Responsabilidad ética del Contador Público. Estudio de casos realizado en la ciudad de Cali
- Planteamiento del
tema - Objetivos
- Justificación
- Marco
referencial - Marco
teórico - Análisis
de la muestra efectiva y resultados de la
encuesta - Visión
general de los resultados obtenidos - Conclusiones
- Recomendaciones
- Bibliografía
- Anexos
Resumen del trabajo
Este trabajo es un
estudio descriptivo estructurado a partir de una encuesta que
pretende evaluar la forma en que se ven a si mismos los
contadores públicos de la ciudad de Cali en los asuntos
referentes a la ética
profesional.
Inicialmente se procedió a realizar un
revisión bibliográfica sobre los conceptos
existentes sobre la ética y relacionados,
específicamente, con la ética de la empresa y la
ética del contador público; los datos obtenidos
se usaron para construir el marco de referencia. Esto constituye
la primera fase del proyecto.
En la segunda fase, se estructuró la encuesta y
se procedió a llevarla a campo. Se escogieron
aleatoriamente una muestra de
Contadores Públicos de la ciudad de Cali, tomando los
datos de avisos clasificados, directorio telefónico y
referidos. Se aplicó una encuesta de 49 preguntas la cual
fue entregada personalmente para ser diligenciada en un tiempo no
mayor a 60 minutos; cuando la encuesta no pudo ser respondida
inmediatamente se dejó y se regresó por ella
después de confirmar vía telefónica si ya
había sido respondida. Los resultados fueron analizados en
forma descriptiva.
En la tercera fase, se procedió a hacer la
tabulación y análisis de la encuesta; los datos
obtenidos fueron reportados en gráficos y tablas.
La situación crítica
que se vive en la actualidad, no sólo en el país
sino mundialmente y en todos los niveles, nos ha puesto a pensar
en la necesidad de realizar cambios fuertes que remuevan,
incluso, los cimientos de la sociedad y
transformen totalmente las formas de vivir, pensar, sentir y
actuar; se sabe que se requiere perfeccionar al ser humano para
lograr sistemas
organizativos que permitan obtener el sueño de vivir en
una sociedad equitativa y justa donde se pueda convivir en paz y
armonía. En todos los ámbitos se habla del actuar
ético pues se reconoce la necesidad imperiosa de acabar
con la corrupción
a todo nivel.
Este proyecto se concentrará en un sistema de
organización muy importante en el mundo
moderno a partir del cual se pueden efectuar esos cambios: La
Empresa, y se
empezará por analizarla, como se dijo anteriormente, desde
sus cimientos, aplicando el filtro de la ética, pero no la
ética vista desde la perspectiva del juicio de valor sino
más bien esa ética que hace calificar el comportamiento
humano y permite saber si un acto está bien o no, se
hace con buena intención o no o si simplemente se trata de
obtener un egoísta deseo dañando a otros y sin
calcular las consecuencias y responsabilidades que se derivan de
él.
Este escrito será dividido en siete
capítulos, el primero de ellos será dedicado a
revisar los conceptos y términos éticos que se
requieren para hacer un buen análisis; el segundo
ayudará a ligar los conceptos de ética con la
empresa; el tercero ligará la ética con el
profesional de la Contaduría y que constituye el centro
definitivo de nuestro estudio; aquí se dará un
concepto sobre
lo que se espera de él para tener bases para evaluarlo; de
ahí en adelante, se dará el análisis de las
encuestas con
que será evaluado y los resultados que se obtuvieron para
finalmente realizar los aportes en conclusiones y sugerencias que
se espera sean altamente útiles a la
profesión.
Ante los rumores de falta de credibilidad de las
contabilidades a nivel empresarial y la cantidad de fraudes
descubiertos recientemente en múltiples empresas, se ha
puesto en entrejuicio la calidad
ética de los profesionales de la Contaduría
Pública.
Con este proyecto se desea obtener un acercamiento de la
percepción que tienen los contadores
públicos de la ciudad de Cali en este aspecto sobre
cómo se ven a sí mismos en la realización de
su labor profesional y tratar de despejar dudas al respecto,
aquellas que afectan a tantos contadores que son excelentes en su
trabajo y cumplen bien con su labor. Se espera brindar alguna
luz que
permita establecer cuál es la percepción sobre los
principios
éticos propios a la profesión contable en el
estudio que se realice.
2.1 GENERALES
·
Determinar cómo se perciben así mismos los
Contadores Públicos de la Ciudad de Cali en su desempeño ético
profesional.
2.2 ESPECIFICOS
· Evaluar
el
conocimiento y aplicación de los principios
éticos existentes y conocidos para el profesional de la
Contaduría Pública.
· Evaluar
la percepción de los contadores públicos de la
ciudad de Cali en cuanto a los principios éticos
expresados en la ley 43 de 1990
mediante la aplicación de una encuesta a una muestra
aleatoria de Contadores Públicos de la Ciudad de
Cali.
- Analizar cómo enfrenta el dilema ético
una muestra de Contadores Públicos de la ciudad de Cali
en su actuar profesional. - Describir las actitudes y
percepciones del Contador Público de la Ciudad de Cali
sobre el actuar ético en su quehacer
profesional.
"Las empresas del mundo entero se ven abocadas a tomar
decisiones que implican consecuencias sociales y requieren tener
en cuenta la ética en el ámbito de los negocios. La
mayoría de veces las decisiones presentan disyuntivas
morales sutiles y generan dilemas éticos difíciles
de enfrentar".
Por tal razón, en el medio empresarial es
importante conocer cuáles son los valores
éticos que la empresa debe sostener, cuáles son los
que se reflejan en acciones
concretas y a través de qué forma específica
se llegan a ellos.
En Colombia deben
generarse estudios científicos y metódicos de la
ética de los negocios dada la existencia de fuerzas que
manifiestan preocupación por los aspectos éticos en
el mundo de los negocios. Las últimas décadas han
ocurrido cambios económicos sustanciales que han afectado
grandemente la sociedad colombiana y han demostrado que la
empresa y las organizaciones en
general pueden influir en su entorno social. Las tendencias
actuales muestran la preocupación de personas y grupos de
interés
porque se realicen cambios transcendentales en las organizaciones
que les permitan convertirse en sistemas de alta permanencia o de
largo plazo. Los avances en la tecnología y en los
sistemas de
información unidos a las presiones personales de logro
de éxito
rápido y fácil, crean cada día dilemas
éticos en el campo económico pues esto crea
empresas temporales sin trascendencia. "Se viene tejiendo la idea
de la necesidad de obtener empresas de larga duración y
efectos supratemporales que permitan la permanencia en una
sociedad democrática basada en intercambios libres que a
su vez requieren de personas y organizaciones que incorporen en
sus principios habituales de justicia,
lealtad y valor".
Un componente organizacional importante en la toma de
decisiones lo constituye el Contador Público pues su
profesión dignamente llevada y bien representada
constituye una garantía del manejo ético y
óptimo en los negocios; la transparencia de la empresa
debe ser reflejada en los estados
financieros y contables, en los informes
fiscales y en el manejo de los dineros; por tal razón, y
por todo lo anterior, es interesante investigar si los Contadores
Públicos que realizan su actividad profesional en empresas
privadas de la Ciudad de Cali, tienen en cuenta el tema
ético en su desempeño; inclusive, examinar su
conocimiento
en este tema y obtener una auto evaluación
sobre su percepción en este campo.
A partir de los resultados obtenidos en este
pequeño estudio se espera generar temas de controversia
que den inicio a investigaciones
futuras para seguir explorando temáticas similares que
posibiliten acercar al Contador Público a la realidad
social que sus decisiones acertadas y aplicadas con
férreos principios éticos, le permitan
influenciar.
