Publicaciones
Traité des membranes
(1800)
Recherches physiologiques sur la vie et la
mort (1800)
Anatomie générale
appliquée à la physiologie et à la
médecine, 4 vol., 1801
Anatomie descriptive,
1801–1803, 5 vol.
Claude Bernard
Biografía
Nació el 12 de julio de 1813 en Saint
Julien, Borgoña. Bernard es el fundador de la medicina
experimental. Hijo de un viñador, su infancia y
juventud se
desarrollaron en estrechas condiciones económicas. A los
ocho años inició los estudios de latín con
el párroco de Saint Julien; diez años
después tuvo que abandonar los estudios por falta de
medios
económicos. Se empleó entonces en una farmacia. Un
año más tarde se fue a París con un
manuscrito: una obra de teatro, la
segunda escrita por él, pero el poeta y crítico
Saint Marc Girardin le
aconsejó: aprenda un oficio para vivir y ya le
quedarán horas libres para dedicarse a la poesía.
Y así Bernard no se dedicó a la dramaturgia, y a
los 21 años, con escasísimos recursos
económicos, comenzó los estudios de medicina.
Licenciado en 1843, se dedicó a la fisiología, y fue profesor del
Collège de France, en la Sorbona primero y más
adelante en el Museo Nacional de Historia Natural. Elegido
para la Academia Francesa en 1868, recibió la Medalla
Copley en 1876. Esta considerado como uno de los principales
iniciadores de la línea experimental
hipotético-deductiva, a menudo formalizada como OHERIC:
Observación – Hipótesis – Experiencia – Resultado
Interpretación – Conclusión. Sus
primeras investigaciones
versaron sobre el papel del jugo pancreático:
desdoblamiento de las grasas,
conversión del almidón en azúcar
y acción
sobre las proteínas.
Luego demostró la función
glucogénica del hígado y aisló el
glucógeno, demostró su existencia en los músculos y su degradación hasta
ácido láctico durante el trabajo
muscular, hecho clave para interpretar la contracción
muscular como fenómeno energético. Basado en la
función glucogénica del hígado
enunció el concepto de
secreción interna, paso decisivo en el nacimiento de la
endocrinología. Bernard demostró, además, la
influencia del sistema nervioso
sobre la glucogénesis hepática, lo que condujo al
descubrimiento de la acción vasomotora del sistema
simpático. Importantes fueron sus investigaciones en el
campo de la toxicología: sus estudios sobre el
monóxido de carbono y su
combinación con los glóbulos rojos complementaron
los del bioquímico alemán Felix Hoppe, descubridor
de las propiedades de la hemoglobina. Bernard, ya enfermo, se
retiró a su casa de Saint Julien, donde escribió su
meditada Introduction à l'étude de la
médicine expérimentale, aparecida en 1865, una de
las obras más importantes en la medicina y que no ha
perdido actualidad. Falleció en París el 10 de
febrero de 1878.
Gregor Johann Mendel
Nació el 22 de julio de 1822, en
Heinzendorf (hoy Hyncice, República Checa). Hijo de un
veterano de las guerras
napoleónicas que explotaba una pequeña granja. En
1841 su padre fue aplastado por el tronco de un árbol y se
vio obligado a vender sus propiedades. Su hermana le
entregó su parte para ayudarle en sus estudios
eclesiásticos. Durante dos años estudió
física y
matemáticas en el Instituto
Filosófico Olmütz. Ingresó en el monasterio de
agustinos de Brünn (hoy Brno, República Checa) y a
los veintiún años se convirtió en un novicio
agustino y adoptó el nombre de Gregor. Inició un
curso de cuatro años de estudios en el Colegio
Teológico de Brünn en 1845 y fue ordenado sacerdote
en 1847. Le asignaron el puesto de profesor delegado de
matemáticas avanzadas en 1849. En el año 1850
suspende biología en el examen
de cualificación para el profesorado. Fue enviado a la
Universidad de
Viena durante dos años para estudiar física
práctica y matemáticas, química,
zoología, paleontología, botánica sistemática y
fisiología vegetal, que incluía las nuevas teorías
celulares. Pasado algún tiempo
comenzó a trabajar como profesor suplente en la Escuela
Técnica de Brünn donde se dedicó de forma
activa a investigar la variedad, herencia y
evolución de las plantas en un
jardín del monasterio destinado a los experimentos.
