Una visión teórica del desarrollo sociocultural comunitario desde la perspectiva local
- Resumen
- Introducción
- Un
acercamiento al origen y desarrollo de las
comunidades - Enfoques para la definición de
Comunidad - Desarrollo comunitario. Definición e
importancia - Conclusiones
- Bibliografía
Resumen
El presente trabajo "Una visión
teórica del desarrollo sociocultural comunitario desde la
perspectiva local" pretende acercarnos al papel
protagónico de los actores sociales en interacción
continua con las instituciones culturales, económicas y
sociales de los territorio en función del desarrollo de
las comunidades.
Aparecen numerosas definiciones de comunidad, cada una
de las cuales centran más su atención o hace mayor
o menor énfasis en determinados aspectos, en dependencia
del objetivo fundamental del estudio y de la disciplina desde la
cual se realiza. Se destaca el rol de los agentes socializadores,
quienes tienen la responsabilidad fortalecer el desarrollo
comunitario, dirigido a garantizar el auto-desarrollo
comunitario.
El principal aporte del mismo es que constituye una
valiosa herramienta teórica para potenciar los
conocimientos encaminados a fomentar la autogestión de la
comunidad en la solución de sus necesidades a partir de
conceptos y enfoques propios del trabajo comunitario.
REVIEW
The current work "Theoretical vision of sociocultural
community development based on local perspectives" is intended to
show us the main role of social makers related to the cultural,
economical and social institutions of those territories which are
involved in the community development.
Many are the definitions given to the word "community"
each one emphasizes some specific aspects taking into account the
main object of study that the science involves.
The social agents should empower the community self
development in order to safe the community self
development.
This auto-development becomes a great theoretical tool
to empower the wisdom which is directed to encourage the
auto-managing of the community in solving its daily needs based
on concepts and approaches derived out of daily community
work.
Introducción
El Desarrollo social cada día se está
convirtiendo en un factor de suma trascendencia en la
conformación de las nuevas realidades que nos depara el
siglo XXI.
El hombre como ser social se reconoce a sí mismo,
es integrante de una colectividad en la cual obtiene
experiencias, conocimientos, desarrolla un lenguaje,
hábitos, normas de conducta, relaciones sociales, a la vez
cada individuo aporta o contribuye al desarrollo social como algo
recíproco. Entre estos se produce un proceso
dialéctico en el que se establece la conciencia de
pertenencia, la identificación con el medio donde se
desenvuelve y ejerce un papel
activo transformándolo; por lo que resulta
portador y trasmisor de valores en la formación y
sucesión de varias generaciones.
En la convivencia las personas intercambian, comparten y
contrastan un sistema de normas, por el hecho de ser parte activa
de la colectividad a la que pertenecen. En esto actúan
instituciones, organizaciones y otros elementos
superestructurales y sociales que intervienen en la colectividad,
la familia, la comunidad, los grupos de contactos más
cercanos que proporcionan los vínculos
interpersonales.
En la actualidad se presta una importante
atención a la cuestión del desarrollo en algunas
áreas o regiones del mundo, sobre la base de la influencia
que ejerce la globalización y sus efectos desfavorables en
comunidades, un tanto al margen del camino adecuado para
introducir cambios para el progreso y el bienestar, las cuales
presentan un desarrollo que está caracterizado por
estigmatización y retroceso, lo cual ha producido un
deterioro inmenso de los recursos; de hecho los Modelos de
Crecimiento Endónenos afirman que en la nueva
economía global solo pueden competir los territorios que
se adapten a las transformaciones de la estructura productiva
mundial con base en el crecimiento.
Otro elemento a medir en este aspecto, es la
sostenibilidad ambiental dado en que las perspectivas de
desarrollo de cada territorio están condicionadas por el
medio ambiente que le rodea, visto no solo como dotación
de recursos naturales, niveles de contaminación, sino como
todo el entramado social y cultural en que el
territorio
se erige.
En Cuba la aplicación de este concepto de
Desarrollo Local tiene características diferentes. A lo
largo de todo el país y en cada uno de los territorios
existe un sólido desarrollo institucional en materia
comunitaria, se ha avanzado, además en términos de
infraestructura, en la creación de un fuerte potencial
humano, así como en los niveles de
sostenibilidad.
El presente trabajo: "El desarrollo sociocultural
comunitario desde la perspectiva local" es fruto del
interés por potenciar el desarrollo social sostenible en
las comunidades de nuestro territorio en función de
alcanzar una mayor calidad de vida de nuestra población.
Por tanto pretendemos "Valorar el papel de la comunidad para
lograr desarrollo con la participación y el protagonismo
de los actores sociales".
