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Impacto socio-educativo de la misión salesiana entre los Yanomami del Alto Orinoco (página 3)



Partes: 1, 2, 3, 4, 5, 6

La Escuela
Intercultural Bilingüe ha sido gestor principal dentro de
los cambios sociales positivos que se pretendan introducir en
este tipo de comunidades con la aprehensión de la cultura
mayoritaria, la occidental, pero no es menos cierto que con los
cambios drásticos que ha vivido el país en los
últimos diez años, el Estado
Amazonas también ha sido protagonista, ha incidido
fuertemente en las diferencias de comportamientos que hoy asumen
estos grupos, con la
adquisición de nuevos valores, los
autóctonos han ido perdiéndose de manera progresiva
e irreversible y lo que agrava más la situación es
la problemática de los nuevos líderes Yanomami en
el contexto de la política-partidista
con la manipulación de los votos en retribución de
productos que
van en detrimento y deterioro de su cultura ancestral. Así
lo afirma el Padre Luís Felipe Ramírez (Entrevista
Julio, 2002): "¿cuál es el concepto
fundamental que tiene el Yanomami de política?, es solo
tener un puesto, "no trabajar", y "ganar dinero", eso
es lo que dicen que es política". Aunado a lo dicho por el
entrevistado se encuentra el modelo de
Municipio de zona urbana que se ha querido introducir, bajo el
esquema de trabajo de los
partidos
políticos tradicionales de este país, donde
arrastran al mismo Yanomami en hechos de corrupción, caso como el de sueldos muy
altos pagados a líderes de las comunidades sin haber
realizado trabajo alguno, alejándolos de esta manera de su
mundo originario y trayendo consigo discusión y malos
entendidos entre sus mismos miembros, por cuanto, no todos
actúan de esta manera, fracturándose así el
modo de organización social que tiene el Yanomami,
y los valores de
respeto,
convivencia, justicia,
equidad y
honorabilidad. El Padre Luís Felipe Ramírez afirma
(Entrevista Julio, 2002) que:

. nosotros hemos propuesto el Municipio Yanomami, que tenga
dos características: uno que no haya burocracia, sino
que el Municipio funcione con proyectos:
proyectos de educación, proyectos
de salud, proyectos
autogestionarios, económicos y que haya un grupo de
personas, concejales, como ellos quieran llamarles, que cuando
vayan a hacer trabajos eventualmente se les pagan sus
viáticos, sus cosas, tal y qué se yo, pero bien
organizado.

Es evidente que éste sufre un fuerte impacto de
transculturación, la cual interfiere con
procesos de
coherencia y equilibrio que
debe existir en esta comunidad. Por
esta razón Sánchez, (1998) manifiesta que: "Se pasa
de un nivel productivo a un nivel rentista" (p.39), y es
reafirmado por el Padre Luís Felipe Ramírez en su
entrevista.

Del anterior comentario converge el Antropólogo
Alejandro Signi cuando afirma (Entrevista Agosto, 2002) que:

. éste es un problema delicado, es cuando uno tiene que
retirarse, uno lo vive en su casa, cuando uno tiene que
permitirle a sus hijos que ya levanten sus alas. Aquí es
igual, porque es la variable política,
política-partidista, todo el esfuerzo.todo el esfuerzo que
tenía la Misión
desde hace 30, 40 años, todo ese esfuerzo con la variable
política, eso se trastocó totalmente.

En este comentario se evidencia que el Yanomami atraviesa por
un proceso de
cambio fuerte
y negativo para su propia cultura, dejándose quizás
llevar por los beneficios temporales que le puedan ofrecer los
partidos políticos; no obstante, tendrán que ser
ellos mismos que asuman todo este proceso que se vive en el Alto
Orinoco en detrimento de su propia cultura.

A pesar de la reinvindicación que la Constitución Nacional ha dado a los pueblos
indígenas, se podría decir que se debe trabajar
mancomunadamente para evitar que se politicen a estos grupos,
permitiendo de esta manera que sean ellos mismos quienes
administren y desarrollen sus territorios; hay que destacar que,
el Yanomami está viviendo un voraz proceso de cambio
sociocultural con una marcada visión hacia el partidismo e
inclinado netamente hacia la valorización del modelo
social occidental. Es evidente y observable que esta comunidad ha
entrado en un brusco camino de aculturación, donde el
patrón de vida napë (criollo) es superior a su
estilo de vida
inicial, arrastrando entonces una vergüenza étnica y
pérdida de valor de su
propia identidad. A
tal efecto, plantea Sánchez (1998):

 

La Misión Salesiana está involucrada en los
procesos de cambio que viven los Yanomami, entre otras cosas
porque en gran medida es agente de dichos cambios. La presencia
de los Misioneros Salesianos desde hace 40 años en el
territorio Yanomami, se hace significativa dentro del proceso de
cambios socioculturales de este pueblo (p.145)

Es evidente que estos cambios con énfasis en lo
occidental se han ido arrastrando a través de la historia de América. Desde esta perspectiva Bracho
(1999) afirma que: "Con la colonización cultural europea,
los que fueron calificados con el término bárbaro
se les excluyó de todo el espectro que significa la
cultura occidental (p.23).

No se tomaron como válidas, relevantes y provechosas
sus formas de vida, su cultura; todo lo contrario, fueron y han
sido sinónimo de salvajismo. Prosigue Bracho: "Las
creencias, mitos y
simbologías de negros, indios, paganos y campesinos no se
incluyeron en el marco científico de la modernidad y
mucho menos dentro de los parámetros de la
modernización económica, social, política y
cultura " (p.23).

Indudablemente, la sociedad
europea marginó y excluyó a las comunidades
indígenas, calificándolas de inferiores,
irrespetando de esta manera la cultura y forma de vida de los
diversos pueblos indígenas del nuevo mundo, y de alguna
manera las nuevas realidades políticas
están originando situaciones donde el ejercicio de las
mismas se realizan sin tener en cuenta los intereses de los
indígenas.

Proyectos
Sociales como parte de las Políticas Públicas
Nacionales de los Pueblos Indígenas llevadas a cabo por la
Misión Salesiana del Alto Orinoco.

A continuación se presentan descriptivamente los
programas
sociales que la Misión Salesiana lleva a cabo en el Alto
Orinoco con la etnia
Yanomami. Entre estos proyectos se encuentran: (a) La Educación
Intercultural Bilingüe, (b) La Salud y (c) La
Autogestión.

Parafraseando a Monseñor Divasón (1998) hablar
de la historia de la iglesia en
Amazonas, no es cosa sencilla, hay que ubicarse en el tiempo y
espacio y comenzar a hilar a partir de 1932 hasta hoy. Vale la
pena recordar a Renan, (citado por Bloch, 1996) cuando afirma en
sus comentarios que "En todas las cosas humanas los
orígenes merecen ser estudiados antes que nada"; de
allí la importancia de estudiar el proceso y desarrollo de
estos proyectos y el impacto en dicha comunidad.

Hay que destacar que cuando se hace referencia a estos
programas se detallan las políticas públicas del
Estado hacia
los pueblos indígenas de Venezuela.

El Estado venezolano siempre ha tenido políticas en
esta zona de estudio y generalmente se daban con muchas
deficiencias a través del Ministerio de Relaciones
Interiores, tal como se evidencia en el Libro de
Misiones que reposa en el Archivo General
de la Nación;
sin embargo, cuando la Misión Salesiana llega a estos
lugares era a través de la gobernación que se
dirigía las acciones, este
pueblo aún no había sido trastocado culturalmente,
a pesar de que con mucha anterioridad a esta fecha ya
existía presencia de personas ajenas a la cultura
Yanomami. No obstante, a pesar de que estos programas que se
analizan en este estudio forman parte de políticas
públicas que tiene pautadas el Estado venezolano, es la
Misión Salesiana que pone la primera piedra en el campo de
la educación en ese lugar, así queda expresado por
un recuento que hace el Padre Berno (Entrevista Noviembre,
2003):

Nuestro principal interés
era recoger los niños y
formar una escuelita para ellos.Primero hicimos la casa de las
hermanas, después construimos la escuela, después
la casa de los Padres, y, fíjate hemos cultivado esa
escuela hasta lo que es ahora, la escuela bilingüe.
Aquí en Mavaca, fue la primera escuela bilingüe de
este Estado.y esos muchachos que hoy día son hombres y
mujeres han sido formados por la Misión.

 

A través de los años la Iglesia Católica
ha ido de la mano con la acción
educativa, habiendo mostrado una excelente organización en
las mismas, donde su principal interés ha sido la
evangelización, además de orientar a las personas
en algunas habilidades que le han servido para desenvolverse en
su entorno. Moya (1991) hace referencia al problema de la
educación en Ecuador al
decir: "Como en las otras repúblicas de América
Latina en los albores del siglo XIX el Estado le disputaba a
la Iglesia la ejecución de la política educativa"
(p.18), se evidencia de esta manera que las órdenes
religiosas eran las que llevaban el dominio de este
sector, no solo en Ecuador sino en casi toda América; de
allí para que el Padre Berno conserve sus pensamientos
referente a la escuela como promotora de una acción
social. De manera tal, que por ser la Iglesia Católica un
ente organizado, ya cuando llega la Misión a estos
lugares, se deja ver que traían un diseño
del sistema
educativo que iban a aplicar, cuyo fin era una
educación desde y para la comunidad. Es conveniente
resaltar este antecedente histórico antes del Decreto
283.

