- Conceptos generales sobre
adolescencia - Embarazo en la
adolescencia - Consideraciones
psicosociales para el aumento de los embarazos en
adolescentes - Aspectos psicosociales del
embarazo en las adolescentes - Enfoque de riesgo para la
atención de la adolescente embarazada enfoque de salud
sexual y reproductiva del adolescente - Control del embarazo de la
adolescente - Recién nacido de madre
adolescente - Mortalidad materna en
adolescentes - Morbilidad obstétrica
en las adolescentes - El aborto en las
adolescentes - Abuso sexual en
adolescentes - En
conclusión - Bibliografía
La elaboración del presente trabajo de
investigación está motivado por
nuestra inquietud debido al incremento de embarazos en adolescentes a
temprana edad.
La adolescencia,
es un período de transición, una etapa del ciclo de
crecimiento que marca el final de
la niñez y anuncia la adultez, dicho término se usa
generalmente para referirse a una persona que se
encuentra entre los 13 y 19 años de edad.
Para muchos jóvenes la adolescencia es un
período de incertidumbre e inclusive de
desesperación; para otros, es una etapa de amistades
internas, de aflojamiento de ligaduras con los padres, y de
sueños acerca del futuro.
En casa de alguno de los padres y con su novia o novio,
buena parte de los chicos y chicas se inicia sexualmente cuando
está promediando los 15 años.
Sin estadísticas oficiales, el comportamiento
de los adolescentes se refleja en los hospitales públicos.
Allí se realizan encuestas, las
que arrojan como resultado que la edad promedio en que las
adolescentes tienen su primera relación sexual es casi a
los 16 años; y los chicos un año antes.
Pero en la cuestión de la primera vez de los
peruanos, los especialistas consultados encuentran una
relación entre la edad del debut y el nivel de educación.
Por lo ya mencionado entendemos que el embarazo de
las adolescentes es producto de
una escasa e insuficiente información y educación sexual, por
lo tanto es muy importante que el adolescente conozca todo lo
relacionado al sexo y los
roles, porque es necesario para que éste se pueda adaptar
a su ambiente y a
los individuos que lo rodean, para que comprenda las
responsabilidades y deberes que va a tener, y también para
poder
desempeñar esa función
sexual "aprobada por la sociedad".
El Trabajo de Investigación se divide en trece
puntos incluyendo la bibliografía y al final se
encuentra la bibliografía respectiva.
Se ha considerado en el desarrollo de
la monografía una serie de gráficos, cuadros estadísticos y
otros aspectos para una mejor explicación de la
temática tratada.
1. CONCEPTOS GENERALES
SOBRE ADOLESCENCIA
La OMS define como adolescencia al "período de
la vida en el cual el individuo
adquiere la capacidad reproductiva, transita los patrones
psicológicos de la niñez a la adultez y consolida
la independencia socio ? económica" y fija
sus límites
entre los 10 y 20 años.
Es considerada como un periodo de la vida libre de
problemas de
salud pero,
desde el punto de vista de los cuidados de la salud
reproductiva, el adolescente es, en muchos aspectos, un caso
especial
En muchos países, los adolescentes llegan a
representar del 20 al 25% de su población. En 1980 en el mundo
habían 856 millones de adolescentes y se estima que en
el 2000 llegarán a 1,1 millones. La actividad sexual de
los adolescentes va en aumento en todo el mundo, incrementando
la incidencia de partos en mujeres menores de 20
años.
Por los matices según las diferentes edades, a
la adolescencia se la puede dividir en tres etapas:
1.1 Adolescencia Temprana (10 a 13
años)
Biológicamente, es el periodo peripuberal, con
grandes cambios corporales y funcionales como la
menarca.
Psicológicamente el adolescente comienza a
perder interés
por los padres e inicia amistades básicamente con
individuos del mismo sexo.
Intelectualmente aumentan sus habilidades cognitivas y
sus fantasías; no controla sus impulsos y se plantea
metas vocacionales irreales.
Personalmente se preocupa mucho por sus cambios
corporales con grandes incertidumbres por su apariencia
física.
1.2 Adolescencia media (14 a 16
años)
Es la adolescencia propiamente dicha; cuando ha
completado prácticamente su crecimiento y desarrollo
somático.
Psicológicamente es el período de
máxima relación con sus pares, compartiendo
valores
propios y conflictos
con sus padres.
Para muchos, es la edad promedio de inicio de
experiencia y actividad sexual; se sienten invulnerables y
asumen conductas omnipotentes casi siempre generadoras de
riesgo.
Muy preocupados por apariencia física,
pretenden poseer un cuerpo más atractivo y se
manifiestan fascinados con la moda.
1.3 Adolescencia tardía (17 a 19
años)
Casi no se presentan cambios físicos y aceptan
su imagen
corporal; se acercan nuevamente a sus padres y sus valores
presentan una perspectiva más adulta; adquieren mayor
importancia las relaciones íntimas y el grupo de
pares va perdiendo jerarquía; desarrollan su propio
sistema de
valores con metas vocacionales reales.
Es importante conocer las características de
estas etapas de la adolescencia, por las que todos pasan con
sus variaciones individuales y culturales, para interpretar
actitudes y
comprender a los adolescentes especialmente durante un embarazo
sabiendo que: "una adolescente que se embaraza se
comportará como corresponde al momento de la vida que
está transitando, sin madurar a etapas posteriores por
el simple hecho de estar embarazada; son adolescentes
embarazadas y no embarazadas muy jóvenes".
2. EMBARAZO EN LA
ADOLESCENCIA
Se lo define como: "el que ocurre dentro de los dos
años de edad ginecológica, entendiéndose
por tal al tiempo
transcurrido desde la menarca, y/o cuando la adolescente es
aún dependiente de su núcleo familiar de
origen".
La "tasa de fecundidad adolescente (TFA)" ha ido
disminuyendo desde los años 50 pero en forma menos
marcada que la "tasa de fecundidad general (TFG)",
condicionando un aumento en el porcentaje de hijos de madres
adolescentes sobre el total de nacimientos. En 1958 era del
11,2%; en 1980 del 13,3%; en 1990 del 14,2%; en 1993 del 15%.
Este último porcentaje se traduce en 120.000 nacidos
vivos de mujeres menores de 20 años.
La fecundidad adolescente es más alta en
países en desarrollo y entre clases
sociales menos favorecidas, haciendo pensar que se trata de
un fenómeno transitorio porque, de mejorarse las
condiciones, ella podría descender.
Para otros investigadores, la disminución de
las tasas de fecundidad adolescente está cada vez
más lejos, ya que el deterioro de las condiciones
socioeconómicas globales hace que se dude sobre la
posibilidad de que la mayoría de los países
realicen mayores inversiones
en sus sistemas
educacionales y de salud, para alcanzar la cobertura que el
problema demanda.
EE.UU es el país industrializado con mayor tasa
de embarazadas adolescentes, con una tasa estable del 11,1% en
la década de los ´80.
Canadá, España,
Francia,
Reino Unido y Suecia, han presentado un acusado descenso de
embarazos en adolescentes, coincidiendo con el aumento en el
uso de los contraceptivos.
En España, en 1950, la tasa de recién
nacidos de madres entre 15 y 19 años era del 7,45/1000
mujeres; en 1965 llegaba al 9,53; en 1975 alcanzaba el 21,72,
para llegar al 27,14 en 1979. Descendió, en 1980, al
18/1.000 mujeres y al 11 en 1991. Los últimos datos hablan de
un 35,49/1000 mujeres en 1994, descendiendo al 32,98 en 1995 y
al 30,81 en 1996.
