Motivación
Insatisfacción en propuestas pastorales – Sequedad y aburrimiento.
Búsqueda de caminos…
que conduzcan a una vida psicológica y espiritual de calidad.
Que desarrollar la mística; integrar calidad de vida, psicoógica y espiritual.
Ambas parten de una experiencia, de encontrarse con una necesidad, una demanda, de ver personas que andan como ovejas sin pastor. Y ellas han encontrado un tesoro, que les ha enamorado y quieren poner al servicio de todos. Búsqueda de caminos para una vida psicológica y espiritual de calidad. Contribuir con la misión de Jesús de que todos tengamos vida en abundancia. Hacia allí se enrumba el tratamiento que le daremos a la interioridad.
¿Qué entendemos Interioridad?
Poco consenso teórico. Interioridad – espiritualidad – inteligencia espiritual – competencia espiritual.
Reconocerse desde dentro y de relacionarse desde lo auténtico y lo profundo
Ámbito del gustar y sentido, imaginar.
Transparencia – encontrarse consigo mismo. Lucha y paz.
Proceso de aceptación – Sabiduría interior.
Adentramiento – Unificación –
Procesar la realidad exterior – responder con mejor calidad.
Vivir desde lo auténtico, desde lo mejor de sí mismo, PARA hacerse cargo de la realidad (mirar, responsabilizarse, relacionarse, contribuir, transformar
¿Qué se pretende al cultivar la interioridad?
Que la persona sea capaz de reconocerse y relacionarse sanamente consigo misma, con los demás y el entorno permitiéndole mirar contemplativamente, discerniendo y dando sentido a lo que vive y a su misión, con libertad interior, para vivir con alegría, reconciliada consigo misma y su historia, abierta a la trascendencia, facultándola para el encuentro fraterno y la acción transformadora, la plenitud y la realización personal.
Aclaraciones necesarias…
Interioridad y Exterioridad
Interioridad y superficialidad: reactivo – frivolidad – compulsividad – inmediatez –
No ensimismamiento… No antagónico a compromiso
No cualquier planteamiento de interioridad: Atención plena –
No distractor del hecho educativo. Ni exclusividad de la pastoral
Espiritualidad: capacidad de recepción que tenemos todas las personas para tomar conciencia, entrar en contacto y relacionarnos con las realidades que dinamizan la vida le dan sentido, horizonte…
el amor a la vida,
la solidaridad hacia los otros,
la incondicionalidad en el amor,
la confianza ante la muerte,
la generosidad en la entrega,
la esperanza en el mundo,
la capacidad de perdón o reconciliación,
la gratuidad ética,
la identificación con la naturaleza,
la sensibilidad para el arte,
la inspiración para crear,
el sentido de la vida…
Elementos imprescindibles de una espiritualidad hoy. P. Nicolás
Cultivo de una sensibilidad humana profunda que dé a la vez empatía y capacidad de discernimiento;
la salida de la perspectiva espontáneamente egocéntrica con la que nos situamos ante las personas y ante toda realidad;
la búsqueda de una manera de ver y vivir el mundo de una manera pacificada, compasiva y solidaria.
Trabajar el espíritu puede significar también desarrollar “calidad humana”.
En todo caso, la persona “espiritual” es la que busca, discierne e intenta dar cuerpo a las grandes opciones de la vida desde una gran libertad inspirada en el amor.
RELACIÓN ENTRE INTERIORIDAD Y ESPIRITUALIDAD
Interioridad como equipamiento humano para la espiritualidad: El desarrollo de la interioridad es lo que le permite al sujeto vivir su espiritualidad.
La espiritualidad es lo que cualifica la experiencia subjetiva de la interioridad.
Opus Dei – Mons. Romero
Ana Alonso Sánchez
Mirar hacia adentro.
Nos educan para mirar hacia afuera: conocer, comprender, manejar y transformar el mundo exterior.
Interioridad es, pues, la capacidad de mirar hacia dentro, de ser y de crecer como personas, de ser lo que somos en lo profundo de nosotros mismos.
Mirar hacia afuera:
Es adentrarse en las propias profundidades para lograr conocerse, entenderse, aceptarse, perdonarse y poder hacer lo mismo con los otros.
Nos lleva a la toma de conciencia de que formamos parte de un todo, en el que nada ni nadie nos son indiferentes. RESPONSABILIZARNOS ANTE ESA REALIDAD.
Mirar las distintas dimensiones humanas
Relacional:
llegar a crear vínculos de responsabilidad y calidad en la interacción con los otros y con el entorno
Pasar de vivir a expensas del entorno, a contribuir a configurar ese entorno
Conciencia de ser parte de un todo interrelacionado. Desplegar lo más genuino de nosotros, y contribuir así al enriquecimiento de ese entorno.
