Identidad, Cultura y Diversidad, Presencia Japonesa en Minas de Matahambre, Provincia Pinar del Río (Cuba) (página 2)
En América
Latina la tradición minera ha estado
vinculada al crecimiento y desarrollo de
las comunidades.
El paisaje natural, las formaciones geológicas,
las tecnologías constituyen el patrimonio
cultural y natural de los asientos mineros.
Como todas las actividades económicas la minería en
su desarrollo da origen a una serie de hechos culturales,
migraciones, formación de asentamientos, etc.
El nombre de nuestro municipio tiene su origen con el
descubrimiento de los yacimientos cupríferos en esta zona
y su desarrollo está íntimamente condicionado a la
evolución histórica de esa industria
durante el siglo pasado con 85 años de
explotación.
Minas de Matahambre-Década del
´30
Un patrimonio
minero
Minas de Matahambre es un poblado ubicado en la parte
norte de la provincia de Pinar del Río, la más
occidental de las provincias de la isla de cuba, su
población actual es de más de 11000
habitantes lo que constituye casi un tercio de la
población total del municipio que lleva su mismo nombre
.Allí, en un paraje montañoso, donde se alza una
extensa población maderable no existe ni la
simetría urbana ni la planicie que permite ver el
horizonte a lo lejos, existió hasta hace poco tiempo el
yacimiento de cobre
más importante de la parte occidental de Cuba y que se
convirtió en una de las minas subterráneas
más profundas de América
Latina.
Una larga historia de trabajo en las
profundidades de la tierra dio
inicio en el año 1912, cuando un campesino
encontró una piedra brillante en el faldeo de una
elevación llamada, loma del viento.
Las muestras llegaron a manos del entonces alcalde de la
ciudad de pinar del río Alfredo Porta Rojas y de este pasa
a mano de Manuel Luciano Díaz alto personero del gobierno que las
envía a un laboratorio
estadounidense donde se determina su alto contenido de cobre.
Esto trajo como consecuencia que el 24 de febrero de 1913 se
constituyera oficialmente la sociedad Porta
y Díaz dedicadas a la explotación de las Minas en
la finca San Cristóbal de Matahambre.
Ya desde 1916 se implantaba el beneficio con molinos que
alcanzaron su máximo desarrollo tecnológico con la
creación de la planta de tratamiento conocida como
concentrador cuya puesta en función
tuvo lugar en 1918 y que recibió al igual que la industria
modernizaciones paulatinas en las décadas del 20 y el 30.
El concentrado de cobre de Matahambre fue reconocido por su
calidad en el
mercado
internacional.
La profundidad que fue alcanzando la Mina a
través de los años significó también
su crecimiento en la superficie. En la medida en que se
tejía una red de galerías,
pozos y contrapozos para la extracción del mineral, se
incrementaban las viviendas y crecía el poblado en la
difícil geografía de la
superficie alrededor de las instalaciones
industriales.
Surge de este modo el llamado barrio Americano por las
características de su arquitectura,
típicas de las granjas estadounidenses y donde
vivían los principales directores del emporio. Del otro
lado aparece un barrio destinado a los obreros y empleados
cubanos conformado por un sistema de
barracones (casas multifamiliares de madera y zinc)
también propiedad de
la compañía, dueña absoluta de los terrenos
pertenecientes al coto minero. En ningún caso se tuvo en
cuenta un proyecto
urbanístico, pues se construía donde la loma o el
faldeo lo permitiera.
Con esta misma suerte surgen las calles del poblado, sin
líneas rectas, con curvas sorprendentes, subidas y bajadas
que dan hoy un carácter pintoresco especial y nos definen
como un poblado diferente al resto de los existentes en la
provincia y el país.
Minas de matahambre-Primeras
construcciones
La población de Minas de Matahambre era muy
diversa en su origen desde que se descubre el yacimiento minero
en 1912 sus primeros propietarios se enfrentan a las falta de
profesionales y personal
capacitado para realizar el laboreo minero.
Este problema encuentra solución cuando se
contratan los seis primeros obreros de origen español
que establecen un campamento rudimentario en el lugar donde se
encontraron las primeras muestras del mineral estos fueron los
encargados de encontrar la primera veta de cobre y construir el
primer túnel o socavón de donde se extrae el
mineral.