Entre 1856 y 1863 cultivó y estudió al menos 28.000
plantas de guisante analizando con detalle siete pares de
características de la semilla y la planta. Gracias a sus
numerosos experimentos logró el enunciado de dos principios que
más tarde serían conocidos como leyes de la
herencia. Sus observaciones le llevaron también a
acuñar dos términos que siguen empleándose
en la genética
de nuestros días: dominante y recesivo. La llamada
ley de la
uniformidad de los híbridos de la primera
generación, dice que cuando se cruzan dos variedades de
individuos de razas puras ambos homocigotos para un determinado
carácter, todos lo híbridos de la
primera generación son iguales fenotípicamente.
Informó de sus hallazgos en una reunión de la
Sociedad para
el estudio de la Ciencias
Naturales en Brno, y publicó sus resultados en las
actas de dicha sociedad, en el año de 1866. La importancia
de sus hallazgos no fue apreciada por otros biólogos de su
época, y fueron despreciados por espacio de 35
años. Sólo obtuvo el debido reconocimiento en 1900
por parte de tres investigadores, uno de los cuales fue el
botánico holandés Hugo de Vries, y sólo a
finales de la década de 1920 y comienzos de 1930, se
comprendió su verdadero alcance, en especial en lo que se
refiere a la teoría
evolutiva. Sus experimentos posteriores con la vellosilla
Hieracium, no fueron concluyentes, y debido a la presión de
otras ocupaciones, en la década de 1870 había
abandonado ya sus experimentos sobre la herencia. Falleció
el 6 de enero de 1884 en Brünn.
Louis Pasteur Químico y biólogo
francés Nació el 27 de diciembre de 1822 en
Dôle, Borgoña(Francia), y
creció en la pequeña ciudad de Arbois. Hijo de un
curtidor y ex sargento de Napoleón. En 1847 se doctoró en
física y química por la École Normale de
París. Pronto se convirtió en ayudante de su
maestro, el químico Dumas. Cerca de los 23 años
hizo su primer descubrimiento: la actividad óptica
de isómeros espaciales. Descubrió que
existían dos isómeros del ácido
tartárico, que uno giraba el plano de polarización
a la derecha, y el otro, a la izquierda, y que el ácido
racémico, ópticamente inactivo, era una mezcla de
ambos isómeros. Nació con ello la
esteroisomería, pero también quedó en su
mente la idea de que las moléculas asimétricas son
productos de
células
vivas. Así, cuando después al estudiar la fermentación alcohólica,
encontró una substancia ópticamente activa
(alcohol
amílico) no dudó del origen microbiano de ese
proceso.
Investigó e impartió clases en Dijon y Estrasburgo.
En 1854 llega a la Universidad de Lille donde fue
catedrático de química y decano de la facultad de
ciencias. Se
dedicó a investigar el proceso de la fermentación.
Aunque su convicción de que la levadura desempeñaba
algún tipo de papel en este proceso, no era original,
logró demostrar, gracias a sus anteriores trabajos sobre
la especificidad química, que la producción de alcohol en la
fermentación se debe, en efecto, a las levaduras y que la
producción de sustancias que agrian el vino se debe a la
presencia de organismos como las bacterias. La
acidificación del vino y la cerveza
había constituido un grave problema económico en
Francia; contribuyó a resolver el problema demostrando que
era posible eliminar las bacterias calentando las soluciones
azucaradas iniciales hasta una temperatura
elevada. Hizo extensivos estos estudios a otros problemas,
como la conservación de la leche, y
propuso una solución similar: calentar la leche a
temperatura y presión elevadas antes de su embotellado.
Este proceso recibe hoy el nombre de pasteurización.
Napoleón III le sugirió que ampliará sus
investigaciones sobre el vino; trabajó primero en Arbois y
posteriormente en la empresa de
Henri Marès de Fabrègues. Entre sus hallazgos se
destaca el haber demostrado que las fermentaciones
lácticas y alcohólicas tienen diferentes fermentos.
Igualmente puso de manifiesto que existen ciertos gérmenes
que causan las enfermedades del vino como
la acescencia (picado del vino -ácido acético-), el
amargor o la grasa.
