- La época
prosoviética del deporte cubano - Las deserciones: Los gritos del
silencio del deporte - El eterno pobre nivel del
fútbol castrista - El incierto futuro del
voleibol - La natación y waterpolo:
Sólo limitaciones - Fuentes
1976 fue un año de importantes acontecimientos en
la Isla de Fidel Castro.
Se redacto la Constitución Nacional, se enviaron tropas
militares al África, y Cuba se
convirtió en uno de los principales líderes del
Movimiento de
Países No Alineados. No obstante, el acontecimiento que
mayor atención despertó fue la
ubicación de la Isla entre las ocho principales potencias
deportivas en los Juegos
Olímpicos de Verano de Montreal-76. Ciertamente, en el
majestuoso Estadio Olímpico de Montreal, una de las
siete
maravillas de la arquitectura
deportiva global, el corredor Alberto Juantorena, un atleta de
más de 1,90 de estatura, salto a la fama internacional al
ganar las pruebas de los
400 y 800 metros planos, un resultado poco tradicional en las
competencias
del atletismo
universal. Entrenado por el mejor experto deportivo de la
República Socialista de Polonia, Juantorena no tuvo
mayores rivales por la no presentación de los atletas del
África, entre ellos los keniatas Julyus Sang, John
Kipkugart y Mike Boit. Con la excepción de Costa de
Marfil, el Continente Negro boicoteó la justa
olímpica canadiense a raíz de los contactos
deportivos entre Nueva Zelandia y la Sudáfrica Racista del
Apartheid.
El sábado 31 de julio, en el Fórum
de Montreal, los pugilistas antillanos, encabezados por el
superpesado Teófilo Stevenson, campeón en las
Olimpiadas de Munich-72, arrasaron con ocho medallas en el Torneo
Olímpico de Boxeo, tres de ellas de oro. En este mismo
escenario, el sexteto de voleibol
masculino, medalla de oro en los Séptimos Juegos
Deportivos Panamericanos México
(1975) y campeón del Torneo Norceca de Los Ángeles-75, conquistó el disco de
bronce, siendo superado sólo por los sextetos de "Hierro" de
Polonia y la URSS.
En tanto, Héctor Rodríguez se
alzó como el primer yudoca latinoamericano en ganar una
presea dorada en la historia de las Olimpiadas.
Por otro lado, en los deportes colectivos, Cuba
clasificó a sus equipos de baloncesto
masculino y voleibol de mujeres. Días más tarde, el
gobernante de por vida de la Isla, Fidel Alejandro Castro Ruz,
recibió a los deportistas en una ceremonia especial que
recordaba que Cuba se había convertido de la noche a la
mañana en la primera potencia
atlética del Tercer Mundo. No obstante,con el paso del
tiempo, en el
siglo XXI, el régimen dictatorial castrista se enfrenta a
uno de sus mayores retos: La supervivencia del
deporte.
2.LA
ÉPOCA PROSOVIÉTICA DEL DEPORTE
CUBANO
Hasta el fin del Mundo Soviético, Cuba se
llevó numerosas medallas de oro, plata y bronce en las
disciplinas del atletismo, lucha, baloncesto femenino, esgrima y
voleibol. Gran parte del alto nivel que exhibían los
atletas se originaba en su larga experiencia global en escenarios
deportivos de Moscú, Praga, Varna, Sofía, Bucarest,
Varsovia y Brno. Las innumerables invitaciones deportivas eran
totalmente gratuitas, es decir pasajes, estadía y alimentación a cuenta
de los organizadores soviéticos, germanorientales,
búlgaros y yugoslavos. Los luchadores competían
anualmente en los Torneos Poddubni (Rusia),
Ostrava (ex Checoslovaquia) y Selenhinder (ex Alemania
Oriental). Por otro lado, el equipo completo de esgrima viajaba a
los certámenes de Pinak (Polonia), Cárpatos
(Rumania) y otros por tierras rusas.
