Propuesta de Intervención Educativa sobre indicadores suicidas dirigida al personal de enfermería
- Resumen
- Introducción
- Desarrollo
- Enfermería y Suicidio
- Conclusiones
- Anexos
- Referencias
bibliográficas
Resumen
Se realiza un estudio descriptivo informacional, con el
propósito de brindar a las enfermeras el conocimiento de
algunos aspectos esenciales del suicidio (características,
indicadores de riesgo, métodos para el diagnóstico
e intervención), para aumentar la efectividad de su papel
en la prevención de este problema de salud, a partir de
haber determinado previamente las necesidades informativas de
estas profesionales. Se analiza lo útil que es la
utilización del proceso de atención de
enfermería para el abordaje de los pacientes y familias
con riesgo suicida. Se plantean las principales señales de
peligro para comportamiento suicida, así como los factores
de riesgo esenciales y los métodos más importantes
para detectar ambos indicadores de forma precoz. Posteriormente
se le orienta a las enfermeras cómo intervenir frente a un
paciente con indicadores suicidas y con su familia. Se concluye
que una mejor preparación de estas profesionales para
enfrentar este problema de salud sería una
contribución relevante a la disminución del impacto
del suicidio en la comunidad.
Descriptores: INDICADORES DE SALUD; ATENCION PRIMARIA DE
SALUD; ATENCION DE ENFERMERIA; SUICIDIO/prevención y
control; FACTORES DE RIESGO.
Introducción
El suicidio es la modalidad más extrema de la
violencia, es la violencia contra sí y se puede producir
en cualquier persona, independientemente de su edad, nivel
socioeconómico, educación y orientación
filosófica o religiosa.
Este comportamiento es un importante problema de salud a
nivel mundial y su etiología es multifactorial, por lo que
para lograr su disminución es necesario el esfuerzo en
conjunto de la sociedad y de todos sus actores.
La prevención del suicidio es una función
importante y está encuadrada en el campo de la salud
pública, por lo que en ella desempeñan sus
funciones los profesionales de la salud y las fuerzas activas de
la comunidad. Para realizar esta tarea con calidad y eficiencia
es necesario el aprendizaje de conocimientos básicos sobre
el suicidio y de habilidades para su detección y
enfrentamiento.
Shneidman define el suicidio como «el acto humano
consciente de aniquilación autoinducida, mejor comprendido
como un malestar multidimensional en un individuo necesitado que
delimita un problema para el que el acto es percibido como la
mejor solución».1
Este comportamiento en el mundo aumenta por día y
las Américas no constituyen una excepción de esta
tendencia. De los 24 países con información,
alrededor del año 1990, 5 de ellos tienen el 20 % ó
más de las muertes por causas externas debido a suicidios,
Suriname con 31 %, Trinidad y Tobago con 29 %, Cuba2,3 con 27 %,
Canadá con 26 % y los Estados Unidos de América con
20 %. En Cuba el número de suicidios pasó de 1 011
en 1970 a 2 280 en 1992 y en 1993 la tasa nacional fue de
21,5.
En Villa Clara4 el suicidio fue la novena causa de
muerte con tasa de 14,3 y la tercera en el grupo de 15 a 24
años en 2009, mientras que en nuestro municipio de
Remedios hubo 7 suicidios y 40 intentos notificados en el
año 2010 (Dirección Municipal de Salud.
Estadísticas Municipales. 2010).
La lucha por la salud del pueblo se vence en el nivel de
Atención Primaria, por eso los profesionales tratan de dar
su máximo esfuerzo en el trabajo y tienen el deber moral
de hacerlo. Ahora bien, hay problemas de salud como el que nos
ocupa, donde para rendir el máximo y con calidad es
necesario conocerlo y adiestrarse en las especificidades para
detectarlo y enfrentarlo. Teniendo en cuenta esto, tiene un valor
incalculable que el apoyo social llegue al suicida lo más
temprano posible, para con su calidad detener la tendencia o
modificar su contenido.
