En el presente artículo los autores reflexionan
en torno a la significación que tiene para el mejoramiento
del desempeño profesional del estudiante que
cursa la especialidad de Construcción Civil una
formación laboral que se
sustente en concepciones didácticas que favorezcan la
integración escuela –
empresa
– comunidad; que
posibiliten la integración de lo académico, lo
laboral y lo investigativo del proceso; que
consideren el planteamiento de tareas docentes con
un carácter problémico, cuya
solución deba ser alcanzada a partir de la
integración de saberes básicos, generales y
técnicos y que impliquen a los sujetos del proceso en la
realización de trabajos productivos.
PALABRAS CLAVES: Formación laboral,
integración escuela – empresa- comunidad
La idea de la formación laboral del hombre
trasciende como un legado histórico del ideario
pedagógico cubano a la contemporaneidad educativa y se
presenta en el actual contexto escolar como una de las
aspiraciones de relevancia de la escuela politécnica
cubana.
Al respecto el Héroe Nacional de la
República de Cuba
afirmó: " Puesto que a vivir viene el hombre,
la
educación ha de prepararlo para la vida. En la escuela
ha de aprenderse el manejo de las fuerzas con que en la vida se
ha de luchar. Escuela no debería decirse, sino talleres
(…)" [MARTÍ, 1976; 72 ]
La anterior reflexión, se encuentra en la base de
la concepción filosófica de la pedagogía cubana; por cuanto, revela la
necesidad de una preparación laboral del hombre para que
pueda desempeñarse profesionalmente con competencia y
asumir compromisos sociales. Tal desempeño sólo es
posible, si el estudiante es insertado en un proceso educativo
que lo instruya, lo eduque y lo desarrolle, para que alcance
elevados niveles de formación en sus habilidades
profesionales, adquiera conocimientos y potencie sus valores, ya
que en la síntesis
integradora de estos saberes es que se revelan las competencias.
En el presente artículo sus autores asumen el
objetivo de
exponer algunas concepciones didácticas que han sido
validadas en la práctica escolar para mejorar la
formación laboral de los estudiantes que cursan la
especialidad Construcción Civil y en consecuencia
reflexionan en relación con su significación para
el desarrollo del
desempeño profesional de éstos.
Sin una formación laboral adecuada resulta
imposible, que un egresado de la especialidad Construcción
Civil se desempeñe competentemente en el proceso
inversionista de la construcción; debido a que no logra
alcanzar el nivel de formación de las habilidades y
competencias profesionales que para tal propósito se
requiere.
Cuando se declara la expresión nivel de
formación de las habilidades y competencias profesionales,
los autores hacen referencia al nivel de dominio que
demuestra haber alcanzado el trabajador formado o en
formación en sus saberes básicos, generales y
técnicos cuando es enfrentado a la solución de
problemas
profesionales en condiciones productivas reales.
La formación laboral y politécnica de las
nuevas generaciones es interpretada por la filosofía
marxista como consecuencia de las leyes objetivas
del desarrollo de la producción y de la formación
integral del individuo; es
por ello, que la escuela politécnica que forma
trabajadores para el escenario empresarial, debe sustentar su
labor pedagógica en aquellos saberes científicos
sobre cuya base se originan las transformaciones en el referido
contexto.
Si la escuela politécnica se plantea el reto de
superar la mera instrucción profesional, para encargarse
de propiciar una enseñanza que integre los saberes
básicos, generales y técnicos, de modo, que se
condicione un mejoramiento del nivel de formación de las
habilidades y competencias profesionales en los estudiantes que
se forman como trabajadores, tendrá que concebir el
proceso de formación de los mismos, en condiciones de
integración del estudio en las escuelas con el trabajo en
las empresas.
Se asume que " los conocimientos de las bases
científicas de la producción han de sintetizarse y
aplicarse en forma creativa en un trabajo
productivo, pues sin vincularse con un trabajo productivo la
instrucción politécnica adquiere un carácter
contemplativo verbal, pasando a ser formales los conocimientos "
[KRUPSKAYA, 1986; 14].
Únicamente la integración del trabajo
productivo con la enseñanza durante todo el período
que dure el proceso de formación del trabajador, logra que
las asignaturas del ciclo básico y general
desempeñen un papel efectivo en la preparación del
estudiante, ya que éste comprenderá la
significación de los contenidos de las mismas para
poder
manifestar un desempeño profesional competente.
