- Las barreras en
el proceso de comunicación - Elementos
necesarios para el intercambio informativo - La
comunicación humana - ¿Cómo
detectar las interferencias en la
comunicación? - Las claves de
una buena comunicación - Cuestionario
- Bibliografía
Las barreras en el proceso de
comunicación
Comunicarse significa según su raíz latina
comunicare hacer en comunión, dar a conocer, estar unido a.
Por eso hay una gran diferencia entre ser eficaz en la
comunicación, es decir lograr que los demás comprendan
un mensaje, y querer convertirse en un gran orador.
Hay muchos libros y cintas de video que prometen
convertir a personas con problemas de expresión oral en
excelentes comunicadores capaces de cautivar y convencer
permanentemente a los demás. Sin embargo, esto no es verdad,
porque cualquier técnica de oratoria desprovista de un
acercamiento entre orador y público, además de ser
estéril, aburre a sobremanera.
La mayoría de la gente desea ver realizados sus
proyectos, transmitir y obtener información, alcanzar
acuerdos, tomar decisiones acertadas y mejorar sus
relaciones.
Por eso conceptos claves como claridad, brevedad y
superación de obstáculos constituyen los tres ejes
fundamentales de este libro.
La verdadera comunicación no comienza hablando si
no escuchando. La principal condición del buen comunicador
es saber escuchar.
La verdadera comunicación no está dada por un
emisor que habla receptor que escucha, si no por dos o más
seres o comunidades humanas que intercambian y comparten
experiencias, conocimientos, sentimientos (aunque sea a distancia
a través de medios o canales artificiales).
Es a través de ese proceso de intercambio como los
seres humanos establecen relaciones entre sí y pasan de la
existencia individual aislada a la asistencia social
comunitaria.
Las Barreras en la Comunicación, o simplemente
interferencias, son obstáculos que pueden llegar a
distorsionar, desvirtuar o impedir parcial o totalmente el
mensaje, y se sitúan entre el emisor y el receptor, cuando
se gesta el proceso comunicativo.
Para una mejor comprensión hemos agrupado las
diversas barreras que obstaculizan la comunicación en los
siguientes grupos:
Barreras semánticas
Tienen que ver con el significado de las palabras;
cuando no precisamos su sentido, éstas se prestan a
diferentes interpretaciones y así el receptor no interpreta
lo que dijo el emisor, sino lo que su contexto cultural le
indica.
Si al hablar o escribir empleamos una palabra con una
acepción que no corresponda, se produce una barrera
semántica. Esto quiere decir: cambio de
significación.
Barreras fisiológicas
Impiden emitir o recibir con claridad y precisión
un mensaje, debido a los defectos fisiológicos del emisor o
del receptor. Tales defectos pueden afectar cualquiera de los
sentidos. Ya sea en forma total o parcial.
Barreras psicológicas
Representan la situación psicológica
particular del emisor o receptor de la información,
ocasionada a veces por agrado o rechazo hacia el receptor o
emisor, según sea el caso, o incluso al mensaje que se
comunica; la deficiencia o deformación puede deberse
también a estados emocionales (temor, tristeza,
alegría) o a prejuicios para aprobar o desaprobar lo que se
le dice, no lea lo que está escrito, no entienda o no crea
lo que oye o lee.
Barreras físicas
Son las circunstancias que se presentan en el medio
ambiente y que impiden una buena comunicación ejemplo:
ruidos, iluminación, distancia, falla o deficiencia de los
medios que se utilizan para transmitir un mensaje: teléfono,
micrófono, grabadora, televisión, etc.
Barreras administrativas
Son las que se originan en estructuras organizacionales
inadecuadas, mala planeación y deficiente operación de
los canales. Éstas pueden ser por la falta de
planeación, presupuestos no aclarados, distorsiones
semánticas, expresión deficiente, pérdida en la
transmisión y mala retención, escuchar mal y
evaluación prematura, comunicación impersonal,
desconfianza, amenaza y temor; periodo insuficiente para
ajustarse al cambio; o sobrecarga de información.
