Introducción
El pase
Selección y aspectos técnicos
Importancia
Características comunes de los
pases
Pase entre jugadores estáticos y en movimiento
Técnica de los pases
•Pase de pecho con dos manos
•Pase picado con dos manos
•Pase de pecho con una mano
•Pase picado con una mano
•Pase de entrega
•Pase por encima de la cabeza
•Pase por detrás de la espalda
•Pase después del bote
•Pase de béisbol
El tiro
Su importancia. "Selección de tiro"
Factores comunes a todos los tiros
Clases de tiro:
•Tiro libre
•Tiro estático
•Tiro en suspensión
•Tiro tras parada
•Entradas a canasta
•Tiro de gancho
•Gancho en suspensión
Parte práctica
Bibliografía
INTRODUCCIÓN
El baloncesto es un
juego de
equipo. Es más, diríamos que es un juego donde la
acción colectiva es la baza fundamental que tienen que
manejar los equipos para lograr los objetivos
propuestos. Sin embargo, para formar esta técnica
colectiva es preciso que los jugadores que integran nuestro
equipo reúnan los elementos que posibiliten la construcción de este grupo que debe
rodar corporativamente como una unidad.
Aunque eso es materia de
otras asignaturas, recordaremos cuáles son esos
elementos:
•TÉCNICA INDIVIDUAL •PREPARACIÓN
FÍSICA
•REGLAS DE JUEGO
•TÁCTICA •PREPARACIÓN MENTAL O
PSICOLÓGICA
Lógicamente sin un mínimo de
acondicionamiento físico no sería posible la
práctica del baloncesto. Sin
un mínimo de conocimiento
de las reglas del juego
difícilmente podríamos practicar este deporte. Sin una adecuada motivación
o un mínimo de ganas, tampoco se podría hacer gran
cosa. Pero evidentemente tampoco podríamos hacer baloncesto sin
una base técnica adecuada que nos permita, dentro de unas
reglas, alcanzar los fines de este deporte. De ese modo
obtendríamos una definición, en líneas
generales, de los Fundamentos: "Es el conjunto de gestos
técnicos que nos permite realizar las acciones
propias del juego sin
transgredir las reglas del mismo"
El propio nombre, que ya hemos indicado, con el que se
conoce a la Técnica Individual, FUNDAMENTOS, ya indica su
importancia: es la base, el origen de donde debe partir
cualquiera que desee practicar el baloncesto.
El entrenador deberá enseñar a ejecutar
correctamente los distintos fundamentos individuales hasta su
completa y correcta mecanización, para, a
continuación, enseñar a hacerlo con rapidez,
aspecto fundamental éste; posteriormente habrá de
enseñar a elegir que fundamento o gesto es el más
adecuado en cada caso; después habrá que
enseñar a elegir rápidamente la opción buena
para poder acabar
realizándola con rapidez.
Aunque ahí no se acaba todo, pues luego
habrá que ir aplicando todo lo anterior, y los nuevos
gestos derivados de la participación de más
jugadores, a situaciones de dos contra dos, tres contra tres,
etc. Y ahí, el entrenador deberá procurar buscar
las mejores situaciones posibles para su equipo con un adecuado
uso de la Técnica Individual, y eso no es más que
la TÁCTICA. ¡Y ahí no acaba todo!, luego hay
que escoger de nuestro arsenal táctico las opciones
mejores para cada partido y cada momento de partido, eso es la
ESTRATEGIA.
Aunque todo esto es de aparente complejidad, lo cierto
es que el baloncesto es un
deporte mucho
más sencillo y simple de lo que muchas veces queremos
entender. Con unos mínimos conocimientos y mucho sentido
común pueden hacerse grandes cosas. Habría que
buscarle al SENTIDO COMÚN un sitio preferente en nuestro
quehacer diario.
Se puede afirmar sin riesgos, que un
equipo que no sea MUY INFERIOR a otro en el resto de aspectos del
juego, siempre podrá ganarle si es superior en
Fundamentos. Aunque esto no lo es todo, claro. Así, si dos
equipos están más o menos igualados, el que ejecute
los Fundamentos con mayor velocidad
siempre será el vencedor.
Y aquí se puede acudir a una realidad
fácilmente demostrable: ¿Dónde ha estado la
diferencia abismal existente entre la N.B.A. y el baloncesto del
resto del mundo? La respuesta es clara: sencillamente la rapidez
de ejecución de los Fundamentos. El ejemplo es
también claro: en Europa siempre
han existido jugadores de gran nivel, pero a la hora de
enfrentarse con los americanos parecían simples comparsas.
La diferencia era, y sigue siendo (aunque en menor medida) la
citada superior velocidad de
ejecución en los gestos técnicos, tanto de ataque
como, sobre todo, en los defensivos.
