Hasta finales del siglo XVIII la agricultura
constituyó la principal fuente de riqueza; debido que la
expansión de la economía era
determinada por la tierra y la
mano de obra empleada en las tareas agrícolas, las
condiciones cambiaron a principios del
siglo XIX con el descubrimiento de la pagina de vapor, y se
consolidaron a finales del siglo con el advenimiento de la
electricidad;
por eso en el siglo XX se presenta el mayor incremento del
bienestar económico medido en función
del ingreso per capita.
El perfil del progreso cambia en las ultimas dos
décadas del siglo y, en particular, en la década de
los noventa. La principal fuente de creación de riqueza
pasa a ser la innovación tecnológica en una gran
variedad de áreas.
La externalidad del conocimiento
da lugar a resultados muy distintos de los previstos en la
teoría
del crecimiento. En los trabajos de Lucas y Romer se
predecía que el
conocimiento estaba destinado a rendimientos
crecientes.
La teoría del crecimiento presumía que el
avance del crecimiento ocasiona una elevación dela
productividad
de la manos de obra y del salario que
redunda en la ampliación de la participación del
trabajo PIB y la
mejoría en la distribución del ingreso, los resultados
han sido muy distintos. El progreso ha significado el
fortalecimiento de las grandes empresas y la
multiplicación de los millonarios. Al mismo tiempo, ha
provocado el cierre e empresas menos prosperas y el
desplazamiento de la mano de obra y en mayor grado de la menos
calificada. El resultado ha sido una ampliación de las
desigualdades a todos los niveles.
En los siglos XVIII y XIX la ciencia era
un proceso de
ensayo y error
en que los descubrimientos surgían del talento de los
científicos. Se trataba de crear para el beneficio de la
humanidad. En la última parte del siglo cambian las
condiciones. Los descubrimientos se hacen en las empresas o en
las universidades financiadas por aquellas. Así, la
investigación tiene un propósito
final de lucro.
En el siglo XIX el progreso estuvo movido por el
descubrimiento de la máquina de vapor y en el siglo XX por
la electricidad y la química.,
según la literatura económica,
se dice que la primera y la segunda revoluciones industriales
fueron guiadas por la tecnología mecánica, y la nueva por el conocimiento
intelectual.
En todas las etapas hay una clara complementariedad
entre la ciencia y su
desarrollo en
forma de instrumentos. En las tres revoluciones industriales la
pauta del progreso es similar y no puede trazarse en línea
divisoria. Mal podría decirse que tanto en la primera como
en la segunda revolución el avance estaba en las maquinas,
y ahora en el conocimiento.
La tecnología y el avance científico
están expuestos a grandes externalidades. Los beneficios
sociales duplican los beneficios individuales; de igual forma
autores como Schumpeter asocian la tecnología a
prácticas monopólicas que generan ganancias
privadas mayores que las reportadas por el mercado.
Muchos de los descubrimientos no están orientados
a mejorar las condiciones de la producción, sino a apropiarse del avance
tecnológico. Las empresas prefieren el cambio
tecnológico generado en los laboratorios al proveniente
del aprendizaje de
los trabajadores.
La confrontación tecnológica deja sin piso
el principio de la mano invisible, sustentado por Adam Smith, el
desplazamiento de los rivales de menor tamaño significa un
poder
monopólico.
Quien consiga avance queda en posición de
privilegio para sacar a los competidores y tomarse el mercado
para emplear prácticas monopólicas. Su prioridad no
es producir en la forma menos costosa sino dejar la
tecnología en sus casa matrices.
Los avances de la aviación, la Internet y la
farmacéutica, en cierta forma, han generado consumos que
antes no existían y que están dirigidos a los
sectores de mayores ingresos. Se
trata de bienes de alta
elasticidad de
ingreso que, por su propia naturaleza,
generan necesidades por conducto de la imitación y el
contagio.
Como las empresas prefieren a los profesionales con
mayores niveles de formación, los individuos adquieren
títulos para obtener mejores salarios, lo que
no necesariamente significa mayor productividad, el conocimiento
crea su propia demanda, bien
puede ser una necesidad ficticia. Los avances realizados en los
computadores y la informática han dado lugar a complejos
procedimientos
que no redundan en mejores resultados, se ha logrado desplazar el
debate a
profesionales de mayor experiencia y conocimiento teórico
y reducir el radio de
acción del análisis que ha creado la
proliferación y mantenimiento
de errores. La ciencia ha dejado de ser neutral.
