- Introducción
- El concepto de verdad
- Criterio científico de verdad
- Criterio filosófico de verdad
- Criterio teologico-biblico de verdad
- Las limitaciones de la ciencia
- Relativismo epistémico y física de partículas
- La verdad bíblica
- Conclusiones
Introducción
1.1Entonces Pilato le dijo: «¿Luego tú eres Rey?» Respondió Jesús: «Sí, como dices, soy Rey. Yo para esto he nacido y para esto he venido al mundo: para dar testimonio de la verdad. Todo el que es de la verdad, escucha mi voz.» Le dice Pilato: «¿Qué es la verdad?» Y, dicho esto, volvió a salir donde los judíos y les dijo: «Yo no encuentro ningún delito en él.(1)
El termino verdad se refiere a la concordancia entre aquello que se dice y lo que espera experimentar el sujeto expuesto en base a la información recibida .De este modo, la verdad se refiere a una concordancia entre un estado interno y una realidad externa, específicamente a la comprobación de tal concordancia por un sujeto cognoscente quien entonces acepta encontrarse frente a información veraz o una verdad.
Existen criterios objetivo y subjetivo de verdad:la evidencia es el criterio objetivo de la veracidad de un juicio y corresponde a la comprobación empírica de la aseveración de un postulado.Si quien me ha dicho que hay un carro rojo estacionado frente a mi casa,me muestra un carro de ese mismo color en el lugar al que se ha referido, ha presentado evidencia de su aseveración;ha demostrado objetivamente que su afirmación es veraz,que ha dicho una verdad. La certeza o certidumbre, es el criterio subjetivo de verdad
Corresponde a un determinado cambio homeostático percibido internamente con la exposición a un conjunto de hechos confirmados como veraces .Así la certeza es generada por la exposición a la evidencia y es aquí, como veremos mas adelante, donde se manifiesta la debilidad intrínseca del concepto mismo de la verdad.
El concepto de verdad
1.2La forma en que serán expresados los postulados verdaderos no son únicamente de carácter idiomático. Para reconocer una verdad el sujeto debe estar al tanto de las coordenadas lingüísticas y las cargas epistémicas de los términos empleados .Puedo decir que la Tierra es redonda en ruso y el hispano parlante no podrá adscribir un carácter de veracidad a tal enunciado. Aun mas puedo referirme a conceptos y fenómenos totalmente ajenos a quien me escucha,por ejemplo hablar de la etiología de la glomerulonefritis postestrptoccocica como producida por una reacción autoinmune tipo 3 en la clasificación de Gell y Coombs.Y aun proporcionara datos suficientes para aclarar los conceptos empleados seguiría siendo posible para el profano distinguir la veracidad o falsedad de aquello que afirmo,a pesar de la actual democratización de la información gracias al internet.La realidad es que la mayoría de los argumentos que aceptamos como veraces corresponden a lo que en lógica formal se conoce como falacias ad baculae,dondedicha veracidad es garantizada por una autoridad y si en la actualidad podemos tener fuentes tan variadas como google y Wikipedia para el profano promedio la aceptación de la validez de cualquier proposición es,básicamente,un asunto de fe.
Si analizamos las definiciones que hemos dado anteriormente , deberemos concluir que la certeza es generada ante la evidencia, pero que solo puede tomarse como evidente aquello que estamos en capacidad o en disposición de aceptar como cierto. Existen criterios de corte metodológico, estadístico y lógico a la hora de aceptar como científicamente verdadera una premisa dada . Hasta no ser constatada de acuerdo a la "liturgia de la ciencia", dicha proposición no es mas que una hipótesis.Una vez comprobada su validez en este contexto,la hipótesis se convierte en tesis,se consolida como teoría y puede llegar a ser asumida como ley. Sin embargo, sin importar cuantas veces haya sido confirmada su veracidad basta una única vez cuando no pueda demostrarse esta para que dicha ley científica, teoría o tesis resulte "falseada"(2)
Criterio científico de verdad
La metodología científica exige la comprobación empírica de los postulados hipotéticos. Esto quiere decir que el fenómeno definido por tales postulados pueda reproducirse en un laboratorio bajo condiciones controladas que repiten paso por paso aquellas correspondientes al suceso original.Es fácil darse cuenta que, teniendo en cuenta esta exigencia, muchas de las aseveraciones de la ciencia contemporánea no alcanzan a sobrepasar el status de meras hipótesis y no solo no pueden ser comprobadas,si no que son incomprobables. De este modo cualquier explicación "científica" de orden cosmológico es imposible y solo alcanza el nivel de la especulación.