Y aquí cabe otra reflexión: siempre se
suele asociar la idea de Técnica Individual con
fundamentos ofensivos, cuando los defensivos son tan importantes
como aquellos y caen tantas veces en el olvido.
Por supuesto, la importancia de los Fundamentos es en
valor absoluto
y nunca pueden dejar de practicarse, aunque, lógicamente,
se dedicará mucho más tiempo en las
categorías de formación, donde el factor aprendizaje
deberá estar por encima de cualquier otra
consideración.
Por último una pequeña pero importante
precisión. La manera de ejecutar los fundamentos tal como
aquí se describe es la manera teóricamente perfecta
de realizarlos, aunque siempre deberá estar presente una
flexibilidad que permita a cada jugador el personalizar su propia
ejecución de los gestos técnicos sin mermar en
absoluto ni su efectividad ni su creatividad.
La historia
está llena de ejemplos claros de jugadores con gestos
técnicos poco ortodoxos pero de gran
efectividad.
La edad de iniciación mínima del
baloncesto la sitúan a los siete años aunque la
recomendada está alrededor de los 10. En ambas edades se
supone que el niño ha podido alcanzar el patrón
maduro del lanzamiento, aunque hay que destacar que los
lanzamientos del baloncesto, sobre todo el tiro, tienen sus
claves personales.
EL PASE
•Fundamento muy poco trabajado.
•Trabajamos mucho la parte mecánica pero poco la parte real del
juego.
•Un equipo carece de buen juego de ataque si no
tiene dominio de los
pases.
•La rapidez de los desplazamiento del balón
favorece al juego de equipo.
•Los partidos se pierden por las perdidas de
balón.
•Un buen pase es 1/2 canasta.
Selección y aspectos técnicos del
pase.
1.Control visual de
los compañeros y defensores.
2.Concentración. Precisión ajustar el pase
en relación al receptor y su defensor.
3.Pases fuertes y rápidos. Trayectoria lineal.
Pases picados para espacios cortos.
4.Pasar el balón al lado alejado del
defensor.
5.Utilizar si la situación lo requiere fintas y
pivotes.
6.No descubrir la dirección del pase. Engañar con la
cabeza, los pies o el balón.
7.No mirar directamente al receptor.
8.Pasar con la mano más cercana al
receptor.
9.Elegir el pase más apropiado.
10.Tener en cuenta la relación velocidad –
distancia.
11.Buscar un buen ángulo.
12.Preferentemente equilibrados con los pies en el
suelo. Excepto
en la entrada.
13.No solo jugar para pasar. Si no pasar para jugar.
Moverse después del pase.
14.Para que el pase tenga éxito tanto receptor
como pasador deben de tener la misma responsabilidad.
Rechazar el pase de pecho en el juego estático.
No en el contraataque.
Pasar desde el bote mucho más rápido: para
ello debemos de trabajar mucho con los dedos y la
muñeca.
Importancia:
El pase es un fundamento que se diferencia de los
demás por relacionar a los dos jugadores que intervienen
en la acción, y ser por tanto una parte muy importante del
juego de conjunto.
La importancia del pase radica en la rapidez con que
permite el desplazamiento del balón por el campo. Nos
permite situar el balón en cualquier lugar y, en
ocasiones, es el único medio para hacerlo. Su correcto uso
nos permite sacar partido de otros fundamentos, sobre todo los
derivados del juego sin balón, siendo éstos
imprescindibles para el uso exitoso del pase. De la calidad del pase
depende en gran medida el éxito de una acción
posterior; así, es claro el ejemplo de un jugador con
buena posición de tiro que recibe un pase que aunque no
sea malo no le permita lanzar con rapidez, lo cual hará
que probablemente no pueda realizar el tiro en buenas
condiciones. Por ello es imprescindible cuidar el fundamento del
pase en todo momento, incluso en cualquier ejercicio sin defensa,
cualquier ejercicio de tiro o de lo que sea. No permitamos nunca
malos pases en los entrenamientos, ni en los ejercicios
más relajados.
En el juego de equipo, durante los partidos, las
pérdidas de balón son habitualmente causa de
derrotas. Es preciso inculcar al jugador la idea de que "Un buen
pase es media canasta a nuestro favor, pero un mal pase suponen
dos puntos en contra"
Características comunes de los
pases:
Deben ser rápidos, para evitar alertar a la
defensa, y por tanto fuertes, aunque no violentos. Al ser
fuertes, lógicamente serán en línea recta
(salvo excepciones)
El último toque debe ser con los
dedos.
A veces se usarán fintas y/o pivotes.
Nunca se darán de modo "automático",
debiendo tener siempre control visual
sobre la defensa, pasando al lado más alejado del defensor
y teniendo en cuentas las
circunstancias de la defensa y del receptor.
Ha de ser preciso.
Evitar mirar el pase.
Pasar preferentemente con los pies en el suelo. De este
modo podremos "arrepentirnos" y no dar el pase sin cometer
violación.