Es necesario que el Contador reconozca que su actuar
responsable y ético puede afectar grande y
benéficamente a la sociedad y de esta forma puede
contribuir efectivamente en la toma de decisiones a las que
actualmente no les presta atención por estar inmersos en el
maremagnum técnico de cuentas y
movimientos.
4.1 Panorama general sobre la
ética
Se iniciará con una breve descripción de la problemática que
implica realizar un estudio de la ética. Por
definición enciclopédica, la Ética se
considera una disciplina
filosófica que estudia la moral del
hombre en
sociedad, es la fundamentación de una actitud
moral y
desemboca en una forma de vida; desde que el hombre se
agrupó en sociedades
tuvo la necesidad de desarrollar una serie de reglas que le
permitieran regular su conducta frente a
los otros miembros de la comunidad
así que la moral es una constante de la vida humana pues
se considera que los hombres no pueden vivir sin normas ni
valores. En
sus meditaciones, la ética investiga qué es una
conducta buena y qué condiciones deben cumplir las
instituciones
humanas para moralizar al individuo. En
la filosofía, constituye una ciencia
material y práctica; se ocupa en forma directa del hombre
y por eso se considera una disciplina fundamental en la
filosofía.
Por definición etimológica, se le
considera el tratado de los hábitos y las costumbres y
esto mismo considera Aristóteles en sus obras, como actos que el
hombre conquista con la experiencia, lo ético comprende
ante todo, las disposiciones del hombre en la vida y,
naturalmente, también lo moral (Xavier Zubiri).
Por definición de su objeto de estudio, se
considera como la disciplina filosófica que estudia el
comportamiento
del hombre en sociedad, es decir, no tendría sentido si el
hombre estuviera aislado o desvinculado del medio social; es una
ciencia cuyo objeto de estudio es la moral así como la
ética profesional se refiere a un código
moral que debe observar un profesional.
La ética no se reduce a una prédica moral
y no se propone prescribir la conducta o crear reglas morales;
sin embargo, se caracteriza como una disciplina práctica.
La moral está constituida por una serie de normas,
costumbres y formas de vida que se presentan como obligatorias,
valiosas y orientadoras de la actividad humana.
Por el sólo hecho de estudiar y reflexionar sobre
estas se dice que la ética es una ciencia normativa; es
una ciencia práctica porque tiene por objeto la conducta humana;
es la ciencia del
orden moral de la vida individual y social del hombre; sin
embargo, la ética no se propone expresamente dirigir la
vida humana sino explicar la moral; es normativa en razón
de su objeto de estudio pero no se propone dar una lista de
deberes y no deberes aunque de alguna manera, los principios
éticos establecidos por las teorías
morales determinan el comportamiento de los
individuos.
Algunos autores determinan niveles para la
ética:
- ETICA CRITICA o Ética teórica, que se
encarga de determinar cuáles creencias morales son
válidas; se le denomina metaética pues consiste
en el análisis lógico y epistemológico de
los principios éticos. - ETICA APLICADA o ética normativa, su tema
consiste en guiar la conducta para decidir cuál es la
mejor opción entre las posibles de realizar ante una
situación concreta. El normativismo ético o
ética normativa, es una tendencia a sobrestimar el
carácter práctico de la
ética en detrimento de su naturaleza
teórica. Pretende formular reglas de conducta, dar
normas a las que se deberían ajustar nuestros actos. No
está de acuerdo con la moral aplicada pero sostiene que
su función
no es suministrar reglas y normas de conducta que han de
seguirse pues esto le llevaría a confundirse con su
objeto de estudio y de esta forma jamás seria ciencia ya
que los deberes y derechos que prescribe
sólo son expresiones de un determinado momento
histórico.
Con esto se concluye que, ante todo, la ética es
teórica porque su papel consiste en explicar
categorías relativas a la experiencia moral. Sin embargo,
como toda creencia posee objetividad, racionalidad,
sistematicidad y metodicidad.
El método de
la ética no está determinado por un criterio
ecuánime; cada corriente y cada pensador ha propuesto su
propia metodología: El de Aristóteles era
inductivo así como la ética que él
proponía era empírica. El de Spinoza era deductivo.
Los métodos
conocidos como filosóficos son el de Hursel que se
denomina fenomenológico, el de Kant que se
denomina crítico trascendental y el de Marx y Engels que
se denomina dialéctico.
Es necesario tener en cuenta que la ética se
relaciona con otras ciencias pues
puede fundamentarlas; por ejemplo, con la economía, a
través de la historia, se ha mostrado que
los principios morales son establecidos desde la postura de la
clase
económica dominante.
La moral en sí posee normas, su propósito
es el de regular la conducta del hombre en sociedad y debe ser
realizada de forma consciente y libre; tiene dos
aspectos:
- PLANO NORMATIVO: conjunto de normas o imperativos que
existen para ser realizados y se que consideran valiosos y
debidos, independientemente de que se realicen o
no. - PLANO FÁCTICO: la moral existe para ser
realizada; origina lo que se conoce como moralidad
que comprende los actos realizados conforme a la moral
imperante; es la moral hecha realidad, es la manera cotidiana
en que se viven las normas, es decir, la serie de actos
efectivos tal como se realizan cotidianamente.
Para comprender un poco más estas definiciones,
se deben hacer las siguientes comparaciones:
- NORMAL MORAL Y LEY NATURAL: la ley natural es
impersonal y se aplica a todos sin excepción; no tiene
juicio de valor y no requiere ser verificada. A su vez, la
norma moral se basa en la libertad de
cumplirla o violarla; trata de provocar un comportamiento que
se considera adecuado o valioso; la validez de la norma moral
no requiere ser observada para que exista. - NORMA MORAL Y REGLAS TECNICAS: Las reglas técnicas
con recetas a seguir y deben ser cumplidas estrictamente si se
quiere que funcionen. - NORMA MORAL Y NORMAS
JURIDICAS: Las normas jurídicas son coercitivas
mientras las morales no; la violación de las normas
jurídicas traen como consecuencia el castigo penal
mientras que la de la moral sólo trae remordimientos y
complejo de culpa pues las normas morales regulan el
comportamiento interno del sujeto y son autónomas; las
normas jurídicas regulan el comportamiento externo del
sujeto y son heterónomas. - NORMAS MORALES Y SOCIALES: la obligación de
las normas sociales no es coercitiva y es inherente al derecho:
implican la reprobación social y cambian de una sociedad
a otra e incluso, pueden desaparecer
rápidamente. - NORMAS MORALES Y RELIGIOSAS: las normas religiosas
son heterónomas; el sujeto no actúa libremente
sino por imposición; se expresan como objeto de una
revelación y su castigo es divino.
Los filósofos están de acuerdo en que
los valores existen pero difieren en cuanto al modo de
existir:
- CORRIENTE SUBJETIVISTA DE LOS VALORES: afirman que
los valores son el resultado de las reacciones individuales y
colectivas; hace referencia al sujeto; consideran que los
valores no existen en sí y por sí mismos, sino
que son meras creaciones de la mente (B. Russell) - CORRIENTE OBJETIVISTA DE LOS VALORES: sostiene que
los valores dependen del objeto y no del sujeto; lo
único que hace el sujeto es captar el valor. Considera
los valores como supratemporales, extraterritoriales y
extrahistóricos.
Max Scheler afirma que existe una jerarquía de
valores que van desde:
- Valores de lo agradable y lo desagradable y se basa
en estados afectivos de placer y dolor. - Valores vitales, que se califican como estar sano o
no, tener bienestar o no. - Valores espirituales, que pueden ser
estéticos, jurídicos o del saber
puro. - Valores religiosos, que dependen a la iglesia a la
que correspondan.
