecuencia porque
sería totalmente ilógico que los pusiéramos
debajo de los que usamos con menos frecuencia. Por lo tanto lo
que quede arriba será lo que usamos más
frecuentemente.
Después de haber clasificado los materiales o
paquetes según su peso, tamaño y uso tenemos que
colocarlos en sitios adecuados, lo que significa que no debemos
almacenarlos en los pasillos donde puedan interrumpir el paso de
personas o vehículos de la planta. Debe tenerse especial
cuidado en no colocarlos delante de puertas y salidas de
emergencia. En otras palabras, no podemos almacenar los
materiales en cualquier lugar ni donde primero se nos ocurra o
donde sea más fácil en ese momento.
Asimismo no debemos olvidar que es necesario identificar
los productos o materiales e indicar el grado de peligrosidad de
su contenido con letreros de precaución ya que esto
proporciona orden y más importante aún,
protección para nosotros mismos. Los productos o paquetes
que estén dañados se deben almacenar por separado,
nunca junto con los que están en buenas condiciones debido
a que de esta forma prevenimos que se dañen los
demás, que provoquen derrames y suciedad o que se
produzcan golpes y lesiones al caerse al suelo.
En algunas ocasiones tenemos que hacer pilas de
materiales diferentes o bultos y paquetes de distinta naturaleza
porque no existe suficiente material del mismo tipo para hacer
pilas separadas. En estos casos debemos escribir en la parte
exterior del bulto o paquete el nombre de lo que contiene para
así poder identificar el material fácilmente sin
necesidad de abrirlo. Además, de este modo se pueden
colocar los materiales convenientemente pensando en la frecuencia
con que se los usa.
Las pilas de materiales no deben ser muy altas por
varias razones. Entre ellas tenemos en primer lugar, que las
pilas altas no son prácticas porque no podemos alcanzar
los materiales que están arriba desde el suelo sino que
necesitamos subirnos en escaleras y esto hace el trabajo
más lento y complicado. En segundo lugar, porque las pilas
muy altas pueden inclinarse a un lado u otro debido a la poca
estabilidad lo que puede crear el peligro de derrumbe que, por
consiguiente, puede golpear y lesionar, a veces gravemente. Y en
tercer lugar porque si la pila se derrumba pueden dañarse
o romperse los materiales, cosa que implica pérdidas
materiales innecesarias que pueden llegar a ser
cuantiosas.
Cada uno de los puntos que hemos tratado contribuye al
bienestar general de todos los que trabajamos en esta planta ya
que al almacenar los productos y materiales adecuadamente estamos
previniendo accidentes. No es mucho el esfuerzo que se requiere
para ello, solamente es necesario realizar el trabajo
correctamente, según las normas establecidas y con un poco
de sentido común, así estaremos cumpliendo con
nuestro trabajo y además con la prevención de
accidentes.
CHARLA N° 121
CILINDROS DE GAS
COMPRIMIDO
Los cilindros de gas comprimido son difíciles de
manejar. Son pesados y lisos, por lo que se dificulta el
agarrarlos; tienen válvulas que pueden dañarse con
facilidad y, al estar llenos de gas bajo presión, pueden
causar muchos problemas si uno se suelta en el taller.
Ha habido muchos casos de lesiones, muertes
y daños a la propiedad causados por los cilindros de gas
comprimido al transformarse en proyectiles de alta velocidad
cuando escapa gas de los mismos, al romperse el cuello debido a
un manejo incorrecto.
Muchos son los casos conocidos en que el cilindro
destruye lo que encuentra a su paso llegando a lugares de la
fábrica como son las oficinas, laboratorios,
etc.
Si hay que mover un cilindro a una distancia corta lo
mejor será inclinarlo un poco y hacerlo rodar sobre la
base, pero nunca hay que arrastrarlo sobre el piso. Cualquier
manejo brusco que raspe o corte la superficie del cilindro puede
ser la causa de un accidente más adelante.
No hay que tratar de llevar un cilindro con las manos ni
aun cuando sea manejado por dos hombres. Hay que usar una
carretilla o algún dispositivo especial, tampoco
habrá que Ievantarlo con un electroimán o con una
eslinga.
Los cilindros deben ser tratados con suavidad. Tienen la
apariencia de ser sólidos y fuertes, pero un cilindro que
se deja caer sino se rompe y se transforma en cohete salvaje,
puede quedar con un área débil por la cual puede
escapar gas.
Los cilindros tienen que ser manejados y movidos de
forma que se eviten todos los golpes innecesarios.
Alguna vez alguien se tienta y usa los cilindros de gas
como rodillos o para sostener algo. Esto no debe hacerse nunca.
Los cilindros no deberán usarse para ninguna otra cosa que
para almacenar gas.
Siempre hay que pensar que cualquier cilindro de gas
está lleno. Algunas veces se piensa que está
vacío y que por lo tanto es seguro, pero hay que recordar
que puede haber quedado presión suficiente como para crear
problemas,
Algunos cilindros tienen tapones fusibles, es decir,
aberturas cerradas con un poco de metal que funde a bajas
temperaturas. En los cilindros de acetileno el punto de
fusión es de alrededor del punto de ebullición del
agua. Si en alguna oportunidad hay que derretir una
válvula congelada en uno de estos cilindros, habrá
que usar agua caliente, no hirviendo y siempre agua, nunca, bajo
ninguna circunstancia habrá que usar una llama para
calentar la válvula o el cilindro.
