El Marxismo y el control del crimen en la sociedad capitalista neocolonial peruana (página 2)
EL CONTROL
DEL CRIMEN COMO ARMA DE DEFENSA DE LOS INTERESES DE LA
CLASE
DOMINANTE.Comprender que el sistema
legal no está al servicio
de la mayoría de la población nacional, sino de los
intereses de la clase dominante, es el punto de partida de
una comprensión reflexiva, crítica y radical del derecho penal
en la sociedad
capitalista neocolonial."La clase dominante logra mediante su empleo del
sistema legal preservar un orden interior que permite a los
intereses económicos dominantes conservarse y
promoverse. La clase dominante sin embargo, no ejerce el
control directo del sistema legal, sino que debe operarlo a
través de los mecanismos del Estado".Por eso es que debamos pasar a la
consideración del Estado para seguir entendiendo la
naturaleza
y el funcionamiento del régimen legal. Porque el papel
del Estado en la sociedad capitalista neocolonial peruana
consiste en defender los intereses de la clase dominante
nativa y de los grandes monopolios
internacionales.El control social del delito se
vuelve una de las misiones básicas del Estado en su
promoción de la sociedad capitalista
neocolonial.Los juristas y criminólogos muchas veces han
descuidado al Estado como objeto de investigación, ignorando el hecho de
que la sociedad
civil se asegura políticamente mediante el Estado
y que una clase económica dominante logra, por medio
del Estado, anteponer sus propios intereses. O muchas veces
se concibe al Estado como una institución imparcial
dedicada a ponderar y conciliar los intereses diversos de las
clases sociales. Este punto de vista es totalmente falso y
erróneo, en lo que toca al régimen
legal.Siguiendo una filosofía crítica
Muñoz Conde, manifiesta que el ordenamiento legal y el
Estado no son un consenso de voluntades, sino
manifestación de un modo de producción y una forma de
protección de intereses de clases; por ello Quinney,
asevera que oficialmente el Estado controla la actividad
social, y al hacerlo define como delictuosa cualquier
actividad que sea violatoria de los intereses que el Estado
está promoviendo y protegiendo. Por lo que:"El Estado es la
organización política social para defender los
intereses de los monopolios imperialistas, de las clases
dominantes y para reprimir a las mayorías nacionales y
populares que no se someten a su dominación. Esta
represión lo hacen mediante su Estado, sus instituciones y su gobierno
de turno".Por consiguiente, podríamos considerar que el
Estado burgués neocolonial no es un ente arbitral,
neutral e imparcial y no representa a todos por igual es una
máquina benefactora de las clase dominante y de
coerción de las clase dominada (desocupados, pobres,
marginados socialmente) que se resisten a sus planes, es
decir es una institución coercitiva y reaccionaria que
sirve para mantener el dominio de
una clases sobre otra.En un análisis crítico del control del
crimen en el Estado capitalista neocolonial es preciso
formular varias observaciones fundamentales. Primero, existe
el problema de la naturaleza del Estado, o sea la complejidad
de lo que llamamos Estado. En segundo término
está el problema de cómo se vincula la clase
dominante con el Estado, es decir de cómo llega a ser
una clase dominante y de cómo el Estado gobierna en
relación con la clase dominante. En tercer lugar,
debemos observar el desarrollo
del Estado en relación con la economía capitalista.Por ello,"El Estado", como observa Miliband, no es
algo que existe como tal, pues:"El término Estado, designa a cierto
número de instituciones particulares, que en su
conjunto, constituyen su realidad, y ejercen influencia unas
a otras en calidad de
partes de aquello a lo que podemos llamar sistema del
Estado".por lo que, el sistema estatal vendría a
estar integrado por:"La burocracia
militar, policial, el sistema carcelario, como columna
vertebral", consideradas como la fuerza
directamente coercitivas del Estado, es decir vendría
a ser la rama del Estado dedicada a la "(…)administración de la
fuerza(…)"."La burocracia civil integrada por el ejecutivo,
legislativo, judicial, municipal, electoral"."El andamiaje ideológico conformado por el
sistema educación oficial y el informal (TV,
Internet,
radio,
periódicos, cines, religión, etc)".Estas son las instituciones en que reside el
poder del
Estado, y es en estas instituciones donde esgrimen su poder
las personas que ocupan los cargos dirigentes en cada una.
