- Aspectos de la
problemática - Marco
teórico - Marco
metodológico - Aspectos administrativos
- Conclusiones
- Referencias
bibliográficas - Anexos
LOCALIDAD O INSTITUCIÓN DONDE SE
DESARROLLA EL PROYECTO.
INSTITUCIÓN EDUCATIVA "MANUEL
ANTONIO MESONES MURO"
FERREÑAFE
DURACIÓN ESTIMADA DEL
PROYECTO: 3 MESESFECHA DE INICIO : AGOSTO DEL
2011FECHA DE TÉRMINO :
OCTUBRE DEL 2011.
TERCERO "A"
1. CAMPOS JURUPE, Sofía De
Los Ángeles2. CHÁVEZ GARCÍA,
Juana del Edén.3. CHONATE OLIVA, Vilma
Gisela.4. COBEÑAS PÉREZ,
Gleydi Marisol.5. CORNETERO BONILLA, Quesia
Nayrubith.6. CUBAS CÓRDOVA, Kalin
Yesmene.7. DÍAZ PISCOYA, Ledybel
Fiorella.8. FERNANDEZ LLONTOP, Alisson
Nadine.9. GONZALES ZAMBRANO,
Jenifer10. GUILLERMO ORDINOLA, Yannira
Kassandra.11. IPANAQUÉ FERRE, Clara
Beatriz.12. JURUPE ASCENCIO, Mayra
Gladis.13. LINARES GOICOCHEA, Ana
Kerlita14. LLAMO CORONADO,
Luzmeri15. MENDOZA PLAZA, Caroline
Jeshua16. MONTALVAN SEGURA, Katherine
Juleivi.17. OLAZABAL RAMOS, Estrellita del
Milagro.18. OTERO ALTAMIRANO, Anggue
Geminis.19. PAIVA BUENO, Mercedes
Margarita.20. PAREDES CHAVESTA, María
del Los Ángeles.21. PISCOYA CHICOMA, Michele
Melaine Crystel.22. PURIHUAMÁN LUCERO,
Francisca.23. SACA LIMO, Yovana del
Rosario.24. SANTA CRUZ PÉREZ,
Emelina Maily.25. SECLEN SANTAMARÍA,
Marycielo Cristina.26. SONO MONTALVO, Yoan del
Pilar.27. SUAREZ BUSTAMANTE, Aracely
Marilú.28. SUYSUY PRADA, Diana
Karolina29. TARRILLO ZEÑA, Luz
Aurora Vanessa.30. VILCHEZ PISCOYA, Carmen
Rosa.
TERCERO "B"
1. BURGA ENRIQUEZ, Jesús
Cristhian.2. CAMACHO PORTALES, Carlos
Alberto.3. CAMPOS BALLONA, Elvis
Joel4. CASTILLO SANDOVAL, Omar
Orlando.5. CHAMBERGO VALVERDE, Edwin
Daniel.6. CHANAMÉ TEMOCHE, Deyvi
Junior.7. CHOZO HUIMAN, Luis
Miguel.8. CISNEROS YAMPUFÉ, Josue
Moisés9. COBOS NIÑO, Anderson
Junior.10. CORNETERO SERREPE,
Giamarco-.11. CUMPA MACALOPÚ,
Jesús.12. DE LA CRUZ HUAMAN,
César Antonio.13. DÍAZ ACOSTA, Luis
Fernando.14. ENQUE PITA, Percy Jean
Pierre.15. FUENTES MEDINA, Jorge
Luis.16. GINES CHANAMÉ, Daniel
Armando.17. GONZALES CABRERA, Juan
José.18. HUIMA NIÑO, Cristian
Alex.19. LLONTOP CASTILLO, Jorge
Leonardo.20. MORALES PRADA, Andy Yian
Carlos21. PISCOYA CAJUSOL, Martín
Moisés.22. QUISPE MONDRAGÓN,
Brayan Stibe.23. ROQUE ZULOETA, Pedro
Ernerto.24. SÁNCHEZ CAYCAY,
Matías Ismael.25. SANTOS OCAS, Carlos
Alberto.26. SEGURA LA TORRE, David
Alexander.27. SILVA TEMOCHE,
Junior.28. SOPLAPUCO DÍAZ, Carlos
Miguel.29. VILCHEZ VILCHEZ, Elvis
Francisco.30. LOPEZ GORDILLO, Marco
Antonio.31. MACALOPÚ SERREPE,
Romario Alexander.32. PITA GONZALES, Luis
Antonio.