Si el cilindro tiene una pérdida hay que sacarlo
inmediatamente afuera, a algún lugar alejado de las llamas
o chispas e informarme a mí inmediatamente. Hay que
colocar Ietreros llamándole la atención a los
trabajadores para que no fumen en ese lugar. Generalmente es
mejor dejar la válvula un poco abierta a fin de que el gas
salga gradualmente.
Aun si un cilindro no tiene una pérdida
es mejor mantenerlo alejado de las chispas, metal fundido,
corrientes eléctricas o calor o llamas fuertes. Es correr
un riesgo muy grande y provocar los desastres, el dejar cilindros
de gases comprimidos cerca de una fuente de calor.
CHARLA Nº 122
COMO LEVANTAR PESOS
Claro que ustedes se imaginan ya de qué clases de
pesos se trata, hablemos pues de algo que todos tenemos que hacer
alguna vez en nuestro trabajo o en la casa: levantar cosas
pesadas. La gente siempre sufre lesiones al hacer esto. Pero no
hay ninguna razón válida para ello.
Si aprendemos a levantar apropiadamente, podemos
disminuir el número de lesiones en la espalda. Se nos ha
enseñado que debemos levantar con los músculos de
nuestras piernas y no con los de nuestra espalda. La razón
para esto es una simple cuestión de anatomía.
Podemos hacer una gran cantidad de trabajo, incluyendo el
levantamiento de cargas pesadas, todo lo que debemos hacer es
tomar en consideración la forma como está
constituido nuestro cuerpo, si deseamos realizar nuestra labor
sin lastimarnos, busquemos que es lo que sucede realmente cuando
no lesionamos la espalda levantando pesos excesivos o de manera a
equivocada.
Si ustedes se tocan la espalda, pueden sentir la curvada
columna de su espinazo. Este espinazo o columna vertebral
está construido por una gran cantidad de pequeños
huesos apilados uno sobre otro. Cada huesillo descansa sobre la
parte superior de un disco que es redondo y esponjoso como un
tacón de caucho y actúa como un amortiguador de
choques. Los huesos están asidos entre sí con
ligamentos y hay músculos adheridos a los huesos,
también, de manera que podamos moverlos.
Si un hombre trata de levantar demasiado o levanta en
forma equivocada, hará que haga mucho esfuerzo en su
espalda y puede hasta romper estos músculos o ligamentos.
Por ejemplo, si trata de levantar algo muy pesado para él,
puede estirar los músculos de su espalda. Si se dobla
sobre su cintura para levantar algo pesado, puede hacer mucho
esfuerzo sobre sus ligamentos en la parte baja de la
espalda.
Doblando sus rodillas, permite que los fuertes
músculos de las piernas reciban mayor parte del esfuerzo,
evitándose que todo este esfuerzo recaiga sobre los
ligamentos y músculos de su columna vertebral.
Se levanta así:
(Sr. Supervisor: Póngase en cuclillas, con
su espalda recta, luego párese levantando una caja, esta
caja deberá llevarse previamente si no hay una disponible
en el lugar de la charla).
Así los músculos de nuestras piernas
llevan casi todo el peso. Noten que he mantenido la espalda
recta. En esta forma el trabajo de levantar pesos recae sobre los
músculos de las piernas y no sobre los de la
espalda.
No existe ninguna regla que nos indique cuánto
peso puede uno levantar con seguridad. Tal vez una equivalencia a
nuestro propio peso, pero haciéndolo en forma correcta.
Variamos mucho de tamaño y fortaleza y, por tanto, la
cantidad que podamos levantar también varía.
Así, pues, nuestro mejor conocimiento es probar el peso
antes de levantarlo, entonces debemos conseguir ayuda o usar
algún método para reducir el peso que tengamos que
levantar cada vez. Es, realmente, una materia de
juicio.
Usando los músculos de nuestras piernas y
manteniendo nuestra espalda recta, podremos retirar el esfuerzo
de nuestras espaldas y probando el peso antes de levantarlo
podremos evitarnos el levantar cosas excesivamente pesadas para
nosotros.
El cuerpo humano es una pieza maravillosa de maquinaria.
Está diseñado para hacer cosas como levantar cosas
pesadas, pero como cualquiera otra maquinaria hay que manejarla
correctamente.
El levantamiento de pesos produce muchas lesiones: la
caída de las cosas que se tratan de levantar sobre
nuestros pies o los del vecino; pincharnos los dedos; lacerarnos
las manos; hernias y dolores en la espalda.
Recuérdenlo y háganlo calmadamente.
Coloquen sus pies para quedar bien equilibrados. Sitúense
de manera que levanten directamente hacia arriba con sus pies.
Doblen las piernas, mantengan la espalda recta. Prueben su
fuerza: si no se sienten bien echen una mirada de nuevo, puede
ser que su manera de agarrar o pararse es equivocada; tal vez sea
un trabajo para dos hombres. Usen sus cabezas y no
sufrirán lesiones. Los accidentes en el levantamiento de
pesos son completamente evitables.
CHARLA Nº 123
APILAMIENTO DE MATERIALES
Cuando ponemos materiales en una pila, la idea principal
es que permanezcan así hasta que necesitemos quitarlos. No
queremos que una pila o parte de ella se derrumben y caiga sobre
la cabeza o los pies de alguien.
Para asegurarnos que la pila se va a mantener
allí arrumada, hay cuatro puntos esenciales a
seguir:
1. La pila debe tener una base
segura.2. Debe tener una altura segura.
3. Los objetos deben estar aherrojados a
ella.4. Debe haber espacio para moverse alrededor
de la pila.
