Exégesis de cierta hipótesis comprobable acerca del posible correlato neuronal de la conciencia subjetiva (página 3)
¿Es una sensación información consciente?
A partir de una sensación no subjetiva parece
posible integrar comportamientos aparentemente conscientes sin
que se integre la percepción subjetiva como parte del
proceso de la integración de dicho comportamiento (en
sentido figurado, sin que el yo consciente controle dicho
comportamiento), como ocurre, por ejemplo, durante el mecanismo
automático de ajuste del diámetro de la pupila en
función de la distancia al objeto contemplado, en el que
participa la corteza (se denomina mecanismo automático, en
vez de reflejo, precisamente porque se integra en corteza,
mientras que la integración de los reflejos es por
definición subcortical). El sujeto no participa en el
mecanismo de ajuste del diámetro pupilar a la distancia, es
algo que tiene lugar sin control subjetivo, y además, en
este ejemplo, sin opción, el yo no puede tomar el control
del diámetro pupilar en función de la distancia aunque
quiera (en otro tipo de comportamientos sí puede
"inmiscuirse" –en sentido figurado- el yo consciente; por
ejemplo, la excursiones ventilatorias del diafragma pueden tener
lugar bajo el control del yo o seguir teniendo lugar al margen de
éste, y a veces, aunque el yo "quiera" tampoco puede tomar
el control del diafragma en todo caso, como cuando se
estornuda).
¿Hay algún otro ejemplo de información
probablemente consciente pero no subjetiva?
Durante el fenómeno de la visión ciega (un
oxímoron, por cierto) un sujeto con cierto tipo de
lesión en la corteza occipital afirma no ver como sujeto, y
sin embargo esquiva obstáculos al caminar, es decir, sí
que ve, e interpreta lo que ve (como obstáculos), lo cual
parece indicar que hay percepción no subjetiva pero sí
consciente, hay conciencia acerca de la presencia de los
obstáculos ahí fuera, y se esquivan integrando
información al respecto, que es congruente, e integrada con
un cerebro que de hecho no es ni está inconsciente (dormido,
en coma, anestesiado, etc.), sino consciente
(despierto).
Por tanto, no hay que identificar conciencia con
subjetividad (ni percepción con subjetividad), pues parecen
dos propiedades mentales distintas, por mucho que una
intuición común y apriorística lleve a concluir
otra cosa, o por mucho que se unan para dar lugar a una sola cosa
en determinadas circunstancias: el yo consciente. ¿Es
importante el contraste para la formación de una
sensación? Para que haya sensación de rojo, además
de formarse dicha sensación, y que tenga intensidad
suficiente, hace falta también algo más para que
perdure y sea utilizable: el contraste.
Para dotar de contraste a la información sensorial
entre sus distintos componentes, por ejemplo, a la sensación
de rojo frente a otras sensaciones, un circuito que actúe
como vía sensorial para rojo "procurará" que dicha
información no se disperse por vías paralelas, mediante
la inhibición lateral, la inhibición sináptica de
los desvíos hacia carreteras paralelas secundarias desde la
vía principal para la información rojo, mientras rojo
esté circulando por ella (se desconoce si la sensación
rojo en particular utiliza este mecanismo fisiológico del
contraste, pero se utiliza como ejemplo por ser ilustrativo, para
poder seguir presentando esta visión de conjunto del sistema
nervioso).
¿Cómo se ejerce la inhibición lateral?
Como se ha visto, los circuitos neurales incrementan la
intensidad de la señal con axones retroactivos que por un
lado aumentan (facilitan) la intensidad de la señal por la
"carretera principal", y por otro reducen (inhiben) la intensidad
de la señal por el desvío a carreteras secundarias
(pero principales para otra modalidad sensorial). De este modo,
la señal "rojo" destacará no sólo por su
intensidad, sino también por su contraste.
¿Es la especificidad de los fotopigmentos del 100%?
La especificidad de los fotopigmentos para las diversas
frecuencias que absorben no es del 100%, así que, aunque
cada cono tiende a dar cuenta de lo que tiende a dar cuenta (la
máxima respuesta se produce con la frecuencia óptima,
la que coincide con el pico de absorción), y aunque cada
cono tiende a no dar cuenta de lo que no da cuenta (otra forma de
definir la especificidad), a veces un cono da cuenta de
aquéllo que no debería ser tenido en cuenta por su baja
probabilidad (la respuesta de una célula fotosensible se
basa en una tendencia dentro de un rango, así que depende de
una probabilidad).
¿Qué supone para el sistema visual que la
especificidad de los fotopigmentos no sea del 100%?
El que la especificidad del sistema no sea del 100%,
como en el ejemplo de los fotopigmentos, introduce más
errores en el sistema. Por ejemplo, un cono rojo podría
responder a fotones de otro color en un momento dado. Como la
mayoría de los conos rojos no tienden a hacer éso, por
mera probabilidad, el efecto conjunto de todos los conos rojos se
centrará en el rojo, de modo que el error quedará
oculto en la práctica ya en la escala microscópica de
los conos, y menos aun se detectará en la escala
macroscópica de la percepción de la rojez del color
rojo, donde se pierde resolución para lo pequeño (se
percibe rojez, no neuronas ni fotones). Dicho de otro modo: la
efectividad del cambio de escala, es decir, el que el
fenómeno microscópico (absorción,
transducción y procesamiento de fotones "rojos") resulte
también patente en la escala macroscópica a ciertos
efectos (percepción de la rojez, por ejemplo), a cierta
altura del proceso, logra algo así como eliminar el error en
el proceso, y por decirlo aun de otro modo: el error, la
minoría, queda oculto por la mayoría en este caso (no
en otros).
Dicho error despreciable en la práctica será
por tanto despreciable a escala macroscópica en algunos
casos, por ejemplo, del modo que se acaba de exponer, es decir, y
por decirlo así: "gracias" al cambio de escala, y, en
particular, en el caso del cerebro, "gracias" a la
estructuración en redes neurales, que son estructuras
morfofuncionales macroscópicas (detectables como tales a
escala macroscópica e indetectables como tales a escala
microscópica, a diferencia de las neuronas y los circuitos
por los que circula la información sensorial, que son
estructuras microscópicas de hecho).
Como se diría que ha sido la percepción
subjetiva lo que evolutivamente ha convenido en algunas especies
para comer y no ser comido, pues es lo que ha perdurado por
selección natural en esos casos, aunque se haya fundamentado
en un funcionamiento basado en parte en los errores. La
estructuración en redes neurales, a pesar del aumento de
complejidad que supone, podría conllevar sin embargo la
ventaja inesperada (pero "aprovechable" por la evolución
mediante selección natural, por su potencial utilidad en pro
de la adaptabilidad circunstancial si fuera viable) de convertir
los errores en sucesos convenientemente despreciables como tales
errores en la práctica a ciertos efectos (al efecto, por
ejemplo, de escapar a tiempo de un depredador al que "por error"
se toma por depredador, en vez de tomarlo por lo que es, un
montón de fotones que llegan a la retina, por ejemplo, y por
fortuna para el yo consciente, ya que éso es precisamente lo
congruente a escala macroscópica para que la escala
macroscópica tenga sentido; y el yo ha resultado tener
sentido sólo a escala macroscópica también, como
el resto de las cosas que han resultado tener sentido sólo a
escala macroscópica, de lo contrario, no estaríamos
aquí hablando de ello).
¿Cómo se podrían definir la sensibilidad
y la especificidad del sistema?
Seguramente sin especificidad en el proceso mental
difícilmente habría conciencia. Para ilustrar ésto
de un modo más intuitivo se podría proponer el
siguiente ejemplo: un sistema de transmisión de
información específico se podría representar por
una expresión como la siguiente: E=VN/(VN+FP), siendo E la
especificidad (VP=verdadero positivo; VN=verdadero negativo; FP=
falso positivo; FN=falso negativo). Esta expresión
indicaría la probabilidad, por ejemplo, la correspondiente
al cono rojo, de descartar los fotones que no sean rojos. La
sensibilidad del cono rojo sería en cambio la probabilidad
de detectar los fotones rojos, que se podría expresar como
S=VP/(VP+FN). De modo que la especificidad es la capacidad del
sistema para evitar falsos positivos, es decir, para evitar que
un cono rojo tome por rojo a un fotón verde. La sensibilidad
del sistema es su capacidad para evitar los falsos negativos, por
ejemplo, la capacidad del cono rojo para no dejar de detectar un
fotón rojo a su alcance.
¿Por qué se definen la sensibilidad y la
especificidad como probabilidades?
Podría parecer poco cabal el basar la sensibilidad
y especificidad del sistema en una probabilidad, pero la
razón es que los conos, por ejemplo, no envían un tren
de potenciales de acción hacia la corteza cuando detectan
los fotones adecuados, sino que parece ser que los conos
están enviando dichos trenes todo el rato, y lo que ocurre
es que la llegada de fotones modifica, es decir, modula, la
frecuencia de descarga. Así que la descarga ya estaba en
marcha, y lo que ocurre al llegar los fotones específicos es
que la descarga cambia en cierta proporcion, que debería ser
específica.
¿Afecta la falta de especificidad a la objetividad?