Desde el prisma de la filosofía marxista, el
proceso de obtención del conocimiento
científico considera a la práctica social como
fuente primaria para desarrollar el pensamiento
abstracto y de ahí retornar nuevamente a ella para
sistematizar los saberes adquiridos en su transformación.
Es por ello que el principio del vínculo del estudio con
el trabajo, se sustenta en una concepción
científica de la comprensión de la formación
multifacética del trabajador que se forma; y en modo
alguno, responde a una alternativa coyuntural que se orienta
básicamente a suplir las necesidades de recursos
existentes en las escuelas politécnicas para las
actividades laborales.
Por lo tanto, una escuela politécnica que intente
lograr mejorar el nivel de formación del saber hacer
profesional de los estudiantes que se preparan como trabajadores
en la especialidad Construcción Civil, tendrá que
instrumentar un sistema de
acciones, que
posibiliten la integración de los mismos al proceso
constructivo a todo lo largo de sus estudios, sin dejar por ello,
de proporcionarles una preparación básica y
general.
"Los talleres no han de ser lugares donde meramente se
practique caligrafía laboral, hace falta que lo que se
haga en talleres tenga realmente una vinculación con la
producción […] Hace falta un trabajo productivo de los
educandos directamente en empresas de la industria (y
en un espacio comunitario externo a la empresa y a la
escuela misma)" [KRUPSKAYA,1986;16 – 17].
Lo que se aclara por los autores en la cita anterior, no
sólo se apoya en una experiencia validada
prácticamente por sus investigaciones;
sino en una concepción marxista de la educación laboral del
hombre, ya que este tipo de educación no se limita a
la
organización del trabajo productivo de los estudiantes
en las escuelas y en las empresas, pues la esencia social del
hombre hace que el trabajo socialmente útil se convierta
en una fuente generadora de saberes profesionales y valores
humanos.
El trabajo socialmente útil permite educar a los
trabajadores en formación como activistas sociales y
comunitarios, pues los mismos se implican "en la creación
de productos
pertinentes a necesidades sociales"[Fuentes, 2002;
102]. Tal accionar posibilita mejorar el nivel de
formación de sus habilidades y competencias y favorece su
desempeño profesional.
Cuando esta alternativa de formación laboral no
es utilizada adecuadamente por parte de las escuelas
politécnicas donde se cursa la especialidad de
Construcción Civil, se produce una errática
utilización del tiempo
previsto por el plan de estudios
para las actividades laborales, poco o casi nulo activismo
profesional comunitario por parte de los departamentos de la
especialidad, carencias en el saber hacer profesional de los
educandos e incompetencia en su desempeño.
Por otra parte, no se puede dejar pasar por alto, que
aquellas empresas que conforman las esferas de actuación
profesional del trabajador de esta especialidad, en los momentos
actuales tienen que adquirir las materias primas, instrumentos de
trabajo y equipos a precios de
mercado y en
moneda libremente convertible; por lo tanto, no pueden darse el
lujo de insertar en su proceso productivo a personas que no se
desempeñen profesionalmente con competencia.
Ante esta situación, el enfrentamiento a los
problemas profesionales que se generan en el espacio comunitario
que es externo a la escuela y a la empresa, viene a convertirse
en una alternativa de trabajo socialmente útil que puede
utilizarse para mejorar el nivel de formación de las
habilidades profesionales del trabajador en formación y en
consecuencia su desempeño.
La escuela politécnica cubana
contemporánea no puede circunscribirse en materia de
gestión
pedagógica a los límites
físicos de sus instalaciones, debe dar y darse apertura
hacia el contexto empresarial y comunitario que existe en su
entorno, ya que los problemas profesionales para cuya
solución deben quedar preparados los estudiantes, no se
manifiestan en ella; sino en ese contexto que hoy día no
es penetrado con toda la agresividad que las condiciones
histórico sociales demandan.
Además, se considera que en unión a las
alternativas que se analizaron para mejorar el nivel de
formación de las habilidades y competencias profesionales,
se hace necesario implementar acciones metodológicas que
logren integrar el esfuerzo pedagógico de las diversas
asignaturas que componen el curriculum de
la especialidad.
