Tigres
Asiáticos
Varios son los países de Asia que han
desarrollado vertiginosamente en los últimos años.
Gracias a políticas
económicas, administrativas y gubernamentales estos
países han cambiado paradigmas
mundiales, en razón de que han llegado a casi todos los
confines del orbe con sus productos,
basados en un proceso
industrial a menor costo para el
público y con calidad, dentro
de un contexto de productividad.
A continuación algunos de estos países
asiáticos, denominados mundialmente como "Tigres de
Asia".
Hong Kong
Hong Kong abraza la nueva economía Tess White.
En menos de un año, la economía de Hong Kong ha
trasladado su atención de las empresas llamadas
"the bricks and mortar" que durante muchos años han
dominado el índice bursátil Hang Seng, a las de
nuevas
tecnologías y las punto.com. Antes de que la crisis
financiera asiática hiciera caer los precios de la
propiedad
inmobiliaria más de un 50%, los inversores especulaban en
el mercado
inmobiliario local. Hasta hace poco, los inversores hongkoneses
estaban satisfechos haciendo lo mismo con las nuevas iniciativas
en Internet.
La crisis global de los valores
tecnológicos ha rebajado el entusiasmo local por este tipo
de acciones, pero
la urgencia especulativa se mantiene intacta y dispuesta a
trasladarse a cualquier nuevo espacio que se abra. El sector
privado está llevando Hong Kong a la cabeza de la nueva
economía en Asia. Por ejemplo, ya hoy, Hong Kong es el
centro de las telecomunicaciones del Asia Pacífico, con
3,9 millones de líneas telefónicas y 3,9 millones
de usuarios de teléfono móvil –había 2,9
millones en 1999!– en una población de 7 millones. Aunque se
congratule de especular con las perspectivas de futuro, Hong Kong
sigue sacando partido a su riqueza siendo un líder
mundial de la "vieja economía". Las cifras de la
Organización Mundial del Comercio de
1999 sitúan Hong Kong como la décima potencia
comercial mundial con unas importaciones y
exportaciones
totales por valor de
365,500 millones de dólares. También es el onceavo
exportador mundial y el noveno mayor importador, con el flujo de
mercancías que entran y salen de China por Hong
Kong. Hong Kong mejoró las cifras de exportación –un aumento del 20,7 % en el
primer trimestre-hecho, que le ha permitido retomar su preciado
título de puerto de mayor movimiento de
contenedores del mundo. Hong Kong también es un poderoso
centro financiero, con la segunda mayor bolsa de Asia y la
décima del mundo. Hong Kong es la mayor fuente de inversión
extranjera en China y el puesto comercial más
importante puesto que maneja el 40% del comercio exterior
de la República Popular. Al mismo tiempo, China
es el segundo principal inversor exterior en Hong
Kong.
Hong Kong ha dejado tras de sí la crisis
financiera asiática registrando un espectacular
crecimiento del 14,3% del PIB, en el
primer trimestre de este 2000. Los analistas económicos
afirman que con la subida de tipos de interés
tal crecimiento no es sostenible, a pesar de lo cual el gobierno ha
revisado al alza sus previsiones de crecimiento anual
situándolas en el 6% en lugar del 5%. El PIB per
cápita previsto para el 2000 es de 23.530 dólares,
por debajo del anterior a la crisis de 26.103 dólares
–que era superior al de la antigua potencia colonial, el Reino
Unido.
En un territorio donde se rehusa, una y otra vez,
legislar un salario
mínimo, la distancia entre ricos y pobres es notoriamente
amplia. Algunos economistas advierten que el desempleo y las
diferencias de riqueza crecerán mientras Hong Kong
reestructura su economía. El amplio sector de trabajadores
no cualificados no encontrará empleo en el
mercado laboral de la
nueva economía. "Make Money" Hong Kong valora su
reputación como uno de los primeros lugares del mundo para
hacer dinero casi
tanto como hacer dinero en sí.
Con una superficie de menos de 1.100 km2 y sin recursos
naturales, Hong Kong y sus 7 millones de habitantes viven en
función
de esa reputación. Naturalmente, la situación
geográfica inmejorable de Hong Kong en el umbral de
entrada a China también es clave para su éxito.
El gobierno de Hong Kong ha decidido basar sus esperanzas de
futuro en la revitalización de los sectores
turístico, financiero y tecnológico.
Para impulsar los negocios
basados en ideas relacionadas con las nuevas tecnologías,
el gobierno ha establecido un Fondo para la Innovación y la Tecnología dotado con
640 millones de dólares. Ha escogido las
tecnologías de la información como una sector clave a
desarrollar, pero tampoco ha podido evitar la controversia. En
marzo de 1999, el gobierno otorgó un proyecto
inmobiliario vinculado a las industrias de
nuevas tecnologías –Cyberport–, 1,6 miliardos de
dólares, a una empresa
privada controlada por el Richard Li, el hijo del multimillonario
Li Ka-shing. El lucrativo complejo inmobiliario en la costa oeste
de Hong Kong fue otorgado sin concurso público. La
guerra
empresarial se vio perjudicada por las acusaciones de que algunas
personas influyentes en el seno de los gobiernos de China y de
Hong Kong, se aliaron con algunos altos directivos de Hong Kong
Telecom para mantener la empresa en
manos del capital local.
