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Crítica a la moral sexual autoritaria (página 2)




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2.- La militancia
marxista de Reich.

En 1927, wilhelm reich había hecho algunas
incursiones en la literatura etnológica
y sociológica (Cunow, Mehring, Kautski, Engels), cuando
las revueltas del 15 y 16 de julio en Viena, le dieron una
lección práctica de sociología.

El 30 de enero, en schattendorf, unos antiguos
combatientes monárquicos dispararon en medio de la
multitud con ocasión de un mitin social demócrata,
resultando dos muertos y algunos heridos, organizándose
por el partido socialista y los sindicatos,
huelgas de protesta. La justicia
declaró libre a los autores de las muertes de
julio.

El 15 de julio por la mañana, estalló en
Viena una huelga y los
obreros ocuparon el centro de la ciudad.

La policía disparó y hubo varios muertos
en Viena. El municipio era gobernado por el partido
social-demócrata.

Ese partido disponía allí de una guardia
armada de 50,000 hombres, preparada durante años
precisamente para tales circunstancias.

Fue enviada a sus acantonamientos. Incendiándose
el palacio de justicia, del que se habían apoderado unos
jóvenes obreros que arrojaron al fuego los documentos que en
él había.

El alcalde social – demócrata de Viena
condujo un carro de bomberos e intentó en vano abrir el
cerco de la muchedumbre que impedía el acceso al edificio
en llamas.

La policía en toda la ciudad, disparaba salvas de
fusil contra la multitud.

Los líderes comunistas y socialdemócratas
se abstuvieron de toda intervención oficial y hasta el
día siguiente adoptaron posición. Al final de la
jornada, había más de cien muertos y un millar de
heridos.

Reich, había de retener tres cosas de estas
jornadas: la muchedumbre tuvo razón al echarse a la calle
e incendiar el palacio de justicia y no los responsables
políticos que trataron de impedírselo.

Sin embargo esa misma muchedumbre, obró con un
plan preciso,
demasiado prudente y moderado, no atacó a los
policías que se encontraban al alcance de sus manos, en
tanto que, a pasos de allí, otros ciudadanos eran cazados
como conejos,

La muchedumbre, bastante numerosa para destrozar las
fuerzas de la policía toleró sin embargo, horas
enteras de tiroteo esporádico.

También le impresionó a Reich el comportamiento
mecánico de los policías al disparar por mandato,
en nombre del "orden público". Freud
tenía razón al decir que el alistamiento corre
parejo con el abandono del yo individual y la
identificación con el Fuhrer.

En ese día se patentizó el papel de la
domesticación de los instintos, que permitió sobre
todo evitar el levantamiento contra la
opresión.

Aquel mismo día Reich ingresó en una
organización, el socorro obrero, especie de
cruz roja del partido comunista austriaco.

A fines de julio, Wilhelm Reich tuvo una
conversación con freud y quedó asombrado al ver que
freud no comprendía en absoluto el
levantamiento.

Después de ese 15 de julio de 1927, que
demostró tan trágicamente los mecanismos sociales,
Reich estudió a Marx y sobre todo
a Engels.

Le interesó muy especialmente "el origen de
la familia, la
propiedad
privada y el estado",
que pone en evidencia la contradicción sobre las
explicaciones freudianas y marxistas sobre la familia y esto lo
condujo evidentemente a Bachofen y Morgan.

Reich reconoce que durante 4 años estuvo perdido
en el caos de la etnología, pero los verdaderos secretos
de la fundación social de la represión sexual le
fueron revelados por la experiencia de la práctica
médica y sexología de la juventud
vienesa.

El efecto y siempre a consecuencia del levantamiento del
15 de julio, reich decidió dejar de limitarse a la
terapéutica individual y trabajar en la prevención
de las neurosis.

Habló de esto a Freud, quien lo
aprobó.

Freud sabía muy bien lo que ocurría en el
mundo, pero consideraba que personalmente en tanto que hombre de
ciencia,
tenía que conocer el interior del hombre, antes de actuar
en el exterior.

Pero lo cierto es que freud aprobaba las iniciativas de
este género;
era favorable a la reforma sexual soviética aunque con
algunas reservas respecto a la facilidad del divorcio y de
su consecuencia para la familia; quizá la luz viene del
este, le dijo un día a Reich.

Freud alentó a reich, al menos en los comienzos,
mientras se trataba de actuar con el fin de favorecer la salud sexual del pueblo;
pero fue hostil, cuando esta empresa se
alió a la critica de la institución familiar con
todas sus ramificaciones políticas.

Reich impartía conferencias ante diversas
organizaciones: "el socorro obrero", libres
pensadores, asociaciones de estudiantes.

Hablaba del psicoanálisis, del complejo de Edipo, etc.,
pero pronto advirtió que sus oyentes no podían
sacar conclusiones practicas de estas nociones para su propia
vida o para el "movimiento".

Las teorías
de la represión y del inconsciente carecían de
interés, reich se encontraba ante la
necesidad de explicar porqué la familia reprime la vida
sexual de los hijos, cuestión que le había ya
inquietado con ocasión de su trabajo en la
policlínica.

Reich consagró varios meses y mucho dinero para
fundar una sociedad
socialista de consejo sexual y de sexología, cuya
actividad consistió en abrir, en enero de 1929, seis
centros de higiene sexual,
cuatro jóvenes psicoanalistas y tres ginecólogos
colaboraron en la
empresa.

Estos centros de higiene sexual estuvieron
inmediatamente llenos hasta reventar sobre todo de muchachos y
mujeres embarazadas. Reich y sus colaboradores enseñaban
allí los procedimientos
anticonceptivos y la función de
la genitalidad.

En aquella época florecían las discusiones
sobre las indicaciones médicas, eugenésicas, del
aborto,
así como sobre las consecuencias demográficas de
una liberación del aborto.

Lo que reich y sus colaboradores afirmaron fue que
ninguna de las mujeres que acudían deberían tener
hijos, incluso si lo permitiese las circunstancias monetarias
adecuadas.

Aquellas mujeres gravemente neuróticas, no
debían tener hijos. eran totalmente incapaces de amar al
niño, de cuidarlo, de criarlo sin destruirlo.

Todas aquellas mujeres, sin excepción,
tenían una relación perniciosa o ninguna
relación en absoluto, con el hombre del
que estaban en cinta.

Eran frígidas, agotadas, secretamente
sádicas o abiertamente masoquistas, y sufrían de
esquizofrenia
latente o depresión
melancólica.

Odiaban al hijo antes de haber nacido.

Por consiguiente reich adoptó el principio de que
toda mujer encinta
contra su voluntad, debía tener derecho a la
interrupción del embarazo.

No se preocupaba de los demógrafos, pues
conocía la ruindad de los motivos sociológicos de
la obligación en que ponían a las pobres madres de
dar a luz hijos no deseados.

Esta clínica, dirigida por reich, utilizaba en la
medida de lo posible, las instituciones
médicas existentes.

Lo nuevo era el vínculo establecido entre los
problemas de
la neurosis, los trastornos sexuales y los conflictos
cotidianos, así como el hecho de aconsejar con el fin de
atacar las neurosis por la prevención, más que por
el tratamiento.

Durante dos años reich estuvo acosado por la
miseria sexual del pueblo.

Su práctica médica lo había puesto
en constante contacto con hijos e hijas de obreros, empleados y
campesinos.

Al mismo tiempo en
reuniones con jóvenes militantes tenía que hablar
sobre política sexual.

Estos jóvenes considerados "sanos",
acudían para obtener información sobre la prevención de
los nacimientos.

El problema se presentó de golpe: ¿se
deben dar anticonceptivos a jóvenes de 14 a 15
años?

Había la costumbre de aconsejar que esperasen a
estar más "maduros".

Sin embargo aquellos jóvenes eran adultos,
trabajaban como aprendices en talleres y muchos de ellos eran
miembros de las juventudes socialistas.

En las reuniones con los jóvenes reich
advirtió la relación entre el desorden genital y el
deterioro de la salud psíquica.

Pero las organizaciones "marxistas", lo ignoraban o lo
disimulaban, no veían la palidez, la represión, el
nerviosismo, los trastornos de la aptitud para el trabajo, el
humor vengativo, las tendencias criminales y la perversión
en aquellos adolescentes.

Cuando reich le explicaba las relaciones sencillas entre
la frustración genital y el nerviosismo, los
jóvenes comprendían inmediatamente.

Cuanto más joven era el muchacho o muchacha,
más fácil le era cambiar de dirección después de algunas frases
de explicación.

Era como si durante mucho tiempo hubieran llevado un
yugo cuya significación ignorasen.

Sabían cuanto se refería a su genitalidad.
Estaban al corriente que necesitaban amor y que sin
él su vida era un desierto. no sabían todo sobre
los obstáculos que se levantaban entre ellos y la
realización de sus necesidades vitales.

Llevaban una vida sin tener la menor idea de las
condiciones sociales de una existencia amorosa
satisfactoria.

