- Resumen
Niños Institucionalizados
Zooterapia
Discusión
Conclusiones
Referencias Bibliográficas
Anexos
RESUMEN
Esta investigación bibliográfica da
cuenta de diversos estudios realizados acerca de las
consecuencias de la institucionalización, las
características de los centros de protección simple
de nuestro país y las características
socioemocionales y conductuales de los niños
institucionalizados.
Por otra parte, se da a conocer el trabajo
realizado en zooterapia, como un método
alternativo y complementario de las terapias tradicionales,
abarcando sus modalidades principales, sus beneficios,
indicaciones y contraindicaciones.
Finalmente se realiza una propuesta de trabajo con
animales, en
las diferentes instituciones
de protección simple, argumentando la importancia del
acceso de los niños institucionalizados a este tipo de
terapia.
1.
INTRODUCCIÓN
La institucionalización es considerada una gran
fuente de estímulos estresantes para los niños, la
cual interfiere en su desarrollo
normal y genera importantes alteraciones en su personalidad y
autoestima
(Nordys, 2006)
En las instituciones de protección simple de
nuestro país, se abordan fundamentalmente las
problemáticas relacionadas con el desarrollo e integración normal de los niños en
su grupo
familiar. Dichas problemáticas representan un daño
psicosocial no sólo para sus familias, sino que
también para los menores, que en caso de no ser atendidos
adecuadamente, prologan su situación problema en otras
áreas de su desarrollo.
Las edades de los niños atendidos en los sistemas de
protección simple fluctúan entre los 6 y 15
años, sin embargo el 40% de la población se encuentra en el rango de 11 y
15 años de edad.
Las principales causales de ingreso a estos hogares se
deben en un 50 % de los casos al abandono paterno o materno y la
orfandad materna. El peligro físico y moral y el
problema socioeconómico constituyen un 14% del total de
los casos. El 35% de lo menores han ingresados por abandono
paterno o problema socioeconómico. Los casos de orfandad
total son mínimos en el sistema.
Asimismo se ha demostrado que la permanencia de los
menores en los diversos centros de protección simple en
Chile, es mayor a lo esperado. El 38% de estos niños
permanece en el sistema más de dos años y casi el
70% de ellos lo hace por más de cinco años. Dichas
cifras lamentablemente han ido aumentando en el último
tiempo
(Sename, 1990)
Según lo señalado por Cortes (1988), los
niños internos son por lo general caracterizados como
emocionalmente alejados y aislados, con aire de frialdad
e incapacidad para mostrar calidez y afecto sincero, o para hacer
amigos de una manera afectuosa. Además presentan una baja
tolerancia a
la frustración y una importante incapacidad de manejar
emociones, lo
cual permite vislumbrar cómo el abandono y la
institucionalización genera un fuerte impacto en la esfera
emocional, afectiva y social del menor.
Tras indagar en el tema y las diversas terapias
aplicadas a estos niños, es preocupante observar que
habitualmente en estos centros, los recursos
humanos para brindar una atención óptima y efectiva, no son
suficientes. Las terapias psicológicas individuales son
escasas y se prioriza el desarrollo de talleres a nivel grupal,
en que se asegura la participación de todos los
niños internos.
Por otro lado, tras esta investigación se ha
observado que no existen estudios a nivel nacional de terapias
asistidas con animales, en dichas instituciones. Sin embargo,
mundialmente se han demostrado los innumerables beneficios que la
zooterapia tiene en niños, jóvenes o ancianos con
discapacidad,
tanto física
como psíquica. Destacándose entre sus beneficios
terapéuticos el alargar la expectativa de vida, reducir el
estrés y
la presión
sanguínea, aumentar los niveles de autoestima, popularidad
y competencia
social. Además presenta ventajas en niños con
trastornos emocionales, jóvenes delincuentes, niños
autistas o alumnos con necesidades educativas
especiales.
Algunos animales ayudan a mejorar enfermedades, lo cual
permitió el origen de instituciones destinadas a visitar
hospitales y asilos de ancianos, con el objetivo que
el enfermo se sienta mejor, mitigando su sentimiento de soledad,
entregando un estímulo para salir de su aislamiento y
restableciendo las relaciones entre ellos. Asimismo, son un
excelente estímulo para el ejercicio y el movimiento,
logrando que su estado de
salud
físico y emocional mejore en distintos
aspectos.
En los últimos años, se han intensificado
los programas con
participación de animales en las terapias tradicionales,
ya que sus efectos positivos ayudan a los pacientes a recuperarse
de estados depresivos. Se ha constatado además, tras
diversas investigaciones
que las personas que viven solas y que poseen una mascota les
resulta más fácil establecer y, por consiguiente,
cimentar nuevas relaciones, demostrando beneficios
psicológicos, fisiológicos y sociales.
En Chile, hay pocas instituciones trabajando en el
área de la zooterapia. Existen Algunos proyectos de
Delfinoterapia, dos o tres agrupaciones de Hipoterapia y unas
cuantas de visitas a centros de rehabilitación.
Por lo tanto, la presente investigación es el
fruto de la inquietud por dar a conocer las
características fundamentales de la zooterapia y dilucidar
su utilidad en las
intervenciones realizadas a los niños de hogares de
protección simple en nuestro país.
Para esto se detalla el origen, los beneficios, las
indicaciones, contraindicaciones y efectos que esta terapia
brinda a los seres humanos. Además de describir la
institucionalización y sus características en los
hogares de protección simple de Chile, para finalmente
caracterizar psicoemocional y conductualmente a los niños
institucionalizados.
- Por último, se realiza una propuesta de
trabajo con animales en los centros de protección
simple de nuestro país, argumentando los beneficios
que implicaría esta terapia y el aporte que
significaría para las intervenciones
psicológicas realizadas en estos centros, con el fin
de mejorar sentimientos, síntomas y conductas
presentados por los niños institucionalizados, como
consecuencia de su deficiente estimulación social y
afectiva.
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