TERCERO "C"
1. ABAD SANTISTEBAN, Jackeline
Jasmira.2. BALLADARES FERNANDEZ, Jorge
Lauro Sandino3. BARRERA FUENTES, María
Guadalupe.4. BRACO VÁSQUEZ, Jorge
Armando.5. CABREJOS PERALTA,
Verónica Alexandra.6. CAJUSOL CARLOS, Verónica
Ysabel.7. CAJUSOL QUEVEDO, Ana
Moemí.8. CAJUSOL VIDAURRE, Ingrid
Nataly.9. CAMACHO SEMINARIO, Leydi
Liz.10. CARNERO NECIOSUP, Pamela
Alessandra.11. CARRILLO MOZO, Perlita del
Rosario.12. CESPEDES DÍAZ, Sahssira
Lissette.13. CHONATE TEMOCHE, Manuel
Alexander.14. CORREA LITANO, Flor
Yacori.15. DE LA CRUZ PISCOYA, Carlos
Enrique.16. DE LOS SANTOS TOVAR, Fiorella
Romina.17. FARROÑAN
RACCHUMÍ, Melyssa Jahayra.18. HUAMÁN VILCABANA,
Estefany Carolina.19. MACALOPÚ CORNEJO,
Héctor Joel.20. MANAYAY CALDERÓN,
César.21. MARTINEZ QUISPE, Jorge
Luis.22. MORANTE CHICOMA, Giovanna
Judith.23. MURO BRENIS, Juan
José.24. MURO PISCOYA, Gerardo
Miguel.25. ORELLANO CHANAMÉ, Merli
Paola.26. ORELLANO SIMPALO, Ana
Lilibeth.27. QUIROZ CASTILLO, Sarin
Noemí.28. RODRIGUEZ DE LA CRUZ,
Liliana.29. SEGUNDO SÁNCHEZ, Luz
Estefáni.30. SENCIE NIÑO, Junior
Alexis.31. VASQUEZ PARRAGUEZ, Katherine
Liliana.32. VERA ESPINOZA, Lourdes
Jazmín.33. VILCHEZ CASTILLO, Juan
Anthony.34. VILLEGAS PERALTA,
Lázaro Daniel Alexander.35. ZEÑA CÉSPEDES,
Marilú Esmeralda.
TERCERO "D"
1. CARBONEL DE LA CRUZ,
Verónica Vanessa.2. CARLOS HUAMÁN, Jorge
Andrés.3. CARRILLO SANDOVAL, Segundo
Genaro.4. CÉSPEDES BERNILLA,
William Gustavo.5. CÉSPEDES
CÉSPEDES, Nicida Patora.6. CHERO MENDOZA, Lesly
Mirella.7. CORONADO ROJAS, Gladys
Elizabeth.8. DE LA CRUZ DÍAZ,
Ronald.9. ESPINOZA RAMOS, Clara
Inés10. FARRO DE LA CRUZ, Carmen
Maribel.11. GUILLERMO PARRAGUEZ, Manuel
Adolfo.12. HUAMÁN REYES,
Alex.13. HUAMÁN REYES,
Aurelia.14. LLAGUENTO YESQUÉN,
Ingrid Fiorella.15. MANAYAY CARLOS, Vilma
Victoria.16. MANAYAY HUAMAN, Dante Flovio
Julián.17. MANAYAY LLONTOP, Ingrid del
Milagro.18. MANAYAY RODRÍGUEZ,
Jessica.19. MENDOZA JIMENEZ, Antoni
Yorvi.20. MENDOZA SANTISTEBAN,
Yenifer.21. PANTA PURIZACA, Patricia del
Pilar.22. PÉREZ GONZALES,
Clever.23. PISCOYA CARBONEL, Virginia del
Rosario.24. PISCOYA FARRO, Roger
Iván.25. PISCOYA JURUPE,
Verónica del Pilar.26. PISCOYA PACHERRES, Yoel
Alexander.27. PRADA SEMBRERA, Yecsenia
Aide.28. PURIHUAMÁN
CÉSPEDES, Nelson.29. PURIZACA SILVA, Jesús
Moisés.30. PURIZACA YOVERA, Rut
Johana.31. RINZA VEGA, Sarait
Luisa.32. SANTISTEBAN CASTILLO, Luis
Fernando.33. SONO MOCARRO, Wendy
Silvana.34. SUCLUPE CHUNGA, Percy
Yovani.35. TABOADA HUAMÁN,
Patricia Giovana.36. VALLEJOS MONTALVO, Irene
Nataly.37. ZUÑIGA SANTISTEBAN,
Frank Brayan.