Un acercamiento
al origen y desarrollo de las comunidades
Si vamos a hablar de las comunidades nos percatamos que
su origen es tan antiguo como el hombre mismo, e incluso
más, si tenemos en cuenta las comunidades de animales,
algunas tan organizadas y que funcionan a la perfección,
como la de las abejas, y otras más cercanas a nuestros
antepasados, como las manadas de monos.
El hombre como ser social surge precisamente,
gracias a esa vida en común, que facilita el desarrollo
conjunto para la satisfacción de las necesidades, en la
cual se crean las condiciones para que aparezcan las primeras
formas de trabajo y de comunicación humana, que como
señalara Engels, fueron las que le dieron origen al
hombre: "Primero el trabajo, luego y con él la palabra
articulada, fueron los estímulos principales bajo cuya
influencia el cerebro del mono se fue transformando gradualmente
en cerebro humano…"[1]
El vínculo comunidad-desarrollo humano es tan
fuerte, que a medida que se daban pasos en la formación
del hombre, se iba desarrollando también la vida en
común. En este sentido Engels escribió: "El
desarrollo del trabajo, al multiplicar los casos de ayuda mutua y
de actividad conjunta, y al mostrar así las ventajas de
esta actividad conjunta para cada individuo, tenía que
contribuir forzosamente a agrupar aún más a los
miembros de la sociedad" [2]
Puede decirse entonces que el vínculo
comunidad- desarrollo humano tiene un carácter
genético. Sin embargo, las relaciones del hombre con la
comunidad no se han mantenido estables a lo largo de la historia
de la humanidad, ni desde el punto de vista popular -del hombre
mismo-, ni político, ni científico, aunque estos
elementos se encuentran estrechamente vinculados.
La relación hombre-comunidad ha tenido
sus etapas. Sin pretender una periodicidad rigurosa, en nuestra
opinión vienen desde la comunidad primitiva, donde todo
ocurría, se trataba y se resolvía a nivel de
comunidad; luego pasó por una fase de desinterés
por las comunidades, que se produjo fundamentalmente con el
desarrollo del Estado y de las naciones; esto tendió a
disolver las comunidades en el todo, contribuyendo a la
eliminación de costumbres, religiones, mitos, tradiciones,
lenguas y dialectos, con la imposición de un idioma
oficial, una educación estatal, etc., lo cual tuvo su fase
más aguda en la conquista de América, donde fueron
destruidas la inmensa mayoría de las comunidades de
nuestros países ; ello implicó una serie de
pérdidas irreparables.
El lugar de la comunidad en la vida del hombre
está muy ligado al desarrollo de las fuerzas productivas y
las relaciones de producción, y se manifiesta
especialmente en las formas de propiedad. La propiedad
comunitaria o territorial, predominante en los primeros estadios
del desarrollo humano, fue desapareciendo a medida que se
consolidaba la propiedad privada. En este sentido Marx
señaló:
"La segunda forma (de propiedad) está
representada por la antigua forma de propiedad comunal y estatal,
que brota como resultado de la fusión de diversas tribus
para formar una ciudad, mediante acuerdo voluntario o por
conquista, y en la que sigue existiendo la esclavitud. Junto a la
propiedad comunal, va desarrollándose ya la propiedad
privada mobiliaria, y más tarde la inmobiliaria, pero como
forma anormal, supeditada a aquella. Los ciudadanos del estado,
solo en cuanto a comunidad, lo que ya de por sí los
vincula a la forma de la propiedad comunal. Es la propiedad
privada comunal de los ciudadanos activos del estado, la que los
obliga con respecto a los esclavos a permanecer unidos en este
tipo natural de asociación. Esto explica por qué
toda la estructura de la sociedad asentada sobre estas bases, y
con ella el poder del pueblo, decaen a medida que va
desarrollándose la propiedad privada
inmobiliaria".[3]
En los momentos actuales, la relación existente
entre hombre-comunidad se encuentra nuevamente en una
fase reconstructiva, de interacción y acercamiento
positivo que se manifiesta hasta ahora en tres
niveles:
El nivel sociocultural. Aparentemente,
la tendencia universal que se viene manifestando en los
últimos años, de rechazo a lo artificial, lo
sofisticado y preelaborado, y de reencuentro con lo natural, las
antiguas culturas, ritos y tradiciones; con lo sencillo y lo
simple, se manifiesta también en la reorientación
hacia la comunidad, la pequeña población, el
barrio, el hogar, la familia. El hombre busca la existencia
tranquila y las relaciones sanas, que generalmente se encuentran
en este nivel.
El nivel político. También
muchos estados han dado pasos hacia una reorientación
hacia las comunidades: en algunos casos de manera
espontánea; en otros, como consecuencia del reclamo de
grupos étnicos y sectores populares.
