- Transición de la
guerra a la paz en Guatemala - El
proceso de negociación de la paz - El
contenido de los acuerdos de paz en
Guatemala - Anexos
INTRODUCCIÓN
l presente trabajo ha
sido estructurado y realizado de conformidad con los objetivos y
términos del curso de Socioeconomía General. El
propósito principal de éste documento, es hacer
referencia al presente y pasado político y social de
Guatemala, al
proceso de
desarrollo,
resumen y conclusiones de los acuerdos de paz, suscritos por el
gobierno
guatemalteco y la Unidad Revolucionaria Nacional Guatemalteca
URNG.
Es preocupante que, a nivel internacional, se consuman
versiones equivocadas sobre el proceso de paz en Guatemala,
proceso que podría tener un efecto ejemplar para
Centroamérica. La preocupación aumenta cuando se
lee el libro
"Esquipulas, diez años después, ¿Hacia
dónde va Centroamérica?", en el que el ex
presidente Vinicio Cerezo Arévalo, dice: "…en Guatemala
el diálogo
por la paz se circunscribió al gobierno y a la guerrilla y
dejó fuera al sector empresarial. Este es un sector al
cual no se le puede marginar por el alto nivel de poder
político y económico que tiene en el país".
Y agrega: "Además, la negociación de paz excluyó a los
partidos
políticos…"
Si un ex presidente está diciendo esto, creemos
que es necesario reflexionar globalmente sobre lo que pasó
en Guatemala y eso es lo que trataremos de hacer aquí.
Nosotros le llamamos la Transición de ¡a Guerra a la
Paz porque, fundamentalmente, hay que resaltar dos grandes
ideas:
(1) Si a una persona le
preguntaran quien es, él tendría que decir quien ha
sido, porque el presente de ésta persona es tan
rápido que se convierte en pasado inmediatamente; en una
sociedad es
igual: para tratar de entender el presente de una sociedad,
tenemos que entender su pasado. Y como no tenemos el espacio ni
el tiempo para
todo el pasado de Guatemala, nos referiremos solo a los
últimos cincuenta años de su historia política
contemporánea, divididos en las siguientes
etapas:
- la polarización política de
1960-62, - La lucha armada del 62-85;
- el diálogo del 86-90;
- la negociación del 91-96; y
- los acuerdos que se generaron durante el mismo
período
(2) La transición de la guerra a la paz no
concluye con los acuerdos; deberían de haberse generado
etapas ulteriores en esta transición que aún no se
hacen presentes en la vida de los guatemaltecos, es
decir:
- los consensos sociales;
- la conciliación nacional; y,
- el desarrollo social.
- La apertura democrática
1944-1954: Dialécticamente, la guerra en
Guatemala nace cuando se pierde la paz. Pensamos que el
solo hecho de haber perdido todo lo que se había
ganado de 1944 a 1954, generó una tremenda
confrontación interna, que con el tiempo, se
agudizó, evolucionando hacia una polarización
que devino en guerra.Habría que preguntarnos primero:
¿qué significó el período 44-54?.
