Reflexiones epistemológicas sobre psicología y el concepto de ciencia
El estatus de la psicología como
ciencia es un tema de debate frecuente. Una crítica
común sostiene que la psicología no ha estado
presente lo suficiente como para desarrollar un paradigma, un
sistema establecido de ideas aceptadas por la mayoría de
los profesionales, y que por ello le falta una de las
características esenciales de la ciencia. Aún
más, las raíces expansivas de la psicología
en otros campos, incluyendo disciplinas no científicas
como la filosofía, la hacen más difícil de
categorizar como una ciencia tradicional. "La psicología,
en tanto disciplina particular, carece de un objeto natural y
propio, unánime o por lo menos mayoritariamente aceptado"
(Zaldívar, 2006, pp. 87).
"El problema, radica en el propio concepto
de ciencia y en la pretensión de hacer del conocimiento
definido como "científico" el único conocimiento
válido y digno de ser considerado como tal"
(Zaldívar, 2006, pp. 88). Esto es lo que ha empujado a la
Psicología a intentar buscar una forma de realizar su
actividad dentro de los parámetros aceptados como
científicos, como es el Positivismo. En este contexto, el
aspecto cultural e histórico, que no podemos negar, ha
perturbado a la psicología, y ha sembrado
confusión. El concepto de ciencia es, en sí mismo,
problemático y su discusión y análisis en
profundidad es materia de la filosofía de la ciencia o
epistemología (Bunge, 1981, Vol.1). Básicamente, la
ciencia, es una forma de obtener el conocimiento, que se
convierte en científico y pertenece a la ciencia, cuando
se extrae de la realidad con métodos y herramientas
precisas, integrándose en un sistema de conceptos,
teorías y leyes: un sistema ordenado de proposiciones
derivadas de principios.Las principales escuelas o corrientes de
la psicología contemporánea expresan diferentes
posturas epistemológicas. Unos estudian la "conducta".
Para otros lo fundamental es el "inconsciente". Otro grupo
sostiene que la "conciencia" es lo esencial, en tanto hay quienes
hablan de la "experiencia existencial", o los "procesos de
intercambio con el medio", etcétera (Zaldívar,
2006, pp. 90).
Teniendo en cuenta lo anterior, pudiera
entenderse una epistemología psicológica en dos
sentidos: 1. Como una reflexión sobre el conocimiento que
adquiere el psicólogo sobre un objeto, y 2. Como una
reflexión sobre el conocimiento que adquiere el
psicólogo sobre un sujeto capaz de representarse los
objetos. En el primer sentido la epistemología se limita a
describir hechos, mientras que en el segundo da un paso
más: busca interpretarlos. La epistemología debe
centrarse en el estudio de los métodos que usa la
psicología, y en la forma en la cual intenta explicar las
conductas.Por otro lado, es importante señalar, que
algunas características de la psicología,
especialmente su influencia en las ciencias establecidas y su
apoyo en el método científico, a menudo son citadas
como ejemplos de por qué la psicología
debería ser considerada una ciencia, pues esta
última implica el uso de herramientas tales como la
observación, la descripción y la
investigación experimental, para reunir y organizar
información. Precisamente una característica
central de cualquier ciencia es que se basa en el método
científico: Usar la observación, la
experimentación y el análisis para apoyar las
teorías, es un proceso que puede ser verificado
independientemente por otros. La psicología se basa en los
datos para llegar a conclusiones sobre las respuestas animales y
humanas a situaciones y estímulos. Para los
psicólogos los factores inobservables tienen consecuencias
observables, por ejemplo: los experimentos pueden evaluar la
extraversión humana midiendo el grado en el que se
comportan de una manera extrovertida.La "psicología
científica", deberá justificarse en la
aplicación y respeto del método científico,
por lo que a la hora de definir el objeto de estudio (tipo de
fenómenos o ámbito) debe emplear los procedimientos
y exigencias del "método científico"
(Zaldívar, 2006, pp. 90).
El concepto positivista de la
ciencia
"A
principios de la Revolución Industrial, en la que nuevos
contenidos e instituciones comenzaron a conformarse, aparece la
ciencia en su sentido moderno. Es a finales del siglo XIX y
comienzos del XX, cuando aparece el Positivismo, en un terreno
abonado por los cambios tecnológicos de la
Revolución Industrial, y el decaimiento del sentido
metafísico y religioso del conocimiento" (Fuchs, 2003). La
idea general del debate con respecto al Positivismo ha sido que
éste no admite como válido científicamente
otros conocimientos, sino aquellos que proceden de la
experiencia. Sostiene que la ciencia debe utilizar las
teorías como instrumentos para predecir fenómenos
observables y renunciando a buscar explicaciones.
El
hecho es la única realidad científica y la
experiencia y la inducción los métodos exclusivos
de la ciencia. Privilegia el método experimental y
estadístico como elemento que garantiza la
captación de la realidad de una forma pura, con
exclusión de la participación de la subjetividad
del científico. Solo se considera la posibilidad de
estudiar científicamente los hechos, los fenómenos,
el dato experimentable, lo observable, lo verificable, en un
intento de definición de la manera más objetiva
posible, independientemente de la subjetividad de los
investigadores, de los orígenes y condiciones
psico-sociales, utilizando en todo momento la verificación
en la experiencia y en la observación de los
fenómenos intentando explicar la realidad formulando
leyes, estableciendo conexiones que sean generalizables entre
variables, utilizando el método
hipotético-deductivo. "Como rasgos más distintivos
del Positivismo, se han destacado el supuesto de la racionalidad,
el intento de medir todo, el dato como máxima
expresión de verdad científica, la
experimentación como único juez, con una clara
orientación pragmática" (Fuchs, 2003). El
Positivismo no incluyó a la psicología como una
ciencia, como hizo con la biología o la sociología.