Cuando los valores elevados no se realizan o se
postergan, cuando no existe una conciencia de
dignidad
humana, surge la denominada "crisis de
valores". Ese es el problema de comercializar y cuantificar el
valor, dar los medios como
fin y deshumanizar al ser humano. La crisis de valores plantea el
problema de promover cambios y alternativas para un mejor
desarrollo
moral, verdaderamente humano, de hombres y mujeres de
ética; el reflexionar sobre estos problemas nos
lleva a cobrar conciencia y a propugnar por un mundo
mejor.
"La valoración moral es el hecho de atribuir un
valor a una acción
humana determinada; es una reacción ante un hecho o
acontecimiento; sus elementos son todos concretos,
históricos y temporales. Los valores y estimaciones
varían con el individuo, con la familia,
con la sociedad, con la nación,
con la época".
Toda norma moral establece obligaciones:
- Ética heterónoma: la fuerza
obligatoria deriva de normas impuestas por una autoridad
exterior. Esta puede ser dictada por la sociedad, la costumbre,
la fuerza del estado o la
obligación religiosa. - Ética autónoma: afirma que la voluntad
se determina a sí misma, la conducta se rige por una
libre y propia decisión del agente moral. Según
Kant, la autonomía de la voluntad es el principio
supremo de la moral. Un comportamiento autónomo es aquel
que se rige a sí mismo con arreglo a una ley universal o
imperativo categórico. La autonomía no implica
solamente obrar en concordancia con la buena voluntad, requiere
de un trasfondo de libertad que le permita al hombre elegir
tanto un buen comportamiento como uno malo.
Para decidir qué es lo obligatorio, hay tres
corrientes:
- Teorías deontológicas: Afirman que la
bondad o maldad de una acción no depende de las
consecuencias sino de una primacía del concepto de
deber. Se divide a su vez en: - Teorías deontológicas de la norma,
sostiene que lo que se debe hacer depende de una norma
objetiva. Kant es representante de esta tendencia. Se basa
en el principio de la voluntad, en los motivos y no en el
resultado de la acción; su teoría del deber también se le
ha llamado teoría motivista. - Teorías deontológicas del acto,
sostienen que debido a lo concreto
de cada situación, no puede hablarse de normas
generales por lo cual es necesario decidir por propia
cuenta, ateniéndose a los sentimientos y
convicciones, cómo debe obrar en cada caso. Un
representante es Sartre
(existencialismo) quien sostiene que ninguna
moral general puede indicar lo que hay que
hacer.
- Teorías deontológicas de la norma,
- Teorías teleológicas: dicen que la
bondad o maldad de una acción depende únicamente
del efecto o consecuencia que este tenga, de ahí que
también se les llame teoría consecuencial. El
utilitarismo pertenece a esta teoría (el deber estriba
en hacer aquello que beneficie al mayor número de
personas posibles) así como el egoísmo (se busca
la propia ventaja haciendo aquello que uno cree que
proporcionará el mayor bien posible, la
satisfacción del ego es el único objetivo
final de toda actividad).
El acto moral es un proceso
mediante el cual un sujeto moral realiza un comportamiento
susceptible de ser valorado bajo un sentido moral. Se requiere
que el sujeto posea libertad y conciencia. Según Dewey los
requisitos son:
– Saber qué se hace
– Escoger ese acto y hacerlo por él
mismo
– Debe ser la expresión de un carácter
formado y estable
En el acto voluntario se da la manifestación de
una elección como tendencia y disposición general
de la
personalidad. Dewey sostiene que las personas hacen actos
rutinarios que en conjunto tienen claras consecuencias morales,
si alguien los pasa por alto sería una persona indigna
de confianza. La vida moral es estimulada por ciertas necesidades
de la existencia individual y social; en ello intervienen
sentimientos, ideales, motivos, valoraciones, elecciones,
elementos que dan sentido al acto moral.
El acto moral tiene una estructura a
saber:
– Sujeto moral, individuo dotado de conciencia moral,
ser concreto en determinada circunstancia histórica y
social (sujeto real).
– Motivos o intenciones
– Conciencia del fin que persiguen,
anticipación ideal del resultado que se pretende
alcanzar. El sujeto moral tiene capacidad de sopesar los
alcances, las consecuencias, las secuelas que pueda traer
consigo su acto moral y de esa manera prever con
anticipación situaciones indeseables y de esta forma
orientarlo hacia un sentido más positivo.
– Decisión, otorga al acto moral su
carácter autónomo y voluntario. Es la capacidad
del sujeto para actuar por sí mismo en concordancia con
lo que cree que es la mejor elección o
alternativa.
– Elección, descansa en la libertad del sujeto
para optar entre varias decisiones y decidirse por
una.
– Medios, deben ser tan morales como los
fines.
– Resultado, realización del fin
perseguido.
– Circunstancias, situaciones que rodean el acto
moral. En el acto moral concurren una serie de elementos o
momentos; todos ellos deben ser cumplidos de manera positiva
para que nuestro comportamiento sea moralmente bueno en forma
plena.
- Responsabilidad moral, capacidad y obligación
moral que tiene el sujeto de responder plenamente a los actos
realizados, siempre y cuando estos sean libres y conscientes.
Está muy ligada a la conciencia moral y en virtud de
ella somos capaces de dictaminar acerca del valor moral de una
acción.
Una condición sinenquanon de la ética para
que sea posible es la existencia de la libertad, así que
es necesario considerar:
- Determinismo, parte del principio de que todos los
acontecimientos causados tienen un antecedente. Considera que
los mundos natural y humano están regidos por el
principio de causalidad (causa – efecto). Demócrito,
Laplace y
Skinner, son
representantes de esta tendencia. Si se acepta en la
ética entonces la responsabilidad moral, la libertad y el control de
los actos no son posibles. No hay culpa ni mérito alguno
en el individuo que no puede dejar de hacer lo que
hace. - Determinismo psicológico, la base de todas las
acciones aún de aquellos más aparentemente
voluntarias, se funde y forja en el inconsciente. - Telurismo, no puede hablarse de libertad ya que el
comportamiento humano encuentra su explicación en el
medio que los rodea. - Indeterminismo o libertarismo en ética, no hay
nada necesario, el hombre puede actuar en forma distinta de
cómo lo hace incluso en contra de su propio
carácter y convicciones. Habla del azar; el hombre
actúa sin control, por impulsos incontenibles que no
sabe de donde provienen. - Fatalismo, afirma que el hombre no es libre y su
comportamiento, está escrito en un destino. Ve al hombre
como un ser desamparado que sólo puede esperar
qué ocurre. El estoicismo representa esta corriente,
sostiene que el hombre, como parte del mundo, tiene que cumplir
con su destino y su sabiduría está en tomar
conciencia de él y cumplirlo.
Con la relación de libertad y determinismo se
entiende que la actividad libre es aquella que no está
impedida ni forzada. La causa puede existir y los hechos obedecer
a ella pero la libertad debe considerarse dentro de esa
determinación. Se puede pensar que los actos están
determinados pero causalmente y son libres al propio
tiempo.
Esto implica que se requiera conciliar entre necesidad y
libertad. La libertad no consiste en independizarse de las
leyes
naturales sino en el reconocimiento de esas leyes y en la
posibilidad de hacerlas obrar según un plan para
determinados fines. El paso de la necesidad a la libertad se
realiza cuando el hombre se hace consciente y dueño de la
naturaleza.