En algunos meses reich aprendió más acerca
de sexología y sociología que en el curso de diez
años de práctica médica privada.

En su libro "la
función del orgasmo", reich expresó: se vio
claramente que aquellos adolescentes eran más o menos
neuróticos al iniciarse la pubertad.

Que la neurosis actual se desarrollaba después de
varios años de conflictos sexuales durante la adolescencia.

La fijación a los tabúes sexuales actuaba
en la infancia como
un freno desde los comienzos.

Era esencialmente la inhibición del último
paso a la vida amorosa natural, al llegar a la madurez, la que
les volvía a arrojar por completo a sus conflictos de la
infancia.

El conflicto de
la pubertad es el resultado de la negativa que la sociedad opone
a la vida amorosa del adolescente.

Cuando la vía del amor sano y normal queda
cortada de golpe, el adolescente regresa a la neurosis de la
infancia en una forma más intensa, ya que ésta
agravada por el aumento y la frustración simultánea
del deseo genital.

Una decepción grave que sufrió reich fue
darse cuenta que los militantes de partidos de izquierda operaban
con "slogan" y canalizaban su odio contra los
social-demócratas, la policía, etc.

Es decir usaban la política sólo como
desahogo de energía sexual reprimida.

En cambio, se
convence que los trabajadores no pueden aspirar al gobierno de la
sociedad si no resuelven antes, poco a poco, y en todos los
dominios, los problemas prácticas de la vida, como son los
sentimientos del amor y la sexualidad.

De 1928 a 1930 publicó un artículo sobre
el análisis del carácter neurótico, y también
materialismo
dialéctico y psicoanálisis (primer libro
freudomarxista), y la primera parte de su libreo: "la revolución
sexual".

En septiembre de 1929 reich viajó a la
unión soviética, donde discutió con los
pedagogos vera schmidt y gachelina e intentó sin éxito
convencer a los teóricos de la academia comunista del
interés que ofrece el psicoanálisis para los
marxistas.

Esta actitud
desbordante le valió evidentemente una hostilidad cada vez
mayor de ciertos psicoanalistas y también de la
burguesía vienesa.

Federn, trató de que se le relevara de la
dirección del seminario
técnico, a lo cual se opuso Freud, diciendo que el
seminario no debía quitársele mientras reich
deseara seguir dirigiéndolo.

Freud estimaba a Reich.

3.-
CRÍTICA A LA MORAL
SEXUAL.

La obra de wilhelm reich, es una crítica
de la moral sexual
autoritaria.

En nombre de la conciencia
crítica revolucionaria de la conciencia comunista, de la
que ya marx decía que la "pasión esencial es la
indignación y la principal tarea, la denuncia", reich
combate la represión sexual y demuestra que su verdadera
finalidad es política y al servicio de
los explotadores y opresores.

Reich pone de manifiesto que no es casual el hecho de
que la iglesia
católica, la reacción, el fascismo y el
stalinismo, encabezado actualmente por Putin, propugnen la
represión sexual.

La familia es el órgano ideológico del
estado
capitalista, el órgano intermediario entre el individuo y el
estado,

Su objetivo
consiste en fabricar individuos en serie "adaptados" y
sumisos.

El dominio de la
minoría sobre la mayoría productora de las riquezas
y que se encuentra en la miseria, sólo puede lograrse con
el consentimiento, relativo, de los explotados, quienes se
convierten en agentes de su propia servidumbre.

La familia contemporánea crea los explotados
sumisos que la sociedad capitalista necesita para continuar
existiendo.

Es sabido que todos los regímenes autoritarios se
han apresurado a consolidar la institución familiar
(stalin, hitler, franco,
bush, fox, etc.), porque ella representa el cimiento del orden
capitalista.

El objeto de la supresión de la actividad sexual
es producir un individuo que se ajuste al orden autoritario, al
que se someterá a pesar de todas las miserias y
degradaciones.

Primero el niño deberá adaptarse a la
estructura de
ese estado autoritario en miniatura que es la familia, lo que
hará que más adelante se someta totalmente al
sistema social
autoritario en general.

La familia produce masivamente "la conciencia de
borrego" de la que habla marx.

Esto se debe, dice reich, a que la supresión de
la actividad sexual en los niños y
adolescentes es el mecanismo básico que produce la
estructura de carácter, adaptada al servilismo
político, ideológico y económico.

La represión de la sexualidad natural en el
niño, especialmente de su genitalidad, lo hace
aprehensivo, tímido y obediente, así como temeroso
de todo tipo de autoridad, lo
hace "amable" y "tranquilo", paraliza sus tendencias rebeldes
porque asocia la rebelión con la angustia.

Al inhibir la curiosidad sexual del niño, la
represión provoca un oscurecimiento general de su sentido
crítico y de sus facultades mentales.

La sociedad capitalista nulifica la razón
crítica del individuo, pues con su docilidad y
sumisión asegura que los patrones sigan explotando y
oprimiendo al pueblo.

4.- Moral sexual y
opresión política

Hemos dicho que la sociedad capitalista actual tiene un
interés vital en pervertir la razón crítica
del individuo, por eso le ofrece como pasto el embrutecimiento
masivo, por medio de la
televisión y el fútbol.

Por medio de la propaganda
subliminal en la que utilizando mujeres desnudas y provocativas,
obtiene provecho del hambre sexual de las masas para lograr
manejar su inconsciente y convertirlos en consumidores de los
productos que
se anuncian en la tv., revistas y periódicos.

La sociedad moderna, sobre todo sus masas trabajadores
se encuentran enajenadas a la ideología de la clase
dominante.

Enajenación que les impide descubrir la realidad
consistente en la explotación y en la injusticia de un
régimen sostenido con engaños y fraudes
electorales, como el cometido el 6 de julio de 1988 en nuestro
país.

Una vez que los obreros desechan la ideología
burguesa y abren los ojos de la conciencia, se dan cuenta
claramente de la amarga realidad que se encontraba oculta por la
ideología oficial.

Por eso la ciencia
freudomarxista es la que puede revelar a los explotados su papel
histórico como constructores de la futura sociedad
comunista, y descubrir que su neurosis, producida por el capitalismo,
se curará radicalmente en la medida que vayan luchando y
construyendo la futura sociedad.

Cuando el obrero tome conciencia de su neurosis y de su
sumisión política ante los explotadores y
parásitos políticos, será cuando realmente
sea peligroso par el sistema capitalista y en especial para los
que han tenido el poder
político.

Mientras el obrero continúe enajenado a los valores
burgueses, como la patria, la religión, el estado,
el gobierno, las leyes, los
políticos oficiales y el fútbol, continuará
siendo explotado por sus patrones y seguirá siendo
engañado por priístas que se turnan en el
poder.

Neurosis y sumisión política están
íntimamente ligadas.

El neurótico es un individuo enfermo por una
moral autoritaria que lo reprime sexualmente desde la infancia,
moral que lo convirtió también en un sumiso
político que sólo será libre y sano cuando
tome conciencia de su neurosis, de su enajenación a la ideología oficial y
luche por cambiar radicalmente las estructuras
socioeconómicas que lo han hecho un neurótico
explotado y oprimido.

5.- La
moral sexual y el matrimonio
autoritario
.

La castidad extraconyugal y la fidelidad conyugal de
la mujer no
pueden durar mucho debido a un alto grado de represión
sexual infantil.

Lo mismo sucede con la exigencia de castidad por parte
de las jóvenes. en los orígenes, y aún hoy
entre algunas sociedades
primitivas como la de los "trobriand", con rudimentaria
organización de economía primitiva,
donde la muchacha es libre de vivir su propia vida sexual hasta
el matrimonio.

Sólo al casarse se obliga a la castidad
conyugal.

En nuestra sociedad, y sobre todo en la última
década del siglo XIX y principios de
este siglo XXI la virginidad es un requisito femenino para el
contrato
matrimonial.

La castidad prenupcial y la estricta fidelidad conyugal
de la mujer se convirtieron en piedra angular de la mortalidad
sexual reaccionaria.

Mantiene la familia y el matrimonio autoritario,
formando una estructura psíquica que tiene miedo de lo
sexual.

Esta ideología de la moral sexual conservadora es
la expresión lógica
de los intereses económicos y políticos de las
clases explotadoras y dominantes de la sociedad capitalista
actual.

La exigencia de castidad a las muchachas priva de
objetos de amor a la juventud masculina, misma que acude a los
prostíbulos, donde las exorcistas le sacarán el
diablo sexual que llevan en el cuerpo.

La castidad de las mujeres provoca la prostitución, el matrimonio monógamo
desemboca en el adulterio. la
prostitución, y el adulterio son el premio de la doble
moralidad
sexual, que concede al hombre lo que niega a la mujer.

Esta sociedad capitalista machista permite y hasta es
bien visto, que mientras los jóvenes solteros pueden ir al
prostíbulo y los casados tengan por lo menos una amante,
la joven virgen tenga que esperar hasta la noche nupcial para
tener su primera relación sexual, y tal vez su primer
orgasmo, y la esposa se hunda en la resignación de su
conducta.