Si una neurona da cuenta de lo que no ha de dar cuenta,
por un error en el sistema, la respuesta seguirá siendo
objetiva, aunque inespecífica, introduciendo así en el
sistema algo categorizable como un error de medición
más o menos despreciable para algún efecto en la
práctica, o al contrario, un error útil en algunos
casos por conveniencia evolutiva. Por ejemplo: supóngase que
los receptores cutáneos son estimulados con agua de
temperatura en aumento; si se sobrepasan los 45º C de
temperatura, que es el umbral para empezar a sentir dolor, en vez
de temperatura (en vez de estimularse los receptores
cutáneos de temperatura) se empezará a sentir dolor
(empezarán a estimularse los receptores de dolor); en tal
caso la incapacidad para detectar específicamente una
temperatura a más de 45º C resultará beneficioso
al individuo como un todo, que podrá así protegerse
contra la quemadura. De modo que el que haya cambio de escala y
capacidad de despreciar el error inherente al hecho de que la
especificidad no sea del 100% conllevará una conveniencia
evolutiva en algunos casos, curiosamente, es decir, la falta de
especificidad impedirá distinguir los 45º C de los
46º C, pero a cambio se podrá percibir objetivamente un
dolor, algo que será conveniente en este caso (y se
podrá huir del "depredador" otra vez, del dolor en este
caso).
¿Suponen los errores del sistema un beneficio en todo
caso?
Los fotorreceptores de la retina son específicos
para el estímulo con energía luminosa, con fotones;
pero si se golpea el ojo, si se aplica un estímulo con
energía mecánica, los fotorreceptores también
responderán a ese estímulo inespecífico, que
también identificarán, por error, como si fuesen
fotones, pues en ese caso se percibirán fotopsias
("estrellitas" o lucecitas), y no se sufrirá dolor
necesariamente; así que en este segundo ejemplo no parece
que resulte excesivamente útil que el ojo responda
también inespecíficamente a estímulos
mecánicos, aparentemente no conlleva una conveniencia
evolutiva, mientras que sí ha resultado útil a lo largo
de la evolución filogenética, en el caso de la piel, la
inespecificidad de los receptores de temperatura a más de
45º C (como se ve, este tipo de hechos siguen yendo en
contra de un posible diseño inteligente o de un fin
premeditado en la evolución de las especies por
selección natural).
Cada caso es distinto y no parece haber un guion escrito
para lo que ha de ocurrir. De modo que la evolución no
parece tener previsto qué va a ocurrir, ni que
preadaptación va a ser conveniente por exaptación, o
no, ni parece tener como objetivo favorecer lo beneficioso o lo
útil, ni lo perjudicial o inútil, ni lo neutro: ocurre
cualquier cosa (dentro de lo posible), fundamentalmente gracias a
la complejidad del universo, y la selección natural "se
encargará" de eliminar por el camino, o no, a la
preadaptación que corresponda, durante el inevitable y
accidentado tanteo evolutivo y ajuste al que continuamente
está sometido todo lo real.
¿Hay correlación entre zona cerebral y función
cerebral?
En la práctica médica cotidiana se observa que
los estados mentales dependen de los estados cerebrales con una
correlación evidente. Esta dependencia es tan estrecha que
incluso surge de inmediato la tentación de asignar a zonas
determinadas del cerebro funciones mentales determinadas, y hasta
cierto punto es posible en la práctica a ciertos efectos.
Por ejemplo, hay áreas cerebrales determinadas e
inintercambiables dentro de ciertos límites, como las
visuales, las áreas del lenguaje, las de los movimientos
prácticos aprendidos (o praxias, como la praxia necesaria
para abrir un bote de mermelada, o usar un destornillador), el
área para la sensación táctil en la punta del dedo
gordo del pie derecho, y así sucesivamente.
¿La correlación entre área cerebral y
función es innata o adquirida?
Algunas de esas zonas identificables con cierta
precisión están más determinadas
genéticamente de modo innato, y otras más necesitadas
de un aprendizaje después del nacimiento, a lo largo de
más o menos tiempo y tras permanecer en un entorno
adecuado.
¿Es muy precisa la localización de funciones en el
cerebro?
El cerebro es algo más que determinada
localización de ciertas funciones dadas en su superficie: en
primer lugar, dicha determinación no es exacta, pues, por
ejemplo, el área del lenguaje está distribuida por
diversas áreas que se complementan funcionando en red, y no
todas son imprescindibles ni están activas a la vez en todo
momento en que se está usando el lenguaje. La
localización de la actividad cerebral tiende a ser imprecisa
en la práctica, a lo que se denomina funcionamiento en red.
Sobre la marcha se va formando una trama de neuronas, una red
neural, de "un solo uso", que es distinta a la anterior y a las
siguientes que se puedan producir en ese cerebro (no se piensa en
lo mismo exactamente dos veces). La localización se vuelve
precisa cuando una zona sufre un infarto y una función
determinada se pierde claramente sin ser sustituida, mientras que
otras funciones no se pierden, y de ahí la falsa
impresión de que la localización es más precisa de
lo que es.
¿Por qué no es suficiente la localización de
funciones para entender cómo funciona el cerebro?
El cerebro se encuentra en un constante cambio de estado
morfofuncional, su funcionamiento consiste en una continua
combinación de heterogeneidad y patrones regulares. Es
más: el estado morfofuncional efectivo de todo un cerebro en
cada instante en que se pretenda obtener una "foto fija" del
mismo será en todo caso, y posiblemente, distinto del estado
de cualquier otro sistema (resto de cerebros incluidos) en todo
el universo, e irrepetible en toda la historia del universo
(incluido ese mismo cerebro). Es en esa heterogeneidad e
irrepetibilidad de los estados del cerebro donde se quiebra la
idea de asignar a la localización de funciones el
protagonismo de lo que el cerebro supone para el fenómeno
mental.
Por ejemplo, se puede predecir con bastante acierto
qué parte del cerebro de una persona es más probable
que se active cuando su mente se ocupe del tacto de su dedo gordo
del pie derecho, pero gracias a la tendencia a la evolución
caótica de los sistemas en el universo, al mismo tiempo que
se sabe cuál es la zona que con más probabilidad se va
a activar en correlación con las cosquillas en la punta del
dedo, es imposible determinar con precisión el momento en
que tal área se va a activar, y tampoco es posible predecir
en compañía de la actividad de qué otras
áreas se va a activar en red esa área referente al dedo
del pie. Ambos extremos son impredecibles, de ahí que el
interés de la localización exacta de las zonas
cerebrales deba ser matizado con el hecho de la evolución
caótica de los sistemas dinámicos, cerebro incluido, y
con el concepto de funcionamiento en red y el concepto por tanto
de red neural. ¿Es el funcionamiento en red preferible a una
utópica localización de funciones totalmente precisa?
En esta lucha entre heterogeneidad y patrones, entre desorden y
orden, entre caos (complejidad e impredecibilidad) y determinismo
(grado de certeza acerca de la probabilidad de un suceso futuro),
el cerebro consigue un equilibrio en su tendencia al caos que le
permite ser a pesar de todo eficaz como órgano de control de
muchas funciones del organismo, y capaz de contribuir con
éxito a la supervivencia del individuo mediante su capacidad
de adaptación al cambio, y, por tanto, tal vez capaz de
contribuir con éxito también a la supervivencia de la
especie. Ésto es lo que se infiere al observar que hasta
ahora ésto es lo que parece que viene ocurriendo.
La neurona y el potencial de
acción
¿Qué es una célula?
Las células son como laboratorios químicos,
aislados del medio por una membrana celular, formada por una
bicapa lipídica con permeabilidad selectiva. Las neuronas
son células. La teoría celular de Schwann data de
1.839. Según esta teoría la unidad elemental de la vida
es la célula, la estructura mínima capaz de soportar el
proceso vital por sí misma, la partícula de la vida, el
objeto elemental que explica la presencia del proceso físico
sistemático de la vida, y es que la vida no parece ser
más que un proceso físico sistemático peculiar,
como otros.
¿Es la neurona una célula como las demás?
Parece ser que la fisiología de la neurona, a
escala molecular, es más compleja que la del resto de las
células corporales, más incluso que la de los
hepatocitos, según explica Cardinali en el Tratado de
Fisiología de Tresguerres. En las neuronas es destacable la
actividad bioeléctrica.
¿Qué es la biofísica?
La biofísica es una rama de la biología que
utiliza métodos físicos para medir la actividad
biológica, como, por ejemplo, la actividad bioeléctrica
celular, mediante la investigación electrofisiológica
de los canales iónicos de la membrana celular. El objetivo
de la biofísica es medir.
¿Cómo explica la biofísica la actividad
bioeléctrica neuronal?
Desde el punto de vista de la biofísica, la
actividad bioeléctrica neuronal se consigue explicar
mediante conceptos provenientes de la física clásica,
como puedan ser los conceptos de conductancia, fuerza
electromotriz, capacitancia, etc.
¿Cómo se produce la distribución de cargas a
ambos lados de la membrana neuronal?
La neurona, como las demás células, está
delimitada por la membrana celular, una bicapa lipídica;
delimitada, no rodeada, porque la membrana forma parte de la
neurona. La membrana es semipermeable (presenta permeabilidad
selectiva). Dicha semipermeabilidad provoca que las
concentraciones de ciertas moléculas y elementos a un lado y
otro de la membrana sean asimétricas. Como algunas de dichas
moléculas, e iones, tienen carga eléctrica, la carga
eléctrica a un lado y otro de la membrana (dentro y fuera de
la célula) será distinta. La distribución de
cargas a un lado y otro de la membrana en parte se produce de
modo pasivo, pero en parte es generada de modo activo por la
neurona.
¿Cómo genera impulsos bioeléctricos la
neurona?
La neurona genera, conduce y transmite impulsos
bioeléctricos mediante la descarga de la membrana, mediante
un cambio eléctrico transitorio de la distribución de
cargas a un lado y otro de la membrana, mediante la
producción de potenciales eléctricos.
¿Cómo se cargan y descargan las neuronas?