En nuestra opinión, el problema de entender este
período está relacionado con algunas de las
ideas básicas que cientistas sociales guatemaltecos
han propuesto. Por ejemplo:Severo Martínez Peláez afirma que el
siglo XX en Guatemala principió en 1944; es decir, que
durante los primeros 44 años de este siglo, Guatemala
vivió en el siglo XIX porque las relaciones feudales y
serviles de producción que estuvieron vigentes
hasta 1944.Una segunda idea destaca que durante los primeros 44
años de vida política de Guatemala en este
siglo, se vivieron 36 años de tiranías: la
primera, de 22 años, a cargo de Manuel Estrada Cabrera
(1898-1920), y la segunda, de 12 años, manejada por el
general Jorge Ubico Castañeda (1931-1944)Ese es el antecedente de uno de los momentos
históricos más importantes para Guatemala: el
único a nivel estructural que definió una
amplia alianza entre clases y estratos. Es la primera vez que
una sociedad con un tremendo peso colonial llega al momento
de hastió de una dictadura,
genera una actitud
anti-autoritaria, rompe el ordenamiento existente, y se
enfrenta a lo inédito, porque en esos momentos
carecía de proyecto. Fue
un movimiento
espontáneo que expresó la voluntad de oficiales
de la juventud
militar que decidieron orientar el país en otra
dirección.Hay que hacerle justicia a
la historia. El período de apertura democrática
vivido durante los años del 44 al 54 no fue producto
únicamente del momento revolucionario del mes de
octubre: existen otros antecedentes que hay que tomar en
cuenta. Don Jorge Ubico al leer la solicitud de su renuncia
contenida en el "Manifiesto de los 311" se percató de
que los primeros 100 signatarios eran sus amigos, los
individuos más notables y más importantes de
Guatemala. Por ello, en un acto de tremenda sabiduría,
evitó ordenar al ejército la represión
de los que adveraban su gobierno y procedió a
renunciar al cargo de presidente de la
República.Lo que los jóvenes militares que encabezaron
la rebelión impidieron fue que los herederos de la
tiranía se entronizaran en el poder: el 20 de octubre
de 1944 se realiza una rebelión civil-militar. Es la
primera vez que fuerzas militares, de acuerdo con fuerzas
civiles, asumen el control
político del país.Luis Cardoza y Aragón, uno de los
máximos valores
literarios de Guatemala, ha dicho que estos fueron los "diez
años de primavera en el país de la eterna
tiranía". Fue un momento de apertura, una especie de
respiro para una sociedad que venía no sólo de
una larga noche colonial, sino de dos grandes
tiranías.El mérito de este periodo es que genera dos
etapas fundamentales. La primera va orientada a definir el
proyecto ideológico, retomando parte de los
valores que se plantearon durante el Movimiento Unionista
de 1920, mediante el cual fue posible derrocar a la dictadura
de los 22 años, los que desafortunadamente fueron
reprimidos cuando se dio el golpe de
estado de diciembre de 1921.Fue la generación de 1920 la que en 1944
planteó la propuesta para la conducción del
proyecto revolucionario en su etapa de construcción ideológica,
proponiendo la candidatura presidencial del Dr. Juan
José Arévalo Bermejo, un insigne pedagogo
guatemalteco que por razones políticas estaba en el exilio
trabajando en Argentina.A su regreso, el Dr. Arévalo actuó
como el gran aglutinador de una enorme euforia y de una
dinámica que estimuló la
construcción del proyecto ideológico y el
triunfo electoral en 1945, a partir del cual se empezó
a imaginar hacia dónde debería ir el
país; fue el periodo que generó la
institucionalidad básica para que Guatemala cambiara y
para que evolucionara hacia otro tipo de sociedad.Lógicamente, al segundo periodo (1951-1957),
le correspondía ser el de la profundización
revolucionaria de la propuesta ideológica: El periodo
de las grandes decisiones políticas que estuvo a cargo
del coronel Jacobo Arbenz Guzmán.Obviamente, durante el periodo ideológico se
cometieron errores: uno de los principales fue el no haber
entendido que una relación civil-militar como base de
una alianza estratégica no garantiza, en ningún
momento, que los militares dejarán el poder
voluntariamente. Cuando la juventud militar integró la
Junta Revolucionaria de Gobierno en 1944, constituida por el
mayor Francisco Javier Arana, el capitán Jacobo Arbenz
Guzmán y el civil Jorge Toriello empezaron a legislar
rápidamente en contra de todo lo legislado con
anterioridad; uno de los enormes problemas
de Guatemala es que siempre se ha legislado viendo hacia
atrás; es decir, se hace para corregir el pasado para
no pera imaginar el futuro.Tratando de evitar que nuevamente un general
asumiera todos los poderes y para que un presidente no
utilizara al ejército, generaron una institucionalidad
militar tan compleja que provocó serios problemas.