En el pasado los estudiantes de administración de empresas e ingeniería aspiraban a tener un empleo para
realizar la mejor tarea en las empresas que los contrataban. Hoy
en día su objetivo
común es hacer dinero, mucho
dinero.
El gran avance tecnológico de la tercera revolución
industrial ha traído una mayor innovación y
creación de nuevos entes, pero también ha
significado mayor destrucción de empresas y
disminución de la posibilidad de empleo; lo que se ha
presentado una de las desigualdades, las cuales se han ampliado
en forma alarmante.
El conocimiento liderado por el lucró individual
puede conducir a grandes distorsiones económicas y a
grandes desigualdades. La ciencia dejaría de ser neutral.
Los esfuerzos no estarían orientados al conocimiento en
beneficio de la humanidad, sino a obtener mayor lucro individual.
Al final se llegaría a una ciencia al servicio de
los poderosos que podría convertirse en una fuente
escalofriante de desigualdades.
El intento de separar el cambio tecnológico
mecánico del cambio tecnológico del conocimiento
desconoce la relación entre el capital humano y
el capital
físico.
El gasto en ciencia y
tecnología sólo se manifiesta en la medida en
que las empresas tengan los equipos para complementar los
descubrimientos.
En las tres épocas se observa un proceso de
avance tecnológico originado en los descubrimientos
científicos y se traduce en la creación de máquinas,
herramientas o
procedimientos que realizan nuevas tareas o perfeccionan las
anteriores.
Los mercados y los
consumos son dominados por los alimentos, la
industria
liviana (confecciones, papel,
plásticos) y por la industria pesada
(automóviles, aviones, máquinas eléctricas).
Los nuevos productos
generados en los últimos decenios se pueden clasificar en
dos grupos. Primero,
la microelectrónica (computadores, sofware, etc.).
Segundo, la biotecnología, las farmacias, las comunicaciones, etc.
Esto no debe confundirse con el simplismo de decir que
los bienes cada vez pesan menos porque tienen mayor contenido
intelectual. Lo que sucede es que el proceso científico se
ha orientado a crear nuevas fuentes de
energía y nuevos procesos de
producción que dan por resultado bienes que están
en capacidad de prestar los mismos servicios con
menos tamaño, mayor precisión y mayor capacidad de
regulación.
En cierta forma es la ley del cubo de
Galileo, que establece que la energía de un cuerpo esta
dado por su volumen y su
costo por el
cuadrado. Estamos en un mundo en donde cada vez se encuentran
cubos más pequeños que producen la misma
energía, lo que se denomina economías de escala o
rendimientos crecientes a escala. Como consecuencia, el producto
nacional tiende a pesar cada vez menos.
Una de las consecuencias de la complementariedad entre
los elementos del conocimiento y el capital es el surgimiento de
economías de escala dinámicas y estáticas.
Si adicionalmente se tiene en cuenta que el peso del Pib estaba
representado por los costos
marginales, resulta que éstos tienden a disminuir con el
tiempo.
El país no puede reducir su actividad a las
condiciones impuestas por la nueva tecnología, que no
representa ni un 15% del Pib.
Al igual de lo que sucedió en el pasado con las
revoluciones de la máquina de vapor y la electricidad,
también ahora se generaron expectativas superiores a la
realidades, se supuso que lo normal era que la productividad
creciera cuatro puntos porcentuales; es decir, el doble del
promedio histórico. La verdad es que las ficciones de la
nueva revolución industrial sólo vinieron a
percibirse cuando la burbuja se reventó y provocó
la caída de la economía de los Estados Unidos en
el año 2000.
La revolución de la información y los computadores no es
comparable con la revolución de la energía
eléctrica. La bonanza de los años noventa tuvo
una alta artificialidad creada y sostenida por el déficit
de la balanza de
pagos.
Se desmintió el mito de que la
revolución de la informática es el avance
más grande de la humanidad.