Siendo éstas personas, sobre todo las que constituyen
la élite del Estado, a las que cabe distinguir
de las que ejercen poder fuera de los organismos
estatales.Algunos detentadores del poder Estatal, miembros de
la élite del Estado pueden ser a la vez miembros del
poder económico privado. Porque de no integrar los
miembros del poder económico privado la élite
del Estado, entonces ¿cómo podrían
gobernar?, es así que los intereses de la clase
económicamente dominante tienen que ser transferidos
al proceso de
gobierno, para que aquélla sea efectivamente una clase
dominante.Así, Miliband respecto a la relación
esencial entre la clase económicamente dominante y el
proceso del gobierno observa lo siguiente:"Los testimonios indican de manera concluyente
que, en relación al origen social, a la
educación y a la situación en clase, los
hombres que encontramos en todas las posiciones de mando del
sistema del Estado han provenido en gran parte, y en muchos
casos en mayoría abrumadora, de los círculos de
los negocios y
de los propietarios, o de las clases medias profesionales.
Aquí, como en todos los demás campos, los
hombres y las mujeres nacidos en las clases subordinadas, que
constituyen por supuesto, la gran mayoría de la
población han corrido con muy poca suerte, y no
sólo, permítaseme recalcarlo, en aquellas
partes del sistema estatal, como la
administración, el instituto armado y el poder
judicial, que dependen de nombramientos (…).En una
época en que tanto se habla de democracia, de la igualdad,
(…), de la desaparición de clases y de todo lo
demás, en los países capitalistas (…) ha
seguido siendo un hecho fundamental el que la gran
mayoría de los hombres y mujeres de estos
países ha sido gobernada, representada, administrada,
juzgada (…) por personas procedentes de otras clases
económica y socialmente superiores y relativamente
distantes".La clase económicamente dominante es, pues,
la clase que gobierna en las sociedades
capitalistas.Así mismo, si tomamos el materialismo
histórico como método para el estudio del desarrollo
dialéctico de las sociedades, podremos advertir que se
pretende hacernos creer que el Estado es una cosa que existe
desde siempre, o que lo crearon las personas mediante un
"contrato
social" para hacer posible la vida de la gente, y
así mantener la paz, la estabilidad jurídica,
evitar los delitos,
el crimen, la delincuencia, preservar la vida.Ambos argumentos son rotundamente falsos: en las
sociedades primitivas no había, no existía
Estado, este curiosamente aparece en el lugar y en la
época en que surge la división de la sociedad
en clases
sociales, cuando aparecen los explotadores y los
explotados, es decir el Estado aparece en la primera forma de
división de clases (en el esclavismo),
por ejemplo el Estado teocrático egipcio. Por otra
parte nadie ha preguntado jamás al pueblo si desea un
Estado o no, simplemente se lo han impuesto,
así que ¿de que contrato
social estamos hablando?.Entonces el Estado es:
"(…)producto y
manifestación del carácter irreconciliable de las
contradicciones de clase. El Estado surge en el sitio, en el
momento y en el grado en que las contradicciones de clase no
pueden, objetivamente conciliarse. Y viceversa: la existencia
del Estado demuestra que las contradicciones de clase son
irreconciliables(…), el Estado es un órgano de
dominación de clases, un órgano de
opresión de una clase por otra, es la creación
del "orden" que legaliza y afianza ésta
opresión, amortiguando los choques entre las
clases".Que el Estado Peruano se haya calificado como
"democrático" no altera su verdadero propósito.