En el primer caso, el interés por la
comunidad se ha producido como resultado del desarrollo del
Estado y de las ideas políticas relacionadas con el
funcionamiento de la sociedad, las cuales han identificado en las
comunidades y en su funcionamiento, más o menos
autónomo, posibilidades de solución a numerosos
problemas que ocupan al estado, e incluso, perspectivas de mayor
eficiencia y mejores potencialidades para el desarrollo humano,
cuando tales problemas son solucionados por la comunidad con la
participación activa de sus habitantes.
Esta orientación del Estado hacia las comunidades
puede tener segundas intenciones, lo cual se ve especialmente en
algunos países de América Latina que de una forma u
otra, estimulan el funcionamiento comunitario; al agrupar y
organizar a los individuos, poniéndolos a trabajar en
función de resolver los problemas de su localidad, el
Estado logra, además del efecto positivo y noble ya
señalado, otros tres efectos que pueden resultarle de
importancia:
1) Encargando a la propia comunidad la
solución de sus problemas, sustrae su responsabilidad
en este sentido. De tal manera, si los problemas no tienen
solución, es porque la comunidad no ha sabido
encontrársela, porque no ha logrado poner todas sus
fuerzas y potencialidades en función de
ello.2) Estimulando el funcionamiento comunitario y
comprometiendo a las comunidades en la solución de sus
problemas, regionaliza y divide a los diferentes sectores
sociales y desvía la atención de los problemas
generales de la sociedad; las desigualdades, las injusticias
sociales, etc. De esta manera se intenta reducir las
críticas, discrepancias, protestas, con el orden
social existente, y neutralizar las posibilidades de
acción conjunta de los sectores sociales más
progresistas, disueltos en sus respectivas
comunidades.3) Implementando programas de desarrollo
comunitario en determinadas áreas, a bajo costo, se
intenta lograr un compromiso político de los
habitantes con la clase y el partido que se encuentra en el
poder.
Con estos tres efectos, el Estado y las clases
dominantes, obtienen la supervivencia de su condición
actual y limitan las tendencias de modificación y
transformación al nivel de toda la sociedad.
En el segundo caso, la atención a las
comunidades surge por la propia acción de estas (que, en
diferentes partes del mundo luchan por su autonomía),
exigiendo que se les permita mantener su lengua materna, sus
costumbres, sus tradiciones, su religión, su espacio, sin
ser rechazados o discriminados por el resto de la sociedad, como
ha ocurrido hasta el momento.
En este sentido, en los últimos años, en
América Latina han cobrado fuerza los movimientos
indígenas y populares que luchan por mantener su identidad
y por desarrollarse en el camino escogido por ellos, no
impuestos por otros.
Ha llegado a producirse un movimiento por la
construcción y desarrollo de la sociedad comunitaria, que
critica al socialismo y al capitalismo por considerarlas
sociedades totalitarias y se orienta hacia el desarrollo de una
sociedad diferente, centrada en las comunidades, en la cual se
eliminarán las injusticias y se solucionarán todos
los problemas.
Esta es una perspectiva utópica, ya que la
solución de los problemas no puede lograrse solo a nivel
de la comunidad, totalmente al margen del Estado. Este tiene que
participar con las comunidades en ese proceso, y tiene que
modificarse para la solución de una serie de problemas,
tanto específicos como globales; y en dependencia de la
organización que adopte, y la forma predominante de
propiedad sobre los medios de producción, será un
Estado socialista o capitalista. Al menos hasta el momento no se
ha encontrado una tercera variante real.
El nivel científico. Los
científicos también se han volcado hacia la
comunidad. Este, que era un casi olvidado o ignorado por la
ciencia, ha comenzado a ser tratado por varias disciplinas en los
últimos años; principalmente la psicología,
la sociología y la medicina. Así se habla ya de
psicología comunitaria, como una especialidad que se ha
ido desgajando de la psicología social, de
sociología de las comunidades y de medicina comunitaria o
salud comunitaria.
Como decíamos, estos tres niveles están
estrechamente relacionados; generalmente lo que motiva y atrae
insistentemente al hombre común, termina por llamar la
atención del político, y ocupa también al
científico. Luego se producen hechos en los cuales, estos
tres niveles se entremezclan, de manera tal que es difícil
precisar la posición y límites de cada uno de
ellos. Como por ejemplo tenemos las jornadas internacionales
sobre pensamiento comunitario, que se celebran en América
Latina y que son una expresión de la preocupación y
el interés social por las comunidades, pero a su vez,
manifiestan una posición política a favor del
desarrollo comunitario o de la sociedad comunitaria, y se
desarrollan bajo una óptica científica, de
ponencias y discusiones teóricas y fundamentación
conceptual.