El gobierno de Singapur es propietario del 76% de SingTel. "Si
usted compara Hong Kong con el resto de Asia, sigue siendo
todavía un lugar mucho mejor que cualquier otro para hacer
negocios", afirma Chan. "Los hongkoneses son mucho más
emprendedores y proclives a los negocios que incluso en
Singapur".
Hong Kong se mantiene como la "economía
más libre del mundo" según el índice anual
de la Heritage Foundation, un Think tank conservador de los
Estados
Unidos, y el
periódico The Wall Street Journal. También
comparte el número uno del ranking con Singapur en un
estudio similar del norteamericano Cato Institute y el canadiense
Fraser Institute. La página web
del gobierno de Hong Kong sobre cómo hacer negocios afirma
con orgullo que es el "portal de la economía más
libre del mundo". Obviamente, Hong Kong disfruta de su
reputación como dinamizador de negocios ganada a pulso.
Simplemente deberá seguir trabajando duramente para
mantenerla.
Taiwán
Taiwán, un mercado tan interesante como poco
conocido José Luis García-Tapia, director de la
Cámara de
Comercio Española de Taipei, expone los atractivos de
un mercado desarrollado con buenas perspectivas de futuro que
todavía genera un inmerecido desinterés por parte
de las empresas españolas. La economía de
Taiwán ha mantenido elevadas tasas de crecimiento a lo
largo de los últimos años, no viéndose tan
afectada por la crisis financiera que ha castigado a Asia en los
últimos años. Esto le ha permitido llegar a los
13.203 dólares de renta per cápita,
acercándose a cifras similares a las de España
y muy por encima de países vecinos tales como Corea
del Sur (8.674), Malasia (3.255), Tailandia (2.292), o la
República Popular China (790).
La taiwanesa es una de las economías con mayor
apertura al exterior. En 1.999 importó por valor de
110.000 millones de US$, una cifra superior a la de España
(105.000 millones de US$) y a la de países como Singapur
(101.000 millones de US$), Malasia (63.000 millones de US$) y
Tailandia (49.000 millones de US$). Por el lado de las
exportaciones también ocupa un lugar preeminente,
alcanzando los 119.600 millones de US$ en 1.999, también
por encima de los países anteriormente mencionados.
Taiwán ha llevado a cabo una transformación en sus
exportaciones: ha pasado de producir y exportar
productos
intensivos en mano de obra a especializarse en aquellos
intensivos en capital. Este cambio se ha
visto obligado, en cierta parte, por el crecimiento exponencial
que han sufrido los costes laborales y de la tierra en
la isla. De ahí la constante y continua
deslocalización industrial a China continental. El
tipo de cambio
del Nuevo Dólar de Taiwán (NT$) se ha mantenido
relativamente estable en los últimos años. La
autoridad
monetaria ha actuado de forma inmediata cuando se han producido
tensiones de apreciación de la moneda, para evitar que el
sector exportador se viera perjudicado.
Los principales mercados de
exportación son los Estados Unidos y la República
Popular China (a través de Hong Kong), con 30.800 y 26.000
millones de US$ respectivamente. Muy por detrás se
encuentran la Unión
Europea (19.000 millones de US$), Japón
(11.900 millones de US$) y los países de la ASEAN (12.200
millones de US$). Las partidas de exportación más
importantes pertenecen a productos electrónicos y de las
tecnologías de la información. Otras partidas que
cabe destacar son los productos textiles y del metal.
Japón y Estados Unidos son los principales proveedores
taiwaneses con 30.500 y 19.600 millones de US$ respectivamente,
seguidos muy de cerca por los países ASEAN con 18.500
millones de US$ en su conjunto. Los productos electrónicos
son la primera partida de importación, copando con más del 17%
de las mismas, seguidos por "Maquinaria" y "Productos
químicos". Unas relaciones bilaterales favorables a
Taipei.
Las relaciones comerciales entre España y
Taiwán se caracterizan por un claro desequilibrio a favor
de la economía asiática, el cual se ha ido
acentuado en los últimos años, pasando de un saldo
negativo de 244 millones de US$ en 1.996 a 496 millones en 1.999.