1. Una base segura. Una base segura para una pila
significa una superficie a nivel, plana y sólida. Si el
piso o el suelo donde se va a construir la pila no es
sólido, plano y a nivel, deben colocarse como bases una
estibación o soportes, o pilones de madera,
sólidamente apoyados y a nivel.
2. Una altura segura. La altura segura es aquella que no
llegue tan alto que permita que la pila quede inestable y se
incline o se voltee. Quiere decir también que sea lo
suficientemente baja, de manera que la pila no sobrecargue el
piso sobre el cual está colocada.
(Sr. Supervisor: obtenga los datos y diga cuál es
el límite de peso para los pisos de su almacén o
depósito y cuán altos pueden apilarse ciertos
materiales sin exceder ese límite).
Una altura segura quiere decir, además, que el
material no puede apilarse sino hasta cerca a las 18" de
cualquier cabeza de rociador (sprinkler) para no interferir la
acción de riego en caso de fuego.
3. Aherrojar los materiales. Aherrojar los objetos
dentro de la pila significa que se deben cruzar si es posible o
usar traviesas entre las capas del arrume, u otros medios para
evitar la inestabilidad dentro de la pila. Para adentrarnos en
este asunto tenemos que tomar los hechos y hablar sobre
diferentes clases de objetos.
Los sacos, por ejemplo, deben cruzarse y apilarse con
sus tocas hacia dentro de la pila. Cuando la pila alcance una
altura de un metro y medio, más o menos, es más
seguro poner las capas más altas en la parte de
atrás a ir elevándolas escalonadamente; al quitar
los sacos debe procederse en la forma contraria, quitando los de
las partes más altas y conservando la forma de la
pila.
Los cuñetes y barriles es más seguro
apilarlos sobre sus extremos que sobre los lados. Es conveniente
hacer una estibación sobre la parte alta de cada fila ates
de colocar otros encima. La pila debe construirse en forma
triangular, quedando cada cuñete o barril sobre el borde
de dos barriles o cuñetes debajo de él.
Los barriles vacíos pueden apilarse sobre sus
costados en forma de pirámide de cuatro lados. Deben
acuñarse en los extremos de cada fila de abajo.
Cuando las cajas no tienen una longitud exactamente dos
veces su ancho, es difícil cruzarlas. En este caso es
conveniente poner estibaciones entre las filas cada segundo o
tercera de ellas.
4. Espacio para moverse alrededor. Espacio para moverse
alrededor de la pila significa que los pasillos alrededor de la
pila deben ser lo suficientemente anchos para permitir que los
trabajadores lleguen hasta la pila o permitir que los carros
contra incendio u otro equipo puedan moverse alrededor de la pila
sin chocarse contra ella.
Este asunto del espacio alrededor de la pila
también quiere decir que no deben sobresalir estaciones o
polines de la pila, de manera que puedan causar tropezones a un
infortunado trabajador que se arriesgue por
allí.
Hay decenas de diferentes tamaños y formas de
cosas que deben apilarse, pero todo puede apilarse para que
permanezca, si recordamos los cuatro puntos de apilamiento
seguro:
– Una base segura.
– Una altura segura.
– Objetos aherrojados dentro de la pila.
– Espacio para moverse alrededor de la pila.
CHARLA Nº 124
DESCARGA DE VAGONES Y CARROS
Descargar un vagón cerrado, una plataforma o un
carro son todos trabajos muy parecidos. Se tiene que trabajar con
cartones, cajas y cosas de todos los tamaños, formas y
pesos. He aquí algunas reglas para descargar cualquiera de
ellas en forma segura.
Si están trabajando en un vagón cerrado,
la primera cosa, naturalmente, es abrir la puerta. Hay tres cosas
que debemos observar:
1. Asegúrese que la puerta esté
debidamente encarrilada en la parte alta, de manera que no pueda
caerse cuando ustedes vayan a abrirla.
2. Nunca pongan sus manos en la orilla delantera de la
puerta, en el extremo del carril o en el golpeador de la puerta.
Use las manijas y agarradores. Esto si no quiere que se le
atasquen los dedos.
3. Abrase la puerta unos cuantos centímetros y
obsérvese la carga para asegurarse que nada se está
apoyando sobre la puerta y está listo para caer sobre
usted y apártese de la abertura conforme rueda la puerta
hacia atrás.
Las plataformas y carros deben colocarse en escuadra al
muelle o descargadero. Las ruedas deben
acuñarse.
Si es un vagón cerrado o una plataforma lo que
está descargando colóquese siempre una plancha como
puesto sobre la abertura entre el muelle y el carro y para
subsanar las diferencias de nivel. Use una plancha apropiada y
asegúrese que quede fuertemente sujetada.
Cuando todo esté listo, la puerta abierta, la
plancha colocada, y asegurada, inspeccione la carga. Planee
cómo la va a sacar. Naturalmente que ustedes van a
trabajar de arriba abajo cuando hay varias hileras. Desde el
principio hasta el fin tenga cuidado con los durmientes. Quiero
decir las cosas que están paralelamente apoyadas por
alguna otra. Los objetos largos parados en un extremo son los
pernos. El durmiente puede no apoyarse en la cosa siguiente que
se está planeando mover, pero puede suceder que cuando
ustedes muevan el objeto siguiente, la pieza que está
soportando al durmiente se mueva también y pueda venirse
encima de uno.
Un paquete puede haber sido jalado parcialmente fuera
del arrume en tal forma que esté listo para caer. Algunas
cosas paradas sueltas pueden ser inestables y caerse con
cualquier sacudida o empujón.
