INTELIGENCIA ARTIFICIAL: ¿AVANCE
TECNOLÓGICO O AMENAZA SOCIAL?
Surgirá un cambio
político y social, en el que la IA tiene todas las de
ganar si se da cuenta que no necesita a los humanos para
colonizar el universo.
(Aepia)
Se define la inteligencia
artificial (IA) como aquella inteligencia
exhibida por artefactos creados por humanos. A menudo se aplica
hipotéticamente a los computadores. Es la capacidad de un
artefacto de realizar los mismos tipos de funciones que
caracterizan al pensamiento
humano. Algunos piensan que es imposible la creación de un
sistema tan
complejo, pero otros luchan para modelar la inteligencia humana
en sistemas
computacionales, y al parecer está muy cerca de lograrse.
Puede decirse que la inteligencia artificial es una de las
áreas más fascinantes y con más retos de las
ciencias de la
computación. Nació formalmente en
1956 como mero estudio filosófico y razonístico de
la inteligencia humana, mezclada con la inquietud del hombre de
imitar la naturaleza
circundante (como volar y nadar), hasta inclusive querer imitarse
a sí mismo.
La tecnología ha
planteado diversos paradigmas que
llevan al agotamiento de teorías
y experimentaciones prácticas, pero hay temas apasionantes
que a pesar de las derrotas, desarrollan un interés no
solo en los científicos sino también en el resto de
la sociedad. En
este nivel se encuentra la inteligencia artificial definida como
"La ciencia que
enfoca su estudio a lograr la comprensión de entidades
inteligentes. Es evidente que las computadoras
que posean una inteligencia a nivel humano, o superior,
tendrán repercusiones muy importantes en nuestra vida
diaria" (Zaccagnini y Caballero. 1992:24). Es precisamente sobre
este tema que se va a tratar, se hablará de la
repercusión en la sociedad que tiene la creación de
maquinas que puedan alcanzar nuestra capacidad humana e incluso
nos reemplacen o dominen.
Actualmente existen dos tendencias en cuanto al desarrollo de
sistemas de IA: los sistemas
expertos y las redes
neuronales. Los sistemas expertos intentan reproducir el
razonamiento humano de forma simbólica, por medio de
formulas y logismos como el código
binario. Las redes neuronales lo hacen
desde una perspectiva más biológica (recrean la
estructura de
un cerebro humano
mediante algoritmos
genéticos). A pesar de la complejidad de ambos sistemas
los resultados distan mucho de un auténtico pensamiento
inteligente, pues solo llegan a ser reproducción de funciones
específicas y no del razonamiento y el pensamiento
complejo que caracteriza al hombre.
La verdadera inteligencia artificial, se
evidenciará cuando no seamos capaces de distinguir entre
un ser humano y un programa de
computadora en
una conversación a ciegas. Muchos de los investigadores
sobre IA, entre ellos Gary Reyes, sostienen que "la inteligencia
Artificial es un programa capaz de ser ejecutado
independientemente de la máquina que lo ejecute, computador o
cerebro" (Reyes. 2001). Se debe pensar que cuando las máquinas
alcancen nuestra capacidad mental, tendrán
características humanas tales como el aprendizaje,
la adaptación, el razonamiento, la autocorrección,
el mejoramiento implícito, y la percepción
modelar del mundo. Así, se puede hablar ya no sólo
de un objetivo, sino
de muchos dependiendo del punto de vista o utilidad que
pueda encontrarse a la denominada inteligencia
artificial.
Al llegar a un perfeccionamiento tal de las
máquinas, donde formen un grupo de seres
capaces de construir -y al tiempo
destruir- una sociedad, se corre el riesgo que tomen
el lugar del hombre, que lo reemplacen tan fácilmente en
todos los ámbitos que desarrolla, que este cambio
progresivo podría verse como un hecho cotidiano, e
incluso, necesario. Por ejemplo en el trabajo, si
hay una maquina que puede resolver el más mínimo
problema al interior de una empresa o
fabrica, se prescindiría de la labor humana y solo se
requeriría a aquel capaz de construir los robots, claro
está, antes que estos se construyan a si
mismos.
Se podrá estimar -según Turing- que
estamos ante una máquina "inteligente" cuando procese un
lenguaje
natural, tenga conocimientos y pueda adquirirlos
empíricamente y cuando razone automáticamente.