Según el Ministerio de Sanidad y Consumo
español, el 12% de las jóvenes con
edades entre 14 y 15 años, han mantenido relaciones
sexuales alguna vez, lo que significa 160.000 en
números absolutos, previéndose que
alcanzarán 400.000. Deben tenerse en cuenta,
además de los nacimientos de madres adolescentes y el
porcentaje de adolescentes sexualmente activas, los más
de 6.000 abortos ocurridos en mujeres entre los 14 y 19
años por lo que, el supuesto descenso de la tasa de
embarazadas adolescentes, no lo fue tanto.
En España, a partir de los años
´80, se ha registrado un incremento en el uso de
contraceptivos y preservativos comercializándose, en
1993, unos 40 millones de preservativos, equivalente a la media
más alta de los países de la Comunidad
Europea (3,5 preservativos por habitante). Actualmente es
imposible conocer el número de adolescentes que abortan.
Sólo 2/3 de los embarazos de adolescentes llegan al
nacimiento de un hijo; de los nacidos, un 4% son dados en
adopción
y un 50% permanecen en hogar de madre soltera. Un 8% de las
adolescentes embarazadas abortan y un 33% permanece soltera
durante el embarazo.
En nuestro país no es esa la tendencia, con una
mayoría importante que se mantiene soltera, en la que
prevalece la "unión estable", aunque la incidencia del
aborto en
las adolescentes no ofrezca credibilidad razonable por el
importante subregistro que podría llegar a un aborto
registrado por otro no registrado.
Ya se dijo que la proporción de jóvenes
que han iniciado relaciones sexuales va en aumento y que la
edad de inicio está disminuyendo, pero la capacidad para
evitar el embarazo no acompaña a este
comportamiento.
En Buenos Aires,
en una encuesta
realizada a una población estudiantil en 1995, se
observó que la edad promedio de inicio de relaciones
sexuales, fue de 14,9 años para varones y 15,7
años para mujeres, variando la proporción
según el tipo de escuela a la
que asistían (religiosa, laica, laica de sectores
populares). El 95% de los adolescentes de la encuesta
manifestó tener información sobre cómo
evitar el embarazo. Un 70% de los que mantenían
relaciones sexuales utilizaban algún método
efectivo para evitar el embarazo en la primera relación,
disminuyendo ese porcentaje en las siguientes relaciones,
siendo el preservativo el método más utilizado.
Además, el consenso social sobre la maternidad
adolescente se ha ido modificando con los años y los
cambios sociales que los acompañan.
El embarazo en las adolescentes se ha convertido en
seria preocupación para varios sectores sociales desde
hacen ya unos 30 años. Para la salud, por la mayor
incidencia de resultados desfavorables o por las implicancias
del aborto. En lo psicosocial, por las consecuencias adversas
que el hecho tiene sobre la adolescente y sus
familiares.
Cuando la adolescente se embaraza inicia un complejo
proceso de
toma de
decisiones y, hasta decidirse por uno, aparece siempre
el aborto a
veces como un supuesto más teórico que
real.
En 1985, en EE.UU, el aborto alcanzó el 42%;
los matrimonios disminuyeron del 51% al 36%. Hoy, la tendencia
es de un aumento de los abortos y disminución de
matrimonios, aunque no siempre las decisiones de las
adolescentes son conocidas (abortos o
adopción).
En España, la cifra del 12% de abortos en
general es baja pero la interrupción del embarazo en
jóvenes es de las más altas. Los nacimientos en
adolescentes descendieron en un 32% en los últimos 4
años, pero los embarazos sólo disminuyeron en un
18%. La diferencia entre las tasas está dada por los
abortos.
Salvo que el tener un hijo forme parte de un proyecto de
vida de una pareja de adolescentes, el embarazo en ellos es
considerado como una situación problemática por
los sectores involucrados pero, si se considera al embarazo en
la adolescente como un "problema", ello limita su análisis. En todo caso, esta
"problematización" se aplicaría a algunas
subculturas o a algunos estratos sociales, pero no a todos los
embarazos en adolescentes. Además, el considerarlo un
"proble-ma", exige aplicar terapéuticas que aporten
soluciones
sin permitir implementar acciones
preventivas adecuadas. Por ello es conveniente encuadrarlo
dentro del marco de la "salud integral del adolescente". Esto
permite abarcar todos los embarazos que ocurran a esta edad;
adecuar las acciones preventivas dentro de la promoción de la salud; brindar asistencia
integral a cada madre adolescente, a sus hijos y parejas y
aportar elementos para el desarrollo de las potencialidades de
los adolescentes.
Por todo ello, el embarazo en adolescentes necesita un
abordaje integral biopsicosocial por un equipo
interdisciplinario capacitado en la atención de adolescentes y en este
aspecto específico de la maternidad ?
paternidad.
3. CONSIDERACIONES PSICOSOCIALES PARA EL AUMENTO
DE LOS EMBARAZOS EN ADOLESCENTES
El comportamiento sexual humano es variable y depende
de las normas
culturales y sociales especialmente en la adolescencia,
pudiendo clasificar a las sociedades
humanas de la siguiente manera:
a. ? Sociedad Represiva: niega la sexualidad,
considerando al sexo como un área peligrosa en la
conducta
humana. Considera una virtud la sexualidad inactiva,
aceptándola sólo con fines procreativos. Las
manifestaciones de la sexualidad pasan a ser fuentes de
temor, angustia y culpa, enfatizando y fomentando la castidad
prematrimonial.
b. ? Sociedad Restrictiva: tiene tendencia a limitar
la sexualidad, separando tempranamente a los niños
por su sexo. Se aconseja la castidad prematrimonial, otorgando
al varón cierta libertad.
Presenta ambivalencia respecto al sexo, siendo la más
común de las sociedades en el mundo.
c. ? Sociedad Permisiva: tolera ampliamente la
sexualidad, con algunas prohibiciones formales (la homosexualidad). Permite las relaciones sexuales
entre adolescentes y el sexo prematrimonial. Es un tipo social
común en países desarrollados.
d. ? Sociedad Alentadora: para la cual el sexo es
importante y vital para la felicidad, considerando que el
inicio precoz del desarrollo de la sexualidad favorece una sana
maduración del individuo. La pubertad es
celebrada con rituales religiosos y con instrucción
sexual formal. La insatisfacción sexual no se tolera y
hasta es causal de separación de pareja. Son sociedades
frecuentes en Africa
ecuatorial, la Polinesia y algunas islas del
Pacífico.
Así se considera que el embarazo en
adolescentes es un fenómeno causado por múltiples
factores, principalmente de orden psicosocial, ocurriendo en
todos los estratos sociales sin tener las misma
características en todos ellos, por lo que importan las
siguientes consideraciones:
1. ? Estratos medio y alto: la mayoría de las
adolescentes que quedan embarazada interrumpen la
gestación voluntariamente.
2. ? Estratos más bajos: donde existe mayor
tolerancia
del medio a la maternidad adolescente, es más
común que tengan su hijo.
Conocer los factores predisponentes y determinantes
del embarazo en adolescentes, permite detectar las
jóvenes en riesgo para así extremar la
prevención. Además, las razones que impulsan a
una adolescente a continuar el embarazo hasta el nacimiento,
pueden ser las mismas que la llevaron a embarazarse.