Mantenga, pues, una gran vigilancia todo el tiempo.
Esté alerta contra cualquier cosa que se pueda convertir
en un engañabobos.
Levantar con seguridad, cargar y apilar son importantes,
pero sobre esto, hemos hablado (o hablaremos) en otra
ocasión.
CHARLA N° 125
MANEJO SEGURO DE CILINDROS DE GASES
COMPRIMIDOS
No hace mucho miraba un trabajo de construcción y
noté algo que me preocupó muchísimo. Vi un
cilindro de oxígeno y uno de hidrógeno conectados
con reguladores y mangueras a una antorcha de soldadura. Lo que
me hizo mirar dos veces el equipo fue el hecho de que estuviera
en una zona muy congestionada. Había albañiles
echando concreto, otros con carretillas, plomeros moviendo
tubería pesada y un montón de otras
actividades.
Me sentí incómodo estando tan cerca de
esos cilindros de gas. Tenía la sensación de que en
cualquier momento un accidente podría convertir esos
cilindros en bombas de propulsión a chorro.
Recordé algo que sucedió, de
carácter muy grave. Un tanque de acetileno fue chocado
accidentalmente, golpeó con otro y se rompió la
válvula. A causa del escape de gas, el tanque voló
como un avión a chorro. Pasó a través de una
puerta, golpeó a un carro que se encontraba a unos 50
metros los atravesó por el baúl y salió por
el parabrisas sin perder velocidad, pasó a través
de la pared de una casa a unos 150 metros de donde arrancó
y finalmente paró. Afortunadamente no había nadie
en su camino. Hubiera matado a alguien si le hubiera
golpeado.
Claro que ustedes no tienen porque golpear y arrancar
una válvula y causar que salga en barrena rompiendo
paredes para sufrir un accidente. Todo lo que tienen que hacer es
dejar que un cilindro se ruede sobre una de sus espinillas para
que queden fuera del trabajo, con una pierna partida, por un par
de meses. Como quiera que lo miren los cilindros de gas son
artículos marrulleros para manejar y almacenar. Hay que
estar alertas cada segundo. Es posible que ustedes conozcan las
normas para el manejo de cilindros en forma segura, pero una
corta revisión nunca sobra. Veamos pues:
1. Maneje cada cilindro de gas como si estuviera lleno.
"Yo no sabía que estaba cargado" es una excusa muy pobre,
como lo es para un accidente de un revolver.
2. Nunca maneje cilindros con guantes que tengan aceites
o grasas.
CHARLA Nº 126
ESPECIALIDAD DE LEVANTAMIENTOS
(Sr. Supervisor: para mantener más interesados a
los hombres consiga un saco lleno, una caja, un tubo largo, una
hoja de metal, una hoja de vidrio, para demostrar como los
levanta mientras habla).
- SACOS
El material en sacos puede levantarse fácilmente
si se utiliza el antiguo un dos. Un agarren las esquinas
opuestas, enderecen su espalda y eleven su peso directamente con
sus piernas, descansándolo contra sus piernas y el
vientre, tan pronto se enderecen. Dos: Balanceen el saco hacia
arriba al hombro, de manera que descanse sobre el costado
inclínense hacia adelante, permitiendo que la espalda tome
parte del peso y abracen el peso poniendo sus manos en la
cadera.
Para dejar el saco, hagan lo contrario. Bájenlo a
las piernas, luego dóblenlas y bajen el peso.
- CARTONES
Agarren los cartones y cajas diagonalmente de las
esquinas opuestas. Inclínense hacia adelante y levanten ya
saben con que.
- TUBOS Y BARRAS
El material largo necesita un hombre en cada extremo.
Cuando se está equilibrando un objeto largo, se puede
formar una verdadera confusión con los extremos
oscilantes. Las cosas largas son un transporte de dos personas y
ambos hombres deben usar el hombro del mismo lado. Si ambos
arrancan con el pie izquierdo, no tendrán necesidad de
ejecutar una danza para ponerse el paso.
- HOJAS DE METAL
Para hojas de metal usen guantes de cuero o con
inserciones de metal. Cuando haya bultos grandes de hojas
metálicas, usen un carro o una mulita para levantar y
transportar.
- VIDRIO
Puede suceder que algunos hombres hayan recogido un
vidrio roto o en malas condiciones sin lesionarse, pero la
mayoría se corta gravemente al manejarlo mal. Empecemos
con sus manos, que deben estar cubiertas con guantes o
protectores de cuero. Protéjase sus antebrazos y
muñecas con mangas largas de cuero. Úsense mandiles
o delantales de cuero o lona y guardas para proteger sus pies y
sus tobillos. Lleve una sola hoja cada vez, a menos que sean
pequeñas.
Levanten cada hoja cuidadosamente con la palma hacia
fuera. Hay que colocarla hacia afuera de los brazos, donde los
pedazos puedan caer si algo llega a romperse. Mantenga un buen
agarre en la parte alta de la hoja con la otra mano para darle
estabilidad.
Deje el vidrio en planchas para los expertos. Dos
hombres que sepan lo que están haciendo pueden mover
planchas pesadas con seguridad si usan eslingas de lonas y
mantienen la cabeza, el cuello y los hombros entre ellos y el
vidrio.
Es conveniente estar despierto en el trabajo aunque las
cosas que se estén transportando parezcan livianas. Puede
ser que el peso sea ligero, pero si se trata de levantar cuando
está torcido, es casi seguro que pronto se encontrara
sentado en una mecedora.