En lo que se refiere a las explicaciones de corte ontológico sobre el origen del hombre y el sentido de la vida humana, estas pertenecen a lo que InmanuelKant(3) denomino juicios sintéticos a priori y situó justamente mas allá del alcance de la razón.Asi,desde el punto de vista de la filosofía idealista alemana de la segunda mitad del siglo XVIII y de toda la filosofía honesta que le ha sucedido,las preguntas que mas importan al hombre,las relacionadas con su origen y su destino,con su razón de ser,no solo están mas allá del alcance de la ciencia si no mas alla del alcance de la propia razón.
Obviamente la Ciencia simplemente no tiene el poder para abordar el problema de Dios, ni siquiera para abordar los problemas mas acuciantes de la existencia humana. Simplemente no tiene las herramientas para manejar tales planteamientos, cualquier opinión de un científico respecto de Dios no es mas que la opinión de ese individuo como tal respecto del tópico en cuestión y si un científico puede ser ateo o creyente;la Ciencia como tal no puede tener tales presuposiciones,pues no se halla capacitada para emitir juicio alguno sobre la existencia o cualquiera de los atributos de Dios. Desde luego,los prejuicios e intereses de los científicos y de sus asociaciones se manifiestan en el quehacer científico,como ha demostrado Kuhn(4) pero esto traiciona el espíritu de la ciencia como instrumento para alcanzar la verdad.Ensíntesis:los juicios de científicos como Stephen Hawkins,RichardDawkins o Christopher Hitchens,respecto de Dios,la religión, la vida eterna y temas relacionados tiene poco o nada que ver con su status como científicos y de hecho contradice este status.Sus opiniones no son las de la física o de la biología si no son sus posturas personales respecto de cuestiones que,ya hemos visto,están mas alla del alcance de sus capacidades respectivas y respecto de las cuales seria sabio recordar siempre las palabras de Job antes de opinar:
Respondió Job a Jehová, y dijo: Yo conozco que todo lo puedes, Y que no hay pensamiento que se esconda de ti. ¿Quién es el que oscurece el consejo sin entendimiento?Por tanto, yo hablaba lo que no entendía; Cosas demasiado maravillosas para mí, que yo no comprendía. Oye, te ruego, y hablaré; Te preguntaré, y tú me enseñarás. De oídas te había oído; Mas ahora mis ojos te ven. Por tanto me aborrezco, Y me arrepiento en polvo y ceniza. (5)
Criterio filosófico de verdad
La metodología de la investigación filosófica se diferencia de su contraparte científica en que la comprobación de la veracidad de un enunciado no se basa en la demostración empírica si no en la coherencia interna de los enunciados en arreglo a parámetros de orden lógico-discursivo e ,incluso, histórico-documental. Básicamente la validez de una tesis filosófica se halla dada por el apego de la expresión de la misma a los dictámenes de la lógica formal clásica. Esto es especialmente obvio en el campo de la ontología(metafísica)donde los rasgos de los juicios empleados impiden una verificación empírica de los enunciados construidos con los mismos. Por ejemplo,la presencia de afirmaciones contradictorias en un mismo enunciado revela la falsedad del mismo sin necesidad de una demostración empírica. Si afirmamos que las naranjas negras son azules, no necesitamos cultivar una fruta mutante para descartar como falsa tal afirmación.