TERCERO "E"
1. BANCES LLONTOP, José
Andrés2. BANCES SANTISTEBAN, Jhony
Armando.3. BELLODAS PUCSE, Carlos
Abel.4. BERNILLA CARLOS, Alan
Yhovany.5. CABREJOS PARRAGUEZ,
Carlos.6. CASTILLO MONTENEGRO, Juan
Adolfo.7. CASTILLO MONTENEGRO, Juan
Manuel.8. CASTILLO TEMOCHE, Rafael
Deyvis.9. CHAVESTA CESPEDES, Cristian
Antony.10. CHUMAN GONZALES,
Adolfo.11. DÍAZ PISCOYA,
José Armando.12. DÍAZ VILCABANA, Frank
Segundo.13. FARROÑÁN
MIÑOPE, Marcos Adrian.14. GARCÌA EXEBIO, Pablo
Leonel.15. HUAMAN GARCÍA, Robinson
Michel.16. IPANAQUÉ SANTISTEBAN,
Angel Joel.17. LLAGUENTO YESQUÉN,
Alexander Avelino Alejandro.18. MANAYAY CARLOS, Segundo
Guillermo.19. MANAYAY HUAMÁN, Carlos
Enrique.20. MORANTE ESPINOZA,
Luis.21. NIÑO JULCA, Jhony
Abel.22. PARRALES BONILLA, Cristian
Romario.23. PASTOR MACALOPÚ, Jarol
Alexis.24. PISCOYA PARRAGUEZ,
Jesús Alberto.25. PISCOYA PARRAGUEZ,
Jesús Enrique.26. PRADA PRADO, Manuel
Alexander.27. RÍOS SANDOVAL,
José Rosario.28. RIVERA PURIHUAMÁN,
Jhorbinson.29. ROJAS CARBONEL, Carlos
Armando.30. RONDA SIESQUÉN,
Cristhian Alberto.31. SANCHEZ CLAVO, Jhán
Franklin.32. SANCHEZ RAMIREZ, Juan
Justo.33. SERNAQUÉ NIÑO,
Jean Carlos.34. SORALUZ CABRERA, José
Antonio.35. SUCLUPE SATORNICIO, Ronald
Alexander.36. YESQUÉN HUAMÁN,
José Dolores.37. YOVERA CASTILLO, Martín
Eduardo.
Aspectos de la
problemática
2.1. REALIDAD
PROBLEMÁTICA:
La Tierra contiene aproximadamente 1,4 millones de
kilómetros cúbicos de agua, pero alrededor de 97,4
por ciento de ella es agua de mar o agua salada. Alrededor de
tres cuartas partes del 2,6 por ciento restante están
encerradas en casquetes polares y glaciares. El agua dulce
disponible se reduce al 0,001 por ciento del total.
Si dividimos esta cantidad por el número total de
habitantes del planeta puede parecer que se trata de una cantidad
suficiente para cubrir todas las necesidades fundamentales para
la supervivencia humana. De hecho, se estima que, hay agua dulce
suficiente para abastecer a unos 20.000 millones de habitantes.
Desgraciadamente, no está distribuida de forma pareja,
como lo demuestran las extensas regiones áridas y
semiáridas existentes. De acuerdo a las estimaciones del
Banco Mundial, más de mil millones de habitantes en el
mundo no tienen acceso a suministros de agua apta para el consumo
y 1.700 carecen de saneamiento adecuado. Garantizar el suministro
a esos mil millones de personas requeriría una
inversión cinco veces superior a la que se destina a este
fin actualmente, es decir unos 50.000 millones de dólares
al año.
El abastecimiento de agua urbano cuesta unos 105
dólares por persona y una media de 50 dólares en el
medio rural, según la OMS.
El consumo de agua se ha triplicado en el mundo desde
1950. La respuesta a este aumento de la demanda ha consistido, en
la construcción de más y mayores obras
hidráulicas, sobre todo embalses y canalizaciones de
desvío de ríos. El número de grandes
embalses, es decir, aquellos que tienen una presa de más
de 15 metros de altura, se ha incrementado vertiginosamente en
todo el mundo, pasando de poco más de 5000 en 1950 acerca
de 38.000 en la actualidad. Más de 85 por ciento de los
grandes embalses que existen en la actualidad se han construido
durante los últimos 35 años. La ingeniería
moderna ha permitido garantizar el suministro de zonas urbanas y
rurales pero, según los ecologistas, ha favorecido la
degradación de los deltas fluviales y ha propiciado la
inminente extinción de especies y humedales.
Durante el Decenio Internacional del Agua Potable y del
Saneamiento Ambiental (1981 – 1990) se planificaron programas que
permitieron el acceso al agua potable de cientos de millones de
personas. En las zonas rurales, la disponibilidad de agua apta
para el consumo aumentó a más del doble, y en las
zonas urbanas aumentó una vez y media. Por los progresos
obtenidos se vieron socavados por el vertiginoso crecimiento de
la población en los países en vías de
desarrollo.