Las enfermeras son parte esencial de este grupo de
profesionales que trabajan en este nivel de atención. Sin
embargo, conocemos que en nuestro municipio su preparación
teórica y práctica para la prevención del
comportamiento suicida es insuficiente (Comisión de Salud
Mental Municipal, 2010).
Esta realidad dio lugar a la realización de este
trabajo con el objetivo de proporcionar a las enfermeras el
conocimiento suficiente, oportuno y adecuado de las
características principales del suicidio como problema de
salud; de los indicadores suicidas esenciales y de las
orientaciones fundamentales para la intervención
preventiva en los pacientes generales y sus familias.
Desarrollo
Se realizó un trabajo descriptivo informacional
sobre conocimientos del suicidio que necesitan poseer las
enfermeras para intervenir eficazmente en la prevención
del suicidio a partir de haber determinado las necesidades
informativas de éstas, mediante encuesta de nivel de
información sobre aspectos del suicidio que se le
realizó a un grupo de 32 enfermeras del Policlínico
Docente Remedios (tablas 1, 2, 3 y 4).
Tabla 1. Nivel de información sobre
características importantes del suicidio en las enfermeras
del Policlínico Docente Remedios 2010.
Fuente: Encuesta.
2. Nivel de conocimientos sobre indicadores de conducta
suicida en las enfermeras del Policlínico Docente de
Remedios 2010.
Fuente: Encuestas.
Tabla 3. Conocimientos sobre técnicas sencillas
para el diagnóstico y habilidades para su
aplicación en las enfermeras del Policlínico
Docente Remedios 2010.
Fuente: Encuesta.
Nota: Técnicas sencillas: comprende las
principales características de la observación, la
entrevista, el cuestionario y la encuesta.
Tabla 4. Intervención ante un paciente con riesgo
suicida de las enfermeras del Policlínico Docente
Remedios. 2010.
Fuente: Encuestas.
Los conocimientos brindados en el trabajo se elaboraron,
teniendo en cuenta los autores, el análisis de la
bibliografía actualizada, sus experiencias clínicas
e investigativas y los principales aportes y conclusiones que
sobre la detección temprana, la prevención del
suicidio y el papel de las enfermeras en estas tareas se
plantearon en un taller docente municipal que organizó
dicha comisión en el año 2006, la
participación de diversos especialistas (médicos,
psicólogos y enfermeras).
Los indicadores suicidas comprenden todas aquellas
conductas o ideas que hacen probable la ocurrencia próxima
de un comportamiento suicida y se expresan a través de las
señales de peligro y de los factores de riesgo
esenciales.
Enfermería y
Suicidio
Estas profesionales generalmente tienen un excelente
rapport con la población y prestigio como apoyo social en
su comunidad, de manera que su labor puede tener una gran
importancia en la prevención del suicidio, si se les
adiestra en las habilidades y conocimientos
necesarios.
En una encuesta de nivel de información sobre
aspectos del suicidio y su enfrentamiento que se aplicó a
un grupo de enfermeras de nuestro policlínico, la
Comisión de Salud Mental Municipal detectó
insuficiencias en sus conocimientos y habilidades (tablas 1 y 2)
que puede estar determinado porque este tema no es abordado en
los planes de estudio de las enfermeras generales y muy poco en
su educación postgraduada a pesar de las exigencias de la
situación de salud actual y de las nuevas
responsabilidades que impone a este personal la estrategia de
atención primaria.5
Sin embargo, esta profesional tiene como método
principal de trabajo el Proceso de Atención de
Enfermería6 que le brinda una herramienta de trabajo
eficaz para el diagnóstico temprano y la
intervención oportuna, haciendo énfasis en los
aspectos subjetivos y objetivos del sujeto portador de la
enfermedad o comportamiento no saludable.