Pero las urgencias naturales de la sexualidad hacen que
la estricta moralidad sexual engendre lo contrario de lo que se
propone. la inmoralidad en el sentido reaccionario, el adulterio
y las relaciones
sexuales fuera del matrimonio se desmesuran en
fenómeno social y realmente grotesco.

Otros resultados de esa moral son la perversión
sexual por un lado, y por el otro la sexualidad mercancía,
tanto en el interior como en el exterior del
matrimonio.

Puesto que la sexualidad extra-conyugal es objeto de
mercadería, disminuye las tiernas relaciones entre los
sexos, sobre todo en la prostitución.

El chico "bien" reparte su sexualidad: satisface su
sexualidad con una muchacha de las clases "inferiores", y reserva
su amor para una muchacha de su misma clase social.

Esta disociación de la vida amorosa y la
promiscuidad sexual con el dinero, tiene como consecuencia
inmediata una completa degradación y una
animalización de la vida amorosa,

Una de cuyas más ilustres derivaciones es la
proliferación de enfermedades
venéreas, como el sida, mismas
que son patrimonio
obligado del orden sexual tradicional, pues su propagación
se debe a una degradación de la vida sexual fuera del
matrimonio, así como la utilización de la
sexualidad como mercancía.

6.- La
moral, principal arma ideológica de la sociedad
actual.

La moral, hasta ahora, ha consistido en un aparato
ideológico montado sobre la cabeza de los hombres, como un
reino independiente de dogmas y preceptos en parte religiosos, en
parte jurídico-políticos.

Así como a un artista no le sirven de nada los
preceptos de la retórica, a los hombres en general de nada
les ha servido hasta ahora guiarse por principios que poco tienen
que ver con la realidad.

La religión difunde la moral, pero su moral es la
de la pobreza. poco
sacó cristo, nos dice García Bacca, de predicar la
humildad a los poderosos.

La apetencia y el avorazamiento por el poder religioso,
monetario y político, ha aquejado y aqueja a su iglesia
misma,

Si cristo no viniere prestamente a pedir a los pobres el
orgullo, el sentimiento de dignidad, se
hallará con que otros, socialistas y comunistas,
habrán realizado ya lo que debió hacer su iglesia
hace 19 siglos: predicar el orgullo a los humildes, dignificar al
padre destruyendo su pobreza y no
canonizarla cual virtud social y triste ocasión de hacer
tristes méritos ante el cielo.

Tal misión la
han comprendido y comenzado a realizar desde hace siglo y medio
los socialistas.

Recientemente, sobre todo con la publicación del
libro "Fidel y la religión", y con el movimiento religioso
de la teología de la liberación, el acercamiento de
los marxistas a los cristianos se ha venido
incrementando.

Cuál moral difundida por el estado
burgués, cuáles "virtudes cívicas", pueden
resultar válidas a los ojos de los pueblos, si
éstos se hallan oprimidos por ese estado y sometidos a la
más profunda desigualdad
social.

La moral, en cuanto instrumento de dominación,
toma la forma de moral sexual.

Arma ideológica esencial para perpetuar el
sistema capitalista, pues por medio de ella se educa, se
domestica mejor dicho, a los niños para que cuando sean
padres transmitan ese veneno ideológico de la moral sexual
a sus hijos.

Con el fin de adaptarlos y convertirlos en
neuróticos considerados "sanos" por la medicina y la
psiquiatría oficial, que también son aparatos
ideológicos del estado, fiel representante defensor de los
intereses de los capitalistas.

La moral en general, así como el sistema
jurídico y la iglesia como instrumento político de
los ricos, sólo contribuirán a la felicidad del
hombre y la mujer, cuando la sociedad esté cimentada en
el amor, en la
propiedad común y en la armonía con la naturaleza y
el cosmos.

7.- Familia
autoritaria y represión sexual

Desde la aparición de la propiedad privada, es
decir, desde el modo de producción esclavista ha existido el
autoritarismo, factor indispensable entre la relación,
amo-esclavo, explotador-explotado, dominante-dominado.

Todas las formas de explotación del hombre por el
hombre, del colonizado, de la mujer, del niño., utilizan
el autoritarismo.

Aparentemente la autoridad se manifiesta
jurídicamente como algo que no quiere violencia sino
un determinado

comportamiento.

Desgarrando el velo ideológico que encubre la
realidad, notamos que la autoridad no es mas que una
máscara que oculta la violencia de la clase
dominante.

Al disfrazar su esencia violenta y representarse como un
concepto
pacífico, la autoridad se ahorra la utilización de
la fuerza
represora, economizando gastos y
obteniendo al mismo tiempo una actitud de
sumisión.

Mientras que los matrimonios grupales, propios del
matriarcado, se hallaban en armonía con la naturaleza y
los instintos humanos, la familia monogámica autoritaria,
obstaculiza y reprime los impulsos naturales del hombre,
produciendo una infinidad de enfermedades.

En tanto que en las familias grupales el padre era un
amigo, amoroso, protector y tierno camarada de su hijo, en la
familia autoritaria moderna el padre es un tirano, el pinochet
que representa los intereses de los explotadores y
opresores.

Mientras que en los matrimonios de grupo
existía la libertad
sexual, también la salud física y mental de la
familia, en cambio en la familia monogámica la
represión sexual produce todo tipo de enfermedades, que
van desde la neurosis hasta el
cáncer.

La familia autoritaria no solo produce las mentalidades
autoritarias de la clase dominante en sus propios hijos, quienes
heredan las riquezas, sino también produce en las clases
explotadas las mentalidades sumisas.

No es casualidad que los conservadores y reaccionarios
idolatren a la familia, y los rebeldes y anarquistas odien la
institución familiar, institución burguesa que
siembra sumisión en la mente de los explotados, oprimidos
y reprimidos.

La educación
sexual del aparato ideológico familiar no sólo
daña la sexualidad del individuo y le produce todo tipo de
enfermedades sino también condiciona a los explotados a
ser sumisos políticamente, frente a todo tipo de
autoridad.

8.- La
familia autoritaria como aparato de
domesticación

El principal lugar de gestación de la atmósfera del
conservadurismo burgués es la familia
coercitiva.

La institución de la familia autoritaria es el
resultado de la estructura autoritaria capitalista.

Es por lo anterior que la familia, bajo el capitalismo,
es la fábrica de ideologías autoritarias y de
estructuras mentales conservadoras.

Es el aparato de educación por el que
pasamos, casi sin excepción todos los miembros de la
moderna sociedad burguesa,

Desde nuestro nacimiento. la atmósfera, mejor
dicho el smog del ambiente
autoritario familiar, se incrusta en la mentalidad de cada uno de
los ciudadanos desde su primer hálito.

No es un azar que la juventud conservadora y
reaccionaria (carne del fascismo), que estudia en escuelas
particulares de lujo, como el tecnológico de monterrey, la
iberoamericana, la Universidad de
las Américas, etc., por regla general sea muy adicta a la
familia, mientras que la juventud revolucionaria es hostil por
principio, a esa institución.

El padre es el portavoz y representante de la autoridad
estatal en la familia, es decir, es el defensor de los intereses
de la clase dominante en el seno familiar.

El padre es una especie de sargento: subordinado en el
proceso de
producción (en su centro de trabajo), y jefe en su
función familiar; mira desde abajo a sus superiores, se
impregna de la ideología dominante, y es todopoderoso con
sus inferiores: su esposa e hijos.

No se limita a transmitir las ideas de la
jerarquía y de la sociedad, las impone.

El fin primordial de la educación, desde
sus pasos iniciales, es preparar a los niños para el
matrimonio y para la familia autoritaria.

El niño dirige sus primeros impulsos afectivos y
sexuales hacia sus padres.

El niño ama a su madre y odia a su padre y la
niña hace lo contrario.

Estos sentimientos de odio y de celos se impregnan
rápidamente de temor y de culpabilidad.

El temor en su origen, está relacionado con los
sentimientos sexuales hacia el sexo opuesto.
este temor, junto con la imposibilidad de satisfacer el deseo
incestuoso, obliga a la represión del deseo.

De esta represión nacen casi todos los trastornos
de la vida sexual ulterior.

No habrá represión si el muchacho aunque
forzado a la renuncia del incesto, pudiera practicar el orgaismo
(sin culpa), y el juego sexual
con muchachas de su edad.

De hecho los niños juegan sexualmente a
escondidas de sus padres, con sentimientos de culpabilidad que
les perjudicará en su sexualidad futura.

El niño que no participa en esos juegos es un
candidato seguro al
trastorno grave de su vida sexual futura y también como el
que lo hace con culpa, un neurótico adaptado y sumiso a la
autoridad capitalista.

La represión de los impulsos sexuales está
condicionada por la manera de pensar y de sentir de los padres,
quienes a su vez están influenciados por la moral sexual
antivida, propia del sistema capitalista autoritario.