Con seguridad, la
falta de experiencia internacional es el principal problema que
asfixia al deporte latinoamericano no castrista cuando tiene que
competir en las jornadas de las Olimpiadas, Juegos Mundiales
Universitarios, Juegos de la Buena Voluntad, Mundiales y Copas
del Mundo.La ausencia de viajes al
extranjero se origina en la crisis
económica que agobia a la región: En 1984 Bolivia estuvo
a punto de no asistir a los Juegos Olímpicos de Verano de
Los Ángeles-84 por falta de recursos
económicos. El reverso de la medalla se da cuando un
equipo latinoamericano recibe alta dosis de experiencia
internacional. A inicios del decenio del siglo XX, el voleibol
masculino argentino ganó la medalla de bronce en el
Campeonato Mundial después de haber ocupado el puesto
22° en la anterior cita global. ¿Qué paso? Los
voleibolistas platenses iniciaron extensas giras mundiales: En
1980 viajaron al Asia Oriental; en
1981 jugaron en Francia,
Alemania Federal, la ex Checoslovaquia, Rumania, Bulgaria,
Italia,
Hungría, Polonia y la ex República
Democrática de Alemania; en 1982 se trasladaron nuevamente
a tierras asiáticas y brasileñas, además de
jugar varios partidos con el sexteto cubano. Sorprendido por el
gigantesco adelanto del voleibol argentino, Carmelo Pittera,
técnico del voleibol italiano, manifestó lo
siguiente: "Es la mayor evolución que hemos visto en los
últimos quince o veinte años". De hecho, muchos
países del Tercer Mundo serían otro cosa si sus
gobiernos hubieran recibido millonarias ayudas externas como la
Cuba de Fidel Castro
Gratamente estimulado por el progreso del deporte
antillano, en 1977 el dictador Fidel Alejandro Castro Ruz fue el
arquitecto de la famosa Escuela de
Iniciación Deportiva (EIDE) "Mártires de Barbados",
el semillero del deporte castrista. El dictador cubano no dudo en
ningún instante en otorgarle su absoluto apoyo al deporte
a través de las EIDE: "Es muy importante que no nos
equivoquemos; que por buscar campeones no descuidemos la
práctica del deporte. El deporte debiera practicarlo todo
el mundo, y no solo los de primaria…Lo que gastemos en deportes
y en educación
física, tengan la más completa seguridad de que
lo ahorramos en gastos de
salud
pública y lo ganamos en bienestar y
prolongación de los ciudadanos…"
En la década que finaliza el Segundo
Milenio, el deporte cubano fue gradualmente perdiendo importantes
posiciones en el universo del
deporte olímpico, pese a reunir uno de los mayores
presupuestos
deportivos de la Tierra. El
fin de la ayuda soviética significo igualmente el cierre
de los viajes al exterior, la construcción de complejos deportivos y
la
organización de torneos internacionales en ciudades de
la Isla.Desde mediados de los años sesenta, el
régimen prosoviético se daba el lujo de ser la
capital anual
de una serie de torneos internacionales extraoficiales: Torneo de
Amistad
(baloncesto femenino); Copa Cuba (clavados); Copa José
Ramón
Rodríguez (judo); Copa
Cuba (equitación); Copa Córdova Cardín
(boxeo); Torneo Barrientos (atletismo); Torneo Ramón Fonst
In Memoriam (esgrima); Torneo Cerro Pelado (lucha); Torneo
Amistad (tenis), Torneo Capablanca (ajedrez); y el
Torneo Moncada (gimnasia). Por
otro lado, los asesores y entrenadores soviéticos
también desaparecieron, aunque desde 1962 fueron
prácticamente ignorados por los medios de
comunicación del régimen castrista.
3-LAS
DESERCIONES: LOS GRITOS DEL SILENCIO DEL
DEPORTE…
No hay ninguna duda, que a partir de los años
noventa, la Isla de Fidel Alejandro Castro Ruz rompió
todos los récords mundiales en cuanto a deserciones
atléticas, una marca muy
parecida a la de la Sudáfrica en los tiempos de la
dictadura
racista del Apartheid. Tal vez la "fuga perfecta" fueron los
matrimonios de atletas cubanos con ciudadanos extranjeros,
especialmente mexicanos, italianos y españoles.La atleta
Liliana Allen, especialista en las pruebas de los 100 y 200
metros planos, participó con la divisa de México en
los Juegos Deportivos Panamericanos de Canadá (1999).