La libertad consiste en el control sobre nosotros mismos
y sobre la naturaleza exterior que se funda en el conocimiento de
la necesidad natural; es por consiguiente, necesariamente un
producto del
desarrollo histórico.
"La importancia para la ética de la
cuestión de la libertad de la voluntad es un tema con
diversidad de opiniones. Los partidarios del determinismo tienen
razones muy favorables como que a menos que sea posible prever
siquiera parcialmente el resultado de las acciones es imposible
saber qué camino se debe emprender en determinadas
circunstancias y que si no es posible predecir en cierto grado
las acciones de las demás personas, la previsión
requerida por la acción racional se convierte en
imposible".
"El concepto de libertad es un concepto puro de la
razón que es trascendente para la filosofía
teórica pero para el que no puede ofrecerse ningún
ejemplo adecuado a cualquier experiencia posible; puede servir
como un principio regulativo meramente negativo y para uso
práctico de la razón prueba su realidad mediante
unos principios prácticos que demuestran como ley es una
causalidad de la razón pura para determinar el arbitrio
con independencia
de todos los condicionamientos empíricos (de lo sensible a
lo general), y que demuestran en nosotros la voluntad pura, en la
que tienen su origen los conceptos y leyes morales. En el
concepto de libertad positivo (en sentido práctico) se
fundamentan leyes prácticas incondicionadas, que se
denominan morales; estas leyes, para nosotros que tenemos un
arbitrio afectado sensiblemente y, por tanto, no se adecua por
sí mismo a la voluntad pura, sino que la contradice a
menudo, son imperativos (mandatos o prohibiciones) y ciertamente
categóricos (incondicionados), en lo cual se distinguen de
los técnicos (de las prescripciones del arte), que
sólo mandan de modo condicionado; según estas
leyes, determinadas acciones están permitidas o no
permitidas, es decir son moralmente posibles o imposibles; pero
algunas de ellas, o bien sus contrarias, son moralmente
necesarias, es decir, obligatorias, y de ahí surge para
ellas el concepto de un deber, cuyo cumplimiento o
trasgresión está unido sin duda a un placer o
desagrado de un tipo especial (el de un sentimiento moral), que
sin embargo, no se puede tener en cuenta en modo alguno en las
leyes prácticas de la razón [porque no afecta al
fundamento de las leyes prácticas, sino sólo el
efecto subjetivo en el ánimo, al ser determinado nuestro
arbitrio por aquellas, y pueden diferir según los
distintos sujetos (sin añadir o quitar a éstas algo
de su validez o influjo objetivamente, es decir, en el juicio de
la razón)".
Entre los problemas de origen moral aparecen:
– La naturaleza, o sea el instinto
– Lo social, de la sociedad
– Optimismo ético, el hombre es bueno por
naturaleza (Santo Tomás
de Aquino, Leibnitz,
Rosseau)
– El pesimismo, el hombre es malo por naturaleza
(Shopenhauer)
– El meliorismo, afirma que el hombre no es
absolutamente ni bueno ni malo, es como una hoja en blanco cuyo
espíritu puede ser modificado para bien o para mal
(Kant)
El problema de la realización moral es que no
basta conocer los valores
morales; es necesario realizarlos, asimilarlos para ponerlos
en práctica. La moral después de ser comprendida,
estudiada y analizada, se convierte en moralidad y se observa
en:
- Los medios con que cuenta el individuo para llevar a
efecto la moralización son los bienes
morales o agentes moralizadores y son: el Estado,
la familia, la
escuela, la
iglesia, las instituciones sociales y económicas. La
familia es el primer núcleo de moralización del
individuo; el estado es el derecho, la suma de imperativos
sociales que ordenan coercitivamente, conjunto de
prescripciones de incondicionada obligatoriedad. Es necesario
para regular los derechos y obligaciones de los
ciudadanos. - La realización moral está en lo que se
puede observar en nuestro medio; la moralización del
ambiente se
ve en las virtudes morales, la teoría ética debe
servir de apoyo para la planeación y realización de una
vida moral pletórica de valores éticos. Son
actitudes que implican o encarnan los valores, lo bueno por
excelencia. Se puede confundir virtudes con valores
éticos. Se consideran cuatro dimensiones
axiológicas fundamentales alrededor de los cuales gira
la moralización del hombre y de su ambiente: - Veracidad, Es una actitud práctica donde
se dan la honestidad y la fidelidad a la verdad; de
ella se derivan valores como la sinceridad, la voluntad de
verdad, el entusiasmo, la autenticidad y la
honradez. - Valentía, se caracteriza por actos de
arrojo, valor y audacia; acción consciente ante el
peligro; de él se derivan valores como la lealtad,
la verdad y el heroísmo. - Autodominio moral, es el encargado de la
regulación de las necesidades vitales y el dominio de
deseos instintivos; de él se derivan valores como la
honestidad, la templanza, la sobriedad y la
generosidad. - Justicia, se puede ver tres tipos de
justicia: - Justicia distributiva, aquí se da a cada
quien lo que es debido. - Justicia conmutativa, donde se devuelve un bien
recibido por su equivalente. - Justicia igualitaria, la justicia es impersonal y
le corresponde por igual a todos.
- Veracidad, Es una actitud práctica donde
En la justicia se anclan las virtudes cívicas y
se cristalizan todas las virtudes. Los valores derivados son la
imparcialidad, la rectitud, la verdad, la energía y la
templanza. La justicia del bien común puede dividirse en
justicia social y justicia internacional. La justicia
particular puede ser distributiva, si el bien particular se
reconoce como parte del bien común y la
pretensión de las personas individuales o de los grupos
de la comunidad es hacer una distribución justa de cargas, ayudas y
privilegios.
La justicia conmutativa obliga a las personas
individuales y jurídicas a dar a cada uno lo suyo de
acuerdo a la medida estricta de la igualdad;
objeto de ella es el derecho a la vida, la libertad, el
honor.
Las virtudes en su dimensión axiológica o
núcleo de valores básicos son susceptibles de
cambios y enriquecimientos de acuerdo a la evolución de los pueblos.
En cuanto a la moral profesional, dentro de los derechos
del hombre deberá figurar el relativo a la libre
elección de profesión, gracias a la cual el
ciudadano tiene la prerrogativa de ejercer sus facultades y
desarrollar su personalidad
colaborando con el beneficio social. La profesión se
define como la actividad aprendida mediante la cual el individuo
trata de solucionar sus necesidades materiales y
las de las personas a su cargo, servir a la sociedad y
perfeccionarse como ser moral; debe ser el fruto de la
vocación y se le debe fidelidad. A esta ética se le
pueden aplicar conocimientos como:
- Deontología, teoría de los deberes
particulares propios de una profesión o situación
(Bentham). La deontología entendida como el estudio de
los deberes y derechos de los profesionales, entraña una
serie de virtudes y actitudes que una parte de la sociedad, los
profesionales, debe efectuar para hacer posible la
moralización de la comunidad. La moral profesional es el
conjunto de facultades y obligaciones que tiene el individuo en
virtud de lo profesional en la sociedad. Su importancia radica
en el alcance social que tiene pues uno de sus fundamentos es
el ser instrumento de servicios
colectivos. Está íntimamente ligado con los fines
de la existencia individual y social. La función social
de un ramo profesional fundamenta intereses y responsabilidades
comunes de todos los que participan en ella. - El concepto de persona, el proceso de
moralización del hombre debe culminar en la
formación de un hombre digno y valioso moralmente
(hombre ético), como ser capaz de responsabilidad en
virtud de su libertad y capacidad de autodeterminación,
el hombre logra así alcanzar la dignidad de
persona.