En realidad la ideología burguesa, cargada de
moralina tiene más influencia sobre la educación
preescolar que sobre la educación familiar.

El niño no elude la fijación a los padres,
fijación de tipo sexual y autoritaria.

La autoridad paterna, severa o no, le oprime, aunque
sólo sea por la desproporción evidente que hay
entre su talla y la de los padres. muy pronto la fijación
autoritaria se desembaraza de la fijación sexual y la
reduce a la existencia inconsciente.

Más tarde, cuando los intereses sexuales se
dirijan hacia el mundo extrafamiliar, esta fijación
autoritaria se alzará entre los intereses sexuales y la
realidad como una muralla gigantesca de
inhibición.

Esta fijación autoritaria se sustrae a la
voluntad, es inconsciente,

Importa poco que esta fijación inconsciente a la
autoridad de los padres tome, a menudo, la apariencia de su
contrario, la rebelión de tipo
neurótico.

Esta no puede suprimir los intereses sexuales si no es,
quizás, bajo la forma de acciones
sexuales impulsivas, compromiso patológico entre la
sexualidad y el sentimiento de culpabilidad.

El desarraigo de esta fijación es el requisito
básico para una vida sexual sana. tal como están
las cosas hoy, muy pocas personas lo consiguen.

La fijación a los padres es un doble aspecto de
fijación sexual.

La sumisión a la autoridad paterna hace muy
difícil, si no imposible, el acceso a la realidad sexual y
social de la pubertad.

El ideal conservador del muchacho pacato y la muchacha
irreprensible, momificados en el infantilismo hasta bien entrada
su vida de adultos, es diametralmente opuesto a la idea de una
juventud libre e independiente.

Otro signo típico de la educación familiar
es que los padres, y en particular la madre, si no están
obligados a trabajar fuera de la casa, buscan en los hijos, para
desgracia de éstos, la gran satisfacción de su
vida.

Los hijos son entonces como pequeños animales
domésticos: se les puede amar, pero también
maltratar a voluntad.

Que la actitud emocional de los padres hace a los hijos
ineptos para la tarea educativa es una verdad muy
conocida.

La miseria conyugal en la medida en que no se agota en
las divergencias de la pareja, se derrama sobre los
hijos.

Esto ya es, en sí, un nuevo perjuicio para su
independencia
y para su estructura sexual.

Además crea otros conflictos: su refractariedad
al matrimonio por lo que han visto en la miseria conyugal de sus
padres, y la urgencia financiera posterior al
casamiento.

En la pubertad, se producen frecuentes tragedias cuando
los muchachos, a salvo felizmente de los peligros de la
educación infantil, intentan sacudirse también las
amarras de la familia.

Así pues, la restricción sexual que los
adultos deben imponerse para poder tolerar la existencia conyugal
y familiar, recae sobre los hijos. y como éstos, a su vez,
por razones económicas tendrán que zambullirse de
nuevo en la vida familiar, la restricción sexual se
perpetúa de generación en
generación.

Puesto que la familia coercitiva, desde el punto de visa
económico e ideológico, es parte constitutiva de la
sociedad burguesa autoritaria, sería de ingenuos esperar
la desaparición de sus estragos en el marco del actual
sistema capitalista.

Además éstos estragos son inherentes a la
constitución misma de la familia y
están fuertemente anclados en cada individuo, gracias a
mecanismos inconscientes.

A la inhibición sexual que proviene directamente
de la fijación a los padres, se añaden los
sentimientos de culpabilidad, derivados del enorme odio acumulado
en el transcurso de los muchos años de vida
familiar.

Si este odio permanece consciente puede desencadenar una
poderosa fuerza revolucionaria; hace que el individuo rompa sus
ataduras familiares y pueda convertirse en energía motriz
para intervenciones racionales contra las causas reales de ese
odio.

Si por el contrario, el odio es reprimido, conduce a
exteriorizaciones inversas: la fidelidad ciega y la obediencia
infantil patológica. estas actitudes
constituyen más tarde un inconveniente grave para aquellas
personas que quieran alistarse en un movimiento
liberal.

Tal tipo de individuos podrá muy bien abogar por
la libertad total y, al mismo tiempo, enviar a sus hijos a la
catequesis dominical o formar parte ellos mismos de una
asociación parroquial para "no hacer sufrir a sus ancianos
padres", aunque todo eso vaya en contra de sus
convicciones.

Presentará todos los síntomas de
indecisión y dependencia, consecuencia de su
fijación a la familia.

No es un buen militante de la libertad.

9.- Capitalismo,
represión sexual y neurosis

El instrumento ideológico más importante
de las clases dominantes lo constituye la moral sexual
autoritaria existente.

Gracias a esta moral antivida se produce la neurosis y
la psicosis.

Antes de que naciéramos, nuestros padres,
educados en la moral judeo-cristiana, han sido programados para
que, cuando lleguemos a este mundo, seamos víctimas de ese
tipo de educación, en el que se nos niega la libertad y el
placer.

Desde nuestros primeros días de vida comenzamos a
sufrir la represión sexual, cuando nuestros padres nos
prohíben gozar con nuestro cuerpo y en especial con
nuestros labios.

Los tormentos que nos aplican como el de agregar picante
a nuestros dedos o el de amarrarnos las manos con el fin de que
no nos chupemos los dedos, son la primera manifestación de
una serie de sufrimientos que tendremos a lo largo de nuestra
vida.

Una vez en la escuela tendremos
que adaptarnos a otra serie de injusticias y tormentos productos
del autoritarismo y moral sexual imperante.

Los exámenes, por ejemplo, son en realidad un
tormento en los que muchos maestros gozan sádicamente y en
el que nosotros quedamos alterados de nuestros nervios, hasta el
grado de quedarnos traumados al sólo escuchar que nos
aplicarán un examen.

La escuela también es el medio utilizado por la
clase dominante para adaptarnos a la sociedad enferma y si no nos
adaptamos al sistema social, entonces se nos diagnosticará
locura y seremos internados en un manicomio.

La escuela, bajo el capitalismo y el socialismo
burocrático, es el lugar en donde se nos enseña a
subsistir en el manicomio social. a veces la enseñanza falla y se traslada al educando
al pequeño manicomio.

La fábrica y la oficina son los
espacios en los que el vampirismo, de los sistemas sociales
mencionados, se oculta, toma forma de ideología y se
pierde en el misterio de la noche.

Al que no produce plusvalía (tiempo de trabajo
que roba legalmente el patrón), lo excluyen o recluyen en
el pequeño manicomio.

El diagnóstico psiquiátrico, arma
política de la locura fascista, sea de derecha o de
izquierda, tiene como fin asustar y castigar a todo hombre o
mujer rebelde que no acepte autoridad o injusticia alguna, ni
desee con su sangre,
incrementar el poder monetario y político de las clases
dominantes.

el trabajo neurótico asalariado es el
eslabón que nos encadena al gran manicomio social
capitalista.

en conclusión, la burguesía tiene sus
capataces: el opio moral, el religioso, el futbolístico y otras ideologías
disfrazadas de libertad.

10.- Orden manicomial
y orden capitalista
.

El manicomio es uno de esos momentos sociológicos
fundamentales. lugar precioso de aprendizaje de la
realidad social, de aprehensión de sus verdaderos valores, si se
quiere una espléndida escuela
sociopolítica.

Los manicomios pueden enseñarnos muchas cosas
sobre una sociedad donde el oprimido está cada vez
más lejos de las causas y de los mecanismos de la
opresión.

Es que el manicomio una de esas situaciones
límite en las que precisamente por serlo, afloran, de
manera más clara y patente las verdaderas coordenadas del
orden social capitalista y sus contradicciones fuertemente
empañadas, habitualmente, por la
ideología.

El manicomio es, históricamente, el espacio de la
locura, representa la negación absoluta a una serie de
valores esenciales al orden social establecido.

El loco es internado porque su locura lo hace
inaceptable socialmente, para la familia, para el médico y
para el poder gobernante, ya que traspasa el límite de lo
establecido.

El manicomio encierra toda la locura del mundo, pero
además, establece con ella un doble vínculo: en
primer lugar, la excluye, la separa del mundo de los normales
para, después, internarla, domesticarla en un severo
trabajo de reeducacion del loco.

Esta doble funcionalidad del manicomio, constituye
así, un real sentido y significación
sociales.

Por una parte encierra, excluye y segrega la locura que
el loco vive, en tanto que ésta ha llegado a ser una
situación límite respecto a la norma social
establecida.

Por otra parte, se organiza en función de la
locura y consecuentemente, lleva al límite la norma, con
la esperanza de paliar ese error de educación que es el
loco y su locura.

La educación en el sistema capitalista
está religiosamente orientado por la doble
conceptuación de bueno-malo, conveniente-inconveniente,
provechoso-perjudicial, positivo-negativo, hasta llegar al
productivo-improductivo.