En 1990, 20 países sufrían escasez de
agua. En 1996, ya eran 26 (230 millones de personas),
según la Organización de las Naciones Unidas para
la Agricultura y la Alimentación (FAO). El número
de países con problemas de agua puede elevarse a 41 en el
año 2020. El Programa de las Naciones Unidas para el Medio
Ambiente (PNUMA) calcula que de aquí al año 2027,
aproximadamente un tercio de los habitantes del mundo
sufrirá escasez de agua seria. Las razones para ello son
evidentes: la mayor demanda sobre los recursos de agua dulce
provocada por las crecientes poblaciones humanas; el
empeoramiento de la calidad de los recursos acuíferos
existentes debido a la contaminación y las necesidades
creadas por la dinámica expansión industrial y
agrícola.
Las consecuencias de esta escasez se harán sentir
sobre todo en las regiones áridas y semiáridas del
planeta, pero también se experimentarán en las
regiones costeras en rápido crecimiento así como en
la megalópolis del mundo en desarrollo. Muchas de estas
ciudades son ya incapaces, o lo serán de proveer agua
potable y salubre y servicios de saneamiento adecuados a sus
ciudadanos.
La escasez y mala calidad del agua ponen en peligro la
salud, el bienestar social y económico, la seguridad
alimentaria y la diversidad biológica. Además,
agraba las tensiones y conflictos, tanto dentro como entre las
naciones. La escasez de agua podría llegar a ser
además, en el futuro, la limitación más
importante para asegurar una agricultura sostenible.
África disfruta en la actualidad de tan
sólo un tercio del agua per cápita de la que
disponía en 1960. Este continente es, junto a Asia, aquel
donde el agua escasea más y su calidad es peor. Para el
año 2000, los cinco países mediterráneos del
norte de África (Argelia, Egipto, Libia, Marruecos y
Túnez), tendrán problemas de escasez de agua, al
igual que los subsaharianos Mauritania, Kenia, Burundi, Ruanda,
Botswana, Malawi, Sudán y Somalia.
A la escasez de agua hay que sumar, como problema
añadido, su contaminación. La FAO ha advertido en
distintos informes de los efectos contaminantes de los
plaguicidas y fertilizantes utilizados en la agricultura, que
dañan las reservas de agua en superficie y
subterránea. Aproximadamente un 80 por ciento de toda la
contaminación marina tiene como origen las actividades
humanas en tierra, tales como la urbanización, la
agricultura, el turismo, el desarrollo industrial, el vertido de
aguas residuales insuficientemente tratadas y desechos
industriales, y la construcción de infraestructura
costera.
En la actualidad, entre el 40 y el 60 por ciento del
agua utilizada por empresas de servicios públicos se
pierde por causa de filtración o derrame, robo, y
rendición de cuentas deficiente. Las redes de
tuberías de las grandes ciudades europeas pueden perder
hasta el 80 por ciento del agua que transportan a causa de su
deterioro. La Comisión Económica para Europa de la
ONU evalúa estas pérdidas en unos 10.000 millones
de dólares anuales (1.2 billones de
dólares).
Sin embargo, por otro lado el consumo se ha reducido,
los agricultores que han pasado del riego por surcos o por
aspersión a eficientes sistemas de goteo han reducido su
consumo de agua entre un 30 y un 60 por ciento, incrementando a
menudo simultáneamente la productividad de sus
cultivos.
Estos sistema de goteo, pueden resultar demasiado caros
para los campesinos más pobres, pero hay investigaciones
en curso para lograr abaratarlos.
Alrededor del 80 por ciento de todas las enfermedades y
más de una tercera parte de todas las muertes en los
países en desarrollo están relacionadas con el
agua. Cada ocho segundos muere un niño por una enfermedad
relacionada con el agua. Cada año, más de cinco
millones de personas fallecen por dolencias vinculadas a su
consumo, la falta de higiene en el hogar o defectos en la
canalización. Y la diarrea originada en un 30 por ciento
de los casos por el agua causando una grave deshidratación
y malnutrición, mata cada año a casi 3 millones de
niños menores de cinco años, lo que representa la
cuarta parte de muertes en este grupo de edad.
Los riesgos para la salud asociados al consumo de agua
serán especialmente severos en las zonas urbanas en
rápida expansión, donde el crecimiento de la
población y la construcción de grandes
metrópolis limitará aún más la
disponibilidad de agua, según los expertos.