Los países en desarrollo han quedado
imposibilitados de producir los bienes de la tercera
revolución industrial, por desconocimiento
tecnológico, y de las anteriores revoluciones, por
desventaja histórica. La mayoría de ellos no pueden
producir automóviles o máquinas y ni siquiera los
transitores inventados como consecuencia de la teoría
cuántica que surgió hace cien
años.
Las confusiones sobre la tecnología han llevado a
sustentar y promover un diagnóstico equivocado de la
economía mundial.
La globalización y la consecuente
desregulación de las economías han creado un marco
propicio de apropiación de los beneficios de la
tecnología que reduce sus beneficios sociales.
Los resultados económicos deficientes no son
culpa del cambio tecnológico sino de su regulación.
Las fases de desarrollo industrial están claramente
asociadas con la escalera tecnológica que resulta del
avance científico. En los últimos dos siglos los
países han pasado de la producción basada en la
agricultura a la producción basada en la ciencia. Dentro
de esta amplia gama, en principio se pueden definir las
siguientes fases de desarrollo industrial.
- Base en recursos
naturales. - Manufactura ligera.
- Industria pesada.
- Alta tecnología.
- Industria basada en la ciencia.
Solo Estados Unidos, y, tal vez, Japón
han logrado participar en todas las etapas. En Colombia el
espectro es nostálgico. El país sólo produce
manufacturas livianas y se encuentra en un estado muy
incipiente en la manufactura
pesada y de consumo,
materias primas y bienes de capital. La estructura
económica comprende la primera revolución
industrial y una fracción de la segunda
revolución.
Hacer cincuenta años, América
Latina, Japón y los países del sureste
asiático estaban en el primer peldaño de la
escalera tecnológica. Hoy en día Japón se
encuentra en el último peldaño. Por su parte,
Colombia no ha logrado avanzar ni a la mitad del tercer
peldaño.
La verdad tiene que ver más con la
organización económico e institucional. Para
ascender en la escalera tecnológica se requiere un Estado
que lidere el proceso, creando las condiciones económicas
e institucionales que permitan entrar en las nuevas etapas y
asimilar las experiencias anteriores, grupos selectos de
ingenieros y tecnólogos, amplia disponibilidad de mano de
obra con habilidades numéricas y alto nivel de capacitación.
Otro aspecto que resalta es que la situación no
es simétrica. La tendencia es más a la
diversificación que a la especialización. Los
países que están en la parte inferior de la
escalera tienen menos posibilidades de producir que los que
están en la cima. La industrialización es
más un proceso evolutivo dictado por los avances del
pasado que un proceso de especialización dictado por la
disponibilidad de factores. Se encuentra, más bien, en el
historial tecnológico, el capital y la escala de
producción. El primer paso para una economía como
la colombiana es definir los productos que se elaboran en las
diferentes etapas.
Parte de la explicación se encuentra en que las
economías no funcionan en las condiciones ideales
clásicas. Estamos ante economías expuestas a fallas
de mercado que dan lugar a equilibrios múltiples y a
externalidades que dependen de la experiencia acumulada. En
virtud de la protección, la firma logra igualar el
precio externo
con el interno y se establece un subsidio que compense la
diferencia entre el costo marginal y el precio interno mientras
la producción aumenta y la diferencia desaparece, se
lograría la máxima eficiencia con
precios
internos superiores a los costos medios y con
costos marginales iguales a los precios internacionales.
Japón es el país desarrollado con los menores
coeficientes de importaciones.
Los costos fijos constituyen una seria limitación para los
países pequeños.
El propósito podría lograrse mediante
aranceles y
subsidios o mediante la creación de condiciones para que
las empresas adquieran poderes monopólicos y los empleen
para establecer, por un lado, precios internos por encima del
costo medio, y por otro, precios externos iguales al costo
marginal.
Así, la limitación de las importaciones le
permitió producir a los precios internacionales y
proyectarse a los mercados externos reduciendo aún
más los costos.
Infortunadamente, la experiencia de Japón que ha
sido estudiada profundamente, se ha tomado como un caso especial.
Tiene elevados costos que son compensados por otras condiciones
excepcionales de la política
económica, estos costos sólo se dan dentro del
modelo
convencional de equilibrio
general, lo cual no tiene ni parecido ni semejanza con la
realidad.