3.1 FACTORES PREDISPONENTES
1. ? Menarca Temprana: otorga madurez reproductiva
cuando aún no maneja las situaciones de
riesgo.
2. ? Inicio Precoz De Relaciones Sexuales: cuando aun
no existe la madurez emocional necesaria para implementar una
adecuada prevención.
3. ? Familia
Disfuncional: uniparentales o con conductas promiscuas, que
ponen de manifiesto la necesidad de protección de una
familia continente, con buen diálogo padres ? hijos. Su ausencia
genera carencias afectivas que la joven no sabe resolver,
impulsándola a relaciones sexuales que tiene mucho
más de sometimiento para recibir afecto, que genuino
vínculo de amor.
4. ? Mayor Tolerancia Del Medio A La Maternidad
Adolescente Y / O Sola
5. ? Bajo Nivel Educativo: con desinterés
general. Cuando hay un proyecto de vida que prioriza alcanzar
un determinado nivel educativo y posponer la maternidad para la
edad adulta, es más probable que la joven, aún
teniendo relaciones sexuales, adopte una prevención
efectiva del embarazo.
6. ? Migraciones Recientes: con pérdida del
vínculo familiar. Ocurre con el traslado de las
jóvenes a las ciudades en busca de trabajo y aún
con motivo de estudios superiores.
7. ? Pensamientos Mágico: propios de esta etapa
de la vida, que las lleva a creer que no se embarazarán
porque no lo desean.
8. ? Fantasías De Esterilidad: comienzan sus
relaciones sexuales sin cuidados y, como no se embarazan por
casualidad, piensan que son estériles.
9. ? Falta O Distorsión De La
Información: es común que entre adolescentes
circulen "mitos" como:
sólo se embaraza si tiene orgasmo, o cuando se es
más grande, o cuando lo hace con la menstruación,
o cuando no hay penetración completa, etc.
10. ? Controversias Entre Su Sistema De Valores Y El
De Sus Padres: cuando en la familia
hay una severa censura hacia las relaciones sexuales entre
adolescentes, muchas veces los jóvenes las tienen por
rebeldía y, a la vez, como una forma de negarse a
sí mismos que tiene relaciones no implementan medidas
anticonceptivas.
11. – Aumento en número de adolescentes:
alcanzando el 50% de la población femenina.
12. – Factores socioculturales: la evidencia del
cambio de
costumbres derivado de una nueva libertad sexual, que se da por
igual en los diferentes niveles
socioeconómicos.
3.2 FACTORES DETERMINANTES
1. ? Relaciones Sin Anticoncepción
2. ? Abuso
Sexual
3. ? Violación
4. ASPECTOS
PSICOSOACIALES DEL EMBARAZO EN LAS ADOLESCENTES
4.1 LA ADOLESCENCIA DE LAS ADOLESCENTES
EMBARAZADAS
La maternidad es un rol de la edad adulta. Cuando
ocurre en el periodo en que la mujer no
puede desempeñar adecuadamente ese rol, el proceso se
perturba en diferente grado.
Las madres adolescentes pertenecen a sectores sociales
más desprotegidos y, en las circunstancias en que ellas
crecen, su adolescencia tiene características
particulares.
Es habitual que asuman responsabilidades impropias de
esta etapa de su vida, reemplazando a sus madres y privadas de
actividades propias de su edad, confundiendo su rol dentro del
grupo, comportándose como "hija – madre", cuando
deberían asumir su propia identidad
superando la confusión en que crecieron.
También, en su historia, se encuentran
figuras masculinas cambiantes, que no ejercen un rol ordenador
ni de afectividad paterna, privándolas de la confianza y
seguridad en
el sexo opuesto, incluso con el mismo padre
biológico.
Así, por temor a perder lo que creen tener o en
la búsqueda de afecto, se someten a relaciones con
parejas que las maltratan.
En otros casos, especialmente en menores de 14
años, el embarazo es la consecuencia del "abuso sexual",
en la mayoría de los casos por su padre
biológico.
El despertar sexual suele ser precoz y muy importante
en sus vidas carentes de otros intereses; con escolaridad
pobre; sin proyectos
(laborales, de uso del tiempo libre, de estudio); con modelos
familiares de iniciación sexual precoz; por
estimulación de los medios,
inician a muy corta edad sus relaciones sexuales con chicos muy
jóvenes, con muy escasa comunicación verbal y predominio del
lenguaje
corporal. Tienen relaciones sexuales sin protección
contra enfermedades de
transmisión sexual buscando a través de sus
fantasías, el amor que
compense sus carencias.
4.2 ACTITUDES HACIA LA MATERNIDAD
El embarazo en la adolescente es una crisis que
se sobre impone a la crisis de la adolescencia. Comprende
profundos cambios somáticos y psicosociales con
incremento de la emotividad y acentuación de conflictos
no resueltos anteriormente.
Generalmente no es planificado, por lo que la
adolescente puede adoptar diferentes actitudes que
dependerán de su historia personal, del
contexto
familiar y social pero mayormente de la etapa de la
adolescencia en que se encuentre.
En la adolescencia temprana, con menos de 14
años, el impacto del embarazo se suma al del desarrollo
puberal. Se exacerban los temores por los dolores del parto; se
preocupan más por sus necesidades personales que no
piensan en el embarazo como un hecho que las
transformará en madres. Si, como muchas veces ocurre, es
un embarazo por abuso sexual, la situación se complica
mucho más. Se vuelven muy dependientes de su propia
madre, sin lugar para una pareja aunque ella exista realmente.
No identifican a su hijo como un ser independiente de ellas y
no asumen su crianza, la que queda a cargo de los
abuelos.
En la adolescencia media, entre los 14 y 16
años, como ya tiene establecida la identidad del
género, el embarazo se relaciona con la
expresión del erotismo, manifestado en la vestimenta que
suelen usar, exhibiendo su abdomen gestante en el límite
del exhibicionismo. Es muy común que "dramaticen" la
experiencia corporal y emocional, haciéndola sentirse
posesiva del feto,
utilizado como "poderoso instrumento" que le afirme su
independencia de los padres. Frecuentemente oscilan entre la
euforia y la depresión. Temen los dolores del parto
pero también temen por la salud del hijo, adoptando
actitudes de autocuidado hacia su salud y la de su hijo. Con
buen apoyo familiar y del equipo de salud podrán
desempeñar un rol maternal, siendo muy importante para
ellas la presencia de un compañero. Si el padre del
bebé la abandona, es frecuente que inmediatamente
constituya otra pareja aún durante el
embarazo.
En la adolescencia tardía, luego de los 18
años, es frecuente que el embarazo sea el elemento que
faltaba para consolidar su identidad y formalizar una pareja
jugando, muchas de ellas, el papel de madre joven.
La crianza del hijo por lo general no tiene muchos
inconvenientes.
En resumen, la actitud de
una adolescente embarazada frente a la maternidad y a la
crianza de su hijo, estará muy influenciada por la etapa
de su vida por la que transita y, si es realmente una
adolescente aún, necesitará mucha ayuda del
equipo de salud, abordando el tema desde un ángulo
interdisciplinario durante todo el proceso, incluso el
seguimiento y crianza de su hijo durante sus primeros
años de vida.