Niurka Montalvo se convirtió en la primera atleta
española en ganar una prueba de salto largo en unos
Campeonatos Mundiales de Atletismo. La extraordinaria jugadora
Magali Esther Carvajal Rivera, ganadora de las medallas de oro en
las citas olímpicas de Barcelona-92 y Atlanta-96,
pasó a formar parte de la selección
de voleibol de España.Otra saltadora llamada Magdelin
Martínez, nacida el 10 de febrero de 1976 en la provincia
de Camaguey, tampoco dudo en adoptar la ciudadanía italiana, camiseta con la cual
ganó una medalla de bronce en el Mundial de Atletismo del
2003.
Ahora bien, las deserciones y el fin de la ayuda
del Mundo Soviético afectaron gravemente el desempeño internacional del deporte cubano.
En 1972, en el Torneo de baloncesto Masculino de las Olimpiadas
de Munich, el seleccionado cubano se ubicó entre los tres
primeros puestos, sólo por debajo de la URSS y los
Estados
Unidos. Por aquellos años, el baloncesto criollo
competía de igual a igual con sus similares de los Estados
Unidos. A decir verdad, los criollos rompieron todos los pronósticos iniciales:Lograron derrotar a
Brasil,
subcampeón mundial y campeón en los Juegos
Panamericanos de Colombia
(1971).
Cuba no figuraba entre los tres favoritos a
raíz de su octavo lugar en el Campeonato Mundial de
Yugoslavia (1970). Posteriormente, el baloncesto antillano
ingreso entre los cuatro primeros en los Mundiales de Puerto Rico. No
obstante, después de conseguir su clasificación a
las Olimpiadas de Verano del Canadá, la Isla empezó
a bajar su rendimiento internacional. Con viejas estrella de
Munich-72, el equipo nacional tuvo consecutivos fracasos.
Primero, no pudo clasificar a los Torneos Mundiales de Filipinas
(1978). Segundo, fue desplazado por varios equipos durante los
Juegos Panamericanos de Puerto Rico (1979). Tercero, no obtuvo el
boleto para asistir a los Juegos Olímpicos de
Moscú-80. Sin embargo, Alejandro Urgelles y
compañía participaron en la cita rusa gracias a la
inasistencia de Canadá y la Argentina.
En los siguientes torneos del calendario de la
Federación Internacional de baloncesto, el cuadro cubano
no convenció, pese a clasificar como uno de los once
mejores equipos en la cita universal de España. En tanto,
muchos especialistas quedaron sorprendidos cuando el país
caribeño ganó el Campeonato Centroamericano y del
Caribe de Baloncesto. La Isla se llevó con toda justicia el
título regional en 1989, pero este reinado tuvo un grave
problema: Una masiva deserción de
basquetbolistas.
No hay duda que la hora de deserciones de los
beisbolistas pasaron al olvido para dar paso a la fuga de
basquétbolistas, nadadores, kayacístas, gimnastas y
voleibolistas. Pues bien, en Toronto, durante los Campeonatos
Mundiales, se obtuvo el último puesto entre 16
participantes de los cinco continentes, incluyendo la africana
Angola. En tanto, mientras bajaba el nivel de Cuba,
surgían nuevos protagonistas en el escenario
internacional. Venezuela,
fiel representante de Sudamérica, clasificó a los
Juegos Olímpicos de Barcelona; Argentina se llevó
la medalla de oro de las Olimpiadas de Atenas; y China
Continental no era presa fácil en los eventos
globales.
4.EL ETERNO POBRE
NIVEL DEL FÚTBOL CASTRISTA
A pesar de que el país centroamericano se
encontraba bajo uno de los mayores conflictos
internos del planeta y figuraba entre las zonas latinoamericanas
con los peores índices de desarrollo
humano, El Salvador dio una excelente lección a todo
el planeta al clasificar a los Campeonatos Mundiales de
Fútbol España-82, eliminando a la escuadra de
México. No era la primera vez que la divisa
salvadoreña clasificaba a un eventos de calidad global,
pues estuvo presente en los Mundiales de Fútbol-70 y las
Olimpiadas-68.