En la ética cristiana, el hombre debe alcanzar su
perfección, desarrollando en sí mismo la imagen de Dios,
que lleva en su interior a través del intelecto, que le
permite comprender el mundo y elevarse hasta Dios y por medio de
la voluntad que lo hace capaz de dirigirse hacia el bien y lograr
el bien supremo (Santo Tomás de Aquino).
4.2 Definiciones particulares sobre la
ética.
Teniendo en cuenta lo anterior, se requiere en una breve
descripción de los puntos de vista más destacados
en la ética. Es necesario aclarar que existen extensas y
variadas definiciones de ética escritas por
filósofos que acusan diversas tendencias como de escuelas
filosóficas hay. En este apartado se hará un breve
recuento de las definiciones más conocidas.
4.2.1 Ética Aristotélica: "Si
existe un fin de nuestros actos querido por sí mismo, y
los demás por él; y si es verdad también que
no siempre elegimos una cosa en vista de otra -sería tanto
como remontar al infinito, y nuestro anhelo sería vano y
miserable -, es claro que ese fin último será
entonces no sólo el bien, sino el bien soberano. Con
respecto a nuestra vida, el conocimiento de este bien es cosa de
gran momento, y teniéndolo presente, como los arqueros el
blanco, acertaremos mejor donde conviene. Y si así es,
hemos de intentar comprender en general cuál pueda ser, y
la ciencia teórica o práctica de que
depende."
Como dice Aristóteles, la ética se concibe
como el bien en sí. "En el universo todas
las cosas tienden a un fin y a su propia perfección. El
fin del hombre es la felicidad que se alcanza en la belleza y la
contemplación del ser; el bien de todo ser consiste en
alcanzar la perfección que le corresponde y que le es
propia. El hombre es un animal racional que encuentra su
felicidad en el ejercicio de la razón. A medida que el
hombre obra según su razón, alcanza la virtud, que
es un justo medio entre lo mucho y lo poco".
Aunque, en verdad, son muchas las definiciones que se le
pueden asignar a la ética, en los apartes que se
presentan, se analizan y enumeran las virtudes humanas y se
propone una guía para alcanzar la perfecta naturaleza
humana pues considera que la ética tiene como objetivo
principal el bien humano y su acción la virtud. Las
virtudes que se enumeran son:
– Fortaleza y templanza
– Justicia
– Continencia e incontinencia
– Amistad
– Felicidad
Estos extractos pertenecen a una de las obras de
Aristóteles quien escribió dos éticas: La
Ética a Eudemo, con gran influencia del
filósofo Platón;
y La Ética a Nicómaco, la cual es la versión
aristotélica más reconocida y de la que hacen parte
las anteriores secciones. La Ética Aristotélica se
puede definir como la ética de la felicidad y la
ética de la virtud ya que con ella sostiene que la
felicidad solamente es alcanzada por medio de la
excelencia.
Aristóteles revisa diferentes planteamientos y
conceptos en su obra que tienen que ver con la sabiduría,
el placer, la política y las ideas;
define el bien como de varios tipos concluyendo que la
ética no puede ser explicada de un modo puramente
teórico y científico sino que hay que partir de los
hechos, de la experiencia particular y de ahí donde surge
la conocida combinación de ética y
moral. El empirismo
ético conduce a Aristóteles a una postura
ecléctica: la felicidad consiste en unir sabiamente la
virtud, la contemplación y los bienes
exteriores.
Los hombres tienden a la felicidad y al constituir un
ser dotado de razón, se comporta racionalmente aprendiendo
a analizar y a escoger los medios más adecuados para ser
feliz (Eudonismo).
4.2.2 Ética Estoica: La Ética
según la doctrina estoica, que a su vez constituye su
punto de culminación; se define como el bien (moral) del
hombre que consiste en vivir de acuerdo a la naturaleza total y
con la propia naturaleza (que sólo es parte de ella); o lo
que es lo mismo: Vivir de acuerdo con la razón (que nos
hace descubrir la razón universal que rige el orden de la
naturaleza); También vivir en armonía con el todo.
Finalmente: realizar el deber (que no es sino lo que la
razón manda hacer). Esta ética de la razón y
del deber se ve identificada en Kant.
La virtud es la disposición permanente a vivir de
acuerdo con la razón y el deber. Los estoicos insisten en
que la virtud es una sola y no admite grados: se es virtuoso, y
quien tiene una virtud las tiene todas.
4.2.3 Ética De Epicuro: La Ética
Epicúrea explica, según la física materialista
de esta tendencia, que el hombre no es sino un cuerpo que se
disuelve con la muerte; y
según la canónica, son guía infalible para
el hombre las modificaciones del cuerpo llamadas "sensaciones" y
las afecciones del cuerpo que son el placer y el
dolor.
La moral es el tipo de saber que invita a perseguir la
mayor felicidad posible del mayor número probable de seres
vivos, se calculan las consecuencias de las decisiones, teniendo
en cuenta la mayor felicidad del mayor número. Esta era la
explicación Epicureista más reconocida de la
antigüedad en Grecia. En la
modernidad, esta
tendencia da origen a la ética utilitarista donde se habla
de la utilización de la mayor felicidad del mayor
número como criterio para decidir entre dos cursos
alternativos de acción. Para hacer este cálculo es
preciso tener en cuenta las consecuencias de cada curso de
acción y valorarlos desde la perspectiva del placer que
proporciona cada uno de ellos, esta tendencia hace parte de la
ética teológica o consecuencialista. La llamada
ética deontológica antepone el deber y las normas
que nacen del respeto a
determinados derechos de los hombres; sus principales
representantes en Estados Unidos
son Bentham, Mill y Sigdwick.
4.2.4 Ética Religiosa: Basada en la
Ética de Tomás de Aquino, representa su
última parte, es la ordenación (ordo) de las
criaturas – en concreto, el hombre- hacia Dios, de quien
proceden. Por eso se trata de la ETICA TEOLOGICA: la
determinación del fin del hombre es su base fundamental.
Dios, que es el principio de todas las cosas, es también
su fin último. La perspectiva es en principio,
platónico-agustiniana: el fin es el bien, y todas las
cosas, conforme a sus diversos grados de bondad, están
ordenadas unas a otras (así es como todo se ordena hacia
el hombre como fin intermedio) pero todas están finalmente
ordenadas a Dios. Añade también otros conceptos
platónicos: participación de la bondad divina e
imitación de esa bondad.
Algunos seres se asimilan a Dios por el sólo
hecho de conservar su propia perfección; otros por ser
causa de otros seres. En general todas las cosas desean a Dios.
Pero esta visión termina convirtiéndose en la
ética aristotélica: el fin último del hombre
es el conocimiento de Dios. Sin embargo, Tomás va
más allá: si la felicidad se consigue alcanzando el
último fin, para tal fin no puede ser el conocimiento
natural de Dios, sino la visión beatífica,
sólo posible mediante una iluminación especial de Dios en la otra
vida. De este modo, la ética
platónica-aristotélica (filosófica) conduce
a una ética religiosa (teológica).
Es Dios mismo quien orienta todas las cosas hacia
él; por eso la moral hace relación al gobierno divino
del mundo, es decir, a la ley divina. Es este uno de los temas
más famosos de la filosofía de Tomás de
Aquino. Dios gobierna el mundo mediante la ley eterna, la cual se
encuentra en todas las criaturas y se conoce como ley natural.
Para el hombre, la conducta moral recta se ha de basar en la
interpretación y aplicación racional
de la ley natural. Según Tomás de Aquino, todo
aquello que el hombre se encuentra naturalmente inclinado a hacer
es bueno; todo acto que se guía por este principio,
juzgando todo lo que se hizo o se debió hacer, se llama
conciencia.