4.3 EL PADRE ADOLESCENTE
Si la adolescente no está preparada para ser
madre, menos lo estará el varón para ser padre
especialmente porque, en la cultura en
que se da la maternidad adolescente, es muy común que el
varón se desligue de su papel y las descendencias pasan
a ser criadas y orientadas por mujeres.
Esta exclusión del varón provoca en
él sentimiento de aislamiento, agravados por juicios
desvalorizadores por parte de su familia o amistades ("con
qué lo vas a mantener", "seguro que no
es tuyo", etc.) que precipitarán su aislamiento si es
que habían dudas.
Al recibir la noticia de su paternidad, el
varón se enfrenta a todos sus mandatos personales,
sociales y a sus carencias, exacerbándose todo ello por
altruismo, lealtad, etc. como también por su dependencia
económica y afectiva. Por ello, busca trabajo para
mantener su familia, y abandona sus estudios, postergando sus
proyectos a largo plazo y confunde los de mediano con los de
corto plazo, comenzando a vivir las urgencias. A todo esto se
agrega el hecho de que la adolescente embarazada le requiere y
demanda su atención, cuando él se encuentra
urgido por la necesidad de procuración.
En la necesidad de plantearse una independencia frente
a su pareja y la familia de ésta, siente que se
desdibuja su rol, responsabilizándolo de la
situación, objetando su capacidad de "ser
padre".
Se enfrenta a carencias por su baja capacitación a esa edad y escolaridad
muchas veces insuficiente para acceder a trabajos de buena
calidad y bien
remunerados. Ello lo obliga a ser "adoptado" como un miembro
más (hijo) de su familia política, o ser
reubicado en su propia familia como hijo ? padre.
Esta situación de indefensión hace
confusa la relación con su pareja, por su propia
confusión, lo que le genera angustia. Por ello es que el
equipo de salud deberá trabajar con el padre
adolescente, estimulando su compromiso con la situación,
o bien posibilitando una separación que no parezca
"huida".
4.4 CONSECUENCIAS DE LA MATERNIDAD ? PATERNIDAD
ADOLESCENTE
A las consecuencias biológicas por
condiciones desfavorables, se agregan las psicosociales de la
maternidad ? paternidad en la segunda década de la
vida.
4.4.1 Consecuencias Para La
Adolescente
Es frecuente el abandono de los estudios al
confirmarse el embarazo o al momento de criar al hijo, lo
que reduce sus futuras chances de lograr buenos empleos y
sus posibilidades de realización personal al no
cursar carreras de su elección. También le
será muy difícil lograr empleos permanentes
con beneficios sociales.
Las parejas adolescentes se caracterizan por ser
de menor duración y más inestables, lo que
suele magnificarse por la presencia del hijo, ya que muchas
se formalizan forzadamente por esa
situación.
En estratos sociales de mediano o alto poder
adquisitivo, la adolescente embarazada suele ser objeto de
discriminación por su grupo de
pertenencia.
Las adolescentes que son madres tienden a tener un
mayor número de hijos con intervalos
intergenésicos más cortos, eternizando el
círculo de la
pobreza.
4.4.2 Consecuencias Para El Hijo De La Madre
Adolescente
Tienen un mayor riesgo de bajo peso al nacer,
dependiendo de las circunstancias en que se haya desarrollado
la gestación. También se ha reportado una mayor
incidencia de "muerte
súbita".
Tienen un mayor riesgo de sufrir abuso
físico, negligencia en sus cuidados, desnutrición y retardo del desarrollo
físico y emocional.
Muy pocos acceden a beneficios sociales,
especialmente para el cuidado de su salud, por su
condición de "extramatrimoniales" o porque sus padres
no tienen trabajo que cuenten con ellos.
4.4.3 Consecuencias Para El Padre
Adolescente
Es frecuente la deserción
escolar para absorber la mantención de su familia.
También es común que tengan peores trabajos y
de menor remuneración que sus padres, sometidos a un
stress
inadecuado a su edad. en general, todo ello condiciona
trastornos emocionales que dificultan el ejercicio de una
paternidad feliz.
5. ENFOQUE DE RIESGO
PARA LA ATENCION DE LA ADOLESCENTE
EMBARAZADA
La primera pregunta a responder es si se considera a
las adolescentes gestantes como de alto riesgo
obstétrico y perinatal. La segunda pregunta es
cómo separar a las adolescentes que son de alto riesgo
de las que no lo son. Una tercera pregunta es saber
cuáles son esos factores predictores y si son
biológicos o psicosociales. La cuarta pregunta es saber
si es posible aplicar modelos de atención simples que
permitan aplicar los factores predictores de riesgo y
concentrar los recursos de
mayor complejidad y de mayores costos en las
adolescentes más necesitadas.
Para aplicar un modelo de
atención basado en factores de riesgo obstétrico
y perinatal, conviene dividir a las adolescentes embarazadas en
3 grupos: de alto
riesgo, de mediano riesgo y de riesgo corriente o no
detectable.
5.1 GRUPO DE ALTO RIESGO OBSTETRICO Y
PERINATAL
Antecedentes de patología médica
obstétrica general importante.
Antecedente de abuso sexual.
Enflaquecimiento (desnutrición).
Estatura de 1,50 m o menor.
Cursando los 2 primeros años de la enseñanza media.
Pareja estudiante, en servicio
militar o con trabajo ocasional.
5.2 GRUPO DE MEDIANO RIESGO OBSTETRICO Y
PERINATAL
Menarca a los 11 años o menos.
Actitud negativa o indiferente al inicio del
embarazo.
Ser la mayor de los hermanos.
5.3 GRUPO DE RIESGO OBSTETRICO Y PERINATAL
CORRIENTE O NO DETECTABLE
Incorpora a todas las demás adolescentes
hasta la edad que determine el programa.
Poseen diferentes normas de control
prenatal, en base a nivel de complejidad de la
atención.
Actualmente no se considera el grupo de mediano
riesgo. El factor "actitud negativa" de la adolescente al
inicio del embarazo, pasó al grupo de alto riesgo y
los otros 2 factores pasaron al grupo de riesgo corriente o
no detectable.
La aplicación de un programa de estas
características en CAPS del norte de la ciudad de
Santiago de Chile, ha permitido descender la tasa de
mortalidad materna a casi 0 en adolescentes y la de partos
pretérmino igualarlos prácticamente a la de la
población de adultas (7 a 8% en Chile).
6. ENFOQUE
DE SALUD SEXUAL Y REPRODUCTIVA DEL
ADOLESCENTE
Para aplicar este enfoque es necesario desarrollar
actividades y acciones integrales y
coordinadas que abarquen el programa destinado a resolver los
fenómenos y problemas del Crecimiento y Desarrollo
normal y sus derivaciones, relacionados con la evolución del proceso
endocrinológico sexual y mental del adolescente, la
femineidad y su entorno social.
Las actividades del programa se dividen en 5 periodos
según el momento de la aplicación de las
acciones, incluyendo aspectos obstétricos y no
obstétricos, siendo éstos los más
complejos de aplicar, pero indispensables para lograr buen
impacto en los niveles de salud materna y perinatal y el
ejercicio de una salud Sexual y Reproductiva en
adolescentes.