Sin embargo, se considera necesario hacer un pequeño
esbozo sobre estas políticas públicas que tiene el
Estado Venezolano con las comunidades indígenas, no
sólo con los Yanomami sino con los 34 pueblos
indígenas que se encuentran en Venezuela y es a
través del Ministerio de Educación y Deportes que funciona la DAI, la
cual ha tenido como grandes objetivos de
la política nacional para los pueblos indígenas lo
siguiente:

  • Promover la valoración de la diversidad
    socio-cultural y lingüística de los
    indígenas como riqueza patrimonial de los respectivos
    pueblos y del país en general.

  • Garantizar a los pueblos indígenas la integridad de
    sus tierras y territorios.

  • Facilitar a los pueblos indígenas los medios
    técnicos para el logro de un desarrollo
    armónico de sus potencialidades y el aprovechamiento
    de los recursos ubicados en sus tierras.

  • Promover la valoración y difusión de las
    culturas e idiomas indígenas.

(Políticas Públicas del Ministerio de
Educación y Deporte).

De igual forma, es menester acotar que en estos momentos
(Abril/2005) la DAI, lleva a cabo un interesante taller con la
participación de muchos pueblos indígenas destinado
a diseñar las políticas públicas para esas
comunidades. Al respecto comentó Croes (2005) que la
importancia de dicho taller es: "trabajar diferenciados por
pueblos indígenas, son 34 que tenemos en el país.
Las políticas deben basarse sobre las especificidades
culturales de estos pueblos", ciertamente es lo importante que
estas políticas se trabajen por grupos indígenas,
ya que cada uno tiene sus propias necesidades. En el mismo
contexto agregó Rodríguez (2005) que los
indígenas están siendo preparados a fin de que
puedan definir las políticas públicas de sus
propias comunidades. Sin embargo, se hace una crítica
referente a la representatividad de los pueblos indígenas,
ya que dos o cinco indígenas por pueblos no significa una
verdadera representación.

Sin embargo, hay que destacar que la labor misionera de los
Salesianos en la zona del Alto Orinoco ha sido factor clave para
el éxito
de muchos de los programas que allí se ejecutan. De tal
forma que el esfuerzo más original consiste en la
creación de la Escuela Intercultural Bilingüe,
destacándose la Yanomami-Español,
pudiendo ubicar los centros más destacados en las Misiones
de Santa María de Ocamo, Santo Domingo Savio de Mavaca y
San José de Platanal.

Programa Educación Intercultural
Bilingüe.

Antes de 1976 la realidad educativa de la comunidad Yanomami
del Alto Orinoco era bastante crítica, esta era una
apreciación que tenían quienes llegaban a esa zona,
o sea, la visión de una cultura ajena a esta comunidad,
parafraseando a Biord, (2002) la preocupación del
Ministerio de Educación se centraba en tratar de encajar
una política intercultural bilingüe en los pueblos
indígenas enmarcada en el artículo 85 de la
Ley de
Educación vigente y de la estructura
vertical y centralizada del propio Ministerio. La
educación era impartida por los pocos adultos preparados
por la misma comunidad Yanomami, quienes se reunían para
enseñar las nociones más importantes dentro de su
propio grupo.

Las condiciones naturales de esa región no
permitían que se llevara a cabo la labor educativa, dado a
la necesidad de mudar las escuelas de un lugar a otro, y en
consecuencia, los niños que asistían a las
actividades escolares, en su mayoría, desertaban. Se
destaca la labor comunitaria de José Seripino, un Yanomami
que estuvo en Mavaca como promotor en las escuelas antes de que
llegara la Misión Salesiana y cuya labor ha sido muy
fecunda. Se debe recordar que el Régimen de
Educación Intercultural Bilingüe fue sancionado por
el Ejecutivo Nacional, el 20 de septiembre de 1979, mediante el
Decreto 283, publicado en Gaceta Oficial Nº 31.825 Seripino
(1990) hace señalamientos como:

Mas tarde llegaron la Misión, hicieron una escuela para
nosotros.aprendimos castellano.pensamos que nosotros mismos, los
indígenas podíamos trabajar.Yanomami mismo
está trabajando como promotores, está ayudando a
nuestros muchachos.estamos enseñando una lengua
castellana (p.39).

Se evidencia en este comentario, la influencia educativa, la
cual los Yanomami aceptaron de buena manera, además de
convertirse en generadores de sus propios aprendizajes, a
través de otras personas de la propia comunidad preparado
con esmero y dedicación para ofrecer a las próximas
generaciones un futuro provisor.

Las culturas indígenas presentes en Venezuela han
venido atravesando cambios profundos, más que todo por las
presiones aculturativas de la sociedad envolvente, tal como lo
señala la DAI, y poco a poco mediante el proceso de
transculturación se han integrado a una sociedad
modernizadora, pero cuyo impacto en algunos casos ha sido poco
beneficioso. De allí la necesidad que ha tenido la
Misión al igual que otros grupos, de tomar en
consideración la creación de escuelas con bases
más sólidas para promover ese proceso socializador
y endoculturativo que a medida que pasa el tiempo reclama esa
comunidad en función
del mejoramiento cultural-educativo de la etnia. Señala el
Padre Luís Felipe Ramírez (Entrevista Julio, 2002):
"La interculturalidad es un proceso de la autogestión..la
autogestión no es mirar hacia adentro, sino mirar hacia
fuera, es también el deseo de aprender de otros, el deseo
de intercambiar con otros".

En el mismo orden de ideas afirma Barreto (2003): "La
interculturalidad no debe ser interpretada como un acto
mecánico de relaciones entre culturas, sino como una
cualidad basada en la capacidad de conocer, comprender, respetar
y valorar la otredad sin dejar de ser uno mismo" (p.29).

Biord (2002) sostiene que:

La garantía de la interculturalidad en la escuela
beneficia por igual a las dos culturas, pues propicia su
enriquecimiento mutuo y facilita que la creatividad
indígena se ponga al servicio del
proceso de transformación del país en una
búsqueda de nuevos modelos de
desarrollo socio-económico (p.14).

La idea de la interculturalidad en las escuelas
indígenas nace en el seno de la Sociedad Venezolana de
Antropología Aplicada (SOVAAP) la cual
llegó a proponer desde los inicios de este régimen
la adopción
de una política indigenista interculturalista, se
sugirió en la misma:

.un plan de
educación intercultural para la población indígena (.) Ello
haría posible una educación adaptada al medio
indígena y respetuosa de los valores etnoculturales,
preservando la integridad y cohesión interna de los grupos
étnicos, y permitiendo la superación del
tradicional complejo de inferioridad a favor de un nuevo
sentimiento de orgullo étnico (Mosonyi en Biord, 2002;
p.14)

En los momentos históricos tan difíciles que
atraviesa la comunidad Yanomami, el proceso de interculturalidad
debe ser vigilado por quienes llevan estas políticas, pues
cuando se señala "mirar hacia fuera", es allí
precisamente donde está el peligro, ya que afuera se tejen
otros intereses muy ajenos a los que pudiera plantearse una
comunidad intensiva o poco invadida como la Yanomami.

No obstante Croes (1998) hace referencia a la
interculturalidad en un sentido más amplio, pues para
ella:

Es una propuesta que debe ser asumida en doble dirección: en una relación que
involucre la interacción entre la población
indígena de Venezuela por un lado, y la población
"criolla" por el otro, entendiendo que en el marco de la
diversidad cultural y multiétnica que caracteriza a
nuestro país, el componente indígena es base
fundamental de la formación de la cultura nacional
(p.14).

Buscar el reconocimiento de nuestra propia cultura a
través del intercambio con las culturas aborígenes
las cuales forman parte de nuestro pasado.

La educación que se venía impartiendo para ese
entonces según Eguillor (1991): "Es una educación
para la vida, para la cotidianidad de la sociedad, la cual es
impartida por los padres, por los adultos y por toda la
comunidad" (p.40).

Existen una cantidad de elementos claves en el proceso
educativo de dicha cultura, tales como: respeto a la comunidad,
obediencia a los ancianos, amor a la
naturaleza,
forma correcta de dirigirse a cada miembro de su grupo,
fabricación de una tecnología, aprender
modelos de conducta; en fin,
es un modelo de sociedad que las más modernas
envidiarían. Cabe citar a Mosonyi (1982) cuando se refiere
a ciertos aspectos significativos de las sociedades
indígenas, la cual la caracteriza de la siguiente
manera:

  • 1. Formas socialistas de convivencia en el sentido de
    no permitir la primacía de intereses
    individuales-económicos o de otra índole sobre
    los de la comunidad.

  • 2. La inserción del ser humano como parte de
    la naturaleza sin pretender dominarla ni destruirla. Se
    recurre a rituales altamente significativos antes de usar
    cualquier recurso natural.

  • 3. La economía no es nunca depredadora sino
    respetuosa del equilibrio ecológico en el cual
    está inmerso el hombre. El aparente nomadismo no es
    sino la utilización cíclica y recurrente de los
    territorios de caza , pesa y recolección o de uso
    agrícola para permitir la recuperación y
    renovación del medio ambiente, al final de cada
    período de explotación.

  • 4. La tecnología utilizada sigue de cerca las
    necesidades reales de la población hasta lograr su
    satisfacción más o menos plena, sin pretender
    aumentar sus fuerzas productivas ni explotar los recursos
    naturales y la fuerza de trabajo más allá de
    poder asegurar una calidad de vida idónea para
    todos.

