Donde se continúa con Karina, se discute el Mal de Alzheimer, y el Autismo, aunque brevemente, y de Otros Asuntos de Importancia? (página 2)
Alois Alzheimer
(1864-1915)
Alois Alzheimer, nació el 14 de junio de 1864 en
Marktbreit. Cursó estudios de medicina en
las universidades de Berlín, Tübingen y
Würzberg. En esta última completó su tesis doctoral
Über die Ohrenschmalzdrnsen (sobre las
glándulas ceruminosas) en 1887.
Inicia su carrera profesional en 1888, como residente en
el Hospital para Enfermos Mentales y Epilépticos, de
Frankfurt am Main. Realiza investigaciones
sobre demencias de origen arteriosclerótico y degenerativo
y también sobre las psicosis, la
psiquiatría forense y el control de la
natalidad.
El 4 de noviembre de 1906, en la XXXVII Conferencia de
Psiquiatras del Sudoeste Alemán en Tübingen,
presentó la primera descripción de una demencia que,
posteriormente y por sugerencia del famoso psiquiatra
alemán Emil Kraepelin, recibió el nombre de
enfermedad de Alzheimer. La presentación de Alzheimer al
congreso consistió en la descripción de una
paciente de 51 años de edad llamada Auguste D. admitida en
el hospital de Frankfurt el 25 de noviembre del 1901. La paciente
tenía un trastorno caracterizado por la progresiva
disminución de la capacidad cognitiva, síntomas de
lesiones neurológicas localizadas, alucinaciones,
ilusiones y pérdida de la capacidad de integración psicosocial.
Más adelante, Alzheimer se radicó en la
Clínica Psiquiátrica Real de Munich y
continuó interesándose en la evolución de Auguste D. hasta la muerte de
la paciente en Frankfurt el 8 de abril de 1906. Tras el
fallecimiento de Auguste D., Alzheimer estudió las
lesiones cerebrales de la paciente. En 1907 publicó sus
hallazgos con el título "Sobre una enfermedad
específica de la corteza cerebral". (Alzheimer A.
Über eine eigenartige Erkrankung der Hirnrinde.
Allgemeine Zeitschrift für Psychiatrie und
Psychisch-Gerichtliche Medizin 1907; 64: 146-48).
El galeno distinguido falleció el 19 de diciembre
del 1915, dejando su marca indeleble
en la Historia de la
Medicina, con sus descubrimientos.
En 1992 la
Organización Mundial de la Salud definió la
enfermedad de Alzheimer como una dolencia degenerativa cerebral
primaria, de etiología desconocida, que presenta rasgos
neuropatológicos y neuroquímicos
característicos. En términos funcionales, la
enfermedad de Alzheimer es el deterioro global de todas las
funciones
corticales superiores, incluyendo la memoria, la
capacidad para resolver los problemas de
la vida diaria, la ejecución de las funciones perceptivas
y motoras aprendidas, y el control de las reacciones emocionales
en ausencia de un intenso embotamiento de la conciencia.
Anatomía cerebral
humana…
Comencemos la discusión formal de nuestro primer
tema de hoy
Definición
La enfermedad de Alzheimer es una forma de
progresión lenta de la demencia que se manifiesta como una
alteración adquirida y continua de las funciones intelectuales.
La alteración de la memoria es una
característica necesaria para el
diagnóstico
También se debe presentar cambio en una
de las siguientes áreas para la interpretación de cualquier forma de
demencia: lenguaje,
capacidad de tomar decisiones, juicio intacto, atención y otras áreas relacionadas
de la función
cognitiva y de la
personalidad.
La rapidez de progresión es diferente para cada
caso. Si la enfermedad de se desarrolla rápidamente, es
probable que continúe progresando de la misma manera, pero
si ha sido de desarrollo
lento, probablemente seguirá un curso
paulatino.
Causa
La causa de la enfermedad de Alzheimer se desconoce,
pero no es parte del proceso de
envejecimiento normal. Se han descartado las teorías
anteriores sobre la acumulación de aluminio,
plomo, mercurio y otras sustancias de naturalezas tóxicas
en el organismo.
El diagnóstico de la enfermedad de Alzheimer
se realiza sobre la base en los síntomas
característicos de la enfermedad y luego de excluir otras
posibles causas de demencia. Puede confirmarse con estudios
microscópicos de una muestra de tejido
cerebral en la autopsia.
