La Casa de Bernarda Alba, de Federico García Lorca (página 2)

Partes: 1, 2

20) ¿Por qué no quiere Bernarda que
su madre se acerque al pozo?

20) Bernarda se avergüenza de los
desvaríos de su madre, es por ello que no quiere que se
acerque al pozo, para que no la vean las vecinas.

21) ¿Dónde estaba Adela?

21) Adela estaba en el portón de la
casa

22) ¿Dónde estaba Angustias?

22) Angustias también estaba en el
portón, espiando a Adela.

23) ¿Cómo reacciona Bernarda?

23) Bernarda se enoja porque le preocupa
qué dirán de sus hijas, quienes estaban
detrás de los hombres el día del entierro de su
padre.

24) ¿De qué hablan Amelia y
Martirio?

24) Amelia y Martirio hablan de Adelaida, su
vecina, quien se casó y vive prisionera de su marido. Se
preguntan si es mejor tener novio o no; piensan que a los hombres
sólo les interesan las riquezas de las mujeres.

25) ¿Qué ha hecho Adela?

25) Adela se probó el vestido que era para
estrenar el día de su cumpleaños y se fue al
corral.

26) Según Magdalena, ¿Qué se
comenta en el pueblo?

26) En el pueblo se comenta sobre el casamiento
de Angustias y Pepe el Romano.

27) ¿Por qué viene Pepe el
Romano?

27) Pepe viene todas las noches a la casa de
Bernarda para hablar con Angustias.

28) ¿Quién es Pepe el Romano?

28) Pepe el Romano es el prometido de
Angustias.

29) ¿Cómo es Pepe el Romano?
(retrato físico/psicológico)

29) Pepe el Romano es retratado como un hombre guapo;
está interesado en la fortuna de Angustias pero se siente
atraído por Adela.

30) ¿Qué piensa Adela del luto?

30) Adela piensa que el luto le llegó en
el peor momento de su vida para pasarlo, es evidente que le
preocupa perder ocho años de su valiosa juventud.

31) ¿Qué quiere hacer
Angustias?

31) Angustias pretende salir maquillada el
día de duelo de su padre, pero Bernarda no lo aprueba.

32) ¿Qué dice María Josefa
de los hombres del pueblo?

32) María Josefa dice que los hombres del
pueblo huyen de las mujeres.

33) ¿A dónde quiere ir? ¿Por
qué?

33) María Josefa quiere irse a vivir a la
orilla del mar porque no quiere ver a sus nietas en la soledad en
la que viven.

34) ¿Qué quiere hacer?

34) Quiere irse lejos del pueblo para casarse y
ser feliz.

35) ¿Por qué siente María
Josefa tantos deseos de casarse?

35) Porque no soporta la tiranía de su
hija Bernarda y sus malos tratos.

36) ¿Tiene algún simbolismo esta
actitud?

36) El simbolismo que tiene dicha actitud en el
contexto en que Lorca escribió esta obra, podría
relacionarse con el deseo de libertad de
los ciudadanos en la época de la guerra civil
española. Para no quedarse a ver tanta desgracia en su
país.

37) ¿Existen otros personajes que no
aparecen nunca en el escenario? ¿Quiénes son?

37) Los personajes que no aparecen en escena son:
Pepe el Romano, el prometido de Angustias; la hija de la Librada,
una madre soltera que quiso matar a su hijo; y los hombres del
duelo.

38) En el espacio exterior, la calle, ocurre una
serie de cosas a las que Lorca se refiere en el drama.
¿Qué función
tienen?

38) Lo que sucede fuera de escena, más
precisamente la persecución de la hija de la Librada,
quien intentó deshacerse de su hijo, tiene la
función de poner en relieve la
situación de Adela:

Adela (cogiéndose el vientre)

¡No! ¡No!

Sirve para dar cuenta de que Adela está
embarazada de Pepe el Romano.

39) ¿Por qué se suicida Adela?