A partir de 1913 comienza la afluencia de personal de
diferentes nacionalidades, ocupando lugares preeminentes los
capataces e ingenieros norteamericanos que acompañados de
rusos, polacos, chinos, japoneses y españoles intentaron
buscar fortuna en las entrañas de la tierra
apoyados en experiencias anteriores en su país de
origen.
Con el transcurso de los años los campesinos y
pobladores de la zona van adquiriendo habilidades en el laboreo
minero y se conforma entonces una población que asume una
identidad
cultural minera que perdura hasta nuestros días,
representada en particulares hábitos costumbres y formas
de comunicación en la que han intervenido
todas sus etnias conformando la identidad que hoy se
deteriora.
El fenómeno etnocultural en la comunidad
Minas de M… se ha desarrollado sobre la base de la
combinación de varias culturas, el entrecruzamiento de
varias etnias a partir de una conexión histórica
desde la apertura y explotación del coto
minero.
Alemanes, checoslovacos, chinos,
japoneses, españoles y norteamericanos por motivos de
inmigración o intereses económicos,
llegaron a nuestra zona. Hoy nuestra comunidad la integran
descendientes de aquellos que trabajaron en las obras de laboreo
minero, la manufactura,
servicios,
etc. y que fueron legando sus costumbres para la formación
y desarrollo sociocultural de la actual comunidad de Minas de
Matahambre.
Presencia foránea en el coto
minero de Minas de Matahambre
Silenciosos, dispersos y asimilados, un ajiaco cultural
en una gran cazuela nacional de españoles, africanos, y
chinos, también productos de
la transculturación los japoneses cumplen 101
años en Cuba con una presencia discreta, que ha
dejado sin embargo algunas huellas en la agricultura y
la pesca.
Colaboradores del Centro de Estudios de Asia y
Oceanía(CEAO) determinaron por un registro
migratorio del diario La Marina que el 9 de septiembre de
1898 llegó a Cuba el primer japonés con planes de
establecerse en la isla, para fomentar una comunidad
que llegó a acoger alrededor de 1.000 inmigrantes nipones.
Según la
investigación de José Ramón
Cabrera y Carlos Miguel Roque, el japonés Y.
Osuna llegó en esa fecha a La Habana a bordo del vapor
Orizawa, proveniente de Veracruz, México.
Otros japoneses siguieron a Osuna como parte de un
fenómeno migratorio que se produce en Japón
tras la restauración Meiji, con particular fuerza hacia
América, y dentro de esta a México, Brasil,
Perú y Argentina.
La emigración japonesa a Cuba, que
llegó a sumar unos centenares de personas, estaba
compuesta básicamente por hombres, que formaron familia con
cubanas, se adaptaron a las dietas
locales, ya que muchos ingredientes de la cocina japonesa eran
imposibles de conseguir en la isla.
Esa asimilación estuvo
también agudizada por la dispersión de los
inmigrantes que salvo excepciones, llegaron a 13 de las 14
provincias actuales de Cuba. no obstante se registraron algunos
intentos de agrupamiento. Después de 1914, Kogawa
Fujishiro formó una Asociación de Productores en
tierras del central azucarero ¨Constancia¨ , en la actual
provincia de Cienfuegos y en 1920 varios inmigrantes integran
otra agrupación para cultivar la tierra también en
dicha provincia, mientras que otro grupo se
dirige a Isla de Pinos, una ínsula poco fértil al
sur de La Habana.
Actualmente a esa pequeña porción de
tierra perteneciente al territorio cubano se le llama Isla de la
Juventud, y en
ella los japoneses formaron las primeras cooperativas
de producción agrícola de que se tenga
noticia en Cuba, siendo estos quienes introdujeron el uso
del abono químico.
La creciente comunidad japonesa tuvo sin embargo sus
peores años en la etapa de la Segunda Guerra
Mundial, cuando la emigración nipona fue paralizada y
los radicados en Cuba fueron detenidos en campos de
concentración en La Isla de Pinos y en La
Habana.
Según las investigaciones,
el fin de la guerra y de la
concentración no terminó con las tensiones con
Japón que recién llegaron a su fin en 1959, cuando
la revolución de Fidel Castro
llegó al poder y
normalizó las relaciones con Tokio y se restauró la
emigración, aunque en menor medida.