El tejido cerebral muestra "nudos neurofibrilares"
(fragmentos enrollados de proteína dentro de las neuronas
que las obstruyen), "placas neuríticas" (aglomeraciones
anormales de células
nerviosas muertas o que están muriendo, otras
células cerebrales y proteína) y "placas seniles"
(áreas donde se han acumulado productos de
neuronas muertas alrededor de proteínas). Aunque estos cambios aparecen
en cierto grado, en todos los cerebros con el envejecimiento, se
presentan muchos más en los cerebros de las personas con
enfermedad de Alzheimer.
La destrucción de las células nerviosas
(neuronas) lleva a una disminución de los
neurotransmisores (sustancias secretadas por una neurona para
enviar los mensajes a otra neurona), cuyo equilibrio
correcto es crítico para la función cerebral. Los
tres neurotransmisores comúnmente afectados por la
enfermedad de Alzheimer son acetilcolina, serotonina y
norepinefrina — la acetilcolina es la más
afectada.
Al causar cambios tanto estructurales como
químicos en el cerebro, la
enfermedad de Alzheimer parece desconectar áreas del
encéfalo que normalmente trabajan juntas.
Aproximadamente 4 millones de estadounidenses sufren
actualmente de esta enfermedad. Los factores de riesgo más
importantes para la demencia son la edad avanzada y antecedentes
familiares de la misma. Cuanto mayor es la persona, mayor es
el riesgo de desarrollar esta dolencia.
Alrededor del 10% de las personas mayores de 70
años tiene problemas significativos de memoria y alrededor
de la mitad de éstos son causados por la enfermedad de
Alzheimer. El número de personas con esta condición
se duplica cada década después de los 70
años y el hecho de tener un familiar consanguíneo
cercano que la haya desarrollado aumenta el riesgo. Debido a que
las mujeres viven más años que los hombres, ellas
son más propensas a su desarrollo.
Hay dos tipos de enfermedad de Alzheimer, la de
aparición temprana y la de aparición tardía.
En la primera, los síntomas aparecen antes de los 60
años y, en algunos casos, la enfermedad de inicio temprano
se presenta en familias e involucra mutaciones hereditarias
autosómicas dominantes que pueden ser la
causa de la misma. Hasta ahora, se han identificado tres genes de
aparición temprana, que es el tipo menos común, ya
que comprende sólo entre el 5 y el 10% de los
casos.
La enfermedad de Alzheimer de comienzo tardío,
que es el tipo más común, se desarrolla en personas
de 60 años o más y se cree que es menos probable
que se presente en familias. La enfermedad de Alzheimer de inicio
tardío puede presentarse en algunas familias, pero el
papel de los genes es menos directo y definitivo. Es posible que
estos genes no provoquen el problema en sí, sino que
aumenten la probabilidad de
formación de placas y nudos u otras patologías
relacionadas con la enfermedad de Alzheimer en el
cerebro.
Síntomas
En las etapas tempranas, los síntomas pueden ser
muy sutiles. Entre éstos se encuentran:
- Repetición frecuente de frases
- Ubicación equivocada y frecuente de cosas
triviales - Dificultad para recordar el nombre de objetos
conocidos - Extravío en rutas conocidas
- Cambios de personalidad
- Convertirse en persona pasiva y sin interés
por las cosas que antes disfrutaba
Algunas cosas que el individuo
solía hacer bien se tornan difíciles, como llevar
el control de uso de la chequera, jugar juegos
complejos (como bridge) y aprender rutinas o informaciones nuevas
aunque éstas sean poco complejas.
A medida que avanza la enfermedad, el déficit se
hace más evidente. Algunos de los síntomas
son:
- Disminución en el
conocimiento de los hechos recientes - Olvido de hechos de la vida propia, se pierde
esencialmente conciencia de quién se es - Problemas para escoger la ropa y vestirse
- Alucinaciones, discusiones sin razón, golpes
asestados sin provocación y conductas
violentas - Confusión general, depresión y agitación
Algunas tareas que probablemente presenten dificultades
para una persona en esta etapa son: preparar alimentos,
conducir, vestirse, viajar fuera de rutas familiares y manejar
sus finanzas.
En la enfermedad de Alzheimer severa la persona ya no
puede vivir sin asistencia. La mayoría de las personas en
esta etapa ya no reconocen el lenguaje,
no registran quienes son los miembros de la familia y
ya no son capaces de desempeñar las actividades
básicas de la vida diaria (como comer, vestirse y
bañarse).
Presidente Ronald Reagan.
Víctima de la Enfermedad de Alzheimer.
Signos y
exámenes
El primer paso para diagnosticar la enfermedad de
Alzheimer es establecer la presencia de la demencia y, en segundo
lugar, se debe definir el tipo. El médico completa la
historia
clínica, hace el examen físico, incluyendo un
examen neurológico, y evalúa el estado
mental del paciente.