  • 5. La democracia interna en el seno de estas
    sociedades implica la participación de todos en un
    plano de igualdad y de intercambio exhaustivo de opiniones y
    puntos de vistas. Los dirigentes son respetados por su mayor
    conocimiento y experiencia, pero no gozan de poder en el
    sentido occidental del término. El individuo investido
    de autoridad no puede ser ni represivo ni tolerante, ni
    arbitrario y menos aún puede tomar decisiones
    importantes sin el consentimiento del colectivo (pp.
    254-255).

Se puede observar en esta referencia la
organización que poseen estas comunidades que por
medio de su propio sistema
educativo, han creado mecanismos válidos para mantener la
armonía con la naturaleza.

Para la implantación del Régimen de
Educación Intercultural Bilingüe en Venezuela se
atravesaron muchos obstáculos, debatiendo importantes
temas, llegándose a realizar interesantes experimentos que
condujeran al "éxito" de la misma; no obstante, esta
investigación no pretende hacer un análisis exhaustivo al respecto, sin
embargo se considera pertinente recomendar investigar en los
trabajos que han realizado las respectivas Comisiones que
estuvieron presentes en los antecedentes de este régimen
educativo principalmente en el período comprendido entre
1968 y 1979 como fueron la Escuela de Antropología de la
Universidad
Central de Venezuela, el Departamento de Antropología del
Instituto Venezolano de Investigaciones
Científicas y la DAI, así como revisar los
fundamentos filosóficos de la interculturalidad
señalados en la Declaración de Barbados I y II.

Para 1976 la escuela Yanomami era una realidad y una
alternativa por cuanto según el Decreto 283 del Ministerio
de Educación respeta las características
socioculturales Yanomami, reconoce su identidad y la preserva,
estimula su participación activa en las múltiples
actividades de la vida venezolana y se reconoce como parte del
patrimonio
cultural vigente y vivo que enriquece la cultura nacional.
Señala el P. Sánchez en una conversación
sostenida con la autora en la Procura Misionera Salesiana (1998),
que el equipo educativo en sus comienzos, tuvo una selectiva
organización donde tomaron en cuenta a algunos Yanomami, a
expertos en ciencias
sociales, en educación, así como participaron
diferentes miembros de la Misión Salesiana. Este equipo
concretizó el concepto del hombre
Yanomami en una visión global, a saber: (a) Reconoce su
especificidad social, psicológica, cultural y lingüística. (b) Parte de una
concepción antropológica. (c) Lo considera un ser
histórico que vive en una sociedad rodeado de un ambiente
físico determinado. (d) Posee una religión en la que
Dios está presente y se ha manifestado a través de
sus categorías culturales. Posee un proyecto
histórico propio y se viene realizando a través de
su marcha en el tiempo.

Este equipo atiende y vela por el cumplimiento de un
régimen educativo bilingüe, pero de una manera
cuidadosa ya que para la Misión Salesiana el cambio que se
de por este tipo de educación debe producirse por
sí mismo, donde no sean afectados los valores
autóctonos.

De acuerdo a lo que plantea la DAI, recibir una
educación intercultural bilingüe forma parte de los
derechos
especiales de carácter colectivo, más
concretamente lo indican Croes, Biord y Medina: "Estos derechos
le otorgan a los indígenas la decisión de mantener
sus prácticas y actividades tradicionales, de adoptar las
de la sociedad envolvente o combinar ambas" (s/e).

Evidentemente se trata de dinamizar este proceso educativo que
en palabras del Padre Luís Felipe Ramírez
(Entrevista Julio, 2002) "Ha sido poco valorado, no se le ha dado
el valor verdadero que ha tenido, pero el Yanomami si lo ha
valorado y lo defiende, es uno de los elementos que ha calado
más en esa sociedad".

Todo cambio que se efectúe dentro de este tipo de
comunidades debe ser sensato y bien establecido, a fin de que no
resulte un peligro.

Para Sánchez (1990) la educación del Yanomami
es: ".una educación práctica, basada en la observación de los adultos y aprendida a
base de repetir una y otra vez, a modo de juego,
estimulada por las burlas cariñosas y ejecutada ante la
admiración satisfecha del grupo familiar" (p.43).

Es así que, la enseñanza a los futuros Yanomami se
efectúe a través de la transmisión de
mayores, a niños y jóvenes, la cual acentúa
su cultura y tradiciones a través del tiempo. Es
importante destacar a Gutierrez (1992) quien argumenta:

El Decreto 283 en su Artículo 2 expresa que "La
formación del personal docente
deberá estar adaptado a las características
requeridas por esta modalidad de educación". Por tanto el
diseño curricular de la Educación Intercultural
Bilingüe debe estar orientado al logro de un individuo
sensibilizado para este tipo de educación, por ello se
entiende un docente que sienta y se interese por la
problemática del medio indígena donde se
desenvuelve, además que la comprenda y conozca (p.8).

 

En estas apreciaciones se infiere que, el maestro debe conocer
a profundidad la problemática Yanomami, que busque y
plantee soluciones que
sean beneficiosas y provechosas para los escolares, por esta
razón los niños deben ir aprendiendo del comportamiento
que presenta el grupo más cercano, aprende de acuerdo a
sus necesidades, la educación Yanomami es una
correspondencia entre la sociedad y la necesidad del organismo
social, sin embargo este ha sido uno de los problemas
más notables, el bajo nivel de formación y capacitación de los docentes
indígenas y no indígenas.

En la escuela se les enseña lectura,
primero en un libro Yanomami y después que lo aprenden
bien pasan al español, va poco a poco, hace algunas
cuentas y se les
enseña un poco de cultura occidental. Señala la
Hermana Mirian Reyes (Entrevista Junio, 2003):

Se procura que el niño aprenda en su lengua
materna, y luego desde cuarto grado, bueno..no estrictamente
así, pero si se les da castellano, se procura que ellos
aprendan otras cosas que no son de su cultura para que haya una
relación intercultural, que haya el intercambio y ellos
felices de ir, y tu les das algo; bueno, super felices de ir al
colegio, tienen su transporte
escolar que es un bongo, tus has visto ¿no?.

Lo que se ha podido evidenciar es que es una escuela
autogestionaria, gracias al apoyo y orientación de los
padres y hermanas de la Misión Salesiana, aquí se
toma en cuenta que la preparación esté de acuerdo
al papel que le toque desempeñar al muchacho en su entorno
y siempre dentro de los procesos autogestionarios, debe ser el
modelo ideal para que estos proyectos educativos cumplan con los
objetivos constituidos en los currículos. Asimismo, no es
una educación meramente castellanizante sino que se
respeta la lengua materna del niño; al respecto
señala Biord (2002) que ".el uso de la lengua
indígena, como primera lengua.para el niño
indígena, no se utiliza solamente para alfabetizarlo
más fácilmente, sino que su uso debe extenderse
durante los primeros niveles educativos" (p.14); de allí
la importancia de una educación bilingüe, ya que
está contemplado en el nuevo marco legal de la
Constitución Nacional en su artículo 9: "El idioma
oficial es el castellano. Los idiomas indígenas
también son de uso oficial para los pueblos
indígenas y deben ser respetados en todo el territorio de
la
República, para constituir patrimonio
cultural de la Nación
y de la humanidad".

Por otro lado se tiene que estas escuelas están
ubicadas en Ocamo, Mavaca, Mavaquita y Platanal, también
hacia Maweti en el Alto Ocamo, hacia el Río Manaviche y
las comunidades que están más cercas del río
Orinoco tiene sus escuelas anexas y las denominan escuelas de
extensión, sin embargo este programa no llega
a todo el Alto Orinoco, sólo se benefician los que
están cercanos a la Misión, cercano de un cuarto de
hora, veinte minutos y a una hora de la Misión.

Con respecto al personal del Ministerio de Educación,
ellos van a la zona de acuerdo a las posibilidades, señala
la Hermana María Bostia (Entrevista Junio, 2003):

Vienen una o dos veces a la semana, según puedan,
entonces asesoran, y mira los de Platanal son los más
lejanos, entonces se les reúne a los maestros, para
guiarlos, para conducirlos, porque ellos son los que desarrollan
la labor educativa..La Directora es del Ministerio de
Educación y las Coordinadoras; luego el otro personal,
este. se combina de acuerdo a la Misión, entonces se busca
que colaboren con la labor educativa.

Para tener una idea de la forma como se distribuye la
educación por etapas en las escuelas Yanomami, se
tomó de Sánchez (1998) las Estrategias del
Plan Educativo, divididas por edad y sexo.

  • Primera etapa: Hasta los 10 años: Hiru
    (niños) Suwe-Heri (niñas) – Preescolar.

  • Segunda etapa: Varones desde los 10 a los 12 años:
    Maranapi. Programa escolar adaptado, correspondiente al
    1º y 2º grado. Hembras desde los 10 a los 13
    años: Suwemoko. Programa correspondiente al 1º y
    2º grado.

  • Tercera etapa: Varones desde los 13 a los 15 años.
    Pre-Prewe. Programa escolar adaptado a 3º y 4º
    grado. Hembras desde los 14 a los 16 años. Suwemoko.
    Programa correspondiente a 3º y 4º grado.