Se es del criterio, que para dar una formación
laboral adecuada a los estudiantes y con ello lograr mejorar los
niveles de formación de sus habilidades y competencias
profesionales, deben concebirse propuestas metodológicas
que relacionen dialécticamente un sistema de acciones
dirigidas a combinar la actividad laboral de los alumnos en
centros productivos, en un espacio comunitario externo a la
empresa y a la escuela y la ejecución de tareas docentes
problémicas que integren lo académico, lo laboral y
lo investigativo.
La combinación de las acciones antes destacadas
posibilita la manifestación de múltiples formas de
interacción y comunicación
social entre los sujetos que intervienen en el proceso
pedagógico; es decir, la de los estudiantes entre
sí; la de los estudiantes con los profesores, instructores
de la producción y clientes
comunitarios; además, se desarrollan habilidades para
resolver problemas en grupos donde se
cumplimenten normas técnicas
de seguridad y de
producción.
En fin, la armónica combinación del
estudio con el trabajo "[…] aparte de un principio de orden
moral, de un
principio de orden teórico, es además una imperiosa
necesidad material […] Hoy para nuestro país es una
necesidad de orden material, a la vez que es una necesidad de
orden educacional " [CASTRO, 1974; 106].
Hacer realidad la potencialidad que manifiesta el
principio del vínculo del estudio con el trabajo para
mejorar el nivel de formación de las habilidades y
competencias profesionales, implica la necesaria
conversión de la escuela politécnica en una
institución generadora de bienes
espirituales y materiales que
permitan satisfacer las necesidades que se manifiestan en el
contexto comunitario donde la misma está
ubicada.
Esta concepción teórica no se concreta
aún de forma consistente en la práctica
pedagógica que acontece en la especialidad
Construcción Civil; por cuanto, no se cuenta con una
teoría
pedagógica y metodológica suficientemente
sistematizada y validada, que explique la manera en que los
docentes, instructores, clientes y estudiantes pueden implicarse
profesionalmente en condiciones de integración de escuela
politécnica – empresa – comunidad para contribuir a
resolver los problemas de índole constructivo que se
manifiestan en el entorno comunitario a la escuela.
Lo que se apunta por los autores para el caso concreto de la
especialidad Construcción Civil, se reveló por
otros profesionales que incidieron investigativamente en el
territorio en las especialidades Mecánica Taller (Betancourt,2000);
Construcciones Metálicas (Tejeda,2000) y Contabilidad
(Ortiz,2002).
Por otro lado, las investigaciones llevadas a cabo en el
país durante los años noventa del siglo anterior
por importantes autores (Abreu, 1995; Cortijo,1996;
Patiño,1996; Fraga, 1997) revelan la necesidad de una
ciencia
pedagógica que aborde las particularidades de la
formación técnica y profesional "…y haga realidad
la integración entre docencia,
producción e investigación y entre escuela
politécnica y empresa " [ ORTIZ, 2002;12]
Por lo tanto, para hacer realidad los presupuestos
teóricos que se asumieron desde una concepción
filosófica y pedagógica de la filosofía
marxista y el ideario cubano en relación con la
preparación de un trabajador que manifiesta un
desempeño laboral competente, se requiere que el proceso
formativo que acontece en las escuelas politécnicas se
caracterice por ser pedagógico y profesional.
"… pedagógico porque concibe la unidad
educación – instrucción – enseñanza como
condición para formar y superar adecuadamente al
trabajador, porque concibe esta unidad tanto en condiciones
académicas como laborales. Profesional porque lleva
implícito lo laboral, lo técnico, productivo e
investigativo como partes inseparables de lo profesional; esto
último se refleja y penetra lo pedagógico del
proceso" [ABREU, 1995; 2 ]
Dicho con otras palabras, el estudiante que cursa
estudios en una escuela politécnica de la
Construcción tiene que considerarse como un trabajador en
formación; razón suficiente para comprender la
necesidad de la manifestación de un proceso de
integración entre la entidad educativa, la productiva y la
comunidad como condición indispensable para mejorar los
niveles de formación de sus habilidades y competencias
profesionales y consecuentemente con ello su desempeño
laboral.
Es por ello que Abreu (1995) concibe al proceso
pedagógico profesional como: "El proceso de
educación que tiene lugar bajo las condiciones
específicas de integración de la Escuela
Politécnica y la Entidad Productiva para la
formación y superación de un trabajador
competente"[ABREU,1995;2].