ALTO RIESGO MEDIANO RIESGO
RIESGO CORRIENTE O NO
DETECTABLE
Periodo fetal e
infantil
(desde inicio de vida fetal hasta
comienzo pubertad)
Actividades | Prevención | Prevención | ||
Diagn. Genético Consej. Genética Estudios Prenatales Ginecol. Urológ RN Ginecol. Infantil | Diagn. precoz Educación Educación a padres Educación a padres Educación a padres | Control de patologías Educación Diagn. precoz Diagn. precoz Diagn. Precoz |
7. CONTROL DEL
EMBARAZO DE LA ADOLESCENTE
En Francia, entre el 5 y el 10% de los embarazos en
adolescentes, son desconocidos hasta el parto y el seguimiento
del 20 a 30% es deficiente o nulo.
En EE.UU, la primera visita, por lo general ocurre
hacia las 16,2 semanas en las adolescentes y de las 12,6
semanas en la mujer mayor
siendo nulo el seguimiento entre un 2 a 3%, aumentando con la
edad alcanzando un 56,6% entre los 18 y 19
años.
En Salamanca España, el 45,6% de las gestantes
adolescentes son controladas en el Servicio de Obstetricia y
Ginecología del Hospital Universitario Clínico de
dicha ciudad, un 45,64% lo son fuera de él, y un 11,7%
no son controladas. Se controlan el 11,65% de las adolescentes
gestantes entre 14 y 16 años y un 88,35% de las
gestantes entre 17 y 19 años. Al parecer, el
número total de controles no supera los 4 en todo el
embarazo.
Los problemas que se pueden presentar en los controles
prenatales, se los puede agrupar en trimestres.
7.1 PRIMER TRIMESTRE
7.1.1 Trastornos Digestivos
En 1/3 de las gestantes adolescentes se presentan
vómitos, proporción bastante semejante a la
población de adultas. En algunas circunstancias
pueden colaborar otros factores como la gestación no
deseada. Un trabajo nigeriano al respecto informa que los
vómitos se ocurrieron en el 83,3% de controladas y
el 86% de no controladas.
7.1.2 Metrorragias
Ocurre en un 16,9% de las adolescentes en uy en un
5,7% de las adultas.
7.1.3 Abortos Espontáneos
Leroy y Brams detectaron un 28,2% de abortos
espontáneos en las adolescentes.
7.1.4 Embarazos Extrauterinos
Según Aumerman ocurren en el 0,5% de las
gestantes embarazadas y en el 1,5% de las
adultas.
7.2 SEGUNDO Y TERCER TRIMESTRE
7.2.1 Anemia
Especialmente en sectores de bajo nivel social y
cultural. El déficit nutricional condiciona la anemia
ferropénica, problema que comenzó a ser
estudiado por Wallace en 1965. Tejerizo encuentra un 16,99%
de anemias en las adolescentes gestantes y un 3,97% en las
adultas. En el Hospital Universitario Clínico de
Salamanca se encontró un 53,8% de anemias
ferropénicas en adolescentes. En un estudio sobre 340
adolescentes embarazadas, se encontró 13,5% de anemias
en las controladas y 68% en las no controladas. Son varios
los autores (Berardi, García Hernández entre
otros) que relacionan francamente la anemia
ferropénica con la influencia del factor
socioeconómico.
7.2.2 Infecciones Urinarias
Hay discrepancias respecto de si es o no más
frecuente esta complicación en la adolescente
embarazada. Al parecer habría un discreto aumento de
la frecuencia entre las de 14 años pudiendo alcanzar,
para algunos autores, un 23,1%.
7.2.3 Amenaza De Parto
Pretérmino
Afecta aproximadamente al 11,42% de las gestantes
embarazadas y, para algunos autores, no es diferente al
porcentaje de las mujeres adultas. No obstante, la
adolescencia en sí, es un factor de riesgo para esta
complicación.
7.2.4 Hipertensión Arterial
Gravídica
Complicación que se presenta entre le 13 y
20% de las adolescentes gestantes, posiblemente es mayor el
porcentaje entre las gestantes menores de 15 años,
notándose una sensible disminución en la
frecuencia de la eclampsia (0,10 a 0,58%), dependiendo en
gran medida de la procedencia de la gestante, su nivel social
y de la realización de los controles prenatales. En
algunos países del 3er mundo puede alcanzar un 18,2%
de preeclampsias y un 5% de eclampsias. Para algunos autores,
esta incidencia es doble entre las primigrávidas entre
12 y 16 años.
7.2.5 Mortalidad Fetal
No parece haber diferencias significativas entre las
adolescentes y las adultas.
7.2.6 Parto Prematuro
Es más frecuente en las adolescentes, con una
media de menos una semana respecto de las adultas, cubriendo
todas sus necesidades (nutritivas, médicas, sociales,
psicológicas). En el Hospital Universitario
Clínico de Salamanca, la incidencia del parto
pretérmino alcanza el 9%.
7.2.7 Crecimiento Intrauterino
Retardado
Quizás por inmadurez biológica
materna, y el riesgo aumenta por condiciones
socioeconómicas adversas (malnutrición) o por
alguna complicación médica (toxemia). El bajo
peso al nacer se asocia al aumento de la morbilidad perinatal
e infantil y al deterioro del desarrollo físico y
mental posterior del niño.
7.2.8 Presentaciones Fetales
Distócicas
Las presentaciones de nalgas afecta del 1,9% al 10%
de las adolescentes. Para algunos autores, al 3%.
7.2.9 Desproporciones
Cefalopélvicas
Es muy frecuente en adolescentes que inician su
embarazo antes de que su pelvis alcance la
configuración y tamaño propios de la
madurez.
7.2.10 Tipo De Parto
En algunas publicaciones se informa una mayor
frecuencia de extracciones fetales vaginales instrumentales y
no tanta cesárea. En el Hospital Universitario
Clínico de Salamanca, la prevalencia de
cesáreas en adolescentes es del 18,9%, mientras que en
nuestro servicio del Hospital Dr. José Ramón Vidal de Corrientes Arg., la
prevalencia del parto por cesárea es sensiblemente
mayor.
PARTO ADOLESCENTE
7.2.11 Alumbramiento
Se comunica una frecuencia del 5,5% de hemorragias
del alumbramiento en adolescentes, frente a un 4,8% en las
mujeres entre 20 y 24 años. Por lo tanto, la
hemorragia del alumbramiento no es específica del
parto de la adolescente.
7.2.12 Otras Complicaciones
La prevalencia del test de
Sullivan y la curva de glucemia positiva es posible que
ocurra en un 38,4% de las adolescentes gestantes.
8. RECIEN NACIDO DE
MADRE ADOLESCENTE
A. PESO
No existen diferencias significativas con
relación a las mujeres adultas, aunque parece existir
entre las menores de 15 años, debiendo diferenciarse
claramente los nacimientos pretérmino de los retardos
del crecimiento fetal, con definidas repercusiones sobre la
morbimortalidad perinatal. Entre la menores de 17 años
hay mayor frecuencia de bajos pesos, con una prevalencia
cercana al 14% de RN con menos de 2500 g.
B. INTERNACION EN NEONATOLOGIA
Los hijos de adolescentes registran una mayor
frecuencia de ingresos a
Neonatología sin diferencias entre las edad de las
adolescentes.
C. MALFORMACIONES
Se informa mayor incidencia entre hijos de
adolescentes menores de 15 años (20%) respecto de las de
mayor edad (4%), siendo los defectos de cierre del tubo neural
las malformaciones más frecuentes, y con un
número importante de retrasos mentales de por
vida.
D. MORTALIDAD PERINATAL
Su índice es elevado entre las adolescentes,
disminuyendo con la edad (39,4% hasta los 16 años y
30,7% entre las mayores de 19 años).