Es en esa época que se establece la
cooperación pesquera entre los dos países y
llegan nuevos inmigrantes nipones, aunque a ritmo lento. La
actual colonia japonesa en Cuba es de poco más de 1.000
personas, según un censo de la Asociación de
la Colonia Japonesa que dirige el empresario
Francisco Misayasaka, un cubano descendiente de japoneses o un
japonés de segunda generación, De
esas personas, sólo 25 son de primera generación,
es decir inmigrantes, 15 de los cuales llegaron antes de 1959 y
tienen entre 85 y 95 años de edad. Otros cinco se
establecieron en la isla después del triunfo de la
revolución. Aunque el asentamiento japonés
más conocido es el de Isla de Pinos y de
mayor popularidad es la del agricultor Mosaku Harada y
su familia (12 hijos, 20 nietos y bisnietos, en total 46
miembros), La Habana es "plaza fuerte de los japoneses en Cuba",
con 221 personas, el 22.6% de la comunidad nipona.
Además del agricultor Harada, el otro
japonés que alcanzó popularidad en Cuba fue el
horticultor Kenji Takeuchi, quien por encargó
desarrolló el orquideario de Soroa, en la provincia de
Pinar del Río (oeste), donde cultivó
más de 700 especies de estas flores .
En Minas de Matahambre la presencia de los Japoneses
data de 1913 ,con la apertura de LA MINA y las obras de laboreo
minero llega a nuestro territorio el primer japonés
nombrado Takizo Uratsuka Uratsuka, luego de haber arribado
a la Habana procedente de Panamá
en un buque pesquero como cocinero, sin ningún conocimiento
del oficio, fue el carpintero que fabricó de forma
manual el
primer concentrador para la naciente MINA de cobre ,este
concentrador convertido en patrimonio
Industrial por su inestimable valor
histórico.
Concentrador fabricado manualmente por
Takizo Uratsuka Uratsuka
Takizo fue un hombre
respetado por su laboriosidad y persistencia en cualquier trabajo
que enfrentara, su férrea disciplina en
el cumplimiento de cualquier actividad y además por su
discreción. Este japonés por su trabajo recibe una
remuneración y regresa a Japón a su llegada al
país natal cuenta las posibilidades que tenía en
Cuba de hacer fortuna y el lugar donde vivía , las
características pintorescas de la zona de Minas de
M… , las montañas y la vegetación poblada mayormente por
coníferas, las posibilidades de desarrollarse como
carpintero por la foresta y el tipo de madera que existía,
esto lo cuenta a su prometida Masae Taikiamiro Uratsuka
con la que contrae matrimonio
llegando a las Minas en 1923, Takizo cuenta en su diario la
difícil travesía que ambos realizan antes de llegar
al territorio minero.
En 1926 Takizo construye una casa de madera con el fin
de establecerse poco tiempo como es característico en las
zonas mineras, su típica arquitectura japonesa de techos
bajos cubiertos de tejas, y con los populares refugios subterráneos para protegerse de los
conocidos tifones orientales, sin embargo en Cuba este tipo de
construcción les sirvió para
protegerse de los ciclones tropicales, increíblemente en
la actualidad existe dicha construcción confundida entre
la vegetación recostada al tiempo conservándose
aún a pesar de sus malas condiciones constructivas pero
que sus descendientes actuales no han querido modificar
.
Su prometida Masae Yaaimiko su nombre de soltera
apellido que desaparece al contraer matrimonio con Takizo
Uratsuca , siempre esperó el regreso de su prometido que
juro regresar por ella, aun sin saber las necesidades por las que
pasaría este ni el lugar exacto del planeta donde se
encontraba él , quien había partido desde el
Oriente rumbo a las América pero ¿Dónde?
tuvo pocas respuestas a sus preguntas hasta el día que
volvió por ella contando su estancia en Panamá
donde fue cocinero y prestó otros servicios ,
además en el vapor donde viajó, fue el hombre que
se ocupo de varios servicios cocina , lavandería, este
vapor era de militares sin embargo el nunca sintió
pasión por la vida militar.
Casa de Takizo y Masae construida en
1926
En esta casa nacen los primeros descendientes de los
Uratsuka mientras takizo se mantiene trabajando en el coto minero
donde llega a ser el jefe de la brigada de mantenimiento
y construcción.