Hay muy pocas empresas españolas establecidas en
Taiwán así como poco interés por participar
en ferias y misiones comerciales. Las principales partidas de
exportación españolas a la isla son "Productos
químicos orgánicos" y "Maquinaria para preparar
fibras textiles", seguidos por "Maquinaria eléctrica" y
"Productos cerámicos". En lo que se refiere a las
importaciones, "Máquinas
automáticas de procesamiento de
datos y sus partes" y "Maquinaria y equipamientos
electrónicos" se llevan la palma, seguidos de "Hierro y
acero" y
"Vehículos distintos a los ferroviarios". Un mercado
desarrollado Taiwán es la decimocuarta potencia comercial
mundial –España es la decimoquinta– y la decimoctava
economía
mundial. Posee una densidad de
población de 607 habitantes por km2 –la segunda mayor del
mundo–. Como dato significativo se puede mencionar que en
Taiwán existen 420 vehículos por km2, el doble que
en Japón y 20 veces más que en Estados Unidos. Hay
que señalar que se está observando un efecto de
emulación del mercado taiwanés por parte de la
República Popular China.
En muchos ámbitos, la China continental reproduce
los hábitos de consumo, modas
y tendencias que se producen en Taiwan, del mismo modo que en
Taiwán se imitan los existentes en Japón. Un claro
ejemplo de este fenómeno es el extraordinario aumento en
la demanda de
vino tinto que se ha producido en China continental en los
últimos 4 ó 5 años, siguiendo la
situación que se produjo en Taiwán unos años
antes. El cambio anteriormente mencionado de sectores con bajos
costes e intensivos en mano de obra a sectores intensivos en
capital (alta tecnología) ha conducido a que Taiwán
se convierta en el tercer fabricante de productos
electrónicos del mundo. Excelentes perspectivas A corto y
medio plazo se prevé que la economía taiwanesa
mantenga altas tasas de crecimiento conservando e incluso
aumentando su posición como una de las principales
potencias comerciales mundiales. Se espera una incesante
deslocalización industrial hacia la China continental y
otros países asiáticos en busca de bajos costes
laborales y de suelo.
A medida que vaya creciendo la renta per cápita
en esta economía, se irá produciendo un cambio en
el orden de preferencias de sus habitantes, una circunstancia que
provocará un incremento en la demanda de servicios
públicos: infraestructuras, comunicaciones
terrestres, urbanización, ecología, etc… Se
prevé que se produzca un desplazamiento de la demanda
hacia los productos "sociales", tales como las infraestructuras,
el cual conllevará un crecimiento en la demanda de todos
aquellos productos relacionados con instalaciones de agua,
comunicaciones terrestres, terminales de aeropuerto, etc. Otro
efecto a tener en cuenta es que el aumento en la renta
provocará un aumento directamente proporcional en el nivel
de consumo, generándose al mismo tiempo un mayor nivel de
exigencia sobre los productos y un incremento de la percepción
de la marca. Del mismo
modo hay que señalar que los productos de alta
tecnología, tales como los aeronáuticos y los de
seguridad,
seguirán siendo los más importantes en lo referente
a la producción y comercio de la isla. Las
empresas españolas deberían intensificar sus
esfuerzos en estos sectores para aprovecharse del aumento en la
demanda de dichos productos que se va a producir. Se prevé
que tanto la República Popular China como Taiwán
pasen a formar parte de la Organización Mundial del Comercio (OMC) a lo largo
del presente año. Esto provocará que se produzca
una mayor liberalización en el comercio al verse rebajadas
las barreras existentes hasta la fecha. Del mismo modo, se espera
que el comercio entre ambos lados del estrecho se vea muy
favorecido.
Singapur
Frente a una crisis asiática ocurrida en los
últimos años, solamente Singapur mantiene
serenamente su prestancia económica y su estabilidad
política,
pero indudablemente el volumen de
negocio se ve afectado por los problemas de
los vecinos. No se trata de caer en el alarmismo. No son tanto
los problemas del Sur como las grandes perspectivas de
crecimiento del Norte lo que puede contribuir a agrandar el
abismo entre unas economías y otras. El Norte de Asia
está montado en el desarrollo de
las nuevas tecnologías y a mayor tranquilidad
política y mejores pronósticos mayor inversión extranjera. Nuevos emprendedores
Porque es en Corea del Sur, Taiwán, Hong Kong, la propia
China, por descontado Japón, donde se detecta,
según afirmaba recientemente en las páginas de
International Herald Tribune el responsable de Credit Suisse para
Asia, Alex Widmer, una nueva clase de
jóvenes emprendedores que ganan mucho dinero muy
rápidamente, especialmente en los sectores de las
telecomunicaciones y las nuevas tecnologías de la
información. Ello coincide con un cambio generacional
evidente en la calle en todas las sociedades
asiáticas, con mayor o menor grado de desarrollo, ya se
trate de Japón o de Indonesia.