  • Cuarta etapa: Varones desde los 16 años en
    adelante. Programa según las posibilidades del
    muchacho. Tiene la posibilidad de terminar el 6º grado.
    Hembras desde los 17 años en adelante. Suwe. Programa
    Especial.

Para los años 2001 al 2004 se realizaron algunas
entrevistas y
visitas con el fin de profundizar en este tópico
encontrándose que, lamentablemente hay poca disponibilidad
de docentes del Ministerio de Educación y Deportes, y
así quedó evidenciado por Chávez (2005) en
el V Gabinete Móvil, celebrado en Ciudad Bolívar,
cuando le planteó al Ministro de Educación y
Deporte que no existe presencia del Ministerio en el Alto
Orinoco, para lo cual mandó a realizar una
investigación detallada de lo que ocurre en la zona. A
veces envían algunos maestros pero, pocos se quedan por
tiempo prolongado, asimismo hay que mover las escuelas por el
cambio de conucos y por factores climáticos, como ya se
explicó en párrafos anteriores, existen
además muchas enfermedades como la malaria
y los docentes por supuesto temen por el contagio, y en realidad
el Estado no termina de asumir la responsabilidad en materia social
en la zona del Alto Orinoco. Estas son algunas de las razones por
la cual hay Yanomamis actuando como promotores educativos,
enseñando a personas de su propia etnia.

La Biblioteca
Nacional, a través de la Comisión Nacional de
Lectura implementó las cajas viajeras (bibliobongo) con
abundantes libros
infantiles y juveniles para la primera, segunda y tercera etapa
de educación básica, cultivando e intercambiando en
el niño el hábito de la lectura.
Muchos de estos materiales
fueron revisados por la autora en la DAI. Estos programas
están proyectados hacia las comunidades indígenas
con la inclusión de libros adaptados a su cultura.
También hay que reconocer el esfuerzo de la Misión
por la producción de textos escolares para los
Yanomami, aproximadamente 40 libros y últimamente (2005)
el Diccionario
elaborado por el P. Bórtoli

Según la DAI,: "Desde 1997 se trabaja en un programa de
relanzamiento y optimización con el fin de lograr una
educación de categoría y de mayor pertinencia,
adecuada a las necesidades de cada pueblo indígena a la
vez inserta dentro del sistema educativo venezolano" (s/e).

Para complementar esta observación se ha podido
conversar con algunos Yanomami, pese a lo difícil de
conseguir la información a través de la oralidad,
bien sea por el poco dominio del idioma o porque ellos no les
gusta ser invadidos, pero una vez que se establece el diálogo
cordial, aunque con cierto recelo, el Yanomami manifiesta que la
Misión Salesiana y otros grupos de poder no deben
decidir que es los que les conviene o no en este aspecto.
Reclaman que la decisión o última palabra debe
tenerla el líder
de la comunidad. Señalan que no son tontos, que saben que
a sus espaldas se toman decisiones y es por eso que a veces se
rebelan.

A pesar de la falta de controles que en ciertas ocasiones se
presentan por parte del Ministerio de Educación y
Deportes, que ha traído el descontento de algunos miembros
de la comunidad, la Misión Salesiana ha buscado un nivel
de respeto e igualdad y el
reconocimiento de ambas culturas, enriqueciéndose
recíprocamente, sin lesionar ni destruir el medio
fundamental de cada uno de ellos.

Otro aspecto importante en este campo es el proyecto que se
plantea el Vicariato, como es la formación de educadores
indígenas con intervención del Ministerio de
Educación y Deportes para lograr una extensión del
Instituto Universitario Salesiano "Padre Ojeda". Es muy cierto lo
que señaló Don Vecchi, octavo sucesor de Don Bosco:
citado en (Van-Looy, 2000;p.5) "El movimiento
institucional y la sola transmisión de conocimientos no
logran los fines de la educación". Esta afirmación
se orienta a la formación integral de la persona, bien sea
este del pueblo indígena Yanomami o de otra comunidad.

Para el Padre Bórtoli (Entrevista Agosto, 2002), en el
campo de la educación se van abriendo nuevas exigencias,
sobre todo porque:

Dentro del proceso de inculturación hay cambios
importantes con la creación de los Municipios", lo que
trae como consecuencia que el Yanomami tenga otro tipo de
necesidades. No obstante, hoy en día, por ejemplo en La
Esmeralda hay un ciclo diversificado, con las menciones que se
adaptan a la zona, como lo son Técnico Medio en Salud, en
Ambiente, en Educación". Argumenta el mismo entrevistado
que: "Los Yanomami pueden aprovechar, pueden salir con su trabajo
y trabajo para su misma gente.

Este tipo de educación permite la independencia
del pueblo Yanomami y como lo plantea la DAI:

Esto nos permite visualizar alternativas de cambio, en donde
los indígenas no son objetos de los proyectos y programas,
sino el sujeto dinamizador de las relaciones que se deben
construir ante las diferentes fuentes de
presión
que se han creado (s/e).

De tal forma que este tipo de programas que están
dentro de las políticas públicas no deben ser
proyectadas bajo el esquema del paternalismo, ya que las
comunidades indígenas por sí solas buscan su propia
independencia.

Existe otro proyecto que desde hace aproximadamente tres
años ha cobrado fuerza e
importancia en el Alto Orinoco como lo es el Catecumenado.
Parafraseando al P. Lodziana (Conversación, Octubre,
2005), el proyecto comienza en reconocer en la cultura Yanomami
los valores transversales y para esto toma en
consideración siete núcleos culturales como
columnas vertebrales de la cultura Yanomami en torno a lo que
gira su vida, a saber: (a) vida, (b) casa, (c) selva, (d) fuerza,
(e) amistad, (f)
juego, (g) alimento. Es evidente que se trabaja desde los valores
de la cultura.

Señala el P. Lodziana en la conversación
que:

La Escuela Intercultural Bilingüe no es un ingenio
nuestro, no es creación nuestra, sino de un equipo de los
antropólogos, es una decisión de trabajar desde los
valores de la cultura y en esa función se caminó,
lleva ya 30 años de un proyecto que necesita ser revisado.
De hecho de allá se retiraron los antropólogos y
quedaron los Misioneros, de hecho los antropólogos y
científicos vienen una vez al año dicen cuatro
pendejadas, se van y dejan buenos consejos.

Se considera necesario revisar este régimen educativo,
no obstante, es preciso observar y analizar el contexto donde se
desarrolla el mismo; a tal efecto, continúa el P. Lodziana
diciendo:

Si, "ustedes tienen que revisar" eso es lo que dicen, pero
resulta que no tienen que buscar 100 mil litros de gasolina al
año para que funcionen transportes escolares, 60 toneladas
de comida, para que funcione desayuno y almuerzo escolar, pelear
por el pago de los trabajadores y atender los 600 niños,
llevar adelante proceso con 40 maestros aproximadamente que
están haciendo 7mo, 8vo y 9no por escuela
radiofónica; entonces tu haces un juicio sobre un Proyecto
Bilingüe que tiene que ser revisado. Bueno.yo acepto todas
las críticas pero no de la gente que está en
Caracas.

Estas aseveraciones dejan ver que no se debe juzgar un trabajo
sin conocerlo a fondo. Lo mínimo que ha buscado la
Misión a través de los años con todo y los
límites
que han podido tener, es que las cosas sean de calidad y sean
acordes a la cultura.

El programa de Educación Intercultural Bilingüe ha
tenido grandes tropiezos, porque como se ha dicho reiteradas
veces las políticas que comienza un gobierno el que
sigue no las continúa y en muchas ocasiones este sistema
educativo perdió apoyo político y económico,
tal como ha ocurrido a lo largo del tiempo en la mayoría
de los programas sociales que se implantan, bien sea en la
sociedad indígena o criolla, lo cual impedía
reforzar el citado régimen; de allí la importancia
que se le atribuye a la Misión Salesiana en la Escuela
Experimental Yanomami-Castellano donde se evidencian o ponen de
manifiesto las prácticas misionales educativas de estos
religiosos. Sin embargo, se hace necesario revisar este
régimen por cuanto existen motivos para decir que la
educación indígena en los actuales momentos no
puede considerarse como intercultural bilingüe, no
sólo por su aplicación en la comunidad Yanomami,
sino por los ejemplos que se toman de otros pueblos
indígenas.

La Enseñanza de la Historia en la Comunidad
Yanomami

Para hablar del Régimen de Educación
Intercultural Bilingüe, es necesario ubicarse en el
pasado.

Anterior a las escuelas bilingües, las comunidades
aprendían de sus ancianos y ponían en
práctica sus conocimientos "Los Yanomami han sido
autogestionarios en sus procesos culturales, han construido
siempre sus casas, se ha alimentado y no ha necesitado del
gobierno para hacerlo". (Padre Luís Felipe Ramírez,
Entrevista Julio, 2002). Y de la misma forma lo ha hecho en el
plano educativo, ya que para ellos la escuela es el segundo hogar
para aprender los oficios de los que se valen para subsistir.

La madurez y precisión del Régimen de
Educación Intercultural Bilingüe ha permitido que el
propio pueblo Yanomami exija una educación que tome en
cuenta su cultura y su lengua nativa; sin embargo, esta
educación ha de ir más allá de la
enseñanza de la historia tanto de los pueblos primigenios
como del establecimiento de los grupos misioneros. La vivencia de
hoy obliga a dichos grupos a buscar en el pasado formas de vida,
shamanismo,
lenguaje,
etc., que deben constituirse en elementos de estudio de la
historia y así comenzar a hilar el pasado. Bloch (1986) en
sus apreciaciones afirma que "Para construir los trazos rotos de
los demás, ha sido necesario pasar la cinta al
revés de cómo se tomaron las vistas" (p.80).