8.1 PRONOSTICO
8.1.1 MATERNO
Condicionado por factores físicos, sociales
y psicológicos. El corto intervalo
intergenésico es frecuente con sus consecuencias
psicofísicas y sociales. El 50 a 70% abandonan las
escuelas durante el embarazo y el 50% no la retoman
más y si lo hacen, no completan su formación.
Sólo un 2% continúan estudios
universitarios.
8.1.2 FETAL
Entre un 5 y 9% de los hijos de adolescentes, son
abandonados al nacer.
8.2 PREVENCION
8.2.1 PRIMARIA
A realizarse antes de la actividad sexual.
8.2.2 SECUNDARIA
Dirigida a adolescentes en actividad sexual que no
desean embarazos.
8.2.3 TERCIARIA
Dirigida a adolescentes embarazadas, para buen
control de la gestación en lo médico, en lo
fisiológico y en lo alimenticio, en busca de disminuir
las complicaciones.
8.3 ATENCION INTEGRAL DE LA
ADOLESCENTE
8.3.1 EL ENFOQUE DE RIESGO
Estrategia que tiene en cuenta: factoresprotectores
y factores de riesgo psicosociales para implementar una
intervención adecuada y oportuna para evitar un
daño.
a. Factores protectores: son recursos personales o
sociales que atenúan o neutralizan el impacto de un
daño. Para un adolescente, una familia continente
(aunque uniparental), una diálogo fluido con adulto
referente, un rendimiento escolar satisfactorio y un grupo de
pares con conductas adecuadas, son factores
protectores.
b. Factores de riesgo: son características o
cualidades de una persona o comunidad unidas a una mayor
probabilidad
de sufrir daño en salud.
Hay algunos que son más frecuentes e
importantes y que deben ser buscados en la
entrevista pudiendo ser divididos en psicosociales y
biológicos, aunque siempre se asocian.
El enfoque de riesgo se caracteriza por
ser:
1. Anticipatorio: permitiendo aplicar medidas
preventivas.
2. Integral: abarcando los aspectos
biológicos, psicológicos y sociales del
individuo.
El enfoque de riesgo en la adolescente es muy
importante ya que los comportamientos ante la morbimortalidad
predominante en la adolescencia comparten la toma de riesgo y
hay que investigarlos sistemáticamente, por lo que
requiere de un equipo interdisciplinario
Factores psicosociales de
riesgo
en la adolescente
embarazada
Asicronía madurativa físico ?
emocional
Baja autoestima
Bajo nivel de instrucción
Ausencia de interés
Pérdida reciente de personas significativas
Embarazo por violación o abuso
Intento de aborto
Propósito de entregar el hijo en adopción
Familia disfuncional o ausente, sin adulto referente
Trabajo no calificado
Pareja ambivalente o ausente
Condición económica desfavorable
Marginación de su grupo de pertenencia
Difícil acceso a los centros de salud
Factores de riesgo
biológico
en la embarazada
adolescente
Edad cronológica < 14 años y / o
edad ginecológica < 1 año
Peso < 45 Kg y / o talla < 1,45
m
Estado nutricional deficiente
Aumento insuficiente de peso para su biotipo y
estado
preconcepcional
Hábitos alimentarios inadecuados en
calidad y cantidad
Consumo de tóxicos (tabaco,
alcohol y
otras sustancias)
Tatuajes
Más de 2 parejas
8.3.2 LA CONSULTA CON ADOLESCENTES
Debe recordarse que el embarazo no madura a la
adolescente a la adultez, especialmente en los casos de
adolescencia temprana o media y, para ello deberán
tenerse en cuanta algunos elementos:
1. ? Características de la adolescente que
las diferencia de la mujer adulta
a. La adolescente tiene poca conciencia
de salud, resultándole muy difícil asumir un
autocuidado debido a las circunstancias en que ocurrió
el embarazo y las dificultades que éste le plantea. No
tiene tiempo para pensar que debe concurrir regularmente a la
consulta, ni comprende la importancia de los estudios
complementarios, interpretándolos como castigo. Por
ello hay que explicarle muy cuidadosamente para qué
sirven y cómo se los realizarán.
b. La adolescente no ha elaborado aún la
identidad de género: si no puede comprender cabalmente
lo que es ser mujer, menos comprenderá el significado
de tener un hijo. Puede manifestarse contenta por ello,
siendo más una idealización de la maternidad
que una visión real de ella.
c. Una característica de la niñez y de
la adolescencia temprana y media es el pensamiento mágico, convencimiento de
que las cosas vana a ocurrir o no según sus deseos
(ej.: "el parto no me va a doler"; "nos vamos a vivir juntos
y nos vamos a mantener con lo que él gana"), lo que
puede poner en riesgo a la adolescente y/o a su
hijo.
d. Tiene temor a los procedimientos invasivos, incluso para los
estudios complementarios.
e. Tienen menos información sobre todo el
proceso, ya que las vicisitudes del embarazo, parto y crianza
no son temas de conversación a esa edad. No han
conversado con adultas comparando síntomas, por lo que
el médico deberá brindar toda la
información lo más clara posible.
2. ? Dificultad para el vínculo con el
hijo
a. Tienen dificultades para discriminarse del
bebé, estableciendo vínculos simbólicos
con él y, cuando esta vinculación las agobia,
pueden descuidar al niño e incluso
maltratarlo.
b. Priorizan sus necesidades sobre las del
niño, ya que ellas son aún demandantes, y no
tienen capacidad de contener a su hijo.
c. Toleran muy poco las frustraciones, ya que no
comprenden que el bebé no es como ellas quieren que
sea, ni hace los que ellas quieren en el momento que quieren.
Pueden llegar al enojo con el niño, poniéndolo
en riesgo.
3. ? Perfil deseable del médico para atender
adolescentes
a. Tener idoneidad: no solo en perinatología,
sino en características biopsicosociales particulares
de la adolescencia.
b. Saber escuchar: permitir que la adolescente
plantee sus dudas y temores, alentándola con preguntas
respetuosas. Debe ser buen observador de gestos, y saber
contener sus actitudes y entrenarse en el contenido de sus
palabras, sin reemplazar al psicólogo.
c. Saber respetar: aceptando los
valores de la adolescente cuando difieren de los
suyos.
d. Ser capaz de registrar: las diferentes
sensaciones que pueden provocar las palabras de la
adolescente y tenerlas en cuenta. Algunas veces, las
manifestaciones de la adolescente o la misma
situación, provoca rechazo, enojo e impotencia que
pueden generar, en el médico, actitudes punitvas o
paternalistas poco operativas. Si estima que la
situación lo supera, deberá buscar ayuda en
otro miembro del equipo. Estas situaciones se plantean
más intensamente en el parto, especialmente si la
adolescente es muy chica o se descontrola, cuando se necesita
mayor tolerancia y comprensión, para no provocar
daño emocional con secuelas futuras.
4. ? Contexto de la maternidad
adolescente
Por lo general el equipo de salud se enfrenta a las
siguientes circunstancias:
a. Embarazo no planificado.
b. Pareja ambivalente o ausente.
c. Familia disfuncional o que, en principio no
acepta la situación.
d. Condiciones económicas
desfavorables.
e. Escaso espacio social frente al problema, con
autoridades escolares que la separan de la
institución, empleadores que la despiden y
dificultades para constituir una familia.