La OMS calcula que la morbilidad (número de
casos) y mortalidad (número muertes) derivadas de las
enfermedades más graves asociadas al agua se
reducirá entre un 20 y un 80 por ciento garantizando su
potabilidad y adecuada canalización.
Los patógenos que prosperan en los ambientes
acuáticos pueden provocar cólera, fiebre tifoidea,
disenterías, poliomielitis, hepatitis y salmonelosis. Se
transmiten al beber agua infectada, comer pescado y marisco
contaminado, bañarse, nadar o vadear en aguas contaminadas
o por insectos y caracoles acuáticos.
Las esquistomiasis mata cada año a unas 20.000
personas, según la OMS. Se contrae al lavarse o
bañarse en ríos, lagos o canales infectados. Un
gusano denominados esquistosoma penetra por la piel, llega a la
sangre y se instala en los vasos sanguíneos de los
intestinos o la vejiga causando, por ejemplo, un tipo de
cáncer de vejiga que es la principal causa de muerte para
los hombres menores de 44 años en Egipto.
La incidencia de la dracunculosis ha decrecido un 97 por
ciento desde 1986 gracias a la adopción de medidas
preventivas como el filtrado de agua, la desinfección de
estanques, la instalación de bombas y la protección
de fuentes. La dracunculosis la causa un parásito conocido
como gusano de Guinea. La hembra adulta puede medir hasta un
metro de largo y dos milímetros de ancho.
El parásito recorre el cuerpo causando enormes
dolores, sobre todo en las articulaciones. Finalmente, emerge por
la piel, normalmente por los pies, causando edemas, ampollas y
úlceras que suelen ir acompañadas de fiebre,
náuseas y vómitos. Los afectados pueden infectar
los estanques de los que se abastecen las aldeas sumergiendo la
parte afectada en el agua.
La erradicación global de esta enfermedad parece
próxima, con lo que, con la poliomielitis, se
convertirá en una de las escasas enfermedades que pueden
darse por eliminadas en el Planeta, categoría en la que
entra ya la viruela. Para ello se requiere que no se notifiquen
casos en ninguna parte del mundo durante al menos tres
años. La OMS certificó, el pasado mes de enero, su
erradicación en Pakistán, Irán y otros 19
países, entre los que figuran Brasil y Papúa, Nueva
Guinea. Aunque continúa presente en 18 países, 16
de ellos subsaharianos, su retroceso es evidente: en 1986 se
contabilizaron tres millones y medio de casos frente a los
120.000 detectados en 1995. La mitad de todos ellos se produce
ahora en un solo país, Sudán, cuya situación
de conflicto dificulta la erradicación de una enfermedad
para la que se precisaría una inversión de unos
tres millones de dólares (13 y 16). La dracunculosis sigue
siendo una dolencia endémica en el 44 por ciento de las
aldeas del país.
Unos 200 millones de personas en Asia, África y
Latinoamérica sufren giardiasis, una infección
intestinal que se transmite sobre todo por el consumo de agua
contaminada por heces. Causa diarrea, dolores abdominales y
pérdida de peso. Cada año se registran unos 500.000
nuevos casos, la mayoría en niños.
En la actualidad, el cólera, el tifus y la
disentería son raros en los países
industrializados. No así en los países en
vías de desarrollo, donde cada año se registran
unos 16 millones de casos de cólera y 120.000 defunciones
por esta enfermedad. Un 80 por ciento de los casos y muertes por
cólera se registran en Asia. También tiene una alta
incidencia en África y Latinoamérica.
En Estados Unidos, las enfermedades provocadas por
microorganismos transmitidos por el agua disminuyeron a una
milésima parte durante el último siglo. Aún
así, la Agencia de Protección Ambiental de EE. UU.
Calcula que las enfermedades infecciosas transmitidas por el agua
cuestan al país unos 9.700 millones de dólares al
año. En 1993, la contaminación del suministro de
agua de Milwaukee hizo enfermar a más de 400.000 personas,
de las que murieron 104. El desastre costó a la ciudad
unos 150 millones de dólares.
En 1991 se consideró que el agua vertida por un
carguero chino era la culpable de haber introducido la estirpe
asiática del cólera en aguas de Perú. Se
cree que, después del vertido, las bacterias se propagaron
rápidamente en el ecosistema marino, infectando al
plancton y llegando hasta la población humana a
través del consumo de agua, pescado y mariscos
contaminados.
Transcurridos dos años del vertido, se
habían registrado más de 500.000 casos de
cólera en toda América Latina, 200.000 de ellos en
Perú.