Compartiendo estos análisis es fundamental afirmar que
los Yanomamis del Alto Orinoco son protagonistas del proceso
histórico que han vivido a lo largo del tiempo, han sido
muy sabios al introducir cambios de forma lenta y asimilar otra
cultura, luchando por su legislación, por el respeto al
territorio que ocupan, desde épocas precolombinas hasta el
presente. Los indígenas y misioneros Salesianos encargados
de proyectar la educación en estas comunidades deben
reforzar cada día más este tipo de enseñanza
de la historia, comenzar planteando lo concreto, lo
que viven en la actualidad los educandos, tanto en el contexto
local, nacional, como internacional, tratando de evitar la
idolatría a ciertos héroes, la cronología de
hechos, lo repetitivo de la historia y aprender la misma desde la
cotidianidad.

Igualmente, es bien sabido por esos grupos (indígenas)
la influencia que ha tenido sobre ellos la cultura occidental.
Sin embargo, al enseñar la historia se debe evitar que
ellos sientan vergüenza étnica y dar reconocimiento
al trabajo que realizaron y realizan dichos indígenas,
partiendo de lo significativo que es el sistema de vida que han
perpetuado a través del tiempo. Esta enseñanza debe
estar dispuesta a cultivar la actitud
intelectual del educando, partiendo siempre de su realidad
social, donde él analice, critique y valore su propia
historia, de hecho esta disciplina
ofrece esta posibilidad.

Asimismo, tienen la oportunidad de comparar la evolución de las sociedades tribales, lo
que fueron las Misiones en un comienzo y el fin que persiguen en
el presente y de esta manera apreciarán el valor de las
culturas pasadas, y no se limitarán a analizar simples
acontecimientos que no causan interés en ellos.

Es interesante citar a Carrera (1986) cuando al hablar de la
Historia indica que "El objetivo de su
enseñanza sería la formación de un tipo
nuevo de historiador, capaz de aplicar el método
histórico, apoyado en un sentido histórico
creador…partiendo de una cabal comprensión
histórica de una realidad venezolana en buena parte
desconocida o mal conocida" (p.6).

En el mismo orden de ideas Esté (1998) afirma lo
siguiente:

A mi me angustia una producción museística por
parte de los indígenas, que repiten su misma música sin buscar la
manera de enriquecerla. A partir de los acervos y de las
producciones culturales ancestrales hay que encontrar la manera
de enriquecer nuestras manifestaciones…Se trata de ir
más allá de ese plan museístico…Se trata
de que a partir de ese rescate se incremente la riqueza y se
potencie a todas las dimensiones que pueda enriquecer lo
cultural, poéticamente y musicalmente (p.37).

Con respecto al área de Historia es fundamental
insistir que esta enseñanza sea a partir de las historias
de los pueblos, ya que sería un gran aporte al conocimiento
de los alumnos, que se imparte en las áreas rurales y
urbanas, cultivando la estrategia de la
oralidad, ya que permite rescatar la historia en la memoria de
los protagonistas y testigos de los hechos, los llamaría
Salas (1987) tradición oral, "la experiencia se obtiene no
sólo de las vivencias personales sino también de la
capacidad de asimilar las de los demás como si hubiesen
sido protagonizadas por él mismo" (p.205). En la
enseñanza de la historia de estos pueblos originarios
juega un papel preponderante el Nicho Lingüístico, el
cual no debe aplicarse sólo al rescate y
conservación de la lengua nativa sino al conocimiento y
valoración de dicha cultura, en la cual los ancianos
brindan a los niños y jóvenes de la comunidad,
información sobre acontecimientos que marcaron pauta en
esas sociedades.

De acuerdo a un material lingüístico suministrado
por González (1992) sobre el Nicho
Lingüístico, afirma en sus consideraciones que:

Tenemos que, el Nicho Lingüístico se instala en
una especie de casa de familia donde
asume la responsabilidad fundamental una señora de edad
avanzada, que domina a la perfección la lengua nativa y
conozca bien la cultura correspondiente. No tiene importancia el
hecho de que sea o no alfabetizada, haya recibido o no
algún tipo de educación formal. Tan sólo
debe ser una persona criada según las normas de la
antigua familia indígena y poseedora de todos sus recursos
lingüísticos y culturales por la vía
vivencial.

Puede observarse lo relevante que es la transmisión de
la cultura y acervos que han permanecido en la sociedad Yanomami,
lo cual para las ancianas tiene importancia vital para que este
proceso sea fecundo.

Vista de esta manera la Misión Salesiana quien es la
que lleva las riendas de esta política pública del
pueblo Yanomami, "política asumida por necesidad, porque
no es la función de la Misión." (Entrevista Padre
Ponce, Julio, 2002) debe preservar este tipo de educación,
brindándole charlas y apoyo a quienes tiene gran
responsabilidad de transmitir a través de la oralidad la
historia de las culturas ancestrales de Venezuela y
América; así la historia a enseñar no
deviene sólo en simples relatos que se presentan a los
estudiantes de manera empobrecida. Según Soto (citado por
Frías, 1999) señala lo siguiente "Ha condicionado
el pensamiento
hacia la concepción de un evolucionismo social, simple y
lineal, según la cual todas las sociedades deben pasar por
las mismas secuencias de estadios para alcanzar una finalidad
definida según los criterios occidentales" (p.43).

Según este planteamiento, se trata de erradicar el
pensamiento eurocéntrico, donde siempre se ha dejado en un
segundo plano el estudio de otras sociedades, como en este caso,
el
conocimiento de los grupos indígenas
prehispánico y su devenir; es a partir de los Nichos
Lingüísticos que se debe enseñar la verdadera
historia de los pueblos originarios. Con este comentario se trata
de generalizar, sin conocer a fondo los métodos y
procedimientos
que emplean los Salesianos en las Misiones para la
enseñanza de la historia, porque no se puede afirmar que
la enseñanza que imparten los Misioneros tenga un enfoque
eurocéntrico.

Proyecto Autogestión.

Otro de los programas que presenta el Plan de Acción
Pastoral es el denominado Autogestión que al igual que el
programa Intercultural Bilingüe forma parte del área
que desarrolla las políticas públicas de los
pueblos indígenas, guiada por el Estado venezolano, pero
que en este caso particular ha sido impulsado y apoyado por la
Misión Salesiana, y el mismo pretende que los diversos
pueblos amazonenses sean sujetos activos en la
realización de su proyecto histórico original. Ello
se logra mediante la creación y el fortalecimiento
integral de organizaciones
socioeconómicas acordes con la realidad de cada etnia. El
Vicariato asume la tarea de asesoramiento en los proyectos de
autogestión económica y participa en el
diseño, puesta en marcha, orientación y evaluación
de los proyectos. De esta manera, fomenta y respeta la
autonomía de cada grupo al mismo tiempo de crearle
conciencia
sobre la necesidad de proyectos autogestionarios como
condición para realizar su proyecto histórico.
Capacitan además a los representantes de los
indígenas, para que ellos mismos sean los responsables de
este proyecto autogestionario que están relacionados con
la agricultura,
ganadería,
apicultura,
artesanía, corte y costura, entre otros. Sin embargo este
proyecto no se puede decir que sea pensado única y
exclusivamente desde lo indígena, sino que también
va enmarcado con las ideologías del pensamiento
occidental, se desarrolla acorde a los principios que
rigen el mercado.

Se constata que a lo largo de la historia de las comunidades
indígenas son sociedades organizadas, que han vivido de la
recolección, caza, pesca y otras
actividades como el trueque visto como un proceso socializador y
de convivencia con otras comunidades, con modelos
autogestionarios que muy bien pudieran ser tomados en cuenta en
pro de una mejor calidad de
vida. Al respecto señala Mosonyi (1982):

No existe ni ha existido ninguna sociedad indígena que
no haya mostrado los efectos evidentes de una larguísima
evolución sociocultural, cuyas manifestaciones más
conspicuas son la organización social, el sistema
ecológico y económico, la tecnología, la
etnociencia, el lenguaje,
el arte y la
cosmovisión (p.189).

Y en esta evolución se puede evidenciar cómo en
el aspecto económico la cultura Yanomami, por ejemplo ha
ido promoviendo nuevas formas de trabajo partiendo de la Escuela
Intercultural Bilingüe.

Para fundamentar estas afirmaciones, el artículo 123 de
la Constitución de la República Bolivariana de
Venezuela asume que "Los pueblos indígenas tienen derecho
a mantener y promover sus propias prácticas
económicas basadas en la reciprocidad, la solidaridad y el
intercambio; sus actividades productivas tradicionales, su
participación en la vida nacional y a definir sus
propiedades".

Se acota que es precisamente la Constitución Nacional
de 1999, la que presenta una cantidad de artículos que
reivindican los derechos de los pueblos indígenas,
anteriormente los pocos decretos que existieron, sólo
planteaban el problema de la reducción del indígena
y el derecho a sus tierras.