Buscar buenos ángulos de pase.
Deben facilitar siempre las posibilidades del receptor.
Así si le pasamos para que tire, por ejemplo, debemos
procurarle la mayor comodidad y rapidez a su tiro mediante
nuestro pase.
Pases entre jugadores estáticos y en
movimiento
Podemos distinguir dos casos
fundamentalmente:
Receptor parado. En este caso el pase irá
donde lo pida el receptor con sus manos y en todo caso alejado
del defensor. Dependiendo de la forma de pedir el balón
hemos de usar un tipo de pase u otro. Si las palmas de la mano
están abiertas dando el frente al balón, usaremos
un pase de pecho o sobre la cabeza; si las palmas miran hacia el
suelo usaremos
cualquier pase picado. El pase ha de ser al preciso punto donde
el receptor nos pida el balón.
Receptor en movimiento. El pase irá adelantado en
la dirección que lleve el receptor, calculando
su velocidad para
que no deba variar su trayectoria para recibir, tanto porque le
llegue muy atrasado o excesivamente adelantado. También
habrá que calcular la distancia máxima para una
posible recepción ya sea por presencia de defensores o por
limitación de alguna línea externa del campo. El
pase deberá ir dirigido a la altura de la cabeza, y en
cualquier caso al "blanco" que debe ofrecer el receptor, que en
general será la mano más alejada del defensor.
Aunque se ofrezca una sola mano como "blanco", insistimos en que
hay que controlar el balón siempre con las dos manos para
poder tener el
oportuno control que nos
permita continuar el bote, realizar una parada o cualquier otra
cosa. En el caso de continuar el bote la ejecución
correcta sería: controlar el balón con las dos
manos impulsándolo hacia delante sin frenar nuestra marcha
para proseguir el bote.
Técnica de los
pases
Pase de pecho con dos manos
Partimos de la posición básica de ataque,
o mejor aún de la posición de "triple amenaza", con
las piernas ligeramente flexionadas, los pies abiertos y
paralelos y el tronco levemente inclinado hacia
delante.
Sujetamos correctamente el balón a la altura del
pecho con una posición natural de los brazos, con los
codos junto al tronco, ni excesivamente separados ni
excesivamente pegados.
Iniciamos la extensión de los brazos y mediante
un giro de las muñecas damos un golpe seco al balón
de tal forma que lleve en su trayectoria un giro en sentido al
pasador.
Los brazos han de quedar extendidos y las manos abiertas
con las palmas mirando hacia fuera y hacia abajo. No
deberán cruzarse los brazos quedando paralelos al suelo.
En una etapa siguiente del aprendizaje
prestaremos más atención al golpe de muñecas
que a la extensión de los brazos ya que de esta forma el
pase se realiza con más rapidez.
Se suele usar en distancias cortas y medias, por lo que
no es necesaria la rotación habitual del balón
aún en las manos para "coger fuerza" y que
nos hace perder rapidez en el pase.
Es el más empleado habitualmente. En
general se emplea para mover el balón en situaciones de
ataque estático, especialmente entre hombres exteriores.
Esto es lógico por cuanto es un pase que requiere que el
defensor no esté excesivamente marcado. Es bastante
seguro y
rápido, lo que le hace adecuado para cambiar el
balón de lado rápidamente o para cruzar la pista
ante una presión. Es, por tanto, bastante
polivalente.
Pase de pecho
Pase picado con dos manos
La mecánica es básicamente igual a la
del pase de pecho, la diferencia estriba en que el balón
bota en el suelo antes de
llegar al receptor, por lo cual los brazos han de ir dirigidos al
suelo en lugar de al receptor.
El pase debe ir dirigido a la cintura del receptor y se
debe evitar mirar el suelo.
El bote del balón debe producirse más
cerca del receptor que del pasador, aproximadamente a unos 3/4 de
la distancia existente entre ellos, pues si bota demasiado cerca
del receptor llegará excesivamente fuerte y probablemente
demasiado bajo, y si lo hace muy cerca del pasador el
balón perderá fuerza y no
llegará con la intensidad necesaria.
En cualquier caso se deberá impulsar con algo
más de fuerza que en
el caso anterior, toda vez que al botar en el suelo,
lógicamente el balón pierde fuerza.
Se usa en distancias cortas y excepcionalmente medias.
Útil en los pases al pívot, o a atacantes
sobremarcados y a veces en las finalizaciones de
contraataque.
Es un buen complemento para el pase de pecho. Es
más efectivo que éste cuando la presión
defensiva es más intensa, por eso se suele usar para mover
el balón por el exterior ante una zona agresiva, para
salir de un 2×1 o para meter balones interiores. Es algo
más lento que el anterior, pero cuando la defensa aprieta
es bastante seguro.