La cuestión es que si en Europa los
líderes de la nueva economía marcan su pertenencia
a esa nueva casta olvidándose la corbata en casa, en Asia
están acabando con las tradicionales prácticas
protocolarias que tantos dolores de cabeza han causado a los
empresarios occidentales cuando se ha tratado de firmar contratos. Se
trata de una generación que convive con comodidad con los
valores de sus
padres y con los de las universidades en las que han estudiado en
Estados Unidos o Europa. No son ajenas a este cambio de
mentalidad las mujeres, que se incorporan con más fuerza al
mundo profesional y a las responsabilidades directivas. Ello
tiene a su vez un efecto directo sobre el mercado y genera nuevas
oportunidades en sectores que el comprador masculino no
había pisado. La renovación generacional casa bien
con las reformas estructurales que Asia se ha visto obligada a
llevar a cabo a raíz de la crisis de 1997, que Robert J.
Samuelson califica en Newsweek de necesaria. En mayor o menor
medida, estas reformas, el desarrollo de las nuevas
tecnologías y los cambios de mentalidad en la sociedad
están dibujando un continente asiático que tras el
freno de la crisis reaparece, una vez más, preparado para
ofrecer grandes oportunidades de negocio.
Corea Del Sur
Corea del Sur vive una auténtica puesta en
cuestión del modelo
económico sobre el que se ha fundamentado el desarrollo de
este país durante décadas. El éxito
principal del actual presidente Kim Dae-jung, en la
liberalización emprendida en Corea del Sur tras la crisis
de 1997, se puede medir por el crecimiento del PIB en un 10,2%
durante 1999. La
Administración Kim intenta dar alas a la
economía manteniendo unos tipos de interés bajos.
Al mismo tiempo, persigue la contención de la divisa, el
Won, que tiende a crecer pero que de momento no pesa sobre una
economía fuertemente orientada a la exportación.
Pero retrocedamos un poco en el tiempo. Kim Dae-jung
asumió la presidencia en febrero de 1998 y sucedió
a Kim Young-sam, considerado responsable de no haber sabido
atajar la crisis. A los tres meses, Kim Dae-jung se vio forzado a
aceptar la ingestión de 60.000 millones de dólares
en préstamos del Fondo Monetario
Internacional para evitar la bancarrota. A cambio,
debía emprender la reestructuración de las grandes
e inviables corporaciones industriales, conocidas como "chaebol",
y del sistema
financiero.
La economía coreana está dominada por
estos "chaebol", grandes holdings que han sido los propietarios
de la práctica totalidad de los sectores industrial y
financiero. Las cinco principales corporaciones: Hyundai,
Samsung, LG, Daewoo y SK Group– aportan con sus ventas la
mitad del PIB de Corea del Sur. Bajo la dirección del gobierno y las exigencias del
FMI, los
chaebol debían concentrar su actividad en un sector –la
mayoría tenía inversiones en
más de diez–, aplicar mayor transparencia en su gestión
–eliminar los trucos contables con los que enmascaraban sus
pérdidas– y facilitar la entrada de capital extranjero.
El gobierno también se propuso reforzar el papel de las
pymes en la
generación de riqueza porque, aunque representan el 96% de
las empresas del país, hasta hoy también han
dependido principalmente de los grandes consorcios a los que
sirven de proveedores. La inyección de dinero
público y los esfuerzos del gobierno en estimular la
economía han dado sus frutos. Los resultados son
indiscutibles. El PIB creció un 13,5% en el periodo de
octubre a diciembre del 1999, el mayor aumento trimestral en los
últimos doce años. El paro ha bajado
considerablemente, en agosto de 1999, la tasa estaba en el 5,7%,
tres puntos por debajo de las cifras de febrero (8,6%). Pero esta
recuperación, por vertiginosa, puede tener consecuencias
negativas.
El crecimiento
económico ha dado un balón de oxígeno
a los chaebol, que en esta coyuntura no se sienten tan apremiados
para completar las reformas. La buena marcha de la
economía les ha dado una coartada perfecta para retrasar
las medidas más penosas, como el cierre de filiales.
Aunque la receta más amarga para estos gigantes es la
apertura del mercado y la entrada de empresas y capital
extranjero. Si no se profundiza en las reformas, la
recuperación puede no ser más que un espejismo de
crecimiento a corto plazo que dé paso a nuevas crisis. Por
ello, el gobierno no ha dejado de enviar claros mensajes a los
chaebol en el sentido de que no se pueden permitir ignorar la
necesidad de reestructurarse. Unos mensajes que ha reforzado con
acciones legales ante las irregularidades de sus gestores. En
esta coyuntura, el presidente Kim Dae-jung se ha visto obligado a
enfrentarse a las urnas. Se quiera o no, estas elecciones se han
convertido en un auténtico referéndum sobre
el estado y el
curso de las reformas. Kim, de 74 años, desea ver un apoyo
mayoritario a su Partido Democrático del Milenio (PDM)
para poder asegurar
la liberalización en los tres años de mandato que
le quedan.