Es evidente que en los últimos tiempos los pueblos
indígenas se han visto favorecidos legalmente y al
respecto el Estado protege y estimula la autogestión. Al
respecto Bórtoli (1991) sostiene que:

La autogestión es en efecto gestar su propio desarrollo
a partir de la originalidad de la propia persona y de la propia
cultura en la integridad de su comprensión. Es el derecho
de dar contenido original a conceptos tales como: desarrollo,
bienestar, propiedad,
trabajo, tierra…, a
partir de la propia comprensión de la vida. El Yanomami
podrá ser sujeto de autogestión siempre que ella
pueda ser definida por él, siempre que pueda darle un
nombre tanto si se trata de su gestión
tradicional como si se va delineando una gestión hacia
otros sectores de la sociedad nacional (p.49).

La anterior afirmación es concreta, debe existir la
autogestión que genere proceso, reconocimiento y respeto a
toda manifestación, además de ello debe
apoyársele con proyectos realistas, donde se incluyan la
participación activa de cada miembro.

Este programa de autogestión nace aproximadamente 15
años, como un deseo de que los Yanomami no dependieran de
la cultura nape, y para el Padre Luís Felipe
Ramírez, ciertamente es una cultura de los Misioneros,
pero también es un derecho del indígena manteniendo
sus actividades ancestrales o combinándolas con las de la
sociedad occidental, esto es interculturalidad, porque el
Yanomami ya no vive aislado en la selva, él comparte a
diario con otro tipo de cultura. Sin embargo para plantear un
programa de este tipo es necesario convivir con esas comunidades
y contar en este caso con un grupo como lo es la Misión
Salesiana, para que guíe y asesore los lineamientos que
están previstos, pero también se debe respetar y
aceptar los planteamientos de la comunidad Yanomami de acuerdo a
la manera como ellos decidan llevar este tipo de trabajo. Ribeiro
(citado por Vilda, 1978) expresa:

El camino hacia la búsqueda de soluciones debe arrancar
de una propuesta que considere la autogestión como primera
piedra. La única acción que se ofrece como
alternativa a las diversas modalidades de intervención
colonialista es la formación de instituciones
indígenas de autogobierno… la mejor garantía para
enfrentar, corregir la corrupción
y el despotismo de los intermediarios es la implantación
de asociaciones indígenas capacitadas para examinar
públicamente los problemas de sus comunidades (p.26).

El autor plantea la necesidad que las comunidades se
constituyan y organicen de manera que puedan enfrentar los retos
de la nueva sociedad donde van a interactuar. Dentro de la
comunidad Yanomami se encuentran organizaciones como los procesadores de
harina de plátano, los que procesan la miel, las
costureras, son alrededor de cinco o seis cooperativas,
dentro de las cuales se hace mención a una: SUYAO.

Según información de las diferentes referencias
bibliográficas recogidas en el Museo Etnológico de
Puerto Ayacucho y por información oral en el Vicariato, se
encuentra Shaponos Unidos Yanomami Alto Orinoco, (SUYAO) el cual
nace el 8 de noviembre de 1986. Es una organización con
base jurídica para las operaciones
económicas de esa comunidad hacia el mundo comercial
foráneo. Asimismo, es una organización agraria, con
personalidad
jurídica amparada en el nuevo marco legal del Decreto Ley
de Tierras y Desarrollo Agrario en sus Artículos 4, 16, y
19.

Esta organización tiene como finalidad: (a) Asistencia
mutua, cooperación, representación administrativa y
legal en a línea de producción, comercialización, adquisición de
bienes,
transporte, manejo de créditos. (b) Promoción y valoración de
manifestaciones culturales propias, y (c) Formación e
incremento de capital para
la buena marcha de la sociedad. Estas actividades son promovidas
por la propia Constitución Nacional en su artículo
184.

Se puede apreciar en estos objetivos, la magnitud de su rol
como conformadores de grupos organizados, este organismo ha
orientado los objetivos económicos dentro del marco
cultural propio de esa etnia y que igualmente afianzará el
principio del uso comunitario de las tierras y del beneficio que
de esta se deriven.

Está compuesta de la siguiente manera:

  • Una Asamblea General integrada por representantes de
    Shaponos y algunos asesores.

  • Una Junta Directiva nombrada por la Asamblea General.

  • Unas Juntas Locales.

  • Un Consejo de Ancianos.

Es de hacer notar que este organismo brinda soluciones
compartidas a los problemas o proyectos que se presentan en la
comunidad.

Argumenta el P. Lodziana (la conversación sostenida en
Octubre, 2005) que:

Este proyecto evaluándolo con las cosas concretas, dio
resultados. Hace tres años se instaló un gran
tanque de gasolina, regalado por la CVG, donde ellos venden su
gasolina en la comunidad, se logró hacer una cooperativa,
lo que no logró hacer el Plan Casiquiare 2000.

Se pone de manifiesto que la Misión no promueve el
paternalismo, que hay que trabajar para ganarse las cosas y que
el proyecto autogestión ha sido otra obra con buenos
resultados para la comunidad.

Los pueblos indígenas del Amazonas hicieron
hincapié en proposiciones importantes de destacar en este
punto, en el III Congreso de Pueblos Indígenas de
Amazonas, celebrado del 12 al 16 de septiembre, año 2000,
así lo señaló Sendas (2000):

1. Que se formen convenios con las Universidades y los
Institutos Tecnológicos en áreas del conocimiento
necesarias para innovar con tecnologías sustentables o
mejorar nuestras estrategias tradicionales, a fin de mejorar la
posibilidad de desarrollo
económico de nuestros pueblos.

2. Que la Directiva de ORPIA diseñe un plan operativo,
en el que se especifiquen cronogramas, recursos y metas claras,
cuyo objetivo general sea facilitar el acceso a la asistencia
técnica, educativa y económica para la
promoción de la cultura, la salud, la organización
comunitaria y el desarrollo económico de nuestros pueblos
indígenas.

3. La Directiva de ORPIA debe promover y acompañar
juntos con las organizaciones de base, los proyectos de
desarrollo que surgen de nuestras comunidades (p.10).

El mayor compromiso que deben asumir estos pueblos como el
Yanomami, es hacer cumplir y respetar sus derechos como pueblos
originarios ante cualquier autoridad
pública nacional, local inclusive religiosa, ya que hay
líderes que manifestaron que la Misión no debe
manejar el dinero de
dicha organización. Sin embargo, están de acuerdo
con un trabajo mancomunado Misión-Comunidad Sin embargo,
conociendo la episteme popular e indígena esto puede no
ser acertado, ya que se ha conocido a través del tiempo
que la Iglesia Católica se presenta como excelente
administradora y el indígena aún no ha logrado del
todo conocer y apreciar el verdadero valor del dinero. Para
Sánchez (1998, p.51) la presencia misionera también
ha vivido procesos de cambio en su inculturación, lo que
ha conducido a captar las necesidades y a intentar darle
respuesta.

Proyecto Salud.

A través de los estudios histórico, se ha podido
constatar que los Yanomami han sufrido el impacto de la sociedad
occidental en los últimos 100 años, dado el
interés que han tenido diferentes países por el
Amazonas, para aprovechar los recursos
naturales que allí se encuentran, así como la
explotación ilegal de minerales en el
Alto Orinoco, sobre todo por el oro,
produciendo catástrofes ecológicas en ecosistemas
sumamente frágiles y con nefastas consecuencias en la
calidad de vida de esta población tan vulnerable, donde en
muchas ocasiones esta desmedida ambición ha llegado a
cobrar vidas en dicha comunidad tribal.

Según Mosonyi, (1991) " La necesidad imperiosa de
obtener divisas arrastra
al Estado y a la sociedad civil a
la apertura de nuevas fuentes de riqueza a menudo reñidas
con la conservación ambiental" (p.29).

Estas aseveraciones del autor se orientan hacia un ecocidio de
irreversible magnitud, que en este caso se lleva a cabo en el
hábitat
de los Yanomami. Esta situación se ha denunciado en
diferentes organismos y se ha planteado en los diversos
encuentros y congresos que se han efectuado para tratar el tema
de la biodiversidad
genética y
cultural de la Amazonia Suramericana y la problemática
ambiental.

Igualmente, hay que destacar el factor climático de esa
región que abarca aproximadamente el veinte por ciento de
la superficie nacional, el cual tiene altos valores de
precipitación, temperatura y
humedad lo cual incide en problemas respiratorios y otros tipos
de enfermedades completamente nocivas a los miembros de las
diversas comunidades.

En materia sanitario-asistencial, se ha generado un repunte en
los últimos años de una serie de enfermedades
transmisibles que han venido diezmando poco a poco a estas
comunidades del alto Orinoco de acuerdo a información
recogida por la autora en los informes de
los pasantes que se encuentran en el Centro Amazónico de
Investigación y Control de
Enfermedades Tropicales (CAICET) (2003).

Las principales causas de morbilidad dentro del área
Yanomami son las enfermedades de tipo infeccioso y parasitario
como la malaria, la cual es hiperendémica, con alto grado
de endemicidad, principal causa de mortalidad entre los
Yanomami.