Establecieron el cargo administrativo de ministro de la
defensa, prácticamente subordinado al Jefe de las
Fuerzas Armadas. Fue creado el Consejo Superior de la Defensa
Nacional, presidido por el Jefe de las Fuerzas Armadas, en
donde estaban incluidos todos los oficiales que tenían
mandos de tropa y trece cargos que eran llenados por
elección entre todos los oficiales de alta en el
ejército, con lo cual se politizó a la
institución armada.Al momento de tornar posesión de un cargo en
el Consejo Superior de la Defensa Nacional, el oficial que
asumía por elección podía decidir y
emitir opinión libremente, sin importar cual era su
rango, y sin que ello le provocara problemas con sus
superiores, porque su pertenencia a este Consejo Superior lo
eximía de cualquier responsabilidad por sus decisiones u opiniones
emitidas, lo cual iba en abierta contradicción con la
jerarquía militar y el principio a unidad de
mando.La intención de debilitar el ejercicio del
poder en el presidente de la República, generó
la declaración del Dr. Arévalo, en el sentido
de que "en Guatemala hay dos presidentes: uno con
ametralladora, y el otro con la ley, pero con
el pueblo". Ese fue el contexto estructural condicionante
de la formulación del proyecto ideológico, ya
que se estaba consciente de estar construyendo las bases de
un cambio
estructural, pero con la amenaza permanente de que, en
cualquier momento, el Jefe de las Fuerzas Armadas lo
podría abortar.Para tratar de controlar la fuerte presencia
política del Jefe de las Fuerzas Armadas,
especialmente pera evitar que diera un golpe estado
llegado un momento de inestabilidad, los directivos de los
partidos políticos que apoyaron la candidatura del
presidente Arévalo, le ofrecieron su apoyo al coronel
Francisco Javier Arana, Jefe de las Fuerzas Armadas, a fin de
que fuera el candidato presidencial en 1951.A mediados de 1949 se iniciaron los acercamientos
para definir a los probables candidatos presidenciales que
competirían durante el evento electoral de
1950; el coronel Francisco Javier Arana se
percató de que los políticos no
cumplirían con su palabra, ya que algunos de ellos
principiaron a trabajar la candidatura del coronel Jacobo
Arbenz Guzmán, ministro de la Defensa, a quien apoyaba
el propio presidente Arévalo, lo cual inició un
distanciamiento entre la Jefatura de la Fuerzas Armadas y el
presidente de la República y sus partidos de apoyo,
incidiendo en la división interna del
ejército.Cierto armamento que el ejército de Guatemala
le había prestado a Don Pepe Figueres pera la guerra
civil de 1948 en Costa Rica,
había sido devuelto sin que el coronel Arana se
enterara y ubicado en la casa de descanso de la Presidencia,
en el lago de Amatitlán, ajeno al control de la
jefatura de las Fuerzas Armadas.Por presión del coronel Arana, el
Presidente ordena que le sea entregado dicho armamento, pero,
paralelamente, se inicia una conspiración de acuerdo
con el Congreso de la República para destituirlo,
mediante un procedimiento
que partiría de su captura, su desaforo por estar
atentando contra la seguridad
del Estado, y su exilio hacia Cuba,
contando con la aprobación de Prio Socarrás,
presidente de ese país.Hubo una confusión que aún no
está clara y, en lugar de capturar a Arana, lo matan.
Esto provoca un sublevamiento militar, sofocado por las
fuerzas leales al gobierno; llegado al momento electoral gana
la presidencia el coronel Arbenz Guzmán, quien tiene
que enfrentarse a la oposición de una buena parte del
ejército, que le increpa la fuerte presencia comunista
en las decisiones de su gobiernoCasi de inmediato se empieza a generar un ambiente
de inestabilidad interna, producto de decisiones
políticas como la asumida en marzo de 1952, cuando es
aprobada la Ley de la Reforma
Agraria, decreto 900. Mediante su aplicación se
procede a expropiar las tierras no utilizadas u ociosas del
monopolio
de la transnacional United Fruit Company, propietaria de la
mayor parte de la inversión extranjera en Guatemala. El
presidente de la UFCO, Allan Dulles, era hermano del director
de la Central de Inteligencia Americana (CIA), Joha Foster
Dulles.En junio de 1954, el ejército se resiste a
defender al gobierno de Jacobo Arbenz de una invasión
armada al territorio de Guatemala, organizada y patrocinada
por el gobierno norteamericano, generando un ambiente de
inestabilidad, apoyado por la declaración de
una guerra santa contra el comunismo que hizo el Arzobispo de la
ciudad capital,
con lo que se provocó la renuncia del presidente
Arbenz y el final de la apertura
democrática.
Página siguiente |