Además debe percibir el objeto que se encuentra frente
suyo y poder moverlo
o manipularlo. La pregunta que surge es ¿Qué tan
lejos se está de lograr una maquina con estas
características?, ya muchos inventos dan
indicios de cumplir con estas funciones y hay estudios en
proceso que
avanzan de manera fugaz pero que pasan inadvertidos ante las
personas que sin darse cuenta están cayendo en una
sociedad manipulada y dirigida por la maquinaria y el
desenfrenado interés por la evolución de la misma. Teniendo en cuenta
lo anteriormente planteado, se puede evidenciar que la era de los
robots está más cerca de lo que muchos piensan y
antes que avance más se debe pensar en las
consecuencias.
El desarrollo al que han llegado las máquinas y
las consecuencias del mismo, se encuentra plasmado en diversas
películas actuales y otras no muy nuevas pero que han
resultado de cierta manera proféticas, como Blade
Runner que trata sobre un caza recompensas que debe
exterminar a androides inteligentes que son peligrosos y
están muy insatisfechos con sus creadores. Además
en la película Inteligencia artificial donde los
robots reemplazan al ser humano e imitan o aprenden sus
características y formas de actuar y sentir. En estas
producciones se ve la lucha hombre Vs. Robots. Y el posible
ataque de las maquinas a sus creadores, lo cual no sería
muy extraño, pues a lo largo de la historia se ha visto
cómo muchos de los inventos científicos del hombre
se han vuelto en contra del mismo, sometiéndolo,
dominándolo o incluso exterminándolo. Las
películas mencionadas se pueden catalogar como de carácter profético porque se
anticipan a las situaciones que se viven actualmente o que se
vivirán, es como si los investigadores actuales tomaran
como referencia de estudio estas películas para
perfeccionar el arma más mortal para el ser
humano.
Pero ninguna película evidencia tanto las
consecuencias que traería la convivencia humano-robot,
como Yo, Robot de Alex Proyas, que muestra los roles
que puede desempeñar un robot en la sociedad, puede ir de
trabajos tan sencillos como entregar correspondencia o pasear un
perro, hasta dirigir y proteger una empresa. Plantean
que los robots tienen ciertas leyes instaladas
en su sistema que incluyen no lastimar a los humanos, obedecer
sus órdenes y proteger su propia existencia.
Lo que se debe pensar entonces, es que si ellos imitan a
los humanos, también pueden ser capaces de romper leyes, o
bien, imitar la voluntad propia. Si una máquina es creada
a imagen y
semejanza del hombre, cabe la posibilidad que deje de obedecer,
es como un niño que crece y ya no le gusta que lo manden,
puede llegar a ser autosuficiente. Pero lo anterior es
únicamente una hipótesis que lleva consigo otras
problemáticas ocultas y varias dudas que no se
resolverán sino hasta el momento en que dicha
hipótesis se haga
realidad.
Detrás de todo lo planteado en los
párrafos anteriores, siempre está la idea que el
robot facilita la vida, cuando en realidad lo que hace es
inutilizar al ser humano. Depositan toda la confianza en
artefactos mecánicos y ponen el destino de la humanidad en
sus manos. En el momento en que la hipotética
dominación y colonización de la maquina sobre
el hombre se
haga realidad, los prejuicios ya no van a valer, por eso es
necesario prever sus consecuencias y evitar el enceguecimiento
que ha producido catástrofes tristemente
evitables.
Se podría prever que la sociedad estaría
basada en la productividad,
donde la maquina es el empleado y el hombre el sedentario que
odia el trabajo,
habría una supervivencia absurda; para imaginar esto, solo
hay que ir a los países desarrollados industrialmente, el
trabajo para el hombre se ha vuelto una ilusión, una
falacia. Las maquinas ya empezaron a reemplazar la labor del
hombre haciendo la vida mas fácil para unos pocos, pero
para la mayoría han sido una verdadera amenaza. El
problema es que no se quiere aceptar que pueden hacer daño y
cuando se tenga conciencias de esto, puede ser demasiado tarde, a
lo mejor ya han reemplazado al humano hasta en lo más
mínimo.
Mientras se tome conciencia de la
amenaza que puede constituir la implementación de estas
máquinas "pensantes", se van a seguir buscando formas de
perfeccionar la Inteligencia Artificial y ya se abren caminos
hacia el mundo robotizado, con nuevas ideas teóricas y
experimentales que en su clímax iluminen el camino para
llegar a la verdadera inteligencia artificial. "Aunque parezca
absurdo hay muchos eruditos en el campo de la IA que ven el
futuro de ésta centrado sobre todo en los chatterbots"
(López. 2006).
Parece ilógico, pero sólo hay que pararse
a pensar unos segundos y darse cuenta de que lo que define a un
cerebro inteligente es aquel que puede comunicarse,
¡hablar!, no importa el idioma, la cuestión es que
si es capaz de comunicarse, es capaz de pensar ya que pensamos y
razonamos en nuestro idioma. La conciencia humana se va forjando
poco a poco de manera simultánea con su idioma.