Pase de pecho con una mano
El balón sujeto con dos manos a la altura del
pecho. Separamos ligeramente el balón del cuerpo para
proceder después a la extensión del brazo de pase;
antes de su máxima extensión damos un fuerte golpe
con la muñeca para que el balón lleve un giro sobre
su eje en dirección al pasador. La mano
quedará abierta y la palma mirando hacia el suelo. Se usa
en distancias cortas y medias.
Pase picado con una mano
Idéntica mecánica al anterior, pero el brazo se
proyecta hacia el suelo para que el balón bote antes de
llegar al receptor. La mano de pase será, por lo general,
la más próxima al receptor del
balón.
Pase de entrega o mano a mano
Consiste en entregar el balón al receptor que
viene a buscarlo hasta la posición que ocupa el
pasador.
El pasador sujeta el balón con ambas manos. Si el
receptor llega por su derecha, la mano izquierda estará
debajo del balón y viceversa.
Hay que proteger el balón con el cuerpo,
manteniéndolo alejado de nuestro defensor y del receptor;
así, deberemos realizar un pivote para bloquear al
defensor del receptor.
Es fundamental la
comunicación entre pasador y receptor, tiene que estar
claro que se va a dar este tipo de pase, ya que sucede a menudo
que cuando el receptor se acerca a recibir un pase de entrega el
pasador le da otro tipo de pase propinándole en el mejor
de los casos un balonazo a su propio compañero.
Se usa a menudo cuando el hombre
balón ha terminado de botar y la presión defensiva
no permite otro tipo de pase. También es un buen recurso
para pasar al hombre que
corta sobre el balón.
Pase por encima de la cabeza
Su técnica es ligeramente distinta a la de los
anteriores.
En posición básica, situamos el
balón encima de la cabeza, ligeramente adelantado al plano
de la cara. Los codos miran hacia delante y los pulgares hacia
atrás. Brazos extendidos y ligeramente flexionados.
Extendemos ligeramente los brazos en la dirección del pase que queremos dar y antes
de llegar a su total extensión, con las muñecas
damos un golpe seco al balón, de tal forma que las palmas
queden hacia fuera y hacia abajo y los dedos extendidos. Los
brazos no han de quedar totalmente extendidos. El balón
deberá ir recto hacia el blanco que nos ofrece el
receptor.
Se usa en distancias cortas y medias. Tiene aplicaciones
muy concretas. Es importante que los hombres altos lo dominen
perfectamente, pues al ser sometidos a gran presión
defensiva suele ser el único pase seguro que pueden
efectuar. Es muy usado para meter balones dentro, sacarlos al
exterior, pases entre pívots, saques de banda,
etc.
Pase por detrás de la
espalda
Es el que requiere más habilidad, y por tanto es
buena su práctica para conseguir un mayor y mejor dominio del
balón.
Por lo general se da después de bote, sin
controlarlo con las dos manos. Dominamos el balón
ligeramente por su parte anterior, llevándolo un poco
hacia detrás, en un gesto del brazo similar al de un
reverso, y mediante un movimiento
rápido del brazo por detrás de la espalda
proyectamos el balón con un golpe de muñeca, de tal
forma que el balón vaya girando sobre su eje en dirección al receptor. La mano debe ir
totalmente al costado opuesto, quedando los dedos abiertos y la
palma hacia arriba. Se usa en distancias cortas.
Se usa sobre todo para finalizar contraataques en
superioridad. También puede ser útil en situaciones
2×1. En contra de la opinión de muchos no es ningún
tipo de "virguería", es un pase más y tiene sus
utilidades.
Pase después del bote
Similar en su inicio al anterior, pero el pase lo damos
al lado de la mano de pase. Dominamos el balón por su
parte baja-posterior con los dedos mirando hacia fuera en cuanto
ha concluido el bote. En ese momento extendemos el brazo y
proyectamos el balón de manera que la mano quede abierta y
su palma mirando hacia el suelo. Con el brazo contrario se
protege la salida del balón. Se usa en distancias
cortas.
Es muy rápido, y por tanto ideal en situaciones
que requieran un pase por sorpresa. Resulta útil, por
ejemplo, en situaciones de contraataque, para pasar a la salida
de un bloqueo, o para pasar dentro aprovechando una buena
posición momentánea del receptor.
Pase de béisbol
Su utilidad es la
más clara y definida: se usa para desplazar el
balón a gran distancia, en general para dar pases de
contraataque.
Desde la posición de "triple amenaza" llevamos el
balón, cogido con ambas manos, aproximadamente al lado de
la oreja del lado correspondiente a la mano con que daremos el
pase. La mano del pase detrás del balón y la otra
como sujeción. La pierna correspondiente a la mano de pase
estará retrasada. Ligero giro del tronco hacia ese lado.