Igualmente,representando al fútbol de
Norteamérica, Centroamérica y el Caribe, el equipo
de Honduras también clasificó a
España-82.Con anterioridad, en 1974 Haití
logró la hazaña histórica de conseguir el
boleto de la Concacaf a la Copa Mundial de Alemania, desplazando
a los aztecas, eternos
favoritos de la Cuenca del Caribe desde el inicio de los
Mundiales de Fútbol.
En el fútbol caribeño, Jamaica
también merece un capítulo especial. El
pequeño país, con fuerte tradición en el
atletismo, estuvo presente en los Mundiales de 1986 y 1990 por
intermedio del jugador John Barnes, el mejor futbolista de su
historia, nacionalizado inglés.
En 1995, la Isla anglocaribeña recibió el premio
FIFA de mayor éxito
mundial anual en honor a ubicarse como la selección con el
menor número de derrotas. Ahora bien, también
existen importantes progresos futbolísticos en Costa Rica,
Guatemala,
Panamá,
Suriname y Trinidad-Tobago.No obstante, en Cuba el pobre nivel
del fútbol sigue siendo un dolor de cabeza para las
autoridades del Comité Olímpico Cubano y el
Instituto Cubano de Deportes, Educación Física y Recreación
(INDER).
En los años setenta, las autoridades
deportivas soñaban con un equipo capaz de rendir
excelentes exámenes en las altas competencias de la FIFA.
Se trabajo por
largos años con muchos técnicos de Europa del Este
en casi todas las provincias de la Isla, pero los resultados
fueron pobres. El sueño de ubicar a Cuba entre los grandes
del balompié latinoamericano, al lado de Brasil,
Argentina, Uruguay,
México y Chile, fracasaron. Por aquellos tiempos, el
Comité Olímpico Internacional, con el fuerte
"lobby" de la
URSS, prohibió la participación de jugadores
profesionales dentro del circuito Olímpico, es decir
Olimpiadas, Juegos Panamericanos y Juegos Centroamericanos y del
Caribe, favoreciendo de manera indirecta a las naciones del Mundo
Soviético que mantenían jugadores profesionales
disfrazados de aficionados. Por ello, no sorprendió que
los títulos olímpicos de fútbol pasaran a
manos socialistas durante los Juegos de Australia-56, Italia-60,
Japón-64, México-68, Alemania
Federal-72, Canadá-76 y Moscú-80.
Al margen de los títulos de los Juegos
Regionales de Panamá (1970) y República Dominicana
(1974), el fútbol cubano no logró una
ubicación de respeto en
América
Latina. De hecho, su pasado era mucho mejor que su presente.
En el Tercer Campeonato Mundial de París (1938), los
futbolistas criollos finalizaron en el séptimo puesto
final, por encima de varios equipos con mayor experiencia,
incluyendo a Francia, Rumania, Alemania, Polonia y Países
Bajos. En su debut mundialista, los insulares lograron dos
importantes victorias contra Rumania (3×2 y 3×1). Gracias a este
resultado, en la historia del
fútbol de la FIFA,Cuba es considerado como el sexto
mejor equipo latinoamericano en una cita mundial, desplazando a
naciones como Paraguay,
México, Colombia y Costa Rica. En los Juegos
Olímpicos, la Isla también tuvo niveles muy
discretos. En Montreal-76 asistió como invitada en
reemplazo de Uruguay, selección que renunció a
participar aduciendo razones de falta de nivel
competitivo.
Cinco años más tarde, la Isla fue
nuevamente invitada para participar en Moscú-80. En la
cita moscovita el balompié cubano paso a las semifinales
dentro del peor clima del
fútbol olímpico de los últimos años:
Seis selecciones no pudieron asistir por motivo del boicot
internacional de los Estados Unidos, entre estos el equipo
argentino, campeón del Torneo Preolímpico de
Sudamérica de Colombia. Mientras tanto, a inicios de la
última década del siglo XX, el fútbol
infantil clasificó a los Mundiales de Italia, pero esta
selección no pudo reeditar buenas actuaciones en las
eliminatorias mundialistas de juveniles y mayores, algo que no
sucedió con los chicos de la famosa Academia Tahuichi de
Aguilera de Santa Cruz de la Sierra, la principal plataforma para
la clasificación de Bolivia a los Mundiales
USA-94.
