La lectura crítica de textos expositivos en la asignatura de historia en el 6º grado de educación primaria

La educación debe ser el principio de todo
progreso, un pueblo progresará de manera constante si sus
habitantes poseen iniciativa, ideas nuevas, diferentes a la
cotidianidad o construyéndolos a partir de conceptos con
una visión responsable y comprometedora para el cambio,
mediados por una verdadera y auténtica democracia,
sobre todo, con ideas nuevas para enfrentar los retos actuales,
en un mundo cada vez más globalizado, esta perspectiva de
la
educación se lograría si se promueve una
lectura
crítica
en los estudiantes desde el nivel básico.

Un mundo en el que la información parece ser la única
fuente de desarrollo
intelectual, para el desenvolvimiento de las personas en la
sociedad,
estamos ante una invasión informática, "la era del conocimiento
ha llegado, es momento de plantear como enfrentar este presente y
más aún un futuro prometedor, pero caótico
para aquellos que no posean las herramientas y
habilidades necesarias para hacer frente a estos acontecimientos"
(Gutiérrez, 2005).

Hablar de lectura es hablar de comprensión
lectora, aunque en años anteriores se ha considerado a
la lectura
como el reconocimiento o decodificación de símbolos (SEP, 2000). Instituciones
y autores nos hablan hoy en día que necesariamente la
lectura es un proceso
mental.

En el ámbito internacional, el programa para la
evaluación internacional de estudiantes de
la
Organización para la cooperación y el
desarrollo económicos (PISA, por sus siglas en inglés)
se basa en el concepto de
alfabetización o competencia
lectora y lo define como: la capacidad para comprender, emplear
información y reflexionar a partir de textos escritos, con
el fin de lograr las metas individuales, desarrollar el
conocimiento y el potencial personal, y
participar eficazmente en la sociedad (PISA, 2002).

El 78 por ciento de las escuelas de 4º y 5º grados,
desarrollan como proyecto
institucional la comprensión lectora, esta cifra se
incrementa hasta el 97 por ciento en las escuelas
indígenas (Treviño 2006, citado por Ruíz,
2006.), existe una incongruencia entonces al no cumplirse o
desarrollarse los proyectos. Ya que
plantean como prioridad la comprensión lectora y al
finalizar el año, no avanzan, por consiguiente año
con año plantean lo mismo, por lo que es necesaria una
revisión a fondo de la lectura.

La mayoría de los alumnos de educación primaria
-en México y
más aún en la región Montaña Alta del
Guerrero- no han desarrollado habilidades para realizar una
lectura crítica de textos escolares, esto implica
conocimientos y habilidades como son: la decodificación,
la inferencia, el análisis, la síntesis,
evaluación, comparación, al no desarrollarse estas
habilidades difícilmente se formará un alumno
crítico.

El autor concibe a la lectura y comprensión lectora
como procesos
similares después de la revisión de diversas
fuentes (PISA,
(2002); SEP, (2000); Treviño, (2006); Solé, (2007);
Gómez, (1997); Arenzana y García, (1995), aunque la
sociedad los concibe de diferente manera, ambos procesos realizan
una actividad intelectual al interactuar el lector con el
texto y el
contexto, es un acto de procesamiento de la información,
situaciones que implican un esfuerzo mental; existen infinidad de
trabajos con respecto a la comprensión lectora, pero pocos
se han preocupado por una lectura crítica, que es una
habilidad necesaria e indiscutible para los tiempos actuales.

Como lo afirma Gutiérrez (2005) "la era del
conocimiento ha llegado, es momento de plantear como enfrentar
este presente y más aún un futuro prometedor, pero
caótico para aquellos que no posean las herramientas y
habilidades necesarias para hacer frente a estos acontecimientos"
un mundo en el que la información parece ser la
única fuente de desarrollo intelectual, para el
desenvolvimiento de las personas en la sociedad, estamos ante una
invasión informática.

La Lectura crítica debe ser prioritaria en la Escuela Primaria
Mexicana, para la era del conocimiento que nos espera no
será suficiente, es necesario empezar a dar un significado
y sentido a los conceptos, evaluándola y asumiendo una
posición frente al texto para poder
transformar nuestro mundo.

La escuela primaria de hoy debe desarrollar habilidades para
enfrentar los tiempos actuales, la lectura crítica es una
habilidad que puede ayudar al estudiante a desarrollar ciertas
habilidades para usar y manipular la información, en
especial que será la base para su formación futura,
de esta forma podrá desenvolverse mejor en los niveles
subsecuentes.

Molina (1991) define a la lectura crítica, como un
proceso en donde el lector emite un juicio valorativo, comparando
las ideas presentadas en la selección
con criterios que denomina externos e internos; De Sánchez
(2002) complementa diciendo que la lectura crítica implica
una actividad mental para manipular y así construir nuevos
significados. La presente investigación presenta un análisis
en el marco de este concepto.

Por actividad mental debe concebirse que sea un proceso
activo, reflexivo, y analítico; y por juicios de valor, la
evaluación del texto. Guiados por estas premisas podemos
construir nuevos significados, porque esto lleva a evaluar la
fuente, cómo presenta el autor la información, la
hipótesis central y las hipótesis
secundarias, analizar la argumentación y sus
contradicciones internas.