En el momento del pase proyectaremos el brazo fuertemente hacia
delante, al mismo tiempo llevaremos
la pierna retrasada hacia delante. Soltamos el balón con
un golpe de muñeca instantes antes de que la pierna apoye
en el suelo. El brazo quedará totalmente extendido y la
palma de la mano mirando hacia el suelo y los dedos en la
dirección del pase. La trayectoria del balón
será ligeramente parabólica, aunque lo más
recta posible. El brazo no pasador protege la salida del
balón.
EL TIRO
Importancia. "selección de
tiro"
Es el lanzamiento del balón a canasta. Es por
tanto el fundamento para el que trabajan todos los demás,
pues el objetivo final
del baloncesto es meter el balón en la canasta, y para
ello hay necesariamente que tirar.
Hay que trabajar muy duro en todos los fundamentos para
conseguir un tiro. Merece, por tanto, la pena esforzarse al
máximo en este fundamento, fin último de los
demás.
En la práctica diaria, el entrenar este
fundamento tiene una ventaja decisiva sobre los demás: a
todo el mundo le gusta tirar, todo el que tiene un balón
en las manos se dedica a ello antes que a otra cosa. Aunque esto
entraña un riesgo: un
excesivo componente autodidáctico que nunca es bueno si
bien, como comentábamos al principio, no debemos olvidar
cierta flexibilidad en la ejecución de los fundamentos, en
este caso una cierta "personalización" del
tiro.
Como cualquier otro fundamento, para que el tiro resulte
positivo para el equipo se hace preciso que se utilice
adecuadamente. Una expresión que de la que se oye hablar
con mucha frecuencia es SELECCIÓN DE TIRO. Por
selección de tiro entendemos simplemente (y no es poco) el
saber elegir el momento adecuado para realizar un tiro. Realmente
esto no tiene que ver con el fundamento del tiro propiamente
dicho, viene a ser una cuestión más táctica
que técnica, pero que debemos conocer perfectamente,
porque incidirá muy directamente no sólo en la
efectividad sino también en la propia mecánica del tiro. Influyen multitud de
factores: posición del defensor, de los compañeros,
posibilidades de rebote, situación del marcador, momento
del partido, racha de aciertos, etc. Por todo ello no es una cosa
fácil de dominar.
Además se hace necesaria otra precisión:
en el baloncesto moderno cada vez tiene más importancia el
tiro desde lejos, toda vez que los sistemas
defensivos y las cada vez mejores capacidades físicas y
corpulencia de los jugadores hacen más difícil el
lograr buenas posiciones de tiro en posiciones cercanas al
aro.
Factores comunes a todos los
tiros
Mecánica y ejecución. Conocer la
mecánica y poseer buena ejecución
técnica. No todos tienen porque realizar el mismo gesto,
debe existir cierta flexibilidad en función de las
características del tirador.
Dominar todos los tipos de tiro.
Posición y equilibrio. Como en todos los casos
anteriores, la posición y el equilibrio
juegan un importante papel.
Concentración. Como siempre uno de los
aspectos más importantes, pues el tiro es un gesto
bastante complejo en el que influyen muchos factores y que es
preciso ejecutar correctamente. Es necesario concentrarse y
aislarse de los factores externos que pueden influir
negativamente en el tiro.
El autocontrol y la personalidad también
son factores importantes e íntimamente relacionados con el
punto anterior, pues el ambiente o
simplemente el momento del partido pueden influir muy
negativamente en el tirador.
Confianza. Otro factor primordial. Para que los
tiros entren es indispensable tener confianza en ello, de lo
contrario los porcentajes se reducen enormemente.
Selección de tiro. Su importancia ya ha
quedado suficientemente clara.
Rapidez de ejecución. Factor decisivo por
cuanto si nuestra mecánica es excelente pero necesitamos
de un tiempo excesivo
para realizarla, es evidente que no podríamos siquiera
intentarlo.
Recepción. En cualquier tiro que se
realice tras un pase es fundamental una buena recepción,
precedida lógicamente por un buen pase. Por supuesto es de
aplicación todo lo citado en otros capítulos
dedicados al pase, pero hay que insistir en que en muchas
ocasiones el que un tiro pueda ser efectivo o no, o siquiera
pueda realizarse, depende del pase recibido. Así
habrá que insistir mucho en que el pase debe ir realizado
en las mejores condiciones que faciliten al receptor el poder realizar
un tiro rápido en las posiciones adecuadas para
hacerlo.
Clases de tiro
Tiro libre.
Empezaremos por éste por dos motivos: es el
más fácil de enseñar y de aprender puesto
que siempre se realiza en las mismas condiciones (misma
distancia, nadie molesta, cinco segundos para tirar), y porque su
mecánica general es prácticamente idéntica a
la del tiro en general.
Lo primero será tener una correcta
mecanización del tiro, y una vez se ha logrado, el
practicar constantemente este tiro hasta que sea un gesto
absolutamente automático.
El siguiente paso será entrenarlo en
condiciones similares a los partidos. Deberemos realizar este
tipo de tiro cuando el jugador está cansado, en deuda de
oxígeno.