El problema de las comunidades también ha llamado
la atención de los organismos internacionales como la ONU,
la OEA y las OMS, estos se han pronunciado con relación al
desarrollo comunitario y la salud comunitaria y han elaborado
planes para fomentarlos.
Enfoques para la
definición de Comunidad
En la literatura especializada aparecen numerosas
definiciones de comunidad, cada una de las cuales centra
más su atención o hace mayor o menor énfasis
en determinados aspectos, en dependencia del objetivo fundamental
del estudio y de la disciplina desde la cual se realiza o dirige
dicho estudio.
En este sentido, diferentes ciencias han aportado su
visión de comunidad, partiendo de indicadores que forman
parte de su objeto de estudio. Así tenemos la
psicología social o específicamente la
psicología comunitaria, la sociología de las
comunidades, la geografía y otras. El concepto comunidad
entonces se puede referir a un sistema de relaciones
psicosociales, un agrupamiento humano o un espacio
geográfico.
Las definiciones de comunidad, en sentido general, se
pueden diferenciar por el énfasis que se hace -en
elementos estructurales unas, en elementos funcionales otras y,
finalmente, en aquellas que reflejan ambos tipos de
elementos.
Las definiciones estructurales, que tienen un
carácter más descriptivo, denotan fundamentalmente
entidades que responden a elementos muy precisos y
específicos desde el punto de vista formal, sin reflejar
las interacciones y los móviles de cambio. Como ejemplo de
definiciones de comunidad con predominio de elementos
estructurales tenemos las siguientes:
? "En un sentido amplio, el concepto de
comunidad se utiliza para nombrar unidades sociales con
ciertas características que le dan una
organización dentro de un área determinada".
(Pozas,1964).[4]? "… el enfoque que tiende a prevalecer es el
que considera la comunidad como un grupo cuyos componentes
ocupan un territorio dentro del cual se puede llevar a cabo
la totalidad del ciclo vital …" (Chinoy, 1968)
.[5]? "…es el más pequeño grupo
territorial que puede abarcar todos los aspectos de la vida
social… es un grupo local lo bastante amplio como para
contener todas las principales instituciones, todos los
status e intereses que componen una sociedad". (Kingsley,
1965).[6]
El concepto comunidad en este sentido también se
utiliza para referirse a:
? Un sistema de relaciones
sociopolíticas y económicas, físicamente
determinadas y con identidad definida.? Modo de asentamiento humano (urbano o rural)
donde sus residentes tienen características
sociopsicológicas en su sistema de
relaciones.? Conjunto de personas que habitan en una
determinada zona, regida por una dirección
política, económica y social; propia o
centralizada, que hacen vida común a través de
sus relaciones.
Uno de los elementos estructurales más
importantes es la demarcación de la comunidad, la
definición de su extensión, sus límites. En
este sentido se utilizan diferentes criterios, lo mismo se puede
considerar un grupo, un barrio, una ciudad, una nación o
un grupo de naciones, en dependencia de los intereses de la
clasificación. La delimitación del tamaño de
la comunidad se subordina a un elemento funcional: la
cooperación. No tienen que existir límites
rígidos. Una comunidad tiene un tamaño adecuado
siempre y cuando exista una estructura potencial capaz de ejercer
la función de cooperación y coordinación
entre sus miembros.
Como se puede observar, los elementos funcionales tienen
importancia en la definición de comunidad. Estos se
refieren a aquellos aspectos que aglutinan a sus integrantes y
sirven de base a su organización, sus relaciones y
movilización en torno a tareas comunes, como sujeto
social. Como definiciones que prestan mayor atención a
elementos funcionales tenemos las siguientes:
? "… desde el punto de vista
ecológico, la comunidad consiste en una serie de
sistemas interrelacionados, es decir, personas, roles,
organizaciones y eventos." (Kelly,
1971)[7]? "a) Un grupo social de cualquier
tamaño cuyos miembros residen en una localidad
específica, comparten un gobierno y tienen una
herencia cultural e histórica común.
b) Grupo social que comparte características e
intereses comunes y que es percibido y se percibe a sí
mismo como distinto en algún sentido a la sociedad en la
cual existe. " (Rappaport,1980.)[8]
También se utiliza en ocasiones para referirse
a:
? Grupo de personas unidas por sus
aspiraciones, necesidades e intereses comunes.? Grupo social con objetivos y problemas
comunes.
