- Introducción
- Los
primeros años - ¿Y en Venezuela…
qué? - Aparece en Venezuela la FM
- Historia de la radio en el estado
Táchira
Introducción
La radio es un medio que sido capaz de reinventarse a lo
largo del tiempo a lo largo del tiempo. Viajar a través de
la historia de la programación de cualquier emisora es
descubrir las necesidades, gustos y pensamientos de la sociedad
del momento.
Podemos pasar horas describiendo las bondades de la
radio. Por ello no debemos dejar de recordar el papel que
desempeño cuando mas sus oyentes la necesitaban: durante
la tragedia del estado Vargas, en 1999.
Luego del 15 de diciembre de 1999, Venezuela
vivió horas de amargas pensando en aquellas personas q2ue
no sabían donde refugiarse, como escapar de la furia de la
naturaleza, sin agua, sin alimentos, sin luz y sin esperanzas.
Solo una vez del cielo podía ayudarlos, y esa voz
salió de ese pequeño aparato que muchas veces esta
encendido y al que no le prestamos mayor
atención.
Las emisoras de radio de caracas se dedicaron a ayudar a
las victimas recomendando a donde acudir para ser rescatados,
recibiendo llamadas de auxilio y permitiendo que muchas familias
volvieran a encontrarse.
La radio sirvió de puente entre las victimas y
sus rescatistas, entre padres e hijos, entre la vida y la muerte.
Esa es la radio: una maravilla del siglo veinte que jamás
será reemplazada.
A continuación emprenderemos un recorrido por la
historia de la radiodifusión en Venezuela, sus
protagosnistas y programas hasta llegar a la radio que
disfrutamos hoy en día.
Los primeros
años
La primera emisora con programación regular en
salir al aire fue la KDKA, de Pittsburg, en Estados Unidos, cuyas
transmisiones comenzaron el 2 de noviembre de 1920.
Al cumplirse los primeros diez años de la
radiodifusión, había trece millones de aparatos
receptores en Estados Unidos, ya se habían fundado las dos
principales cadenas: Nacional Broadcasting Company (NBC) y
Columbia Broadcasting System (CBS) y el mundo estaba a punto de
descubrir lo que aquel enorme aparto que adornaba la sala era
capaz de hacer.
Esto ocurrió el 30 de Octubre de 1938, la noche
en el guionista, actor teatral y cinematográfico Orson
Welles hizo una versión radial de la obra H.G. Wells, La
guerra de los mundos. Como todos los domingos a las ocho de la
noche, el Mercury Theatre era transmitido por la CBS, sin mucha
audiencia. Sin embargo, a las 8:12 pm., Edgar Bergen, presento un
cantante de poco interés, y como suele ocurrir, los
oyentes comenzaron a viajar por el dial y se encontraron con La
guerra de los mundos ya comenzada.
Los mecanismos de alarma se activaron de inmediato,
quizás por "… la brillante eficacia del programa
mismo, que va dosificando los datos alarmantes (el noticiero, el
testimonio de varias personas, la presunta declaración
militar sobre zonas afectadas por la invasión marciana) y
las intercala con fragmentos de distracción como si se
tratara de una transmisión viva y directa".
Los habitantes se escondían en las
montañas, personas que juraban haber visto las naves y
personas que optaron por quitarse la vida antes de ser victimas
de los marcianos.
Quizás no es la historia mas edificante de la
historia de la radiodifusión, pero si la que nos demuestra
el poder del para entonces novel del medio de
comunicación.
¿Y en
Venezuela… qué?
Durante los primeros quince años de historia de
la radio, Venezuela vivía bajo la dictadura del General
Juan Vicente Gómez y la diversión de la
población caraqueña consistía en:
"(…) cine silente, en el Teatro Nacional, los jueves en la
noche; y los sábados y domingos, matiné,
vespertina, intermediaria y noche en el Gran Circo Metropolitano
y en Nuevo Circo de Caracas todas las noches".
Las familias se reunían en torno de la "Victrola"
o la "Pianola" a escuchas música "… y cada noche se
visitaba a un vecino diferente para conversar un
rato…"
En este ambiente, el Coronel Arturo Santana y el
señor Luis Roberto Scholtz deciden fundar La Empresa
Venezolana de Radiotelefonía para salir con la primera
emisora de radio: A.Y.R.E. La emisora inauguro sus transmisiones
el 23 de mayo de 1926, con un concierto extraordinario y se
colocaron aparatos receptores en las esquinas de Gradillas, Plaza
Teatro Municipal, Hotel Majestic y la Esquina de El Tejar, para
que el milagro de la radio llegara a oídos de los
caraqueños.
La programación de A.Y.R.E era pobre: en las
mañanas se leían los periódicos del
día. En el primer programa informativo, EL NUEVO DIARIO y,
durante el resto de la jornada, se colocaban discos
fonográficos, se presentaban orquestas de salón o
criollas y charlas humorísticas a cargo de Rafael
Guinand.
Para poder disfrutar de la emisora, los radioescuchas
debían pagar una mensualidad que variaba según su
costo del aparato receptor que compraran.
La emisora fue clausurada oficialmente en 1928. Existen
varias versiones que explican el fracaso de A.Y.R.E. la primera
de ella tiene que ver con el uso del receptor de radio de galena
(la piedra o cristal de galena servía como detector de
ondas), con el cual los oyentes recibían clandestinamente
el servicio sin pagar la cuota mensual, lo que ocasiono la
quiebra de la compañía.
Página siguiente |