Actualmente, el PDM solamente dispone de una tercera
parte de los 299 escaños de que se compone el parlamento
de Seúl. En la nueva legislatura
serán 273. A pesar de que el 72% de los surcoreanos valora
positivamente la destreza del presidente para levantar la
economía, los analistas dudan que consiga una
mayoría suficiente para no depender de apoyos
parlamentarios. Estos podrían provenir de dos
pequeños grupos o de
diputados desencantados de la principal formación
opositora, el conservador Gran Partido Nacional (GPN). Si en
febrero el gobierno de Kim Dae-jung veía como se marchaba
de la coalición la también conservadora
Unión Liberal Demócrata, la oposición se
sumía en la división entre facciones. Dirigentes
del Gran Partido Nacional desertaban por haber sido excluidos de
las listas electorales para formar un nuevo partido. Así,
el voto de centroderecha puede dividirse entre el GPN, sus
escindidos y la pequeña Unió Liberal
Demócrata.
La oposición concentra sus críticas a la
gestión de Kim Dae-jung en el terreno económico
porque, dice el GPN, que a pesar del fastuoso crecimiento del
PIB, la recuperación no es profunda. Aduce que ello no ha
conllevado una reducción significativa del paro, que la
distancia entre ricos y pobres aumenta, y que la deuda es enorme.
De todas formas, la cita electoral no parece haber perturbado
particularmente el curso de las reformas ni tan siquiera ante la
firme oposición sindical a la venta de Daewoo,
a pesar de que la clase trabajadora es la que llevó a la
presidencia a Kim Dae-jung. Estas también son las
elecciones de Internet en un país que tiene uno de los
mayores índices del mundo de usuarios de la red. Todos los partidos han
presentado sus webs pero este nuevo medio de comunicación ha ofrecido una plataforma
idónea para una de las novedades más significativas
en la política surcoreana, la Alianza Ciudadana para las
Elecciones del 2000. Esta organización de base, que cuenta
con unos 500.000 miembros comunicados entre sí por
Internet, intenta llevar a cabo una auténtica auditoría depuradora de los hábitos
corruptos de la política tradicional. Una sociedad en
ebullición que está empezando a forzar una
modificación de la práctica política y que
monta al galope en Internet, da signos
inequívocos de su voluntad de abrirse al mundo, una
predisposición que no debería escapar a la
sensibilidad de aquellas empresas que estudien mercados para su
internacionalización.
Japón Y Los Otros Tigres En La Economía
Actual
Japón ha sorprendido a propios y extraños
con un crecimiento del Producto
Interior Bruto del 1,9 % en el primer trimestre de este
año. Existen dos visiones claramente contrapuestas sobre
la verdadera firmeza o continuidad de esta buena noticia. Muchos
analistas sospechan que el gasto
público brutal y los incentivos
fiscales del gobierno de Keizo Obuchi generan un dato tan
positivo como poco representativo de la situación real de
la economía japonesa.
Fuentes financieras consultadas desconfían
particularmente de las posibilidades reales de Japón para
salir, en un plazo relativamente corto, de la recesión,
sobre todo por las características sociológicas
propias del archipiélago. El gobierno lleva diez
años intentando reactivar la economía, sin
éxito, bajando los tipos de interés y
añadiendo gasto público. "Es un problema
demográfico: a una población con una media de edad
muy alta no se le puede pedir los esfuerzos que puede asumir una
sociedad joven y dinámica como la de Corea del Sur,"
precisan estas mismas fuentes.
Para Javier Esparza, director general de Banco Bilbao
Vizcaya (BBV) para Asia-Pacífico, el crecimiento del PIB
japonés está avalado por el del consumo interno en
un 1.2 % y el de la inversión de las empresas en un 2.5 %.
"Todo ello induce a pensar en un cambio, en una vuelta a la
confianza del consumidor y del
inversor industrial. Si bien es cierto que es un proceso apoyado
por una fuerte inyección de capital y que habrá que
esperar a los resultados del segundo trimestre, el sistema
financiero se empieza a reestructurar con la garantía del
gobierno japonés de que no va a haber sobresaltos hasta el
2002; luego estamos en el buen camino."
Industria japonesa
Los productos japoneses, desde diminutos juegos
electrónicos hasta automóviles y enormes buques
petroleros, son mundialmente valorados por sus altos niveles de
calidad. Las empresas japonesas tienden a reinvertir una parte
sustancial de sus ventas en investigación, lo que favorece la
creación cada vez mayor de productos más eficientes
y avanzados. Esta imagen de
fabricación de microprocesadores
de la casa Fujitsu muestra algunos
de los modernos procesos que
se siguen en las fábricas japonesas de alta
tecnología.
Esparza también ve en una línea ascendente
Corea y Tailandia y, más alejados, Indonesia y Malasia.
Quizá la reforma bancaria y financiera en el complejo
entramado político económico tailandés sea
algo discutible pero los indicadores
dibujan un panorama optimista en el país que primero
sucumbió en 1997 y provocó la reacción en
cadena que llevo a la recesión a toda el área. El
gobierno de Bangkok prevé un crecimiento del 1% para este
año 1999, la moneda se mantiene estable desde hace meses
frente al dólar, la industria
automovilística ha registrado un salto en las
exportaciones del 80 % en abril, el capital extranjero vuelve a
los mercados.