CHARLA N° 127
LO SABÍA
PERO………….SE LE
OLVIDÓ
QUE CLASE DE SALVAVIDAS se podría inventar para
proteger a las personas que se olvidan de las cosas? Ocurren
tantos accidentes a personas que conocen como trabajar, pero que
olvidan el entrenamiento de seguridad! No podemos olvidar la
seguridad ni tan siquiera un momento pues es precisamente en un
momento que pasa un accidente. Los archivos están llenos
de casos de accidentes que ocurrieron a los que
olvidaron.
Un trabajador llegó a su casa y el empezó
a contar a su esposa e hijos sobre la reunión de seguridad
en que había participado esa tarde, en la que había
aprendido la forma correcta de levantar objetos pesados. El le
explicó a la familia como los músculos de las
piernas y los muslos, deben hacer el esfuerzo y no los
músculos de la espalda, que la naturaleza no formó
para que hicieran grandes esfuerzos. Unos días mas tarde,
este mismo trabajador llegó a la casa con un dolor en la
espalda y no le quedó más remedio que confesar que
había levantado una carga en forma incorrecta. La
consecuencia fue que tuvo que estar en cama varios días y
la esposa le tuvo que explicar a los vecinos y compañeros
de trabajo, que él sabía como hacerlo pero que
se le había olvidado.
En otro caso un químico, con muchos años
de experiencia práctica, encendió un fósforo
para mirar dentro de un tanque de ácido sulfúrico.
En el momento en que lo hacía se dio cuenta del peligro e
instintivamente cerró los ojos y se tapó la cara
con las manos, justamente en el momento en que una llamarada le
daba en la cara. El accidente pudo haberle causado la
pérdida de la visión. El informe del accidente,
entre otras cosas decía "Al olvidarse del
riesgo……"
Veamos otro caso: Este individuo estaba limpiando el
patio, hizo una pila con todas las hojas secas y vertió un
vaso de gasolina sobre ellas para quemarlas; como las hojas
estaban húmedas no se prendieron y entonces él se
acercó y probó con el encendedor – Pufff.
Cuando el médico terminó de vendarle la cara solo
quedó un pequeño agujerito para que pudiera ver.
Sin embargo, esta persona tuvo la suerte de no perder la
visión. Desde luego que él conocía el
peligro!, pero se le olvidó.
Este caso que vamos a relatar es extremadamente
común, se trata de dejar objetos en las escaleras,
quién no sabe que es peligroso? El informe
dice:
"Un asistente colocó una barra sobre el
peldaño de la escalera en la que trabajaba. La barra
sobresalía unos 45 cm. Al poco rato se bajó de la
escalera y, cuando subió de nuevo, el extremo de la barra
lo golpeó en la cara rompiéndole los espejuelos y
lesionándole un ojo. Y tenemos otro caso de "él
lo sabía pero se le olvidó".
Cuantos casos y cuantas muertes hay que achacarle
anualmente al olvido?
Despertémonos, más vale que usemos nuestra
agudeza en todo momento y recordemos lo aprendido en el
entrenamiento. Ese asunto del olvido no conduce a nada bueno, el
único resguardo que se puede usar contra el olvido es la
vigilancia, una mente alerta que actúe como
guardián de nuestra seguridad y nuestras vidas.
Una mente aguzada, en un cuerpo vigoroso y saludable, es
nuestra mejor defensa. Mantengamos nuestro cuerpo en buenas
condiciones y nuestra mente alerta de manera que nunca sea
necesario decir : "El lo sabía pero se le
olvidó"
CHARLA N° 132
ROPAS PROTECTORAS
En cada una de estas charlas de 5 minutos hay
generalmente un aspecto relacionado con la prevención de
accidentes que trato de recalcarles. Si logramos implantar en
nuestra mente algunas de estas ideas y dejar que influyan sobre
nuestro modo de actuar, reduciremos a un mínimo, donde
trabajemos, el número de lesiones
incapacitantes.
Hoy quiero hablarles sobre la ropa protectora y los
equipos que se diseñan para nuestro uso personal.
Empezaré por decirles que el no usarlos, o el abusar de
ellos, es una de las razones por la que los trabajadores siguen
sufriendo toda clase de lesiones incapacitantes que
podrían evitarse sencillamente siguiendo unas reglas
básicas.
Aunque no podamos decir que estos accidentes son debido
totalmente al descuido, esta afirmación se acerca mucho a
la realidad. A veces, sin embargo, son consecuencia directa de la
ignorancia. Es una forma de descuido que condenaríamos
seguramente si lo viéramos en cualquier persona, pero no
lo hacemos cuando lo vemos en nosotros mismos.
Si cualquiera de nosotros tuviera que salir a caminar en
medio de una tormenta de una noche fría de invierno, nos
abrigaríamos con la ropa más apropiada. Nos
prepararíamos para esa situación. Aquí, en
nuestros áreas, diariamente nos enfrentamos a muchos
peligros y sin embargo no usamos la ropa adecuada para
protegernos. Todos ustedes conocen su trabajo y saben lo que
necesitan para protegerse en el desempeño del mismo. Todos
saben que en trabajos donde hay partículas voladoras y
líquidos peligrosos es necesario protegerse con anteojos
protectores. Donde se manejan objetos pesados es necesario llevar
zapatos con punteras de acero. Un soldador eléctrico tiene
que llevar un casco equipado con un vidrio oscuro para proteger
sus ojos de las luces cegadoras y de las chispas de los arcos
eléctricos, si quiere evitar las lesiones en las que
incurren los trabajadores que no llevan la protección
necesaria.