El 14 de Agosto de 1865 comunicó sus
conclusiones a la Academia de la Ciencia y
1866 la imprenta
imperial publicó su célebre trabajo sobre
Études sur le vin, ses maladies.
En 1865 abandonó París, donde era
administrador
y director de estudios científicos de la École
Normale, en auxilio de la industria de
la seda del sur de Francia, donde la producción de seda se
había visto afectada porque una enfermedad del gusano de
seda, conocida como pebrina, había alcanzado proporciones
epidémicas.
Experimentó con la cría controlada
y demostró que la pebrina no sólo era contagiosa,
sino también hereditaria. Llegó a la
conclusión de que la causa de la enfermedad sólo
sobrevivía en los huevos enfermos vivos, por tanto, la
solución era la selección
de huevos libres de la enfermedad. Sus trabajos tuvieron
importantes consecuencias para la medicina, ya que
sostenía que el origen y evolución de las
enfermedades eran análogos a los del proceso de
fermentación. Consideraba que la enfermedad surge por el
ataque de gérmenes procedentes del exterior del organismo.
Este concepto, llamado teoría microbiana de la enfermedad,
fue muy debatido por médicos y científicos de todo
el mundo. Desveló también la historia natural del
carbunco, una enfermedad mortal del ganado vacuno.
Demostró que está causado por un bacilo determinado
y sugirió que era posible inducir una forma leve de la
enfermedad en los animales
vacunándoles con bacilos debilitados, lo que les
inmunizaría contra ataques potencialmente letales. Con el
fin de demostrar su teoría, empezó inoculando 25
ovejas; pocos días más tarde inoculó a
éstas y otras 25 un cultivo especialmente poderoso, y
dejó sin tratamiento a 10 ovejas. Predijo que las segundas
25 ovejas perecerían y concluyó el experimento de
forma espectacular mostrando a una multitud escéptica los
cadáveres de las mismas dispuestas una junto a la otra. En
1885 llegaron a su laboratorio un
muchacho y su madre. El joven había sufrido graves
mordeduras de un perro rabioso y su madre le pide que le tratara
con su nuevo método. Al
final del tratamiento, que duraba diez días, el muchacho
estaba siendo inoculado con el virus de la rabia
más potente que se conocía; se recuperó y
conservó la salud. Desde entonces, miles
de personas se han salvado de la enfermedad gracias a este
tratamiento. Falleció el 28 de septiembre de 1895 en
Villenueve-L'Etang. En su lápida se leen sus palabras:
Feliz aquel que lleva consigo un ideal, un Dios interno, sea el
ideal de la patria, el ideal de la ciencia o
simplemente las virtudes del Evangelio.
Michael Foster(Huntingdon, 1836 – Londres,
1907) Médico y fisiólogo británico, conocido
autor de manuales para la
enseñanza en la biología,
fisiología, embriología y la experimentación en
laboratorio. Licenciado en medicina en el año 1859 en el
University College de Londres, Foster comenzó a trabajar
bajo las órdenes directas del biólogo de más
prestigioso de su país, T.H. Huxley. En el año
1867, Foster adquirió el grado de instructor de
Biología en el University College, para convertirse en
profesor del mismo centro tres años más tarde, en
el que permaneció hasta el año 1883, fecha en la
que fue nombrado primer profesor de Fisiología en la
Universidad de Cambridge, donde llevó a cabo un nuevo
método de la Biología que revolucionó por
completo la materia, hasta
el punto de convertir a la Universidad de Cambridge en un centro
de investigación biológica de primer
orden mundial.
En Cambridge colaboró con otro eminente biólogo,
Francis Belfour, en la redacción final de la obra Elements of
Embryology (Elementos de Embriología), libro que
había escrito ya en el año 1874. Su otra obra
principal, Text-book of Physiology (Libro de texto de
embriología), se convirtió en el libro de consulta
y referencia obligada para todos los alumnos. Baste decir que la
gran mayoría de los mejores biólogos y
fisiólogos británicos de finales del siglo XIX y
principios del XX fueron alumnos suyos y estudiaron con sus
libros. El
modelo que
expuso a la hora de experimentar en el laboratorio se ha
convertido en una referencia a seguir por todas las universidades
británicas.