Corporalidad:
Aprender a tomar conciencia de todo el cuerpo como espacio que nos pertenece, del que hay que responsabilizarse, cuidar y disfrutar en todas sus posibilidades.
Estimular la escucha de sensaciones internas y externas e intentar ver su significado.
Utilizar los sentidos de manera discriminada y consciente, de modo que ayuden a mejorar la calidad de la experiencia y disfrutar de la misma.
Favorecer el contacto corporal que estimule el bienestar físico y emocional, la expresión de las emociones, y aprender a interpretar la comunicación no verbal.
Psicológica (lo afectivo y lo intelectual).
Afectivo: Sentimientos y emociones.
Aceptarlos, aprender a manejarlos e interactuar con ellos adecuadamente nos permitirá vivir con mayor libertad, elegir nuestras conductas y el momento más adecuado para llevarlas a término. En fin, aprender a dirigir nuestra vida.
Intelectual: Pensamientos – imágenes
Cultivar la capacidad de pensar con flexibilidad, de manera que fluya aquello que nace desde la propia identidad; de ser capaz de observar y auto-observarse, escuchar y escucharse, y como consecuencia, generar una respuesta de sentido desde y para uno mismo.
PORTERO – VIGILANTE
Espiritualidad
La introspección, la comprensión y aceptación de uno mismo.
El ejercicio de la imaginación, la intuición, la inspiración y la comprensión profunda.
La experiencia de sobrecogimiento, asombro, y misterio.
La tendencia a desarrollar una conducta movida por la bondad, la verdad, la justicia y la belleza.
La reflexión sobre el origen y sentido de la vida.
La búsqueda del significado y propósito y los valores porqué vivir
La experiencia de sentimiento de trascendencia.
La creatividad o expresión de los pensamientos y sentimientos interiores a través del arte, la música, la literatura, la artesanía, etc.
El respeto y la admiración por la naturaleza.
La habilidad para construir relaciones de calidad con los otros y desarrollar sentido de comunidad.
Promover el desarrollo de los siguientes aspectos:
ELENA ANDRÉS
Interioridad: Es un lugar más allá de las apariencias, íntimo, y que para los creyentes, es dónde acontece el encuentro con el creador. Es la dimensión que otorga sentido y carga de contenido nuestra dimensión exterior; las raíces de nuestros comportamientos y opciones.
Es ese mundo interior, un todo complejo y vivo: nuestra autoconciencia, emociones, anhelos, miedos, dudas, escalas de valores.
Es un ámbito de crecimiento personal: si optamos por vivir desde lo mejor de nosotros podremos desarrollar todas las potencialidad.
Pistas de sabiduría del crecimiento personal. A la luz del Éxodo
Es necesario desear crecer para procesos de crecimiento personal,
Escuchar los anhelos más hondos implica actuar, poner los medios para ir alcanzando el cumplimiento de los mismos.
Todos necesitamos personas que nos ayuden, nos acompañen en el proceso de crecimiento personal.
Sólo quien ha sido liberado puede liberar.
Saber hacia dónde se va, cuál es el horizonte del camino a afrontar el paso por el desierto.
No hace falta claridad total para emprender procesos de crecimiento personal. Basta con desearlo de todo corazón.
Pistas de sabiduría del crecimiento personal. A la luz del Éxodo
Ajos y cebollas: la gran tentación de seguridad a cualquier precio.
Es necesario que nos pasen cosas, que la vida nos afecte, para poder construir nuestra identidad. En la vida, cargada de acontecimientos, me conozco y te conozco.
Nada se improvisa. Dar a luz lo que uno ES: una larga gestación.
Hay lugares interiores en los que hemos de adentrarnos solos. Un buen acompañante sabe cuándo desaparecer.
No cerrarse a nadie, no engancharse a nadie, sanea nuestro mundo de relaciones y nos ofrece posibilidades nuevas.
Llegar a vivir desde el centro de uno mismo supone luchar contra los “pueblos enemigos” que hay dentro de nosotros.
Cuatro dimensiones
CORPORAL
PSICOLÓGICA:
TRASCENDENTE/TRASCENDENTE: Ubicada entre lo psicológico y Debir. Donde se dan experiencias que nos trascienden; el enamoramiento, la pérdida de un ser querido, la enfermedad, nos ponen en contacto con zonas interiores de mayor hondura.
DEBIR: Es el “centro del centro” “el corazón del corazón:
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