Una base fundamental para la integración, la
cohesión y la acción conjunta, es la existencia de
objetivos, aspiraciones, problemas y necesidades comunes, pero
estos elementos se pueden manifestar en una familia, una clase,
un grupo o sector socioclasista, los alumnos de una escuela o los
obreros de una fábrica; cierto que son elementos
necesarios para definir una comunidad -en el sentido que la
estamos enfocando-, pero no suficientes porque reflejan
cualidades del objeto que no permiten diferenciarlo de otros
objetos similares, ni lo abarcan completamente en toda su
magnitud.
En la definición de comunidad deben vincularse
elementos funcionales y estructurales. Nos parece importante la
definición dada por F. Violich, según la cual la
comunidad es un "grupo de personas que viven en un área
geográfica específica y cuyos miembros comparten
actividades e intereses comunes, donde pueden o no cooperar
formal e informalmente para la solución de los problemas
colectivos". [9]
Como elemento estructural se define como un grupo -y no
cualquier grupo- que vive en determinada área
geográfica, lo que incluye el componente habitacional,
residencial, donde transcurre la mayor parte de la vida de las
personas, con lo cual se va ganando en especificidad. Refleja,
además elementos funcionales: compartir actividades y
objetivos comunes con la posibilidad de
cooperación.
Apoyados en algunas de las definiciones
citadas, E. Sánchez y E. Wiendsenfeld plantean que una
comunidad se caracteriza por:
a) ser un grupo de personas, no un
agregado social, con un determinado grado de
interacción social;b) compartir intereses,
sentimientos, creencias, actitudes;c) residir en un territorio
específico;d) poseer un determinado grado de
organización.
Como se puede apreciar, tres de estos principios
coinciden con la definición de Violich, pero agregan un
aspecto importante, la existencia de un determinado grado
de organización.
Un grupo de autores cubanos al intentar definir la
comunidad propone los parámetros siguientes:
"Es una unidad social, construida por grupos que se
sitúan en lo que podríamos llamar la base de la
organización social;Las razones de su agrupación se vinculan a
los problemas de la vida cotidiana, es decir, sus miembros
tienen intereses y necesidades comunes: alimentación,
vivienda, trabajo, servicios y tiempo libre;Ocupa un determinado territorio, cuya pluralidad de
personas interactúan más entre sí que en
otro contexto del mismo carácter;De lo anterior se derivan tareas y acciones comunes,
que van acompañadas de una conciencia de pertenencia
cuyo grado varía;Sus miembros comparten un cierto sistema de
orientaciones valorativas que tiende a homogeneizar o regular
de manera semejante su conducta;Forma parte de una organización social mayor
y está atravesado por múltiples determinaciones
institucionales y de la sociedad en general, pues no existen
"comunidades islas". " [10]
En las comunidades resulta esencial el desarrollo de
sentimientos de pertenencia, la identificación del
individuo con su barrio, su zona de residencia, sus habitantes,
sus normas, sus costumbres, sus tradiciones, sus formas de
relacionarse y su estilo de vida en general. Este es un factor
poderoso para movilizar a los pobladores, para plantearse metas
comunes, y trabajar de conjunto por el alcance de estas, la
solución de problemas y el desarrollo de la comunidad: es
la base de la cohesión y la cooperación entre los
habitantes.
El sentimiento de pertenencia o de bien común
tiene un sentido de historicidad: se va formando sobre la base de
las interacciones de los individuos y sus familias entre
sí, del enfrentamiento a problemas comunes, la ayuda
mutua, la colaboración de unos con otros, la lucha
conjunta por el bienestar. Su génesis generalmente data de
los orígenes de la propia comunidad. A medida que las
personas se vinculan en pequeños grupos para el desarrollo
de determinadas actividades, se van conociendo más, van
aprendiendo a considerar y facilitar el bienestar de los
demás, a respetar sus opiniones y puntos de vista: se van
ajustando y puliendo sus interrelaciones. De esta manera se va
incrementando su eficiencia como sujeto de la actividad social;
obteniendo mejores resultados en las tareas que se proponen, y
esto estimula y desarrolla la autoestima grupal su
identificación como grupo, como comunidad y su
diferenciación de otras comunidades.
Se considera que cuando este sentimiento de pertenencia
o bien común, y las actitudes sociales que genera, se
aplican y extienden fuera del pequeño grupo, ha nacido
realmente la comunidad.
Las comunidades se pueden diferenciar entre sí
por el desarrollo de dicho sentimiento, el cual se manifiesta de
manera diferente entre comunidades añejas y crecientes,
abiertas y cerradas, estables e inestables. El desarrollo de tal
sentimiento contribuye a lograr una convivencia más
próxima y duradera, sobre la base de la
organización de determinado número de personas que
están en constante interacción. Ello propicia la
coordinación de las actividades encaminadas a la
solución de problemas comunes y satisfacción de
necesidades individuales y compartidas, configurando estructuras
sociales que respondan a la vida comunitaria. En ello pueden
influir los líderes, los dirigentes de la comunidad, en
dependencia de la forma en que desempeñen su
labor.