Algunos especialistas consideran que el
régimen castrista no puede elevar el tono competitivo de
su fútbol por vivir bajo la sombra del béisbol, el
deporte nacional en la Zona de la Cuenca del Caribe. Sin embargo,
esta teoría
no es muy sólida: Desde la última década del
Segundo Milenio, el fútbol venezolano ha logrado
importantes victorias en los principales torneos sudamericanos,
especialmente en las categorías juveniles y
olímpicas. Jamaica también es otro ejemplo que
rompe el mito sobre el
fútbol criollo.Lo mismo podríamos decir del
balompié de Corea del sur, un país con alta
tradición en la disciplina
deportiva del taekwondo. Es
importante señalar que el fútbol surcoreano ha
representado al continente asiático en los Mundiales de
Mayores de México-86, Roma-90, USA-94 y
Francia-98, además de clasificar a los torneos universales
juveniles de 1979, 1981,1991, 1993 y otros.
5.EL INCIERTO
FUTURO DEL VOLEIBOL
A pesar de la medalla de bronce conquistada en
Atenas-2004, el voleibol femenil no atraviesa por su mejor
momento desde mediados de los años setenta. En los Juegos
Panamericanos de la República Dominicana, el sexteto
antillano, liderado por la atacante Yumilka Ruíz, no pudo
lograr la medalla de oro después de caer 3×2 frente a las
anfitrionas. Ciertamente, era la segunda vez que las cubanas
regresaban a casa con el segundo puesto. En 1999 perdieron el
título frente a las brasileñas, pese a contar con
el aporte de Mireya Luis, Lily Izquierdo, Taimaris Agüero,
Regla Bell Mckenzie y Ana Ibis Fernández.
Lejos estaban aquellos tiempos en que el voleibol
femenino de la Isla derrotaba con claridad a sus oponentes. Entre
1989 y 1993, el sexteto antillano gano todos los primeros puestos
de la Copa Super-Desafio de Hong Kong. Con anterioridad, en los
Juegos Panamericanos de Caracas, el equipo nacional, quinto en el
mundo, logró escalar hacia la presea dorada al derrotar a
Perú, subcampeón mundial; Estados Unidos, medalla
de bronce en el Mundial de Lima; y Brasil, medalla de oro en los
Juegos Mundiales Universitarios de Edmonton-83.
Ahora bien, en el transcurso de los años
del Tercer milenio, el sexteto nacional empezó a perder
varios partidos oficiales con Italia, Brasil, Estados Unidos,
Rusia y la República Popular de China. Los problemas en
el voleibol cubano tocaron fondo cuando varias jugadoras cubanas
partieron al extranjero: Regla Bell McKenzie y Magali Carvajal.
También cuando se presento la lesión de por vida de
Regla Torres, una muchacha que tuvo que retirarse después
de las Olimpiadas de Sydney 2000. Seleccionada como la mejor
jugadora del siglo XX por los especialistas de la
Federación Internacional de Voleibol, ella es un fiel
reflejo del servicio
deportivo obligatoria a que son sometidos los jóvenes en
la Isla de Fidel Castro.
Con el aumento dramático de las deserciones
al cierre del Segundo Milenio, el voleibol femenino cubano
perdió a una de sus principales estrellas: Taimaris
Agüero. Considerada la mejor pasadora o levantadora en la
historia del voleibol antillano, la dictadura castrista cifraba
sus esperanzas en Agüero para conquistar su cuarta medalla
de oro consecutiva en el año 2004, pero los planes del
Comité Olímpico Nacional se frustraron cuando la
levantadora oficial decidió desertar durante una gira por
tierras europeas.En los Sextos campeonatos Mundiales de Voleibol
Juvenil de Sao Paulo (1993), ella fue considerada la jugadora
más completa del certamen, arrasando con tres premios
especiales, incluyendo el galardón de mejor
pasadora.
En tanto, el voleibol masculino igualmente ha
descendido de nivel internacional, casi al mismo nivel de los
años sesenta, especialmente por la deserción de
diez jugadores desde el año 2001, incluyendo a Ihosvany
Hernández, el mejor atacante en la historia del voleibol
masculino criollo.