Le siguen la hepatitis A, B,
C, D y E, las helmintiasis, diarrea,
tuberculosis,
oncocercosis, leishmaniasis así como enfermedades del
aparato
respiratorio como las neumonías y bronquitis; se
podría afirmar que la totalidad de la población
está expuesta a ellas y lamentablemente la sufre repetidas
veces al año. La caries dental es otra de las enfermedades
crónicas y difícil erradicación, está
condicionada en la etnia Yanomami por su casi inexistente
hábito de limpieza y cuidado de la dentición ya que
no utilizan el cepillo ni otras medidas para el control de la
caries, esta situación se evidenció en el campo de
trabajo, y ciertamente, no hubo un Yanomami que la autora
observara sin problemas de caries. Otras enfermedades que atacan
a los Yanomami inmisericordiosamente son las dermatosis y el
tejido celular subcutáneo como la piodermitis y los
abscesos; también las anemias que según un reporte
ofrecido por el Vicario Apostólico Monseñor
Divasón, a finales del año 1998 era y
continúa siendo una de las causas más comunes por
las cuales son trasladados los indígenas al hospital de
Puerto Ayacucho, por lo cual señaló que es urgente
la creación de una Unidad de Transfusión en el Alto
Orinoco. Acotando además que:

El problema más grande de la comunidad es la salud, con
todo y que en Venezuela hay normas y leyes que
consagran los derechos de los pueblos indígenas,
aquí en Amazonas no son respetados.No existe en ese
Municipio proyectos, ni planificación de salud, ya que no hay una
línea de seguimiento y continuidad de las acciones en
salud (Conversación Julio, 1998).

La situación de salud del Amazona y en especial del
Alto Orinoco, es verdaderamente crítica; esto se agrava en
tiempo y espacio porque el número de médicos que
atienden esta población es deficiente, aunque las
autoridades de la Dirección General de Salud y CAICET
hayan señalado lo contrario a la autora. Es importante
destacar, que el personal médico labora con muchas
limitaciones, factor éste que es por demás
prioritario si se quiere presentar un trabajo eficiente.

Para 1999 la Misión Salesiana requería con
urgencia un Hospital en la Esmeralda; hoy se puede apreciar como
una realidad y un logro incompleto, por cuanto existe la
estructura pero la finalización de los trabajos es un
proceso muy lento por parte de las autoridades, lo que indica que
la infraestructura de salud en el Alto Orinoco sigue siendo una
necesidad perentoria y el requerimiento de una visión
significativa.

En este contexto, se afirma que el derecho a la salud es
fundamental y está consagrado en la Constitución de
la República Bolivariana de Venezuela (1999) en su
artículo 83; sin embargo, estas políticas son
lentas y amenazan la supervivencia biológica y cultural de
los Yanomami.

En tal sentido la Revista SIC
(1997) señala en su reporte referente a este tópico
lo siguiente:

En nuestra inmediata realidad , el colapso de la salud no
sólo es resultado del abandono de la medicina
preventiva sino que a ellos se une la incapacidad de respuestas
en lo curativo…. a los problemas de dotación y
condiciones de trabajo, se unen los vicios de un sistema
administrativo y un liderazgo sin
compromiso con las propuestas… la disminución de la
capacidad del gasto-inversión de la salud
pública es evidente y creciente y ello explica en
parte el avance de ciertas endemias… hay que reconocer que no
le damos prioridad a la inversión en salud (p.29).

Esta crítica es el resumen de una realidad que
está presente no sólo en las grandes ciudades, sino
también en las zonas que ameritan de intervenciones de
salubridad para minimizar las enfermedades de niños,
ancianos, mujeres parturientas o situaciones de gravedad a
comunidades. Para el año 1999 se proyectó el Plan
de Salud para el pueblo Yanomami integrado por un equipo
altamente calificado como el Ministerio de Salud y Desarrollo
Social, la Dirección Regional de Salud de Amazonas, el
Distrito Sanitario del Alto Orinoco, el Laboratorio de
Salud Pública y el Centro Amazónico de
Investigación y Control de Enfermedades Tropicales
(CAICET), atendiendo por supuesto a los lineamientos para una
política nacional programados por la DAI, al respecto en
el informe (n/e) de
este organismo adscrito al Ministerio de Educación y
Deportes, se evidencia lo que está ocurriendo: "La
introducción de programas sanitarios pocas
veces toma en cuenta la especificidad socio-cultural de las
poblaciones indígenas, por lo que se compromete los
éxitos esperados". En tal sentido es importante tomar en
cuenta el concepto de salud que tiene el propio pueblo Yanomami,
a fin de que las acciones que se ejecuten, tengan resultados
satisfactorios para esa comunidad.

Sin embargo, este plan de trabajo contempla a la Misión
Salesiana como ente participativo pero no activamente, solo como
apoyo; asimismo, participan líderes Yanomami, pero con
poco poder de decisiones importantes, ello trae como consecuencia
poca o ninguna eficacia de
acción.

Es necesario también recordar que antes de hablar de
proyectos y políticas de salud, era el propio pueblo que a
través de la etnomedicina, de sus medios
tradicionales, dentro de los cuales está el shamanismo que
se encargaba de realizar las curaciones en las comunidades, lo
confirma el Padre Berno (Entrevista Noviembre, 2003) ".utilizaron
la madre naturaleza, remedios caseros, vegetales, plantas, porque
no conocen eso de químicos.Sin darle nada, sin tocarlo,
solo con la persuasión de que estaba curado, se iban
tranquilitos y sin medicina, ya estaban curados". Todo este
ritual era y es utilizado por el Yanomami bajo efectos de
alucinógenos. Es importante señalar el
planteamiento que sobre este tópico hiciese el
científico Grof (1994) ".los consideraban instrumentos
eficaces para conectarse con las realidades sagradas y con los
demás y, en consecuencia, los empleaban para detectar las
enfermedades y para curarlas (p.29).

Indudablemente las antiguas culturas apreciaban de manera
significativa los estados no ordinarios de conciencia.

Retomando el tema, el gobierno asistía en el sentido de
mandar médicos a realizar su ruralidad a la zona, pero los
dispensarios no eran suficientes, además que este tipo de
políticas no tiene continuidad en la mayoría de los
casos. Al respecto señala el Padre Luís Felipe
Ramírez (Entrevista Julio, 2002): "Existe un elemento de
salud fallo en estos momentos, es que no hay continuidad de
proyectos, allá va un médico este año y
viene otro, y no tiene nada que ver lo que hace un médico
con lo que hace otro". Argumenta el entrevistado que:
"
Existen avances y retrocesos, y ahora estamos en retroceso,
retroceso, retroceso.hoy, la situación de salud es
patética".

Lo que confirma que, esta investigación ha encontrado
en los materiales bibliográficos una gran similitud con lo
expresado oralmente por los informantes claves, en lo que
respecta a materia de salud.

En este mismo orden existe otro hecho histórico como
fue la masacre de Haximú, en palabras de Morales (1993):
"El común del pueblo venezolano no podía creerlo.
Mujeres y hombres de la nación indígena Yanomami
habían sido asesinados, brutalmente, en territorio
venezolano, por garimpeiros brasileros" (p.487). Ocurrió
en Agosto de 1993, un genocidio donde mueren 16 Yanomami, lo cual
fue lamentado por todo el colectivo. De esta forma el Estado se
vio comprometido con dicha comunidad indígena y para
reinvidicarlos ofrecieron una indemnización de 1.5
millardos de bolívares que se acordó cinco
años más tarde. En 1999 hubo un acuerdo preliminar
de adoptar una serie de medidas entre las cuales estaba el plan
de salud y la demarcación de tierras, pero en la
práctica, actualmente para el 2005, aun no se ha llevado a
cabo. Para Bórtoli (Entrevista Agosto, 2002).

Hay una desilusión muy grande, hace algunos años
se defendió ese gran proyecto de salud para los Yanomami,
sobre todo basándose en el hecho de la masacre de
Haximú. Eso tiene años, se han hecho reuniones,
encuentros, discusiones, planificaciones, revisiones del plan, y
a la hora de la verdad no se hizo nada. Hay demasiadas
politiquerías, uno se siente ya desilusionado; ya no es lo
científico, sino lo político que se observa
allí.

 

Estas palabras convergen con lo planteado por Tillet,
Comisionada de salud en el MSDS (Citada en Ceaser, 2000) "El
gobierno venezolano tiene toda la intención de ejecutar
programas de salud para los Yanomami, pero por las dificultades
burocráticas y presupuestarias habían bloqueado el
uso de los fondos.No es por falta de voluntad del gobierno, ni
falta de recursos, porque los recursos si existen". Lo que deja
en evidencia que los pueblos están destinados a sufrir a
causa de los problemas políticos existentes.

La DAI, estableció ocho áreas a desarrollar como
líneas estratégicas en el diseño de una
política pública de los pueblos indígenas de
Venezuela y dentro de esas áreas está el
diseño de una política de salud para esos pueblos
originarios basada en una perspectiva intercultural (salud y
conocimientos ancestrales), planteándose desde el
año 2000 el proyecto "Hacia el Diseño de una
Política Intercultural de Salud para los Pueblos
Indígenas Venezolanos", realizándose actividades
destinadas a capacitar y sensibilizar al personal de salud, fuera
éste indígena o no, en donde se toman en
consideración la importancia de los saberes ancestrales de
los pueblos indígenas, promoción de salud y
prevención de enfermedades y apoyo a la comunidad mediante
organizaciones.

