¿Lo epistémico o lo profesional en la didáctica de la gestión de calidad para los ingenieros industriales?
Se muestran las dimensiones más comunes que han
caracterizado esta enseñanza y cómo actualmente urge un
nuevo enfoque motivado fundamentalmente, desde el punto de vista
pedagógico, por la formación y desarrollo de
modos de actuar referentes a la gestión
de calidad en los
estudiantes de dicha carrera, enfoque que de ninguna manera obvia
las dimensiones tradicionales existentes, sino que las ubica en
su justo lugar imbricadas en dos nuevas dimensiones
básicas, las cuales permitirán la enseñanza
de asignaturas con un profundo carácter
profesional y los tan necesarios enfoques sistémicos y de
proceso.
PALABRAS CLAVES: ENSEÑANZA, CALIDAD,
DIDÁCTICA.
Son ampliamente conocidos los esfuerzos y preocupaciones
que distintos Estados, y dentro de éstos diversas organizaciones,
realizan para perfeccionar en gran medida la labor del pedagogo
en su misión de
formar los profesionales de hoy y del futuro, pues como se conoce
la
educación, y especialmente la Educación
Superior, cumple una función
esencial en el desarrollo de los individuos y de las sociedades.
En nuestro país, después del triunfo de la
revolución, la Educación Superior ha
tenido siempre como objetivo
principal preparar profesionales aptos para satisfacer las
necesidades presentes en la sociedad que le
sirve de entorno, las que se van modificando en el tiempo, obligando
a un proceso constante de perfeccionamiento en la
formación de dichos profesionales, requiriéndose
precisar continuamente sus contenidos específicos, sobre
bases estratégicas más estables.
En la actualidad, con el derrumbe del campo socialista,
el país se ha visto obligado a la inserción en el
mercado
internacional con características totalmente diferentes al
otrora mercado tradicional. Por esta y otras causas la
Educación Superior ha llevado a cabo un proceso acelerado
del perfeccionamiento y adaptación de la enseñanza
a estas nuevas realidades.
La Ingeniería
Industrial, es una de las carreras que por las
características de los perfiles profesionales que la
componen, se han manifestado fehacientemente estos cambios.
Precisamente dentro de su curriculum,
entre las disciplinas del ejercicio de la profesión, la
disciplina
Calidad, concebida desde la génesis de la carrera, ha
devenido en un revolucionario desarrollo desde su
implantación.
La tendencia cada vez más creciente a la
globalización de la economía y el
comercio
internacional, junto a los logros
científico-técnicos alcanzados, las redes de comunicación más complejas y
avanzadas, han elevado considerablemente el papel de la
Calidad como factor determinante en los procesos de la
producción y los servicios. El
comercio ha
puesto de manifiesto la necesidad de contar con sólidos
sistemas de
Gestión de la Calidad.
Lograr productos y
servicios de alta calidad y a bajos costos se ha
convertido en condición indispensable para obtener altos
índices de productividad y
eficiencia; y
ser más competitivos. Solo así el país
podrá sobrevivir a la voracidad de los nuevos mercados. Solo
las empresas que se
caracterizan y trabajan por la calidad de sus productos y de sus
servicios sobreviven en el mercado, alcanzan notoriedad y
prosperan.
Nunca como en estos tiempos las empresas han tenido que
desenvolverse en unos mercados tan competitivos y cambiantes,
así como enfrentarse a consumidores tan sumamente
exigentes; por tanto en este contexto para poder
permanecer como empresa hay que
saber cómo gestionar la Calidad. Son innumerables las
empresas cubanas que necesitan conocer cómo la calidad se
gestiona y gestionarla, y precisamente la carrera de Ingeniería Industrial es la única
que dentro de su curriculum incluye la formación
más completa en materia de
calidad a los futuros profesionales, de ahí la importancia
de perfeccionar la enseñanza de esta materia para el logro
de este empeño.
Teniendo en cuenta estos elementos, constituye objetivo
central de este trabajo hacer un análisis de cómo debe enfocarse la
didáctica de dicha disciplina en la carrera de
Ingeniería Industrial, respondiéndose a las
interrogantes: ¿Qué criterio debe prevalecer en la
didáctica de dicha disciplina: lo epistemológico o
lo profesional? y ¿Cómo debe ser secuenciado el
contenido de las asignaturas de la disciplina?
