propiedades de un sillon (J.Cortazar)
892 palabras
4 páginas
Propiedades de un sillón El texto que vamos a analizar, fue escrito por el famisísimo escritor de cuentos fantásticos Julio Cortázar en 1962. Trata de un sillón muy particular. Un sillón puede tener varios aspectos (depende del estilo) pero siempre sirve para que las personas puedan sentarse y descansar para ver la televisión o para charlar con amigos o para leer… El sillón del texto presenta propiedades poco comunes aunque en el texto está escrito L3 « es un sillón como todos » .El sillón posee en el respaldo una estrellita plateada que brilla en la oscuridad y sirve para morirse. Aunque parece mentira, es su originalidad. Se encuentra en una sala en casa del Jacinto. Normalmente sólo la gente vieja se sienta en él cuando ha llegado …ver más…
Así vemos que a los niños del texto, como a cualquier niño, les gusta dar miedo a la gente. Y aquí tienen un medio muy original para provocar la confusión y el miedo en los adultos :les proponen morirse. Los niños se divierten muchísimo sabiendo que está prohibido por los padres y disfrutan invitando a las visitas a sentarse en el maldito sillón. Ver la confusión en los rostros, oír los pretextos y hasta las palabrotas de los adultos les regocija un montón. Los niños parecen ser traviesos y malos porque en realidad juegan con la muerte de los demás, pero es difícil saber si son totalmente conscientes de lo que hacen. Saben que está mal porque reciben tremendas palizas por sus padres pero no creo que sepan muy bien lo que es la muerte… es algo del que oyen hablar pero es algo muy confuso y es difícil imaginar lo que pueden saber de la muerte/ de la vida/ de lo real/ de lo irreal…cuando sabemos que durante años,creen en la existencia de Papa Noel por ejemplo, o peor del ratón que se lleva los dientes……
El comportamiento de los chicos va cambiando a medida que pasan los años. Así se dan cada vez más cuenta de que son mortales y empiezan a temer la muerte. Podemos leer así L 20-21 que cuando se hacen mayores los niños dejan de interesarse por el sillón. Es cuando los jóvenes saben lo que es la muerte pero que se creen aún invencibles, cuando les gusta