Nuestra ropa protectora puede ser simplemente guantes
para proteger nuestras manos, botas de goma, un traje de amianto,
un cinturón de seguridad o cualquier otro de los muchos
equipos de protección que existen, depende de la
necesidad.
Supongamos que hiciéramos un inventario de todas
las protecciones que habitualmente llevan los trabajadores que
realmente las necesitan. ¿Cuántos de ustedes
pensarían que esa ropa protectora es peligrosa?
Seguramente ninguno, y en cambio muchos de ustedes actúan
como si así lo fuera, y trabajan sin valerse de la
protección que ofrecen.
Yo no estoy aquí representando a un fabricante de
ropa de protección o tratando de venderles nada. Estoy
aquí simplemente para decirles que paga el estar
preparados. Paga porque las estadísticas demuestran que
los trabajadores que llevan habitualmente protección
sufren muchas menos lesiones que los que no la llevan.
Sabemos que cuando una regla dicta que en un trabajo se
lleven anteojos de protección, ese requerimiento es para
nuestra protección y para la protección del
departamento. En cambio nos olvidamos muchas veces y dejamos los
anteojos en el armario o descansando sobre nuestra frente y no
sobre nuestros ojos.
El hecho de que no les insista continuamente en que los
usen, no es una señal de que no se los aconsejo.
Simplemente lo hago porque no quiero estar encima de ustedes
continuamente y quiero dejarles a su propia iniciativa.
Nosotros—los supervisores—asumimos, muchas veces,
erróneamente, que el interés en su
protección les conducirá a protegerse con los
equipos que necesitan.
Quiero pedirles que cada uno de ustedes piense
detenidamente sobre los riesgos a que se exponen diariamente. A
continuación repasen los artículos de que disponen
y vean si no hay algo, alguna ropa, algún equipo
protector, que podría estar usando para protegerse contra
ese peligro.
Y para terminar, y como resumen, quiero que recuerden
siempre este eslogan: Usen la ropa protectora— no abusen de
ella. Puede salvarles un ojo, un pie o incluso la
vida.
CHARLA N° 133
PROTECCIÓN PERSONAL
Siempre se ha dicho que el ser humano aprende "a
golpes". Los niños aprenden a caminar cayéndose y
golpeándose. Un país aprende a dictar buenas leyes
después que ha tenido que vivir bajo males. El trabajador
nuevo y sin experiencia, aprende su trabajo cometiendo
errores.
Lo dicho hasta ahora se aplica también al equipo
de protección. Detrás de cada equipo protector que
se use en esta mina hay una historia de sangre, dolor y muerte
— que quizás no sucedió aquí, pero
sucedió en alguna otra parte.
Tomemos la protección de la vista. Durante varios
siglos los trabajadores de cientos de oficios diferentes
sufrieron lesiones en los ojos. Miles de trabajadores perdieron
sus ojos a causa de esas lesiones. Estos hombres capaces y lo
suficientemente fuertes para trabajar, se transformaron en
mendigos como consecuencia de los accidentes de trabajo. Los
hombres trataron de aprender a realizar su trabajo con la mayor
seguridad posible, pero sin embargo las lesiones en los ojos
continuaban sucediendo.
A lo largo de varias décadas al comienzo de la
era industrial, muchos trabajadores perdieron su vista, hasta que
finalmente alguien decidió inventar los anteojos
protectores pare evitar estas lesiones. Es posible que algunos de
ustedes se hayan reído alguna vez de este inventor, pero a
través de los años se ha podido comprobar que Ios
trabajadores que usan protección ocular sufren muchos
menos accidentes en los ojos que aquéllos que no la usan.
La idea de proteger la vista se ha ido arraigando más v
más y hoy día existe una gran variedad de
protectores pare la vista, cada uno diseñado para prevenir
lesiones en determinados trabajos.
El ser humano aprende muy lentamente, pero a
través de los siglos ha aprendido mucho y nosotros tenemos
la ventaja de poder aprender de los errores cometidos por los
demás y no tener que aprender de los nuestros.
No tenemos que esperar a que un compañero pierda
la vista; demasiados la han perdido ya para esperar un ejemplo
más que nos demuestre la necesidad de protección.
Nosotros podemos beneficiarnos sin tener que pagar el precio de
sufrimientos o aun de ceguera.
Lo que hemos dicho de protección para la vista se
aplica también los zapatos de seguridad y a los cascos.
Miles y miles de pies machucados y cráneos destrozados, ha
sido el precio pagado por la raza humana para aprender la
necesidad de protegerse, tanto la cabeza como los pies y para
conocer los distintos dispositivos que brindan ese tipo de
protección. El precio pagado ha sido bastante
alto—lo que nosotros tenemos que hacer es recibir los
beneficios.
Lo que se ha dicho sobre los protectores para los ojos,
Ia cabeza y los pies se aplica a cualquier otra protección
personal que deba llevarse o usarse. Cada uno ha sido
diseñado por personas que han estudiado el problema y que
han visto cómo muchos trabajadores han muerto, se han
mutilado o lisiado en accidentes. Estos hombres se han propuesto
detener la pérdida de vidas humanas y de la salud. Ellos
se han preocupado por probar los dispositivos y mejorarlos.
Tuvieron que mejorar los equipos de seguridad cuando alguien
pagó con su sangre y sus sufrimientos.