5. ? Objetivos
del equipo de salud
a. Ayudar a la adolescente a aceptar su
embarazo.
b. Fortalecer los vínculos
familiares.
c. Conseguir actitudes compresivas en el personal de
la institución.
d. Brindar atención perinatal
integral.
6. ? Estrategias del equipo de salud
a. Atención por equipo interdisciplinario
(obstetra, obstétrica, psicólogo, asistente
social).
b. Participación de la atención al
padre y a los familiares cercanos que la adolescente
desee.
c. Brindar atención y seguimiento a la
familia y al padre del niño en espacio diferente al de
la atención prenatal.
d. Trabajar con personal de la institución
(médicos residentes, personal de guardia, enfermeras y
otros) que intervengan en la atención.
9. MORTALIDAD
MATERNA EN ADOLESCENTES
En muchos países en desarrollo es francamente
más alta.
Mortalidad materna en adolescentes y
no adolescentes
en algunos países, por
100.000 nacidos vivos
En América
Latina, la mortalidad materna total y la específica
por edades, ha disminuido en casi todos los países y, en
alguno de ellos, ya no puede ser utilizada como indicador para
evaluar el impacto de programas,
utilizándose la auditoría de casos para el
análisis de la calidad de atención en accidentes
obstétricos y perinatales.
La prevención de la mortalidad materna en
adolescentes se basa en la detección precoz de los
grupos de mayor riesgo, y adecuado tratamiento de la morbilidad
obstétrica y perinatal, optimizando los recursos. De
esta manera, los riesgos
enfermar y morir, no serán un problema de la edad
cronológica, sino de la calidad, cobertura y
accesibilidad de los servicios de
salud para las madres adolescentes.
Para la disminución de la mortalidad materna en
la adolescencia, se inicia con la Atención Primaria de
la salud, a través de la Educación
Sexual y Anticoncepción como herramientas
de la Promoción para la Salud, todo ello enmarcado en un
programa de Educación, Promoción y
Protección para la Salud de la Adolescente, como
política de salud teniendo en cuenta que los
jóvenes aún carecen de representación
gremial y política que defiendan sus derechos, pasando a ser
una baja prioridad en algunas sociedades. El análisis de
factores de riesgo, se resume a informes
intrahospitalarios que muestran algunos aspectos del riesgo,
generalmente asociados a algunas patologías y no con
criterio predictivo aplicado desde la Atención Primaria
de la Salud.
10. MORBILIDAD
OBSTETERICA EN LAS ADOLESCENTES
En Chile (1991-1997), se informó que, la
morbilidad de las adolescentes entre 10 y 14 años que
necesitó internación, correspondía a
accidentes y enfermedades respiratorias
y digestivas, representando las causas gestacionales un 4,1% de
los egresos. En el grupo de 15 a 19 años, la primera
causa de hospitalización fue la gestación,
alcanzando el 63,1% de los egresos. La distribución de la morbilidad
obstétrica fue semejante a la de las adultas con mayor
frecuencia de estados hipertensivos y desproporciones
fetopélvicas.
Llama la atención el impacto de la
desnutrición en las embarazadas adolescentes, llegando a
un 19,4% de enflaquecidas al momento del parto y la frecuencia
del RN < 2,500 g alcanzó al 15% en ellas, siendo 5
veces superior a la frecuencia de prematuros en adolescentes de
nutrición normal. Este fenómeno es
mucho más grave en comunidades rurales, notándose
un 41,4% de adolescentes de bajo peso al ingreso al control
prenatal.
La aplicación de un programa integral para
adolescentes embarazadas, impactará sensiblemente en la
disminución de la morbilidad obstétrica como ser:
infecciones urinarias, preeclampsia y eclampsia, tasa de
cesáreas (salvo < 15 años). Los RCIU y PEG
llegan al 15-18%, superiores a las mujeres adultas. No se ha
confirmado la mayor frecuencia de malformados en embarazadas
adolescentes.
En estudios de seguimiento, se comprobó
relación entre mayor frecuencia de patologías de
salud mental
y desestructuración familiar, abandono de pareja y
voluntariedad del embarazo, pobreza en la
capacidad de expresión, manejo e interpretación de los sentimientos de
afectividad. El abandono, en cualquiera de sus formas, lleva a
la pérdida de la autoestima a límites de
peligrosidad, dificultando la
comunicación con la adolescente (especialmente
durante el embarazo).
Patología psiquiátrica más
frecuente en 185 embarazadas solteras menores de 20
años (Chile 1991 ? 1997)
El aborto provocado es un problema social,
consecuencia generalmente de un embarazo no deseado. Sus causas
son habitualmente psicosociales y las consecuencias de sus
complicaciones son médicas.
En EE.UU. en 1991 la tasa de abortos entre 15 y 19
años descendió al 35/1.000 y, en 1997, la tasa de
abortos a toda edad era del 26/1.000. En Italia, en
1991, la tasa de abortos entre 15 y 19 años era del
4,6/1.000 y, en 1996, la tasa de abortos a toda edad llegaba al
10,6/1.000. Por tanto, el aborto tiene un comportamiento
diferente de un país a otro y en países europeos
tiene tasas más bajas.
Abortos por 1.000 mujeres entre 15 y 19
años
en países industrializados
(1981)
En Cuba, donde
el aborto está despenalizado, en 1996-97 el 25% de los
abortos fueron practicados en adolescentes y, entre los
factores riesgo, el primero fue ser estudiante y el segundo fue
tener menos de 18 años. en EE.UU. en 1994-95, el 14,5%
de los abortos despenalizados fueron practicados en menores de
19 años, lo que marca la diferencia entre
países.
Los países sin aborto legal carecen de
estadísticas fidedignas del aborto voluntario o
inducido. Las estadísticas se basan en los egresos
hospitalarios de los casos complicados y en encuestas
poblacionales. La información de la primera fuente se ve
sesgada por razones legales, aumentando la tasa de abortos
espontáneos y la tasa de complicaciones dependerá
de los ejecutores clandestinos (su entrenamiento,
sus recursos, los costos). En Africa, en 1997, 2/3 de los
egresos hospitalarios por abortos correspondieron a
adolescentes. En Venezuela,
en el mismo año, el 12% de las muertes maternas fueron
por abortos en adolescentes.
En Chile, los egresos hospitalarios por abortos
complicados, fueron: 1960: 10,6%; 1981: 10,9%; 1988: 9,3%;
1991: 10%. Son cifras altas si se las expresa en
relación a nacidos vivos.
La información de morbimortalidad por aborto en
adolescentes, está influenciada por el diagnóstico tardío del embarazo en
ellas haciendo que, al acudir a "aborteros" de bajo nivel, se
practiquen los abortos en gestaciones avanzadas y en malas
condiciones higiénicas. Además, por
desconocimiento del embarazo por parte de padres o tutores, las
complicaciones del aborto de las adolescentes se reportan
tardíamente, llegando en sumo estado de gravedad a la
internación, con mayor mortalidad (shock séptico,
anemia extrema, compromiso de vísceras por perforaciones
uterinas).
La prevalencia de aborto, por medio de encuestas de
fecundidad, también tienen errores por miedo a revelar
el echo o por olvido del mismo a más de 2 años de
practicado. Encuestas realizadas en comunidades pobres de
Santiago de Chile en 1991, se observó que la tasa de
abortos espontáneos y provocados por 1.000 embarazos,
era más baja en menores de 19 años que entre 20 y
24 años y adultas. Al parecer, la fecundidad de la
adolescente pobre se expresa más como nacido vivo que
como aborto, cuando éste no está legalizado y los
embarazos no deseados en adolescentes tienen menores tasas que
en los países con aborto legal, expresando la menor
información y medios de la adolescente pobre en recursos
económicos y educación.