Porque este sistema democrático burgués,
constituido por la estructura
social discriminatoria e injusta, concordante con la
diferenciación social, el régimen
político excluyente, la organización jurídica corrupta,
las fuerzas armadas- policiales manipuladas por
cúpulas inmorales y no patrióticas, la
cosmovisión individualista y subjetiva, es realmente
caduco, retardatario, antidemocrático, no responde a
la aspiración de los forjadores de la patria, sino a
la mentalidad y a los intereses egoístas,
burocráticos y apátridas de los grupos de
poder que siguen medrando durante más de 180
años de vida republicana.Por lo tanto, como observó Engels en su obra:
el Origen de la
Familia, la propiedad
privada y el Estado; el "Estado" no ha existido en todos los
estadios por los que ha atravesado las sociedades en su
desarrollo histórico y que conoce la humanidad, pues
existieron sociedades, que carecieron de toda noción
del poder estatal. Sólo a partir del desarrollo
económico de una sociedad determinada y de la
división de la sociedad en clases con intereses
económicos en pugna, el Estado se volvió
necesario.El nuevo estadío de desarrollo, observa
Engels exigía la creación del
Estado:"No faltaba más que una cosa; una
institución que no sólo asegurase las nuevas
riquezas de los individuos contra las tradiciones comunistas
de la constitución gentil, que no sólo
consagrase la propiedad privada antes tan poco estimada e
hiciese de esta santificación el fin más
elevado de la comunidad
humana, sino que además imprimiera el sello del
reconocimiento general de la sociedad a las nuevas formas de
adquirir la propiedad, que se desarrollaban una tras otra, y
por tanto a la acumulación, cada vez más
acelerada, de las riquezas; en una palabra, faltaba una
institución que no sólo perpetuase la naciente
división de la sociedad en clases, sino también
el derecho de la clase poseedora de explotar a la
poseída y el dominio de la primera sobre la
segunda.Y esa institución nació. Se
inventó el Estado".Y el Estado, lejos de aparecer como aparato que
sirve para conciliar los intereses contradictorios de los
diversos grupos
sociales, se creó, por el contrario, en un aparato
destinado a asegurar la dominación de una clase sobre
otra, es decir surgió para proteger y promover los
intereses de la clase económicamente dominante, la que
detenta y controla los medios de
producción.Y no es como nos pretenden hacer creer los juristas
y criminólogos burgueses, que el Estado sirve para la
conciliación entre clases y no para la opresión
de una clase por otra. Amortiguar los choques significa para
ellos conciliar y no privar a las clase oprimidas de ciertos
medios y procedimientos de lucha por el derrocamiento
de la clase dominante, pues la nueva clase dominante es
quién creó el Estado como instrumento
político para amedrentar y compeler a las masas
populares a una sumisión económica y
política.El Estado subsiste y se mantiene gracias a la clase
dominante como dispositivo destinado a someter a la clase
explotada, a la clase trabajadora que únicamente posee
su fuerza de trabajo.
Las sociedades capitalistas y sobre todo la sociedad
capitalista neocolonial peruana, ésta así
fundada en la explotación y opresión de la
clase burguesa sobre la clase del proletariado. El Estado
asegura éste régimen, puesto que el Estado
está en manos de la clase económicamente
dominante, que gobierna. El Estado es el instrumento
político de la clases dominantes y del imperialismo y el derecho se convirtió
en el medio final por el cual el Estado asegura los intereses
de la clases dominantes. "Las leyes
institucionalizan y legitiman las relaciones de propiedad
existentes. Se instituye un sistema jurídico, una
fuerza pública".Así:
"Esta fuerza pública existe en todo
Estado; y no está formada sólo por hombres
armados, sino también por aditamentos materiales, las cárceles y las
instituciones coercitivas de todo género, que la sociedad gentilicia no
conocía. Puede ser muy poco importante, o hasta casi
nula, en las sociedades donde aún no se han
desarrollado los antagonismos de clase (…). Pero se
fortalece a medida que los antagonismos de clase se exacerban
dentro del Estado y a medida que los Estados colindantes se
hacen más grandes y poblados".En consecuencia indicaremos que es por medio del
sistema jurídico como el Estado, protege los intereses
de las clases dominantes y de los monopolios imperialistas y
a la vez sirve para reprimir a las clases dominadas. En donde
el control del delito se transforma en el medio coactivo o
compulsivo de comprobar las amenazas al orden
económico vigente. El Estado define su prosperidad en
función del bienestar de la
economía capitalista, siendo además el
apoderado confidencial de los opresores nacionales e
internacionales. El control del delito en el Estado
capitalista neocolonial constituye el medio concreto
para la protección de los intereses de las clases
dominantes, del imperialismo principalmente norteamericano,
de las grandes transnacionales financieras en sí de la
economía capitalista neoliberal.LA
DESMISTIFICACIÓN DEL DERECHO PENAL EN LA SOCIEDAD
PERUANA:
La finalidad de un análisis crítico del
control del crimen, del delito, consiste en exponer el
significado de la legislación penal en la sociedad
capitalista neocolonial. La falsa realidad según la cual
vivimos, la que sirve al sistema imperante, necesita ser
entendida. La desmistificación del derecho en el
Perú es el objetivo de
una teoría marxista crítica del
derecho penal.
El análisis crítico marxista del derecho
penal puede resumirse con las enunciaciones que
siguen:
1. La sociedad peruana bajo la estrategia
neocolonial del imperialismo a través de la
aplicación de la economía neoliberal de mercado, en
vez de contar con una supuesta economía de libre mercado
en realidad lo que se ha fomentado es una mayor
concentración monopólica; privatización de las empresas
estratégicas; entrega de recursos
naturales; reprimarización de la economía,
presencia hegemónica del capital
financiero especulativo; reducción del gasto social;
precarización del empleo y flexibilización
laboral.
