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La proactividad. Esa desconocida facultad humana



Partes: 1, 2

    1. Breve resumen del
      texto
    2. Proactividad
      versus animalidad
    3. Bibliografía
      básica

    Breve resumen
    del texto

    La Proactividad es esa desconocida facultad humana
    que permite modificar las dificultades que el individuo
    confronta. A pesar del devenir histórico
      del hombre y del
    desarrollo
    obtenido, esta facultad subyace y permanece oculta, tendiendo a
    cargar de padecimientos a los individuos.

    Despertarla es distinguirnos de los animales quienes
    carecen de estos estimados recursos. El
    presente artículo remite a conocer los alcances de la
    proactividad, partiendo de un intento por definirla y motiva a
    utilizar este preciado recurso.

    Introducción

    El Lucio es un pez agresivo que suele comer una variedad
    de especies, incluyendo, desde la suya propia hasta aves, sapos y
    pequeños mamíferos. Es tan agresivo que alguna
    monografía refiere haber encontrado un
    Lucio de 30 centímetros intentando tragarse un ave mucho
    más grande que él. Ambos fueron encontrados muertos
    a 20 metros fuera del agua. El ave
    con la cabeza dentro de la garganta del Lucio.

    Lógicamente el ave, para salvarse, lo
    había arrastrado fuera, habiendo perecido los dos. El
    instinto agresivo del pez lo había llevado a morir fuera
    del agua, antes que soltar la presa.

    Entendiendo su agresividad, los científicos
    decidieron someter a este voraz pececillo a un experimento.
    Colocaron un pez pequeño y vulnerable, dentro de una urna
    protectora de vidrio, y lo
    sometieron a la acometida de un hambriento Lucio. Este, de manera
    frenética, intentó comérselo dándose,
    sus fauces, duramente, contra el resistente vidrio.

    Con el hambre que cargaba, el Lucio, volvió a
    intentar en continuas oportunidades, comerse al pequeño
    animal, golpeándose en todas ellas, reciamente contra el
    resistente cristal. Finalmente, el hambriento pez, llegó a
    desistir en su propósito de engullir a su pequeña
    víctima.

    Al notar los científicos la persistente renuncia
    al ataque del hambriento Lucio, retiraron la urna que atrapaba al
    pececillo, notando, para sorpresa de ellos, que, a pesar del
    apetito voraz que dominaba al Lucio, éste, jamás
    volvió a intentar siquiera, atacarlo.

    * * * * *

    La proactividad, es una palabra que no se encuentra
    definida en el Diccionario de
    la Real Academia Española. Tampoco encuentra
    definición el término proactivo, que vendría
    a ser el adjetivo que derivaría de esta palabra. Existen
    grandes esfuerzos que tienden a intentar una definición,
    así Stephen Covey (1996), en su capítulo nominado
    la "proactividad" definida, intenta una aproximación a
    partir de referir que es algo más que tomar la iniciativa,
    para abundar que como seres humanos, al ser responsables de
    nuestras vidas, debemos entender que nuestra conducta es
    función
    de nuestras decisiones, no de nuestras condiciones.

    Podría citarse que el autor define la
    proactividad como la responsabilidad de hacer que las cosas sucedan.
    Como bien dice Covey "tenemos la iniciativa y responsabilidad de
    hacer que las cosas sucedan". Para él, nuestra propia
    naturaleza es
    proactiva, sin embargo, son los condicionamientos o las
    condiciones del entorno, las que hacen que nos restrinjamos a
    patrones conservadores, limitados y repetitivos. Es "por
    decisión consciente o por omisión" que elegimos
    otorgar a lo que nos rodea, a la circunstancia o
    situación, la capacidad para controlarnos.

    Cuando el control emerge
    del entorno y no de nuestra capacidad interior, nos volemos
    reactivos. La característica fundamental de las personas
    reactivas es la gran influencia que ejerce sobre ellas el
    medioambiente. Se ven constantemente afectadas por el entorno. De
    ahí que, como cita Covey, si, el tiempo es
    bueno se sienten bien, en tanto que si no lo es, se ven afectados
    tanto en sus actitudes como
    en su comportamiento.

    Partes: 1, 2

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