En cuanto a la doctrina de la virtud, Tomás de
Aquino sigue esencialmente a Aristóteles. Pero en
definitiva, el concepto de naturaleza es el concepto regulador
fundamental para esta ética: está representado en
la idea divina del hombre, en la ley eterna y en la propia
esencia humana. De él derivan todos los preceptos morales.
Ya Aristóteles había dicho que lo bueno y virtuoso
es lo que perfecciona la naturaleza del hombre.
4.2.5 Ética De
Hume: Es de carácter
emotivista. Hume rechaza los intentos de fundamentar la
ética en la razón. Según él, en
primer lugar, la razón es incapaz de mover al hombre; lo
que le mueve es la pasión o el sentimiento. En segundo
lugar, el bien y el mal morales, los deberes, la virtud y el
vicio no son relaciones de ideas ni cuestiones (racionales) de
hecho; tienen su origen en otro sitio. Así pues, las
distinciones morales no se derivan de la razón. De
aquí se concluye que la ética de Hume era
emotivista y utilitarista.
4.2.6 Ética Kantiana: Si los seres vivos
tienden al placer, la cuestión moral está es en
saber qué seres tienen derecho a ser respetados,
qué seres tienen dignidad y no pueden ser tratados como
simples mercancías y por tanto qué deberes han de
cumplirse en relación con ellos. Esta posición
sostiene que sólo el hombre cumple las condiciones
necesarias para poseer dignidad y son libres porque pueden elegir
y son autónomos pues pueden regirse por sus propias leyes.
Considera a las leyes morales si son aquellas que cada hombre
quisiera para toda la humanidad.
Esta tendencia pertenece a las llamadas Éticas
deontológicas pues consideran los deberes como elemento
moral. Fue postulada por Kant en su obra "Fundamentación
de la metafísica
de las costumbres"; en ella afirma que los seres racionales son
fines en sí mismos, tienen un valor absoluto y no pueden
ser tratados como simples medios y constituye el fundamento de la
idea de dignidad humana que es a la vez la fundamentación
de la dignidad humana.
En esta obra, Kant define términos que
resultarán muy útiles a la hora de entender la
fundamentación de la ética que se propone para este
proyecto y por eso se considera la necesidad de transcribirlos
como anexo para su consulta inmediata sin son requeridos. Algo
que Kant sostiene es que todos los hombres deben tender a
perfeccionarse actuando moralmente y pensando en el bien general
y por esto se constituyen los deberes. Los deberes pertenecen a
la ética; pero no necesariamente tienen que hacer parte de
la legislación pues muchos deberes están fuera de
ella; de tal forma, la ética hace que se cumpla el
compromiso contraído en un contrato aunque
la ley no obligue a ello. La legislación de las promesas
aceptadas han de cumplirse no residen en la ética sino en
el Ius.
La ética enseña que aun cuando no exista
el móvil que la legislación jurídica une con
el deber (coacción externa), la sola idea del deber basta.
Cumplir las promesas no es un deber de virtud sino un deber
jurídico pues existen ocasiones en que la ley puede
obligar a ello; pero cumplirlas aunque la ley no obligue es una
acción virtuosa.
Se puede determinar entonces que hay deberes
jurídicos y hay deberes éticos como también
hay deberes éticos directos y éticos indirectos.
Los deberes éticos son condicionados desde el interior,
desde la conciencia: mientras que los jurídicos son
condicionados por la obligación externa.
Obligación, es la necesidad de una acción libre
bajo un imperativo categórico de la
razón.
Las adversidades, el dolor y la pobreza son
grandes tentaciones para transgredir el propio deber. Por tanto,
parece que el bienestar, el vigor, la salud y la prosperidad en
general pueden considerarse como fines a la vez que deberes. El
promover la propia felicidad es un fin pero lo es más la
moralidad del sujeto y apartar los obstáculos hacia tal
fin es sólo el medio permitido. Buscar para sí
mismo bienestar no es directamente un deber pero si lo es
indirectamente, es decir, defenderse de la pobreza como de
una gran tentación para los vicios. Ahora bien, en tal
caso, lo que constituye el fin y a la vez el deber no es la
felicidad sino mantener la integridad de mi moralidad.
El Principio formal del deber es obrar de tal manera que
la máxima de la acción pueda convertirse en ley
universal. La ética se restringe a los deberes
recíprocos del hombre con el hombre.
4.2.7 Ética Dialógica: Se debe
decidir qué normas son morales sólo a través
del diálogo
que se celebre entre los afectados por ellas y que lleve a la
convicción por parte de todos de que las normas son
conectadas; también se le denomina Ética
comunicativa o Ética Discursiva; fue postulada por Apel y
Habermas.
A partir de esta se puede establecer dos tipos de
racionalidades:
- Racionalidad comunicativa: Se dialoga entre los
interlocutores legitimados quienes exponen sus intereses y son
tenidos en cuenta en la decisión final de modo que la
ruta del diálogo sea llegar a un acuerdo que satisfaga
los intereses de todos los afectados por ella. - Racionalidad estratégica: La persona que
plantea el diálogo ve a los demás como medios
para sus fines de tal forma que su procedimiento
discursivo es usado para conocer las otras posiciones y
prepararse para que su propuesta sea la aceptada. Se suele
entender esta última como la base de la Ética de
las organizaciones pero en verdad se requiere de ambas
racionalidades pues las empresas requieren de comunicación y estrategias
para funcionar.
La Ética discursiva se considera como
deontológica pues muestra cómo la raza humana
sí ofrece un procedimiento para decidir qué normas
son moralmente correctas pues requiere del diálogo entre
los participantes y llegar a un acuerdo bajo el convencimiento de
la racionalidad de la solución. Reconoce expresamente que
cuando se aplica un procedimiento en los diálogos
concretos es preciso tener en cuenta las consecuencias de dar por
correcta una norma u otra.
4.2.8 Ética En General: Lo que entendamos
por ética debe ir de por sí, muy ligado a la moral
y por tanto, debe contener los conceptos de justicia,
racionalidad, bien, responsabilidad y aquellos similares; se debe
entender que la ética se debe ver como el cumplimiento de
la normatividad social y está legalmente inscrita en el
medio en que las personas se desenvuelven; de este modo, se es
ético si se cumplen los patrones de conducta establecidos
en la norma y en la sociedad. Incluso es bueno definir la
ética, de acuerdo a lo que se requiere de esta en este
escrito, como "un tipo de saber eminentemente práctico que
pretende orientar la acción humana de una forma racional
en todos los quehaceres de la vida y que define sobre lo que se
debe hacer o no, sobre cómo dirigir la conducta y obtener
beneficios pero enseñándose a obrar bien sin
dañar a los demás".
Lo que si se debe tener en cuenta es que todos los
autores que se atreven a dar una definición de
ética parten del principio de que el hombre busca el
bienestar y de que en su origen y naturaleza su intencionalidad
es buena y busca el bien para sí mismo y para los
demás. En los conceptos religiosos se atiende a la
ética justificada desde la conciencia y en los
filosóficos se atiende a la dignidad humana y a la
legislación.
La ética, finalmente, es un tipo de saber
práctico preocupado por conocer cuál debe ser la
causa final de las acciones para que se pueda decidir qué
hábitos se han de asumir, cómo ordenar las metas
intermedias, cuáles son los valores que orientarán
la acción, qué modo de ser o carácter se han
de incorporar como objeto de obrar con prudencia, es decir, tomar
decisiones acertadas que estén ligadas a la libertad y la
responsabilidad y que permitan alcanzar las metas a largo plazo.