Las neuronas se cargan al establecerse una diferencia de
potencial a un lado y otro de la membrana. Y también se
descargan, de manera espontánea, o provocada y regulada por
estímulos entrantes en la neurona desde otras neuronas o
desde células receptoras sensoriales, o en un laboratorio
usando estímulos, eléctricos, por ejemplo.
¿Qué funciones pueden desempeñar las
células que se descargan?
Las células que se descargan espontáneamente
pueden actuar, por ejemplo, como marcapasos, como ocurre con las
células cardíacas.
¿Qué células tienen la capacidad de
descargarse?
Las células capaces de descargarse son las
células excitables, que son los siguientes tipos celulares:
células receptoras, nerviosas, musculares y
glandulares.
¿Qué supone la descarga celular desde el punto de
vista citológico?
Las células excitables, al descargarse, responden
con un comportamiento (no categorizable como consciente, pero
sí como propositivo) como consecuencia de dicha descarga,
que puede consistir en una contracción, como es el caso de
las células musculares, o en una secreción, como es el
caso de las neuronas, que secretan neurotransmisores (secretan
neurotransmisores, no conciencia). La excitabilidad neuronal es
lo que hace posible la sensibilidad del sistema.
¿Cómo se produce el potencial de acción
neuronal?
El potencial de acción neuronal aparece cuando las
neuronas se descargan, es por tanto un tipo de potencial
bioeléctrico. El potencial de acción se caracteriza,
por ejemplo, por ser un fenómeno discreto en el espacio y en
el tiempo, autolimitado, estereotipado, constante,
específico, y transmisible dentro del sistema. La
teoría acerca del potencial bioeléctrico de reposo fue
presentada por Bernstein a principios del siglo 20. Todas las
células presentan un potencial de reposo, una carga
eléctrica diferente a un lado y otro de la membrana celular.
Hicieron falta 50 años, desde los experimentos de Overton
hacia 1.902, hasta los de Hodgkin y Huxley hacia 1.952 (Katz
completa el trío de los implicados en la teoría
iónica de la sinapsis), para tener suficientemente claro el
mecanismo por el que el flujo de iones a un lado y otro de la
membrana se relaciona con la detección de los diversos tipos
de potenciales bioeléctricos de membrana, como el potencial
de reposo o el potencial de acción.
¿Qué tiene que ver el potencial de acción con
la transmisión de información?
Las características del potencial de acción lo
convierten en el candidato para explicar la transmisión de
información abstracta en el cerebro.
La estructuración en circuitos y redes permite a su
vez comprender que haya un procesamiento (asociación e
integración) de dicha información durante su
transmisión a base de potenciales de acción.
La transmisión de este modo se puede entender como
cuantificada, potencial de acción a potencial de
acción, gracias a la ley del todo o nada: o hay potencial de
acción con una descarga dada, o no lo hay; y también
gracias a la existencia de la sinapsis: un solo potencial de
acción por cada transmisión a través de la
sinapsis, y además en un solo sentido (con carácter
"valvular").
Estas características, sumadas a otras, como la
estabilidad del sistema a gran escala a pesar de los cambios a
pequeña escala, que permite la efectividad del proceso en la
práctica, establecen una tendencia al orden, necesaria para
que la mente surja como fenómeno verificable.
¿Qué ocurre en el interior de las
células?
En el interior de las células se producen miles de
reacciones químicas distintas en cada instante. Dichas
reacciones consisten fundamentalmente en choques moleculares. Las
moléculas son capaces de, por ejemplo, unos cien millones de
choques por segundo, según explica Guyton en su Tratado de
Fisiología. Ésto quiere decir que las moléculas
son muy rápidas desde un punto de vista macroscópico, e
incluso desde el microscópico. Con tantos choques en tan
poco tiempo se entiende más fácilmente que las
reacciones bioquímicas sigan su curso y que la vida sea
posible sucesivamente en sus diferentes niveles microscópico
y macroscópico, a pesar de lo enigmática que resulta la
efectividad de dicha posibilidad, por su
improbabilidad.
Las moléculas se organizan en estructuras,
organitos u orgánulos (pequeños órganos)
intracelulares, de tal manera que las diversas vías
metabólicas se vean favorecidas al quedar localizadas.
Así mismo, algunas moléculas, las enzimas, actúan
como catalizadoras de reacciones, que aceleran las reacciones,
con lo cual las vías metabólicas posibles en este
sistema se vuelven especialmente probables.
¿Cómo obtienen energía las células?
Las reacciones bioquímicas consisten en una
transformación de la energía obtenida del medio externo
a la célula, del que la célula toma la energía que
utiliza. La célula utiliza dicha energía, que toma en
forma de electrones, mediante la transferencia de electrones de
unas moléculas a otras, moléculas especializadas en
transportar electrones en el interior de la célula, haciendo
que los electrones vayan bajando de nivel energético por el
camino, hacia el estado de mínima energía (ya citado al
hablar de estabilidad). Dicha caída de nivel energético
supone que la energía cedida en la caída sea tomada por
las moléculas de la célula para cargarse de
energía, en forma de fotones, que van "extrayendo" de los
electrones conforme éstos van cayendo de nivel
energético y "soltando" fotones cuando saltan de unas
moléculas a otras y de unos orbitales electrónicos a
otros. La célula reconvierte esa energía en trabajo,
que en última instancia resultará útil al
organismo, posiblemente por presión selectiva en ese
sentido.
¿De dónde procede la energía de las
células?
Los fotones de los que se apropia la célula
proceden en su mayor parte del sol, y son incorporados a la
cadena de la vida gracias a la fotosíntesis que llevan a
cabo las plantas, con cuya energía realizan la síntesis
de moléculas orgánicas que van a entrar en la cadena de
la bioquímica, y en la cadena alimentaria en definitiva, al
ir pasando esa energía al resto de los seres.
¿Cuál es la principal fuente de energía de las
neuronas?
La molécula llamada glucosa es la principal fuente
de energía de las neuronas. No ocurre así con otras
células del organismo.
¿Qué tipo de trabajo realizan las
células?
La célula lleva a cabo cuatro tipos de funciones
fundamentales: de tipo mecánico, osmótico, químico
y eléctrico. Este último tipo de actividad, la
actividad eléctrica, o bioeléctrica, es especialmente
llamativa en el caso de las células nerviosas. Las
células nerviosas generan, conducen y transmiten impulsos
bioeléctricos, que llegan, por ejemplo, a los músculos,
que también tienen la facultad de responder a dichos
impulsos y conducirlos.
¿Para que se utilizan los impulsos bioeléctricos de
las neuronas?
El organismo utiliza los impulsos bioeléctricos
para recibir y transmitir información referente al medio
interno y externo a lo largo de los circuitos neurales. Se
integran así las diferentes partes del organismo, con una
doble función: receptora y efectora.
No es de extrañar que esta manera de manipular
información biológica haya tenido éxito evolutivo,
ya que es una forma de transmisión suficientemente
rápida como para ser eficiente desde un punto de vista
macroscópico, es decir, desde el punto de vista, por
ejemplo, del comportamiento animal.
¿Hay más sistemas de transmisión de
información aparte del nervioso?
Otro sistema de transmisión de información
para integrar comportamientos congruentes con el medio es el
hormonal, más lento. El sistema nervioso ha complementado al
hormonal en animales con locomoción, seguramente debido en
parte precisamente a su rapidez.
¿Hay mucha diferencia entre el sistema nervioso y el
hormonal?
El sistema nervioso no deja de ser algo así como un
sistema de secreción hormonal también, pues los
neurotransmisores que secretan las neuronas en las sinapsis son
como hormonas. Lo que pasa es que las hormonas pueden viajar
vía sanguínea a grandes distancias desde su punto de
secreción para hacer su efecto, mientras que los
neurotransmisores actúan localmente, donde se secretan, al
otro lado de la sinapsis, y en la mayoría de los casos el
neurotransmisor es luego eliminado o reabsorbido ahí mismo
en menos de un segundo, con lo cual se dificulta el que cause un
segundo efecto hormonal a mayor distancia, aunque en algunos
casos ésto también ocurre.
¿Qué es la ley del todo o nada?
La generación de impulsos bioeléctricos se
debe a la capacidad de las neuronas para generar el potencial
eléctrico denominado potencial de acción. Una propiedad
del potencial de acción es que sigue la ley del todo o nada,
según la cual, cuando un estímulo o una serie de
estímulos llegan a la neurona con suficiente intensidad como
para provocar la aparición de un potencial de acción en
la membrana de dicha célula, el potencial de acción se
produce en todo caso, y alcanzando la amplitud (voltaje)
máxima posible en cada caso. Ese máximo no es de
idéntica magnitud en cada caso, pero será la magnitud
máxima posible en cada suceso.
De este modo, si un estímulo ha sido tan intenso
como para que la despolarización que provoca cruce el umbral
de aparición del potencial de acción, éste
aparece, y el potencial bioeléctrico se propaga sin que la
magnitud de dicha amplitud se resienta, hasta llegar a la
siguiente estación de relevo del flujo eléctrico, la
sinapsis, desde donde se suelta una cantidad de neurotransmisor
proporcional a la amplitud del potencial de acción, de modo
que a la membrana postsináptica llegará de nuevo
suficiente neurotransmisor como para desencadenar otro potencial
de acción (sobre todo, si son varias las neuronas
convergentes en la región postsináptica), o no.
¿Por qué se cumple la ley del todo o nada? La
transmisión del impulso en el tejido neuromuscular cumple el
todo o nada, aparte de por las propiedades peculiares de la
membrana (en lo que se refiere a la permeabilidad y difusión
iónica particular en función del voltaje y la
concentración), porque para tal fin se consume
energía.