12. ABUSO SEXUAL EN
ADOLESCENTES
Un volumen nada
despreciable de embarazos en adolescentes son producto de
violación. Bajo la denominación de abuso sexual
se incluyen: abuso deshonesto, el coito forzado y, en algunos
países, el coito entre un adulto y una menor de 12
años. Por lo general la cohersión es
psicológica o engañosa. En este tema se incluye
también el abuso físico psicológico,
denominado maltrato infanto – juvenil.
Los informes policiales y forenses de Chile, Honduras,
Nicaragua y Ecuador,
aseguran que, entre el 59 y 69% de las violaciones y entre el
43 y 93% de los abusos deshonestos, ocurren en menores de 20
años.
Las encuestas escolares en Chile, Costa Rica y
Panamá
se encontró que, entre el 6,1 y 40% de las adolescentes
entre 16 y 19 años, sufrieron al menos un abuso sexual.
En EE.UU. en 1987, las encuestas informan que los coitos
forzados llegan al 74% en menores de 14 años y al 60%
entre 15 y 19 años, del total reportado. Otras encuestas
escolares en EE.UU. entre 1995 y 1997 informan que, entre 10 y
40% reportan abusos sexuales entre mujeres y entre 4 y 30% en
varones. En Canadá, una encuesta escolar en 1996,
informa un 23% de abusos sexuales en mujeres y otro, en 1994,
informa un 54% de abusos sexuales en menores de 18
años.
En EE.UU. en 1998 se comprobó que, entre el 18
y 60% de los embarazos en adolescentes, fueron producidos por
violación. En Chile, en la misma época, un 12% de
los embarazos en adolescentes eran por violación, con un
99% de embarazos y niños no deseados. En el mismo
año, en Costa Rica, el 14% de los embarazos en menores
de 14 años, eran producto de violaciones.
En Francia, en 1998, una encuesta escolar
encontró un 9% de violaciones en mujeres y un 6% en
varones, entre el 8º y 12º año de escolaridad.
En Inglaterra, en
el mismo año, ser reportó un 59% de abuso sexual
en mujeres y un 27% en varones.
Los factores asociados revelan que un 55% de las
violaciones de adolescentes son intrafamiliares (padre,
padrastro, otros parientes y conocidos de la
familia).
Un estudio de casos y controles en Chile en 1998,
entre embarazadas adolescentes por violación y no
violadas, demostró significativas diferencias en las
siguientes variables:
ser adolescentes menores, de bajo nivel socioeconómico,
estudiantes, parejas mayores de 30 años, actitudes
negativas al embarazo y al niño, malas relaciones con
los padres, mayor morbilidad en embarazo y parto, APGAR bajo
del RN, menor aceptación de anticoncepción, 2,5
veces más mortalidad del niño a los 5
años. Otro estudio comparativo entre adolescentes
embarazadas por violación intrafamiliar y extrafamiliar,
demostró diferencias significativas en los casos de
violación intrafamiliar en las siguientes variables: ser
adolescentes más jóvenes y con madres más
jóvenes, antecedentes de maltrato físico,
presencia de padrastro o conviviente y alcoholismo
en padre.
En EE.UU. dos estudios confirmaron asociación
entre adolescentes violadas con mayor número de parejas
sexuales e inicio más precoz del coito y menor
utilización de anticonceptivos eficaces.
ABUSO SEXUAL INFANTIL
En el siguiente cuadro se resumen las consecuencias de
la violación en adolescentes.
Consecuencias de la violación en
adolescentes
- Alta frecuencia de embarazos y niños no
deseados. - Alta mortalidad de niños a los 5 años
de vida. - Alto riesgo de adquirir ETS y SIDA.
- Alta frecuencia del Síndrome de Trastornos de
Satress Post – Traumático. - Alto riesgo de embarazos repetidos.
- Alto riesgo de asaltos sexuales en la
adultez. - Alto riesgo de conducta
promiscua años después de la violación
única o repetida, especialmente cuando son
intrafamiliares y crónicas.
a. El embarazo en adolescentes es un serio problema
psicosocial con frecuentes connotaciones penales.
b. El aborto en las adolescentes es frecuente y con
alta morbimortalidad materna por lo avanzado de la edad
gestacional, y las deficientes condiciones técnicas, higiénicas y
asépticas en que se realiza.
c. La prosecución del embarazo conlleva el
abandono de los estudios por parte de la adolescente y
frecuentemente no los retoma luego del nacimiento, generando
desocupación y difícil
reinserción laboral por
falta de capacitación.
d. El embarazo y parto en las adolescentes reconoce un
alto riesgo de morbimortalidad materna, fetal y
neonatal.
e. El hijo de madre adolescente tiene alto riesgo de
maltrato y abandono, con frecuente cesión de
adopción.
f. La reinserción y el respeto
social de la adolescente luego de su embarazo y parto, son
difíciles y hasta irrecuperable.
g. Para el control y contención de la
adolescente embarazada, es necesaria la integración de un equipo
interdisciplinario, con amplia participación de
psicólogos y trabajadores sociales, además de una
especial capacitación del equipo asistencial en lo
referente a los riesgos perinatales a los que está
expuesta la adolescente gestante.
- Coll A.: "Embarazo en la adolescencia" ?
Clínicas Perinatológicas Argentinas, Nº 4,
1997 ? Asociación Argentina de Perinatología
(ASAPER). - García Sánchez M. H., Hernández
Hernández M. L., Manjon Sánchez A.: "Embarazo y
adolescencia" – Dto. Obst. y Ginec. Hptal. Clín.
Univers. de Salamanca ? Rev. sobre Salud Sexual y Reproductiva
Nº 2, año 2, junio 2.000, pág. 10-12 ?
Asociación Argentina por la Salud Sexual y Reproductiva
(AASSER). - Molina R.: "Adolescencia y embarazo" ? Pérez
Sánchez A., Donoso Siña E.: Obstetricia, Cap. 14,
2ª Edic. 1992 ? Publicac. Técnicas MEDITERRANEO ?
Santiago de Chile. - Molina R., Sandoval J., Luengo X.: "Salud sexual y
reproductiva del adolescente" – Ruoti, A. M. y col.:
Obstetricia y Perinatología, Cap. 8, 2ª Edición, 2.000 ? EFACIM-EDUNA,
Asunción, Paraguay. - Toro Merlo J., Uzcátegui Uzcátegui O.:
"Embarazo en la adolescente" ? Rodriguez Armas O.,
Santiso Gálvez R., Calventi V.: Ginecología,
Fertilidad y Salud Reproductiva, FLASOG, Vol. 1, Cap. 32 ?
Edit. ATEPROCA, Caracas, Venezuela.
CON TODO CARIÑO
PARA
NUESTRA QUERIDA
PROFESORA
VICTORIA POR SUS
AMPLIAS
ENSEÑANZAS Y
ORIENTACIONES
QUE NOS SERVIRÁN
PARA
LABRARNOS UN FUTURO
EXITOSO
Elaborado por
Luis Pedro Menacho Chiok
Licenciado en Bibliotecología y Ciencias de la
Información de la Universidad
Nacional Mayor de San Marcos (UNMSM)
Lima ? Perú
2005