John charnley
Sir John Charnley fue quizás uno de los más
brillantes cirujanos ortopedistas del presente siglo y un
extraordinario innovador de técnicas
quirúrgicas; y será recordado para la posteridad
por su artroplastia de baja fricción de la cadera,
prototipo de inspiración y revolución
quirúrgica, que ha contribuido a restaurar la
función de la cadera a innumerable número de
pacientes, que le estarán como el resto de la humanidad
inmensamente agradecidos. Sir John Charnley es indiscutiblemente
el padre del Reemplazo Total de Cadera.
John Charnley nació el 29 de agosto de
1911 en la población Inglesa de Bury, localizada al
norte de Manchester. Allí recibió la educación primaria
y secundaria, para luego ingresar a la Facultad de Medicina de la
Universidad de Manchester, de la cual se graduó con
honores y ganó luego una beca para proseguir su carrera
como cirujano, graduándose en 1935. Un año
más tarde ingreso como fellow, al "Colegio Real de
Cirujanos".
Su postgrado en ortopedia lo inició en el
Hospital Manchester Royal Infirmary y en el Hospital
Solford Royal. Estando en el comienzo de su entrenamiento
estalló la Segunda Guerra
Mundial, durante la cual prestó sus servicios con
las Fuerzas Armadas Británicas en el Medio Oriente.
Durante este servicio
modificó la hamaca de Thomas, que fue de gran utilidad en el
manejo de las fracturas que se presentaron en el frente de
batalla.
Terminada la guerra,
Charnley regresó al Hospital Manchester Royal
Infirmary, bajo la sombra y tutela de ese
otro gigante de la ortopedia: Harry Platt, con quien tenía
una gran afinidad y características en común, como
ser trabajador infatigable con una visión clara y directa
de las cosas, eminentemente pragmático y de avanzada.
En 1946 John Charnley ingresó al cuerpo
médico del Hospital Ortopédico Robert Jones &
Agnes Hunt en Oswestry, y fue precisamente allí donde
comenzó a escribir su famoso libro "El tratamiento
cerrado de las fracturas", que fue publicado años
más tarde. En 1947 fue nombrado como ortopedista de planta
del Hospital Manchester Royal Infirmary y estando
allí publicó la obra antes mencionada, la cual fue
bien recibida y se convirtió en un éxito
inmediato como libro de consulta obligado de todos los
ortopedistas.
En 1948, después de trabajar en animales
de experimentación y luego en humanos dio a conocer su
trabajo sobre su famosa técnica de artrodesis por
compresión de la rodilla, utilizando la prensa que lleva
su nombre, técnica que desde entonces se sigue utilizando
con éxito.
Harry Platt fue crucial para Charnley cuando
empezó a desarrollar ideas alrededor del reemplazo total
de cadera, pues tenía plena confianza en él y pudo
entender y visualizar la enorme trascendencia de lo que Charnley
proponía y fue él quien logró convencer a
los miembros del Regional Hospital Board de apoyar la
creación del "Centro para la
Investigación y Cirugía de la Cadera" que
Charnley proponía, utilizando para tal efecto el Hospital
Local de Wrightington. Alrededor de 1958 se cristalizó
este sueño y Charnley se convirtió en el cerebro y
motor de este
Centro, donde después de una investigación
profunda, llevada con gran rigor científico y honestidad
profesional y con el apoyo y colaboración permanente de su
equipo de trabajo y del Departamento de Bio-ingeniería de la Universidad de Manchester,
y de la firma Thackray de Leeds, logró perfeccionar el
concepto de su "Reemplazo total de cadera de baja
fricción".
Es importante señalar que en la primera
fase de este trabajo, utilizó en el componente femoral
prótesis de Moore
y de Thompson, con copa artroplástica de teflón.
Debido a las fallas biomecánicas, tanto del componente
femoral como del componente acetabular, resolvió
diseñar su propio componente femoral, con cabeza de 22 mm,
y cambió la copa artroplástica de teflón por
una de polietileno de alta densidad. Es
importante señalar que Charnley fue el primero en utilizar
el metil-metacrilato como elemento fijador de los componentes de
su artroplastia. A este material se le dio el nombre de cemento
óseo.
En este punto vale la pena resaltar un hecho sin
precedentes y una prueba más de la honestidad profesional
de Sir John Charnley, y fue haber hecho un seguimiento de los
primeros pacientes en los cuales se utilizó el
teflón y al ver las fallas que este material presentaba,
le explicó a cada uno de ellos la situación,
asumió la responsabilidad y los convenció de la
necesidad de ser reoperados. Así lo hizo con muchos de
ellos, a los cuales les remplazó la copa de teflón
por una de polietileno de alta densidad.