La energía obtenida del sol se acumula en las
células en ciertos tipos de moléculas especializadas en
tal función, que actúan como moneda de cambio
energético en las células, como es el caso del A.T.P.,
o adenosintrifostato. El todo o nada se ha ido preparando en el
instante previo al potencial de acción consumiendo la
energía del A.T.P. Si se imagina que el potencial de
acción fuera una flecha disparada con una ballesta de una
neurona a otra, siguiendo el todo o nada (o se dispara, o no se
dispara, sin término medio), se puede imaginar que el todo o
nada se prepara en el instante previo tensando y cargando la
ballesta.
¿Qué es el potencial en equilibrio?
El gasto energético (gasto de A.T.P.) previo a un
potencial de acción consiste en la generación de un
potencial bioeléctrico, previo al potencial de acción,
un potencial en equilibrio (mediante un bombeo asimétrico de
iones de un lado a otro de la membrana usando la energía del
A.T.P.). Como todo equilibrio, es inestable: la cuerda de la
ballesta no está relajada, sino tensa y cargada con la
flecha, y al ballestero le tiembla el dedo sobre el gatillo.
Dicho potencial en equilibrio es electronegativo en el interior
de la célula, y positivo en el exterior, es decir, hay una
diferencia de potencial a ambos lados de la membrana, diferencia
que se mantiene en equilibrio en ciertas cifras, en cierta
cantidad de milivoltios, mediante una continua difusión de
iones a un lado y otro de la membrana "en espera" de la descarga
del potencial de acción.
¿Quién conduce la electricidad en las
neuronas?
Hay que tener en cuenta algo importante: en las neuronas
la conducción eléctrica no consiste en el movimiento de
electrones, como en un cable de cobre en un circuito
eléctrico, sino en el movimiento de iones, átomos
cargados. Los iones implicados en la generación de
potenciales eléctricos en las neuronas son los iones de
sodio y potasio, con importante participación también
de los de calcio y magnesio, y algunos otros como iones
proteicos, etc. El paso de iones a un lado y otro de la membrana,
según una "coreografía" estereotipada que se repite de
igual modo una y otra vez, es lo que genera los potenciales
bioeléctricos. Los detalles son complejos, pero gracias a
varios investigadores y el trabajo de décadas se conocen en
bastante detalle (dichos detalles se pueden encontrar en un
tratado de Fisiología).
¿Cómo se pasa de potencial de reposo a potencial de
acción?
Hay una diferencia de potencial a un lado y otro de la
membrana durante el potencial de reposo, reposo relativo,
dependiendo del punto de vista, porque se llama reposo al hecho
de estar con la ballesta cargada y la flecha quieta… pero
la cuerda tensa. La diferencia de potencial en reposo es tan
amplia como para que al iniciarse la despolarización ante un
estímulo adecuado se alcance el umbral necesario para la
producción del potencial de acción (la cuerda de la
ballesta, para estar en equilibrio, necesariamente está
también tan tensa como para que la flecha pueda salir
disparada).
¿Cuál es el umbral para que se produzca la descarga
de un potencial de acción durante la
despolarización?
El umbral a partir del cual la despolarización no
se detiene y llega hasta el final, hasta la descarga del
potencial de acción de acuerdo con un todo o nada, se
encuentra aproximadamente en los -45 mV (menos cuarenta y cinco
milivoltios) en el interior de la célula.
¿Resulta difícil descargar un potencial de
acción?
El equilibrio durante el potencial de reposo se rompe
fácilmente, y el potencial de acción se produce a favor
de gradiente (un gradiente es una medida, vectorial, del cambio
de una magnitud en un sistema, que indica la dirección e
intensidad de dicho cambio), y no requiere gasto adicional, sino
que "rueda por sí mismo cuesta abajo" hacia el lugar de
menor energía, por decirlo de un modo fácil de
intuir.
¿Qué es la facilitación neuronal?
Si la neurona está parcialmente despolarizada, por
ejemplo, por la suma de estímulos pequeños convergentes
sobre ella, puede que su potencial se encuentre cerca de los -45
mV, y en tal caso la neurona estaría parcialmente
despolarizada, parcialmente descargada, sin llegar a formarse el
potencial de acción, pero en tal caso la descarga del
potencial de acción será más fácil que en el
contrario. En dicha situación, se dice que la neurona
está facilitada, y la facilitación es una forma de
regulación fundamental en el cerebro, para integrar
respuestas, pues es lo que ayuda a que ante dos opciones se tome
una antes y más fácilmente que otra; la vía por la
que se opte antes generalmente será la vía neural
más facilitada, obviamente (que por tanto será la
más probable).
¿Tendría que ver de algún modo la
facilitación con el concepto de libertad?
En el cerebro, como sistema de computación, la
libertad parece consistir en que sea posible disponer de
opciones, de alternativas, dicho de un modo más
gráfico, de encrucijadas o cruces de caminos con varias
vías posibles (circuitos en y griega o divergentes), y dicha
libertad depende de la facilitación previa de las vías
neurales opcionales, y, tal vez, dependa de ésto más
que de otra cosa, no parece depender tanto de lo que uno "quiere
hacer" como de lo que uno "puede hacer", uno sería libre
para hacer "lo que puede", no "lo que quiere". Para el ser humano
todo no es posible, y la estructura morfofuncional del
"órgano de pensar" es un ejemplo más.
¿Cuáles son los mecanismos de
facilitación?
Hay estímulos que despolarizan o facilitan
vías por diversos motivos, pero la mayoría de los
estímulos retroactivos, que podrían ser los encargados
de la facilitación, en la práctica parece ser que son
inhibidores, no excitadores.
La descripción de las vías inhibidoras en gran
parte se debe al trabajo de Eccles.
Sin embargo, los circuitos retroactivos inhibidores
sí resultan ser en la práctica excitadores a fin de
cuentas, ya que dos inhibiciones sucesivas, adecuadamente
aplicadas (inhibiendo la inhibición), pueden lograr el mismo
efecto que una excitación.
¿Para qué sirven las sinapsis inhibidoras de la
despolarización?
Las sinapsis inhibidoras son un mecanismo regulador
fundamental en el cerebro, y producen el efecto contrario a las
sinapsis excitadoras: alejan a la neurona del umbral de descarga
del potencial de acción, lejos de los -45 mV, por ejemplo, a
-90 mV, situación que se denomina hiperpolarización,
que es un estado en el que la neurona responde peor a su
estímulo (el dedo del ballestero se separa del gatillo,
reduciéndose la probabilidad del disparo). Todo este
galimatías sobre potenciales bioeléctricos quizá
parezca excesivamente complejo y difícil de entender, y, sin
embargo, el funcionamiento de, por ejemplo, el riñón,
la formación de orina en la nefrona en concreto, es
todavía más difícil de entender que el
funcionamiento de la neurona y el sistema nervioso, y sólo
es orina, ni siquiera es un yo consciente, así que no hay
que dejarse impresionar porque lo que hagan uno y otro
órgano parezca muy alejado entre sí: sólo son
órganos, ambos, el cerebro y el riñón, tan propio
de la biología es ser un individuo que orina como ser un yo
consciente.
¿Qué relación hay entre la
hiperpolarización y el potencial de acción?
Estando la neurona hiperpolarizada, el estímulo
habría de ser mayor para lograr un mismo efecto, por
ejemplo, un potencial de acción.
¿Cuál es el potencial de equilibrio óptimo
para obtener un potencial de acción?
La situación de equilibrio óptima para obtener
un potencial de acción en condiciones ideales se supone de
manera fundamentada que está alrededor de los -85 mV, y
dicha situación ha sido lograda mediante evolución y
selección natural, es decir, por tanteo en ese sentido.
¿Se repolariza la neurona tras un potencial de acción?
El potencial de acción se produce por una alteración
del equilibrio iónico a un lado y otro de la membrana, y
consiste en una despolarización de la membrana. Una vez
despolarizada, ha de volverse a repolarizar, para lo que la
célula consume A.T.P. cuando se van consumiendo las, en
sentido figurado, ballestas de las que dispone para numerosos
disparos antes de consumir su munición. En cada potencial de
acción (en cada disparo) se consumen pocos iones, y la
producción del potencial de acción en sí no
conlleva consumo de A.T.P., ya que se produce a favor de
gradiente.
Daño cerebral y
mente
¿Sirve el daño cerebral para elucubrar sobre la
posible correlación entre la mente y el cerebro?
Las lesiones cerebrales permiten conocer para qué
sirve cada región del cerebro, porque cuando se daña
una región dada se pierde una función dada. Si
ésto se confirma una y otra vez en miles de personas, con
poca diferencia entre todas, se puede llegar a saber para
qué sirve cada región cerebral con bastante seguridad.
De este modo se sabe a qué se dedican las diversas regiones
del cerebro. Por ejemplo: si se dañan ciertas regiones de la
superficie cortical se pierden funciones bien determinadas, como
el cálculo. En cambio, si se dañan ciertas regiones
subcorticales más que la calidad de las funciones se altera
la cantidad, por ejemplo: no se pierde el cálculo, pero se
calcula más despacio (este tipo de detalles permiten
distinguir las demencias corticales de las
subcorticales).