Es muy común escuchar entre los docentes que se
dedican a la enseñanza de una ciencia o rama
del saber en la Educación Superior que la selección
y el orden de los contenidos que se imparten están
precisos, y es también muy cierto que en los
diseños curriculares prevalecen concepciones
tradicionalistas y de poca novedad, donde a veces los contenidos
que se diseñan son una copia parcial o total de lo que
consideraron determinados autores en libros de
texto. Es muy
frecuente también que dichos contenidos estén
organizados de forma tal que siguen la lógica
del desarrollo de la ciencia o
rama del saber específica, prevaleciendo en estos casos un
enfoque epistemológico. Pero cabría cuestionarse en
estos casos si los profesionales para resolver los problemas
presentes en sus esferas de actuación lo hacen
según la lógica de su ciencia. Evidentemente no,
pues los problemas profesionales son situaciones que se dan en
los objetos de la profesión que requieren de modos de
actuar profesionales para su eliminación o
reducción, donde los objetos se analizan en su integridad
y necesitan de la combinación de varias dimensiones, en
las que confluyen aportes de distintas ciencias a la
vez. De manera que para solucionar problemas profesionales es
esencial enfrentarlos con los modos de actuar profesionales, lo
cual dista mucho de la simple aplicación de la
lógica de la ciencia o rama del saber, y así se
resuelve en alguna medida la contradicción existente entre
ciencia y profesión.
Una secuencia de contenido implica analizar los
contenidos que pretenden secuenciarse, establecer una
selección de los aspectos que se consideran más
relevantes y definir las relaciones que deben establecerse en su
desarrollo en un momento dado y a lo largo del tiempo (Del
Carmen, 1996). Para poder realizar un proceso de
secuenciación es vital establecer las dimensiones
básicas, así como las que se subordinan o subsumen
en ellas y los principios que
deben orientarlo.
Existen diferentes variables
(Hernández, 1999) que se pueden tener presentes en el
proceso de secuenciación de los contenidos: las
características de los alumnos, los elementos que se toman
en consideración (objetivos,
contenidos o actividades), las relaciones que se establecen entre
ellos, las técnicas
de análisis utilizadas para establecer las secuencias, el
ámbito de aplicación de las secuencias
consideradas, el tipo de estrategias de
secuenciación recomendable y el grado de
intervención de los distintos agentes que
interactúan en el diseño.
Aunque no se desprecian todas estas opiniones, en este
trabajo se enfoca el análisis hacia dos criterios
básicos: uno vinculado al análisis del contenido y
la aplicación a su secuenciación, y otro que
garantice la presencia de los modos de actuar del
profesional.
Ahora, ¿qué debe ser secuenciado? Existen
dos puntos de vista básicos en relación con esta
pregunta: el de los que consideran que deben secuenciarse los
resultados del aprendizaje y que
los contenidos aparecerán como una necesidad para
lograrlos; y el de los que opinan que deben secuenciarse los
contenidos y los resultados del aprendizaje incluirse como una
necesidad para el dominio de
éstos. Los primeros utilizan procedimientos de
análisis empírico, análisis de tareas,
mientras que los segundos utilizan procedimientos racionales,
análisis de contenido.
Es uno de los objetivos de este trabajo enfocar
cómo debe ser secuenciado el contenido de las asignaturas
de la disciplina Calidad en la carrera de Ingeniería
Industrial.
Realmente hay muchos caminos alternativos para organizar
la enseñanza o el tema de cómo pensar en la
calidad, y la materia en tal sentido es bastante amplia y
multidimensional. Entre estas dimensiones se pueden destacar las
siguientes:
- Los conceptos fundamentales y el papel de la calidad
en la misión empresarial. - Los procesos de la trilogía de Juran: planificación, control y
mejora de la calidad. - El nivel jerárquico de los
alumnos. - Las herramientas y técnicas tanto estadísticas como gerenciales que se
utilizan en el contexto de su gestión, unas de
carácter básico y otras de carácter
avanzado.Merece también que se agreguen en este
listado otras dimensiones de gran actualidad y popularidad
como son: - Las diversas filosofías y modelos de
administración de la calidad que han
proliferado en el mundo. - Las normas ISO
9000 para la Gestión de Calidad. - La documentación de los sistemas de la
calidad según el enfoque ISO
9000. - La calidad y la gestión
ambiental, de gran auge principalmente en países
desarrollados.