En general se afirma el primer término para negar
el segundo, por cuanto el signo de lo productivo se hace norma e
impone sus valores: la eficacia, el
orden, la autoridad, la responsabilidad, valores todos que precisa el
sistema como una condición más de su existencia,
para los cuales el proceso educativo intenta lograr un consenso
generalizado a nivel individual.

La función de la educación capitalista es
conseguir la interiorización de dichos valores,
funcionales al sistema, a la vez que, en el mismo proceso, se
excluye y niega los valores signados como improductivos, tales:
la ineficacia, el desorden, la desobediencia, la
irresponsabilidad, la irracionalidad, o lo que es lo mismo, con
otras palabras, el inconsciente, su ello y su deseo.

La educación es una condición de
existencia del sistema social capitalista, que en última
instancia tiene como objetivo la afirmación de los valores
a nivel psíquico, y exclusión, repudio y
negación de todo valor
improductivo.

El proceso educativo está dirigido
tendenciosamente a alcanzar aquellos objetivos. y
digo "tendenciosamente", por cuanto caben en él fisuras y
fracasos.

En este sentido puede hablarse de errores de
educación.

Todos los sectores dominados o marginados serían
la expresión de estos "errores", y el producto de
uno de ellos sería la locura.

Que el loco es, en la perspectiva del sistema
capitalista, el extremo remate del "mal educado", lo confirma la
cotidiana confusión que entre locura y mala
educación nos propone la conciencia monjil, tan
ampliamente introyectada en la psiquiatría
manicomial.

Y siendo el loco y su locura un "error de
educación", es lógico que sean tratados con la
reeducación.

Excluidos en cuanto representan los valores
improductivos, propuestos como objetos a reeducar en la medida
que se pudieran ser devueltos a los valores
productivos.

El real problema del manicomio no es sólo y
exclusivamente la violencia abierta y directa (celdas y
pabellones de castigo, hábitat
inhumano, tratamiento represivo, etc.), sino su
organización (fiel reflejo de la organización
social), que incluye otro tipo de violencia: la de la
técnica terapéutica reeducativa, unas técnicas
muy rudimentarias, comparables a las técnicas
pedagógicas-educativas, creadas en torno al
principio de la "letra con sangre entra".

Las nuevas técnicas psiquiátricas siguen
considerando al loco y su locura como un error que necesariamente
hay que subsanar, desde la perspectiva de quienes están en
la norma.

La violencia persiste por cuanto ha estado encerrada
siempre en el principio básico, a saber: el loco y su
locura deben ser normalizados.

También al loco se le define como "desordenado",
incapaz de mantener un orden o norma de sus actos, hábitos
o costumbres por lo que, en su aislamiento manicomial, se le debe
imponer una rígida coordinación de su vida cotidiana,
negándole a través de ella toda libertad de
iniciativa y toda espontaneidad que, por "tender al desorden",
serían "perjudiciales".

El loco es, por definición, un ser capaz de
violar los principios y reglas de la moral sexual o incapaz de
relacionarse más allá de una serie de
extravíos, abusos y perversiones sexuales, y por ello el
manicomio debe incluir la estricta separación de los sexos
y con ello la negación de su libertad sexual.

El loco queda también definido como improductivo,
por lo que el espacio manicomial debe organizarse sobre la
ideología del trabajo.

En el orden manicomial capitalista es imposible separar
la doble función de exclusión y
reeducación.

La "necesidad" de reeducación sirve de base
ideológica para justificar la exclusión (se excluye
para reeducar, se reeduca excluyendo).

Igualmente, es imposible deslindar la violencia
implícita en una u otra función: el encierro, tal
como muchas veces se ha comprobado en la práctica
cotidiana, no es un acto gratuito sino la expresión de un
rechazo.

El sistema organizativo manicomial que reemplaza al
exterior para la reeducación del loco no es sino la
consumación organizada de este rechazo, racionalizado en
la perspectiva de la ideología médica.

Fuera y dentro del manicomio, la locura, en cuanto se
significa como diferencia, es juzgada y castigada. y se juzga
mediante un juicio en el que sería ingenuo decir que no
hay juez, abogado ni testigo, porque todas estas funciones
están recogidas en una sola figura: la del médico
cuyo poder ha quedado establecido por un contrato social
que le hace garante de la norma.

Desde finales del siglo XVIII el certificado
médico ha llegado a ser obligatorio para internar a los
locos. en el interior mismo del manicomio, el médico ocupa
un lugar preponderante en la medida en que instala la locura como
un espacio médico.

La intervención del médico no es realizada
en virtud de un saber o de un poder medicinal que él
tuviera como algo propio y que estaría justificado por un
conjunto de conocimientos objetivos.

No es en su calidad de
"sabio" como el "homo medicus" posee autoridad dentro del
manicomio, sino como prudente.

Si se exige la profesión medica, es como
garantía jurídica y moral, no como titulo
científico.

La repetida inmersión en el agua hasta
segundos antes de perecer ahogados, la producción de
dolorosos absesos mediante la inyección de substancias
tales como la trementina, las lobotomías, el
electrochoque, el encierro y el aislamiento, la separación
de los sexos, la puntual y la monótona organización
de la vida cotidiana, la ideología del trabajo y la
"laborterapia" etc., son ejemplos de violencia que "el loco" debe
soportar desde la perspectiva de su "tratamiento". sin alguno osa
contestar a estas violencias es su locura la que
contesta.

Desde el "tratamiento moral", del siglo XIX, hasta las
modernas técnicas analíticas de la
psiquiatría institucional, el encuentro de la
ideología médica, y el confinamiento de la locura,
sólo han sido un, más o menos sutil encubrimiento
de la violencia necesaria para domesticar al loco; acallarlo,
silenciar su locura. en la historia del manicomio
aparece la palabra del psiquiatra y con ella el orden
capitalista: los valores y la moral de la clase dominante. cuando
ha querido surgir la palabra de la locura (schreber).

Se ha hecho patente la unión de la
psiquiatría con el poder político
burgués.

Los psiquiatras se han unido con el estado y la moral
para acallar la rebeldía salvajemente.

11.
Capitalismo, autoritarismo familiar y locura.

Al principio de este siglo se publicó un libro
que con el tiempo sería el caso clínico más
estudiado por psicólogos y psiquiatras.

Me refiero a las memorias del
dr. schreber, quien enloqueció a los 42 años de
edad, recuperándose luego y volviendo a enloquecer ocho
años y medio después.

Los especialistas en enfermedades mentales consideran
este caso clínico enmarcado, en lo general, dentro de la
psicosis.

El padre de schreber, que supervisó su
educación, fue un destacado médico y pedagogo
alemán, su influencia sobre la vida del hijo fue muy
grande. ante la época "blanda y decadente", debido a la
laxitud de la educación y la disciplina de
los niños en el hogar y en la escuela.

Se propuso combatir la flojera de su época
mediante un complejo sistema de educación infantil, cuyo
fin era hacer a los niños obedientes y sumisos a los
adultos.

Las ideas del padre de schreber acerca de la vida
familiar reflejan, como una caricatura en miniatura, las ideas
ampliamente difundidas en el sistema capitalista, en su actual
etapa de decadencia.

Los varones adultos tienen que ser dominantes, la
sexualidad de los niños y adolescentes tiene que se
dominada.

Los padres, por ignorantes, fanáticos e
intolerantes que sean, tienen que supervisar la moral de sus
vástagos hasta, por lo menos, el final de la
adolescencia.

Los niños tienen que aprender pronto a someterse,
a menudo, sin críticas a la voluntad de sus padres, con el
fin de adaptarse a la sociedad actual capitalista, donde
también deberán someterse sumisamente a las
injusticias del autoritarismo.

El pedagogo alemán Schreber, afirmó que
los padres de familia deben inculcar el amor hacia Dios, Padre de
la humanidad y el amor al padre, dios de los hijos.

El Dr. Schreber pensaba que los padres debían
restringir la libertad de sus hijos mediante severas disciplinas
en aras de la salud; moral, mental y física.

Creía que los niños son criminales o
enfermos mentales desde su nacimiento, o que con seguridad
llegarían a serlo si no se les rescataba a
tiempo.

Proponía, entre otras medidas, que los padres se
reuniesen, constantemente, con el fin de controlar mejor la
conciencia de los niños.

Este pedagogo alemán, pretendía saber,
como los conductistas, lo que es bueno, elevado, correcto y fino
y lo que no es.

En otras palabras se tomaba atribuciones de un dios que
guía a su pueblo elegido.

Schreber, como todos los maestros y padres autoritarios,
luchaba contra la "mala" conducta infantil, que consiste en las
manifestaciones naturales del niño.

Luchaba contra la sensualidad y la sexualidad, la
adolescencia, la blandura y la cobardía, pues según
él, llevaba a los individuos a las depresiones,
enfermedades mentales y suicidios.

Aplicando sus métodos
inquisitorios-pedagógicos, (parecidos a los métodos
fascistas), a sus hijos, logró lo que quería
erradicar: la locura hizo presa de sus dos hijos y el suicidio fue la
salida de uno de ellos.