Criterio teologico-biblico de verdad
Una tercera aproximación a la verdad es aquella que nos presentan las Sagradas Escrituras y a la que podemos denominar bíblico-teológica. Así, la autoridad del texto bíblico nos permite discernir respecto de la carga de veracidad en una afirmación dada. Obviamente quien emplee este método debe cuidarse de discernir aquellas porciones de la Biblia que emplean un lenguaje figurado de las que manejan un lenguaje literal y evitar la tentación de emplear herramientas extra bíblicas para aclarar determinados pasajes, pues la primera regla de interpretación es que la Biblia se interpreta a si misma: ella es quien nos da las herramientas para decodificar cualquier texto oscuro.
Jesús le dijo: Yo soy el camino, la verdad y la vida; nadie viene al Padre, sino por mí. (6)
No solo en la vida cristiana si no en cada una de las instancias de nuestra existencia cotidiana podemos confiar en la veracidad y autoridad de la Biblia y contar con sus consejos y con sus promesas. Como veremos más adelante, en términos bíblicos ,la verdad no es un concepto, la verdad es una persona: Cristo.
Las limitaciones de la ciencia
La cultura secular contemporánea presenta ciertas características exclusivas y novedosas respecto a su aproximación al problema de la verdad.Básicamente,y en virtud de nuestra idolatría del consumismo y de la tecnología aplicada hemos desarrollado una confianza excesiva en las llamadas ciencias positivas y las disciplinas derivadas de las mismas.Hasta ya entrado el siglo XX se consideraba a la Física y a la Biología como formas en extremo útiles de la disciplina científica pero los asuntos de cosmología,teleología y ontología se reservaban para la filosofía y sus ramas. Si bien se ha adscrito a la obra pionera de Comte(4) la adopción de métodos propios de la Física por las llamadas Humanidades, este movimiento ha sido impulsado, también, por los logros predictivos de la biología y la mecánica aplicadas y, específicamente, a los logros en el manejo de las enfermedades y la diseminación de los avances tecnológicos de los últimos dos siglos.
Sin embargo, este énfasis exagerado en la eficacia de las ciencias positivas como herramientas en la búsqueda de la verdad ha entrado en crisis debido, primariamente, al propio desarrollo alcanzado por dichas ciencias. Las investigaciones mas recientes en física de partículas han generado un cada vez mas extenso relativismo epistémico que invenciones tales como las llamadas matemáticas del azar , no han podido neutralizar. Este proceso se halla marcado por dos hitos teórico-históricos que bien pueden ser considerados elementos distintivos de la condición del quehacer científico contemporáneo respecto de las interrogantes más elevadas y urgentes del género humano: el principio de incertidumbre de Heisenberg y la ilustración del llamado gato de Schrodinger.
Relativismo epistémico y física de partículas
En 1927 Werner Heisenberg enuncio la relación de indeterminación o principio homologo estableciendo la imposibilidad de conocer simultáneamente pares de magnitudes en mecánica cuántica.-En otras palabras, es imposible conocer al mismo tiempo la velocidad y la posición de una partícula dada pues solio puede conocerse su velocidad si la misma se halla en movimiento y su posición únicamente si se halla estacionaria. En el ámbito de la física de partículas tal incertidumbre revela que la presencia misma de un observador es determinante del desarrollo final de los fenómenos y que es imposible un espectador neutro. Erwin Schrodinger expreso tal situación en su famosa paradoja del gato: la observación de un fenómeno dado en el campo cuántico es análoga a la situación de un observador que ha colocado dos posibilidades respectivas en cada una de sus manos y cerrado el puño. Si un gato atraviesa el camino al tiempo que un camión va cruzando, en el puño derecho se halla la primera posibilidad: el gato fue aplastado por el camión; en el puño izquierdo se halla la segunda posibilidad: que el gato haya atravesado ileso el camino. Hasta que el observador no abre uno de los puños y verifica lo acaecido ninguna de las dos posibilidades podrá tener lugar.
Ambos hitos en el desarrollo de la Física plantean una revisión de la totalidad del paradigma positivista. Evidentemente la realidad no depende de nuestra capacidad de percibirla directa o instrumentalmente, plasmarla, analizarla y reproducirla en el laboratorio. Nuestras propias expectativas, la presencia misma de un observador influye decisivamente en cualquier fenómeno observado y parece más cierto aquel refrán que concluye: todo es según el color del cristal con que se mira.