Del matrimonio japonés nacen 6 hijos
descendientes puros de padres japoneses, doce nietos y 5
bisnietos.
Hijos de Takizo y Masae
-Sotero Uratsuka Uratsuka -1927 Fallecido en el 2008 a
la edad de 91
-Pedro Nolasko Uratsuka Uratsuka-1929 actualmente 90
años de edad
-Adelina Uratsuka Uratsuka-1932 actualmente 81
años de edad
-Sulima Uratsuka Uratsuka-1930 actualmente 79
años de edad
-Lidia Uratsuka Uratsuka-1937actualmente 76 años
de edad
-Nilo Uratsuka Uratsuka-1939 actualmente 70 años
de edad
De izquierda a derecha Masae, Pedro,
Sulima, Adelina, Sotero, Takizo y dos oficiales de un vapor de la
marina japonesa en Cuba.
OSVALDO LORENZO RODRIGUEZ . . . .Lidia
Uratsuka Uratsuka
-Hijos de Lidia Uratsuka
Uratsuka.
—- Ángel Osvaldo Lorenzo Uratsuka
nacido en Minas de Matahambre obtuvo la ciudadanía japonesa en el año 2005,
trabajaba en la embajada de Japón como traductor,
falleció en el 2008 en el Japón sus cenizas
están en casa de lidia en Minas de Matahambre.
—-Margarita Maria Lorenzo Uratsuka
actualmente reside en Japón hace dos años. Visita
Minas regularmente.
De los hijos de estos descendientes solo
dos regresaron al Japón los hijos de Lidia. Ángel
Osvaldo Lorenzo Uratzuka y su hermana Margarita Lorenzo Uratzuka
que reside actualmente en Japón hace 2
años.
Al llegar a este rinconcito asiático pudimos
presenciar el eterno ritual oriental como es costumbre,
encontramos las cenizas del joven Osvaldo colocadas en una urna
de cristal acompañada de sus fotos, flores, el
incienso dando el toque sensual a la tenue habitación
donde se guardan sus objetos personales a la luz del
tradicional candelabro, decorado con figuras chinescas daba la
sensación de estar en la tierra de sol naciente
Restos de Ángel Osvaldo Lorenzo
Uratsuka
Casa actual de Lidia
Uratsuka
Candelabro típico
japonés
Pedro Nolasco Uratsuka
Uratsuka
Hijos de Pedro Nolasco Uratsuka
Uratsuka.
—Juan Alejandro Uratsuka Morejón
actualmente reside en Pinar del Río tiene dos hijos
Yaidelis Uratsuka Rodríguez y Yaimel Uratsuka
Rodríguez.
Pedro como buen descendiente japonés
aprende empíricamente disímiles trabajos repara
fogones, sombrillas, hace trabajos de carpintería,
albañilería y otros, su longevidad
no le impide realizar labor alguna todavía se levanta bien
temprano y recorre sin agotarse buena parte de la
geografía minera siempre sonriente de buen carácter
saluda a todo el que se encuentra a su paso.
Nilo Uratsuka Uratsuka
Hijo de Nilo Uratsuka Uratsuka
—Nilo Uratsuka Carrasco
Nilo también trabajó en el emporio minero
en la brigada de mantenimiento aprendió
empíricamente algunas labores, luego fue asesorado por
técnicos coreanos, jugó béisbol
por minas en el equipo representativo de la zona occidental en la
capital del
país, al cierre de la mina en 1997 desfila el primero de
mayo con atuendos representando al trabajador minero.
Desde ese año y hasta hoy labora como jefe
deltaller de mantenimiento y montaje en la UEB Municipal de
Acueducto y Alcantarillado en Minas.
Casino de juegos, al
fondo el concentrador perteneciente a la mina donde
después trabajó Nilo muy cerca de la morada de los
Uratzuka.
Hijos de Adelina Uratsuka
Uratsuka.
—Martha Rosa Rodríguez
Uratsuka.
Hijos de Zotero Uratsuka
Uratsuka.
—Katira Uratsuka González tiene
dos hijos Carmen Maira Pérez Uratsuka y Carlos
Pérez Uratsuka.
—Masae Uratsuka González reside
actualmente en EU.
Hijos de Sulima Uratsuka Uratsuka.
— no se conoce descendencia.