El éxito
de Japón radica precisamente en un intrincado montaje
institucional que ha permitido ampliar los mercados mediante la
limitación de las importaciones. La única
vía válida del desenvolvimiento industrial es la
invención científica y sus desarrollos.
Las economías de escala de la mayoría de
los productos industriales. Muchas de las dificultades y dudas
provienen de la falta de estudios que precisen el alcance de las
economías de escala y las posibilidades de compensar sus
efectos con políticas
de protección. El avance científico de las dos
primeras revoluciones industriales tiene un alto elemento
exógeno. Los descubrimientos fueron el resultado de la
vocación e inclinación de los investigadores por el
conocimiento. Si bien la segunda guerra
mundial se abre camino un avance científico más
orientado a lograr propósitos específicos. La
participación de Colombia en este tipo de productos es
mínima. Para el país la invención
científica continúa teniendo características exógenas.
El desarrollo industrial no deja de ser la lucha contra
la naturaleza. En las dos primeras revoluciones industriales los
inventos
surgieron en forma casi autónoma. Las empresas y los
tecnólogos se encontraban ante entornos desconocidos y
tenían que crear los medios para buscar su desarrollo en
la industrialización y sacar ventaja de sus mayores
posibilidades.
El camino más sensato parecería ser el de
partir de una información que muestre la forma como el
país ha respondido en los diferentes estados de avance
científico.
No hay mayor relación entre el desarrollo
industrial y las ventajas comparativas. En cambio, existe el
desarrollo industrial y las ventajas comparativas. En cambio
existe una fuerte interrelación entre el progreso
industrial y la iniciativa en el aprovechamiento de las
oportunidades de los descubrimientos
científicos.
Es fácil imaginar que las principales
restricciones para avanzar en cada etapa es el desconocimiento de
la tecnología y el tamaño de los mercados. La
primera con investigación tecnológica y la segunda
con protección, subsidios e integración regional.
El país tiene una posición de desventaja
con respecto a las naciones que se encontraban hace cien
años en una situación similar.
La investigación debe encaminarse a conocer los
procedimientos empleados en esas naciones y establecer las formas
de copiar y adaptar las realizaciones al país.
Sobre estas bases se podría construir una
política
de industrialización que permita ascender en la escalera
tecnológica para aumentar el conocimiento y aprovechar al
máximo los recursos
disponibles.
La mano de obra con menos de catorce años de
educación.
En términos generales, se hace necesario un marco de
protección que permita mantener precios diferentes para el
mercado interno y el externo, apoyo a la investigación
tecnológica y subsidios a la mano de obra.
Así convendría que el subsidio al empleo
se orientará hacia las empresas medianas y pequeñas
y que el apoyo a la investigación se realizara mediante
objetivos
específicos, como podría ser la producción
de bienes de capital y bienes químicos y la
iniciación de las actividades de microelectrónica y
física
cuántica.
La liberación de la economía colombiana se
adoptó dentro de la estrategia de las
reformas de libre mercado del consenso de Washington; en un
foro sobre el moderno
económico colombiano, el profesor Sachs califico la
discusión sobre el modelo de bizantina y señalo que
los esfuerzos se bebían orientar las políticas para
conseguirlo.
La práctica ha resultado totalmente inadecuada;
en principio, existen dos formas de armar un modeló
económico. Una consistiría en definir los objetivos
y sobre la base del diagnostico de las economías o, si se
quiere de los postulados básicos de su funcionamiento,
construir la organización económica detallada
para lograrlos. El otro procedimiento es
de crítica. La metodología consiste en indentificar sus
causadas, replantear los paradigmas que
sirvieron para justificarlas y sobre estas bases plantear los
elementos centrales del modelo económico. Así la
organización económica se configura por ensayo y
error.
La apertura se justifico dentro de las orientaciones de
la teoría económica clásica. La apertura les
concedió un claro predominio a las multiplicacionales, que
se sirvieron favorecidas por el acceso a los recursos externos y
ala estructura arancelaria que les concede una clara ventaja a
las importaciones de insumos con relación a los bienes
finales. De acuerdo con la teoría monetaria de la balanza
de pagos se atribuyó a problemas
monetarios y se procedió a corregirlo mediante
políticas restrictivas. La evolución de la economía colombiana
se repite en la mayoría de los países
latinoamericanos.