La degradación del Mar de Aral ha provocado que
cientos de miles de personas padezcan anemia y otras enfermedades
debido al consumo de agua saturada de sales y contaminada de
sustancias químicas procedentes de los campos de
algodón.
De acuerdo a un estudio realizado por Medicus Mundi in
Gugerat, un estado situado en el oeste de la India, el agua de
los pozos analizados presentaba un alto grado de
contaminación fecal, responsable de la alta prevalencia de
parásitos en la zona. Se analizó a más de
200 personas y resultó que el 87.3 por ciento estaba
infectado con parásitos intestinales. Un 85,3 portaba
parásitos patógenos.
Las tendencias que ahora están apareciendo
indican que estamos acercándonos a una "crisis del agua"
en varias regiones, más notoriamente en el Medio Oriente y
en África del Norte, donde la disponibilidad de agua per
cápita es de 1.247 metros cúbicos por año,
una de las más bajas en el mundo, comparada con 18.742
metros en América del Norte y 23.103 en América
Latina. "Es muy probable que en el futuro, las querellas y los
problemas ocasionados por la merma de los suministros de agua
habrán de constituir una fuente de conflictos entre las
naciones", advierte la directora ejecutiva del Programa de
Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA), Elizabeth
Dowdeswell. Según el Worldwatch Institute, "ni los
gobiernos ni la comunidad internacional están para
conjurar los disturbios y conflictos exteriores que
podrían ser el resultado de que se agrave y generalice la
penuria del agua", cuya escasez será, en un futuro
cercano, la principal limitación para la producción
agrícola en muchas zonas del mundo.
Las cuencas fluviales con más riesgo de
convertirse en zonas calientes de hostilidades son aquellas en
donde al menos dos países comparten un río cuyo
caudal resulta insuficiente para satisfacer toda la demanda y no
existe un tratado reconocido por todos los países de la
cuenca que rija el reparto. El Worldwatch señala varias
"áreas calientes en potencia": el Ganges, el Nilo, el
Jordán, el Tigres-Eufrates y el Amu Darya y Syr Darya, en
Asia Central.
El acceso al agua para el consumo para los hogares y las
actividades agrícolas e industriales de pequeña
escala mejora las condiciones de vida en general y puede
incrementar de forma notable las oportunidades de los más
pobre para aumentar su ingreso, tal como señala Anders
Wijkman, administrador adjunto del Programa de las Naciones
Unidas para el Desarrollo (PNUD) y miembro del Club de
Roma.
El agua genera además, empleo y sustento para
millones de personas. El 60 por ciento de los habitantes del
mundo depende directamente de los ambientes costeros y
oceánicos como una fuente de ingreso de actividades tales
como la pesca, el transporte naviero y el turismo. La zona
costera y el medio marítimo son, por ejemplo, esferas
fundamentales para las economías de los estados litorales
de África Occidental. En el año 2.015 se estima que
alrededor del 75 por ciento de los habitantes del mundo
vivirán en un radio de 60 kilómetros de la
costa.
Las mujeres y las niñas de zonas rurales de los
países en desarrollo invierten hasta cinco horas diarias
en ir a buscar agua de las fuentes, distantes muchos
kilómetros de sus casas. Acercar esas fuentes a sus
hogares les dejaría tiempo libre para incrementar los
ingresos familiares, además de conllevar importantes
beneficios para su salud.
Las aguas subterráneas o freáticas son
aquellas que se acumulan bajo la tierra, almacenadas en los poros
que existen en sedimentos como la arena y la grava, y en las
fisuras que se encuentran en rocas. Constituyen el 97 por ciento
de toda el agua dulce del planeta, excluyendo el agua contenida
en los casquetes polares. Por lo menos 1.500 millones de
habitantes en todo el mundo dependen de ella para su
abastecimiento de agua potable, por lo que resulta un recurso
fundamental para la vida humana y para el desarrollo
económico.
Las aguas subterráneas se han convertido en un
elemento de enorme importancia para la provisión de agua
para uso humano en las zonas urbanas y rurales, tanto en
países desarrollados como en desarrollo. Innumerables
ciudades obtienen su suministro para uso doméstico e
industrial de acuíferos a través de pozos
municipales y privados. Casi el 60 por ciento de las ciudades
europeas de más de cien mil habitantes consume agua
procedente de acuíferos sobreexplotados.
