La calidad en la educación superior, desafíos en un mundo que se transforma
RESUMEN
El presente trabajo aborda
la temática de la calidad en la
Educación
Superior en los países de Latinoamérica, a partir de los diferentes
conceptos de calidad que distintos autores exponen sobre la
temática en cuestión y en su análisis se brinda una panorámica de
la problemática de la Educación Superior
en la región latinoamericana, donde existe una
generalizada insatisfacción por el deterioro que en los
últimos años ha sufrido la calidad, fenómeno
que suele asociarse a su extraordinario crecimiento, si bien
debemos advertir que es posible conciliar cantidad y calidad si
se introducen cambios sustanciales de los métodos de
enseñanza y se acude a la moderna tecnología
educativa, se tratan aspectos importantes que permiten
centrar la atención en la calidad, a partir de
diferentes conceptos como la eficacia,
eficiencia,
pertenencia y relevancia como punto de partida para la
ejecución del proceso
docente y se establecen nexos entre retos de la educación cubana y
sus objetivos a
partir de los cuales se sugieren elementos imprescindibles para
elevar la excelencia del claustro y con ello la calidad en la
educación superior.
INTRODUCCIÓN
Citemos el siguiente pensamiento
por su vigencia en nuestros tiempos:
Los principios de un
pasado son ahora inadecuados para nuestro tormentoso presente,
como nuestra situación es nueva, tenemos que pensar y
actuar en forma nueva/ Abraham Linconln/.
La enorme expansión que la Educación
Superior Latinoamericana experimentó en los últimos
40 años (la matrícula paso de 270 000 alumnos a
más de 7 millones en 2006) no fue acompañada de un
esfuerzo similar en lo cualitativo. Al contrario, existe una
generalizada insatisfacción por el deterioro que en los
últimos años ha sufrido la calidad de la
Educación Superior en la región, fenómeno
que suele asociarse a su extraordinario crecimiento, si bien
debemos advertir que es posible conciliar cantidad y calidad si
se introducen cambios sustanciales en los métodos de
enseñanza y se acude a la moderna tecnología
educativa.
Conviene mencionar ahora aunque sea muy brevemente
algunos elementos de la problemática general de la calidad
de nuestra Educación Superior:
En primer término corresponde señalar la
falta de articulación entre los distintos niveles
educativos, respecto a ello es necesario señalar que se
observan cada vez mas bajos los niveles de preparación
académica, en especial de las disciplinas básicas,
de los egresados de la enseñanza media superior que
acceden a la Educación Superior.
Esta presente la disminución de los recursos
financieros destinados a la Educación Superior. América
Latina es la región del mundo que menos invierte por
estudiantes del tercer nivel (aproximadamente un promedio de 650
USD por estudiantes, los países asiáticos invierte
cuatro veces más y los Estados Unidos y
Canadá 14 veces más). Las restricciones
económicas afectan sensiblemente el desempeño cualitativo de las instituciones
de la Educación Superior, obligándolas a gastar
más del 90 % de sus presupuestos
en el pago de salario y a
reducir sensiblemente las inversiones
que más se ciñen a la calidad del proceso de
enseñanza y aprendizaje.
Proliferación de instituciones que no
reúnen los requisitos mínimos para un trabajo
académico digno de considerarse de nivel superior. Hoy
día funcionan en la región cerca de 3500
instituciones de tercer nivel, de las cuáles unas 550
están reconocidas como Universidades. No todas tienen el
mínimo nivel exigido. Una de las características es
la existencia de macrouniversidades, con más de 100 000
alumnos y microuniversidades con unos pocos centenares de
estudiantes.
Seguramente el factor que más incide en la
educación Superior es el nivel académico del
personal
docente y su formación pedagógica: Se estima que en
nuestra región menos del 20 % de los profesores se han
formado en programas de
doctorados y 50 % de ellos tienen un trabajo adicional,
incluyendo a muchos que figuran en las nóminas
como "Profesores de tiempo
completo". Además, es muy reducido el porcentaje de
docentes que
ha recibido adiestramiento en
métodos de enseñanza y evaluación. Según Brunner, del total
estimado de docentes, sólo una ínfima
fracción (que puede conjeturarse no supera el 10 % y se
halla concentrado principalmente en Brasil, Chile,
México,
Argentina y Venezuela) son
profesores investigadores con dedicación a la docencia de
postgrado y a la
investigación, y que publican regularmente en revistas
internacionales de prestigio. Para el grupo
mayoritario de los profesores del tercer nivel los problemas de
calidad están indisolublemente ligados a su propio e
inestable estatuto, a las bajas remuneraciones
que perciben, el escaso apoyo que encuentran y a las condiciones
deterioradas que frecuentemente deben actuar. Su identidad con
la disciplina o
la profesión suele ser baja y en muchos casos sus
asociaciones sindicales o gremiales apenas llegan a preocuparse
de algo más que de los aspectos burocráticos y
económicos de la carrera docente.
El método de
enseñanza y aprendizaje también influyen en la baja
calidad. En un gran número de instituciones la
Cátedra magistral sigue siendo el centro de la calidad
docente y contribuye ha alimentar la actitud pasiva
que el estudiante suele traer de la enseñanza media
superior. Pero no es posible centrar en el estudiante el proceso
de aprendizaje si la institución no dispone de Bibliotecas,
laboratorios y otros recursos didácticos que permitan
el trabajo
individual del educando.
La calidad se ha convertido en una preocupación
fundamental en el ámbito de la Educación Superior.
Y ello porque la satisfacción de las necesidades de la
sociedad y las
expectativas que suscita la Educación Superior depende en
última instancia de la calidad del personal docente, de
los programas y de los estudiantes tanto como de las
infraestructuras y del medio universitario. La búsqueda de
la Calidad tiene aspectos múltiplos, las medidas
para acrecentar la calidad de la Educación superior deben
estar destinadas a alcanzar objetivos institucionales y de
mejoramiento del propio sistema.
La calidad de la infraestructura material y
académicas de la educación Superior tienen
importancia para la enseñanza, la investigación y las funciones de
servicio,
así como para la cultura
institucional, imprescindible para dar coherencia a las
Instituciones de Educación Superior, sumamente
diversificada y a menudo geográficamente dispersa. Las
inversiones de capital en
infraestructura (desde las vías de acceso al campus, los
laboratorios y la biblioteca hasta
las "autopistas de la información") deben ser consideradas como
obras públicas que formen parte del esfuerzo general
destinados para la infraestructura que detened de la Economía.
Pretendemos dar algunas valoraciones sobre calidad en la
Educación Superior, diferenciar conceptos, así como
los elementos fundamentales a tener en cuenta si de calidad se
trata para organizar el proceso docente en las Instituciones
educativas del nivel Superior.
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