Las reformas de libre mercado se justificaron como una
manera de elevar el ahorro; es de
anotar que el ahorro empresarial descendió de 8% del PIB a
4%. Otro aspecto que tuvo influencia fueron las privatizaciones
de las empresas de servicios sociales. En general se encuentran
que las empresas públicas se entregaron a la tercera parte
de su costo de oportunidad. Por otra parte, las políticas
monetarias y fiscales restrictivas ocasionaron un
desaprovechamiento del ahorro.
La apertura, en el amplió sentido de la palabra
desvertebró los atributos que le daban poderes especiales
a la industria. El balance es claramente insatisfactorio. El
país no ha pasado el segundo de los cinco eslabones del
desarrollo industrial. En la actualidad se encuentra
especializado en industrias
tradicionales y en los productos de menor elaboración de
la industria pesada. Es el típico desarrollo industrial
guiado por los factores abundantes que no ofrece posibilidades
expansión en los mercados internacionales.
Los bajos precios de agricultura con la relación
a la industria y a toda la economía ha sido uno de los
principales limitantes del crecimiento
económico. El desmonte de la protección de la
protección una baja de los precios de los productos
comerciales y una entrada masiva de importaciones. El banco central
autónomo fue inspiración en la teoría de la
neutralidad del dinero de la Universidad de
Chicago.
Las reformas de libre mercado se justificaron como una
forma de elevar el crecimiento económico. El crecimiento
económico se aceleraría el salario real
aumentaría y la balanza de pagos tendería al
equilibrio. Ciertamente, la apertura comercial propició un
cambio de la estructura hacia las actividades de mayor ventaja
comparativa, pero estas actividades carecen de demanda nacional e
internacional. La economía quedó expuesta a un
déficit de la balanza de pagos. En los primeros
años de la apertura económica, la industria y la
agricultura crecieron por debajo del promedio histórico y
cerca del aumento de la población.
Tal vez los daños más protuberantes de las
reformas de libre mercado se dieron en la equidad. En las
teorías
se supone que la liberación lleva a un cambio de
estructura en que todo el mundo gana; por otra parte, la privatización de la
administración de los servicios sociales
aumentó la exclusión.
La descentralización administrativa, que se
concibió como el medio para ampliar los servicios de
salud y
educación y para extenderlos a toda la población,
se vio deformada por la preponderancia del mercado. La
asignación de recursos dejó de ser el mecanismo
para lograr los prepósitos de equidad de la
descentralización y se convirtió en un dictamen del
mercado. El papel del Estado es mucho más complejo y
requiere un mayor conocimiento del sistema
económico. Está claro que la libertad de
mercado no garantiza el crecimiento económico ni la
estabilidad ni la distribución del ingreso. Los tres
propósitos se hallan condicionados al a
intervención del estado
Tal vez el indicador más alarmante del
mantenimiento de la crisis es el
crédito. En el capítulo II se
muestra que la
cartera bancaria ha venido descendiendo en forma
sistemática; la libertas de mercado en sectores con grades
diferencias de poderes políticos y económicos y la
entrega de la propiedad y la
administración de los servicios
públicos amplían las desigualdades. Al final, se
configuro el modelo de desarrollo que produce bajas tasas de
crecimiento, no genera empleo y concentra los beneficios
reducidos.
La distribución del ingreso más de la
organización económica que del nivel de ingreso
per. capital. La inversión del modelo económico se
plantea en cinco áreas centrales. La política
comercial y cambiaria, la política de
industrialización, la regulación financiera, la
política macroeconómica y el banco central y la
política pública. La apertura económica fue
concebida como una forma de propiciar la expansión de las
actividades con ventajas comparativas.
El país produce manufacturas livianas y se
encuentra en un estado muy incipiente en la manufactura pesada;
las limitaciones para entrar en estas áreas son de
diversas índole en primer lugar se encuentra la
tecnología.
El sector agrícola no puede seguir
orientándose con criterios abstractos de eficiencia; la
agricultura no desempeña le papel de liderazgo que
cumplía al comienzo del siglo, cuando representaba una
alta proporción del PIB y gozaba de una amplia posibilidad
de expansión en las exportaciones. En
primer lugar, convendría recuperar el mercado interno,
restituyéndole la protección a los productos
comerciales. Por consiguiente es conveniente seguir una
estrategia audaz de subsidio y de concertación para operar
el mercado dominado por la confrontación; en síntesis
los mercados por subsidio no son gobernados por las ventajas
comparativas. El mayor potencial de desarrollo agrícola no
está en la especialización en los productos que
pueden elaborarse en las mejores condiciones, o a los menores
costos.
