- Conceptos de sexualidad y
regímenes de visibilidad en la cultura
griega - La
comedia aristofánica: características,
temáticas y funciones - Lisístrata
- Sexualidad y
obscenidad - Bibliografía
Introducción
La lectura de la
literatura
clásica (griega y romana) realizada en las instituciones
de formación universitaria se caracteriza por construir
formas de abordaje , representaciones y significaciones reguladas
en torno a tres
conceptos culturales básicos: universalidad, equilibrio y
orden. En tal sentido, podemos preguntarnos: ¿qué
lugar ocupan las experiencias sexuales, eróticas y
obscenas en el interior de este imaginario cultural, muchas veces
obliteradas por la tradición erudita? Una premisa
fundamental para este conjunto de reflexiones consiste en
proponer no una visión de la cultura griega
y su literatura en términos de un entramado de ideas y
producciones literarias regidas por los tres conceptos
anteriores, sino más bien considerar dicha cultura y sus
manifestaciones artísticas como una variedad de
prácticas sociales en conflicto.
El examen de la comedia Lisístrata de
Aristófanes (445c. 385 a.C) posibilita observar de
qué manera el entramado de experiencias sexuales y sus
significaciones obscenas configuradas por este texto tensiona
las concepualizaciones anteriores para mostrar cómo, a
partir del tratamiento singular de la figura femenina, se propone
otra visión del mundo y del funcionamiento social de la
cultura griega en el período clásico teniendo en
cuenta las formas de vida atenienses y su valoración
crítica
por parte de esta comedia.
Conceptos de sexualidad y
regímenes de visibilidad en la cultura
griega
Desde el sentido común instaurado por las
sociedades
occidentales a partir de los siglos XVII y XVIII, cuando hablamos
de sexualidad hacemos referencia a un dato biológico que
califica a los individuos según características
naturales orientadas a un modo de ser (heterosexualidad, homosexualidad, bisexualidad). Para la
civilización griega, sin embargo, existía otro
concepto de
sexualidad. Este último era concebido en términos
de comportamientos sexuales regulados, jerarquizados y
controlados socialmente. A las diferentes formas y modalidades de
dichas regulaciones las denominamos regímenes de
visibilidad, variables
según las épocas, períodos y estado de cada
organización social.
De acuerdo con una perspectiva antropológica ,
cualquier configuración representable e imaginable del
placer puede ser institucionalizada como convencional y percibida
por los integrantes de una sociedad como
"natural"?. Si descomponemos teóricamente la idea de
sexualidad, es posible mencionar tres principios
estructurantes de la misma:
• Relación activo/ pasivo: los hombres
penetran y las mujeres son penetradas. Tal principio
estructurante de la sexualidad, en este caso vinculado a la
heterosexualidad, también era aplicable a otras
prácticas sexuales como la homosexualidad, la pederastia,
entre otras.
• Visión hegemónica masculina: los
textos y descubrimientos arqueológicos hallados
están elaborados la mayoría de las veces desde la
perspectiva de los hombres.
• Vínculos de subordinación y
jerarquías: la relación sexual tenía para la
sociedad ateniense en la época clásica un carácter asimétrico. El rol activo
era considerado más aceptable y respetado que el papel
pasivo, muchas veces objeto de desprestigio y burlas por parte de
los artistas, intelectuales
y ciudadanos.
En un plano de mayor abstracción, estos
principios estructurantes son denominados falocentrismo y
androcentrismo, siendo conceptualizados según la
categoría de protocolos , como
ese conjunto de convenciones sociales que regulan los
comportamientos sexuales:
Penetrar no es todo el sexo, sino el
aspecto de la actividad sexual que era apto para expresar las
relaciones sociales de honor y vergüenza, engrandecimiento y
pérdida, mando y obediencia y, por consiguiente, el que se
presentaba con más preponderancia en los esquemas antiguos
de clasificación sexual y juicio moral.
(1994: 53)
El pene, órgano fundamental de las
prácticas sexuales, aparece en el Libro de los
Sueños de Artemidoro y condensa una multiplicidad de
significaciones sociales:
El pene es como los padres de un hombre, dado
que contiene el código
generativo (spermatikós logos) pero también como
sus hijos, dado que es su causa. Es como su esposa y su novia,
dado que es útil para el sexo. Es como sus hermanos y
todas las relaciones de sangre, dado que
el significado de toda la casa depende del pene. Significa
fortaleza y virilidad del cuerpo, dado que las causa realmente:
por esta razón algunas personas lo llaman su "virilidad"
(andreia). Se parece a los razonamientos y la educación dado
que, como la razón (logos), es la cosa más
generadora de todas…Sugiere además excedentes y
posesiones, dado que a veces se despliega y a veces se relaja y
puede producir y expulsar. Es como los planes ocultos, dado que
tantos éstos como el pene son llamados médea; y es
análogo a la pobreza, la
esclavitud y
el encarcelamiento, dado que es llamado "necesidad" y es un
símbolo de coacción. Es como el respeto de ser
honrado, dado que es llamado "reverencia" (aidós) y
"respeto".
(I. v.45)
Veremos entonces de qué manera la obra Lisístrata
de Aristófanes se apropia de algunas de estas
significaciones y las utiliza para construir representaciones del
género
femenino, el sexo y la obscenidad. Pero antes realizaremos una
breve descripción de la comedia
aristofánica a los fines de contextualizar y comprender
-dentro de las limitaciones que nos impone el trabajo con
una traducción– algunos sentidos del texto
mencionado.
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