Después de ganar las preseas de oro en los
Juegos Centroamericanos y del Caribe de Puerto rico (1966) y
Panamá (1970), en 1971 el sexteto masculino
sorprendió a todos al derrotar al equipo brasileño
en la final por la medalla de oro de los Sextos Juegos
Panamericanos de Colombia, cita clasificatoria a Munich-72.
Después de las Olimpiadas de Alemania Federal, la Isla
clasificó a Montreal-76, Moscú-80, Barcelona-92,
Atlanta-96 y Sydney-2000, además de Los Angeles-84 y
Seúl-88, aunque no participo por el boicot
soviético y norcoreano. Posteriormente,en Atenas-2004,
Cuba no pudo participar por perder la clasificación
preolímpica de la zona de la Norceca y el Internacional.
Con anterioridad, en los Mundiales de Buenos
Aires-2002, más de 18 selecciones consiguieron mejores
resultados que el sexteto caribeño.
En los Juegos Panamericanos de Santo Domingo, en
un torneo en el cual varios países enviaron equipos
suplentes, la Isla se llevó el disco de plata tras perder
la final frente a Venezuela, un equipo sin mayor tradición
en el concierto el voleibol de las Americas.En la actualidad, las
autoridades castristas otorgan un especial apoyo al voleibol
masculino en respuesta a la grave ola de deserciones. Sin
embargo, será muy difícil que la Isla logre una
medalla olímpica, pues entre 1972-2000 sólo obtuvo
la medalla de bronce en los Juegos Olímpicos de Montreal,
una época en la cual no existían mayores
competidores que los liderados por las extintas naciones del
Mundo Soviético.
6.LA NATACIÓN Y
WATERPOLO: SÓLO LIMITACIONES
Desde principios de los
años setenta, las autoridades olímpicas castristas
criticaron duramente el envió de nadadores
latinoamericanos a los Estados Unidos, pero jamás lanzaron
autocríticas sobre el fracaso de la ayuda germanoriental
para elevar el tono internacional de la natación
antillana. Ciertamente, entre 1960-1995 la natación cubana
mantuvo un discreto nivel en las competencias latinoamericanas. A
pesar de la asesoría de técnicos de la famosa
escuela de piscinas de la República Democrática de
Alemania (RDA), potencia indiscutible en los Mundiales de
Alemania Federal, Ecuador y
España, Cuba nunca pudo fabricar a un espaldista de la
talla del puertorriqueño Carlos Berrocal, cuarto en la
final de los 100 metros libres de Montreal-76, y mucho menos a
una nadadora como la costarricense María Milagro
París.
En los setenta, la natación latinoamericana
estuvo liderada por Perú, Ecuador, Brasil, Colombia,
México y Puerto Rico. En los Juegos Olímpicos de
Munich-72, los nadadores Jorge Delgado Panchana (Ecuador) y Juan
Carlos "Johnny" Bello (Perú) se ubicaron entre los
finalistas. En la siguiente década, sobresalieron
nadadores de Venezuela, Uruguay y Costa Rica. De hecho, la
natación cubana estaba ausente en los Juegos
Olímpicos, Copas del Mundo, además de los Juegos
Panamericanos y la Copa Latina de Natación.
Posteriormente,muchos pensaban que las primeras medallas
olímpicas de Rodolfo Falcón Cabrera y Neisser Bent
eran el punto de partida en un nuevo capítulo del deporte
cubano, tal como había sucedido con el atletismo (1976) y
la lucha libre (1985), mas se equivocaron. A partir de 1998, en
los campeonatos del circuito olímpico, los nadadores
cubanos desaparecieron de la lista de finalistas, por ejemplo en
los Mundiales de Barcelona-2003 ningún cubano logró
clasificar entre los treinta primeros lugares.