Durante la II guerra mundial
Takizo Uratzuka y su esposa Masae son encarcelados y llevados a
Isla de Pinos junto a otros japoneses allí desaparecieron
varios por enfermedades como la
tuberculosis,
enfermedades de las vías respiratorias, virus y
disímiles de epidemias provocadas por el hacinamiento y
las malas condiciones en que fueron congregados, como se expuso
anteriormente. Masae es liberada porque se encontraba amantando a
su pequeño hijo Nilo .Durante este periodo de encierro
Takizo escribe un diario en el que cuenta los horrores vividos en
Isla de Pinos día a día los suministros , de
alimentos y
aseo personal, la entrada de inspectores del gobierno ,
conoció otros coterráneos con los que hizo amistad fueron
marcados como bestias y hoy tomamos sus vivencias como
referencia. Después Takizo fabrica un concentrador en
Oriente en un yacimiento cuprífero, junto al
también extranjero residente en Minas de Matahambre y de
origen brasileño Humberto Aulizzio.
En 1959 Takizo tiene bajo su dirección 12 trabajadores que se dedican a
La carpintería en la Mina de cobre de la localidad
y en la fabricación de las piezas de madera y
carpintería que se necesitan, todas
manufacturadas.
En el año 1968 construye otro concentrador en La
Mina Las Mercedes sita entre Mantua y Guane en un lugar llamada
Rió Frío. Testimonio de su hijo Pedro Nolasco
Uratzuca Uratzuca, quien de forma espontánea ha brindado
su cooperación varias entrevistas y
fotos familiares para que nuestra localidad tenga conocimiento de
que existen diferentes etnias incluyendo la cultura
oriental que hoy forman parte de esta comunidad que con el cierre
de la Mina hemos perdido nuestro renglón económico
fundamental y nuestra identidad como mineros La vivienda donde
habitó este descendiente se encuentra en la ladera de una
montaña del sitio donde desde el 1913 habitan, los
descendientes de esta familia que han conservado sus tradiciones
y cultura oriental que hoy forma parte también de la
diversidad cultural de nuestra comunidad.
Ruinas del concentrador fabricado por
Takizo Uratsuka
Documento de identificación
de
Takizo Uratsuka como miembro
del
Sindicato de trabajadores
Mineros
A la izquierda Takizo Uratsuka en la
embajada japonesa en Cuba.
Takizo a la izquierda en un estudio
fotográfico en ciudad habana.
Segunda fila de izquierda a derecha el
cuarto Takizo junto a la comisión directiva de la
Compañía Minera Portas-Diaz. En el año
1938.
Aun cuando la generación de los descendientes
puros japoneses no conocieron directamente la tierra del sol
naciente se palpa en ellos la nostalgia de conocer esos lejanos
lares, conociendo de sus padres sus costumbres tradiciones ,
laboriosidad , férrea, disciplina , persistencia etc y
ahí los vemos bajitos y con los ojos rasgados rodeados de
vegetación aferrados en mantener intacta su
autonomía.
Conclusiones
Podemos concluir que los resultados de esta investigación nos han demostrado que
nuestra comunidad y fundamentalmente las nuevas generaciones
desconocen la riqueza etnocultural con las que contamos, Minas es
uno de los municipios privilegiados en las inmigraciones de
haitianos, chinos, españoles, norteamericanos, alemanes,
checos, brasileños y japoneses todas estas etnias han
formado parte de la identidad del minero desde su
formación y hoy son parte de nuestra cultura y de los valores
que se legaran a las futuras generaciones.
Bibliografía
Batista. Carlos Sep.1998.– Los
japoneses en Cuba.Guzmán. Marta, Álvarez.
Rolando.– Japoneses en Cuba.Méndez. Castro. Palmira
.Concepto de identidad. Tomo IClems. Robins.Defendiendo la identidad
nacional.Sociología de la Cultura.
Selección de lecturas.
– Bernad Tonnies. Ferdinad. Comunidad y
Sociedad– 1987.
Antropología Social.
Selección de lecturas.
. Bambino. López. Luís.
Ética Cultura y sociedad.
Referencia
-Articulo Cumplen Los Japoneses 101 Años en Cuba
de Emilio Chicawa. ´
– Fotos de Archivos del
Museo municipal de Minas y de la familia
Uratsuka.
Autor:
Lic Nelia Maria Paez Vives
Lic Omar Miranda Barbosa
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