Este proceso posibilita que la enfermera aumente la
calidad de sus observaciones, de su diagnóstico y de sus
intervenciones dirigidas al individuo y a su familia, cuestiones
claves para enfrentar el comportamiento suicida en cualquiera de
las etapas de su evolución natural en el individuo.
Además, permite la retroalimentación constante para
la efectividad de la prevención, la intervención y
la posvención.7
Suicidio. Características principales
La prevención del suicidio implica saber que va
desde la aparición del sentimiento de desesperanza hasta
la realización del intento suicida y mientras más
temprana y eficaz sea la intervención del agente sanitario
mejor pronóstico tiene el paciente y la disminución
de las muertes por este
– Sentimientos acerca de la muerte: es importante su
análisis en el sujeto, pues sería la muerte un
posible resultado de su conducta y muchas veces se valora
culturalmente ésta como una solución de
tranquilidad, aun cuando ella representa abandonar la vida humana
y negar la capacidad de adaptación o modificación
del medio social que posee y puede desarrollar el
hombre.
– Comunicación: la conducta suicida puede ser a
menudo una forma de comunicarse de forma peligrosa y desesperada
expresando sus sentimientos sobre sí mismo, la
situación en la cual se siente atrapado y su necesidad de
atención y ayuda, a partir de una sensación
desesperada de incapacidad para enfrentarse con sus problemas y
la infeliz conclusión de que no le importa a los otros o
estos no lo escuchan adecuadamente. Interaccionalmente el
suicidio pretende enviar un mensaje de enojo a una persona
específica que siempre existe.
– Ambivalencia: presencia simultánea en los
suicidios de sentimientos de vida y de muerte, de odio y amor que
se pueden expresar hacia la misma persona y que estabilizan la
inseguridad, esta característica es vital para la
intervención temprana efectiva nos permite influir y
reorientar a la "diada" y emplear mejor los sistemas de apoyo
social.8
Este comportamiento puede tener múltiples causas
externas, en cuya esencia psicológica creemos que el
sujeto refleja las situaciones conflictivas de su realidad como
perpetuamente desilucionantes y atormentantes. Esta tendencia
provoca fallos en sus mecanismos autorreguladores que se expresan
en descenso de su autoestima y en que se introyecte la
agresión percibida, en el entorno social, contra sí
mismo.
Este proceso se produce acompañado de una fuerte
angustia y vivencia de soledad, el sujeto pide ayuda de cualquier
forma directa o indirectamente; algunos investigadores consideran
"que prácticamente en todos los casos se dan oralmente o
por el comportamiento indicios del propósito
suicida».9 No obstante con frecuencia esas llamadas se
advierten y no se hace nada por atenderlas.
El acto suicida tiene varios estadios que van desde la
consideración de éste como una opción
posible hasta la adopción de la decisión con
planes, preparación previa y aparición de calma
repentina; en la población cubana estas etapas con
frecuencia se pueden identificar en expresiones del sujeto como
"estoy atormentado", "las ideas malas no se me van", "quiero
terminar con todo", etc.
Una vez que la enfermera ha desarrollado las habilidades
necesarias para realizar adecuadamente el proceso de
atención de enfermería en la Atención
Primaria y domina las principales características
psicosociales del suicidio es indispensable que aprenda a
identificar los indicadores o señales de peligro del
comportamiento suicida y sus factores de riesgo
esenciales.