Con eso ya basta…
Es posible que se ordenen exámenes adicionales
para determinar si existe una condición tratable que pueda
provocar la demencia o contribuya a empeorar la enfermedad de
Alzheimer. Entre estas condiciones se pueden mencionar la
enfermedad tiroidea, la deficiencia de vitaminas, los
tumores cerebrales, la intoxicación por drogas o
medicamentos, las infecciones crónicas y la
depresión severa.
Por lo general la enfermedad de Alzheimer tiene un
patrón característico de síntomas y los
médicos experimentados pueden diagnosticarla teniendo en
cuenta los antecedentes y el examen físico. Entre los
exámenes que se hacen con frecuencia para evaluar o
descartar otras causas de demencia están la
tomografía computada (TC), la imagen por
resonancia magnética (IRM) y los exámenes de
sangre.
En las etapas tempranas de la demencia, la imagen
cerebral puede ser normal. En etapas avanzadas, la IRM puede
mostrar una atrofia en el tamaño de la corteza cerebral o
del área del cerebro responsable de la memoria (el
hipocampo).
Tratamiento
La enfermedad de Alzheimer no se puede curar ni es
posible restaurar las funciones deterioradas. Actualmente, es
posible retardar su progreso pero no detenerla.
El tratamiento va destinado a prorrogar la
evolución de la enfermedad, a manejar los problemas de
conducta, la
confusión y la agitación, a modificar el ambiente del
hogar y, lo más importante, a ofrecer apoyo a la familia. A medida
que la enfermedad evoluciona puede causarle más perjuicio
a la familia que al paciente.
El uso de medicamentos
En la actualidad existen tres medicamentos disponibles
para retardar el progreso de la enfermedad y, posiblemente,
mejorar la función cognitiva. Estos son: tacrine (Cognex),
donepezil (Aricept) y rivostigmine (Exelon).
Los tres afectan el nivel de acetilcolina en el cerebro
y todos tienen efectos colaterales indeseables como son las
náuseas y los vómitos.
Tejido nervioso
envejecido
El tacrine, primer medicamento de este tipo aprobado,
también produce una elevación de las enzimas
hepáticas y debe tomarse cuatro veces al día. Hoy
en día se usa muy raras veces.
De las otras dos drogas, el Aricept ha estado
disponible por más tiempo. Se
toma una vez al día y se ha informado que mejora o
estabiliza el funcionamiento cognitivo, además de que se
tolera bien. El Exelon, un nuevo medicamento, parece ser
igualmente eficaz y se toma dos veces al día. En el futuro
cercano se ha programado la aparición de nuevas drogas
para tratar esta enfermedad.
Para mejorar la función cognitiva puede ser
necesario suspender los medicamentos, para otras condiciones, que
empeoran la confusión y que no son esenciales para el
cuidado de la persona. Entre estos están los medicamentos
anticolinérgicos, analgésicos, cimetidina,
depresores del sistema nervioso
central, antihistamínicos, pastillas para dormir y
otros fármacos similares.
Los
problemas de conducta
Los problemas subyacentes que contribuyen a la
confusión deben identificarse y ser tratados. Entre
ellos están la insuficiencia cardiaca, niveles bajos de
oxígeno
(hipoxia), trastornos tiroideos, anemia,
trastornos nutricionales, infecciones y condiciones
psiquiátricas (como la depresión). El tratamiento
de estos trastornos médicos y psicológicos con
frecuencia mejora en gran medida la función cognitiva del
paciente.
Puede requerirse la
administración de medicamentos para controlar
conductas agresivas, agitadas o peligrosas. Por lo general,
éstos se prescriben en dosis bajas y deben ajustarse a las
necesidades individuales.
Las terapias de modificación de conducta pueden
ser útiles para controlar comportamientos inaceptables o
peligrosos en algunas personas. Los que consisten en recompensar
conductas positivas mientras se ignoran las inapropiadas —
dentro de los límites de
la seguridad y del
entendimiento del paciente.
Adaptaciones en el ambiente familiar
La persona afectada con la enfermedad de Alzheimer
necesita apoyo en el hogar a medida que la enfermedad progresa.
Los familiares u otras personas encargadas del cuidado pueden
ayudar, comprendiendo cómo percibe su mundo la persona con
esta condición. Se deben proporcionar actividades
estructuradas que fomenten las habilidades que todavía
existen y reducir las consecuencias de las destrezas
afectadas.
Deben simplificarse el entorno del paciente y se le
deben proporcionar recordatorios frecuentes, notas, listas de
tareas de rutina o direcciones para las actividades diarias. A la
persona con enfermedad de Alzheimer se le puede permitir la
posibilidad de hablar sobre sus reveses y de participar en su
propio cuidado, en la medida que esto sea posible.