Elementos necesarios para el
intercambio informativo
Los elementos necesarios para que se desarrolle la
comunicación, que pueden convertirse en barreras que impidan
que esta se lleve a cabo, son los siguientes:
Un emisor
Alguien que elabore y transmita una determinada
información. El emisor es aquel que envía un mensaje en
un código apropiado para ser adecuadamente recibido y
comprendido por el receptor. Puede ser un individuo, un grupo
social, etc.
Un receptor
El Receptor es aquella persona a quien va dirigida la
comunicación. El Receptor realiza un proceso inverso al del
emisor, ya que descifra e interpreta los signos utilizados por el
emisor; es decir, descodifica el mensaje que recibe del
Emisor.
Un mensaje o contenido informativo
El mensaje es, en el sentido más general, el objeto
de la comunicación. Está definido como la
información que el emisor envía al receptor a
través de un canal de comunicación o medio de
comunicación determinado (como el habla o la escritura, por
ejemplo). El mensaje es una parte fundamental en el proceso del
intercambio de información.
Un referente
Es la realidad a la que se refiere el mensaje, es decir,
es la realidad que es percibida gracias al mensaje.
Situación en la que se desarrolla la
comunicación.
Un código, verbal y no verbal
El Código es el conjunto de rasgos que tiene el
Mensaje para que este pueda ser entendido adecuadamente tanto por
el Emisor como por el Receptor.
El Código asigna a cada símbolo (tanto
fonético como visual, eléctrico, etc.) una
correspondencia con una determinada idea.
Un canal físico
El Canal es el medio por el cual se transmiten las
señales que portan la información (Mensaje) que
pretenden intercambiar Emisor y Receptor. Puede ser visual,
táctil o auditivo.
La comunicación
humana
Para que cada uno de estos elementos se interrelacionen
satisfactoriamente es necesario reducir filtros o interferencias
entre el emisor y el receptor. De hecho, entre muchas
posibilidades, esos filtros pueden deberse a ciertos malos
hábitos de comunicación, tanto del que habla (emisor)
como del que escucha (receptor), o a que los mensajes emitidos,
ya sean verbales o no verbales resulten ambiguos.
Estas interferencias, fomentadas tanto consciente como
inconscientemente, son las que hacen que una persona termine
reprochándose su actitud, aislándose, o lo que es peor,
lastimada psicológica y emocionalmente.
Asimismo, es habitual que la gente no se comunique con
eficacia porque solo sabe usar el lenguaje indirecto y no expresa
sus ideas directamente.
En este sentido, una gran mayoría de personas
prefieren decir:
"Es tarde, deberíamos dormir"
En lugar de decir:
"No quiero seguir con esta
discusión"
Acumulando así tensión interior y causando
malentendidos.
Mediante el uso indiscriminado de lenguaje indirecto se
cree erróneamente que es posible aplacar situaciones
conflictivas o mantener a raya la inseguridad, sin darse cuenta
que los metamensajes (como lo gestos o la
expresión del rostro) que se transmiten mediante otros
canales muestran la verdadera intención.
Sin duda, estos hábitos negativos son
inconvenientes que alejan a la persona de sus objetivos
verdaderos que, en última instancia, suele ser escuchado,
apreciado y comprendido por lo que realmente es.
a. Cuando el lenguaje del emisor es
emocional
Cuando una persona transmite un mensaje diferente del
que realmente desea, seguramente se ha dejado llevar por un
lenguaje más emocional y menos objetivo.
Por ejemplo, una pareja puede discutir por horas a
qué lugar ir de vacaciones pero, mientras sus opiniones
divergentes estén fundamentadas en reproches sobre quien lo
eligió el año anterior y lo mal que lo pasaron, no
llegarán a ninguna solución y si tendrán muchos
argumentos para desviar el diálogo sincero, y culpar y
juzgar al otro.