El sector financiero debe orientarse a complementarse la
política comercial e industrial para apoyar y designar el
nuevo desarrollo industrial y ampliación de las
oportunidades de empleo. En primer instancia, es necesario
reconocer que la política
monetaria afecta tanto a los precios como a la actividad
productiva y al empleo; en segundo lugar, es indispensable
conceder amplia discrecionalidad al banco de la Republica en
materia de
crédito; y por ultimo aspecto, convendría
establecer un tipo de cambio
fijo, en el cual la política monetaria establece un tipo
de cambio fijo revisable, en el cual la política monetaria
de tasas de
interés pierda su influencia, y no habría
ninguna dificultad para regular administrativamente las tasa de
interés para los sectores prioritarios.
Las reformas del sector social, es el eje central de una
política
social equitativa es la educación; sin
embargo, el sector educativo Adolece de las mismas deficiencias
del conjunto de la economía; sus beneficios recaen en los
grupos altos predominan la exclusión y la
segregación, el presupuesto no
puede generar superávit permanente para compensar las
deficiencias del ahorro interno, las cuales deben corregirse en
el sector financiero.
Los elementos centrales del modelo económico en
primera instancia es la apertura selectiva orientada a conciliar
el mercado interno con las exportaciones de alto valor
agregado, propiciar el desarrollo industrial y limitar la
capacidad de las multinacionales para adquirir los productos
intermedios en las casas matrices. En segundo lugar es la
reorientación del sector financiero para movilizar las
rentas a favor de la inversión y la producción
industrial, acelerar el ahorro por medios forzosos y se asegurar
que los esfuerzos de los grupos económicos se orienten a
favor de la inversión productiva y no de la
especulación. En tercer aspecto, es la adopción
de una política de industrialización en caminada a
crear las condiciones institucionales, tecnológicas y
económicas que le permitan al país ingresar en una
nueva fase de industrialización con la elaboración
de productos químicos y mecánicos. El cuarto punto
es la construcción de una estrategia
agrícola orientada a propiciar las actividades que tienen
las mayores posibilidades externas y pueden elaborados a los
menores costos de aranceles y subsidios; en quinto lugar se
encuentra la conformación de un marco de coordinación macroeconómico que
asegure la estabilidad cambiaria, controle los ciclos
económicos y concilie la estabilidad de precios, la
producción y el empleo. El sexto aspecto, es el
concerniente al avance del sistema educativo integrado que
reúna a los estudiantes de distintas clases
sociales en los mismos establecimientos e instituir una base
financiera que garantice los mismos recursos por estudiante tanto
para educación publica y privada; en antepenúltima
instancia, es en volver a un sistema de seguridad
social de reparto para la mayoría de la
población y sustituir el subsidio d la salud a la demanda
por otro a la oferta; y para
finalizar, es el relacionado con la creación de un nuevo
Estado que intervenga dentro de las reglas definidas en los
mercados en donde existen grandes desigualdades entre los
participantes, mantengan una estructura fiscal
altamente progresiva, impida el desperdicio público y
oriente los servicios básicos de salud y de
ecuación a favorecer a los grupos que más lo
requieren
Las reglas del modelo propio
La liberación de la economía colombiana se
adoptó dentro de la estrategia de las reformas de libre
mercado del consenso de Washington; en un foro sobre el moderno
económico colombiano, el profesor Sachs califico la
discusión sobre el modelo de bizantina y señalo que
los esfuerzos se bebían orientar las políticas para
conseguirlo.
La práctica ha resultado totalmente inadecuada;
en principio, existen dos formas de armar un modeló
económico. Una consistiría en definir los objetivos
y sobre la base del diagnostico de las economías o, si se
quiere de los postulados básicos de su funcionamiento,
construir la organización económica detallada para
lograrlos. El otro procedimiento es de crítica. La
metodología consiste en indentificar sus causadas,
replantear los paradigmas que sirvieron para justificarlas y
sobre estas bases plantear los elementos centrales del modelo
económico. Así la organización
económica se configura por ensayo y error.