Cortijo (1996) por su parte plantea, que el proceso
pedagógico profesional " […] caracteriza el sistema de
actividades académicas, laborales e investigativas que se
llevan a cabo en la institución docente y en la entidad
productiva para formar el futuro profesional"
[CORTIJO,1996;3]
Fraga (1997) declara que el mismo es " […] un proceso
de educación, como respuesta a una demanda
social, que tiene lugar bajo las condiciones de una
institución docente y la empresa para la formación
y superación de un profesional competente " [FRAGA, 1997;
7].
Finalmente Ortiz (2002) haciendo un análisis crítico de las anteriores
definiciones expresa que el proceso pedagógico profesional
es " […] el sistema de actividades docentes profesionales
(extradocentes, extraescolares, productivas y de
investigación) que se llevan a cabo en la escuela
politécnica y/o en la entidad productiva para formar
la
personalidad de los futuros profesionales técnicos de
nivel medio y superar a los trabajadores de la esfera de la
producción y los servicios "
[ORTIZ, 2002;13]
De las definiciones destacadas, se escapan elementos que
pudieran incrementar el alcance teórico y la
significación práctica de las mismas, por
constituir ellos reflejos de un potencial quehacer
pedagógico que se manifiesta en un espacio comunitario
externo a la escuela y a la empresa, y que se concentran en las
necesidades de tipo profesional que manifiestan los diferentes
núcleos familiares que conviven en el entorno de la
escuela.
Estas necesidades de tipo profesional, generan
potencialidades educativas que sin lugar a dudas pueden
contribuir a mejorar el nivel de formación de las
habilidades y competencias profesionales de los educandos, por
cuanto son problemas profesionales cuya solución requiere
de la implementación de los modos de actuación
profesional que deben aprender los estudiantes durante su proceso
de formación como trabajadores. De modo, que los autores
identifican a estas potencialidades, como potencialidades
educativas comunitarias y las define como aquellas necesidades
que manifiestan desde el punto de vista profesional los diversos
núcleos familiares que conforman el entorno comunitario a
la escuela politécnica y que pueden condicionar el
desarrollo del saber, saber hacer y saber ser profesional en los
alumnos que se forman como trabajadores.
Por lo tanto, los autores consideran, que el proceso
pedagógico profesional es un proceso de educación
que se caracteriza por la generación de acciones
académicas, laborales e investigativas bajo condiciones de
integración entre la escuela politécnica, la
entidad productiva y un espacio comunitario externo a estas
entidades que manifiesta necesidades profesionales y que puede
ser abordado tanto desde la escuela como desde la empresa; todo
ello, para la formación y capacitación de un trabajador
competente.
Los presupuestos teóricos que se manejan, apuntan
hacia la concepción, de que una escuela politécnica
para generar servicios educativos de calidad, tiene
necesariamente que generar servicios productivos en el contexto
comunitario donde ella está ubicada, lo cual revela el
papel que juega la empresa y la comunidad en la formación
laboral de los trabajadores en sentido general, y en particular,
en el mejoramiento del nivel de formación de sus
habilidades y competencias profesionales.
Por ende, tanto la empresa como la comunidad, asisten al
proceso pedagógico de la especialidad Construcción
Civil como contextos sociales que interactúan con la
escuela politécnica a través de sus
representantes.
El papel que puede desempeñar el instructor de la
producción en la formación de un trabajador se
reconoce por múltiples autores (Abreu, 1995;
Patiño, 1996; Ortiz, 2002). Él debe llegar a
convertirse en un docente más que tengan los alumnos, y
contribuir con su experiencia al mejoramiento del nivel de
formación de las habilidades y competencias profesionales
de ellos.
Un elemento de novedad pedagógica, que no se
registra y fundamenta en la literatura consultada,
radica en el papel que puede jugar el cliente
comunitario que recibe el beneficio del servicio
constructivo que presta la escuela politécnica, en el
mejoramiento del nivel de formación de las habilidades y
competencias profesionales del estudiante y en el
perfeccionamiento del proceso.
El cliente comunitario está en la necesidad de
declarar a la escuela politécnica el tipo y volumen de
trabajo que él demanda, para que la escuela lo analice y
lo estructure en virtud de las exigencias establecidas en el
perfil ocupacional y plan de estudios de la especialidad; luego,
él pasa a jugar un papel protagónico en la
creación de las condiciones materiales y organizativas que
presuponen las labores que ejecutará el
estudiante.