Y lo mismo ocurre en una entrevista de trabajo donde en
vez de responder claramente a la pregunta.
¿Qué espera usted de este puesto de
trabajo?
Se dan extensas ideas que argumentan diferente ideas que
no tienen demasiado sentido entre sí (como la posibilidad de
enviar a los hijos a un mejor colegio, cambiar la vivienda,
etc.).
Cuando se establece un dialogo subjetivo y emocional
resulta muy difícil salir ilesos, ya que lo que sigue a una
respuesta emocional es una situación de ataque y defensa, o
la dolorosa situación de sentirse estafado e incomprendido y
en consecuencia más vulnerable.
En ocasiones utilizar palabras como:
considero creo
quiero deseo
En lugar de:
debería
Y luego dar explicaciones neutrales, como:
sería adecuado para mí,
Anima al oyente o a los oyentes a mostrar una mejor
predisposición. Sin embargo, no siempre este tipo de
recursos es suficiente, pues para ser objetivos y precisos hay
que evitar también las valoraciones o juicio personales que
provoquen roces innecesarios.
b. Controlar las propias
expectativas
Si las expectativas sobre cómo debe ser una
exposición ideal (una conversación, una entrevista, una
conferencia, etc.) no se ajustan a la distancia que hay entre el
orador y el público, en lugar de acercar a los
interlocutores, los alejará. Se escucha mal, se responde
según las ideas previas y no es posible hacer una
valoración rigurosa de los hechos.
La manera de transformar la comunicación en una
experiencia positiva consiste en estar atentos a lo que ocurre en
el presente, en el aquí y el ahora, lo que implica apartar
del campo de atención todo lo que no sea comprender lo que
el otro dice. Esto, obviamente, no significa que siempre se debe
estar de acuerdo con la otra persona, ni que se deje de actuar de
forma natural y auténtica. Se trata, pues, de mantener una
actitud se refleje en aquello que se dice mediante frases
como:
"A ver si he comprendido bien"
"Me agradaría puntualizar"
En algunos casos, cuando se establece un diálogo
con alguien que ostenta mayor poder, resulta eficaz hacer al
principio algunas concesiones hasta que la persona sienta que es
escuchada y tomada en serio. Tampoco se trata de hacer alarde de
sumisión repitiendo continuamente:
"Yo le comprendo"
Sino de ponerse en lugar de la experiencia de otro,
indagando discretamente, intentando obtener más detalles
sobre lo que desea decir sin dejar que las propias opiniones
cierran la puerta a otros puntos de vista.
c. Persuadir es mejor que
defenderse
Cuando se está en presencia de una persona
intolerante, lo mejor es no mostrarse abiertamente en desacuerdo
con ella, porque lo más probable es que se enfade
más.
En vez de ponerse a la defensiva ante la intransigencia,
es recomendable utilizar afirmaciones tales como:
"Creo que"
"Tal vez sería conveniente"
"Encuentro que"
"Posiblemente una opción sería"
Ya que son más persuasiva y tienden a despertar
cierta empatía, lo que permitirá encontrar nuevas
fórmulas para llegar a un acuerdo.
¿Cómo detectar las
interferencias en la comunicación?
Cuando hay barreras en la comunicación los mensajes
resultan difíciles de comprender.
A veces ocurre que estas interferencias son sutiles y no
tienen que ver con el tono de voz ni con lo que se dice mediante
el lenguaje verbal o no verbal, sino con la forma en que se
expresan.
Así lo que una persona calla, la frecuencia de sus
silencios y las frases inconclusas son indicios que también
hay que tener en cuenta. En caso de detectar barreras de este
tipo, sólo existen dos caminos posibles:
Intentar clarificar el mensaje mediante preguntas
directas, o bien.Llevar la conversación al terreno propio, en
caso de que existan barreras insuperables.