Medidas
adicionales
Es necesario evaluar las funciones sensoriales de las
personas con enfermedad de Alzheimer y si se detectan
déficit, debe ayudarse al paciente con aparatos para
aumentar su capacidad de oír, de ver y cirugía
correctiva (como la de cataratas) en la medida que sea adecuado.
La buena alimentación y el mantenimiento
de la salud son importantes, aunque generalmente no es necesario
seguir dietas especiales ni tomar suplementos nutricionales. El
ejercicio es importante y se debe alentar.
Con el tiempo puede que el monitoreo y la asistencia
durante las 24 horas del día sean necesarios para brindar
un ambiente seguro, controlar
las conductas agresivas o agitadas y satisfacer las necesidades
fisiológicas. Esto puede incluir cuidado casero, hogares
de atención, cuidado de adultos en el día u hogares
de convalecencia.
Pronóstico
El desenlace generalmente es pobre. El trastorno
usualmente no es agudo pero avanza de manera progresiva. Es
común que el paciente se vuelva totalmente incapacitado
con el tiempo y la muerte
normalmente sucede en un lapso de 15 años, por lo general
por una infección o una falla de otros sistemas
corporales.
Tête d’un homme
chauve (Pablo Ruiz Picasso)
Complicaciones
- Pérdida de la capacidad para funcionar o de
cuidarse a sí mismo - Complicaciones ocasionadas por la
inmovilidad - Escaras, resultado de injurias inadvertidas y
accidentales - Fracturas óseas
- Contracturas y dificultades musculares
- Pérdida de la capacidad para interactuar con
otros - Incremento en la incidencia de infecciones en
cualquier parte del cuerpo - Fallas en los sistemas corporales
- Disminución de las expectativas de
vida - Abuso por parte de la persona que cuida al enfermo y
que se encuentra muy estresada - Efectos secundarios de algunos de los
medicamentos
Prevención
Esta enfermedad no se puede prevenir, aunque se hoy se
piensa que la dieta es un factor en su curso.
Fin de la Lección
El
Buzón Universitario
El autismo infantil,
consideraciones adicionales
En previas lecciones hemos descrito el desarrollo
histórico de esta condición, la que aquí
revisaremos someramente por petición de nuestros
alumnos.
El autismo es un trastorno complejo del desarrollo que
se detecta en los primeros 3 años de la vida, aunque
algunas veces el diagnóstico se hace mucho después.
Éste afecta el desarrollo normal del individuo,
principalmente, en las habilidades sociales y de comunicación.
El autismo es un espectro que incluye una amplia gama de
comportamientos. Sus características principales son
deterioro en las relaciones sociales, en la
comunicación verbal y no verbal, y patrones de
comportamientos restringidos y repetitivos.
Los síntomas varían de muy leves a muy
severos. El autismo leve se conoce como el síndrome de
Asperger. (Véanse mis trabajos a este
respecto).
El autismo, hoy entendemos que representa, una
condición física ligada a una
biología y
bioquímica
anómalas en el cerebro, cuyas causas exactas se
desconocen, pero que hoy gobierna un área de investigación muy activa.
Anteriormente se creía que el autismo era una
enfermedad mental producida por una relación
patológica entre la madre y el bebé, pero ninguna
evidencia científica apoya esta idea por lo que ha sido
rechazada.
Al parecer, los factores genéticos son de
importancia, ya que las alteraciones del lenguaje y la
comunicación son comunes en los parientes de niños
autistas. Las alteraciones cromosómicas y otros problemas
neurológicos también son más comunes en las
familias con autismo.
El autismo afecta hasta un 0.2% de los niños en
la población general, pero el riesgo de que
una pareja tenga un segundo niño autista se incrementa
más de 50 veces, entre el 10 y el 20%. Es mucho más
probable que un gemelo idéntico también tenga
autismo que un gemelo fraternal o que otro hermano lo sufra.
Todos estos factores sugieren una fuerte influencia hereditaria
sobre este trastorno.
Esta enfermedad afecta a los varones con una frecuencia
3 ó 4 veces mayor que a las niñas. Otros factores
como son el ingreso familiar, la educación y el
estilo de vida
no parecen modificar el riesgo de padecerla, como antes se
creyera.
Algunos padres se preocupan porque la vacuna SPR que el
niño recibe a la edad de 1 año puede provocar
autismo. Esta teoría
se basó en el hecho de que la incidencia del autismo se ha
incrementado de manera estable desde alrededor del mismo tiempo
que comenzó la vacunación con SPR y que los
niños con la forma regresiva de autismo tienden a regresar
a la etapa alrededor del mismo tiempo en que se suministra la
vacuna.