En otro nivel de análisis, la experiencia de los
autores le permiten declarar, que el cliente comunitario se
convierte en un agente controlador de la calidad, asistencia,
puntualidad y aprovechamiento de la jornada laboral, ya que exige
con todo rigor y sistematicidad que se cumplan las normas
técnicas establecidas en el proyecto, los
índices de consumo de
materiales, el cuidado y mantenimiento
de los medios de
trabajo y el cumplimiento del cronograma de
ejecución.
De esta manera el cliente comunitario se convierte en un
agente de cambio para la
personalidad
del estudiante y para el proceso en sí, pues contribuye de
esta forma a que el trabajador en formación adquiera
hábitos de disciplina
laboral y tecnológica y a que la escuela
politécnica gane un prestigio técnico y
pedagógico; por cuanto, los alumnos al encontrar la
posibilidad de enfrentar muchos de los problemas que caracterizan
la dinámica laboral de sus esferas de
actuación, se habilitan con suficiencia profesional para
protagonizar posteriormente un desempeño competente en el
contexto empresarial.
Esta experiencia supera con creces la que se vive en los
polígonos de construcción de las
escuelas politécnicas, ya que el esfuerzo del estudiante
no queda reducido a una simulación
instructiva, que de hecho es cuestionable en lo educativo por no
dejar significados positivos desde el punto de vista profesional
para la personalidad del alumno.
Con la implicación del estudiante en la
realización de tareas profesionales en una obra de
arquitectura,
la escuela politécnica hace una contribución a la
sociedad de
incuestionable valor, pues
además de lograr que el alumno se prepare con mayor
calidad, se solucionan importantes problemas constructivos en el
contexto comunitario.
De modo, que los autores al ser consecuente con la
definición que dieron de proceso pedagógico
profesional, coinciden con Fuentes (1998) en que la
realización de este proceso "[…] se sustenta en el
amplio sistema de interacciones y relaciones que se establecen
entre los sujetos implicados en el mismo, sujetos que no son solo
simples participantes del proceso, sino que devienen en
artífices y protagonistas del mismo y por lo tanto en
sujetos del cambio…" [FUENTES,1998;35]; ello quiere decir, que
en un proceso con estas características todos
enseñan y aprenden algún saber, por lo que se
consideran sujetos y nunca objetos del proceso.
En el proceso pedagógico de la especialidad
Construcción Civil, interactúan como sujetos del
mismo tanto alumnos y profesores como instructores de la
producción y clientes comunitarios porque todos
contribuyen de una forma u otra a la formación del
trabajador competente de una manera consciente y con su accionar
se convierten en agentes de cambio del propio proceso.
La formación laboral de los estudiantes que
cursan la especialidad Construcción Civil; así
como, el mejoramiento de sus habilidades y competencias
profesionales está condicionado por la capacidad
pedagógica que tenga la escuela politécnica para
implementar concepciones didácticas que favorezcan la
integración escuela – empresa – comunidad; que
posibiliten la integración de lo académico, lo
laboral y lo investigativo del proceso; que consideren el
planteamiento de tareas docentes con un carácter
problémico, cuya solución deba ser alcanzada a
partir de la integración de saberes básicos,
generales y técnicos y que impliquen a los sujetos del
proceso en la realización de trabajos socialmente
útil en las empresas y comunidades del entorno a la
escuela, de modo que los alumnos desarrollen una conciencia
productora y adquieran una educación
económica.
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Maestría. ISPETP. La Habana. 2000.
Nombres de los autores:
Miguel A Cruz Cabezas
Dr. C Ciencias
Pedagógicas, Máster en Pedagogía
Profesional,
Licenciado en Educación y Director de la Sede
Universitaria Pedagógica del Municipio de Banes.
Holguín.
Marilín Sierra Vicente
Licenciada en Educación y Profesora de la
Universidad Pedagógica " José de la
Luz y Caballero", ciudad de Holguín.
Mariela Silva Cruz
Máster en Pedagogía Profesional.
Licenciada en Educación y Profesora de la Universidad
Pedagógica " José de la Luz y Caballero", ciudad de
Holguín.