Para el año 2003 se realizaron diversas actividades
citándose brevemente algunas de ellas: (a) Difusión
de los derechos consagrados en la Constitución. (b)
Observaciones al anteproyecto de
la Ley Orgánica de Salud para la inclusión de los
aspectos relacionados con el reconocimiento de las
prácticas tradicionales de salud y la incorporación
de un enfoque intercultural de salud. (c) Elaboración de
materiales didácticos promoviendo la salud y fomentando la
medicina tradicional de los pueblos indígenas. (d)
Consolidación de relaciones interinstitucionales, entre
otras. (Políticas Públicas del Ministerio de
Educación)

Es necesario señalar lo anteriormente expuesto, a fin
de analizar que existen muchas actividades que se promueven en
materia de salud y que a veces las personas no se explican
porqué hay tantas deficiencias al respecto existiendo
políticas tan bien diseñada.

No obstante, la compleja planificación del proyecto de
salud para el pueblo Yanomami, solo quedó en puro
proyecto, sin realización de ninguna operatividad por
parte de las personas que iban a participar, generando
desinterés, desmotivación e ineficacia. Aún
para el 2005 continúan los mismos problemas de salud que
ya se citaron "El problema más grave y que constituye una
emergencia, es que el 80% de las comunidades de los Yanomami no
reciben asistencia médica mínima". (Derechos Humanos,
2003;p.32). Sin embargo a principios de este año (2005) se
acaba de culminar una obra muy importante promovida por la
pedagoga alemana Cristina Haverkamp, quien en sólo siete
meses logró hacer un ambulatorio en Mavaquita donde se
atienden varias comunidades Yanomami, al respecto señala
Noguera (2005) "La construcción de este ambulatorio ha sido
posible gracias al dinero que ha buscado Cristina Haverkamp en
Alemania",
(p.31) la mencionada pedagoga pertenece a una organización
de derechos humanos que lleva por nombre "Asociación para
la defensa de los pueblos amenazados" asevera Haverkamp (citada
en Noguera, 2005) "La construcción ha durado solamente
tres (3) meses; ahora los últimos detalles, armarios y la
pintura,
duraron tres (3) semanas, más o menos. Fue tan
rápido porque ochenta (80) Yanomami han ayudado". (p.31).
Estas ayudas que llegan de Alemania son conseguidas por la
Misión.

En los actuales momentos se puede decir que han habido algunos
avances en materia de salud según las apreciaciones del P.
Dariusz Lodziana (Conversación Octubre, 2005) quien
comentó que el Estado con el apoyo de la Misión
están haciendo un trabajo de muchos logros, pero que
continúa siendo insuficiente de acuerdo a la
problemática de salud que existe en la zona. Se
continúa esperando lo prometido después de la
masacre de Haximú, pero la realidad es que no termina de
llegar, ocurriendo situaciones como las que plantea el P.
Lodziana en nuestra conversación:

En el 2004 Asamblea aprobó 1.560 millones,
después vino el cambio de Ministro y el dinero dio un giro
y no se quiso usar en esa ocasión. Entonces vinieron a La
Esmeralda y que con un "Encuentro de los Saberes" para reconocer
el trabajo de
los shamanes, etc., pero cuando se le pidió que dotara en
medicina, en gasolina, que mejoraran las bases, él se
lavó las manos y los que hicimos el reclamo nos dijo que
éramos "escuálidos" que éramos los chupa
sangre de la
patria.Recuerdo que una Doctora le dijo: – Señor Ministro
no tengo medicina, se me mueren los niños – y
él respondió "si usted quería tener todo en
el ambulatorio mejor que fuese a trabajar al Sambil". Mira, las
Doctoras llorando.entonces las despidió a las dos, les
dijo tal cual "ustedes ya no trabajan más".

Continúa la conversación y dice el P.
Lodziana:

Yo te cuento esto,
porque la posición de los misioneros no es desentenderse,
no se puede desentender uno de la salud. La salud es
primero.ayudamos en los momentos cruciales, consiguiendo
medicina, prestar el apoyo emotivo y también luchar para
que se den los proyectos.

Esta situación pone de manifiesto la crisis de
salud a nivel gubernamental que vive la zona Alto Orinoco y la
mención de reconocimiento que debe dársele a la
Misión Salesiana por sus pertinentes diligencias al
respecto.

Generalmente el Estado venezolano ha asumido una
posición muy cómoda al tratar de dejar la
responsabilidad de la salud a los Salesianos; no obstante a pesar
que en los últimos tiempos tiende a focalizarse la
atención de los servicios
primarios , aún continúan fallas estructurales que
deben ser revisadas con urgencia.

La situación de salud de los Yanomami ha sido de
interés para muchos investigadores, de donde han salido
importantes recomendaciones que más de una vez se han
quedado en mera letra muerta. Es necesario continuar estas
acciones con vehemente labor presionando las Misiones como poder
que es y ha sido la Iglesia ante las altas autoridades nacionales
para que no se quede en un simple Plan de Salud sino se convierta
en un Programa de Salud real para dicha comunidad. También
es importante destacar que siendo la Escuela Intercultural
Bilingüe Yanomami un éxito dentro de los programas
sociales que ha llevado la Misión Salesiana,
deberían los Organismos de Salud de esa región,
permitir que dichos misioneros guíen los lineamientos del
Proyecto Salud, a fin de obtener el mismo éxito como el ya
señalado.

Basamentos
Legales de la Investigación

A continuación se destacan brevemente algunas leyes,
artículos, decretos, que están dirigidos a mejorar
las condiciones de la población indígena y
misionera, además de otros que son de carácter
general y que guardan relación indirecta, dentro de los
cuales podemos citar los Derechos del Hombre y del Ciudadano
(1980), Proyecto de Ley de Pueblos y Comunidades
Indígenas, La Constitución Nacional (1999) y Ley de
Misiones (1915).

La
Declaración de los Derechos del Hombre y el
Ciudadano

En la oportunidad de los 50 años de la
Declaración Universal de los Derechos Humanos, parece muy
importante tomarlo como fundamento para este estudio, pues
refiere el ámbito ético. Por ello, se
tomarán dos aspectos: el que refiere Arias (citado en
Vivas, 1996): "La absolución de las castas y los
principios y la igualdad de todos los ciudadanos ante la Ley. Que
todos los hombres nacen libres e iguales en derecho. Que todos
los hombres tienen derecho a la libertad, la
seguridad y la
resistencia a la
opresión" (p.15).

Igualmente el artículo 17 de este documento
señala que ningún género de
trabajo, cultura ni de comercio se
puede prohibir a los ciudadanos.

De allí la importancia de respetar las diferentes
culturas que existen en el país. Parafraseando a Ramos
(1997) expresa que, La declaración ha sufrido una
evolución en el tiempo recogiendo conquistas cada vez
más ambiciosas, ubicándose la actual en la tercera
generación, que aún no ha sido incorporada
formalmente en su formación originaria, pero
correspondería a los derechos de la humanidad, dentro del
cambio de paradigmas
hacia el constructivismo y
que se discute en los llamados temas o ejes transversales.
Aquí se defiende el derecho a vivir en un ambiente sano,
no contaminado y vivir en paz, así como el de la
inviolabilidad del patrimonio genético y cultural, tomando
como valor guía la solidaridad mundial. Estos son los
valores que deben estar presentes en cualquier misión
indigenista y que muchas veces se les resta importancia o no se
toman en consideración.

Proyecto Ley
Orgánica de Comunidades, Pueblos y Culturas
Indígenas.

Este proyecto, que fue aprobado por el Senado en 1998,
aún permanece a la expectativa en la Asamblea Nacional. En
las comunidades indígenas del país se han realizado
propuestas, a lo largo del desarrollo de sus actividades en las
últimas discusiones, pero, por razones de índole
política no se ha podido llegar a ningún acuerdo.
Esta Ley en sus disposiciones generales, artículo 1°,
dicta que tiene por objeto establecer el Régimen de
Excepción que requiere la protección,
consolidación y desarrollo
sustentable de las comunidades, pueblos, culturas, lenguas y
grupos étnicos indígenas, así como su
participación libre de la sociedad venezolana conforme a
los principios consagrados en la Constitución
Nacional.

Constitución de la República
Bolivariana de Venezuela

La situación de los pueblos indígenas en
Venezuela ha sufrido una transformación sustancialmente
desde el momento de la aprobación en consulta
pública de la nueva Constitución Nacional.

Como carta magna es
muy significativo analizar algunos artículos que dan
razón de los deberes y derechos del grupo humano, objeto
de este estudio. En este sentido se citan los siguientes
artículos, los cuales dan sustento a la
investigación. (Ver cuadro 2).

Evidentemente, la Constitución Nacional reconoce que
los pueblos indígenas forman parte de la Nación y
del pueblo venezolano como único, soberano e indivisible,
sin embargo en la práctica no parece haber un verdadero
interés en ejecutar los compromisos que aquí se
plantean, sobre todo lo relacionado al artículo 122.

CUADRO Nº 2

Aspectos Sociales, Culturales, Económicos y
Políticos Contemplados en el Capítulo VIII de la
Constitución de la República Bolivariana de
Venezuela

SOCIAL

CULTURAL

ECONÓMICO

POLÍTICO

Art.119: Reconocimiento

Como pueblos indígenas.

 

 

 

 

Art. 120: Consulta sobre el
aprovechamiento

De los recursos naturales en sus
hábitats.

 

 

 

 

Art. 121: Derecho a una educación
propia

Y a un régimen de educación
intercultural

Bilingüe.

 

Art. 121: Respeto a su

Cosmovisión.

 

 

Partes: 1, 2, 3, 4, 5, 6
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