El relativismo en epistemología,y su corolario, el relativismo en ética, subraya las bases endebles de nuestra cultura humanista secular y su fe ciega en el racionalismo. La propia ciencia ha alcanzado los límites de su capacidad revelando en la creación fenómenos cuyas leyes se hallan más allá de las capacidades de la mente humana .La eterna y perfecta palabra de Dios se manifiesta entonces como un único refugio y guía certera tanto en el campo de la moral como en el campo del conocimiento. El carácter solipsista de la subjetividad humana, al nivel individual y colectivo garantiza la ausencia de cualquier certeza duradera salvo aquellas que nacen de la fe y se proyectan en la eternidad, como está escrito:
El mundo y sus deseos pasan; pero el que hace la voluntad de Dios permanece para siempre.(7)
La verdad bíblica
4.1 Teniendo en cuenta que las ciencias positivas son incapaces de acceder objetivamente a las realidades materiales últimas y que la filosofía solo puede constatar aquello que ha prejuzgado como cierto, debemos recurrir a algo externo al ingenio humano a la hora de construir nuestras certezas. Y aquí debemos concluir que nuestras definiciones de la verdad, nuestras aproximaciones y metodologías han resultado incorrectas y que, como está escrito, la Verdad no es un concepto, ni una concordancia; la verdad es una persona, el logos encarnado, el principio organizador del universo que se revela al hombre como medio de la misericordia y de la gracia de Dios. Mas allá solo queda la pregunta, entre perpleja y sarcástica del hombre materialista y pragmático por antonomasia, Poncio Pilato: que es la verdad?.Ciertamente podemos asegurar que a través de Cristo la hemos conocido y que en ella hemos accedido a la única libertad posible.
Dijo entonces Jesús a los judíos que habían creído en él: Si vosotros permaneciereis en mi palabra, seréis verdaderamente mis discípulos; y conoceréis la verdad, y la verdad os hará libres.
Conclusiones
La cultura occidental ha ido , progresivamente, dejando de lado sus raíces cristianas a favor de las propuestas filosóficas que sucedieron al idealismo desarrollado primariamente por los filósofos alemanes de la segunda mitad del siglo XVIII. Algunos sostienen que ya Rene Descartes y mas específicamente Inmanuel Kant previeron esta oleada y de alguna manera intentaron prevenirla o disminuir sus efectos negativos.A pesar de que su propuesta filosófica es uno de los pilares del ultrarracionalismo que permea el humanismo secular de la llamada postmodernidad, Kant delimito los alcances de la razón en su Critica de la Razón Pura al situar, correctamente, los denominados juicios analíticos a posteriori mas allá de su capacidad.En nuestros dias la ciencia postiva,gracias a los avances en la física de partículas ha llegado a los limites mismos de lo mesurable y de lo comprensible diluyendo nuestro concepto de verdad y revelando las debilidades inherentes a las empresas meramente humanas.
Esta crisis, ya vislumbrada por los pensadores de la primera mitad del siglo XX, se manifesto inicialmente como incertidumbre moral y, tras dos guerras mundiales el sinsentido y la subsecuente angustia se constituyeron en el eje sobre el cual se construyeron las nuevas cosmovisiones.Si Hegel habia dado paso a los totalitarismos soviético y nacionalsocialista; Heidegger y los existencialistas franceses darian lugar al secularismo angustiado que prima en las llamadas democracias occidentales y al subsecuente relativismo moral, hasta culminar en las filosofías lights de la contemporaneidad.
Pero mas que la actual crisis moral nos enfocaremos en la crisis de los propios paradigmas de la ciencia positiva y de las humanidades que hace estragos en nuestro tiempo, dejando en el psiquismo colectivo incontables agujeros que son rapidamente llenados por propuestas supersticiosas y ocultistas.Revisaremos la estructura actual del conocimiento, senalando sus mas notables debilidades y apuntalando la propuesta cristiana como única esperanza minimamente realista para que la Humanidad pueda atravesar con bien este trecho del camino.
Autor:
Carlos Manuel Pineda