Consideramos que son cuatro los elementos esenciales que
deben tenerse en cuenta en la definición y el estudio de
la comunidad.
El elemento geográfico, territorial,
natural, referente a un grupo de personas que comparte
determinada área geográfica, determinadas
condiciones ambientales donde transcurre su vida y la de su
familia, y en la cual está plasmada su historia, las
influencias del hombre y de los factores sociales.
El elemento social como organismo social
que funciona en correspondencia con mecanismos sociales, y que a
su vez pertenece a una organización social mayor, con la
cual tiene un conjunto de interacciones y vínculos y
recibe un grupo de influencias determinantes.
El elemento sociopsicológico,
referente a los factores subjetivos aglutinan y cohesionan a sus
habitantes; la existencia de necesidades, objetivos e intereses
comunes, y sobre esta base, el desarrollo de determinado nivel de
interacción, cooperación y ayuda mutua, que
contribuye al acercamiento entre las normas sociales y las
orientaciones de valor de los diferentes individuos y familias,
que pueden llegar a ser comunes, y el desarrollo de sentimientos
de pertenencia, de identificación con la comunidad, que
surge como consecuencia de todo lo anterior, pero es un elemento
vital para el desarrollo comunitario.
El elemento de dirección,
referente al papel del líder o líderes populares,
la existencia de determinada estructura, formal o informal, que
dirige o agrupa, cumpliendo la función de
coordinación entre los miembros, individuales o
colectivos, estructurando la división y
organización del trabajo para el logro de los objetivos
más importantes de la comunidad.
La comunidad -a nuestro juicio- es un organismo social
que ocupa determinado espacio geográfico. Está
influenciada por la sociedad de la cual forma parte, y a su vez
funciona como un sistema, más o menos organizado integrado
por otros sistemas de orden inferior -las familias, los
individuos, los grupos, las organizaciones e instituciones- que
interactúan, y con sus características e
interacciones determinen el carácter subjetivo,
psicológico, de la comunidad, y a su vez influyen, de una
manera u otra, en el carácter objetivo, material, en
dependencia de su organización y su posición
-activa o pasiva- respecto a las condiciones materiales donde
transcurre su vida y actividad.
El nivel de desarrollo comunitario es consecuencia de la
integración de todos estos elementos, del grado de
organización e interacción entre sus componentes,
de la existencia o no de una estructura comunitaria, formada por
líderes locales o una cierta dirección, que cumpla
la función de coordinación entre sus miembros, que
contribuya a la reposición de sus esfuerzos y a su
orientación en el mejor sentido posible para la vida en
común. De todo ello depende la influencia de la comunidad
en la formación y desarrollo de sus habitantes.
También es importante tener en cuenta su
relación con otras comunidades, el tipo de vínculos
o por el contrario la escasez o carencia de interacciones, y sus
relaciones con la sociedad en general.
Al referirse a la comunidad como medio de desarrollo no
podemos descuidar un factor de vital importancia en el
desarrollo. Un grupo social puede ser definido como "un
conjunto de personas que interactúan entre sí
asumiendo, conciente o inconscientemente, influencias del
resto. Estas personas poseen al menos un rasgo en
común, que los une e identifica en dependencia del sentido
de identidad que los caracterice. Persiguen la consecución
de una meta o un fin determinado y se rigen por un conjunto de
normas para asegurar el funcionamiento y la cohesión
grupal". Donde cada miembro desempeña un rol dentro
del grupo.
Para que comprendamos mejor los aspectos antes
mencionados, desglosaremos cada uno de los elementos que
conforman esta definición:
– Conjunto de personas: Para conformar un
grupo social es necesario que exista una pluralidad de individuos
(más de uno). No obstante, debe tener un número
limitado de miembros.
– Interactúan entre sí: Las
personas que integran ese conjunto deben estar en contacto los
unos con los otros, interrelacionarse entre sí. Esta
interacción debe ser de forma permanente, no
casual.
– Asumen influencias del resto: Cada uno de
los miembros del grupo reconoce e identifica a sus
compañeros. Al interactuar entre sí durante un
período de tiempo más o menos prolongado y
establecer pautas que deben ser seguidas por todos, cada miembro
recibe influencias del comportamiento del resto, de sus formas de
pensar y de actuar.