Cuando el ataque de un jefe o un colega es directo, se
le puede decir:
"Creo que te he causado una mala impresión,
pero…"
Demostrándole que hay una verdadera intención
de respetar sus sentimientos. Con este método no hay duda de
que habrá muchas posibilidades de que los argumentos de la
persona intolerante caigan por su propio peso.
a. Otras interferencias emocionales que
impiden una buena comunicación
Alguien dijo que las mejores metas son las que conllevan
algún desafío.
Conocer cuáles son las interferencias que,
consciente o inconscientemente, se usan cuando existe una mala
comunicación con los demás puede servir para recuperar
la natural capacidad de expresión y permitir sentirse
más libre y mejor con uno mismo.
Defenderse sin que nadie haya
atacado
La mayoría de las personas dan golpes anticipados
cuando tienen miedo de no ser aceptado, creen que eso les
permitirá mantener una buena imagen, sin embargo, lo
único que logran es que el interlocutor se ponga a la
defensiva. Un ejemplo muy ilustrativo es cuando alguien dice en
una entrevista de trabajo: "Seguramente usted se decidirá
por otro candidato después de las respuestas que le he dado,
pero a mí me da igual porque yo soy así"
Contraatacar
En este caso la persona en vez de indagar cómo se
siente su interlocutor, responde a la crítica, la
ironía o las amenazas actuando del mismo modo. Por ejemplo,
cuando en una conversación entre vecinos el atacado
responde: "Yo seré un inepto pero usted es un
ignorante".
Buscar culpables
Se trata de inculpar a otra persona de los propios
errores. Por ejemplo, en una reunión de trabajo se ofrece
una excusa como esta: "No he traído mi proyecto porque el
responsable de la sección tal no me ha enviado a tiempo el
materia que necesitaba para acabarlo"
Desempeñar el papel de
víctima
Como si fuera un espectador más, el
que se desempeña este papel se proclama como una
víctima inocente.
Humillar al
interlocutor
Ocurre cuando se utilizan palabras que
generalizan, por ejemplo: "siempre" o "nunca", que no dejan
ninguna oportunidad a la persona para rehabilitarse: "Siempre
eres el mismo irresponsable".
Exigir
Nunca se pide lo que se desea de un modo
directo. Los demás están obligados a saber en todo
momento lo que quiere la persona exigente.
Generalizar
Consiste en ignorar que quien está es
una persona diferente, con sentimientos y emociones individuales,
y hacer evaluaciones según parámetros tradicionales y
preestablecidos.
Aconsejar
En vez de escuchar, se tiene a interrumpir
para dar consejos y opiniones sin tener en cuenta al
interlocutor.
Etiquetar
Se cae en el vicio de juzgar para no
reconocer los errores propios.
Desviar el tema
Se elude la situación presente
mediante reproches sobre ofensas pasadas, o bien sacando
constantemente asuntos colaterales que no vienen al
caso.
Culpabilizar al
otro
Se intenta sugerir al interlocutor que es
él quien tiene un serio problema para comprender lo que se
le dice.
Querer tener la
razón
Siempre son los demás los que
están equivocados y se intenta imponer los propios criterios
por la fuerza de las palabras o el cargo que se ocupa.
Anticiparse
Decir frases como "te he oído a la
primera" o "sé lo que vas a decir" para ganar tiempo y
evitar que el diálogo avance.
Las claves de una buena
comunicación
Sin duda para lograr una buena comunicación se
necesita entrenamiento, buena predisposición, deseos de
comunicarse y, por supuesto, paciencia para no intentar obtener
resultados rápidos a riesgo de exponerse sin estar
preparado.
Por esta razón, como de lo que se trata es de
adquirir nuevos hábitos positivos, lo ideal es practicar
alguno de los aspectos que se describen a continuación y,
una vez que se esté familiarizado con él, pasar a
otro.
Escuchar activamente
Significa comprender cuáles son los sentimientos y
los pensamientos que el interlocutor desea transmitir
Reconocer lo verdadero
Se trata de encontrar un punto de razón o de
interés en lo que la otra persona dice. Cuando se tienen
interese comunes, la comunicación avanza con menos
interferencias.