39) Adela se suicida porque su madre le
disparó a Pepe el Romano al descubrir el juego de
éste con sus dos hijas y, al verse sola y embarazada, sabe
que no hallará el apoyo de Bernarda, una mujer tan
insensible.

40) Escriba un ensayo
sobre la obra sin tener en cuenta autor, momento histórico
ni crítica
literaria.

La Casa de
Bernarda Alba, la tragedia religiosa

La obra titulada "La casa de Bernarda Alba" parece
culpar a la religión de su final
infausto.

A lo largo de la obra nos encontramos con
personajes miserables, oprimidos, pero a pesar de todo, devotos a
su fe.

Los nombres, tan particulares, dan cuenta de una
tradición religiosa: María Josefa, la
conjunción de los nombres de los padre de Jesús;
Magdalena, otro personaje bíblico que representa la
fidelidad a Cristo; y "La Poncia", que, como Poncio Pilatos, se
"lava las manos" en el momento de clímax del drama.

Angustias y Martirio podrían definirse
como los padecimientos del redentor; por otro lado, están
la nobleza del mesías –Adela- y la amargura de su
pueblo –Amelia, sin miel- ante el calvario de
éste.

Pero no sólo los nombres indican símbolos religiosos, también las
tradiciones y, sobre todo, las restricciones de esta familia.

El luto, que durará ocho años
según lo impuso la matrona Bernarda (que podría
aludir a la Iglesia como
institución religiosa), debe su extensión a las
costumbres de las generaciones precedentes de la familia de
ésta.

La castidad de sus cinco hijas se relaciona con
la figura de la virgen
María.

También pueden encontrarse frases o
diálogos alusivos a personajes o hechos
bíblicos:

Poncia

La hija de la Librada, la soltera tuvo un hijo y
no se sabe con quién.

Adela

¿Un hijo?

Poncia

Y para ocultar su vergüenza lo mató y
lo metió debajo de unas piedras,[.] Ahora la quieren
matar. La traen arrastrando por la calle[.]

Este fragmento de la obra es alusivo a la
persecución de María Magdalena para apedrearla por
adulterio.

Otro ejemplo sería:

Poncia

¡Bernarda, o seas tan inquisitiva!

Totalmente asociado a la Santa
Inquisición.

En el caso de María Josefa:

María Josefa:

¡Quiero irme de aquí, Bernarda! A
casarme a la orilla del mar, a la orilla del mar.

También Jesús fue bautizado a la
orilla del mar.

María Josefa:

"Vamos por los portales de Belén"

En esta frase encontramos, por un lado, la ciudad
natal de Jesús y, por otro lado, notamos en este acto que
María Josefa le habla a una oveja –la cual cree que
es su hijo- y quiere irse con ésta a Belén, tal
como la virgen María debió huir de dicha ciudad
para proteger a su hijo.

Otra alusión bíblica es el suicidio de
Adela, que al igual que Judas, se ahorca
al sentirse acorralada. Bernarda, "tan inquisi-tiva", no le deja
otra opción, puesto que es tal su interés
por aparentar buena conducta como
fiel esposa, buena madre y mujer devota, que jamás
permitiría el nacimiento del niño bastardo ni
tampoco aceptaría como yerno a un adúltero.

Por lo tanto, puede acusársele de ser la
causante de la muerte de
su hija por pretender ser lo que no es y por dirigir las vidas de
éstas a su antojo bajo preceptos religiosos muy
restrictivos.

Tanta represión y encierro origina la
disputa entre las hermanas

Por el único hombre apto para una de
ellas, lo que siembra la envidia y la codicia. Nuevamente esto
nos remite a uno de los diez mandamientos: "No codiciarás
la mujer de tu
prójimo [.] ni cosa alguna de tu prójimo".

Esta disputa entre Angustias, la prometida de
Pepe el Romano (nuevamente, "Romano", aludiendo al imperio que
condenó a Cristo), Martirio y Adela, la amante de
éste, dan cuenta de lo que puede desencadenar el ansia del
amor,
reprimido por parte del "correcto" proceder de la madre.