Además de las dudas sobre la autenticidad de la
reforma bancaria, subsisten otros signos de preocupación,
principalmente las exportaciones que, a pesar de la buena noticia
en el sector del automóvil ya citada, en su conjunto no
remontan el vuelo.
James Rodríguez de Castro, director de Merrill Lynch en
Hong Kong, sí cree palpable y verdadera esta
recuperación: "un dato es clave, tomemos el caso de Corea
del Sur, una economía fuertemente exportadora, vuelven a
subir las ventas de coches. En Hong Kong, el mercado inmobiliario
está remontando porque, precisamente desde este centro
neurálgico, se ve una recuperación y se reafirma la
confianza en China. El consumo está tardando
más."
Fuertes cambios económicos en nueva
ChinaChina se convirtió en un ejemplo exitoso del
desarrollo económico en el mundo puesto que
incrementó el tamaño de su economía en
más de 100 veces durante las décadas pasadas.
Como el país más poblado del mundo, China se
había rezagado mucho con respecto a los países
desarrollados en términos de poder económico,
antes de la fundación de la República Popular
China en 1949. En 1952, el producto nacional bruto (PNB) del
país era de sólo 67 mil 900 millones de yuanes.
Pero en el 2000, el PNB llegó a 8.9 billones de yuanes
(más de un billón de dólares usa),
colocándose en el número siete a nivel
mundial.Estadísticas oficiales muestran que la
economía de China ha presenciado un índice de
crecimiento anual promedio de 7.7 por ciento desde 1949.
Desde que China empezó a reformarse y abrirse al mundo
exterior hace dos décadas, la economía ha
estado
creciendo a un índice anual de 9.3 por ciento. El
director delBuró Nacional de Estadísticas dijo que el índice
de crecimiento fue tres veces mayor al de los países
en desarrollo promedio y cuatro veces mayor al de los
países desarrollados. Ese rápido crecimiento
económico ha ayudado a China a mantener una quinta
parte de la población mundial arropada y alimentada
apropiadamente. El número de gente que vive por debajo
de la línea de la pobreza se
ha reducido de 250 millones a 30 millones en
China.El rápido crecimiento de la economía de China también ha
ayudado a ampliar los vínculos del país con el
mundo, añadiendo nuevo vigor a la economía
mundial. Nicholas H. Stern, vicepresidente superior y
economista en jefe del Banco
Mundial, dijo que la meta
mundial de disminuir la pobreza
será imposible de alcanzar si China y otros grandes
países en desarrollo no logran mantener el
rápido crecimiento económico. Mike Moore,
director general de la Organización Mundial de Comercio (OMC),
dijo que sin la integración de China, la OMC no
estará completa.En la década de los 90, China mantuvo
exitosamente la estabilidad social en el proceso del
rápido crecimiento económico cuando la ex
Unión Soviética se desintegró y tuvieron
lugar cambios dramáticos en Europa Oriental. De
acuerdo con el economista chino Hu Angang, la estabilidad de
China está bien fundamentada porque el crecimiento
económico ha generado beneficios a la gente
común y China está abierta a la introducción de todos los logros
avanzados de la civilización humana. Durante las
últimas décadas, China se ha dedicado
incansablemente a reformar y adaptar su sistema
económico a la situación práctica del
país. Su expedición a una economía de
mercado bajo el sistema socialista ha atraído la
atención mundial.China ha elegido un camino práctico para
llevar a cabo la transformación sin precedentes de una
economía planificada a una economía de mercado.
La introducción del sistema de responsabilidades
contraídas basado en las familias en las áreas
rurales, el sistema de seguridad
social y el sistema de mercado, todos ellos se han
convertido en trampolines para China en este curso de
reforma. Como China profundizó aún más
la reforma y se abrió más ampliamente al mundo
exterior, bastantes cosas que serían inimaginables
hace dos décadas han surgido en China, tales como las
empresas conjuntas chino-extranjeras, subastas de tierras,
bolsas de valores y compañías cotizadas en la
bolsa.Durante las dos décadas pasadas, la propiedad
de televisores había aumentado de 0.6 por cada 100
hogares a 116.6 por cada 100 hogares en las ciudades.
Más de un millón de familias chinas han
comprado autos, los
cuales eran considerados como lujos exclusivos para los
funcionarios gubernamentales. Los chinos comunes están
disfrutando de mayor espacio para la libertad
puesto que Internet y los modernos instrumentos de
telecomunicaciones han penetrado en todos los aspectos de sus
vidas.Actualmente, China se ha convertido en el mayor
productor de acero, carbón, cemento,
cereal, carne y algodón en el mundo. Está
ubicada entre las diez primeras naciones comerciales y como
el segundo mayor destino de la inversión externa
directa en el mundo. La moneda china, el renminbi,
permaneció estable durante la crisis financiera
asiática, gracias a la reserva de divisas de
165 mil 600 millones de dólares usa del país.