Los agricultores que usan aguas subterráneas para
irrigar sus cultivos durante la época seca son cada vez
más. En las zonas más áridas, donde las
precipitaciones son bajas y difícilmente pronosticables,
el agua freática puede ser la única fuente de
suministro para todos los tipos de actividad agrícola,
incluso para abrevar el ganado Sin embargo, los recursos de aguas
subterráneas se encuentran actualmente bajo crecientes
presiones a causa del rápido crecimiento de las
poblaciones humanas, tanto por la demanda en constante aumento
como por la carga contaminante sobre la superficie de tierra. Se
están extrayendo cantidades de agua a ritmos insostenibles
en muchas zonas, disminuyendo seriamente las reservas.
Además, hay una evidencia creciente de que el agua
freática está cada vez más
contaminada.
Los contaminantes más comunes son el nitrato, la
sal, los compuestos orgánicos solubles y, en ciertas
condiciones, algunos patógenos fecales.
En el subsuelo africano existen extensos
acuíferos no recargables. Sus descensos de reservas se
estiman en 10.000 millones de metros cúbicos al
año.
El Banco Mundial calcula que la necesidad de una
ordenación general de los recursos hídricos en el
futuro requerirá una inversión de al menos 600.000
millones de dólares para una amplia gama de inversiones
relacionadas con el agua en todo el mundo durante la
próxima década. La mayor parte de estos fondos
tendrá que ser recaudada por los países mismos,
pero una parte de las necesidades de los países en
desarrollo, 60.000 millones de dólares, deben provenir del
extranjero (el Banco Mundial prestará entre 30.000 y
40.000 millones de dólares de esta suma).
A nivel internacional existe cierto consenso, respecto a
los principios fundamentales que han de regir la gestión
del agua. Entre ellos figuran los siguientes:
* El agua es un recurso escaso y debe tratarse como un
bien social a la vez que económico. Los ciudadanos
tendrán que usar el agua de forma más eficiente y
contar con pagar el costo real de este recurso precioso.
Según el Worldwatch Institute, en términos
generales sólo se paga el 15 por ciento del precio real
del agua circunstancia que, a su juicio, desalienta el
ahorro.
Diversos expertos se han pronunciado a favor de limitar
o poner fin a los ingentes fondos públicos que se destinan
a subsidiar el agua, sobre todo en la agricultura, que absorbe el
69 por ciento del agua. La producción de una tonelada de
cereales, ya cosechada, cuesta unas mil toneladas de agua. De
acuerdo a las estimaciones de los especialistas, si el consumo de
cereales se mantiene en el nivel actual, en el 2025 serían
necesarios 780.000 millones de metros cúbicos de agua
adicionales para satisfacer la demanda de la población. Es
decir, más de nueve veces el caudal anual del río
Nilo. El 23 por ciento de los recursos hídricos, a nivel
mundial, se destina a la industria y un escaso 8 por ciento se
dedica a usos domésticos. * El agua debe manejarse dentro
de un marco general, tomando en cuenta consideraciones
intersectoriales. El problemas del agua debe abordarse, pues,
desde un enfoque integrado, que vincule la ordenación del
uso de la tierra con la ordenación sostenible del agua,
reconozca el agua como un bien económico y fomente
intervenciones efectivas en función del costo. * La
prevención de conflictos generados por el agua requerida,
por otro lado, el cumplimiento y desarrollo concreto de las
recomendaciones aprobadas en 1991 por la Comisión de
Derecho Internacional de las Naciones Unidas: * Informar a
países vecinos que compartan masas acuáticas y
consultar con ellos antes de emprender actuaciones que pudieran
afectarlos. * Intercambiar con periodicidad datos
hidrológicos. * Evitar ocasionar perjuicios sustanciales a
otros usuarios. * Distribuir de manera razonable y equitativa el
agua de una cuenca fluvial compartida. La prevención y la
reducción de la contaminación industrial puede ser
altamente receptiva a políticas de incentivos bien
estructurados, según los expertos, que abogan por el
fomento de las medidas que pongan énfasis en la
prevención, como son la adopción de una
tecnología de proceso eficiente, la minimización de
los desechos, el reciclado y la recuperación de recursos.
Asimismo, debería promoverse activamente la
aplicación de un principio básico: aquel
según el cual "quien contamina paga". De esta forma se
incrementará el compromiso de municipios, industrias y
usuarios. Algunas organizaciones ecologistas apuestan por la
aplicación de impuestos verdes o ecotasas a la
extracción abusiva de aguas freáticas o de
acuíferos fósiles para evitar el agotamiento
hídrico. Los ingresos derivados de estas ecotasas
podrían destinarse, proponen, al desarrollo de
procedimientos sostenibles para subvenir las necesidades
hídricas de determinadas regiones. Otra de las
alternativas pasa por una reutilización más
intensiva del agua. El tratamiento de la aguas residuales es un
método hasta ahora muy poco usado, pero se aplica ya para
el riego en comarcas de California, India, México y, en
especial, en Oriente Medio. En Israel, más del 70 por
ciento de las aguas residuales tratadas se utilizan en
irrigación, y se estima que en El Cairo las posibilidades
de utilizar aguas residuales en el riego en el año 2010.