– Poseen al menos un rasgo en común:
Este es un elemento importante para lograr cierto grado de
homogeneidad en el grupo. Puede responder a datos
sociodemográficos tales como: edad, sexo, nivel escolar,
etc., u otros que estén más relacionados con la
subjetividad como: preferencias, formas de pensamiento,
comportamientos, adicciones.
– Persiguen la consecución de una meta o un
fin determinado: Existe al menos un fin que es compartido
por todos los miembros del grupo. Este tiene un valor
considerable porque a partir de la definición de las metas
u objetivos, se identificarán las acciones que se deben
llevar a cabo para conseguirlos.
– Se rigen por un conjunto de normas: Estas
regulan el comportamiento de los individuos dentro del grupo. A
partir de las normas que se establecen para él, se define
lo que es correcto o incorrecto, las conductas que son adecuadas
o no.
– Cada miembro desempeña un rol dentro del
grupo: Al interior del grupo se distribuyen tareas para
tratar de alcanzar las metas o fines del mismo. A partir de este
momento, a cada individuo le corresponde desempeñar un
papel determinado para el logro de tales
propósitos.
Desarrollo
comunitario. Definición e importancia
La ONU (Organización de Naciones Unidas) se ha
pronunciado respecto al desarrollo comunitario. Esta considera
que "el sentimiento de identidad acorde con la comunidad
y con sus propósitos y objetivos, es una
precondición para generar y sustentar el desarrollo de la
comunidad". Esto debe entenderse como un proceso para crear
condiciones de progreso económico y social para toda la
comunidad, con la participación de sus miembros en el
mejoramiento de su nivel de vida en dependencia de su propia
iniciativa y protagonismo. Además, presupone el proceso de
formación de valores morales y de ética personal,
el conocimiento y la práctica de las tradiciones
culturales de la comunidad y el país .
El desarrollo comunitario lo integran, según la
posición de este organismo internacional, los procesos por
medio de los cuales los esfuerzos del pueblo mismo se unifican
con los de las autoridades para mejorar las condiciones
económicas, sociales y culturales de las comunidades, para
integrarlas a la vida nacional, de forma tal que contribuya
también al desarrollo de la nación. Este conjunto
de procesos -según la ONU- está constituido por dos
indicadores esenciales:
Participación de los habitantes en los
esfuerzos por mejorar su nivel de vida, en dependencia de sus
ideas, iniciativas y propósitos.Prestación de servicios, tanto
técnicos como de otra índole, de manera que se
estimulen la iniciativa, la autoayuda y la
colaboración mutua, con vistas a hacerlos mucho
más eficaces.
Según ambos indicadores el desarrollo comunitario
como proceso posee gran importancia en el sentido organizacional,
y educativo: organizacional, porque requiere la
reorientación de las instituciones existentes o la
creación de nuevos tipos de instituciones;
educativo, porque implica el cambio de actitudes y
prácticas que obstaculizan las mejoras
socioeconómicas. En sentido general, fomenta mayor
receptividad para el cambio. Favorece el desarrollo de la
capacidad del pueblo para formarse juicios acerca de los efectos
de las actividades, para determinar los cambios
tecnológicos necesarios y para adaptarse a los cambios
promovidos por las fuerzas externas.
Definición.
El desarrollo comunitario ha sido tratado, en la
literatura especializada como proceso, como metodología y
también como técnica. Según un sitio en la
Internet el Desarrollo comunitario puede definirse como:
"como la agregación de valor económico que
proviene de pequeños núcleos culturales. Sean estos
la familia, pequeñas asociaciones o grupos
comunes".
Al abordar la temática continúan
explicando que:
"Unir esfuerzos en muchas ocasiones es la
única manera de sacar adelante iniciativas de
producción, esto se hace papable especialmente en regiones
marginadas o aisladas y en comunidades que no tienen acceso a los
mercados financieros o a apoyos en la consecución de
recursos destinados a la producción".
A este respecto proponen una lista de siete factores que
serán decisivos en el proceso de desarrollo en la
comunidad estos son los siguientes:
1. Unidad en la dirección
y de políticas:
2. Manejo abierto y transparente de
recursos:
3. Buscar equipos que complementen
funciones: 4. Elegir adecuadamente la figura legal
más adecuada teniendo en cuenta los objetivos: 5.
Buscar apoyo técnico y asesoría en factores claves
de producción: 6. Compromiso a mediano y largo
plazo:
7. Espíritu
emprendedor.
Una comunidad no se desarrolla sólo gracias a la
acción directa de alguien como un ente imprescindible, una
comunidad (como institución social) se desarrolla
por sí misma a través de la labor transformadora de
los miembros de esta, como principales agentes de
cambio.