Obviamente esto último es un proceso arduo y
complejo, ya que se está hablando de crear un cerebro, una
entidad inteligente y que sea capaz de aprender, evolucionar,
pensar, razonar por sí mismo. Absurdo pero cercano, muy
cercano, los estudios para lograr tal avance se desarrollan
rápidamente y cada vez más científicos se
interesan en lograrlo lo más pronto posible, porque
sería un avance, un gran paso evolutivo. Cuando se logre
la verdadera inteligencia artificial, será un gran avance
tecnológico, un orgullo para sus creadores; pero a la vez
será el principio del fin de la
organización humana, pues aunque los robots no son
vida y sentimiento, pueden ser imitadores de estos, con la
ventaja de no ser irracionales y no volverse locos, gracias a
esto, serian más poderosos y podrían
dominar.
No se pude negar que la Inteligencia artificial
traería grandes ventajas para el hombre y marcaría
un hito en la historia; pero también se debe ser conciente
de sus implicaciones negativas. Por ejemplo el desempleo, el
hombre quedaría reemplazado totalmente por las
máquinas que producirían incluso mas rápido
y con menos complicaciones, pues no mezclarían la vida
personal con
la laboral como
suele ocurrirle al hombre, serían excelente productores, y
en un mundo eminentemente capitalista eso es suficiente para
sobrevivir y obtener el poder.
Además se puede llegar a la veneración a
estas maquinas y el sometimiento por parte del humano que al ver
que una maquina hace todo por ellos, se quedan con una actitud
mediocre que los llevaría a la adoración y
dependencia de estos aparatos constituidos por elementos mas
simples y rudimentarios que el organismo humano, se vería
aquella idea de adorar a entes inferiores únicamente
porque por error se le ha otorgado el poder.
Por el momento, un hecho que puede tranquilizar es no
saber cómo funciona el cerebro humano, esto hace que se
vean algunas emulaciones de IA como <<basura>>, dicho de otra forma:
"Es como si estuviésemos dando palos de ciego
para ver cómo podremos crear algo que ni siquiera
sabemos bien como es y empezamos a probar con algunas fichas de
este enorme puzzle de 100.000 millones piezas del cual creo,
apenas tenemos 100… y no sabemos si encajan entre
sí…" (Wilson. 2005) 3.
Sin embargo hay que pensar que aunque no se logre la
imitación perfecta del pensamiento humano, el hecho de
crear objetos que puedan reemplazarnos en las a veces banales
situaciones de la vida diaria ya afecta la sociedad, el etilo de
vida y la organización que tanto ha costado
mantener.
3. WILSON, Daniel. Autor norteamericano del
libro "how to
survive a robot uprising" tiene un doctorado en robótica de la universidad
Carnegie. Estudia los fenómenos actuales de la
robótica y la evolución de la inteligencia
artificial.
No hay que crear una maquina tan inteligente para que
reemplace al humano en sus labores, sobre todo en una sociedad
como la de hoy en día, basada en la técnica y la
productividad, en la lógica
y no en la racionalidad. Con el hecho de crear una máquina
que sea semejante en nuestras capacidades físicas, o
incluso mejores, capaces de perfeccionarse según las
necesidades, se corre el riesgo del desplazamiento y el reemplazo
del que se ha venido hablando.
En los párrafos siguientes, además de
intentar concluir este tema tan complejo, se narra una de las
ideas de lo que puede ocurrir en un futuro, quizá con un
tono un tanto novelístico pero si se analiza
correctamente, no llegan a ser en ningún momento ideas
descabelladas:
Una vez que la inteligencia artificial tenga una
inteligencia igual o superior a la del hombre, obligatoriamente
"surgirá un cambio político y social, en el que la
IA tiene todas las de ganar si se da cuenta que no necesita a los
humanos para colonizar el universo"
(AEPIA.1997). Suena a ciencia ficción pero actualmente
orbitando están los satélites
de comunicaciones. En el futuro, la inteligencia
artificial auto replicante podría fácilmente
hacerse con todas las colonias humanas fuera de la tierra, y
la raza humana nunca podrá luchar en el espacio
vació en igualdad de
condiciones.
De esta manera, el enfrentamiento es inevitable y las
posibilidades de perder son cada vez mayores. "Algún
día la humanidad debe enfrentar y destruir la creciente
amenaza robótica" (Wilson.2005). Estos entes
electrónicos, no controlarían ni serían
concientes de su fuerza,
serían esclavos de la lógica, llevados a una
revolución
casi sin fundamento que acabaría con el hombre y los
cimientos de una sociedad desarrollada a lo largo de millones de
años.