Cuando se les indique que deben usar equipo de
protección personal, en lugar de quejarse, agradezcan que
les ha tocado vivir en un período industrial en que no se
escatiman esfuerzos para proteger la vida de los trabajadores, y
que trabajan en una operación en la que la gerencia
pretende por todos los medios posibles que ustedes usen siempre
la protección personal adecuada.
CHARLA N° 134
PROTECCIÓN PARA LA CABEZA
El otro día me llamó la atención la
frase de un anuncio que me ha servido de inspiración para
la charla de hoy. La frase decía así: 'No se le
ocurra perder su cabeza". Me puse entonces a pensar que, en
realidad, con ciertas y determinadas limitaciones, casi todo el
mundo puede trabajar o ser útil de alguna forma a pesar de
que le falte un dedo, una mano o una pierna. Pero sin cabeza,
nadie puede vivir. Es obvio entonces que la protección de
esta parte de nuestro cuerpo es un tema de mucha importancia, por
lo que he decidido tratarlo hoy.
Uno de los equipos de protección personal
más importantes en la industria, es sin lugar a dudas el
casco protector. Estoy seguro que muchos de ustedes han
oído, y quizás hasta presenciado, algún caso
donde un trabajador ha estado a punto de perder la vida, pero que
gracias al casco protector se ha salvado.
En esta charla vamos a hablar del casco en sí, de
los peligros que pueden dañarlo y de su cuidado y
mantenimiento, de lo cual depende que su función pueda
cumplirse cabalmente llegado el caso. La vida útil del
casco depende no sólo de las condiciones normales que nos
rodean en nuestro ambiente de trabajo, sino también de
otros factores, como pueden ser el calor, el frío,
productos químicos, rayos ultravioletas, etc.
El casco, como lo sabe la mayoría de ustedes,
consiste básicamente de dos componentes, la
coraza—que es el casco sólido—y la
suspensión interior, formada por la banda ajustable y la
copa de cocos. (Se recomienda que el supervisor tenga en sus
manos un casco durante la charla para que los trabajadores
entiendan mejor lo que explica). Ambos componentes son de mucha
importancia, no nos pueden proteger el uno sin el otro. Ambos
necesitan una inspección y un mantenimiento
regular.
El casco, como ven, es rígido y fuerte. Esa
rigidez, además de aminorar la fuerza de los impactos,
hace que cualquier objeto punzante que caiga contra la coraza,
sea desviado.
Una cosa de la que tenemos que cuidarnos, es de las
rajaduras o arañazos en el casco, por muy pequeños
que sean. Si ustedes observan algunas de estas señales en
su casco es imperativo que lo reemplacen por otro nuevo. Por
experiencia se sabe que estas pequeñas rajaduras o
arañazos son el principio de rajaduras mayores. Si el
casco ha sufrido el impacto de cualquier objeto ya sea cuando lo
estábamos usando o cuando no, debe ser inspeccionado antes
de volver a usarlo.
Hablemos ahora del sistema de suspensión. Esta
banda ajustable interior que les muestro es tan importante como
la cubierta exterior del casco, o sea la coraza. Los beneficios
son obvios, ya que el casco se mantiene a la distancia adecuada
gracias al ajuste de esta banda. Todos sabemos lo importante que
es este espacio entre el casco y nuestra cabeza. De esta forma,
el aire puede flotar en ese espacio.
El propósito principal de las correas de la copa
es crear espacio suficiente pare absorber la energía de un
golpe. Pero para ello es imperativo que las correas se mantengan
en sus condiciones óptimas.
Más de una vez he tenido que llamar la
atención a alguno de ustedes, porque he notado que tienen
la mala costumbre de colocar guantes, cajetillas de cigarrillos,
u otros objetos en la parte interior del casco. Esto es una
práctica peligrosa ya que se anula el espacio de
absorción de energía de los golpes y no
podrá protegernos en caso de un accidente.
Otra cosa, no pinten nunca el exterior ni el interior
del casco, ni siquiera pare poner sus iniciales, todas las
pinturas contienen ciertos solventes que pueden ser destructivos
pare el material de que está hecho el casco. Si quieren
identificar sus cascos, pueden usar alguna cinta adhesiva pegada
a alguno de los costados del casco.
Para terminar, quiero pedirles a todos que
periódicamente, revisen sus cascos, la parte interior y la
parte exterior, no sean descuidados con este equipo. Todos
tenemos varios órganos que pueden ser remplazados en
nuestro cuerpo, tenemos varios dedos, dos piernas, dos brazos,
pero sólo tenemos una cabeza. Asegurémonos, pues,
de que la cuidamos, sin ella no somos nada.
CHARLA N° 135
¿OIRÁ USTED TAN BIEN
MAÑANA?
"¿ Cómo están María y los
niños?", usted pregunta a un compañero de trabajo
durante la hora del almuerzo. Su amigo le mira con ojos
vacíos, se rasca la cabeza y contesta: "Bueno, dicen que
va a llover esta tarde". Ahora el que tiene un vacío en la
mirada es usted. Se acaba de enterar de que su amigo no oye bien.
¿Es esto el resultado de exposición prolongada a
ruido en el trabajo? Usted piensa acerca del ruido que le rodea
constantemente.
Estemos conscientes de ello o no, el ruido nos rodea
casi constantemente. Este problema no es nuevo. La pérdida
de audición industrial fue diagnosticada ya entre los
caldereros ingleses en el año 1830. Hoy día,
millones de trabajadores en todos los países del mundo
tienen problemas de audición que están directamente
relacionados con el ruido ocupacional.