La apertura se justifico dentro de las orientaciones de
la teoría económica clásica. La apertura les
concedió un claro predominio a las multiplicacionales, que
se sirvieron favorecidas por el acceso a los recursos externos y
ala estructura arancelaria que les concede una clara ventaja a
las importaciones de insumos con relación a los bienes
finales. De acuerdo con la teoría monetaria de la balanza
de pagos se atribuyó a problemas monetarios y se
procedió a corregirlo mediante políticas
restrictivas. La evolución de la economía
colombiana se repite en la mayoría de los países
latinoamericanos.
Las reformas de libre mercado se justificaron como una
manera de elevar el ahorro; es de anotar que el ahorro
empresarial descendió de 8% del PIB a 4%. Otro aspecto que
tuvo influencia fueron las privatizaciones de las empresas de
servicios sociales. En general se encuentran que las empresas
públicas se entregaron a la tercera parte de su costo de
oportunidad. Por otra parte, las políticas monetarias y
fiscales restrictivas ocasionaron un desaprovechamiento del
ahorro.
La apertura, en el amplió sentido de la palabra
desvertebró los atributos que le daban poderes especiales
a la industria. El balance es claramente insatisfactorio. El
país no ha pasado el segundo de los cinco eslabones del
desarrollo industrial. En la actualidad se encuentra
especializado en industrias tradicionales y en los productos de
menor elaboración de la industria pesada. Es el
típico desarrollo industrial guiado por los factores
abundantes que no ofrece posibilidades expansión en los
mercados internacionales.
Los bajos precios de agricultura con la relación
a la industria y a toda la economía ha sido uno de los
principales limitantes del crecimiento económico. El
desmonte de la protección de la protección una baja
de los precios de los productos comerciales y una entrada masiva
de importaciones. El banco central autónomo fue
inspiración en la teoría de la neutralidad del
dinero de la Universidad de Chicago.
Las reformas de libre mercado se justificaron como una
forma de elevar el crecimiento económico. El crecimiento
económico se aceleraría el salario real
aumentaría y la balanza de pagos tendería al
equilibrio. Ciertamente, la apertura comercial propició un
cambio de la estructura hacia las actividades de mayor ventaja
comparativa, pero estas actividades carecen de demanda nacional e
internacional. La economía quedó expuesta a un
déficit de la balanza de pagos. En los primeros
años de la apertura económica, la industria y la
agricultura crecieron por debajo del promedio histórico y
cerca del aumento de la población.
Tal vez los daños más protuberantes de las
reformas de libre mercado se dieron en la equidad. En las
teorías se supone que la liberación lleva a un
cambio de estructura en que todo el mundo gana; por otra parte,
la privatización de la administración de los
servicios sociales aumentó la exclusión.
La descentralización administrativa, que se
concibió como el medio para ampliar los servicios de salud
y educación y para extenderlos a toda la población,
se vio deformada por la preponderancia del mercado. La
asignación de recursos dejó de ser el mecanismo
para lograr los prepósitos de equidad de la
descentralización y se convirtió en un dictamen del
mercado. El papel del Estado es mucho más complejo y
requiere un mayor conocimiento del sistema económico.
Está claro que la libertad de mercado no garantiza el
crecimiento económico ni la estabilidad ni la
distribución del ingreso. Los tres propósitos se
hallan condicionados al a intervención del
estado
Tal vez el indicador más alarmante del
mantenimiento de la crisis es el crédito. En el
capítulo II se muestra que la cartera bancaria ha venido
descendiendo en forma sistemática; la libertas de mercado
en sectores con grades diferencias de poderes políticos y
económicos y la entrega de la propiedad y la
administración de los servicios públicos
amplían las desigualdades. Al final, se configuro el
modelo de desarrollo que produce bajas tasas de crecimiento, no
genera empleo y concentra los beneficios reducidos.
La distribución del ingreso más de la
organización económica que del nivel de ingreso
per. capital. La inversión del modelo económico se
plantea en cinco áreas centrales. La política
comercial y cambiaria, la política de
industrialización, la regulación financiera, la
política macroeconómica y el banco central y la
política pública. La apertura económica fue
concebida como una forma de propiciar la expansión de las
actividades con ventajas comparativas.