Damasio relata en su libro, El error de Descartes, el
caso de un hombre que sufrió un daño en su región
ventromedial del lóbulo frontal, a consecuencia de lo cual
dejó de ser capaz de tomar decisiones; no es que no se le
ocurriese qué hacer, sino que no podía tomar la
decisión de hacerlo, fuera lo que fuera, una función
bastante abstracta, por cierto, como se puede apreciar; y la
lesión de la cara lateral de su lóbulo frontal le
produjo una incapacidad para controlar la atención. Damasio
también explica que la lesión en la corteza
somatosensorial derecha puede afectar a la toma de decisiones, lo
cual entronca una vez más con la idea de la
organización en red, y en este caso con algún otro
defecto asociado, como parálisis, etc.
Más ejemplos: la lesión de la
circunvolución prefrontal produce alteración de la
personalidad; la de la circunvolución frontal ascendente,
hemiplejía (parálisis de medio cuerpo); si falla la
circunvolución frontal inferior dominante se produce afasia
de Broca (incapacidad de emitir lenguaje); en la
circunvolución parietal superior, hemianestesia
(pérdida de la sensibilidad en medio cuerpo); en la
circunvolución parietal superior, apraxia (dificultad para
ejecutar tareas motoras aprendidas, como abrir un tarro de
mermelada); en el giro supramarginal se producen alteraciones
diversas, como alexia (incapacidad para leer), agrafia
(incapacidad para escribir), acalculia (incapacidad para
calcular), agnosia digital (agnosia es incapacidad para
reconocer); en el giro angular, agnosia visual; en la corteza
occipital, agnosia visual; en la corteza temporal superior,
agnosia auditiva, etc. También es conocida la lesión
del hipocampo que altera la memoria de modo peculiar: se pierde
la posibilidad de formar nuevos recuerdos, sin olvidar los ya
asentados, de modo que no olvidan su nombre, pero olvidan, por
ejemplo, si han comido ya, o no, hace media hora. ¿Son
algunos tipos de lesión cerebral especialmente llamativos?
Son más conocidos algunos de estos defectos funcionales por
su difusión en los textos divulgativos al tener
connotaciones llamativas, como algunos de los defectos
funcionales vinculados a lesiones en el lóbulo parietal
derecho, como es el caso de la apraxia del vestir, la anosognosia
(negación de la enfermedad que se padece), la
hemisomatognosia (se ignora la mitad del cuerpo, de modo que, por
asombroso que parezca, los afectados afirman, cuando miran hacia
esa parte de su cuerpo, que debe de ser el cuerpo de otra
persona, pues rellenan con su imaginación el vacío de
información en su lóbulo parietal de ese modo), y la
desorientación topográfica y espacial.
También es frecuente que el enfermo fabule sobre su
situación en los casos de ceguera cortical por anosognosia,
diciendo que no ve porque se ha ido la luz.
Puede que sorprenda que los enfermos nieguen una
realidad evidente para los demás, pero así es como
ocurre, por ejemplo: no es infrecuente observar a un paciente
afásico, incapaz de formar palabras en su cerebro, tratar de
mantener animadas conversaciones con quien tenga delante, a base
de farfullar sin cesar sonidos articulados, pero mediante una
jerigonza logorreica, amorfa y sin significado, sin darse cuenta
de que está hablando sin lenguaje. ¿Qué es el
sistema límbico? Así como la parte externa del
lóbulo temporal está especializada en lenguaje y
audición, en general, la parte interna constituye la
circunvolución del hipocampo, que es una corteza más
antigua, con tres capas de neuronas en vez de seis, como el resto
de la corteza, debido a que el hipocampo es, desde el punto de
vista de la telencefalización, una corteza más
primitiva; de hecho, el hipocampo forma parte del sistema
límbico, la parte del cerebro dedicada a integrar en red la
conducta instintiva y emotiva, es decir, la más primitiva,
la que los humanos tienen en común con animales cerebrados
menos evolucionados y por tanto con un córtex menos extenso.
En el caso del ser humano, el lóbulo prefrontal, que integra
a todo el cerebro, controla los impulsos instintivos con
aportaciones como la moral, por ejemplo, que se integra en el
lóbulo prefrontal; las lesiones del lóbulo prefrontal,
por un tumor cerebral, por ejemplo, pueden cursar con ignorancia
de la moral previamente conocida, con lo que el afectado puede
pasar de ser un santo a ser un crápula desinhibido, agresivo
y socialmente reprobable, y acabar "entre rejas", como ocurre en
ocasiones.
¿Aparte de por el defecto de actividad neuronal, se
puede saber algo de la correlación mente-cerebro a partir
del exceso de actividad neuronal?
El exceso de actividad neuronal también es
interesante, y también la actividad a destiempo, fuera de
lugar, no por muerte neuronal, sino por irritación neuronal,
como ocurre en la epilepsia, en la que las neuronas descargan
fuera de control; por ejemplo: en las descargas epilépticas
en el lóbulo temporolímbico el afectado puede percibir,
según la zona descargada: dejá-vu, ilusiones, miedo,
pensamiento forzado, angustia, rabia, alucinaciones, y
también otro tipo de manifestaciones menos abstractas, como
palidez de la piel, labios azulados (cianóticos),
dilatación de la pupila, movimientos intestinales,
salivación (sialorrea), comportamientos consistentes en
vestirse y desvestirse, deglutir, masticar, toquetear cosas, dar
vueltas, salir a vagar, etc.
¿Puede estar la individualidad en jaque en algunos
casos?
Un individuo, cada miembro de una especie animal, como
pueda ser una persona, no es exactamente un individuo a todos los
efectos: no es totalmente indivisible (individuo significa
indivisible): a una persona se la puede dividir, se le puede
amputar un brazo, etc. Pero un brazo amputado no implica en la
práctica que ahora haya dos personas, pues el concepto de
individuo es eficaz en la práctica para categorizar como
individuales los comportamientos conscientes de, por ejemplo,
éso que se comporta como persona y que recibe el nombre de
persona, aunque esté parcialmente dividido, aunque tenga
amputado un brazo, por ejemplo. Pero hay una situación
límite que dificulta esta conclusión según la cual
amputarle algo a una persona no es compatible con el desarrollo
de dos comportamientos conscientes individuales: la sección
completa del cuerpo calloso. ¿Qué es el cuerpo calloso?
El cuerpo calloso es una estructura entre ambos hemisferios
formada por unos 200 millones de axones (nadie los ha contado con
precisión, es una estimación) que asocian e integran
ambos hemisferios. El cuerpo calloso es una estructura que
conecta los dos hemisferios cerebrales.
Los hemisferios son las dos mitades del cerebro, y es
que el ser humano presenta simetría bilateral, así que
está formado por dos mitades corporales con simetría
bilateral, es decir, con inversión espacial: una es como el
reflejo especular de la otra, un todo formado por dos mitades
simétricas por paridad; ésto distingue al ser humano de
los animales con simetría radial, como las estrellas de mar
(si uno lo piensa, ser simétricos es algo extraño y
aberrante, y "osado"; lo más lógico sería tender a
ser esféricos por fuera y asimétricos por dentro, como
los seres unicelulares; lo que pasa es que esta simetría
parece necesaria para algunas cosas, como poder ser
pluricelulares, o, sin ir más lejos, simplemente poder
caminar, por ejemplo, pues hacen falta dos piernas, aunque ello
requiera además una costosa coordinación entre ambas
mitades). ¿Sirven las lesiones del cuerpo calloso para
establecer correlaciones también? Pocas veces se ve a
personas con daño en el cuerpo calloso, pero, cuando se
encuentra a alguien, sorprende, ya que en la situación
extrema, la sección completa del cuerpo calloso, los dos
hemisferios quedan separados, y como se concluye a partir del
trabajo de Sperry, se trataría entonces posiblemente de dos
mentes distintas, dos sujetos conscientes en una sola cabeza, dos
yoes, y cada una de las mentes ajena a la existencia de la otra,
la una, el hemisferio dominante, capaz de hablar y racionalizar
su entorno, y la otra, el hemisferio no dominante, intuitivo y
capaz de unas cuantas cosas, pero no de racionalizar a fondo su
existencia, al carecer del lenguaje.
Ésto resulta extraño y contraintuitivo (y
evidentemente redunda en la idea del carácter ilusorio del
yo consciente, ya que, por ejemplo, no sería verdaderamente
único e individual, sólo lo parecería), pero
parece que hay alguna certeza sobre ello. Las lesiones parciales
del cuerpo calloso desembocan en una serie de complejos
síndromes de desconexión del cuerpo calloso, con
diferentes posibilidades, por ejemplo, en la lesión de la
parte anterior del cuerpo calloso se produce apraxia de la mano
izquierda; en la lesión de la parte posterior del cuerpo
calloso se produce anomia táctil de la mano izquierda,
etc.
¿Qué ocurre si se corta el cuerpo calloso?
En la sección completa del cuerpo calloso, una
persona, con una mente consciente subjetiva antes de la
sección del cuerpo calloso, con la sección y
separación completa de sus dos hemisferios cerebrales parece
dar lugar a dos mentes conscientes subjetivas en una sola cabeza,
según se concluye a partir de las investigaciones de Sperry.
Éso sí, dos mentes conscientes subjetivas pero con algo
de perturbación mental, sobre todo en el lado no dominante,
el lado en el que se pierde el lenguaje, que da lugar a una mente
más confusa que la que conserva la facultad del lenguaje. La
sección del cuerpo calloso es una situación
excepcional, infrecuente, y como la cabeza sigue siendo una en el
caso de la sección del cuerpo calloso, a las personas con
este problema se las suele seguir considerando en la
práctica, que se sepa, como una sola persona a efectos
legales cuando se da esta rara situación, a pesar de que,
asombrosamente, tras la sección haya probablemente dos
personas confusas dentro de esa cabeza.
¿Hay correlación también entre la mente y las
lesiones de los ganglios basales y el cerebelo?