Ya a punto de terminar el Milenio, el waterpolo o
polo acuático masculino es otro de los deportes que ha
bajado de nivel en relación a su pasado. Se piensa que la
falta de experiencia en Europa es la principal razón de un
nivel internacional pobre. Como si fuera poco desde 1993 las
consecutivas deserciones de polistas criollos han dañado
seriamente la participación de la Isla en las competencias
mundiales.Por primera vez desde mediados de los años
sesenta, Cuba no pudo participar en las competencias de los
Juegos Panamericanos de santo domingo (2003), las competencias
preolímpicas y los Mundiales de Barcelona. En tanto,
participó en los Mundiales de Montreal-2005, pero con una
actuación desastrosa: Serbia-Montenegro dio una paliza a
Cuba (21×1), la peor humillación en la historia del
deporte castrista; igualmente perdió con los Estados
Unidos (13×6). Todo parece indicar que no se repetirán los
éxitos del waterpolo cubano de los años setenta,
década en la cual el equipo nacional dirigido por un
entrenador húngaro logró ocupar el cuarto puesto en
los Mundiales e Colombia.
1-Barros, Sigfredo. "Recibió Fidel a los Atletas
de Pesas y Boxeo", Granma, La Habana,22 de octubre de
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2-Camacho,Rene-Molina,Gabriel. "Inauguro Fidel la
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de la Provincia Oriental Santiago de Cuba", Granma, La Habana, 18
de septiembre de 1977
3-Gamarra Zorrilla, José. Bolivia
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Papiro, La Paz, 1989
4-García Albela, Pedro. "La Serenidad del
Vencedor", Cuba Internacional, La Habana, enero de
1993
5-García, Anne-Marie. "Regla Torres y
Eugenio George, los Mejores del Siglo", Granma Internacional, La
Habana, 17 de diciembre 2000
6-Guevara Onofre, Alejandro. "Dictadura y Deporte:
El Régimen de Fidel Castro" en www.monografias.com
7——————–"Perfiles del Régimen
de Fidel Castro" en www.monografias.com
8———————"La Olimpiada Barcelonesa",
Diario El Comercio,
Lima, 26 de julio de 1992
9-Hernández, Miguel-Lahera, Rolando. "Habla
el Bicampeón Alberto Juantorena", Granma, La Habana, 18 de
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10-Jiménez Almira, Marta. "En la
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Mártires de Barbados", Granma, 10 de octubre de
1977
11-Ortega, Joaquín. "Eloy Martínez
Habla de Fútbol", Juventud
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12-Park, Seh-jik. The Stories of Seoul
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13-Quesada Campos, Eliseo. "Tres Extrañas
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San José, 20 de julio de 1996
14-Ruck, Rob. "La Flor y Nata del Atletismo
Hemisférico", Americas, Washington DC, julio-agosto de
1987
15-Salmerón, José Luis. "El XXI
Torneo Internacional de Boxeo Giraldo Córdova
Cardín", El Deporte:Derecho del Pueblo, La Habana, octubre
de 1988
16-Sankar, Celia. "Los Reaggae Boyz", Americas,
Washington DC, junio de 1998
PERFIL DEL AUTOR:
Alejandro Guevara Onofre
Lima – Perú
El limeño Alejandro es un apasionado escritor
sobre diversos temas internacionales (sistemas
políticos, igualdad de
genero,
terrorismo,
deporte y relaciones
internacionales).
Posee estudios en Ciencias
Políticas, Periodismo y
Relaciones Internacionales. En la actualidad trabaja en la
elaboración de dos libros sobre
la Dictadura Castrista.
En la última década del Segundo Milenio,
fue uno de los principales líderes juveniles del Foro Universitario sobre Naciones Unidas.
En 1998 se convirtió en el primer latinoamericano en
publicar en forma integral una enciclopedia sobre datos
mundiales.
Experto en asuntos del deporte cubano de la época
de la Dictadura Castrista, Alejandro es autor de los siguientes
ensayos
deportivos: Historia del Voleibol de Cuba/ Historia del Deporte
de la Revolución
de Fiel Castro/ Cuba en Atenas-2004/ El deporte Cubano/ El
Deporte Cubano antes de la Revolución/Cuba y las
Olimpiadas/ Alberto Juantorena: Una Biografía Castrista/
Historia del Atletismo Cubano/ Historia del Waterpolo de la Isla/
Historia del Baloncesto Masculino de Cuba/ Cuba y los Juegos
Panamericanos / El Boicot Castrista a los Juegos Olímpicos
de Seúl-88 / El Boicot Soviético a los Juegos
Olímpicos de Los Ángeles-84.