Es necesario tener en consideración que se habla de la
ética como un principio que rige la vida.
Se espera que con la explicación presentada en
este aparte se hallan logrado los conceptos fundamentales que se
requieren para desarrollar el proyecto; de todas formas, es
necesario comprender, a partir de la descripción
presentada, que en este momento existen ingredientes mezclados de
cada tendencia que hacen que no haya una corriente
específica y determinada en las propuestas sobre modelos
éticos aplicados a las empresas y al estado.
4.3 Ética y Empresa
4.3.1 Concepto: Si se revisan los inicios de la
empresa desde el punto de vista kantiano podría llegarse
concluir que no es posible hablar de ética en los negocios
y menos de negociantes éticos pues es conocido que el hubo
fines de acumulación de riquezas por encima de todo y de
todos; un empresario de
la modernidad, en cambio, debe
fijar valores universales de respeto y principios éticos
que le permitan a su empresa sobrevivir en el cambiante mundo
actual.
En este capítulo se intentará seguir la
tendencia de la Ética aplicada y se basará en un
libro cuya
autora es española y se sustenta en Kant. También
es necesario reconocer que siempre ha habido discordia entre la
perspectiva empresarial y la práctica económica
sobre todo considerando que al capitalismo se
le han atribuido las diferencias existentes entre ricos y pobres
y mucho más con los resultados obtenidos en los
últimos tiempos a pesar de que algunos no consideran tan
marcadas las diferencias de clases y la explotación del
patrono hacia el trabajador en países globalizados e
industrializados mientras que en países tercermundistas
las relaciones se distorsionan por la ostentación del
poder
económico; con todo esto, la clave está en
determinar cómo se percibe el empresario o cualquier
componente administrativo de la empresa y la empresa en si en sus
niveles éticos en el medio en que se encuentra.
4.3.2 Ética propuesta para la empresa: La
ética aplicada es la fundamentación que expone
Cortina para una Ética de la empresa; su objeto es aplicar
los resultados en las bases de los distintos ámbitos de la
vida social: política, economía, empresa, medicina,
ecología,
etc. Al establecer las bases se descubren unos principios
éticos y lo siguiente será averiguar cómo
orientar esos principios en los distintos tipos de
actividad.
Se debe reflexionar sobre cómo aplicar los
principios dados en el primer capítulo a la actividad
empresarial e ir más allá: averiguar cuáles
son los bienes internos inherentes a cada actividad, qué
metas persigue cada una y qué valores y hábitos es
preciso incorporar para alcanzarlas; se debe tener en cuenta la
moral cívica de la sociedad en la cual la empresa se haya
inscrita y reconocer los valores y derechos que deben compartirse
con ella.
Continuando el pensamiento
propuesto por Adela Cortina en su libro ETICA DE LA EMPRESA; de
acuerdo a lo dicho por ella, enmarcando, como bien dice, sus
ideas en un estado social y democrático de derecho, y
poniéndose en el lugar de los que son afectados con las
decisiones, se encuentra que: "Si nos guiamos por el sentido de
la ética que más nos conviene se puede definir la
ética como la meta que
deseamos perseguir en el conjunto de nuestra vida; como modos de
actuar para alcanzar nuestras metas en forma inteligente a largo
y corto plazo o metas intermedias y a la vez aplicarle valores
que pueden convertirse en hábitos. Estos, a su vez, se
pueden convertir en virtudes, siempre y cuando estén bien
enfocados, o se pueden convertir en vicios, si resultan estar mal
orientados ".
Para Cortina la ética se ve como un medio y a la
vez como un fin pero para este proyecto se tiene en cuenta la
ética como principio sustentable de un forma de actuar en
el nivel profesional.
Las instituciones y las organizaciones tienen una
responsabilidad social innegable porque sus acciones repercuten
en la sociedad y sus fines deben ser sociales. Sus hábitos
deseables deben tender a ayudar a las personas que se hallan en
su zona de influencia a ser felices (virtudes) y su fin debe ser
social (proporcionando bienes). Esto se logra recuperando el
sentido de la actividad que le es propia; por ejemplo, el sentido
de la universidad son
la enseñanza y la investigación, si estas actividades
desaparecen y la universidad se convirtiera en una fortín
político perdería su sentido, su fin en sí,
malograría la actividad que le corresponde.
Un caso lamentable lo constituyen los graves
inconvenientes que en Colombia en el campo de la salud y la educación ahora
que los países industriales con su idea de la
globalización y el nuevo sistema económico han
vendido la idea de que lo mejor es que las organizaciones sean de
carácter privado para curar y prevenir los problemas de
corrupción del estado y que toda empresa
debe ser rentable aunque se conoce que estos renglones son de
servicio
social; de los resultados obtenidos se observan consecuencias
tales donde las personas que no poseen recursos
económicos no son recibidas en los diferentes centros, se
juega con la vida y las necesidades básicas de ellas
porque el estado dejó de cumplir su función social.
¿Cómo calificar una sociedad donde sus
organizaciones no cumplen sus funciones?
Si la ética se toma como una orientación
de la acción y es incorporada en el actuar, termina siendo
natural y no forzada. "Acostumbrarse a hacer buenas elecciones
significa ser consciente de los fines últimos que se
persiguen, habituarse a elegir en relación con ellos y
tener la habilidad suficiente como para optar por los medios
más adecuados para alcanzarlos (fines claros); tener bien
presentes los fines y ordenar los objetivos
intermedios, permitirá adaptar lo nuevo que se presente e
imaginar nuevas metas (adaptabilidad y creatividad)".
Tener conciencia de los fines que se persiguen y
habituarse a elegir y obrar en relación con ellos es la
clave de la ética de las personas y de una ética de
las organizaciones (especialmente las empresas). Si se tiene
conciencia de que se debe obrar en un sentido determinado es
porque se puede elegir. La libertad, como ya vimos, es un
elemento indispensable para la ética y está
estrechamente ligada con la responsabilidad pues ya que se tiene
posibilidad de elegir debe responderse por las consecuencias de
la elección. Sin embargo, cuando se elige para sí
mismo se responde ante sí mismo pero cuando la
elección tiene un impacto social se debe responder ante la
sociedad y por eso se deben medir muy bien los pasos. Las
organizaciones e instituciones tienen una responsabilidad
social innegable porque sus opciones repercuten en la
sociedad y sus fines son sociales. Esto puede observarse en las
empresas que quiebran por malos manejos económicos y que
lanzan a la calle gran cantidad de personal quienes
contribuirán al desempleo y al
nivel de pobreza derivando a su vez otra serie de problemas
igualmente delicados. Se necesita retomar una moral social para
que las organizaciones obtengan el sentido que les es propio y
cumplir así con la actividad para la cual fueron creadas.
Con las definiciones que se han tomado hasta ahora se puede decir
que las organizaciones poseen un carácter que les imprimen
sus miembros externos e internos y concluir que es indispensable
para obtener empresas éticas, contar con miembros
éticos. Así mismo, la ética requiere de
contar con proyectos de
futuro para que tengan sentido las elecciones presentes. Los
proyectos éticos son proyectos de futuro, de largo plazo
que requieren tiempo y personas libres que puedan hacerse
responsables de ellos.
4.3.3 Requerimientos Para Evaluar La Ética En
Una
Empresa:
En la ética que Cortina propone para las
organizaciones supone que toda empresa debe contar
con:
– Un fin específico, un bien interno a la
actividad que le corresponde y que le da legitimidad
social.
– Medios adecuados para producir el bien y valores
necesarios para alcanzarlos.
