Simon bolivar
A los que apuestan siempre por la vida en abundancia. A todos aquellos que, a pesar de los pesares, no se rinden, sino que siguen en pie de lucha hasta el final. A los que saben que tropezar y caerse no significa perder, sino un episodio más de la vida que se supera con levantarse y seguir caminando hasta llegar a la meta. A los que finalmente siguen dando amor aun después del desamor. ¡A ellos va dedicada esta obra! Introducción
La felicidad en los seres humanos emana esencialmente del amor, por esa razón todos queremos amar y ser amados. Muchos conquistan el amor con amor, otros por otros medios, tales como el poder del dinero y el embuste. La desesperación de unos los llevas de hecho a venderse al más bajo precio. Y es que el amor a todos nos pone locos a diferentes niveles. Sin embargo, todo el que decide entrar en el juego del amor, debe saber que así como el jardinero a la rosa, llegamos a disfrutar de la fragancia de la rosa, pero a cambio del dolor de las espinas que como alevosía se nos clavan. Nadie sale ileso del amor, pero en el fondo, el amor es un juego divertido que vale la pena jugar. A veces nos hieren y a veces herimos, en ocasiones sin quererlo. A todos los que nos hemos enamorado de verdad nos han roto, en alguna momento, el corazón, de eso no hay dudas. El que no ha sufrido en el amor es porque no ha amado de verdad, o es que no lo han querido jamás. ¿Quién que haya amado con locura no se ha sentido una