La revisión crítica de la literatura
científica,10-14 el análisis de la experiencia
clínica e investigativa sobre este tema15 de los autores y
los criterios importantes y acuerdos alcanzados en el taller
municipal sobre el tema nos permiten afirmarles que las
señales de peligro para el comportamiento suicida que
deben observar en las personas son las siguientes: 1)
Comportamiento autoagresivo. 2) Comportamiento pasivo ante
frecuentes agresiones del entorno social. 3) Cambio brusco en los
hábitos de comer y dormir. 4) Presencia frecuente de
desvaloración. 5) Miedo a la separación. 6) Cambios
súbitos en el estado de ánimo. 7) Presencia de poco
interés hacia el trabajo y hacia la vida en general. 8)
Pérdida o ausencia de amigos. 9) Pérdidas recientes
e importantes: afectivas o de status. 10) Obsesión con la
muerte o pensamientos recurrentes en torno a ella. 11) Repartir
objetos muy queridos. 12) Hacer algo así como testamentos
o cartas de despedida. 13) Presentar sentimientos de desesperanza
o desilusión frecuente. 14) Presencia de deseos de muerte
o fantasías de autodestrucción. 15) Proferir
amenaza suicida a amigos, familiares o personal de salud. 16)
Persona desesperada con sentimiento de culpa y temor a perder el
control emocional. 17) Presencia de fantasías de dormirse
y no despertar. 18) Adolescentes con problemas sentimentales y
dificultades en su comunicación. 19) Pérdida de la
ilusión por el futuro.
Los factores de riesgo esenciales para el intento
suicida son: a) Personas sin apoyo social y familiar. b) Personas
que han sobrevivido al intento suicida. c) Personas que han
llamado la atención por presagiar o amenazar con el
suicidio. d) Antecedentes familiares de suicidios o de intentos.
e) Presencia generalizada de sentimientos de culpa y
desesperanza. f) Presencia de depresión mayor. g)
Presencia de ansiedad e insomnio severo.
La existencia de un número mayor de
señales de peligro y/o de factores de riesgo es
directamente proporcional al aumento del riesgo suicida en los
individuos.
Estos aspectos son detectables a través del
empleo de técnicas sencillas para el diagnóstico
como la observación (directa e indirecta), la entrevista,
el cuestionario y la encuesta que conocen muchas de nuestras
enfermeras (tabla 3). Estas técnicas exigen para ser
eficaces y confiables, algunas condiciones como precisión
y claridad; categorías bien definidas; abordar aspectos
principales del problema; privacidad y discreción, y rol
activo del agente sanitario en la utilización de
ellas.
En el caso de los cuestionarios les damos a conocer uno
de indicadores de riesgo (anexo) que estamos utilizando en
nuestra área de salud, el mismo debe ser llenado por el
agente sanitario con la información del paciente
general.
Cuando una persona resulta evaluado como riesgo suicida
con cualquiera de las técnicas recomendadas, la enfermera
procede a comunicárselo a su médico de la familia o
al psicólogo de su grupo básico o a la supervisora
de enfermería de manera que posterior a su
intervención inicial se haga efectiva la
intervención más especializada del equipo de salud
mental mediante la realización de las tareas que plantea
el programa nacional de suicidio o las estrategias municipales
trazadas.
Al analizar la cuestión de la actuación de
la enfermera la encuesta aplicada por la comisión
municipal de salud mental mostró que estas profesionales
en mayoría intervenían inadecuadamente ante las
personas con riesgo suicida (tabla 4). Por esto una vez que las
enfermeras conocen qué buscar y cómo hacerlo se
impone orientarles qué hacer en su intervención
inicial ante el paciente con peligro suicida y su familia: 1)
Creerle y tomarlo en serio. 2) Entender sus sentimientos y
alentarlo a que actúe, luche, etc. 3) Ayudarle a encontrar
respuestas y alternativas para la vida. 4) Hacerle saber que se
desea ayudarlo y se sabe cómo. 5) Facilitar que verbalice
y exprese sus sentimientos. 6) Explorar los motivos del intento
sin temor y con seriedad. 7) Enseñar al paciente que pida
ayuda en los momentos de angustia antes de tomar decisiones. 8)
Estimular sus cualidades positivas y éxitos recientes. 9)
Buscarle ayuda profesional especializada (psicólogo,
psiquiatra). 10) Visitar a su familia y orientarla sobre
cómo apoyar y comunicarse clara y directamente con el
suicida. 11) No retar al paciente, ni aliarse a su
solución de muerte. 12) Ayudarlo, darle cariño,
seguridad y no juzgarlo. 13) Entrenar a su familia en la
realización de comunicaciones cálidas y
espontáneas entre sus miembros. 14) Darle apoyo emocional
y de soluciones a los familiares sobrevivientes a la
víctima. 15) Propiciar la comunicación del suicida
y su familia con grupos de autoayuda del escenario
comunitario.