El país produce manufacturas livianas y se
encuentra en un estado muy incipiente en la manufactura pesada;
las limitaciones para entrar en estas áreas son de
diversas índole en primer lugar se encuentra la
tecnología.
El sector agrícola no puede seguir
orientándose con criterios abstractos de eficiencia; la
agricultura no desempeña le papel de liderazgo que
cumplía al comienzo del siglo, cuando representaba una
alta proporción del PIB y gozaba de una amplia posibilidad
de expansión en las exportaciones. En primer lugar,
convendría recuperar el mercado interno,
restituyéndole la protección a los productos
comerciales. Por consiguiente es conveniente seguir una
estrategia audaz de subsidio y de concertación para operar
el mercado dominado por la confrontación; en
síntesis los mercados por subsidio no son gobernados por
las ventajas comparativas. El mayor potencial de desarrollo
agrícola no está en la especialización en
los productos que pueden elaborarse en las mejores condiciones, o
a los menores costos.
El sector financiero debe orientarse a complementarse la
política comercial e industrial para apoyar y designar el
nuevo desarrollo industrial y ampliación de las
oportunidades de empleo. En primer instancia, es necesario
reconocer que la política monetaria afecta tanto a los
precios como a la actividad productiva y al empleo; en segundo
lugar, es indispensable conceder amplia discrecionalidad al banco
de la Republica en materia de crédito; y por ultimo
aspecto, convendría establecer un tipo de cambio fijo, en
el cual la política monetaria establece un tipo de cambio
fijo revisable, en el cual la política monetaria de tasas
de interés
pierda su influencia, y no habría ninguna dificultad para
regular administrativamente las tasa de interés para los
sectores prioritarios.
Las reformas del sector social, es el eje central de una
política social equitativa es la educación; sin
embargo, el sector educativo Adolece de las mismas deficiencias
del conjunto de la economía; sus beneficios recaen en los
grupos altos predominan la exclusión y la
segregación, el presupuesto no puede generar
superávit permanente para compensar las deficiencias del
ahorro interno, las cuales deben corregirse en el sector
financiero.
Los elementos centrales del modelo económico en
primera instancia es la apertura selectiva orientada a conciliar
el mercado interno con las exportaciones de alto valor agregado,
propiciar el desarrollo industrial y limitar la capacidad de las
multinacionales para adquirir los productos intermedios en las
casas matrices. En segundo lugar es la reorientación del
sector financiero para movilizar las rentas a favor de la
inversión y la producción industrial, acelerar el
ahorro por medios forzosos y se asegurar que los esfuerzos de los
grupos económicos se orienten a favor de la
inversión productiva y no de la especulación. En
tercer aspecto, es la adopción de una política de
industrialización en caminada a crear las condiciones
institucionales, tecnológicas y económicas que le
permitan al país ingresar en una nueva fase de
industrialización con la elaboración de productos
químicos y mecánicos. El cuarto punto es la
construcción de una estrategia agrícola orientada a
propiciar las actividades que tienen las mayores posibilidades
externas y pueden elaborados a los menores costos de aranceles y
subsidios; en quinto lugar se encuentra la conformación de
un marco de coordinación macroeconómico que asegure
la estabilidad cambiaria, controle los ciclos económicos y
concilie la estabilidad de precios, la producción y el
empleo. El sexto aspecto, es el concerniente al avance del
sistema educativo integrado que reúna a los estudiantes de
distintas clases sociales en los mismos establecimientos e
instituir una base financiera que garantice los mismos recursos
por estudiante tanto para educación publica y privada; en
antepenúltima instancia, es en volver a un sistema de
seguridad social
de reparto para la mayoría de la población y
sustituir el subsidio d la salud a la demanda por otro a la
oferta; y para finalizar, es el relacionado con la
creación de un nuevo Estado que intervenga dentro de las
reglas definidas en los mercados en donde existen grandes
desigualdades entre los participantes, mantengan una estructura
fiscal altamente progresiva, impida el desperdicio público
y oriente los servicios básicos de salud y de
ecuación a favorecer a los grupos que más lo
requieren
CAROLINA GAITÁN FONSECA