Por último, citamos la frase que sintetiza
lo dicho: "Ella, la hija menor de Bernarda Alba ha muerto
virgen".

Sin importar la pérdida de su hija menor,
Bernarda continúa preocupándose por el nuevo luto
que deberán cumplir y, el buen nombre de la familia.

Escriba otro
ensayo y haga un paralelismo entre la obra y el momento
político-social de España en la época de
Lorca.

La Casa de
Bernarda Alba: Simbologías y muerte

La obra de Federico
García Lorca "La Casa de Bernarda Alba", contiene
simbolismos referentes a lo represivo, a una opresión
paralela a lo que el autor español
debió soportar durante su vida en el contexto de "La
Guerra Civil Española".

Su presunta homosexualidad
pudo haber influido en este drama en el que se observa la
perfecta definición de las personalidades de las mujeres
sin importar la edad ni la condición social (Adela,
María Josefa, La Poncia, etc.) de aquellas; conoce los
modos de sentir y de actuar propios de la mujer.

Los símbolos que utilizó este autor
"hablan por sí solos" de temas tan variados como la
envidia (Martirio), la locura (María Josefa), la
rebelión (Adela) y la represión de la mujer en una
sociedad
machista que éste supo interpretar.

Pero también existen otras
simbologías que Lorca empleó y que pueden
encontrarse en objetos, colores, frases,
etc. Como los siguientes:

Color Negro: simboliza la muerte, el
luto, lo oculto; es precisamente de noche cuando se suicida
Adela, la oscuridad oculta los pecados de la joven.

Color Blanco: Simboliza la pureza, la castidad,
lo bueno; la casa de Bernarda Alba es "Blanquísima", para
dar cuenta de las cualidades de sus habitantes.

El agua: La sed
de Adela y Martirio representan el deseo sexual, mientras que
Bernarda "cierra las ventanas", canaliza esos sentimientos,
sofoca a sus hijas.

El caballo encerrado: Representa la figura del
hombre, de lo viril, que no está al alcance de las
hijas.

El Bastón: Símbolo del poder de
Bernarda; cuando Adela lo rompe, muestra
rebeldía.

Este símbolo es fundamental para
comprender el contexto histórico en que Lorca
escribió "La Casa de Bernarda Alba", en la cual, la
ruptura del bastón suponía en aquél
entonces, la liberación del pueblo de España.

El calor:
Representa lo infernal dentro de la blancura que impera en la
casa, es decir el clima triste,
tormentoso que se vive allí, y, desde luego,
estaría aludiendo al clima social de la época de
Lorca.

Los nombres y su correlación con la
personalidad de los personajes:

Bernarda Alba: "con fuerza de
oso"; alba, blancura.

Angustias: del latín "angostura",
dificultad.

Martirio: muerte o tormentos padecidos por causa
de la religión.

María Josefa: Nombres de los padres de
Cristo

Amelia: sin miel

Adela: nobleza

Magdalena: como el personaje bíblico,
mujer de lamentos y penas.

La Poncia: Como Poncio Pilatos, otro personaje
bíblico.

Éstos son sólo algunos de los
nombres que ejemplifican la actitud de los personajes que, junto
con los demás elementos o símbolos, nos orientan
hacia una interpretación del contexto en que Lorca
escribió esta obra.

En resumen, La Casa de Bernarda Alba representa a
la España de la guerra civil, cuyos habitantes –como
las hijas de Bernarda- deben soportar la tiranía imperante
o –como Adela-, romper los "bastones inquisitivos", aunque
ello le cueste la vida; tal como fue la suerte que corrió
Federico García Lorca al exponer sus ideales a
través de sus obras simbólicas:

"El teatro es la
poesía
que se levanta del libro y se
hace humana. Y al hacerse, habla y grita, llora y se desespera.
El teatro necesita que los personajes que aparezcan en escena
lleven un traje de poesía y al mismo tiempo que se
les vean los huesos, la
sangre."