Creemos que es importante el desarrollo y
difusión de tecnologías sencillas referidas a la
identificación y manejo de pacientes con comportamientos
no saludables en la Atención Primaria y la
educación en servicio de las enfermeras apoyada por los
servicios especializados en salud mental. Estas cuestiones
propician un diagnóstico precoz e intervenciones
sanitarias de mayor calidad que se ajusten a las necesidades
psicosociales de nuestra población y a los requerimientos
científicos de los problemas de salud que
abordamos.
Conclusiones
Concluimos que el aumento del conocimiento sobre la
conducta suicida, la búsqueda activa de las señales
de peligro y factores de riesgo unido a una intervención
preventiva eficaz del personal de enfermería en su
población sería una contribución relevante a
la disminución del impacto de este problema de salud en
nuestras comunidades.
Anexos
Cuestionario de indicadores de riesgo. (CIR)
Nombre: Edad: Escolaridad:
Estado civil: Ocupación:
Instrucción: Analice cada pregunta y responda con
sinceridad la alternativa que más se aproxime a su
situación real, esto hará precisa la
evaluación y podremos ayudarlo mejor. Gracias
1. ¿Se ha sentido atormentado con
frecuencia en estos últimos 8 meses?
Si ___ No____
2. ¿Ha realizado intento suicida alguna vez en su
vida?
Si___ No____3. ¿En su familia
alguien ha realizado un intento suicida?
Si___ No____4. ¿Ha tenido crisis de
insomnio severo ó trastornos frecuentes en el sueño
en este último año?
Si___ No___ 5. ¿Ha tenido ideas,
fantasías ó sueños de matarse en este
último año?
Si____ No___ 6. ¿Alguna vez ha
elaborado planes concretos para matarse?
Si ___ No___ 7. ¿Ha expresado deseo
de hacerse daño en alguna conversación,
discusión o confesión en el contexto familiar,
laboral, matrimonial, etc, en este último año?
Si___ No___ 8. ¿Con frecuencia piensa que los demás
estarían mejor sin usted?
Si ___ No___ 9. ¿Se siente
desilusionado con su vida actual?
Si___ No___ 10.¿Soporta muchas
agresiones psicológicas y/o físicas de las otras
personas sin responderle con igual intensidad?
Si___ No___ 11.¿Se ha sentido
deprimido más de una vez en este último
año?
Si___ No___ 12. ¿Tiene alguna
persona con la cual analice sus problemas íntimos, sus
conflictos y preocupaciones al menos una vez al mes? Si___ No___
13. ¿Se siente aislado socialmente en los últimos
tiempos?
Si___ No___ 14. ¿Se considera
pesimista ante los problemas de la vida?
Si___ No___ 15. ¿Se siente impotente
para cambiar su situación de vida actual si lo
deseara?
Si___ No___
Diagnóstico: Evaluado
por:
Evaluación: a) Riesgo Suicida:
aquellas personas que responden positivamente algunas de las
preguntas de la 1 a la 11, éste aumenta con el aumento del
número de respuestas positivas en estas preguntas b) Sin
Riesgo Suicida: aquellas personas que responden afirmativamente
una pregunta o más de la 12 a la 15.
Referencias
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Autor:
Lic. Yuliet Herrera
Jiménez.
Coautores:
Lic. Daisy Salazar
Rodriguez
Filial Ciencias Medicas Remedios
Enviado por:
Aquedo Paz Rodriguez