Esto llama la atención porque por aquel entonces ya
había muchos intentos por tratar a la psicología
como ciencia, o sea, estudiar los fenómenos mentales
empíricamente y experimentalmente, como lo hace toda
ciencia.Una de las características, muy criticable del
Positivismo, es el hecho de negar de contenido social los objetos
investigados, siguiendo la guía de la racionalidad
científica para la que no existe la particularidad y lo
concreto, en una búsqueda de explicaciones generalistas.
No se ocupa de las emociones, las motivaciones o la conciencia,
con un peso eminentemente subjetivo y no observable, siendo
eliminadas como objeto de estudio.
La psicología como
ciencia
La
cuestión general de si la psicología es una ciencia
o no puede ser respondida por la afirmativa o por la negativa.
Dada la alta dispersión
teórico-epistemológica que la disciplina presenta,
solo cabe analizar cada una de las orientaciones teóricas
que adoptan para sí mismas el nombre de
"psicología", aunque se identifiquen con otras expresiones
(conductismo, psicoanálisis, etc.) (Zaldívar, 2006,
pp. 107). Como ejemplo del Positivismo, se ha mencionado a la
psicología objetiva de la reflexología rusa de
Pavlov y Bejterev, Throndike con la ley del efecto y su
teoría de estímulo-respuesta, al Conductismo. "Un
conductista dirá: "aquello de lo que no puedo dar cuenta
en términos empíricamente observables
(científicamente) no forma parte de mi indagación
como científico" (Zaldívar, 2006, pp.
108).
A modo
de ejemplo, Watson afirmó la necesidad de desprenderse por
completo de conceptos como conciencia y mente por carecer de
sentido en términos de los requisitos del método
científico y sustituirlos por otros que sí los
cumplieran como es el de la conducta; decía: "Si la
psicología quiere convertirse en ciencia debe seguir el
ejemplo de las ciencias físicas, esto es, hacerse
materialista, mecanicista, determinista y objetiva" (Montgomery,
2007). Esta forma de estudiar la conducta niega los factores
realmente importantes en la comprensión del comportamiento
humano, vaciando el conocimiento de reflexión y
convirtiéndolo meramente en una disciplina descriptiva con
el único fin de poder ser aplicada.Desde estos sectores,
típicamente positivistas y experimentalistas se niega el
carácter de ciencia al Psicoanálisis y sus
variantes, la psicología
fenomenológico-existencial, la comprensiva, la humanista y
la transpersonal. Todo lo que no responda en forma estricta a los
parámetros de cientificidad del Positivismo, se califica
genéricamente, desde esta particular perspectiva, como
"especulativo", "apriorístico", "no empírico" y "no
verificable".
Conclusiones
"La
posibilidad de la psicología como ciencia, en definitiva,
dependerá manifiestamente del concepto de "ciencia" que se
sustente; vale decir, de la epistemología de base
subyacente a cada uno de los enfoques teóricos que
comprenden este campo del conocimiento" (Zaldívar, 2006,
pp. 119).Considerando lo expuesto anteriormente, desde mi punto
de vista considero a la psicología aún situada en
la construcción de un cuerpo teórico y
práctico. Su objeto de estudio es complicado precisamente
por la cantidad de variables que intervienen; sin embargo, ya
existen teorías y modelos que, en situaciones
particulares, describen y predicen, algunos de manera
determinista, el modo de actuar de los sujetos.
Cumple
todas las características. Existen leyes, se conoce el
funcionamiento de la psique, se desarrollan técnicas y
herramientas y se produce conocimiento nuevo constantemente. Si,
también se habla de leyes probabilísticas pero que
se han replicado sin problemas en diferentes ocasiones,
¿Deja de ser una ley? ¿Deja de ser ciencia por
hablar en términos de probabilidad?, pienso que no, pues,
en todas las ciencias se hace y se crean hipótesis para su
posterior confirmación. El conocimiento no está en
la mente de los individuos, ni las palabras son el reflejo ni de
la mente ni de una naturaleza preexistente. La fuente principal
de las palabras que utilizamos sobre el mundo radica en la
relación social. El conocimiento no es el producto de
mentes individuales, sino del intercambio social; es el fruto de
la interdependencia.Así, la realidad estaría
construida en la interacción significativa que realizan
los seres humanos y, por ello, se aleja del Positivismo que se
limita a emplear, como he comentado anteriormente, una
metodología basada en la observación,
experimentación, contrastación, etc.
Esta
realidad construida, de forma dinámica, es internalizada
por los individuos a través de la socialización.
Introduce el factor histórico, el carácter
interpretativo del ser humano y el lenguaje como potente
constructor de la realidad, y las categorías
sujeto/objeto, no como dos entidades separadas, pues no existen
propiamente con independencia de la otra.
Bibliografía
1.
Bunge, M.: "La psicología de la conducta y el fomento de
la salud integral comunitaria. Nuevos paradigmas", 1981, Vol.1
(1), pp. 120 -135.
2.
Eysenck, Michael W: "Psicología: manual para estudiantes";
¿La psicología es una ciencia?; pp.
760-777
4.
Montgomery, W.: "Aportes conceptuales y metodológicos en
Psicología Aplicada". México D.F.: 2007, pp.
37-53.
5.
Zaldívar, Dionisio F.: "Temas de Debate
Científico"; Editorial Félix Varela,
2006.
Autor:
Lic. Glenda Riverón
Sarduy