Con esta gran cantidad de alternativas es posible
diseñar los cursos de
formación basándose en cualquier combinación
de las dimensiones, incluyendo los conceptos básicos, los
procesos de la Trilogía de Juran, las herramientas y
técnicas, entre otras.
En el caso de la formación para la calidad en la
carrera de Ingeniería Industrial se ha observado
cómo en la concepción de los programas de la
disciplina y asignaturas se ha defendido más bien la
presencia de lo epistemológico y se ha descuidado el
aspecto profesional, manifestando una parcialización hacia
las dimensiones de los conceptos fundamentales y las herramientas
y técnicas, y en los últimos temas o asignaturas lo
referido a la dirección de la calidad.
La organización actual en la materia no
garantizan de manera armónica y sistémica las
aspiraciones que se establecen a nivel de la profesión y
de la carrera para este profesional, donde se quiere lograr
que:
- Predomine el enfoque integrador organizado en
torno a los
procesos, en lugar del antiguo enfoque funcional. - Aumenten las interrelaciones finanzas–máquinas-hombres-materiales-energía-información en conjunción con el
medio
ambiente para obtener cantidad, calidad y surtido de los
productos y servicios que deben resultar de los distintos
procesos de una organización empresarial, en los plazos
deseados y con eficacia,
eficiencia y competitividad; cuando antes la tarea
fundamental era la utilización coordinada de hombres,
equipos y materiales. - Se amplíe su función organizadora con
la de gestor de procesos de cambio y la
extienda a todo el proceso de la cadena de
valor desde los suministros hasta los servicios de
postventa.
Para garantizar en la educación superior una
formación en cualquier materia que tenga un profundo
carácter profesional, los docentes no deben estar ajenos a
lo que se aspira con el profesional desde los niveles de carrera
y evitar que esas aspiraciones se queden a nivel de plan de estudio.
Es imprescindible que en los diseños curriculares de las
asignaturas se materialicen las aspiraciones de los niveles de
partida.
Entonces, si la intención que se tiene con el
ingeniero industrial actual es que sea un gestor de procesos de
cambio que asegure la cantidad, calidad, surtido y oportunidad
con eficiencia, eficacia y competitividad en cualquier
organización empresarial de producción o servicio, que
para ser gestor tenga que gestionar y para gestionar se vea
obligado a planificar, implementar, controlar y mejorar,
ésta es la lógica de su actuación o su modo
de actuar profesional.
Por tanto, para el caso de este profesional, a la hora
de decidir su formación para la calidad, hay que
considerar dos nuevas dimensiones dominantes:
- Los procesos claves que aseguran la
calidad. - El modo de actuar o la lógica de su
actuación profesional.
De manera que la división y combinación
básica se hace mejor de acuerdo con los procesos claves
que aseguran la calidad de forma simultánea con el modo de
actuar de este profesional; y siguiendo esta división
básica debe irse imbricando de manera gradual el resto de
las dimensiones ya mencionadas, entre las que se destacan las
herramientas y técnicas que según Juran (1990)
constituyen una "Lista de Compras" de la
cual se hace una selección según
convenga.
A partir de aquí pueden surgir las interrogantes
siguientes: ¿cómo debe irse logrando el desarrollo
del modo de actuar del profesional? ¿en todos los procesos
claves que aseguran la calidad a la vez o de proceso en proceso?
¿o de otra forma?
Para responderlas es importante primeramente tomar
conciencia de que
la calidad es una resultante, que se obtiene no por la suma
algebraica de las contribuciones o aportes que se generan en los
procesos que la aseguran, sino por la integración de los diferentes aportes en
dichos procesos de forma sistémica.
Ahora, ¿cuáles serían estos
procesos? Serían aquellos que tienen un impacto en la
calidad: los procesos según el ciclo de vida
del producto y el
de gestión estratégica de la calidad.
