Metodología para desarrollar la comunicación oral y la comprensión lectora en la disciplina de idioma Inglés (página 2)
· Cantidad suficiente de información, es decir, que la cantidad
resulte adecuada a las intenciones y necesidades de la
situación comunicativa concreta. · Calidad de la
información (ausencia de falsedad, error o
manipulación con que es transmitida). · Pertinencia
de la información (en correlación con las dos
máximas anteriores). · Manera de transmitir la
información (claridad, brevedad y orden
expositivos).
La lengua escrita
en las relaciones empresariales se pone de manifiesto tanto en
los aspectos de comprensión
lectora como en los de producción escrita, es un medio de comunicación más que toma gran
relevancia dentro del desarrollo de
la actividad profesional.
La lectura es una
actividad personalizada que constantemente pone en juego, para
ampliarlos, los conocimientos y adquisiciones y / o aprendizajes
sucesivos que acumula el alumno (Mendoza, 1995). Leer documentos,
artículos o libros
relacionados con la futura actividad profesional de nuestros
alumnos será un buen complemento para el desarrollo de las
diferentes estrategias de
comunicación.
Para Fish (en Warming, 1987:24), el lector
informado –competente- es alguien que también es un
hablante competente del lenguaje en
que está construido el texto, que
posee los amplios conocimientos semánticos que un lector
adulto aporta a su tarea de comprensión –dominio como
emisor y receptor de las unidades léxicas, posibilidades
combinatorias, expresiones idiomáticas, etc.-.
El alumno sabe mejor que nadie cuando lee
un texto qué ha comprendido; muchas veces los profesores
pasamos por alto explicaciones dando por sentado que nuestros
alumnos comprenden (no siendo así, por lo general); por lo
tanto, consideramos fundamental realizar ejercicios de síntesis e
incidir en el vocabulario y en el uso del diccionario no
sólo en el aula sino también durante el ejercicio
de su profesión.
Félix Varela y Morales (1788 – 1853);
José de la
Luz y Caballero (1800 – 1862); Enrique José
Varona y Pera (1849 – 1933); Manuel Valdés
Rodríguez (1849 – 1914) y José Martí y
Pérez (1853 – 1895) se refirieron a la necesidad de
que la
educación contribuyera a formar conocimientos
útiles, desarrollar el pensamiento
creador, enseñar a hacer actuar, para lograr la
transformación del medio natural y social que rodea al
hombre y
formar así, los valores
morales positivos de todo hombre virtuoso.
Las concepciones más modernas de la enseñanza centran su atención en la interacción entre profesor y
alumnos y en el grupo de
estudiantes.
Se ha esclarecido que los procesos de
enseñanza y aprendizaje no se
reducen a situaciones didácticas docente-discente, sino
que es necesario tener en cuenta, las relaciones afectivas entre
estos, sus necesidades e intereses.
En las concepciones pedagógicas actuales es
frecuente la afirmación que:
Educación y comunicación son proceso
inseparables, ya que cualquier hecho educativo requiere
mediaciones comunicativas y no hay situación comunicativa
que no tenga una influencia educativa, en algún sentido.
Pero el análisis de los vínculos entre
educación
y comunicación tiene múltiples dimensiones, que se
han ido esclareciendo con el desarrollo de las concepciones
teóricas y metodológicas de ambos
procesos.
El especialista que se desempeña en cualquiera de
las ramas de la ciencia o
la técnica debe ser capaz de leer la literatura de su
especialidad en una o más lenguas
extrajeras , precisar rápidamente si su contenido es o no
de interés, encontrar la información
que necesite y entender las explicaciones acerca de los equipos
con que trabaja.
La enseñanza de la lectura es,
por lo tanto, un objetivo de
fundamental importancia. Sin el dominio de la lectura el manejo
de la lengua extranjera se pierde en gran medida si se vive fuera
del medio lingüístico en que se habla. Pero
afortunadamente la lectura es el único aspecto de la
actividad verbal que se puede continuar de modo independiente
durante toda la vida, por lo que una vez que se adquieren los
mecanismos en el aula se pueden aplicar con constancia como
fuente permanente de práctica lingüística y de ampliación
cultural.
Sin embargo los programas y
metodologías actuales de la disciplina de
idioma inglés
no logran la
motivación y mejor comprensión por los
estudiantes para la adquisición de habilidades orales y
lectoras, a esto se une el bajo nivel de preparación en
idioma inglés que traen los estudiantes de
enseñanzas anteriores. Por lo que se hace necesario crear
una metodología que integre, de manera
más efectiva y armónica, los conocimientos de la
especialidad con los del idioma
Bibliografía
1. ÁLVAREZ DE ZAYAS, CARLOS M. Hacia una
escuela de excelencia. Editorial Pueblo y Educación.
Ciudad de La Habana. 1994.2. ANTICH DE LEÃ-N, ROSA.
Metodología de la enseñanza de lenguas
extranjeras. Editorial Pueblo y Educación,
1986.3. COLECTIVO DE AUTORES. El carácter
científico de la pedagogía en Cuba. Editorial
Pueblo y Educación, La Habana, 1996.4. _______________________. Folletos I Y II de
Universidad para todos. Editorial Pueblo y
Educación.20015. _______________________: Material
básico sobre problemas actuales de la
educación. Editorial Pueblo y Educación.
2005.6. GARCÃA BATISTA, GILBERTO. Compendio
de pedagogía. Editorial Pueblo y Educación.
Ciudad de la Habana 2003.
WALDIMIRO, S. TRUJILLO La comunicación oral. Revista
Educación No. 101. Págs. 26-29. . (2000)
Reseña del autor
principal
Annia Ortiz Estrada, Licenciada en
Inglés en el año 2003, con 6 años de
experiencia en la educación
superior, ha trabajado como profesora principal del centro
universitario "Jesús Montane Oropesa" de la Isla de la
Juventud,
Cuba.
Es profesora asistente y trabaja
actualmente impartiendo las asignaturas de ingles 1,2, 3 y 4 de
las carreras de Ingeniería Informática, Licenciatura en Contabilidad y
Finanzas,
Derecho y Estudios Socioculturales.
Autor(a):
Annia Ortiz Estrada
Ciudad: Nueva Gerona, Isla de la juventud.
País: Cuba
Página anterior | Volver al principio del trabajo | Página siguiente |