Pensaba que el padre debe enseñar a sus hijos lo
que es bueno y justo desde edad temprana.

Los buenos hábitos según él, deben
ser producidos y controlados por el padre.

Acostumbrar a un niño significa programarlo para
que obedezca, sumisamente, las órdenes de los padres,
maestros, patrones y la clase dominante capitalista.

Educar un niño, según schreber, significa
imponer una regla sobre cada detalle de su vida, sobre cada
pensamiento y
actividad cotidiana del individuo, preparándolo así
para que la ideología dominante y las figuras
autoritarias, como los maestros, patrones, líderes
sindicales y gobernantes, determinen su existencia alienada y
neurótica.

La finalidad de este tipo de pedagogía autoritaria, propia del sistema
capitalista, es la de lograr que el niño, y luego el
adulto, sea un sumiso y obediente incondicional.

Si llegara a surgir la desobediencia, deberá ser
aplacada, mejor dicho aplastada, hasta convertirla en una toral
sumisión, empleando, si fueran necesarios, los castigos
corporales.

El psicoanálisis ha demostrado que los modelos de
relaciones personales grabados en los niños, desde su
tierna infancia, suelen permanecer para toda la vida.

Los individuos repiten inconscientemente formas de
relaciones sociales de sumisión a la autoridad, que le
fueron programados desde pequeños.

Existe la paradójica situación que este
tipo de pedagogía divide, aliena, enloquece al ser humano,
al lograr que éste considere que su programación para la sumisión no le
fue impuesta por unos padres y la clase dominante capitalista,
sino que él, conscientemente, en "libertad", se
programó a sí mismo.

12.- La
sociedad capitalista produce neurosis y locura

La sociedad capitalista, bajo la cual arrastramos
nuestra existencia, es una sociedad neurótica que produce
neurosis a escala masiva y
la fábrica de dicha personalidad
es la familia.

Es tal la cantidad de neuróticos que arrastran su
vida en el planeta tierra, que se
ha llegado a pensar que los que sufren tal anomalía son
sanos y normales.

Ahora bien ¿cuál es el mecanismo utilizado
por la sociedad para producir la neurosis?

El mecanismo según freud se llama complejo de
Edipo.

Este complejo consiste en el deseo del niño hacia
su madre y el odio hacia el padre.

Para "superar" este complejo es necesario que el
pequeño se identifique con el enemigo, es decir, querer
ser como el padre neurótico, y cuando lo consigue se
adapta a la sociedad.

Una vez adaptado será un neurótico
más que reproducirá el sistema capitalista, no
sólo en lo económico por medio de la
plusvalía (trabajo no pagado por el patrón), sino
por medio de su conducta sumisa y adaptada.

Después que ha aceptado el individuo su destino,
ser ingeniero, médico, abogado, etc., el camino que
recorre para lograrlo está lleno de buenos
propósitos y carente de obstáculos.

En cambio el camino al cielo está lleno de
espinas y se corre el peligro de ser diagnosticado de
loco.

Este camino lo eligen aquellos que deciden no aceptar la
domesticación social.

En otras palabras, la sociedad capitalista produce
masivamente neuróticos adaptados al sistema, disfrazados
de sanos.

Para el capitalismo es sano aquel que produce ganancias
y consume las mercancías veneno;

Asiste a la escuela, es asalariado, tiene una esposa,
una tv., unos hijos y, por lo menos, una amante.

Ahora bien ¿cómo es producida la locura?
según los anti-psiquiatras, la psiquiatría es una
ideología de la clase dominante, es decir, aquel individuo
que no acepta esta sociedad neurótica, no produce
ganancias, ni se casa por las 3 leyes, ni asiste a la iglesia, es
clasificado y diagnosticado como enfermo mental, al grado de que
se le confina en un manicomio con el fin de que su mal no
contagie a los neuróticos adaptados.

En síntesis,
este manicomio social que reproduce a la sociedad capitalista,
solo será superado con la sustitución de esta
sociedad enferma por una sociedad sana. una sociedad realmente
humana, basada en el amor, la libertad y la felicidad

13.- La locura y la
sociedad capitalista.

La locura, como la neurosis, son enfermedades sociales
producto de una sociedad inhumana, cuyo fin no es la felicidad ni
la libertad del ser humano.

La sociedad capitalista es una organización
social neurótica basada en la explotación del
hombre por el hombre.

Los niños domesticados por la educación
escolar y familiar son aquellos ciudadanos que en forma resignada
y sumisa aceptan todo tipo de injusticias que se cometa con
ellos.

En otras palabras, los adaptados a esta sociedad enferma
son aquellos individuos sumisos y neuróticos que con su
trabajo incrementan las ganancias de los patrones y reproducen
inconscientemente todo el sistema social que los produce como
neuróticos asalariados.

Pero no todos se adaptan a este sistema.

Existe una minoría de individuos que no se
resignan a ser domesticados y el castigo que reciben por no
aceptar las normas existentes
de la sociedad moderna es el de ser recluidos en esa
cárcel especial llamada manicomio.

ahora bien, existen dos tipos de manicomios, el que
todos conocemos y el que se llama familia.

La familia, bajo el capitalismo y el socialismo
burocrático, es el manicomio disfrazado de buenas palabras
y es la institución autoritaria en su rígida
desnudez.

14.-
Patología de la cultura en las
sociedades patriarcales

Desde el esclavismo hasta
la actualidad, es decir desde el origen de la propiedad privada,
las clases
sociales, la explotación del hombre por el hombre, la
formación del aparato de estado, como instrumento de las
clases dominantes, todas las manifestaciones culturales son en
sí manifestación de la patología de sus
autores quienes a su vez han tenido que sufrir para ser
reconocidos por sus contemporáneos.

La mayoría de los grandes artistas han muerto sin
haber sido reconocidos como grandes hombres.

Cabe agregar que la cultura universal desde su
aparición hasta la actualidad, ha sido gozada por una
minoría social, parte de la clase dominante y parte de la
pequeña burguesía,

La mayoría de la población trabajadora de la ciudad y del
campo a lo largo de toda su vida y por generaciones ni siquiera
saben de la existencia de beethoven, Dostoyevski, Van Gogh,
Miguel Ángel, Nietzsche,
etc.

En cuanto a la enfermedad que han sufrido los grandes
genios de la humanidad, han sido la neurosis y la
psicosis.

Por ser las sociedades particulares de tipo
neurótico en la que estos genios han existido, han sufrido
neurosis, aunque exista un número de ellos que han estado
en la psicosis y desde ella, o antes de llegar a ella, han
producido sus obras maestras, como Holderling, Maupassant,
Nietzsche, Van Gogh, etc.

Es necesario también agregar que freud, el
fundador del psicoanálisis, afirmó en sus libros que las
obras de la cultura son como un sueño, es decir, son una
realización alucinatoria de deseos reprimidos.

En otras palabras la cultura realiza en la novela, la
música, la
pintura,,el
cine etc., lo
que el autor y sus lectores no pueden llevar a cabo en la vida
real.

El porqué los grandes autores logran conmover a
sus lectores, se debe a que sus obras hablan de un mundo que le
está vedado a la mayoría de la
población.

Igual que las telenovelas, la obra literaria, por
ejemplo, hace vivir al lector una o muchas vidas de los
personajes que le gustaría vivir en la
realidad.

Si la TV. hipnotiza, la obra literaria nos traslada a un
mundo ficticio en el que gozamos.

La lectura
también es una evasión, una locura que puede
producir en nosotros una adicción parecida a la de
las drogas o
el alcohol.

Mientras la sociedad en que arrastramos nuestra
existencia nos siga prohibiendo nuestros deseos y ansias de goce
y de felicidad, continuaremos huyendo hacia ese mundo de
fantasía, a ese país de las maravillas al que van
todas las niñas y niños, carentes de amor y de
cariño.

La cultura dejará de ser una evasión, un
mundo de locura, cuando el mundo real sea un mundo basado en el
amor, la libertad y la felicidad de todos los seres humanos de
la
tierra.

15.-
Carácter genital y carácter
neurótico.

El carácter genital tiene un modo de andar
ágil y firme, un trato directo y franco, una mirada clara
y brillante, una voz cálida; es activo y eficaz sin ser
agitado.

Considera los problemas con objetividad y realismo y se
esfuerza por hallar soluciones
racionales.

Si bien los tormentos de la culpabilidad casi no lo
alcanzan, en cambio conoce la angustia y la inquietud.

Puesto que es sensible a las complejidades, a las
dificultades, a las amenazas y a la riqueza de lo real, a las
cuales se enfrenta con un espíritu crítico y
creador, fraternal con sus amigos.

Ama a su mujer, goza con ella y la hace gozar
apasionadamente sin sentirse con ello sometido al rigor
monogámico.

Toda ley obligatoria y
represiva le repugna y sólo reconoce la autoridad fundada
en la razón; que el valor esté armonizado en el
principio de autorregulación.