El chantaje que el imperialismo impone para el pago de
la deuda externa
genera mayores condiciones de dominación y dependencia.
Todo ello en provecho del capital transnacional y en alianza y
en beneficio de la gran burguesía financiera e
intermediaria nativa.
2. El Estado capitalista neocolonial se encuentra
reducido a la condición de instrumento coercitivo y
jurídico incondicionalmente al servicio de los intereses
de la clase económicamente dominante es decir, el Estado
se encuentra al servicio del sector hegemónico
conformado por la gran burguesía financiera, primario
exportadora e intermediaria (sector de la burguesía
conformada por los grupos económicos
oligopólicos) aliada y subordinada al imperialismo
norteamericano y a los grandes organismos internacionales. Y
éste Estado burgués, como afirmo Marx es el
"órgano de dominación de clase, un
órgano de opresión de una clase por otra, es la
creación del "orden" que legaliza y afianza esta
opresión(…)".
3. En toda sociedad jurídicamente organizada la
ley penal es
una superestructura alimentada por ingredientes
económicos y políticos e instrumentada por la
clase dominante desde el gobierno, para la satisfacción
de sus intereses y para mantener el orden social y
económico vigente.
4. El control del crimen en la sociedad capitalista
neocolonial se cumple mediante la instauración de un
poder público, la cual está formada por
instituciones coercitivas de todo género como: las
fuerzas armadas, la policía, las cárceles, el
poder judicial, etc. Controladas y administradas por la
burocracia representativa de los intereses de la clase
dominante y de los organismos financieros internacionales, con
el fin de preservar el orden interno.
5. Las contradicciones básicas que engendra el
imperialismo-capitalista siguen irresueltas, incluso se han
agravado. En ellas maduran las condiciones objetivas y
subjetivas que tornarán inevitables, más temprano
que tarde, la revolución nacional-social e
internacional. Por de pronto, en el plano nacional se observa
una creciente recuperación y lucha de los sectores
populares en respuesta a la ofensiva de la
globalización neoliberal del imperialismo y de los
monopolios aliados de la gran burguesía, frente a ello
la clases dominantes utilizan cualquier medio necesario y
especialmente el sistema jurídico como mecanismo de
coerción y violencia
contra el proletariado, tratando de proteger así sus
intereses económicos.
Solamente con la instauración de una sociedad
socialista (fundada en los principios
marxistas-leninistas) y con la consecuente abolición del
sistema de propiedad privada de los medios de producción
reemplazándolos por la propiedad social,
únicamente así se podrá emancipar las
fuerzas productivas y desarrollarlas incesantemente, liquidar
toda forma de explotación del hombre por
el hombre,
eliminar la polarización social entre ricos y pobres y
alcanzar la prosperidad común del pueblo, garantizar la
libertad, la
democracia, junto a un elevado desarrollo cultural y espiritual
y una nueva ética
fundada en el servicio al pueblo, en el colectivismo y el
respeto a la
persona, en la
solidaridad, en
la justicia
social, en el reconocimiento a la diversidad
étnico-cultural, en el amor por
la patria, el trabajo,
la ciencia y
el socialismo, en
donde se coloca por primera vez al ser humano en el centro de
todo y convierte por primera vez, al hombre en el único
dueño de la sociedad, tratando de superar así los
remanentes dejados por el pasado de la sociedad capitalista
como la pobreza, la
miseria, el hambre, la desocupación, la exclusión
social, siendo necesario precisarse que en la sociedad
socialista no podrá resolverse de la noche a la
mañana de un solo golpe las dificultades y problemas
específicos como la delincuencia, la criminalidad, que
aún subsistirán en éste modo de
producción social, pero en menor escala que en
el capitalismo,
y con una tendencia a desaparecer ulteriormente.
Como bien observa el criminólogo
soviético G. Avanesov, éste fenómeno se
encontrara estimulada, por la:
" "Psicología
pancista", pequeña burguesía que resulta
intolerable, pues, estimula la codicia, el alcoholismo, las tendencias de propietario
privado, (…), el burocratismo y la indiferencia por el
individuo
y la sociedad de trabajadores".
