La motivación para el estudio de las Lenguas Extranjeras en el contexto de la universalización en Cuba

1. Resumen
3. Necesidades y
   motivos más significativos que intervienen en la
   motivación para el estudio de las Lenguas Extranjeras en
   el contexto de la universalización
4. Bibliografía

Resumen

En el presente artículo el lector
encontrará algunas ideas acerca de la importancia de
la
motivación para el estudio de las Lenguas Extranjeras,
así como una valoración de la temática desde
el punto de vista didáctico teniendo en cuenta sus
principales implicaciones dentro del proceso de
enseñanza–aprendizaje del
idioma, específicamente en las nuevas condiciones que, a
consideración nuestra, requieren de un pensamiento
creador y transformador para lograr de cada potencialidad un
éxito,
se propone una clasificación de las principales
necesidades y motivos que inducen a nuestros estudiantes al
estudio del idioma según el análisis de los resultados de algunas
técnicas aplicadas.

Palabras claves

Motivación, necesidades, motivos, Lenguas
Extranjeras, intrínseco, extrínseco, componentes,
idioma.

Summary

In this article the reader will find some ideas about
the importance of motivation towards the study of foreign
languages, as well as an evaluation of the topic from a
didactical point of view. Its main implications within the
foreign language teaching-learning process, specifically under
the new conditions are kept in mind. It is our point of view that
they require a creative and changing thinking to achieve success
in each potentiality. It intends to provide a classification of
the main necessities and motives that induce our students to the
study of foreign languages.

Key words

Motivation, needs, motives, foreign language,
intrinsic, extrinsic, components, language.

Introducción

El análisis de la motivación
para el estudio de las Lenguas Extranjeras tiene una vital
importancia práctica, fundamentalmente en nuestro
país donde aumentan las relaciones y colaboraciones con
países de otras latitudes en forma creciente y el
perfeccionamiento del sistema
educacional constituye una exigencia constante.

Esta idea se comprende teniendo en cuenta que la
motivación hacia el estudio, va a influir
tanto sobre la eficiencia en la
asimilación de los conocimientos, en la formación
de habilidades y capacidades y en la retención escolar,
como en la formación del carácter, la moral y la
orientación ideológica de nuestros adolescentes y
jóvenes.

Durante las últimas décadas en nuestro
país, se ha acrecentado el interés
por la motivación hacia el estudio en la Educación
Superior derivado de una necesidad imperiosa de la
práctica social: perfeccionar el proceso
docente-educativo, con el fin de aumentar la calidad de la
preparación del egresado. En las actuales condiciones que
enfrenta la Educación Superior
(la universalización de la enseñanza) se agudiza
esta problemática con la aparición de nuevos
métodos y
estilos de trabajo.

Recordemos que así surgen nuevos conceptos como
el de Microuniversidad, se transforma el de Tutor en
relación con la forma en que se había estado
concibiendo, se comienza a hablar de autodidactismo, el uso de
las nuevas
tecnologías se incrementa; lo que implica,
según nuestro criterio, un esfuerzo mayor por parte de los
docentes y
docentes en formación en función de
lograr los hábitos, habilidades y capacidades que deben
desarrollar en cada una de las disciplinas en correspondencia con
su año y carrera; esfuerzos que consideramos deben estar
condicionados por fuertes motivos que regulen la dirección y fuerza de su
actividad, dirigida a satisfacer la necesidad y exigencia social
de elevar sus conocimientos, para ser útil a la sociedad,
trabajar y poder convivir
con ella.

Es evidente que la actividad de estudio de una lengua
extranjera es provocada por algo y que algo sostiene esa
actividad con cierta fuerza o intensidad.

El estudio de la motivación para el aprendizaje
del idioma siempre ha sido un tema preocupante para los
especialistas tanto por lo intrínseco en la actividad como
por los resultados que se derivan de ella y que pueden ser
mejorados en su calidad.

La actividad de aprendizaje de una lengua es
práctica y teórica y consideramos que se dirige
hacia objetivos
relacionados con la satisfacción de las necesidades del
estudiante en cualquiera de los niveles donde estas se
manifiesten siendo los motivos los impulsos para la acción
del estudio que satisfacen estas necesidades.

Al estudiar la motivación es importante
determinar cuáles son sus elementos de base, o sea, sus
constituyentes básicos sobre los cuales se engendra todo
el desarrollo del
proceso motivacional. Consideramos que en el estudio de las
Lenguas Extranjeras estos puntos de partida los encontramos en
las necesidades y los motivos.

La necesidad como estado del sujeto no es capaz de
provocar la actividad intelectual, su función, en este
sentido, se limita a activar el individuo y es
reflejado por él en forma de intenciones, intereses o
inquietudes. Estos aspectos solo expresan el aspecto
dinámico de las necesidades, sin mostrar nada de su
contenido específico.

Una persona puede
comenzar a experimentar la necesidad de aprender un idioma, la
presencia en el sujeto de esta necesidad lo activa: es reflejada
como una inquietud o una preocupación, pero que
todavía no sabe cómo resolver porque no tiene
reflejado cómo podría satisfacerla.

En estas condiciones, el sujeto todavía es
incapaz de orientar su actuación de modo que pueda llegar
a satisfacer la necesidad.

El papel regulador por parte de la necesidad no se da
precisamente hasta que no se pone en contacto con el objeto que
la satisface. Solamente como resultado del encuentro de esta
necesidad con aquel objeto que es potencialmente capaz de
satisfacerla, es que se da el hecho de que la necesidad se
convierta en algo capaz de orientar y regular la
actividad.

Si la persona con la necesidad de aprender el idioma
encuentra, dentro de las diferentes posibilidades que le ofrece
la sociedad, aquella que le parezca adecuada porque la refleja
como potencialmente capaz de satisfacer su necesidad, entonces
esta cobrará un contenido determinado (digamos, puede ser,
estudiar en una escuela de
idiomas, optar por carreras relacionadas con el estudio de las
Lenguas Extranjeras, etc.) y por consiguiente, orientará y
regulará su actuación hacia la opción
seleccionada y no hacia otra que también existe. Un objeto
que responda a la necesidad no solo estimula la actividad del
sujeto, sino que también le da una orientación
definida. Una vía eficaz para el logro de esta idea lo
constituye la contextualización de la clase.