Puesto que establece la supremacía de la inteligencia y
la libre circulación de la energía libidinal; se
opone ( con argumentos racionales y precisos alimentados por una
curiosidad siempre despierta) a todas la empresas del
misticismo, del mecanicismo, de la demagogia, de la rabia
destructora (propia del fascismo), e impulsa sin exhibicionismo,
en su práctica cotidiana, todo aquello que favorece la
libertad, el amor, la alegría de vivir.

Su plenitud orgásmica y el rechazo moderado de
los impulsos pregenitales (goce oral y anal) e incestuosos,
alimenta, casi de modo espontáneo, las sublimaciones
creadoras: sociabilidad abierta y positiva, vida cultural
intensa, compromisos políticos revolucionario,
autonomía, racionalidad, realismo, positivismo,
intensidad.

El carácter genital encarna para wilhelm reich el
"equilibrio
perfecto de la economía libidinal basada en su capacidad
para la experiencia sexual plena".

El carácter neurótico, puede describirse,
desvalorizado como el negativo del genital.

En el neurótico predominan las negaciones, las
negativas, las denigraciones; los impulsos pregenitales e
incestuosos son violentamente reprimidos y vuelven de modo
obsesivo en forma de fantasmas que
invaden y pervierten la actividad cotidiana, y en síntomas
cargados de angustia.

El yo, el ello, el super yó, forman una perpetua
ronda de conflictos, fuentes de
culpabilidad y de inhibición.

Tras la figura paterna, amantes, amigos o enemigos, se
deslizan las imágenes
de parentescos fuertemente cargadas de afectos.

El sujeto evita la confrontación con el otro y
con lo real y prefiere someterse servilmente al orden reinante
(sumisión al orden autoritario capitalista).

Se abandona a impulsos místicos y al influjo de
los jefes (en los que ve a sus padres autoritarios) y pronto los
abandona.

La Impotencia orgásmica y desequilibrio libidinal
se expresan por medio de comportamientos estereotipados,
compulsivos, impulsivos o rígidos, nerviosos o
acompasados, resignados o reivindicados.

Reich también es claro cuando afirma que la
mayoría de los hombres y mujeres que subsisten bajo el
capitalismo autoritario, sufren de neurosis, pues es el
carácter que requiere este sistema para poder continuar
explotando a los trabajadores y oprimiéndolos
políticamente.

Por esta razón reich es muy consciente de que
sólo los que posean el carácter genital pueden ser
capaces de ser revolucionarios y luchar por una sociedad
realmente humana que esté acorde con el cuerpo, los
impulsos genitales, la naturaleza, y la energía
cósmica inteligente.

16.- El mito de la
sexualidad procreadora en el capitalismo

En el área de la cultura cristiana occidental, la
moral autoritaria de la sociedad capitalista siempre ha intentado
que la práctica sexual quede reducida a la mínima
expresión, a lo imprescindible para la
supervivencia.

Por todos los medios
posibles, de las más diversas formas y utilizando toda
clase de argumentaciones (religiosas, filosóficas,
sociales, científicas, psicológicas, legales, etc.)
se ha tratado de que el sexo fuese identificado y calificado
únicamente en su función reproductora o procreadora
de la especie humana.

En este sentido, la sexualidad ha aparecido como
sinónimo de la anatomía y fisiología de la procreación del
hombre.

La misma palabra "sexo", hasta hace poco tiempo
resultaba para muchos timoratos, vergonzante o
grosero.

Por ello a menudo no se habla de instinto sexual, se le
denomina "instinto genético" o instinto de la
generación.

A este instinto se le concibe todavía de un modo
finalista, utilitarista y hasta productivo, pero no se le
mencionaba como un medio para alcanzar el goce y el placer
sexual.

Para la moral sexual predominante, el orgasmo no
sólo no debía mencionarse, sino que hasta se
concibe como una aberración sexual propia de las
prostitutas y degenerados sexuales.

La ideología de la sexualidad como
procreación es una idea deliberadamente represiva y
moralista. estigmatiza toda expresión sexual que no tenga
como finalidad el nacimiento de un nuevo ser,
calificándola de perversa, anómala o
degenerada.

Considera a la vejez como
asexuada. y niega la sexualidad infantil, arrojada al silencio de
la supuesta inocencia de los niños.

Sigmund freud,
fue el primer médico que, rompiendo abiertamente con la
moral autoritaria, afirmó la existencia de la sexualidad
infantil.

mantuvo la opinión de que el niño era un
"perverso poliforme".

Si la precocidad sexual no era un trastorno del desarrollo
infantil, entonces todos los niños serían perversos
y poliformes, ya que su sexualidad adopta múltiples formas
distintas a la forma generalizada y procreadora, la única
socialmente permitida por al moral antivida.

Los hallazgos de freud, obtenidos a través de la
técnica psicoanalítica en adultos, resistieron
todas las críticas, y al final tuvieron que ser
aceptados.

sin embargo los médicos conservadores, sacerdotes
de la moral burguesa, siguen defendiendo la inocencia sexual de
los niños "normales" o "sanos", quienes
paradójicamente, por la represión sexual
están domesticados y neurotizados por la familia
autoritaria y la sociedad capitalista actual.

17.- La
"función del orgasmo" de Wilhelm Reich

Los trabajos de reich, de su tercer periodo,
están basados en su concepción global de la vida
sexual y de la energía libidinal.

El placer expansión como antítesis de la
"formula del orgasmo", definida por un ritmo en cuatro tiempos,
tensión mecánica –carga eléctrica
–descarga eléctrica –relajación
mecánica.

Reich se propone medir esas cargas y descargas
eléctricas, examinar el papel desempeñado por los
diversos estímulos, excitaciones y emociones en
diferentes órganos y tejidos
excitados, definir las relaciones existentes entre los
fenómenos mecánicos y psíquicos
concomitantes, poner a prueba sus proposiciones previas (surgidas
de la práctica psicoanalítica y del análisis
del carácter), acerca de la naturaleza y la función
de la sexualidad y de la vida en general, determinar las
eventuales vinculaciones entre el funcionamiento
bioeléctrico de los organismos vivos y el universo,
físico, etc.

En su libro: "La función del orgasmo", resume los
resultados más significativos de sus investigaciones:

-la superficie de la piel, en
condiciones normales se caracteriza por un "potencial
básico" que representa el potencial biológico
normal de la superficie del cuerpo.

-algunas partes del cuerpo se distinguen por sus
respuestas diferentes a las demás; son las "zonas
erógenas", labios, lengua, palmas
de las manos, pezones, lóbulo de la oreja, ano, pene,
mucosa vaginal y, curiosamente, la frente (a la altura del
"tercer ojo" de los lamas de Tibet).

El potencial de estas zonas, unas veces elevado y otras
débil, permiten diferenciar a los sujetos desde el punto
de vista vegetativo: sujetos rígidos y fríos,
sujetos flexibles y libres.

Todo aumento de potencial en una zona erógena va
acompañado por una sensación de placer: impulso,
onda, calor, prurito
o sensación de "fusión", a
la inversa, disminución de potencial y disminución
de placer van a la par.

Los fenómenos de congestión o
entumecimiento que afectan a los órganos y tejidos no
provocan automáticamente sensación de placer; para
que esta sensación sea perceptible es necesario que la
congestión mecánica del órgano segregue un
aumento de carga bioeléctrica, derivándose de esto
la siguiente fórmula: la intensidad psíquica de la
sensación de placer corresponde a una cantidad
fisiológica de potencial bioeléctrico.

Para la mayoría de los biógrafos de Reich,
este psicoanalista al dedicarse a la investigación de la energía de la
vida y vincularla a la energía cósmica, cayó
en la locura, pero en cambio para su biógrafo más
serio y profundo: Luigi de Marchi, Reich en su tercer
período, llamado orgonómico por su
investigación del orgón (energía
cósmica), es la etapa más brillante y genial donde
reich se desenvuelve libremente, pues al no tener a freud, ni a
unos burócratas autoritarios comunistas, que lo limitaran
y reprimieran, pudo dedicarse todo el resto de su vida,
día y noche, a la investigación de dicha
energía.

18.- Urge una
educación sexual para adolescentes
.

Hace tiempo, la directora del "Centro de
Orientación para Adolescentes", afirmó que el 25%
de la población mexicana tiene entre 12 y 19 años
de edad, y de ese grupo muchos cuentan entre 15 y 19, mismos que
realizan ya relaciones sexuales ocasionando embarazos no
deseados, enfermedades sexuales, abortos, matrimonios precoces, y
madres solteras de corta edad.

La especialista aseguró que la sexualidad y el
proceso productivo humano constituyen dos contextos educativos
que debe se cuidados en nuestro país.

Declaraciones de este tipo deben ser tomadas en cuenta
no sólo por las instituciones como la SSA, ISSSTE y el
IMSS, sino por
las organizaciones de padres de familia, los maestros, los
sindicatos, grupos
políticos, etc.