La calidad como resultante no está en cada
proceso, sino que aparece debido a las relaciones que se dan
entre todos los procesos, que constituyen un sistema
dinámico, abierto, complejo y con gran dosis de
componentes humanos y tecnológicos. Así mismo
emergen las propiedades del agua, que no
se dan ni en el oxígeno
ni en el hidrógeno por separado, al igual que emerge la
vida por la interacción de diversas entidades de distinta
naturaleza. No
es por casualidad, sino por la propia naturaleza de la calidad
que en la última versión de las normas ISO 9000 del
2000 de Gestión de la Calidad se hace referencia entre los
principios de la Gestión de la Calidad a los
siguientes:
- Enfoque basado en procesos: Un resultado deseado se
alcanza más eficientemente cuando las actividades y los
recursos
relacionados se gestionan como un proceso. - Enfoque de sistema para la gestión:
Identificar, entender y gestionar los procesos
interrelacionados como un sistema, contribuye a la eficacia y
eficiencia de una organización en el logro de sus
objetivos.
Como se ha querido expresar, la calidad se genera en un
sistema de procesos con las características antes
mencionadas. En objetos de este tipo, distintos autores como
Dilthey (1972), Schleiermacher (1976), Heidegger (1974), Gadamer
(1977), Ricoeur (1969, 1975) y otros han expresado la
conveniencia de utilizar el método
hermenéutico-dialéctico, que "es un movimiento del
pensamiento
que va del todo a las partes y de las partes al todo"
(Martínez, 1989), de modo que en cada movimiento aumente
el nivel de comprensión: las partes reciben significado
del todo y el todo adquiere el sentido de las partes.
Todos estos autores han demostrado, en forma
convincente, que el proceso de nuestro conocer en objetos con
cualidades como las señaladas es
hermenéutico-dialéctico.
De manera que ahora se pueden responder las
interrogantes planteadas. La formación en Gestión
de Calidad para los ingenieros industriales debe partir de la
comprensión del sistema de procesos que aseguran la
calidad (el todo), luego siendo consecuente con el método
hermenéutico-dialéctico se deben estudiar los
procesos individuales (las partes) y finalmente a través
de las partes con toda la gama de interacciones que de manera
gradual se van comprendiendo se llega nuevamente al todo. Esto
permite afirmar que el modo de actuar del profesional se debe de
ir logrando en este sistema de procesos, primeramente por
procesos individuales, hasta llegar a un estado en que
se comprenda la interacción de todos los procesos como
sistema y es en este momento cuando se debe desarrollar el modo
de actuar del profesional en el todo.
- Se demuestra que el criterio que debe predominar en
la didáctica de la disciplina Calidad es lo profesional,
por encima de lo epistemológico, siendo las dimensiones
básicas o dominantes para la formación de la
Gestión de Calidad en la carrera de Ingeniería
Industrial: - Los procesos claves que aseguran la
calidad. - El modo de actuar del ingeniero
industrial. - Se fundamenta la factibilidad y
conveniencia de tener en cuenta el enfoque sistémico,
materializado a través de la aplicación del
método hermenéutico-dialéctico en la
enseñanza de la Gestión de Calidad para
ingenieros industriales.
RECOMENDACIONES
En aras de otorgarle un carácter profundamente
profesional a la enseñanza de la Gestión de Calidad
en la carrera de Ingeniería Industrial es imprescindible
la inclusión de los modos de actuar como dimensión
básica a tener presente, tanto en su diseño
curricular, como en la dinámica del proceso de enseñanza
aprendizaje en las asignaturas que componen dicha
disciplina.
- Carmen, L. del. El análisis y
secuenciación de los contenidos educativos / L. Del
Carmen._ _ Barcelona : Ed. Horsori, 1996._ _ 243 p. - Hernández Escobar, A. Aproximación a
una idea: la secuenciación de los contenidos en la clase
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: 10 –13, dic., 1999. - Juran, J. M. Juran y el liderazgo
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directivos / J. M. Juran._ _ México : Ed. Diáz de Santos,
1990._ _ 363 p. - Dilthey, W. The Rise of Hermeneutics / W. Dilthey._ _
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Calidad. Fundamentos y Vocabulario. - NISO 9001 : 2000. Sistema de Gestión de la
Calidad. Requisitos.
Autor:
Mayra R. Moreno Pino
Máster en Educación Superior. Ingeniera
Industrial. Profesora auxiliar.
Universidad de Holguín..
Ileana Hernández Concepción.
Máster en Matemática
aplicada e Informática para la
administración. Ingeniera Industrial. Profesor
asistente.
Universidad de Holguín.
Zulem Pérez Rodríguez.
Máster en Aseguramiento de la Calidad. Profesor
Instructor: Universidad de
Holguín.