Lo que es falso…
Varios estudios importantes no han demostrado la
existencia de ninguna conexión entre la vacuna y el
autismo. Por ello, la Academia Estadounidense de Pediatría
(American Academy of Pediatrics) ha expresado oficialmente
que no existe una relación causal.
Algunos médicos atribuyen el aumento de la
incidencia de autismo a las nuevas definiciones de éste.
El término "autismo" en la actualidad incluye un espectro
más amplio de niños. Por ejemplo, un niño
que se diagnostica con autismo altamente funcional en la
actualidad pudo haber sido considerado simplemente "raro" o
"extraño" hace unos 30 años.
Síntomas:
La mayoría de los padres de niños autistas
empiezan a sospechar que algo no está bien, cuando el
niño tiene 18 meses de edad y buscan ayuda alrededor de
los 2 años de edad (en el síndrome de Asperger, el
diagnóstico generalmente se hace mucho más tarde).
Los niños con autismo se caracterizan por presentar
dificultades en la comunicación verbal y no verbal, en las
interacciones sociales, en la frialdad y distanciamientos
afectivos y en la coordinación. Algunos pueden manifestar
agresión hacia otras personas o hacia sí
mismos.
Algunos niños con autismo parecen normales antes
de 1 ó 2 años de edad y luego presentan una
"regresión" súbita perdiendo las habilidades del
lenguaje o sociales que habían ganado con anterioridad.
Éste es el denominado tipo regresivo de
autismo.
L’enfant reveur
(Nicolás Vinel)
Las personas con autismo pueden efectuar movimientos
corporales repetidos y estereotípicos, evidenciar apegos
inusuales a objetos o manifestar irritación excesiva
cuando se cambian las rutinas. Los individuos también
pueden manifestar sensibilidades idiosincrásicas en
los sentidos
de la vista, oído,
tacto, olfato o gusto. Estos niños, por ejemplo,
rehusarán a vestir ropa "picante" y se alteran en exceso
si se les obliga debido a la sensibilidad en su piel. Una
combinación de las siguientes áreas puede estar
afectada en varios grados:
- Comunicación:
- incapacidad para iniciar o mantener una
conversación - el lenguaje se desarrolla lentamente o no se
desarrolla en absoluto - repetición en eco (ecolalia) de
palabras - inversión de los pronombres
- frases idiosincrásicas y sin
sentido - comunicación con gestos en vez de
palabras - período corto de
atención
- incapacidad para iniciar o mantener una
- Interacción social:
- falta de empatía (no puede entender que
otras personas sientan o sepan cosas
diferentes) - dificultad para socializar
- retraimiento
- preferencia por pasar el tiempo solo y no con
otros - menor respuesta a las señales emocionales como el contacto
visual o las sonrisas
- falta de empatía (no puede entender que
- Deterioro sensorial:
- aumento o disminución en la sensibilidad
ante los sentidos de la visión, oído, tacto,
olfato o gusto - introducción inapropiada de objetos a la
boca - fricción estereotípica de
superficies - disminución en la respuesta al
dolor - ausencia de sobresaltos ante los ruidos
súbitos - puede abstenerse del contacto físico
porque es sobre-estimulante o abrumador
- aumento o disminución en la sensibilidad
- Juego:
- Comportamientos:
- movimientos corporales repetitivos y
rítmicos - gran necesidad por la invariabilidad
- ataques de cólera severos
- perseverancia (interés obsesivo en un solo
objeto, idea, actividad o persona) - falta aparente de sentido
común - muestra de agresión a otras personas o
hacia sí mismo - actividad o pasividad excesivas
- movimientos corporales repetitivos y
Se debe practicar un examen rutinario para la evaluación
del desarrollo en todos los niños, pero se deben realizar
evaluaciones adicionales si existe alguna preocupación por
parte del médico o de los padres. Esto es particularmente
cierto cuando el niño no alcanza cualquiera de las
siguientes dimensiones del desarrollo:
- Balbuceo a los 12 meses
- Gesticulación (por ejemplo señalar,
decir adiós con la mano) a los 12 meses - Pronunciación de una palabra a los 16
meses - Frases espontáneas de dos palabras a los 24
meses (no sólo la repetición de lo que
oye) - Pérdida de cualquier habilidad social o del
lenguaje a cualquier edad
A estos niños se les puede practicar una
evaluación audiológica, un examen de sangre y un
examen para autismo como la Lista de Comprobación Para
Autismo en Niños que Empiezan a Caminar (CHAT) o el
Cuestionario
de Examen de Autismo.