De lo señalado se puede observar, que, la
delincuencia, la criminalidad es un fenómeno
condicionado en gran medida, por factores económicos,
así, Lenin, en reiteradas ocasiones manifestaba, que,
"(…)las causas principales de las violaciones de las
normas radicaba
en la explotación de las masas y la
miseria".
Esté fenómeno producto de la vida
miserable de las masas populares, podrá ser combatida
exitosamente a través de una adecuado diseño de una política criminal
por parte del Estado obrero-campesino,
basado en el desarrollo económico-social planificado,
que atienda las necesidades básicas de la
población, mediante la elevación constante y
permanente del nivel de vida de las masas populares,
satisfaciendo sus necesidades materiales, sociales, culturales,
espirituales, de cada persona como ciudadano de la sociedad
socialista.
Consiguientemente, el derecho penal en el Perú
se puede entender sólo a través de la
teoría marxista crítica sobre la base de la
preservación del orden social y económico
existente e imperante. La ley penal se emplea por el Estado y
por la clase dominante la que se encuentra en completa
confabulación y subordinación a los dictados de
los organismos internacionales para asegurar la supervivencia
del sistema capitalista. En donde la sociedad
imperialista-capitalista se ve amenazada por sus propias
contradicciones, observándose que:
"(…) la ley penal se aplica en forma creciente
en el esfuerzo por mantener el orden interno. La clase
inferior, la clase que ha de permanecer oprimida para el
triunfo de la clase económicamente dominante,
seguirá siendo objeto de la legislación
criminal mientras la clase dominante procura perpetuarse. La
supresión de la opresión, la eliminación
de la necesidad de la rebelión, significaría
necesariamente el fin de la clase capitalista y de su
economía capitalista".
La legislación penal sigue avalando el
régimen de dominación de los oprimidos y
explotados en el sistema social y económico del
Perú. Los sucesos de los últimos años en
relación con la criminalidad, delincuencia y los
comportamientos antisociales incluyendo su erupción como
su represión, pueden entenderse únicamente como
parte de una crisis del
sistema estructural peruano. Así mismo, la
opresión dentro del Perú no puede escindirse
principalmente del imperialismo norteamericano en el exterior.
por lo que es necesario entender como opera el imperialismo en
las relaciones internacionales entre Estados, así en el
plano internacional existe:
"(…) un régimen de derecho y de orden
internacional que engloba a todos los Estados, basado en
la Carta de
las Naciones
Unidas, las resoluciones subsiguientes y las decisiones
del tribunal internacional de Justicia".
En donde, la amenaza o el uso de la fuerza
están prohibidos a menos que estén
explícitamente autorizados por el Consejo de Seguridad
después de haber determinado que los medios
pacíficos han fracasado o en defensa propia contra un
ataque armado. Vemos el desprecio por el imperio de la ley en
la práctica por parte del Imperialismo norteamericano,
actuando mediante la fuerza y en defensa de su interés
nacional, en los términos definidos por el poder
interno, nombrándose así mismo juez y ejecutor
global.
Podemos observar, en la política internacional
la hegemonía y la prepotencia del imperialismo
norteamericano de impedir a toda costa incluso mediante la
guerra el
derecho de los pueblos a la autodeterminación, libertad,
independencia y al establecimiento de un nuevo
orden mundial, esta misma guerra que se libra contra los
pueblos en el extranjero es parte de la misma guerra que se
libra contra los oprimidos en el interior del país. El
imperialismo norteamericano, debe recurrir a una
contrarrevolución de escala mundial.
Se desarrolla un programa de
contrainsurgencia en el exterior, pues se siguen implementando
los respectivos planes militares en el exterior, así por
ejemplo en nuestro hemisferio se viene implementando en los
últimos años como precisa Izarra: El Plan Colombia
(militarización regional: iniciativa andina), el plan
Nuevos Horizontes (mantener la sumisión centroamericana)
y el Plan Dignidad
(controlar la Amazonía) a través del ALCA
(Área de Libre comercio)
y ahora a través de tratados
bilaterales como el TLC
(tratado de libre
comercio). No se debe olvidar que: La Amazonía
significa la materia
prima para la ingeniería genética y la biología molecular,
elementos nutrientes de la industria
farmacéutica mundial. La Amazonía abarca a seis
países de la región: Brasil,
Bolivia,
Perú, Ecuador,
Colombia y Venezuela.
Allí existen 125 mil plantas
esenciales para medicamentos, pesticida, colorantes, fibras,
aceites, maderas y alimentos;
comprende el 50% de los bosques tropicales del mundo; aloja la
tercera parte del agua dulce
(51 países están en riesgo de
afrontar conflictos
por el agua en
los próximos 10 años) y le da vida a la fauna del mundo
más rica en variedad de géneros.