Dentro de los múltiples honores y
reconocimientos recibidos, se destacan los siguientes: en 1964
recibió el título de doctor en ciencias de la
Universidad de Manchester; en 1970 fue nombrado "Comandante
del Imperio Británico"; en 1975 fue nombrado "Miembro
de la sociedad Real", recibiendo en esa ocasión la medalla
Lister; en 1977 fue nombrado "Caballero del Imperio
Británico", por sus invaluables servicios al Imperio y
a la humanidad y su contribución científica en el
campo de la investigación en ortopedia; en 1978 fue
condecorado con la "medalla de oro de la
Asociación Médica Británica".
Por otra parte, en 1979 publicó su famoso
trabajo Low Friction Arthroplasty of the Hip, Theory and
Practice en el cual resumió muchos años de
trabajo y describió en detalle la técnica
quirúrgica del reemplazo total de cadera concebido por
él.Era tan profesional y tan honesto que en los primeros
años sólo permitió que realizaran su
operación aquellos ortopedistas que habían tenido
oportunidad de haberla visto o realizado con él y
solamente a ellos se les autorizó la adquisición
del instrumental respectivo, fabricado y distribuido
exclusivamente por la firma Thackray de Leeds.El Centro para
Cirugía de Cadera de Wrightington se convirtió en
la meca de la cirugía de cadera y por allí
desfiló un peregrinar continuo de Cirujanos Ortopedistas
de todo el mundo deseosos de conocerlo a él personalmente,
su sitio de trabajo y su técnica. Con él se
formaron muchos ortopedistas deseosos de conocer y perfeccionar
su técnica .Sir John Charnley a partir de esa época
fue el profesor invitado y la estrella de muchos congresos y
simposios sobre cirugía de cadera que se realizaron en
diferentes partes del mundo.Una breve enfermedad acabó con
una de las glorias de la Ortopedia Universal y uno de los
maestros más queridos, respetados y apreciados.
Murió en su residencia el 5 de agosto de 1982.Sir John
Charnley con su vida y su trabajo aseguró para siempre un
lugar de privilegio en la Ortopedia Británica y Universal.
Sus enseñanzas y el fruto de su trabajo serán
eternamente apreciados y valorados por todos aquellos que tuvimos
la fortuna de estar cerca de él y por todos los
ortopedistas en general; y la humanidad entera estará
siempre agradecida por haberle devuelto la función de sus
caderas a muchos de sus pacientes y haber contribuido al alivio
de muchos más.
MIGUEL C. RUBINO
Si una figura del panorama
científico de nuestro país merece el perpetuo
reconocimiento universal, ella es, sin duda, la del prestigioso
sabio Dr. Miguel C. Rubino, desaparecido hace poco más de
veinte años, doblegado por las exigencias de su labor, que
le condujeron al supremo sacrificio de la vida.
Nace en la ciudad de Durazno en el
año 1886, lucha desde sus primeros años de
estudiante liceal con dificultades económicas, teniendo
como único recurso los productos de una chacra que
cultivaba y que él se encargaba de vender en las calles de
su pueblo. Orienta su fervor vocacional, disciplinándose
en los procesos del
conocimiento
científico y cumpliendo al mismo tiempo la doble
función de maestro y discípulo, con la
sabiduría y el ahínco que caracterizan a los
virtuosos del pensamiento.
Después de terminar en Montevideo
el bachillerato, ocupa cargos técnicos en la Universidad,
obteniendo más tarde el título de Médico
Veterinario. Fiel a sus lazos familiares, regresa a Durazno, y en
la propicia quietud pueblerina, inicia de inmediato estudios
sobre algunas enfermedades de los animales, pudiéndose
mencionar entre ellas, la garrapata y la aftosa, investigaciones
que más tarde contribuyeron a la custodia, por la Ciencia,
de nuestra riqueza ganadera.