Por lo general, es necesario un experto clínico
con experiencia en el diagnóstico y tratamiento del
autismo para el diagnóstico final. Dado que no existe
ninguna prueba biológica para el diagnóstico del
síndrome, éste con frecuencia se basa en criterios
específicos definidos como A, B y C en el Manual
Estadístico y Diagnóstico IV (Diagnostic and
Statistical Manual IV) de
la siguiente manera:
Criterios Diagnósticos para el Trastorno
Autista:
A. Un total de seis o más numerales de (1), (2) y
(3), con al menos dos del (1) y uno de (2) y (3):
- Deterioro marcado en el uso de múltiples
comportamientos no verbales en la interacción social
normal como el contacto visual, la expresión facial,
la actitud
corporal y los gestos. - Incapacidad en la formación de relaciones
con pares apropiadas para el nivel de
desarrollo. - Falta de búsqueda espontánea para
compartir el placer, los intereses o los logros con otras
personas (por ejemplo no mostrar, señalar ni traer
objetos de interés). - Ausencia de reciprocidad emocional o
social.
- Deterioro marcado en el uso de múltiples
- Deterioro cualitativo en la interacción social, manifestado por lo
menos en dos de los siguientes:- Ausencia total o retraso en el desarrollo del
lenguaje hablado (no acompañado por el intento de
compensación por medio de métodos alternativos de
comunicación como la gesticulación o la
mímica). - En el caso de individuos con un lenguaje hablado
adecuado, hay deterioro severo de la habilidad para iniciar
o mantener una conversación con otros. - Uso repetitivo y estereotipado del lenguaje o
lenguaje idiosincrásico. - Falta del uso espontáneo y variado de la
imaginación o del juego imitativo social apropiados
para el nivel de desarrollo.
- Ausencia total o retraso en el desarrollo del
- Deterioro cualitativo de la comunicación,
manifestado por al menos uno de los siguientes:- Preocupación circunscrita con uno o
más patrones de interés estereotipado y
restringido que son anormales ya sea en intensidad o
enfoque. - Apego aparentemente inflexible a rutinas o
rituales no funcionales y específicos.
Manierismos motores
estereotipados y repetitivos (por ejemplo batir o torcer las
manos o los dedos o movimientos complejos- de todo el cuerpo).
- Preocupación persistente por partes de
objetos.
B. Retraso o funcionamiento anormal en al menos una
de las siguientes áreas, con inicio antes de los 3
años de edad:- Interacción social
- Lenguaje, como el utilizado en la comunicación social
- Juego simbólico o imaginativo
C. El trastorno no se explica mejor por el trastorno
de Rett (exclusivo de las hembras) ni por el trastorno
disociativo de la niñez.Otros trastornos penetrantes del desarrollo que
existen son el síndrome de Asperger, el
síndrome de Rett, el trastorno disociativo de la
niñez, el trastorno generalizado del desarrollo no
especificado en otra parte (PDD-NOS) y el autismo
atípico.La evaluación que se practica para el
diagnóstico del autismo incluirá con frecuencia
un examen físico y neurológico completo,
así como la utilización de instrumentos de
diagnóstico específicos como la Escala de
Puntaje del Autismo de Guilliam, la Prueba de Tamizaje de los
Trastornos Generalizados del Comportamiento – Fase 3, la
Escala de Puntaje del Autismo en la Niñez
(CARS) o la Agenda Genérica de Observación Diagnóstica del
Autismo. Por lo regular, se realizan pruebas
genéticas (que buscan alteraciones
cromosómicas) y posiblemente también pruebas
metabólicas a los niños de los que se sospecha
padecen autismo o ya se comprobó que lo
sufren.Dado que el autismo abarca un espectro tan amplio,
una observación breve en un solo ambiente no puede
predecir las verdaderas habilidades de un individuo y, por lo
tanto, sería ideal que un equipo multidisciplinario
evaluara al niño. Esta evaluación
multidisciplinaria puede comprender: una evaluación
amplia de la comunicación, el lenguaje y el habla; una
evaluación cognitiva y del comportamiento adaptador;
una evaluación sensorio-motora y de terapia
ocupacional y valoraciones neuro-psicológicas, del
comportamiento y académicas.En ocasiones, las personas son renuentes a hacer el
diagnóstico de autismo por la preocupación de
marcar al niño. Aunque encasillar de una manera que
sugiera límites es inapropiado debido al amplio
espectro de desórdenes del autismo, la falta de un
diagnóstico puede llevar a no obtener el tratamiento y
las atenciones que el niño requiere.Tratamiento
La intervención temprana, apropiada e