Las lesiones de los ganglios basales son frecuentes, e
incluyen el síndrome de Parkinson, entre otros.
Las lesiones localizadas en el cerebelo también son
frecuentes y cursan con una lista de alteraciones posibles, como
vértigo cerebeloso, ataxia de la marcha, y un largo
etcétera. La alteración en ganglios basales, y
posiblemente en cerebelo, también afecta al pensamiento; por
ejemplo, del mismo modo que las personas con parkinsonismo pueden
presentar lentitud para iniciar el movimiento de un miembro, o
hipodinamia, también pueden presentar lentitud para iniciar
sus pensamientos, algo de lo que algunas personas con
parkinsonismo se quejan amargamente, pues ocurre en contra de sus
deseos. Toda esta evidencia sobre la correlación entre
daño cerebral y mente se refiere a hechos que ocurren en el
cerebro y que tienen que ver con la mente, así que es
posible concluir que la mente podría ser lo que el cerebro
hace con la información abstracta que procesa, y no otra
cosa.
Cerebro y
evolución
¿Tiene que ver el peculiar cerebro humano con el proceso
evolutivo peculiar de la hominización?
Hay un detalle en el que no se piensa a menudo, pero que
es interesante: la mente, un continuo ontogenético, depende
del cerebro, y el cerebro es un eslabón más en la
cadena evolutiva filogenética del sistema nervioso de una
generación a otra, y de una especie animal a otra, y por
ello también las mentes forman parte de un continuo
filogenético. Las características del cerebro humano
son propias de la especie humana, y forman parte en particular
del proceso de hominización, ese proceso de cambio evolutivo
que ha llevado del primate al ser humano, en esta línea
evolutiva en particular. La hominización también es un
acontecimiento evolutivo más, uno de tantos.
¿Cuántos tipos de seres humanos hay?
Que se sepa, sólo existe en la actualidad una
especie animal a la que definir como ser humano. Dicha especie es
el Homo sapiens sapiens. Este pequeño detalle es sin embargo
notable, ya que se trata de un caso excepcional que convierte al
ser humano en una pequeña "joya" desde el punto de vista de
la zoología, pues es un caso único en su género.
Véase con un ejemplo qué significa esta excepcional
soledad del ser humano entre el resto de los animales: así
como se puede ser humano, también se puede ser, por ejemplo,
felino, como les ocurre a los gatos. Lo que pasa es que hay
diversas especies de felinos, de modo que los gatos, por nombrar
a unos de ellos, no son los únicos felinos existentes.
También están los tigres, los leones, etc. En cambio,
sólo una especie animal es humana en la
actualidad.
Homo es un género de animales, y lo habitual es que
un género animal esté representado por varias especies.
Pues bien, el género Homo es de esos géneros animales
llamativos por tener una sola especie como representante: Homo
sapiens sapiens, el ser humano moderno. En el pasado sí hubo
simultáneamente varias especies humanas distintas a la vez
sobre la tierra.
¿Cómo se clasifican los animales?
Los grupos animales se clasifican, grosso modo, y yendo
en el sentido de las hojas a la raíz del árbol, en
raza, especie, género, familia, orden, clase, tipo y reino.
Por supuesto que esta clasificación se puede modificar al
antojo de cada autor. Lo que interesa es percatarse de la
ramificación de la clasificación, como un tronco de un
árbol macroscópico con ramas (o una neurona
microscópica con dendritas), que refleja el hecho evolutivo:
conforme pasa el tiempo, se van añadiendo ramas al
árbol (o botones sinápticos a las dendritas), al ir
surgiendo animales diferentes a los anteriores con el progreso de
la evolución, y con la desaparición de algunas de las
ramas previas por selección natural (y en conjunto con un
aumento de complejidad).
El hombre pertenece al orden de los primates y a la
clase de los mamíferos.
¿Qué es un primate?
Los primates son animales caracterizados, entre otras
cosas, aparte de por ser mamíferos, por tener cinco dedos en
la mano y pulgar oponible, por poder efectuar la pronosupinacion
de la mano, por tener uñas en vez de garras, por ser
plantígrados, por poseer visión estereoscópica
frontal, por ser euterios, es decir, placentarios, y por tener el
rinopalio o corteza olfatoria relativamente menos
desarrollada.
Hay dos ramas importantes de mamíferos, los
placentarios y los marsupiales. Los placentarios tienen una
gestación más prolongada y la osificación de su
cráneo empieza más tarde, algo que probablemente hace
posible que, si se da el caso, y a diferencia de los marsupiales,
el cráneo y su contenido puedan tener relativamente más
tamaño a lo largo de la evolución filogenética, y
de ahí que especies placentarias y marsupiales convergentes
que por coincidencia compitan por un mismo nicho evolucionen
hacia el dominio de las placentarias sobre las marsupiales, y de
ahí también que sea posible para los placentarios la
evolución hacia la hominización, al ser una de sus
características peculiares un tamaño del cerebro
progresivamente mayor. El orden de los primates probablemente
surgió en el pleoceno, durante la era terciaria, hace, tal
vez, unos 60 millones de años.
Es probable que los primates evolucionaran a partir de
mamíferos insectívoros, con un aspecto parecido al de
las actuales musarañas.
¿Cómo se ordenan los primates?
A los zoólogos les parece conveniente dividir al
orden de los primates en dos subórdenes: prosimios y simios.
El suborden de los prosimios, continuando con esta
complicación del ramaje de este árbol evolutivo que
lleva hacia los homínidos, se divide en los
infraórdenes de los lemuriformes, lorisiformes y
tarsiformes.
El suborden de los simios, también llamados
antropoideos, se divide en los infraórdenes de platirrinos y
catarrinos. Los platirrinos son monos con cola, y están
menos evolucionados que los catarrinos. Los monos platirrinos se
dividen en tres géneros: tití, cebus y ateles. Los
monos catarrinos aparecieron "en escena" hace unos 50 millones de
años, probablemente en el eoceno, y se caracterizan por algo
curioso: por tener 32 dientes, incluido el ser humano adulto. Los
monos catarrinos se clasifican en 4 familias: cercopitecos,
hilobátidos, antropomorfos y homínidos.
Los cercopitecos son los únicos catarrinos con
cola, aunque en su caso no es prensil.
Los hilobátidos, con 4 especies, son los gibones,
menos evolucionados que antropomorfos y homínidos. Los
póngidos o antropomorfos se clasifican a veces en la misma
familia que los hilobátidos, pues ambos son catarrinos sin
cola que no son humanoides.
Los póngidos se dividen en 3 géneros: Pongo, u
orangutanes, Pan, o chimpancés, con dos especies, y Gorilla.
¿Qué es un homínido? La familia de los
homínidos es la cuarta familia de los catarrinos que falta
por mencionar. En la familia de los homínidos se encuentra
ya a los seres humanos. Los homínidos se caracterizan por el
bipedismo. Hay dos géneros conocidos pertenecientes a la
familia de los homínidos: Australopithecus y Homo. De estos
dos géneros de homínidos, uno de ellos, el género
Australopithecus, ya se ha extinguido.
¿Quiénes eran los Australopithecus?
Los Australopithecus eran seres de aspecto casi humano,
aunque posiblemente no eran totalmente humanos. Quizá ni
siquiera fueran capaces de hablar, quizá fueran algo
así como chimpancés bípedos, tal vez con más
inteligencia que los chimpancés, lo que otorgaría a sus
tribus un aspecto a medio camino entre una tribu de
chimpancés y una tribu de hombres primitivos. Y ésto
matizándolo además con el hecho de las varias especies
de Australopithecus que ha habido, algunas más evolucionadas
que otras.
¿Quiénes son los humanos?
Dentro del género Homo también hay diversas
especies conocidas, como es el caso de Homo erectus, o el caso
del hombre de Neandertal u Homo sapiens neanderthalensis, ambas
especies ya extinguidas en la actualidad, que se sepa.
En principio, en la actualidad sólo hay una especie
animal representante del género Homo: Homo sapiens sapiens,
el ser humano moderno. Es más, no sólo Homo sapiens
sapiens es la única especie animal representante del
género Homo, sino que por su parte el género Homo es el
único género animal representante de la familia de los
homínidos.
El hombre es un simio catarrino de la familia de los
homínidos, la única especie viva representante del
género Homo, la única especie humana, y además
también el único homínido que existe en la
actualidad. Así como el hecho de ser un animal felino es una
característica achacable a un género animal dado, del
mismo modo el hecho de ser un animal humano es una
característica achacable a otro género animal dado, el
género Homo. De modo que ser humano tal vez quiera decir:
pertenencia al género Homo.
¿Es el humano una especie "elegida"?
Es fácil caer en la tentación de intuir que se
trata de una especie "elegida" por su singularidad, como si
hubiese sido "señalada por el destino", pero lo que se ha
comprobado es que durante millones de años han convivido
varias especies humanas distintas sobre el planeta, así que
la situación actual es llamativa, pero circunstancial, y, si
indica algún destino, sería que la familia humana
podría estar más abocada a la extinción que otras
familias de animales con más diversidad en sus
representantes.
¿Cuál es el rasgo humano clave?
¿Cuál sería el rasgo clave que
permitiría categorizar aparte al género Homo? En
principio podrían ser una serie de rasgos, no uno. No
obstante, hay un fenómeno en particular que podría
determinar especialmente la característica naturaleza
humana: la neotenia, y precisamente la neotenia tras afectar a un
antepasado del ser humano probablemente parecido a un
antropomorfo. Es posible que el hombre sea simplemente un simio
catarrino antropomorfo que se ha vuelto primero homínido
(bípedo) y después Homo (humano) como resultado de la
manifestación de la neotenia en el curso de su
evolución particular a lo largo de las generaciones. En
definitiva: el rasgo humano clave podría ser la neotenia
asociada al antropomorfismo.