Transcurría el año 1930 cuando vio
realizarse uno de sus grandes anhelos: acercarse a los eminentes
sabios europeos, para aumentar sus conocimientos
científicos y a su vez trasmitir los que poseía. El
gobierno de
nuestro país le facilita una estada de dos años en
los grandes centros científicos de Europa. Trabaja
en Berlín en el Instituto Biológico "Kaiser
Guillermo" y en Francia, en el Instituto "Pasteur" de
París, llamando la atención de insignes biólogos, no
sólo por la calidad de las
investigaciones que emprendía, sino por sus valiosos
trabajos y publicaciones técnicas. Y aquí debemos
destacar con todo énfasis, sus descubrimientos para el
diagnóstico precoz de la lepra. Esta
terrible enfermedad, motivo de tantas investigaciones
infructuosas, despertó el interés
científico del Dr. Rubino y entonces le vemos sumarse al
número de investigadores que, tocados por un profundo
humanismo,
ansiaban combatirla y vencerla. Así llegó a obtener
un suero que permitía el rápido y eficaz
diagnóstico de la lepra. Fue de tanta importancia el nuevo
descubrimiento, reconocido por grandes técnicos europeos,
que los ilustres bacteriólogos Calmette-Guerin, lo
mencionaron en un libro como trabajo ejemplar por su eficacia. De
nuevo en el país, desempeña el cargo de Director
del Laboratorio de Biología Animal, elevando dicho
organismo a una categoría de brillantísimo
prestigio. Hace pocos años, sus numerosos trabajos
científicos fueron reunidos para la posteridad en una
cuidadosa compilación, publicada por el Ministerio de
Ganadería
y Agricultura.
Finalmente, cabe destacar algo que merece
la imitación de los niños
uruguayos: su firme actitud en
procura del bien colectivo; su voluntad indeclinable y ejemplar,
y su inagotable tolerancia que
supieron conquistar el cariño y la admiración de
todos los que se acercaron a él como amigos o abanderados
de lamisma causa.
Y si de imperecedero relieve fue su
personalidad
en el mundo científico, también es necesario
enaltecer, en el mismo plano, su luminoso ideario de hombre tocado
de bondad y sencillez, plenitud esencial de todos los vinculados
a la gloria. De ahí que cerremos esta semblanza, con unas
emotivas palabras que pronunciara otro sabio uruguayo, Clemente
Estable, en su oración de despedida: "Generoso en todo,
siempre los otros eran primero; él después, o
nunca… Dueño y señor de su modestia, nada ni
nadie pudo alterarla". Murió Rubino en el año
1945.
Thomas Henry Huxley Biólogo
británico Nació el 4 de mayo de 1825 en Ealing,
Londres. Cursó estudios en el Hospital Charing Cross de
Londres, en cuya universidad se graduó en medicina en
1845. Se incorporó en 1846 a la Marina Real como cirujano
auxiliar del HMS Rattlesnake. Sus estudios sobre la familia de
las medusas llevó al reconocimiento de la clase
zoológica de los Hidrozoos. En Inglaterra
formó parte de la Royal Society. Fue catedrático de
historia natural y paleontología de la Escuela Real de
Minas de Londres en 1854. Formó parte de la
expedición del físico John Tyndall a los Alpes en
la que estudiaron la glaciación. Cuando Charles Darwin
publicó El origen de las especies en 1859, Huxley se
convirtió en el principal apologista de su teoría
en Inglaterra. Recabó pruebas que
apoyaran las teorías de Darwin, hasta el punto de ser
apodado "el Bulldog de Darwin". Entre sus principales obras se
encuentran Evidencias de
la situación del hombre en la naturaleza
(1863) y Monografía
del cangrejo de río. Falleció en Eastbourne,
Sussex, el 29 de junio de 1895.
Humberto Maturana
Romesín
Nace en Chile en 1928, biólogo Ph. D. Harvard
(1958). Estudia medicina (U. De Chile) y luego biología en
Inglaterra y EEUU. Reconoce como sus maestros Gustavo Hoecker en
Chile y a J. Z. Young en Inglaterra e indiscutiblemente se
encuentra dentro del área de pensadores que ha
influenciado G. Bateson.
Sus trabajos iniciales los desarrolla
estrechamente ligado con Francisco Varela G.con quien
publica en conjunto el notable ensayo De
máquinas y Seres Vivos (Editorial
Universitaria 1972, Santiago de Chile) y luego su obra más
maciza El Árbol del Conocimiento (Editorial Universitaria,
Santiago de Chile 1984).