– Hábitos que ha ido adquiriendo la
organización en su conjunto y los miembros que la
componen para incorporar esos valores e ir forjándose un
carácter que les permita deliberar y tomar decisiones
acertadamente en relación con las metas.
– Relación adecuada entre las actividades y la
organización y entre sus bienes tanto externos como
internos.
– Identificación entre los valores de la
organización y los valores de la sociedad en la cual
está inscrita (moral cívica).
– Reconocer los derechos que la sociedad le da a sus
componentes (conciencia moral alcanzada).
En las empresas hay modos de orientar racionalmente la
acción como tomar decisiones prudentes, intentando
deliberar bien antes de tomar una decisión con el objeto
de realizar una elección adecuada y actuar según se
ha elegido; así mismo, al tomar una decisión, se
debe respetar los derechos humanos
desde una moral crítica, es decir, tomar decisiones
moralmente justas.
Las organizaciones deben actuar de forma ética
cuando persigan inteligentemente sus metas y cuando respete los
valores de su sociedad y lo que en ella se consideran derechos
para sobrevivir.
En las personas, el saber ético las orienta a
crearse un carácter que las haga felices; esto es, tender
al bienestar o logro de la perfección o
autorrealización, lo que varía de persona a
persona. En las organizaciones, el fin social hace que ellas
proporcionen a la sociedad unos bienes que hacen que ella la
acepte. Cada organización debe producir bienes que le son
propios pues si no lo hace, desvirtúa su función y
las organizaciones pierden sentido y rumbo dando como resultado
una sociedad desmoralizada y sin carácter.
Algo que se puede concluir inicialmente es que para
tener una sociedad moral sería necesario que las distintas
organizaciones que la conforman tuvieran el sentido de la
actividad que les es propia, produjeran bienes adecuados a esa
actividad y actuaran con los medios adecuados en esa dirección. Pero, ¿Cuáles son
los valores éticos que podrían proponerse para las
empresas? Cortina propone: "Una empresa se consideraría
éticamente impecable si poseyera los siguientes valores:
satisfacción de las necesidades humanas, agilidad,
iniciativa, cooperación, interés común,
solidaridad,
riesgo
razonable, responsabilidad, justicia, adaptabilidad, creatividad,
prudencia y libertad; es necesario recordar que se debe buscar la
eficacia y
evaluar el futuro de la empresa, su proyección, el
carácter de la misma y su logro real de felicidad
identificada en la honestidad, la perfección y la
autorrealización de cada componente humano. Rige el "buen
pensar" y el "buen obrar" y esto se basa en los valores morales
de justicia, equidad y una
virtud tan intangible como el bien".
Toda empresa desarrolla sus actividades en una
época determinada, está inmersa en una sociedad que
posee determinada conciencia moral e interactúa con
personas que poseen unos derechos que es preciso respetar y que
debe incluir entre sus fines para no atropellarlos; toda empresa
debe respetar los derechos de sus miembros, sus consumidores y
proveedores
sin intentar pasar por encima de ellos con la excusa de que es
necesario para lograr un beneficio económico expresado en
sus estados financieros; entre los fines de toda empresa debe
estar lograr la satisfacción de necesidades humanas y
obtener beneficio para sobrevivir pero no a costa de los derechos
de sus componentes; cualquier empresa debe obtener legitimidad
social y para conseguirlo debe lograr producir los bienes que se
esperan de ella, respetar los derechos de la sociedad en la cual
desarrolla sus actividades y compartir los valores con esa
sociedad. ¿Qué es lo que se ve en el momento?
Actualmente, y dada la alta competitividad
del mercado, las
empresas tratan de atraer clientes y
mantenerlos y por eso buscan ofrecer ciertas
características que le permitan obtener la lealtad de sus
clientes y en algunas no se dan competencias
sanas.
Sin embargo, es necesario tener en cuenta que no basta
que una sociedad legalice sus prácticas por medio de leyes
porque puede suceder que la legitimidad de esta no sea real
aunque las autoridades tengan base jurídica para exigir su
cumplimiento. Para esto está lo que Cortina denomina el
derecho positivo,
vigente en un país determinado, y la moral crítica
universal. ¿Por qué se debe diferenciar? Un
país, por ejemplo, puede desconocer en su
legislación que existen etnias importantes y
diferenciables en su territorio y de esta forma desconocer los
derechos a las razas minoritarias pero la política
internacional puede presionarlo pues en la moral crítica
internacional se encuentra que los derechos humanos reconocen la
pluridad de razas, credos y demás. Es decir, las leyes
vigentes en un país determinado, pueden estar en contra de
los criterios morales universales de justicia, pueden ser
deficientes y son condenables desde cualquier punto de vista
aunque la sociedad que lo compone justifique su comportamiento y
por eso resulta preponderante la existencia de la ética
dialógica que permita realizar acuerdos; otro ejemplo
claro de esto lo constituye la organización internacional
de derechos humanos que propende mundialmente por el cumplimiento
de estos y han tenido que intervenir en países como el
nuestro donde hay fuerzas armadas legales e ilegales que los
violan y terminan siendo justificadas por el estado vigente de
derecho; o lo sucedido con las normas internacionales de
protección de los animales como las
ballenas ante países como Japón
que las persiguen y matan y lo consideran natural en sus normas,
a pesar de que mundialmente se busca protegerlas pues
están en vía de extinción. Por estos casos
se determina la necesidad de lo que se denomina moral
crítica y moral social vigente; una sociedad puede aprobar
ciertas conductas pero estas pueden no ser justificadas por
todos; de ahí que sea indispensable la existencia de los
objetores de conciencia que critican los valores de la sociedad
en la que viven y ponen en tela de juicio los intereses
particulares que generan una moral difusa y con la que no
está de acuerdo la totalidad de la población. Sucesos como el Sudáfrica
con el Apartheid o lo hecho por Milosevic en Croacia justifican
lo necesario que es que se atienda el derecho vigente, que se
conozcan las convicciones morales imperantes y averiguar
qué valores y derechos deben ser racionalmente
respetados.
En Colombia se observó un proceso que
provocó una moralidad difusa: El Narcotráfico. En todas las esferas del
país y en todos los campos se detectó el ingreso de
personajes y dineros provenientes de este sector; esto
provocó entonces una economía boyante, dinero en
cantidades exorbitantes pero también, el resultado nefasto
de este tipo de movimientos representado en el recrudecimiento de
la violencia, el
desplazamiento obligado de los campesinos para ocupar ilegalmente
sus tierras, la impunidad en
la justicia, la perdida de credibilidad de las autoridades,
empresas ficticias, lavado de dineros, el alza excesiva de los
precios y los
costos de los
productos,
etc. Un ciclo que para muchos era bueno pero del que la moral
mundial obligó a salir al país y mostró
así la realidad de un país sin recursos y con
muchos inconvenientes económicos y de moral de lo cual
aún no se recuperan muchos sectores. ¿Cómo
lograr entonces recuperar la confianza de la población en
sus instituciones? Es necesario partir de destacar valores
éticos y morales de cada uno de los individuos e
imprimirlos a las empresas para ayudar a generar cambios grandes
y que fructificarán en un mejor país.
Para finalizar se puede decir que a partir de conceptos
filosóficos sobre ética, se ha intentado dar una
idea global de lo que se entiende por este término y se ha
tratado de aplicar al campo de las instituciones, exactamente al
del ámbito empresarial, para darle sentido a la idea de
proporcionar unas características éticas a esta
función que ha dado la falsa idea de ser amoral o inmoral,
en el peor de los casos. Hasta aquí se espera que el
lector tenga una mejor visión con respecto a la
definición de este término y aún mejor que
ya tenga una noción propia de su significado y como
aplicarlo al campo empresarial.
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