intensiva mejora en gran medida el resultado final de la
mayoría de los niños con autismo. La
mayoría de programas se
basarán en los intereses del niño para
planificar una agenda altamente estructurada de actividades
constructivas. Las ayudas visuales son útiles a
menudo.El tratamiento es más exitoso cuando apunta
hacia las necesidades particulares del individuo. El programa
individualizado debe ser diseñado por un especialista
con experiencia o un equipo. Se dispone de varias terapias
efectivas, dentro de las que se cuentan el entrenamiento
de integración auditiva, análisis aplicado del comportamiento,
medicamentos, terpsicoterapia, terapia ocupacional,
fisioterapia, integración sensorial, terapia del
lenguaje y del habla y terapia visual.Un programa de educación muy exitoso es el denominado
"Tratamiento y Educación de los Niños Autistas
y con Impedimentos Relacionados con la Comunicación"
(TEACCH, del inglés Treatment and Education of
Autistic and Related Communication Handicapped
Children).Se debe estar atento a la existencia de algunos
programas para el tratamiento del autismo que reciben mucha
publicidad
y no tienen fundamento científico. A menudo se
escuchan informes
de "curas milagrosas" que no cumplen con las expectativas
cuando se prueban. Si un niño presenta esta
condición, puede ser de utilidad
hablar con otros padres de niños autistas y con
especialistas en el autismo, así como seguir el
progreso de las investigaciones en un área que es de
desarrollo rápido.Pronóstico
El autismo sigue siendo una condición
amenazadora para los individuos y sus familias, pero el
pronóstico en la actualidad es mucho mejor de lo que
era hace una generación. En esa época, los
niños autistas eran ingresados en instituciones. En la actualidad, con la
terapia adecuada, muchos de los síntomas del autismo
se pueden mejorar, aunque la mayoría de las personas
tendrán algunos síntomas durante todas sus
vidas. La mayoría de las personas con autismo son
capaces de vivir con sus familias o en la comunidad.El autismo varía de muy leve a muy severo y
el pronóstico para los individuos depende de su grado
de incapacidad y el nivel de terapia que reciben.Complicaciones
El autismo puede asociarse con otros trastornos que
alteran el funcionamiento del cerebro, como la esclerosis
tuberosa, el retardo mental o el síndrome del
cromosoma X frágil y hasta un 30% de los niños
afectados por esta enfermedad desarrollan
convulsiones.El estrés que el autismo genera en los
individuos y sus familias puede también llevar al
desarrollo de complicaciones sociales y psicológicas
en todos los implicados. Sin embargo, algunos individuos
autistas presentan talentos espectaculares en áreas
particulares ("sabios autistas") como artes o matemáticas.Temas
actualizadosAsuntos de salud en breve…
Más malas noticias
acerca del cigarrillo…Fumar le quita a quien fuma, diez años de
su vida…El cigarrillo le roba diez años de vida en
promedio, al fumador. Dejar de fumar es beneficioso a
cualquier edad, pero, dejar el cigarrillo lo antes posible es
la mejor de las ideas.Casi todas las personas que fuman de por vida,
mueren diez años antes de lo que estaban destinados a
vivir.Estos son los resultados publicados por la
actualización de un estudio famoso que apareciera en
el año 1954 en el prestigioso British Medical
Journal. Esta investigación fue iniciada en la
Universidad de Oxford por el
epidemiólogo Richard Doll, de 91 años en la
actualidad.Siguiendo el futuro de 34,439 médicos de
origen británico y del sexo
masculino, que se ofrecieran como voluntarios en el proyecto, la
actualización del proyecto ha suministrado nueva
información en los peligros de
fumar.El doctor Richard Peto, profesor
de Estadísticas Médicas y de
Epidemiología en Oxford lo resume de esta manera: "Las
malas nuevas son que el tabaco es
aún más eficiente como asesino de lo que antes
anticipáramos. Las buenas nuevas son que el dejar de
fumar le proporciona a todos, muchos más años
extra de vida de lo que antes
supusiéramos".Comprando tiempo
Los beneficios son sustanciales. Parando de fumar a
las edades de 60, 50, 40 ó 30 le "compra" a uno
respectivamente, 3, 6, 9 ó 10 años adicionales
de vida, que se perderían a las complicaciones de
fumar.Peto nos asegura que los nuevos resultados enfatizan
Peto el valor de
dejar de fumar aún en la vida tardía. Quienes
dicen que son muy viejos para dejar de fumar, no tienen por
que pensar así, de acuerdo a Peto.Así, que dejar de fumar es