Hay quienes asumen que el desarrollo
comunitario es simplemente un aumento de la riqueza: un
incremento en la renta per capita o en los ingresos. Puede ser,
pero hay más. Implica un cambio social, por el que la
comunidad se hace más compleja, aumenta el número
de sus instituciones, incrementa el poder colectivo y con ello el
protagonismo de los sectores sociales cambiando cualitativamente
su organización.
Cabe además al hablar de desarrollo, abordar lo
relacionado al desarrollo sostenible, en cuanto a esta
definición podemos decir que "es un proceso de
elevación sostenida y equitativa de la calidad de vida de
las personas, mediante el cual se procura el crecimiento
económico y el mejoramiento social, en una
combinación armónica con la protección del
medio ambiente, de modo que se satisfagan de manera creciente y
estable las necesidades materiales y espirituales de las actuales
generaciones, sin poner en riesgo las de futuras
generaciones"
El desarrollo es un fenómeno que trae consigo
fuertes repercusiones intelectuales y morales para los individuos
y las comunidades. Cualquier intento destinado a comprender las
cuestiones que el desarrollo y la modernización plantean
debe centrarse en los valores culturales, analizados con
consistencia desde la lente que nos brindad las ciencias
sociales. En el sentido más amplio la cultura incide sobre
las decisiones y los resultados económicos. Las
actividades económicas a su vez, pueden debilitar o
reforzar diversos aspectos de la cultura. El desarrollo
económico combinado con una cultura decadente atrofiada
opresiva y cruel está condenada al fracaso. El fin
último del desarrollo es el bienestar físico,
mental espiritual y social de todos los seres humanos y por su
parte la cultura no puede sobrevivir si se empobrece o destruye
el entorno del que depende.
El desarrollo significa el crecimiento en complejidad,
en las seis dimensiones de la cultura. Cada una de las ellas
está compuesta de sistemas socioculturales (como el
sistema económico o el político) que se
combinan para formar un sistema superorgánico. Una
comunidad es un sistema cultural. Sus seis dimensiones son:
técnica, economía, política, instituciones,
valores y creencias.
La cultura no puede ni debe comprenderse como un
simple concepto asociado a las artes y el patrimonio, pues
comprende el modo de vida, creencias, tradiciones y los sistemas
de valores. Esta, proporciona un marco propicio para el bienestar
espiritual y moral de los seres humanos, posibilita un acceso al
conocimiento. En fin de cuentas, es el trabajo acumulado por la
sociedad a través de la historia, es hallar una
ecuación con la que resolvamos problemas de la
vida.
Los agentes de socialización también
tienen un papel decisivo en el desarrollo de las comunidades, en
este proceso intervienen importantes instituciones cada una con
funciones bien definidas, las que están dirigidas a
garantizar el auto-desarrollo comunitario y el equilibrio
armónico de sus miembros; entre estos factores podemos
mencionar los siguientes:
La familia
La escuela
Los medios de comunicación masiva
Las instituciones
Los grupos
Las organizaciones
Consideramos que el análisis respecto a la
definición de comunidad nos ha mostrado la
necesidad de hacer una diferenciación entre comunidades;
para ello sería conveniente trabajar y desarrollar el
concepto nivel de desarrollo comunitario como
categoría que refleje el estatus, el nivel que ha
alcanzado una comunidad, lo cual no se logra con los criterios
existentes sobre desarrollo comunitario.
Pensamos que el nivel de desarrollo de una comunidad se
expresa en dos vertientes fundamentales:
1) Su nivel de desarrollo material:
las condiciones materiales de vida, el nivel de vida que es
capaz de proporcionarle a sus integrantes.2) Sus cualidades como sujeto social:
posibilidades de ejercer una acción conjunta,
organizada, consciente y transformadora sobre su propio
desarrollo que incluye:
La acción sobre sus condiciones
materiales de vida, mejorándolas,
desarrollándolas, perfeccionándolas y creando
condiciones para el despliegue de su desarrollo material.
Aquí se incluye su influencia en la
cooperación, la división del trabajo y la
organización de la producción.La acción sobre las condiciones
espirituales, el perfeccionamiento de la
educación de sus miembros, principalmente los
más jóvenes, la creación de un clima
positivo de relaciones entre sus habitantes, etc.
En nuestra opinión son tres vertientes en las que
se define la acción de una comunidad como sujeto de la
actividad social, las cuales determinan su eficiencia la cual se
expresa a través de:
-Su estructura: atendendiendo a los siguientes
elementos: la existencia o no de una estructura, formal o
informal; la calidad y el funcionamiento y la aceptación
que tenga entre sus miembros: el nivel de comunicación, de
interacción; el nivel de colaboración que se logra
entre ellos.
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