Creo que todos debemos estar conscientes de los
problemas que el ruido puede crear en nuestra salud. Los
problemas crónicos más comunes incluyen: dolores de
cabeza, presión alta de la sangre, aumento de ansiedad,
mala vista y pérdida de la audición. Pero una
resonancia de alta frecuencia también puede dañar
los sistemas cardiovasculares, respiratorio y nervioso
central.
El ruido además contribuye a una baja moral,
pérdida de la concentración, pérdida de
productividad, ausentismo e insatisfacción con el trabajo
que se realiza diariamente.
Muchos expertos en ruido nos dicen que los seres humanos
nos acostumbramos fácilmente al ruido; y eso es un grave
problema. En verdad, nos podemos adaptar a un ruido alto o
molesto, pero eso no significa que no nos seguirá haciendo
daño. Las máquinas y equipos con los que trabajamos
todos los días y que producen sonidos fuertes y molestos
pueden llegar a causarnos problemas en la
audición.
Como ustedes comprenderán, yo no tengo el tiempo
para ir constantemente recordando a cada uno de ustedes que deben
ponerse la protección auditiva necesaria. Más de
una vez, en nuestras charlas hemos comentado sobre la necesidad
de trabajar siempre con protección auditiva. Esta
recomendación no la damos sólo por darla, sino
porque la gerencia de nuestra empresa está interesada en
que los trabajos que realizan no sean la causa de que
algún día pierdan su audición.
Los dispositivos de protección auditiva son
esenciales sobre todo en áreas de ruidos muy altos. A
veces algunos de ustedes me han comentado que esos dispositivos
les producen incomodidad; y en esos casos yo he hecho lo posible
por tratar de solucionar su problema. Si alguna vez ustedes
utilizan un tapón auditivo, por ejemplo, que no les
disminuye el ruido al que están expuestos o que les
produce molestias, comuníquenmelo por favor lo antes
posible para que solucione el problema.
Y en aquellas ocasiones en que deban comunicar
algún mensaje a uno de sus compañeros y éste
no les oiga porque tiene su protección auditiva puesta,
háganle señas para que vaya con ustedes a un
área retirada donde puedan comunicarle el mensaje
después de haberse quitado la
protección.
Y todos ustedes tienen la responsabilidad de revisar
regularmente su equipo de protección auditiva. La
inspección regular es muy importante. Si un dispositivo no
protege debidamente, puede a la larga producirles un problema,
sin ustedes sospechar que su audición se está
deteriorando.
A continuación quiero recordarles brevemente 3
cosas más que podemos hacer para reducir el ruido que nos
rodea:
· Inspeccionar todas las máquinas
regularmente, y arreglar aquellos equipos que funcionan con
demasiado ruido.
· Realizar los trabajos ruidosos cuando haya poca
gente en las cercanías.
· Apagar las máquinas ruidosas cuando no
se las esté operando.
Debemos siempre recordar que el ruido nos envuelve
constantemente. Y no sólo aquí en nuestro trabajo,
sino también en nuestros hogares y en la calle. Muchas
veces podemos oír tan bien la televisión y la radio
si bajamos un poco el volumen. Incluso algunos de los artefactos
caseros que utilizamos pueden funcionar mejor y hacer menos ruido
si los mantenemos en perfectas condiciones de funcionamiento. Y
también podemos decir a nuestros niños que no se
comuniquen gritándose de un extremo a otro de la casa. "Si
el ruido en cualquier lugar puede ser infernal, el silencio
también puede ser oro", como lo dijo alguien en una
ocasión.
Como les he dicho antes, uno de los objetivos de nuestra
empresa es mantener nuestras operaciones al nivel más bajo
de ruido; pero esto no lo podemos lograr, como ustedes lo saben,
en todas las ocasiones. Por esa razón, les recomiendo que
utilicen siempre su protección auditiva, sobre todo en
aquellas ocasiones en que de lo contrario su audición
podría dañarse. Seria muy triste que llegara un
día en que ni siquiera pudiéramos oír las
risas de nuestros niños.
CHARLA N° 136
LOS OJOS
Hoy he decidido tratar el tema de uno de los
órganos más valiosos y maravillosos de nuestro
cuerpo humano: los ojos.
La vista es uno de los sentidos más necesarios
para nuestro desempeño en la vida. Si nos
pusiéramos a hablar de todas las ventajas que tenemos con
el don de la vista, sería interminable. Basta sólo
con cerrar los ojos y pensar que tenemos que vivir toda la vida
en ese estado de oscuridad, para comprender de inmediato su
utilidad incalculable. (El supervisor puede pedir a los
presentes que cierren los ojos por unos segundos). Traten
ver cuántas cosas podrán hacer y a cuántos
lugares podrían ir en esas condiciones. Creo que esa
prueba es suficiente demostración del valor incalculable
de nuestros ojos.
Ahora bien, ¿cuidamos suficientemente y
protegemos totalmente a nuestros ojos?
La naturaleza nos ha dotado con diferentes defensas para
proteger nuestros ojos:
· Pestañas. Se ocupan de capturar
el polvo o las pequeñas partículas para que
éstas no lleguen a nuestros ojos;
· Cejas. Sirven como un cojín
protector para detener, entre otras cosas, el sudor para que no
llegue a los ojos;
· Lágrimas. Tienen la
función de lubricar los ojos y limpiarlos de cualquier
partícula extraña que llegue hasta nuestros ojos;
y,
· Pupilas. Se contraen para proteger los
ojos de las luces intensas.
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