beneficioso.Para gozar de la vida y vivirla saludablemente "no
es necesario fumar cigarrillos", dice el Dr. Doll cuyo
hábito cesaría el día en que
cumplió los 37 años.Los nuevos resultados también iluminan el
daño extreme causado por el cigarrillo
en todas las edades de la vida, no solamente en las personas
de edad media
o avanzada.The new data show the huge impact of smoking on
middle-age deaths and the way that it destroys rapid gains in
health enjoyed by the non-smoking population.Treinta y tres por ciento de las personas que no
fuman, nacidas alrededor del año 1915 viven para
celebrar los 70 ó los 90 años. Mientras que un
escaso 7% de los fumadores viven tanto tiempo.Generación de
reclutasEsta generación fue la más afectada
por el vicio de fumar, porque las compañías
tabacaleras reclutaban sus víctimas
proporcionándoles cigarrillos gratis cuando eran
adolescentes. Todavía, muchos de los
"reclutas" fuman…Desde que el estudio se iniciara en los años
cincuentas, el cigarrillo ha costado seis millones de vidas
en la Gran Bretaña. Mientras que el uso del tabaco es
una plaga en los países poco desarrollados.Con treinta millones de fumadores nuevos todos los
años, el tabaco causará la muerte a seis
millones de personas por todo el mundo cada
año.Los gordos piensan en que su autoestima
es muy baja. Lo piensan así, porque si no fueron
gordos de nacimiento, lo que todavía recuerdan, no es
cuando fueran delgados, sino cuando no eran
gordos. Así dijéramos en la lección
anterior cuando introducimos a Karina.Karina, capítulo II
Veinticuatro años de edad y doscientas
cincuenta libras de sobrepeso — Karina era
enorme…Karina…
¿Qué piensan los gordos y que
piensa Karina?Como aprendiéramos en la lección
anterior, Karina tuvo su dosis de mala suerte en su vida.
Soltera, obesa, sin una relación estable y con un
trabajo
donde se sentía apartada de todos, ya que la
locación del empleo era
remota, y donde pagaban muy poca cosa a los
empleados.La dieta de yo-yo, característicamente, no la
había ayudado y todas las otras de tipo comercial que
había intentado, las abandonó por falta de
éxito.Una mañana vino a pedirnos ayuda, y la
sometimos a un análisis de su estilo de vida y de su
estrategia
de comer, que duraría tres horas:- Con su jefa, mujer
muy delgada, Karina trabajaba horas muy largas. Las dos
fumaban continuamente y bebían tazas de cafés
azucarados y sin parar. - Desayunaba, comía y cenaba a horas
erráticas y sin reparar ni en lo que comía ni
en cuanto comiera. - No podía resistir el hambre, tomando
refrescos y comiendo meriendas de dulces, cada vez que se
le antojara — lo que sería, varias veces al
día. - Bebía cócteles por el azúcar que contuvieran. Su favorito
era el Cuba
libre con jugo de limón endulzado, añadido a
la bebida. - No caminaba, o hacía ejercicios de
ningún tipo. Se contentaba con ir a pasadías
los fines de semana, donde no trataba de disimular su
apetitito incontrolable. - Se cansaba fácilmente y jadeaba, si
trataba de subir un par de peldaños en cualquier
escalera. - Su compañera de alcoba la despertaba
porque roncaba muy ruidosamente. - Le dolían el cuerpo y las
coyunturas. - Sus períodos eran escasos e
infrecuentes. - Estaba deprimida y sentía ataques de
ansiedad, de angustia y de pánico. - Se mordía las uñas.
Karina, necesitaba ayuda, y urgente.
La premisa para asistir una persona así
afligida es partir desde la noción implícita de
que lo que les falta es fuerza de
voluntad o motivación. Nada más equivocado,
como hemos descrito en otras ponencias.Lo de la fuerza de voluntad no aplica, ya que Karina
ha sido muy capaz de trabajar por días,
sacrificándolo todo para agradar a su jefa querida,
sin esperanza de remuneración extra.La motivación era obvia: o pierdes de peso
o te fastidias, Karina… Lo que no bastaba para que
todas las noches abriera la puerta de la nevera llena de
etiquetas, por ella afijadas, advirtiéndole que no
coma — y proceder, sin titubeos, a darse la monumental
hartura.Nuestro método fue exitoso con ella, porque
mantuvo un elemento de individualización en su
estrategia.Hoy Karina está casada, es feliz y su BMI es
26…Bibliografía
Suministrada por solicitud.
Dr. Félix E. F. Larocca
- Preocupación circunscrita con uno o
- Patrones restrictivos repetitivos y estereotipados de
comportamiento, intereses y actividades,
manifestados por al menos uno de los siguientes:
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