En el primero del trabajos mencionados desarrolla
en conjunto con Varela, la hipótesis de que los sistemas vivos
pueden ser caracterizados como máquinas
autopoiéticas es decir que están en: "…continua
producción de sí mismos, a través de la
continua producción y recambio de sus componentes, lo que
caracteriza a los seres vivos y lo que se pierde en el
fenómeno de la
muerte."[i], " Su enfoque es de este modo mecanicista, en el
sentido de que renuncia a toda explicación
teleológica de los sistemas vivos y de que cada uno de
ellos es explicado en términos de relaciones y no de las
propiedades de sus componentes."[1] [ii] .
En la segunda obra señalada arremete
-nuevamente junto a Varela, y Rolf Behncke C- con el
desafío de revelar las bases del proceso de aprendizaje
humano desde una perspectiva biológica, la respuesta que
plantea en este trabajo proviene de la cibernética de segundo orden, es decir: la
ciencia que aborda el estudio de las relaciones de la
organización que deben tener los componentes de un
sistema para existir en forma autónoma, en la cual, el
observador es parte constituyente. Y fue consecuencia de "…
plantearse el problema del conocimiento, no desde la perspectiva
del sistema nervioso como se lo habían pedido, sino desde
la perspectiva del operar biológico completo del ser
vivo."[2] [iii] , "Decidí considerar que
procesos deberían tener lugar en el organismo durante la
cognición, considerando así la cognición
como un fenómeno biológico." [iv] . En el mismo
trabajo desarrolla las implicaciones que este enfoque tiene en
los fenómenos sociales y en la conciencia y
el
lenguaje.
Biografía de FRANCISCO J. VARELA
Nacido en 1946, Francisco Varela estudió
en el Verbo Divino de Santiago.
Realizó sus estudios de pregrado en la
Facultad de Ciencias de la Universidad de Chile donde se
licenció como biólogo en 1967. Luego obtuvo un
doctorado en Biología en la Universidad de Harvard.Como
parte de su formación inicial estudió la
licenciatura en filosofía en el Instituto Pedagógico
de la Universidad de Chile, junto las lecturas guiadas por
Roberto Torreti en el Centro de Estudios Humanísticos de
la Escuela de Ingeniería en 1966.
Por esta vía Varela conoció la
fenomenología europea y comenzó
la lectura de
Husserl, Heidegger y
Merleau Ponty. Gracias a la colaboración de Felix
Schwartzman, Francisco descubrió la naturaleza social de
la ciencia. A través de los autores Alexandre
Koyré, Georges Canguilhem y de Gastón Bachelard
-que convergerían en los trabajos de Thomas S Kuh en "La
estructura de
las revoluciones científicas". Esta formación lo
dejaría en una inmejorable posición para
convertirse en uno de los maestros de la epistemología experimental del siglo
XX.
En 1973 el científico emigró a
Estados Unidos
y trabajó en la Universidad de Nueva York. Volvió
temporalmente a Chile entre 1980 y 1985, para luego marcharse a
Europa, al Instituto Max Planck, en Alemania.
Finalmente se radicó en Francia.
Francisco Varela investigó durante la
mayor parte de su vida las bases biológicas del
conocimiento y el lenguaje, las
características de la vida, realizó aportes a la
comprensión de la epilepsia y del sistema
inmunológico y exploró las fronteras de la neurociencia y
la psicología
cognitiva.
Su adhesión a la filosofía budista
lo llevó a estudiar la relación entre el
pensamiento oriental y los métodos
científicos de Occidente. Por esta misma motivación se dedicó a investigar
los fundamentos biológicos de la conciencia.
Publicó numerosos artículos sobre
la fisiología sensorial, el modelado biológico y la
inmunología, y es autor de varios libros.
Entre ellos destacamos El árbol del conocimiento, en
coautoría con Humberto Maturana (Ed. Universitaria), The
Embodied Mind: Cognitive Science and Human Experience) La Mente
Encarnada: Ciencia Cognitiva y Experiencia Humana) (MIT Press,
1991), en colaboración con E. Thompson y E. Rosch, Etica y
Acción, (Dolmen Ediciones, 1995). En el último
periodo de su vida se desempeño como profesor de ciencias
cognitivas en la Fondation de France, y de epistemología
en la Escuela Politécnica de París.
Autor:
Fhernando Pérez
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