La democratización de la ciencia y la tecnología en el marco del proceso de universalización
Introducción
La democratización de la ciencia y
la tecnología tiene sus antecedentes en
distintas épocas y países; nace en la segunda mitad
del siglo XX bajo el influjo social de protestas contra
consecuencias negativas de la tecnología y la
reacción académica frente a la visión
positiva de la ciencia
imperante en los medios
intelectuales.
Partiremos de conceptuar la democracia
como el predominio del pueblo en el gobierno
político de un estado, en
nuestro caso se distinguen justamente los fines y medios de la
democratización.
Se ha comprobado que la naturaleza
social de la ciencia y la tecnología, así como
el
conocimiento incorporado a las experiencias vividas, unido a
los factores sociales, favorecen o entorpecen el desempeño profesional.
En la medida de que Cuba se
desmarca del neoliberalismo
e insiste en el protagonismo de la cultura, el
conocimiento,
la ciencia y la tecnología ésta alcanzará
mayores valores
sociales, lo que traerá consigo crecientes impactos
positivos generados de los intereses de nuestra sociedad
socialista.
La existencia de una política
social del conocimiento es la que hace posible un amplio
proceso social
del conocimiento de una amplia función
social, la que es aprobada por el pueblo que participa en las
actividades de producción, transferencia,
adaptación, aplicación de conocimientos, y este
conoce de los beneficios que le aporta para sí las nuevas
experiencias, permitiéndole participar activamente y
contribuir concientemente a metas sociales deseables como
expresión de la democracia. El enfoque de la política y la
aprobación social del conocimiento, contribuye a hacernos
comprender mejor la coherencia implícita en las
transformaciones educativas, culturales, científicas,
tecnológicas que en nuestro país se vienen
desplegando con valores más humanistas, de cuidado del
medio
ambiente, de más amplio acceso a diferentes grupos
sociales, en suma la ampliación de los seres humanos
que participan y se benefician del desarrollo
científico y tecnológico, con una
contribución al desarrollo social
equitativo, sustentable, que incorpore la justicia
social.
En las actuales circunstancias la América
Latina se encuentra en un proceso desafiante de
democratización ante las gestiones y la
globalización con nuevas preocupaciones y proyecciones
hacia una real democratización de las ciencias;
prestando especial expresión al proceso de
generalización del conocimiento, de socialización de las tecnologías y
una seria distribución democrática del saber y
de los beneficios colectivo.
El conocimiento necesario para enfrentar las barreras técnicas
va quedando cada vez en menos manos; y en parte es comercializado
a nivel mundial.
En nuestro caso, Cuba como país, realiza un trabajo de
masividad de la enseñanza a través de la
utilización de nuevas formas de universalización,
donde se combinen los conocimientos científicos con los
prácticos en busca de nuevas soluciones a
los problemas
acuciantes que tenemos en nuestra sociedad, dado por las
carencias económicas que presentamos y que no podemos
alcanzar una tecnología avanzada con la utilización
del conocimiento obteniendo nuevos recursos o
técnicas y procedimientos
para avanzar en el mundo de hoy.
El momento histórico que vivimos demanda una
práctica social de la ciencia y la tecnología. El
desarrollo científico y tecnológico debe estar
regido por la intención social que origina y desarrollan
las características del medio ambiente y los
problemas actuales de diferencias económicas y sociales de
la supervivencia del hombre.
El desarrollo tecnológico es utilizado como instrumento
para implementar la voluntad de cambios, estructuras y
procesos
sociales, económicos y naturales, es por ello que la
percepción de la ciencia y la
tecnología debe ser educada de forma tal que nuestros
estudiantes universitarios, que serán los futuros
profesionales, científicos, dirigentes, desarrollen
productos
útiles a la sociedad en general e interactúen con
ella y valoren sus resultados con una percepción de la
creación.
En este trabajo pretendemos valorar cómo se pone en
práctica la democratización de la ciencia y la
tecnología en nuestro país a través del
proceso de universalización de la educación
superior, en particular los resultados alcanzados en la Sede
Universitaria Hermanos Saiz en el municipio de Consolación
del Sur.
Desarrollo
El gobierno revolucionario cubano constituye la primera
experiencia en América
Latina en trazar una política para desarrollar la ciencia
y la tecnología sobre la base de la propiedad
social, siendo uno de los pocos países que ha logrado
trazar una estrategia para
el desarrollo de la ciencia y la tecnología en
función de lograr un desarrollo social con equidad y
sostenibilidad. Ejemplo de esta política lo constituyen la
campaña de Alfabetización, la reforma
universitaria, la formación de más de 500 doctores
por año, la municipalización de la Educación Superior
y dentro de ella la creación del las sedes universitarias
municipales, el surgimiento de las EFTS, la formación
emergente de profesionales en correspondencia con las necesidades
sociales de nuestro territorio y la colaboración en
misiones como: Barrio Adentro, Milagro, Robinson y otras.
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