La desincorporación de la empresa pública en México: el caso teléfonos de México, S.A. de C.V.
- Introducción
- La privatización de
empresas públicas. Un fenómeno
mundial - Segunda
etapa (1945 – 1954) - Tercera
etapa (1955 – 1969) - Cuarta
etapa (1970-1982) - Programa
de desincorporación de la empresa pública en
México - El caso
de teléfonos de México, S.A. de C.V. - Conclusiones
- Bibliografía
"En décadas pasadas, los gobiernos activistas
decidieron hacer suyo de inmediato cualquier tipo de problema y
necesidad y controles hasta que se desplomaron fiscalmente
exhaustos, desligitimados, sepultados bajo un cúmulo de
improvisaciones e ineficiencias"
Luis F. Aguilar Villanueva
INTRODUCCIÓN
La gran depresión
en la década de los treinta, evidenció los límites de
la teoría
clásica al generar desempleo masivo
en los Estados Unidos y
Gran Bretaña.
El
desempleo alcanzó niveles simples sin precedentes en ambos
países. La desocupación evidentemente no era
voluntaria y no tenía los menores indicios de ser
ocasional y transitoria y es así como la gran
depresión como se le llamo a esta primera gran crisis del
capitalismo
para darle paso a la revolución
Keynesiana en la que a través del gasto
público, como actor económico se resuelven los
problemas
fundamentales de la economía.
Keynes
rechazo´ el mundo clásico del equilibrio
natural y el sistema de
libre
Mercado como el mecanismo para el ajuste automático y
equitativo "La economía capitalista genera dos problemas
fundamentales: desocupación y concentración de la
riqueza y el ingreso".
En la
década de los treinta fue testigo de la primera gran
crisis del capitalismo industrial y de la economía
internacional en el siglo XX.
Estados
Unidos y Gran Bretaña, centros del capitalismo mundial,
enfrentaron y proyectaron al resto del mundo el desempleo masivo
y la depresión. En el ámbito internacional el
comercio se
contrajo y el "patrón oro", base del
sistema
financiero mundial, mostró sus limitaciones y
debilidades.
En la
década de los setenta surge y se manifiesta cruelmente la
"segunda gran crisis" del capitalismo, manifestándose en
los países de hecho una doble crisis: desequilibrio
macroeconómico y de productividad.
En los
países fundamentalmente subdesarrollados en la
década de los setenta, se manifiestan los siguientes
problemas económicos: inflación, bajo crecimiento
económico, desempleo y desequilibrio en la cuenta
corriente de la balanza de pagos
y en el de la productividad se manifiesta como un fenómeno
que tiene que ver con el patrón de acumulación y
crecimiento en el largo plazo.
A
partir de la Segunda Guerra
Mundial los países asumen fundamentalmente la
acumulación y el crecimiento económico a
través de la expansión de la intervención en
la economía por parte del Estado. En la
década que inicio en el año de 1980 en Inglaterra y en
Estados Unidos se da el fenómeno conocido como privatización y algunos actores mas
radicales la denominan la contra-revolución
monetarista.[1] En estos últimos
años el panorama socioeconómico de todo el mundo a
estado, nos guste o´ no, presidido por esta
revolución silenciosa que es la corriente privatizadora
sí así como después de la Segunda Guerra
Mundial y hasta la década de los setenta y mediados de
los ochenta Europa y América
cayo en manos de las nacionalizaciones. Pero más que
un planteamiento que se da en la economía surge
también en la discusión ideológica y
políticas de las ideas no solamente se
discute si moralmente la intervención estatal encaminada a
temperar o corregir las desigualdades sociales producidas por el
funcionamiento de los mercados es
legítima y operante.
Hoy,
cobra inusitada importancia el logro de la eficiencia
económica y la liberalización de los actores
económicos, se discute si el Estado
benefactor es viable cuando la escasez de los
recurso fiscales y por consiguiente sus déficits es
corregibles, se analiza la división entre el dominio de la
política y
el dominio de la economía entre Estado y mercado, entre
derecho privado y derecho
público, entre eficiencia e igualdad.
David
Ibarra[2] señala lo siguiente: El
Estado en tanta institución social es más antiguo
que el mercado y "el funcionamiento irrestricto del mercado, si
bien facilita la formación de capital y la
eficiencia productiva, premia en exclusiva a los ganadores de la
concurrencia. Y, al hacerlo, propicia disparidades
sociales, insostenibles a la larga, así como la
multiplicación ulterior de formas monopólicas u
oligopólicas de producción que cancelan muchas de las
virtudes del propio modelo
clásico de competencia"
LA PRIVATIZACIÓN DE
EMPRESAS
PÚBLICAS. UN FENÓMENO MUNDIAL
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