Antes que ellos o estos tomen el poder no sólo en
el trabajo sino en la cotidianeidad, se debe actuar con
inteligencia, pensar en las consecuencias y no dejarse deslumbrar
por estas creaciones humanas. Se debe pensar la Robótica
como la mayor expresión de la tecnología pero
también como una mayor perfección del mal puro y
absoluto.
Aun queda algo de tiempo, mientras se termina de
comprender el pensamiento humano, tanto desde lo simple como
desde el ámbito complejo, y se plasma en una
máquina. Pero no falta mucho, estudios aquí y
allá darán en el momento menos pensado con el punto
y empezará la revolución. Solo falta esperar que
como usualmente ocurre, el hombre sea victima de su propio
invento.
Pero aun sin haber desarrollado completamente la
inteligencia artificial, ya se ven las graves consecuencias
sociales que trae consigo. La tecnología y la
reflexión parecen ser muy divergentes, pero en este
momento, es necesario plantearse qué implicaciones
traerían los nuevos inventos en la sociedad y la vida
cotidiana. A lo mejor, lo importante es salvarnos de nosotros
mismos, si en realidad hay de que preocuparse, es de los alcances
del hombre y el uso que le de a la tecnología. Si se
guían por la lógica y no por la razón o en
su defecto por los prejuicios, los humanos pueden llegar a ser
mucho más peligrosos.
CONCLUSIONES
La Inteligencia artificial es la capacidad de una
máquina de pensar y actuar como el hombre, pero para
lograr esto primero se debe conocer totalmente el funcionamiento
del pensamiento humano. En el ámbito tecnológico la
Inteligencia Artificial es una de las áreas que causa
mayor expectación, incluso dentro de la sociedad en
general, debido a que la búsqueda para comprender los
mecanismos de la inteligencia, ha sido la piedra filosofal del
trabajo de muchos científicos por muchos años y lo
sigue siendo.
Sin embargo, este avance tecnológico puede traer
graves consecuencias como el desempleo, la veneración y el
sometimiento por parte del humano. No se puede negar que la
Inteligencia artificial traería grandes ventajas para el
hombre; pero también se debe ser conciente de sus
implicaciones negativas.
La polémica desarrollada en el ensayo
resulta importante en la reflexión acerca del mundo
tecnológico globalizado de hoy y deja además de los
supuestos anteriores, una idea clara y un poco fatalista pero
real: No hay que crear una maquina tan inteligente para que
reemplace al humano en sus labores, sobre todo en una sociedad
como la de hoy en día, basada en la técnica y la
productividad, en la lógica y no en la
racionalidad.
Pero aun sin haber desarrollado completamente la
inteligencia artificial, ya se ven las graves consecuencias
sociales que trae consigo y es probable que al finalizar el
análisis y la reflexión acerca de
este tema, se evidencie que lo importante es salvarnos de
nosotros mismos, pues sin el uso de la razón, los humanos
pueden llegar a ser mucho más peligrosos. No se debe
olvidar que hoy en día la creación de artefactos
inteligentes, se vuelve cada vez más una meta que un
sueño; implícitamente se vuelve mas una amenaza
social que un avance tecnológico.
BIBLIOGRAFÍA
AEPIA "Revista
iberoamericana de inteligencia artificial" en http://aepia.dsic.upv.es/revista/. Edita y
publica: Asociación Española para la Inteligencia
Artificial (AEPIA) España,
1997
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http://www.fortunecity.com/skyscraper/chaos/279/index.htm.
Octubre de 1998
LÓPEZ, Jhony C. "Inteligencia Artificial" en
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2006
REYES, Gary "Proyecto de
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http://cruzrojaguayas.org/inteligencia/. Universidad de
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2001
SERRANO Y SÁNCHEZ. "Subportal de inteligencia
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WILSON, Daniel. How to survive a robot
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Universidad Carnegie. 2005
ZACCAGNINI, J. L., ALONSO, G. y CABALLERO, A.:
"Inteligencia artificial de innovación prometedora a realidad
práctica". En Partida Doble, n°. 29,
diciembre, 1992, pp. 22-30.
PELÍCULAS:
PROYAS, Alex. Yo, robot. Twentieth century fox.
Estados Unidos, 2004
SPIELBERG, Steven. Inteligencia Artificial.
Estado Unidos,
2001
REALIZADO POR:
Carolina García Tabeada
Estudiante de comunicación
social-periodismo
Bogotá, Colombia
Fecha de realización: Mayo de 2006
CATEGORÍA: Tecnología
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