¿Se le había ocurrido ya a alguien lo de la
neotenia como rasgo humano?
Tras tener esta idea hice una búsqueda
bibliográfica para ver a quién más se le
había ocurrido lo mismo y, si era así, cómo lo
expresaba. En un libro de Lamotte, Antropología
neuroevolutiva, se decía ésto mismo, que el ser humano
debía su aspecto a la neotenia. Pero Lamotte a su vez
refería habérselo leído a Changeaux en su libro El
hombre neuronal, libro que tardé varios años en
conseguir. Una vez leído el libro de Changeaux,
comprobé que su vez Changeaux refería habérselo
leído a Bolk, en un trabajo de 1.926.
Bolk había hecho mención al parecido entre el
chimpancé joven y el hombre adulto. De ahí la sospecha
de la persistencia de rasgos fetales en el humano adulto. Bolk
decía que lo que le pasaba al hombre era como si lo que es
una etapa de transición en la ontogénesis de otros
primates se hubiera convertido en una etapa final en el hombre,
en referencia a los rasgos faciales. Y en cuanto al cráneo,
Bolk dijo que el hombre se parece a un feto de chimpancé
convertido en adulto, con lo que sería un animal
neoténico. En definitiva: el rasgo humano clave podría
ser la neotenia asociada al antropomorfismo.
¿Qué es la neotenia?
El fenómeno de la neotenia consiste en manifestar
en la edad adulta características infantiles o larvarias
(consiste, estrictamente, en alcanzar la madurez sexual durante
el estado de larva, como se explica en el libro Elementos de
biología, de Planas Mestres, en la página 347). Un
ejemplo típico de neotenia se encuentra entre los anfibios
que conservan las branquias en la etapa adulta, como ocurre con
el anfibio Proteus anguinus. Ocurre algo parecido con el ajolote
(Ambystoma mexicanum), por poner otro ejemplo. El fenómeno
de la neotenia se observa en grupos diversos de animales,
insectos, gusanos equiúridos, etc. No hay que confundir la
neotenia con la paidogénesis, que consiste en la capacidad
de algunos individuos con caracteres larvarios para reproducirse
mediante partenogénesis, como ocurre con algunos
dípteros (por cierto, la partenogénesis fue descrita
por Aristóteles, parece ser).
¿Cómo se clasifican los seres vivos?
Los seres vivos se clasifican por sus
características y por su ubicación a lo largo del
árbol evolutivo.
La primera división de la vida se establece entre
procariotas, o células primitivas, y eucariotas, o
células modernas, éstas con el material genético
dentro de un núcleo celular con membrana. Los humanos son
eucariotas, las bacterias son procariotas. Según Margulis,
las células eucariotas podrían ser un estado
simbiótico de células procariotas, pues algunos de los
orgánulos dentro de las células eucariotas parecen de
hecho células procariotas, como es el caso de las
mitocondrias, que incluso tienen en su interior cromosomas sin
núcleo.
¿Qué son los cromosomas?
Los cromosomas son organitos intracelulares en los que
están empaquetados los genes de la célula, las unidades
morfofuncionales hechas de ácidos nucleicos con la
información genética.
¿Qué tipos de procariotas y eucariotas hay?
Los procariotas son dos grupos de seres vivos: bacterias
y cianofíceas.
Los eucariotas están constituidos por los
siguientes 4 grupos de seres vivos: protistas, hongos, metafitas
y metazoos.
Los protistas son seres unicelulares, como los
procariotas, pero son eucariotas. Los protistas pueden ser
animales, los protozoos, o vegetales, las protofitas. Entre los
protozoos resultan interesantes los cianoflagelados, pues su
estructura es similar a la de unas células, los coanocitos,
a las que se hará mención enseguida, por su
interés. Las metafitas son las plantas, y los metazoos son
los animales formados por muchas células, o animales multi o
pluricelulares.
Los metazoos, o animales pluricelulares, se dividen en
parazoos, mesozoos y eumetazoos.
¿Qué tienen de interesante los parazoos?
Los parazoos son las esponjas, y se caracterizan por
presentar cierta diferenciación celular, cierta
especialización de sus células, pero sin formar
éstas tejidos.
Los tejidos aparecen en cuanto aparece la lámina
basal, una estructura laminar que separa un grupo celular de
otro, caracterizando así a cada tejido como el grupo celular
separado por una lámina basal. Las esponjas son interesantes
pues uno de sus tipos celulares es el coanocito, que al ser tan
parecido a los protozoos llamados cianoflagelados, obliga a
pensar que los metazoos, de los cuales las esponjas son un primer
representante menos evolucionado, o más primitivo, son el
resultado, de algún modo, de una asociación entre
protistas, procedentes de una misma célula germinal, y
más o menos diferenciados entre sí (especializados),
unidos en lo que a la larga resulta ser algo así como un
"propósito común", una sola vida individual a escala
macroscópica, protistas que además tendrían los
mismos genes y por tanto procederían de una célula
huevo común. ¿Qué tienen de interesante los
eumetazoos? Los mesozoos son un estado intermedio entre parazoos
y eumetazoos.
Los eumetazoos son metazoos con epitelios, con tejidos
celulares. Los eumetazoos crecen a partir de una célula
embrionaria, que se divide, multiplica y subespecializa,
empezando a formar tejidos. Primero forma capas de células:
si el embrión tiene dos capas, los eumetazoos se denominan
diblásticos, si tiene tres, triblásticos.
Los eumetazoos diblásticos presentan simetría
radial, y son los ctenóforos y los cnidarios. Los cnidarios
son los pólipos, las medusas, las anémonas.
Los eumetazoos triblásticos presentan simetría
bilateral, excepto los equinodermos (las estrellas de
mar).
La importancia de los eumetazoos triblásticos
consiste en que, a diferencia de los demás seres, y con la
excepción de los equinodermos (por su simetría radial,
que lo hace improbable) presentan el fenómeno de la
cefalización.
¿Qué es la cefalización?
La cefalización es el desarrollo de un polo
cefálico en el cuerpo del animal, por el que se establece
una simetría entre sus dos polos o extremos, de modo que uno
de ellos se va a especializar en ser la cabeza del
animal.
Se trata de una novedad importante a la hora de buscar
comida mediante el movimiento autónomo (originalmente, el
movimiento era natatorio).
¿Cómo se clasifican los eumetazoos?
Los eumetazoos triblásticos se dividen en
acelomados (platelmintos, etc.), seudocelomados (nematelmintos,
rotíferos, etc.), y celomados, dependiendo de si tienen, o
no, o casi, cavidad celómica.
Los celomados, dependiendo de dónde aparezca un
orificio que se llama blastoporo en la fase en la que el huevo se
está dividiendo y formando una primera bola de células,
se dividen en protostomios y deuterostomios. En los protostomios
el blastoporo se sitúa de modo que dé lugar a la boca,
y en los deuterostomios dará lugar al ano.
Los protostomios se dividen en anélidos,
artrópodos y moluscos. Los artrópodos se dividen en
quelicerados (arácnidos, merostomos y picnogónidos) y
antenados o mandibulados (crustáceos, miriápodos,
insectos).
¿Qué tienen de interesante los moluscos?
Los moluscos son interesantes porque son el primer grupo
animal, desde este enfoque evolutivo, en el que los agrupamientos
de neuronas en el polo cefálico, los ganglios neuronales
cefálicos, se fusionan por primera vez en un órgano al
que considerar ya un primer cerebro rudimentario, siendo
especialmente notable el hecho en el caso de los
cefalópodos, como el conocido caso del pulpo, capaz, por
ejemplo, de diseñar soluciones imaginativas para problemas
difíciles. El propio cerebro humano es también algo
así como un ganglio grande, o un gran agrupamiento de
ganglios.
¿Qué tienen de interesante los deuterostomios?
Los deuterostomios son interesantes por ser los animales
en los que el sistema nervioso se sitúa en posición
dorsal. Los deuterostomios se dividen en equinodermos y
cordados.
Los equinodermos, como ya se ha dicho, presentan
simetría radial, y son las estrellas, los erizos de mar y
las holoturias.
Los cordados se caracterizan por tener en posición
dorsal un cordón llamado corda, por tener un tubo nervioso
cerca de la corda, y por tener faringe.
Hay cuatro tipos de cordados: cefalocordados
(amphioxus), urocordados (ascidia), perennicordados y craneados.
Los craneados son los animales con cráneo.
Los craneados se dividen en mixinoides
(ciclóstomos, como la lamprea) y vertebrados.
¿Qué tienen de peculiar los vertebrados?
Los vertebrados se caracterizan por poseer tejido
óseo, y dividirse en cabeza, tronco y cola. La cabeza es el
miembro único (aunque formado por dos mitades
simétricas unidas, cerebro incluido) del polo cefálico,
unido al cuerpo por el cuello, y compuesto por cráneo y
cara.
Los vertebrados son los anamniotas (peces y anfibios) y
los amniotas (reptiles, aves y mamíferos).
Los mamíferos incluyen entre otros a los
insectívoros, a partir de los cuales evolucionaron los
primates, que es lo que entre otras cosas son los humanos,
primates. El ser humano tiene más en común con una
holoturia, o con un erizo de mar, o con una estrella de mar, a
pesar de presentar simetría radial, que con un pulpo, o con
una mantis religiosa, con simetría bilateral.