El último paso será el que meter o fallar
suponga algo para el jugador, por lo que al hecho de tirar
tendrá que tener un sistema de
premios – castigo.
Veamos la correcta mecánica:
PIES. Colocados de forma cómoda y
proporcionando un buen equilibrio. En
general separados aproximadamente la anchura de los hombros y con
el pie de la mano que tira ligeramente adelantado (nunca
más de 20-25 cms.) y con las puntas apuntando al
aro.
PIERNAS. Flexionadas, aunque no en exceso, para
extenderlas en el momento de soltar el balón. La puntera
del pie debe estar en línea vertical con la
rodilla.
TRONCO. Recto pero ligeramente inclinado hacia delante
en el momento de partida del tiro.
BRAZOS Y MANOS. El balón debe colocarse un poco
más alto que la sien. El brazo que lanza debe estar
flexionado, formando un ángulo recto con el antebrazo,
paralelo al suelo. El codo en línea con la puntera del pie
y la rodilla. El plano del brazo será perpendicular al del
cuerpo. La muñeca también formará un
ángulo recto con el antebrazo, estando por tanto la mano
debajo del balón.
Sólo los dedos tocarán el balón, y
estarán bien abiertos aunque sin tensión, el dedo
pulgar formando casi ángulo recto con el índice. La
palma de la mano no debe tocar nunca el balón. De esta
manera el control sobre el
balón será el mejor posible.
El brazo contrario estará también
flexionado y apoya la mano lateralmente sobre el balón con
el codo ligeramente abierto. Esta mano debe servir de simple
apoyo y control, sin
presionar excesivamente ni impulsar el balón. El dedo
pulgar de esta mano debe formar una T con el de la mano
contraria.
El cuello está recto y relajado, la cabeza
erguida y con la vista puesta en el aro. Se debe mirar el
balón entre los dos brazos y por debajo del balón.
Normalmente se debe apuntar a la parte delantera del
aro.
Hasta el momento hemos visto la posición del
cuerpo en el momento de partida de la acción de
tiro.
Partiendo de esta posición inicial el jugador
debe realizar un movimiento
continuo, sin tirones. Se debe coordinar el movimiento de
extensión de piernas y brazos para lanzar el balón
hacia el aro por medio de un golpe de muñeca en el momento
final de extensión total.
El último impulso debe darse con los dedos, que
deben quedar abiertos y apuntando hacia el aro, con el brazo
extendido, manteniendo esta posición unos instantes,
normalmente hasta que el balón toca el aro o entra en
él.
El balón, tras el impulso con los dedos, debe
avanzar por el aire con un
movimiento de rotación sobre sí mismo de delante
hacia atrás.
El balón deberá seguir una trayectoria
curva describiendo un amplio arco y evitando un avance
excesivamente recto.
Podemos decir que la trayectoria del balón
será la componente de dos fuerzas: las piernas y brazo
impulsan hacia arriba, la muñeca dirige su fuerza hacia
el aro. La resultante es una trayectoria curva con el
balón girando hacia atrás por su propio
eje.
Detalles importantes son el que toda la acción
sea continua, sin movimientos bruscos y lograr que el final sea
suave, ninguna acción debe alterar nuestro equilibrio y
estabilidad.
Tiro estático.
Su mecánica es esencialmente idéntica a la
descrita anteriormente, pero se realiza desde distintas
posiciones.
En este caso si se debe saltar, siempre verticalmente y
cayendo en la posición original del salto. Los brazos
deben permanecer extendidos hasta recobrar la posición en
el suelo. No es tan importante la altura del salto como la
velocidad de
ejecución.
Tiro tras parada.
Esencialmente es el mismo que el anterior, pero se
realiza inmediatamente después de realizar una parada en
uno o dos tiempos y después de finalizar un regate o haber
recibido un pase. Esto plantea un grave problema, pues muchos
jugadores no encaran correctamente el aro o no logran una buena
posición de equilibrio.
Por ello debemos dedicar un buen tiempo a ensayar
correctamente la conjunción parada – tiro.
Deberemos tener en cuenta lo siguiente: si vamos en
línea con el aro podemos pararnos en un tiempo o en dos.
Pero siempre que nuestros pies no estén en línea
con el aro, será necesaria hacer una caída en dos
tiempos (aunque también podremos realizar un giro en el
aire para parar
en un tiempo y quedar encarados al aro)
Paremos en uno o dos tiempos, la parada tendrá
que dejar los pies bien alineados con el aro y ser
suficientemente buena para que nos permita tirar rápidos y
equilibrados.
Una parada en un tiempo siempre será más
rápida y nos permitirá tirar con más
velocidad, lo que en general facilitará mucho las cosas.
Las paradas en dos tiempos proporcionarán más
equilibrio.