Los economistas locales dijeron que el crecimiento milagroso
en la potencia económica se debió al liderazgo
del Partido Comunista de China (PCCh), que se ha estado
enfocando en el logro de la independencia, liberalización,
rejuvenecimiento y prosperidad de la nación y en la mejora de los beneficios
para la población.En las próximas cinco décadas, China
continuará explorando nuevos horizontes en su desarrollo
económico. La conclusión de la Presa de las
Tres Gargantas y de la vía férrea
Qinghai-Tíbet se convertirán en los hitos de la
campaña del país para convertirse en un
país desarrollado moderadamente. El PCCh, que
surgió cuando China fue abrumada por varios desastres
hace 80 años, continuará encabezando a China
hacia el logro de la prosperidad. La experiencia de los
últimos 80 años demuestra que el PCCh siempre
representa firmemente las necesidades de desarrollo de las
fuerzas productivas sociales avanzadas de China.
Continuará dirigiendo a la población de China
para construir un país socialista fuerte, moderno, de
prosperidad, democracia
y civilización.Los tigres del Asia se devoran a los
EE.UULas automotrices estadounidenses pierden poco a poco
la batalla en el mercado de su propio país, frente a
las marcas
asiáticas. Son numerosos los dichos que se puede
aplicar a la situación que vive el sector del
automóvil en los Estados Unidos pero quizás
este es el que mejor describe el momento por el que pasan las
marcas japonesas. En un período en el que los
principales fabricantes estadounidenses están sumidos
en graves crisis y pierden cada día clientes
en su mercado doméstico a favor de los productores
asiáticos, Honda acaba de anunciar nuevas inversiones
que harán la vida más difícil a General
Motors (GM), Ford y Chrysler. Honda construirá una
nueva planta de montaje de vehículos en los EEUU para
aumentar en 200 mil unidades al año su
producción hacia 2008, a la vez que
incrementará la manufacturación de componentes
(motores,
transmisiones, etc.) en los Estados Unidos y
Canadá.Para 2008, General Motors quiere tener completa su
reducción de plantilla, 30 mil trabajadores menos en
Norteamérica, y cerradas cuatro plantas de
montaje, lo que significará la reducción en 1
millón de vehículos su producción. En
ese año, si se materializan los planes delineados por
GM, el fabricante producirá, en Norteamérica,
4,2 millones de vehículos, 30% menos que en 2002. Ford
también ha fijado a 2008 como la fecha en la que
empezará a ganar dinero con sus operaciones
en Norteamérica gracias a una profunda
reestructuración que incluye la eliminación de
30 mil puestos de trabajo,
el cierre de 14 fábricas y la reducción de la
construcción de
vehículos.En 2008, Ford producirá en
Norteamérica 1,2 millones de vehículos menos
que en 2005. Por contra, ese mismo año -con la puesta
en marcha de la factoría anunciada- Honda
fabricará 1,6 millones de unidades, el doble que sus
ventas en los EEUU en 1996. Además, la multinacional
nipona quiere vender 100 mil unidades en los EEUU, la mitad
de la producción de un nuevo híbrido. Toyota
también tiene un claro plan de
inversiones para aumentar su producción y ventas en
los EEUU a un ritmo del 10% anual durante los próximos
años. Y lo mismo se puede decir de otros fabricantes
como Hyundai/Kia y la nipona Nissan.China buscara la
unificación de los Tigres de Asia- Mientras occidente se desgasta; china se
levanta - Inventaron el papel, la imprenta, la
brújula y la pólvora. Casi
podría decirse que, con sus creaciones, los chinos
alumbraron la documentación y los libros, le
dieron sentido a los viajes y
materia a
las explosiones de júbilo y a los modos más
sofisticados de la guerra. Mucho después, y pasado el
fulgor de una revolución histórica, inventaron
la economía social de mercado, una fórmula poco
ortodoxa con resultados extraordinarios. Hoy la economía
china es objeto de análisis en el mundo y las cifras de sus
intercambios comerciales y de su crecimiento industrial son el
termómetro del planeta. - Con una población total que este año
araña los 1.300 millones de habitantes, en los
últimos tiempos China generó unos 250 millones de
grandes consumidores, entre sus excéntricos millonarios
y los miembros de una nueva clase media que está
cambiando su carnet de afiliado al Partido Comunista por una
reluciente tarjeta de crédito. Luego del aislamiento provocado
por la revolución de Mao en 1949, el mundo tiene
curiosidad por ver el fenómeno de cerca. Los expertos
aseguran que, en menos de 10 años, China
desplazará a París como faro del turismo. Junto con esto,
la enorme e incipiente franja de consumidores chinos es a su
vez hoy el sector más viajero del mundo, con plata
fresca en el bolsillo y la avidez por conocer qué hay
del otro lado de la frontera del
comunismo. - Así, de corrido, números para el
estupor de un proceso cuya trascendencia algunos medios
británicos comparan con la Revolución Industrial.