En cuanto a los contenidos temáticos de
educación sexual incluidos en los textos gratuitos, cabe
señalar que sólo se refieren a la fisiología
sexual y se encuentran cargados de ideología moral, en
cuanto se considera a la sexualidad únicamente con fines
reproductivos y no se indica que a nivel individual el objetivo
es lograr el placer orgásmico.

Por lo que se refiere al consejo nacional de
población (CONAPO), es solamente un consejo de tipo
consultivo, es decir, únicamente planea actividades,
algunas de ellas llevadas a cabo con pocos recursos
monetarios, que tienen destinados para este fin.

Considero que la educación sexual masiva para los
jóvenes es ya una necesidad nacional, no basta titular a
1985, como el año de la juventud, es urgente que iniciemos
una campaña de educación entre todos los
jóvenes mexicanos.

Para nadie es un secreto que la educación sexual
errónea que reciben los jóvenes desde
pequeños son la causa, no sólo de embarazos no
deseados, abortos, enfermedades venéreas, sida, sino
también es la causa de las neurosis, las psicosis y las
perversiones.

El motivo por el cual no se llevan a cabo
campañas de educación sexual, se debe al miedo que
tienen los poseedores de las riquezas y detentadores del poder
político, pues bien saben que la juventud es una bomba
lista para estallar si se le proporcionan las condiciones de
libertad suficientes como para que tomen conciencia de su
potencialidad revolucionaria, potencialidad que ha demostrado su
efectividad en el movimiento del "sexpol",.

Movimiento de sexualidad política que
estalló entre los jóvenes alemanes en los
años 30 del siglo XX, cuando Reich, encabezó una
lucha sexual de los jóvenes en contra de la moral
represora de las clases dominantes.

Corriente que por cierto fue reprimida por la
dirección stalinista burocrática del partido
comunista alemán.

Para una segunda edición
de un movimiento sexual político los jóvenes
mexicanos tienen la acción
histórica.

19.- El
asesinato de Cristo.

La crisis social
que estamos atravesando se debe básicamente a que los
hombres, y mujeres en general, son incapaces de gobernar sus
propias vidas.

A partir de esta incapacidad han surgido crueles
dictaduras, que carecen de todo fin social racional y que no
están acordes con la naturaleza y la energía
cósmica.

Por todas partes, hombres (y mujeres) serios quieren
saber la verdad desnuda.

En su libro "el asesinato de cristo, Reich analiza los
graves problemas de la sociedad humana actual.

Dios es la naturaleza y cristo es la realización
de la ley natural.

Dios (naturaleza) creó los órganos
genitales de todos los seres vivientes.

Los hizo para que funcionen de acuerdo con la ley
natural.

No es un sacrilegio, una blasfemia, adjudicarle al
mensajero de la energía cósmica en la tierra, una
vida sexual natural.

Por el contrario, es el enraizamiento de dios en la
más limpia profundidad del hombre.

Esta profundidad existe desde el mismo comienzo de la
vida.

La reproducción se añade a la
genitalidad tan sólo en la pubertad.

El amor genital existe mucho antes de la función
de la reproducción.

Por tanto la naturaleza no creó el abrazo genital
con el único propósito de la
reproducción.

Reich imagina a Jesús como un hombre joven,
fuerte, atractivo, deseable y rodeado de mujeres sanas, que
frecuentaba la compañía de pescadores y del pueblo
en general.

Reich afirma que Jesús ama a las mujeres y
conoció el amor físico con las mujeres, así
como conoció todas las demás cosas
naturales.

Nada en su vida nos hace pensar en la castidad o el
ascetismo.

Su palabra es de amor sentimental y corporal.

Cristo muere cada vez que la vida es golpeada,,
molestada, reprimida, en expresión
auténtica.

Cristo es asesinado en toda violencia que inflige al
niño, a la mujer y a todo ser débil e
indefenso.

El asesinato de cristo es el triunfo de la coraza
neurótica, de la peste emocional sobre un brote fulgurante
de la sexualidad vital, en su aspecto energético
más puro.

El mal, el diablo, es un dios pervertido, originado en
la represión de las cualidades de la gran energía
cósmica inteligente.

La falta de este conocimiento
es una de las piedras angulares de la tragedia humana.

Descubrir esa tragedia requiere conocer el secreto del
hombre acorazado: el odio a lo viviente.

Jesús amaba a los niños y era semejante a
ellos: sabio, ingenuo, confiado pero cauteloso.

Derramaba bondad y sin embargo era capaz de golpear con
fuerza.

Gentil pero severo, como será el niño del
futuro.

No es meramente vengativo y severo, ni bueno y
manso.

El dar la otra mejilla quiere decir: comprende a tu
enemigo, ponte en su lugar

Jesús no condena al cuerpo: comprende a la
prostituta y a la esposa infiel.

Ama a los seres humanos que le rodean

Ese amor es una sed y hambre de amor, que se convierte
en malignidad si no es satisfecha en forma natural.

Los seres sanos, como Jesús, radiantes y llenos
de vida, son guías natos del pueblo.

Se convierten en ello automáticamente, sin
autoproclamarse, como lo hacen los políticos de todas las
naciones que sufren la peste emocional, quienes por ser
reprimidos sexuales, se revuelcan en la miasma de
Jesús.

20.- El poder
curativo de Jesús.

El niño del futuro gozará de libertad
sexual y no sufrirá neurosis y psicosis, provocada por la
moral sexual antivida que en la actualidad asesina al cristo que
tren de nacimiento.

El niño del futuro será amoroso, no
sufrirá, ni tendrá miedo a unos padres, sacerdotes
y padres neuróticos.

La mayoría de los seres humanos, incluidos los
niños neuróticos, son fríos, no irradian
calor amoroso, no dan fuerza a los demás.

Necesitan fuerza ellos mismos y la beben donde
pueden.

El poder curativo de cristo se nota en los campos de
energía cósmica que poseen los terapeutas
naturales, que son capaces de excitar los sistemas
energéticos inactivos, muertos, de los desgraciados que
sufren de biopatías.

Esta excitación inducida del sistema viviente
débil, es capaz de expandir los vasos sanguíneos,
inducir una mejor provisión de sangre a los tejidos,
acelerar la curación de heridos y revitaliza la
energía vital estancada.

La curación se experimenta como un alivio de la
tensión y relajamiento del sistema
nervioso.

Incluso produce una sensación grata, callada,
amable, de amor verdadero, en organismo cargados de
odio.

Cristo no presta atención a sus poderes
curativos.

Son tan naturales en él, como caminar, comer,
pensar o dar amor.

El acorazamiento neurótico es el sepultamiento de
la energía cósmica, es el asesinato de
cristo.

El diablo es enfermedad, es neurosis provocada por una
moral antivida, instrumento ideológico de las clases
dominantes, propio de una sociedad antivida, como lo es la
capitalista, basada en la propiedad privada.

El diablo es sadismo, violación sexual,
asesinato, traición al prójimo, engaño,
mentira y avidez de dinero y poder político,
características de la sociedad actual.

Cristo dice lo que piensa, ama, irradia cariño y
amor, no engaña, no miente

Dice la verdad en cada uno de sus
movimientos.

El cuerpo y el rostro dicen la verdad.

El viernes santo los que no son neuróticos,
sufren por que se sienten culpables por asesinarlo en el interior
de sus cuerpos.

La religión, que durante el matriarcado
unió a los seres humanos entre sí y con la
naturaleza.

En el patriarcado actual, basado en la esclavitud
asalariada, se utiliza la religión, (por gobiernos como el
vaticano) ,como instrumento ideológico al servicio de los
explotadores y opresores del mundo.

En cambio en el aniversario del nacimiento de
Jesús nos sentimos felices.

Esto sucede debido a que en esos días la
humanidad irradia cariño y amor hacia todos los seres
vivientes.

En navidad damos
y cosechamos tal cantidad de amor, que si lo hiciéramos
todo el año, la sociedad sería realmente
humana.

Gracias a la caracterología sabemos que las
neurosis se deben a la impotencia orgásmica.

Así se entiende como los acorazados
neuróticos odien todo lo sano, como lo es Jesús y
lo asesinen constantemente.

Las formas de ese asesinato son muchas.

El núcleo bioenergético, su sentido
cósmico es la función del orgasmo.

La convulsión involuntaria de todo organismo
viviente.

Durante el abrazo genital hombre-mujer es la descarga y
carga de la bioenergía de uno dentro del otro.

El acorazado neurótico repudia y rechaza la
sexualidad de los demás por que la suya la tiene sepultada
en su propio cuerpo desde la infancia.

Los signos de la
frustración genital: pensamientos lascivos, lujuriosos,
sadismo físico y moral, perversiones sexuales, son
absurdos en la imagen de
Jesús.

Jesús no podría haber sido límpido
como el agua de un
arroyo y de sentidos agudos como un siervo, si hubiera estado
lleno de la inmundicia provocada por la represión sexual,
generadora de neurosis.

Jesús conoció el amor corporal y a las
mujeres, del mismo modo que conoció a la
naturaleza.

 

Humberto Escobedo Cetina

Partes: 1, 2
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