Demostrar empatía
Equivale a tratar de ponerse en el lugar del otro para
llegar a comprender lo que está sintiendo. La empatía
se puede lograr cuando se escucha conjuntamente tanto el lenguaje
verbal como no verbal del interlocutor.
Mantener un diálogo asertivo
Mediante afirmaciones positivas del tipo "parece que lo
que estás diciendo es que…" se puede averiguar hasta
donde se comprendido el mensaje y comprobar, al mismo tiempo, si
el otro ha dicho exactamente lo que deseaba decir.
Indagar
Consiste en valerse de preguntas discretas para saber
más acerca de cómo piensa y siente el otro. Por
ejemplo, se le puede pedir que se explaye en n tema determinado o
que dé detalles de aquella que le preocupa.
Utilizar técnicas de expresión
personal
Los sentimientos, tanto positivos como negativos, se
expresan con afirmaciones como: "Me siento" y no "Tú eres,
dices, etc.". Del mismo modo, es importante resaltar aspectos
positivos de la otra persona, aunque se esté en medio de una
acalorada discusión. El otro captará que es tenido en
cuenta aunque sea en el fragor de una disputa.
CUESTIONARIO
1) ¿Qué son las barreras en el
proceso de comunicación?
Las Barreras en la Comunicación, o simplemente
interferencias, son obstáculos que pueden llegar a
distorsionar, desvirtuar o impedir parcial o totalmente el
mensaje, y se sitúan entre el emisor y el receptor, cuando
se gesta el proceso comunicativo.
Las barreras que obstaculizan la comunicación
pueden ser: semánticas, fisiológicas,
psicológicas, físicas y administrativas
2) ¿Cuáles son los elementos
necesarios para el intercambio informativo?
Los elementos necesarios para que se desarrolle la
comunicación, son los siguientes: emisor, receptor, mensaje,
referente, código y un canal físico
3) ¿Por qué es mejor persuadir antes
que defenderse?
Cuando se está en presencia de una persona
intolerante, lo mejor es no mostrarse abiertamente en desacuerdo
con ella, porque lo más probable es que se enfade
más.
4) ¿Cuáles son las interferencias
emocionales que impiden una buena
comunicación?
Las interferencias emocionales que impiden una buena
comunicación son: defenderse sin que nadie haya atacado,
contraatacar, buscar culpables, desempeñar el papel de
víctima, humillar al interlocutor, exigir, generalizar,
aconsejar, etiquetar, desviar el tema, culpabilizar al otro,
querer tener la razón, anticiparse.
5) ¿Cuáles son las claves de una
buena comunicación?
Las claves para una buena comunicación son las
siguientes: escuchar activamente, reconocer lo verdadero,
demostrar empatía, mantener un diálogo asertivo,
indagar, utilizar técnicas de expresión
personal.
BIBLIOGRAFÍA
http://www.retoricas.com/2011/09/elementos-del-sistema-de-comunicacion.html
http://www.retoricas.com/2009/05/barreras-la-comunicacion.html
http://comunicacionoralyescritatramoi.blogspot.com/p/la-comunicacion-las-barreras-de-la.html
http://www.academica.mx/blogs/barreras-la-comunicaci%C3%B3n
http://www.ecured.cu/index.php/Barrera_de_la_Comunicaci%C3%B3n
Autores:
MORALES POZO EVELIN
ESTEFANÍAPÉREZ CERVANTES KLEIRY
NAIRPINCAY MUÑIZ KATHERINE
LILIANATUPIZA MOSQUERA JESSICA
GABRIELAHUACÓN RAMÍREZ LUIS
ALEJANDROUNIVERSIDAD DE
GUAYAQUILFACULTAD DE JURISPRUDENCIA Y
CIENCIAS SOCIALES Y POLITICASESCUELA DE DERECHO
SEGUNDO SEMESTRE PARALELO A
MATUTINO
PERIODO 2013 – 2014