- La Gente de Buena Vista de El Tocuyo,
y San Rafael - San Rafael
de Buena Vista a través de la historia - San
Rafael y los pobladores de Buena Vista hoy
Religiosidad en el caserío Buena
Vista (Municipio Morán, Lara).
Investigación para la
realización del documental "El culto a San Rafael en Buena
Vista"
La Gente de Buena
Vista de El Tocuyo, y San Rafael
Con el proceso de
colonización que se llevó a cabo en el territorio
americano a partir del siglo XVI, comienza la repartición
y enajenación de aquellas tierras aptas para
el cultivo de los productos
fundamentalmente agrícolas que constituían un
potencial económico significativo para los colonizadores
europeos. De esta manera se establecen en las riberas del
río Tocuyo (Municipio Morán del Estado
Lara)"… numerosas haciendas dedicadas principalmente al
monocultivo de la caña de azúcar… "(Tamayo, 1968:5).
Estas unidades de producción requirieron entonces de mano de
obra que fue suministrada tanto por la figura de la servidumbre
de los aborígenes americanos, como por los esclavos
traídos de tierras africanas. Estos dos grupos humanos se
establecieron en aquellas tierras "cedidas" por los nuevos amos
del valle del río Tocuyo que no reunían condiciones
adecuadas para una explotación agropecuaria colonial.
Es así como se conformaron en
esta zona varios caseríos de esclavos africanos y
aborígenes, entre los que interesa mencionar el
caserío Buena Vista ubicado en la ribera occidental del
Río Tocuyo.
Este caserío se ubicó
en los campos yermos elevados aledaños a la hacienda Buena
Vista, y tomó el nombre de esta posesión propiedad de
la familia
Garmendia, uno de los nuevos amos del valle.
Es el caso que esta familia
Garmendia, al igual que lo hacían casi todos los amos del
valle, adopta la figura de San Rafael como el santo patrono de la
hacienda y le rinden culto mediante la procesión de la
imagen en
hombros de los peones, desde la capilla de dicha hacienda hasta
la iglesia
Concepción de la ciudad de El Tocuyo.
Según se desprende de la
tradición oral de una descendiente de esclavos de la
hacienda Buena Vista, la señora María Araujo y de
su esposo Nicolás Fonseca, antiguo peón de la
hacienda, los dueños del santo persuadían a los
peones a llevarlo en procesión y oír la misa en El
Tocuyo mediante el pago del día de trabajo y
otros beneficios.
Dialécticamente las relaciones
sociales de los grupos involucrados van cambiando en tanto la
hacienda comienza a transformarse desde el mismo momento en que
se construye la represa Dos Cerritos, y es vendida al Gobierno Nacional
para inundarla. Acontece entonces que las comunidades que
habitaban allí se desmembran y sus pobladores tienen que
migrar. La gente de El Cardonal se va a Guajirita y a El Tocuyo
como es el caso de los Fonseca-Araujo, así como el resto
de los habitantes de Los Patios migran a otros pueblos o regiones
(María Araujo, comunicación personal).
La gente que vive en terrenos
más elevados no innundables por la represa, permanece
allí, y es el caso de los pobladores del caserío
que ocupa esta investigación. Estas personas que se quedan
continúan recibiendo el pago del amo de la hacienda para
llevar el santo y presenciar la misa en El Tocuyo.
Aun cuando en el año 1990 y
luego en el 95 esta hacienda cambió de dueños, la
imagen de San Rafael permanece todavía en la capilla desde
donde todavía hoy continúa realizándose la
procesión por parte de los obreros y habitantes del
caserío, quienes han convertido al santo en su patrono
desde hace pocos años.
Mientras tanto, antiguos peones de la
hacienda Buena Vista como es el caso de Nicolás Fonseca,
quien actualmente vive en El Tocuyo junto a su compañera
María Araujo, ha manifestado que"… desde que
dejé de trabajá pá los Garmendia nunca he
vuelto a oí misa"… por considerarlo una
obligación de la que ya se liberó: "…
¿pá qué voy a í si ya no tengo
obligación?…" (Entrevista a
Nicolás Fonseca, 1994)
Para el momento de iniciar esta
investigación surgieron ciertas interrogantes que guiaron
el estudio hacia la realidad histórica de los pobladores
del caserío Buena Vista. En este sentido, nos preguntamos
¿por qué los habitantes de Buena Vista no han
adoptado la misma actitud de
Nicolás Fonseca si ya la familia Garmendia no son los
dueños de la hacienda?. Y entonces ¿qué o
quién les ha impulsado a continuar llevando el santo en
procesión y asistir a la misa? ¿es realmente esta
práctica colectiva un acto de fe y de gozo hacia un santo
benefactor? ¿cuáles son las implicaciones
históricas culturales y económicas sociales que le
dan sentido a este culto?
Se planteó entonces realizar
una investigación participativa que involucrara a
María Araujo como sujeto investigadora empleando como
paradigma
teórico-metodológico el materialismo
histórico, es decir como teoría
propiamente dicha para conocer la realidad, y a la vez como
tejido que sustentaría todo ese andamiaje que constituye
lo metodológico. Se utilizaron diferentes instrumentos
para la recolección de los datos, vale decir
técnicas de observación participante, entrevistas,
revisión y recopilación documental de
tradición legal de la hacienda Buena Vista, construcción de genitogramas, y
documentales fotográficos y audiovisuales.
Página siguiente |