Por lo que el ALCA y TLC ahora, no es más que
el paradigma de
la recolonización regional por parte del imperialismo a
través de un componente jurídico
internacional.
Es sumar al mercado de los EE.UU, como evidencia
Izarra:
"(…), el 12% del área terrestre global,
el 7% de la población mundial, el 30% del agua
potable de todo el planeta y la garantía
incondicional del suministro de petróleo para suplir sus reservas
estratégicas".
Por lo que, el ALCA, y ahora los TLCs (tratados de
Libre Comercio),
implementado por la estrategia norteamericana de negociar uno a
uno con los países latinos, no son más que
instrumentos de dominación y de reforzamiento de la
nueva fase del imperialismo que ha asumido EE.UU,
después de la guerra contra Irak.
Por otro lado la clase dominante en el interior del
país a través de su control del Estado y
subordinado al imperialismo norteamericano, debe recurrir a
desarrollar programas de
contrainsurgencia popular a través de la CIA, con
respaldo total del SIN y los militares y policías
locales en el interior. Por ejemplo no debemos olvidar que la
CIA implemento la Doctrina de la Seguridad Nacional en el
interior del país, donde se les daba pleno derecho a los
escuadrones de la muerte
(militares-policía), de combatir y exterminar a
trabajadores sociales, sindicalistas, hombres y mujeres, con el
objetivo general de destruir permanentemente una amenaza
percibida a la estructura
existente de privilegios socio-económicos de la clase
dominante y del imperialismo norteamericano, eliminando de esta
manera la participación política de la
mayoría numérica, las clases
populares.
En Irak se libra una guerra preventiva, mientras
dentro del Perú se libra una guerra contra el delito con
su propio armamento especial. Todo esto para impedir el
cambio del
régimen capitalista; efectivamente para protegerlo y
fortalecer su continuación tanto a nivel internacional y
nacional.
Así, Horowitz, plantea que las consecuencias
son revolucionarias. El crimen y la le ley penal solo puede
comprenderse en el contexto de ésta crisis:
"Al plantearse en el nivel nacional los temas
centrales del conflicto
internacional, al ligarse la lucha internacional por la
autodeterminación con la búsqueda interna de
igualdad social y de control social, la crisis de la
democracia aparece como la crisis revolucionaria de la
época. El movimiento
por la soberanía del pueblo dentro de la
nación (…) coincide con la lucha por
la autodeterminación en la esfera internacional. Del
mismo modo que la exigencia de poder interno es una exigencia
de expulsar a la clase dominante capitalista y de hacer que
el aparato productivo responda a las necesidades sociales, de
igual manera en lo internacional la condición previa
de la soberanía democrática y de la
coexistencia entre los Estados consiste en la
disolución del reinado de las corporaciones
internacionales y de las instituciones financieras que se han
apropiado de la soberanía de las naciones a fin de
apoderarse de la riqueza del mundo".
Por ello, la comprensión dialéctica e
histórica del sistema legal resulta de vital importancia
para la transformación plena de nuestras vidas en este
período histórico, hoy pensar reflexivamente,
críticamente y radicalmente apoyado en la teoría
marxista-leninista significa ser revolucionario.
Entendiendo que no son las ideas las que explican como
se va estructurando la sociedad sino que es la infraestructura
o nivel económico y, concretamente, el tipo de
relaciones de producción que se establecen en una
sociedad, el hilo conductor que permite comprender las formas
que adopta el Estado, el régimen legal, las ideas que
dominan en esa sociedad, es decir, su
superestructura.
Comprendiendo de ésta manera, al régimen
legal como protector de los intereses económicos de las
clases dominantes y de opresión y coacción de los
oprimidos, y entendiendo que son las masas únicamente
los que pueden cambiar su destino mediante la acción revolucionaria, únicamente
así podremos extirpar la opresión y pasar a
convertirnos en una verdadera fuerza de liberación, que
realmente acabe con la explotación capitalista y el
dominio imperialista, y luche por la instauración de una
sociedad más justa y humana es decir luchar por la
instauración de una sociedad socialista, la que no debe
ser calco ni copia sino creación heroica del pueblo
peruano, como afirmó el amauta José Carlos
Mariátegui, esa es la acción revolucionaria a
realizar.
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Por:
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Urrelo (UPAGU) Cajamarca-Perú.
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