La producción industrial china creció en
noviembre un 18%. Se espera que el volumen de sus negocios este
año exceda los 800 mil millones de dólares.
Sólo las exportaciones textiles a EE.UU. aumentaron un
70% en 2002. Hay que saber que la mitad de las exportaciones
tiene origen en fábricas extranjeras instaladas en el
país: los costos
laborales en China son la décima parte de los
estadounidenses. Pero todo boom tiene sus lados flacos. Hay una
enorme corrupción enquistada en los rincones
más redituables del poder. Los problemas
ambientales y los costos por la inequidad social son tan
abrumadores como los triunfos de la balanza
comercial. A causa de su vertiginoso crecimiento, el
país sufre graves problemas de energía y una
escasez de
agua de unos 30.000 millones de metros cúbicos, que le
produce pérdidas por US$ 28 mil millones. Del aire, mejor no
hablar: no hay modo de controlar las emisiones de gases
tóxicos ni la polución en un país que
aún se maneja de manera precaria en los cuidados de la
producción y en los sistemas de
recolección de residuos y desechos. - El mundo pone sus ojos en el apetecible mercado de
consumidores y lo hace mirando al este del país, hacia
las grandes ciudades donde habitan quienes tomaron el tren de
la modernidad.
Adentro, en el campo hay 40 millones de chinos en la miseria y
otros cientos de millones que no miran TV ni usan computadoras. Ellos tampoco se enteraron de que
este año las importaciones en su país aumentaron
un 40%. - La occidentalización de China se refleja en
los intercambios comerciales, en los periódicos viajes
al extranjero de los funcionarios de primer orden y en el
imperio de la construcción, que siembra edificios cada
día como si fuera a acabarse el mundo. La apertura
también se verifica en los nuevos hábitos de
consumo: China es el paraíso de los celulares y las
primeras marcas de ropa tienen clientes exquisitos en ciudades
como Pekín y Shangai.
Conclusiones
Estamos en una época en donde el orbe está
globalizado, principalmente por la economía y las
comunicaciones. Es el post capitalismo
que Peter Drucker habla. Es la época en que grandes
potencias tradicionales y las potencias emergentes (Tigres de
Asia) luchan por la supremacía económica
mundial.
Asia, uno de los continentes del orbe, ha desatado en
los últimos años un crecimiento vertiginoso en su
economía. Productos industrializados, siguiendo
políticas económicas, administrativas,
gubernamentales, etc., han llegado y están llegando a casi
todos los confines de la tierra.
Basados en una férrea disciplina,
con una administración horizontal entre el gerente y el
trabajador, ha tenido inusitados éxitos.
Los gobiernos y las empresas transnacionales de estos
países asiáticos (Japón, Corea del Sur,
Taiwán y Singapur, por citar los principales) son ejemplos
de una manera eficaz desde el punto de vista empresarial.
Obviamente existen desavenencias y crisis en el marco de su
avance, sin embargo tratan de mantenerse en la hegemonía
mundial, haciendo frente a las potencias de Occidente.
Los Tigres de Asia han rugido y rugen en el mundo
entero. La economía que tiene sus bases en la
productividad y en la reingeniería, ha calado hondo en el libre
mercado internacional. Prendas de vestir, artefactos
eléctricos, automóviles, etc., se importan a los
países subdesarrollados principalmente. Latinoamérica no está exento de
ello; incluso Perú. Durante el régimen de Alberto
Fujimori, un gobernante con raíces asiáticas,
Perú ha sido un país que ha servido como mercado
para estos países.
"La crisis asiática", una frase que hemos
escuchado reiteradamente. No es tema de la presente monografía; sin embargo, ahí
están los tigres, unidos ante las presiones de toda
índole, para seguir adelante liderando el mercado libre,
sobre todo en aquellas naciones dirigidos por gobiernos
neoliberalista. Han demostrado poseer una disciplina oriental en
materia financiera y lo seguirán haciendo si es que
Europa, América, etc., lo siguen
permitiendo.
Bibliografías
DRUCKER, Peter . La Sociedad Post Capitalista.
Grupo Editorial Norma,
1994
Asiared. Año I. Número 9. Revista
electrónica de actualidad de Asia.
Barcelona,
2003
Enciclopedia Encarta 2006. Microsoft
Corporation.
www.monografias.com
Integrante:
Hernandez Kenny
REPUBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA
INSTITUTO UNIVERSITARIO DE TECNOLOGIA
"ANTONIO JOSE DE SUCRE"
EXTENSION BARQUISIMETO
Barquisimeto 08 de Julio de 2007
Venezuela, Barquisimeto Estado Lara
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