Si paramos en dos tiempos seguiremos la siguiente norma:
siempre hay que hacer el primer tiempo con el pie más
cercano al aro. Cuando no vayamos en línea con el aro
aprovecharemos la parada para quedar bien colocados al final de
ella. La dinámica sería: apoyo del primer pie
– pivote – apoyo del segundo pie. La parada por la izquierda
tendrá la dificultad suplementaria de que el segundo apoyo
no puede superar al primero si queremos quedar en posición
correcta de tiro. La razón de apoyar siempre el pie
más cercano al aro, es que generalmente es el lado donde
está la defensa y que es más fácil el gesto
técnico.
Tiro en suspensión.
Es el más utilizado en la actualidad en los
partidos, aunque su aparición supuso una auténtica
revolución.
Se usará la misma mecánica que la descrita
anteriormente, con la salvedad de que salta y se lanza desde el
aire.
Realizaremos un salto para elevarnos por encima de nuestro
defensor y acercarnos más a altura del aro. Jamás
perderemos de vista el balón, antes de llegar al aro,
intentando que el movimiento final del tiro sea rápido,
coordinado y suave, nunca brusco.
El tiro en suspensión tiene tres fases muy
diferenciadas:
1. SALTAR. El salto debe ser vertical, y al caer debe
hacerse en el mismo lugar desde donde se inició el salto,
que debe ser equilibrado junto con la caída. No tiene que
ser necesariamente un salto muy alto, eso irá en
función del defensor, de la rapidez de ejecución
del tiro y de los propios hábitos.
2. QUEDARSE. En el instante de llegar a la máxima
altura hay que "permanecer en el aire" un instante
para lanzar a canasta en el momento anterior a empezar a
caer.
3. TIRAR. La mecánica es la ya descrita con
anterioridad.
Tanto en este tiro como en el tiro estático se
hace necesario subir el balón desde abajo, bien porque
estemos botando, porque nos han pasado bajo o porque hemos
recogido el balón del suelo. En todos los casos deberemos
subir el balón lo más protegido posible y pegado al
cuerpo hasta ponerlo en su sitio teórico y
tirar.
Entradas a canasta.
Son tiros que se realizan en movimiento, después
de botar o haber recibido un pase.
No son más que una parada en dos tiempos,
realizada tras la finalización de un regate o tras recibir
un pase (recordar que recibíamos o cogíamos el
balón mientras los dos pies estaban en el aire), en la que,
de un modo continuado, sin detenerse, se levanta el pie de pivote
para lanzar a canasta.
Debemos tirar siempre con la mano del lado por el que
vamos, aunque en un proceso
posterior se podrá hacer excepciones sobre esta
norma.
Su técnica es inicialmente muy simple: tras la
recepción o agarre del balón (con los pies en el
aire) damos dos pasos de aproximación, para a
continuación realizar un salto y dejar el balón lo
más próximo posible al aro.
El primer paso debe ser largo, para así ganar la
acción al defensor y conseguir ganar el mayor espacio
posible. El segundo será más corto, para
equilibrarnos y permitir un tercer paso hacia arriba que nos
permita acercarnos lo más posible al aro.
El primer paso lo daremos siempre con la pierna
correspondiente a la mano con la que botamos.
Para conseguir un mayor impulso, es preciso levantar la
rodilla correspondiente a la mano tiradora en el último
impulso.
El balón va fuertemente cogido por las dos manos
y protegido en el lateral de la mano que tira. El balón no
debe moverse de un lado a otro pues expone el balón al
defensor y es causa de numerosas pérdidas de balón.
En los dos gráficos que siguen se da esta circunstancia,
que es incorrecta.
A la vez que sube el cuerpo se sube el balón para
lanzar en el momento en que se llega a la máxima
altura.
La mano contraria debe proteger el balón en la
misma posición que en el tiro normal, sin exageraciones
que últimamente conducen casi siempre a faltas del
atacante.
Es muy importante aprender a realizar las entradas desde
un principio con ambas manos y por ambos lados.
Cualquier entrada a canasta debe ser hecha con mucha
fuerza y debe, por tanto, ir acompañada de un cambio de
ritmo y evitar la común tendencia a frenarse en el momento
de hacer la entrada.
Merece la pena recordar también una entrada con
una pequeña variante y que no suele ser muy utilizada.
Consiste en hacer la parada en un tiempo en vez de en dos
tiempos. Se realiza la citada parada para, sin solución de
continuidad, cruzar el cuerpo ante el defensor y pasándole
el balón por arriba y en sentido circular realizar el
último tiempo de la entrada tal como se ha
descrito.
Asimismo podemos nombrar la entrada con pérdida
de paso, idéntica a la normal pero con la salvedad de que
prescindimos del paso intermedio.
El lanzamiento lo podemos hacer de varias
formas:
En bandeja. Para lanzar pondremos la mano debajo
del balón con los dedos dirigidos hacia el aro, y se
dejará o empujará a la canasta, siendo la mano la
que lleva el balón a su objetivo. Los
dedos al final impulsan suavemente hacia arriba el balón.