La lucha contra las enfermedades transmitidas por el agua
requiere la concienciación de la población
interesada sobre la conveniencia de adoptar ciertas medidas
preventivas. Las ONGs repartieron en el departamento de
Matiacoalí (Burkina Faso) filtros de tela y de grava y
tierra para evitar la transmisión de determinadas
enfermedades. "Son fáciles de usar, pero apenas se
utilizan por comodidad o pereza. Sólo los usa la mujer del
pastor protestante. Incluso los altos funcionarios, con
formación intelectual, prefieren beber el agua tal cual",
apunta Celia Roldán, cooperante de Medicus Mundi en la
zona. La construcción de pozos es fundamental para aliviar
la situación de escasez que padecen muchos países
del Sur. En este sentido, ya se están realizando algunas
experiencias como la encabezada por la Organización
Keniana Agua para la Salud (KWAHO), que capacita a los equipos de
aldea (particularmente a mujeres) para construir y mantener
bombas de agua en la región de Kuwale. El Ministerio para
el Agua de Kenia costea la perforación de los pozos (cada
uno cuesta entre 2.000 y 3.000 dólares) y KWAHO aporta
bombas. La comunidad se hace cargo de su mantenimiento, lo que
supone unos 12 dólares por bomba. Dado que cada bomba
sirve a un promedio de 250 personas y tiene una vida útil
de unos 10 años, cada familia paga en torno a seis
céntimos de dólar por semana. La iniciativa ha
ahorrado largas caminatas a las mujeres y se ha traducido en un
importante descenso en la incidencia de las enfermedades
relacionadas con el agua. El número de casos de diarrea y
vómito han disminuido casi a la mitad. Medicus Mundi
Castilla-León está desarrollando en valle de Angar
Guten Etiopía, un proyecto de salud comunitaria en el
Addis Abbeba. Dicho proyecto comprende, entre otras acciones, la
adecuación de los manantiales naturales de agua de la zona
para prevenir las enfermedades transmitidas por las aguas
contaminadas y la construcción de una fuente que, como
suele suceder con este tipo de proyectos, resulta especialmente
beneficiosa para la población femenina de la zona, en la
que viven en torno a 28.000 personas, ya que les permitirá
abastecerse de agua sin necesidad de recorrer largas distancias
varias veces al día. Las clínicas adscritas al
proyecto venían atendiendo constantemente casos de
parásitos intestinales que, sobre todo en el caso de los
niños, terminan provocando desnutrición y anemia en
una población infantil especialmente vulnerable por los
déficits nutricionales derivados de su dieta. Medicus
Mundi también ha construido pozos en el departamento de
Matiacoalí (Burkina Faso) para abastecer huertos
comunitarios cultivados por mujeres.
Entre 1993 y 1996 se construyeron cuatro pozos artesanos
para este fin. Cada uno tiene un coste que oscila entre las
200.000 y las 250.000 pesetas. Actualmente están en
ejecución tres pozos más a los que se
sumarán otros cinco, financiados por la ONG catalana Aigua
per al Sahel, que construirá Medicus Mundi. Además,
esta organización ha dotado al centro de salud de
Matiacoalí de un pozo forage, cuya profundidad garantiza
el suministro incluso en épocas secas, y ha construido
otro en el departamento burkinabé de Pama, cerca de la
frontera con Togo. El coste de este tipo de pozos es de 1.250.000
dólares, aproximadamente. La problemática sobre la
distribución del agua constituye un planteo mundial, donde
las naciones "ricas" tendrán que apiadarse de sus hermanas
pobres, lo que depende del buen sentido común, si es
(claro está) que no se interpongan otros turbios
intereses.
2.2. PLANTEAMIENTO DEL
PROBLEMA:
Para comprender el problema, hay que considerar un
rosario de datos basados en la extracción,
distribución y consumo del agua – lo muestran la Biblia o
el Corán- que poseen la edad del mundo; que han dado lugar
a conflictos de gran magnitud. Lo nuevo del caso es que, desde
hace una década, se acumulan las cifras que presagian que
el planeta se encamina a una escasez cada vez más
marcada.
El problema es que el agua es un recurso que se da
sentado en muchos lugares, es muy escaso para los 1.100 millones
de personas que carecen de acceso al agua potable, a las que
habría que sumar otros 2.400 millones de personas que no
tienen acceso a un saneamiento adecuado.
Página siguiente |