¿Tendrá la neotenia algo que ver con el tamaño
cerebral relativamente mayor del hombre? Tal vez el aumento del
tamaño relativo del cráneo en el hombre moderno tenga
que ver con la tendencia a conservar las proporciones infantiles
en el adulto, aumentando tanto el continente como el contenido,
sin que el aumento del continente, la hipertrofia (aumento del
tamaño de las piezas) y la hiperplasia (aumento del
número de piezas) del cerebro, haya supuesto un cambio
deletéreo, sino al contrario, una nueva arma con la que
enfrentarse al rigor de la selección natural.
Hay que tener en cuenta que la hipertrofia e hiperplasia
del cerebro no siempre da lugar a individuos sanos, ni siquiera
viables: el aumento del tamaño del cerebro, la
megalencefalia, puede ser patológica. De hecho, hay diversos
tipos de megalencefalia descritos en patología médica,
y todos ellos están categorizados como enfermedad (por
casualidad he encontrado recientemente un artículo que hacer
referencia precisamente a ésto, y cuya referencia es: Bruner
E. et al. Functional craniology and brain evolution: from
paleontology to biomedicine. Frontiers in Neuroanatomy 2014;
online).
El aumento del volumen ocupado por la caja craneana no
ha ido paralelo al aumento del número de neuronas del
cerebro, como recuerda Mora en su libro Continuum ¿cómo
funciona el cerebro? Las neuronas han aumentado a mayor ritmo que
el volumen craneal, de modo que ha sido la aparición de las
circunvoluciones cerebrales (más superficie de corteza en el
mismo volumen) lo que ha hecho posible la viabilidad del
cráneo humano a pesar de haber habido un mayor aumento de
neuronas que de capacidad craneal a lo largo de la evolución
de la especie.
Cambio de escala y
emergencia
¿Qué es medir?
El objetivo de la física (de los físicos) es
medir. Medir es averiguar la magnitud del cambio de estado en un
sistema, de acuerdo con algún parámetro, tras la
interacción de los elementos del sistema. Medir es comparar
una cantidad con otra de referencia.
¿Cómo se mide?
Se toman cantidades de referencia suficientemente fijas
en cierta escala, de manera arbitraria, como el metro, o el
segundo. Dichas cantidades son imperfectas, pero, en la escala en
la que son consideradas las cantidades de referencia para una
medición dada, el error en la medición por dicha
imperfección es despreciable. Por ejemplo: si se dice que
una persona es baja a simple vista (a escala macroscópica
confinada), en comparación con la estatura media del grupo
estimada objetivamente a simple vista, no se estará
ajustando o aproximando la medición al milímetro,
así que un error de un milímetro sería
despreciable en esta medición a simple vista. Ésto
quiere decir que si a simple vista se observara que dos
individuos miden lo mismo, aunque su estatura difiriese en una
décima de milímetro, a simple vista no se daría
uno cuenta, ya que a simple vista no se afina hasta la
décima de milímetro, de modo que tal error en la
determinación de esa igualdad sería despreciable a
simple vista en la práctica.
Si su estatura difiriese en una millonésima de
milímetro el error sería más despreciable aun en
esta medición a simple vista. Por tanto, al medir es
importante la escala de medición, pues en función de la
escala varía la resolución del sistema de medida (el
mayor o menor grado de visión microscópica o
macroscópica que se alcance) y de ahí el resultado
obtenido (y por tanto la posible interpretación de lo que se
observa: si no se ve algo no se puede percibir, y si se ve
borroso se percibirá borroso, por ejemplo, se percibirá
un todo, y no partes, rojez, y no neuronas, yo consciente, y no
potenciales de acción).
¿Qué es una escala?
Un objeto es lo que un observador determina como objeto.
Determinar es ubicar algo en el espaciotiempo, o sea, otorgar
unas magnitudes definidas a un fenómeno dentro de unos
parámetros físicos dados. La magnitud es el nivel
alcanzado en una escala.
El parámetro es el tipo de sistema usado como
soporte para la unidad (por ejemplo, un parámetro es el
espacio, y una unidad el metro).
La escala es el sistema de medida, una cantidad de un
fenómeno físico dado, dividida en una escala, una
escalera, un número de peldaños o partes iguales,
siendo cada parte la unidad.
La unidad es una cantidad dada (fija y elemental en una
escala dada), que se toma como referencia para medir un
fenómeno compatible con dicha escala de medición, por
ejemplo, la distancia en centímetros entre dos puntos es
compatible con la longitud de una cinta métrica dividida en
centímetros, así que una cinta métrica sirve para
medir dicha distancia.
La magnitud es el número de unidades que el
fenómeno alcanza en la escala. ¿Es importante la escala
empleada en una medición? Según Niels Bohr, los
sistemas macroscópicos no pueden considerarse de igual modo
que los microscópicos. La escala de medida es importante en
un proceso de medición, en el resultado de la medición,
pues el resultado cambia según la escala usada. Por ejemplo,
si se pasa de un punto de vista microscópico (imperceptible
a simple vista por su pequeñez relativa) a uno
macroscópico (perceptible a simple vista por su tamaño
compatible con la vista) se producirá un cambio en la
percepción (interpretación) de la realidad, se
contemplará una realidad distinta, aun siendo la misma. De
cerca, un avión a reacción parecerá que vuela
deprisa, de lejos, el mismo avión, a la misma velocidad,
parecerá que vuela despacio.
Así mismo, es importante, cuando se produce, el
confinamiento de dicho proceso de percepción en una escala
dada. Por ejemplo, si uno observa de cerca (a pequeña
escala) una pantalla con pixels, sólo verá pixels, pero
si cambia a una escala mayor, por ejemplo, si uno se aleja de la
pantalla para contemplar de lejos y como un todo un número
suficiente de pixels, podrá pasar de percibir pixels a
percibir una figura representada por esa masa organizada de
pixels, como pudiera ser la imagen de un rostro. Y si uno se
confina en esa escala mayor, si deja de ser posible percibir
pixels individuales por falta de resolución visual al estar
demasiado lejos, percibirá ya solo el rostro (a pesar de que
lo que uno está viendo son pixels, de hecho), quedando en
ese momento fuera de la percepción (de la medición a
escala macroscópica) los pixels individuales (que incluso
parecerá que no están ahí).
¿Qué ocurre al cambiar de escala?
Con el cambio de escala un rostro recreado por unos
pixels suficientemente complejos en cuanto a cantidad de pixels y
organización u ordenación (estructura interna o forma
en que se sitúan unos respecto de otros, o forma en que
interaccionan) parecerá que "emerge" en la
pantalla.
¿Tienen que ver la escala de medición y la
resolución del sistema que mide?
Aunque a simple vista el pensamiento da la
impresión de ser instantáneo, en realidad no lo es,
lleva un tiempo pensar (a simple vista quiere decir a escala
macroscópica confinada; confinada quiere decir que a simple
vista no se puede percibir lo microscópico, por ejemplo, a
simple vista uno percibe el agua como una masa de agua continua,
no como lo que es, una multiplicidad de moléculas de H2O
discontinuas entre sí). A simple vista se discrimina hasta
las décimas de segundo (aproximadamente), mientras que los
nervios que llevan a cabo esa operación, para conducir
impulsos a lo largo de los axones (y también a lo largo y
ancho de somas y dendritas, se sobreentiende) deben protagonizar
acontecimientos fisiológicos encuadrados en el rango de las
milésimas de segundo (milisegundos o ms) para ser efectivos
(son detectables como tales en esa escala).
Por dicha rapidez de los fenómenos
microscópicos, que ocurren en la escala de los milisegundos,
no son discriminables a simple vista (a escala macroscópica
confinada), por la falta de resolución a dicha escala
macroscópica. En la escala macroscópica la
percepción consciente queda atrapada o confinada, mediante
ese cambio de escala que incluye el confinamiento en dicha
escala, de tal manera que sólo se percibe lo
macroscópico, no lo microscópico. Por el cambio de
escala y el confinamiento se pasa de detectar acontecimientos
medibles en el rango de los milisegundos a detectar
acontecimientos perceptibles o medibles mediante la
percepción sólo en el rango de las décimas de
segundo (más o menos), por lo que su detección objetiva
sólo es posible o queda confinada en dicho rango a simple
vista.
Además, este confinamiento supone que la
percepción no parezca actividad neural desde un punto de
vista macroscópico, sino percepción, y como la
actividad neural no se percibe como tal, la percepción
subjetiva es patente con el aspecto de un fenómeno
emergente, el de un yo consciente, por ejemplo, o en forma de la
percepción de agua, no de moléculas de agua, o en forma
de la percepción de una bola de billar roja, no de las
partes que la componen (brillo, color, forma, movimiento, etc.),
o en forma de bola de billar roja, no de las neuronas
correlativas que la recrean, todo ésto dependiendo del punto
de vista desde el que se quiera considerar la
cuestión.
¿Son detectables en una misma escala la secreción
de una molécula de neurotransmisor y la descarga de un
potencial de acción?
Con cada potencial de acción se secretan a la
hendidura sináptica numerosas moléculas de
neurotransmisor. Pero la descarga de neurotransmisor ocurre en la
escala de las millonésimas de segundo. Una molécula de
neurotransmisor puede variar su trayectoria tal vez unos cien
millones de veces por segundo en la hendidura sináptica, si
es correcta la comprensión del movimiento browniano
(movimiento de partículas microscópicas en un fluido
explicada por la interacción molecular) por parte de Guyton,
que si no recuerdo mal es quien aporta esta cifra (en su Tratado
de Fisiología médica). En cambio, el potencial de
acción se verifica, a efectos de su detectabilidad, es
decir, de su efectividad o patencia como ente real a determinada
escala, en milésimas de segundo.
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