Suele usarse para dejar directamente el balón en el aro.
Los dedos deben quedar perpendiculares al aro.
Movimiento habitual de tiro. Se coge el
balón como se hace para el tiro habitual. Se utiliza para
dejar el balón en el tablero. El golpe de muñeca
será el habitual pero más corto y apuntando al
cuadro del tablero. Normalmente este movimiento se sustituye por
otro: colocaremos la mano de tiro en la parte inferior del lado
por el que se entra, para acompañar simplemente el
balón en su trayectoria hacia la canasta.
Hundiendo el balón en la canasta.
Sería el gesto ideal por su alto porcentaje, pero
sólo puede realizarse cuando se llega muy bien.
A canasta pasada. Son entradas en las que en vez
de dejar el balón por el lado que vamos, pasamos el aro y
luego tiramos. En el último paso tenemos dos opciones: del
modo tradicional, en el último salto giro para dar la cara
al aro y lanzamos con la mano más alejada del aro. La otra
es sacando el balón hacia atrás con la mano
más cercana al aro, dándole un ligero efecto al
balón con una rotación de la muñeca hacia
atrás y hacia el lado por el que entramos. También
puede hacerse iniciando los pasos con la pierna contraria del
lado por el que se entra, acabando con un lanzamiento ligeramente
lateral.
Con paso cambiado. Es una entrada normal pero en
el que tiramos con la mano contraria a los pasos que estamos
dando. Damos pasos de derecha y tiramos con la izquierda, bien
porque estamos en el lado izquierdo o bien porque estamos en la
derecha pero nos tapan ese lado y sacamos la izquierda. No se
usan mucho pero pueden ser muy útiles. De hecho lo son
como simple ejercicio de coordinación.
Tiro de gancho.
Es un tipo de tiro muy útil en las proximidades
del aro, por ser muy difícil de tapar. No es un gesto
exclusivamente de jugadores altos, debe ser dominado por todos
los jugadores.
Se inicia normalmente de espaldas a canasta y lo podemos
realizar después de bote o directamente después de
un pivote.
Colocamos el balón protegido a la altura del
pecho, metemos un pie hacia atrás, cargando el peso del
cuerpo y pivotando sobre éste en dirección al aro,
a la vez que tiramos de la otra pierna para colocar el cuerpo en
posición lateral respecto al aro, ayudándonos en el
salto llevando la rodilla de la pierna más alejada del aro
hacia arriba. Simultáneamente levantamos el balón
con las dos manos hasta la altura de la cabeza, en
posición lateral y separado ligeramente del cuerpo. El
brazo de tiro, el más alejado del aro, se extiende con el
balón hacia arriba en el mismo plano lateral del cuerpo,
protegiendo el tiro con el brazo contrario semiflexionado y
separado del cuerpo. Con el brazo de tiro casi en su
máxima extensión y el cuerpo en su máxima
altura, damos al balón un golpe de muñeca,
dirigiéndolo hacia el aro, de tal forma que el
balón lleve un efecto hacia atrás. La mano de tiro
quedará abierta y los dedos relajados mirando hacia el
aro. Por efecto del giro del cuerpo, al acabar el tiro quedamos
encarados a la canasta y con los brazos extendidos.
Gancho en suspensión.
Es una mezcla del tiro de gancho y del tiro en
suspensión.
La acción del salto es idéntica a la del
tiro en suspensión, la diferencia estriba en el modo de
lanzar el balón.
La posición del cuerpo es lateral a la canasta.
Cuando el cuerpo va a alcanzar su máxima altura extendemos
el brazo de tiro en el mismo plano lateral del cuerpo,
protegiendo el tiro con el brazo contrario.
Justo antes de empezar a caer damos un golpe de
muñeca dirigiendo el balón hacia el aro. En la
caída dejamos los brazos extendidos.
La mecánica de tiro es idéntica a la del
tiro de gancho.
BIBLIOGRAFIA
Baloncesto. Comité Olímpico
Español. 1993.
Baloncesto, mas que un juego. Manel Comas.
1991.
Mi Credo Baloncestístico. Dan Peterson.
Federación Madrileña de Baloncesto.
http://www.civila.com/hispania/baloncesto/main.htm
http://www.askesis.arrakis.es/
http://www.ctv.es/TARSO/TBasket.html
CONCLUSION
El baloncesto en un juego de equipo cuyo objetivo es
meter una pelota en un aro elevado. Para conseguirlo se ponen en
juego distintas habilidades motrices individuales y a la vez hay
que ponerlas en juego con las de los demás. Esto supone
una mínima coordinacion y
una vision de juego. En este trabajo se ha trabajado la
técnica tanto de los distintos pases y tiros que se pueden
encontrar en el baloncesto
Autor:
Arteaga